Discos (Logico)
Discos (Logico)
Discos (Logico)
El sector de arranque es el primer sector de todo disco duro (cabeza 0, cilindro 0, sector 1). En él
se almacena la tabla de particiones y un pequeño programa master de inicialización, llamado
también Master Boot. Este programa es el encargado de leer la tabla de particiones y ceder el
control al sector de arranque de la partición activa. Si no existiese partición activa, mostraría un
mensaje de error.
El espacio particionado es el espacio del disco que ha sido asignado a alguna partición. El
espacio no particionado, es espacio no accesible del disco ya que todavía no ha sido asignado a
ninguna partición. A continuación se muestra un ejemplo de un disco duro con espacio particionado
(2 particiones primarias y 2 lógicas) y espacio todavía sin particionar.
El caso más sencillo consiste en un sector de arranque que contenga una tabla de particiones con
una sola partición, y que esta partición ocupe la totalidad del espacio restante del disco. En este
caso, no existiría espacio sin particionar.
Las particiones
Cada disco duro constituye una unidad física distinta. Sin embargo, los sistemas operativos no
trabajan con unidades físicas directamente sino con unidades lógicas. Dentro de una misma unidad
física de disco duro puede haber varias unidades lógicas. Cada una de estas unidades lógicas
constituye una partición del disco duro. Esto quiere decir que podemos dividir un disco duro en, por
ejemplo, dos particiones (dos unidades lógicas dentro de una misma unidad física) y trabajar de la
misma manera que si tuviésemos dos discos duros (una unidad lógica para cada unidad física).
Como mínimo, es necesario crear una partición para cada disco duro. Esta partición puede
contener la totalidad del espacio del disco duro o sólo una parte. Las razones que nos pueden
llevar a crear más de una partición por disco se suelen reducir a tres.
Las particiones pueden ser de dos tipos: primarias o lógicas. Las particiones lógicas se definen
dentro de una partición primaria especial denominada partición extendida.
En un disco duro sólo pueden existir 4 particiones primarias (incluida la partición extendida, si
existe). Las particiones existentes deben inscribirse en una tabla de particiones de 4 entradas
situada en el primer sector de todo disco duro. De estas 4 entradas de la tabla puede que no esté
utilizada ninguna (disco duro sin particionar, tal y como viene de fábrica) o que estén utilizadas una,
dos, tres o las cuatro entradas. En cualquiera de estos últimos casos (incluso cuando sólo hay una
partición), es necesario que en la tabla de particiones figure una de ellas como partición activa. La
partición activa es aquella a la que el programa de inicialización (Master Boot) cede el control al
arrancar. El sistema operativo de la partición activa será el que se cargue al arrancar desde el
disco duro. Más adelante veremos distintas formas de elegir el sistema operativo que queremos
arrancar, en caso de tener varios instalados, sin variar la partición activa en cada momento.
De todo lo anterior se pueden deducir varias conclusiones: Para que un disco duro sea utilizable
debe tener al menos una partición primaria. Además para que un disco duro sea arrancable debe
tener activada una de las particiones y un sistema operativo instalado en ella. Más adelante, se
explicará en detalle la secuencia de arranque de un ordenador. Esto quiere decir que el proceso de
instalación de un sistema operativo en un ordenador consta de la creación de su partición
Hemos visto antes que no es posible crear más de cuatro particiones primarias. Este límite,
ciertamente pequeño, se logra subsanar mediante la creación de una partición extendida (como
máximo una). Esta partición ocupa, al igual que el resto de las particiones primarias, una de las
cuatro entradas posibles de la tabla de