Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

HEMORROIDES.-Copiar

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 31

HEMORROIDES.

Licdo. Luis Córdova .


Las hemorroides son dilataciones venosas localizadas en las paredes del recto
y del ano. La enfermedad hemorroidal se define como una serie de síntomas
y signos, atribuibles al tejido hemorroidal, generalmente secundarios a
alteraciones estructurales de éste (dilatación e ingurgitación) o de los tejidos
de sostén.
• Internas: Están presentes en el canal anal y no pueden verse.
Pueden descender de la línea anorrectal cuando su tamaño se
hace muy grande.
• Externas: Son las que se prolapsan a través del esfínter anal al
defecar y después se reducen por sí mismas, o las que tras la
defecación el paciente puede empujar a través del esfínter.
• Grado I: Las hemorroides internas están dilatadas,
pero no salen del ano al defecar, cursan con
hemorragia pero sin dolor.

• Grado II: Las hemorroides se prolapsan al defecar,


cursan con sangrado y malestar. Se reducen
espontáneamente.

• Grado III: Se acompañan de hemorragia, prurito y


sensación de humedad. El prolapso requiere
reducción manual.

• Grado IV: Las hemorroides internas ya están


exteriorizadas y, aunque se logre introducirlas, salen
de nuevo. Cursan con dolor, sangrado y posible
trombosis.
Las hemorroides son uno de los problemas
sanitarios más comunes entre las personas adultas
de mediana edad. Las hemorroides son a menudo
asintomáticas.
SÍNTOMAS CRÓNICOS.
• El síntoma más frecuente es sin duda la rectorragía, de sangre roja, En ocasiones este sangrado
crónico puede ser causa de anemia crónica.
• El segundo síntoma en el orden de frecuencia es el prolapso, que va aumentando cada vez más
hasta hacerse en ocasiones de grado IV, es decir irreductible.
• Otros síntomas crónicos son el prurito, una sensación de disconfort y el escape mucoso.
• En la sintomatología aguda se debe sobre todo a la trombosis de los
paquetes hemorroidales.
• La trombosis hemorroidal externa se trata de una zona violácea e indurada
en el margen anal muy doloroso al tacto, Se debe a la existencia de
coágulos intravasculares a nivel del plexo hemorroidal externo.
• El síntoma que lleva al paciente a acudir al médico y normalmente al
Servicio de Urgencias es una tumefacción dolorosa del ano, que le impide
sentarse y le dificulta muchísimo la defecación: Es lo que se suele conocer
como un "ataque de almorranas".
• Picor o prurito anal.
• Irritación o escozor anal.
• Dolor.
• Hemorragia.
• Incontinencia fecal.
• Prolapso anal o protrusión hemorroidal.
• Trombosis.
Las principales causas de las hemorroides idiopáticas son:
 La dieta y sus consecuencias, como la existencia de estreñimiento crónico.
 Malos hábitos higiénicos o hábitos inadecuados.
 Sedentarismo, y determinados deportes como la equitacion y el ciclismo.
 Enfermedades como la hipertensión arterial, infecciones anales, diarreas, abuso de laxantes
irritantes, etc.
 Embarazo y parto.
 Predisposición hereditaria.
Las almohadillas hemorroidales son parte normal del conducto anal.
Todo el mundo tiene estos cojines, pero una vez que se producen cambios
anormales, entonces la condición se convierte en una enfermedad
patológica.
Los vasos que están dentro del tejido mencionado facilitan la continencia, al impedir
que el músculo esfinteriano se lesione. Tres complejos hemorroidales principales
atraviesan el conducto anal: el lateral izquierdo y lateral derecho y el posterior
derecho.
Los cojines están compuestos por vasos sanguíneos, músculo liso y tejido conectivo. Los
síntomas de la enfermedad comienzan a mostrarse cuando la presión llega a ser
demasiado para ser controlada por los cojines.
Las estructuras vasculares, una vez se inflaman o se hinchan, se
convierten en hemorroides. Los síntomas a experimentar dependen del
tipo de condición que se presente. Si es el tipo interno, el sangrado rectal
experimentado es indoloro, mientras que hay una excesiva hinchazón y
dolor si la condición es externa
La aparición de un absceso perianal es mas frecuente en varones que en mujeres, a razón de 3:1 su
incidencia máxima se localiza entre los 30 y 60 años de edad. El dolor perianal por la presencia
del absceso es el que origina el 15% de las visitas al consultorio del cirujano colorrectal. el trastorno
es el mas prevalente en inmunodeficientes como los diabéticos, los que tienen algún trastorno
hematológico o enfermedad inflamatoria intestinal y en individuos VIH positivos. Es necesario
pensar en los trastornos recién mencionados ante toda persona que muestre infecciones
perianales repetitivas.
El diagnóstico de las hemorroides se suele hacer en función de los síntomas
que manifiesta el paciente. Aunque los síntomas típicos de las hemorroides,
como, por ejemplo, el sangrado con la deposición o el dolor anal, tambié
Fundamentalmente si aparece sangre con la deposición, el médico deberá
descartar la presencia de un tumor maligno de la zona del colon o recto
(cáncer colorrectal), tambien pueden aparecer en dichas enfermedades.
Para confirmar el diagnóstico se puede realizar una visualización con una
cámara en la zona del ano (proctoscopia) y del recto (rectoscopia).
Las hemorroides inflamadas no tienen que ser tratadas si no producen
molestias o estas solo aparecen de forma ocasional. Lo importante es que el
médico pueda descartar un tumor maligno en caso de sangrado con la
deposición.
Inspección
En el caso de las hemorroides de tercer y cuarto grado es fácil. Las
hemorroides de tercer grado aparecen como formaciones que se proyectan y
cuya parte externa aparece cubierta de piel y la interna es mucosa anal de
color rojo o purpúreo.
En aquellos casos en los que el prolapso hemorroidal es antiguo el epitelio de
revestimiento puede sufrir metaplasia de tipo escamoso, que aparece como
un velo de color blanquecino. En aquellos casos en los que el prolapso es muy
prolongado, la piel perianal puede mostrar las alteraciones características del
prurito anal.
Palpación
Aquellas hemorroides de reciente comienzo aparecen como tumefacciones
blandas, fácilmente colapsables, posteriormente con el paso del tiempo y el
aumento del grado se hacen más difícilmente colapsables, debido a la
fibrosis que va teniendo lugar con el paso del tiempo.
Proctoscopia
Es un paso indispensable de la exploración.
Si no se ve mucosa roja en el orificio anal decimos que las hemorroides son de
primer grado. Si la mucosa se proyecta a través del orificio anal las
hemorroides pueden ser de segundo o tercer grado.
Sigmoidoscopia
Es sin duda una prueba de utilidad porque en ocasiones descubre un
carcinoma rectal como causa de sangrado, aunque en un porcentaje bajo.
Por tanto aquellos pacientes por encima de cuarenta años con clínica de
sangrado en principio atribuible a la hemorroides deben someterse a esta
exploración.
Tratamiento
Las molestias que produce la enfermedad hemorroidal se pueden reducir de
forma eficaz si durante el tratamiento el paciente consigue que
las deposiciones sean blandas. Esto ayuda a que se puedan eliminar sin
mucho esfuerzo. El tratamiento dependerá de la gravedad de los síntomas.
Existen 2 tipos:
- Terapeutico.
- Quirurgico.
Esclerosis
Se provoca una fibrosis de la submucosa rectal impidiendo el prolapso.
La inyección se realiza por encina de la hemorroide interna a nivel del anillo
anorrectal, en cada paquete hemorroidal, con la ayuda de un anuscopio.
Ligadura con banda elástica
Se produce la fijación de la mucosa por una ulceración de la misma,
utilizando para ello diversos utensilios que existen en el mercado. El número
ideal de ligaduras por sesión parece ser de dos, consiguiéndose la curación en
dos o tres sesiones. Después de la ligadura suele existir un periodo de
disconfort moderado con una discreta sensación de tenesmo.
Fotocoagulación con infrarrojo
Se trata de una cauterización a la que sigue una cicatrización a nivel del
tejido subcutáneo. Se lleva a cabo con una lámpara de tungsteno-halógeno.
El procedimiento se puede repetir a las tres o cuatro semanas.
Sólo estaría indicado el tratamiento quirúrgico en un 5-10% de los casos.
La indicación quirúrgica fundamental serían las hemorroides sintomáticas de
tercer y cuarto grado y en aquellos casos con alteraciones de la arquitectura
anorrectal, en aquellos casos en los que no fue positivo el tratamiento
conservador y en aquellos casos en los que se encuentran complicados con
otras patologías como la fisura anal, fístulas, entre otros.
Existen diversas técnicas quirúrgicas siendo quizás la más extendida la
técnica de Milligan-Morgan y la técnica de Ferguson, que consisten en la
extirpación de tres o cuatro paquetes hemorroidales, dejando piel y mucosa
anal intacta entre los paquetes extirpados de forma que se previene una
estenosis postoperatoria.
Otra técnica muy extendida es la anopexia grapada o técnica de Longo, en
la que se lleva a cabo la resección circunferencia! de una banda de mucosa
recta! por encima de la hemorroide con una grapadora circunferencia! de
sutura termino-terminal.
Medidas higiénicas
 La presencia de pequeñas cantidades de masa fecal puede producir
prurito.
 Es recomendable usar toallitas húmedas, especialmente destinadas a este
uso, indicando limpiar con pequeños toquecitos, ya que el deslizamiento
puede agravar los síntomas.
 Realizar el secado con celulosa o algodón, evitando el papel que pueda
producir irritación.
 El excesivo lavado hace desaparecer el manto graso de la piel anal, por lo
que es recomendable utilizar vaselina o pomada antihemorroidal para
evitar irritaciones al movimiento.
Medidas dietéticas

• Debe intentarse una reducción de la presión en el canal anal con un


incremento de la fibra de la dieta y la ingesta de líquidos.
• Se puede utilizar un laxante estimulante durante 1-2 días para aliviar el
estreñimiento hasta que actúe la ingesta de fibra y líquidos.
La enfermedad hemorroidal no puede ser prevenida al 100%, dado que
factores congénitos como la debilidad en los tejidos pueden tener un papel
importante en su aparición. Existen medidas generales que se pueden seguir
para prevenir la aparición de las hemorroides.
 Controla el estreñimiento y la alimentación
 Aumentar la actividad física
 Mantener una limpieza adecuada de la zona
 Evita el sobrepeso o la obesidad
 Controlar las hemorroides durante el embarazo
Cuidados de Enfermería.
- Evitar el estreñimiento, para ellos debemos añadir fibra a la dieta y to-
mar abundantes líquidos.
- Evitar la diarrea que agravarían las hemorroides, evitando el uso de la-
xantes.
- Evitar las comidas muy sazonadas y el consumo excesivo de alcohol.
- Evitar esfuerzos al defecar, reducir el tiempo de defecación.
- Usar papel higiénico suave, toallitas o una esponja con jabón neutro.
- Aplicar hielo envolviendo este en una compresa, el frío disminuye la hin-
chazón.
- Baños de asiento con agua fría o ligeramente tibia, nunca muy caliente,
durante 10-15 minutos, 3 o 4 veces al día, de esta manera conseguiremos
calmar el dolor.

También podría gustarte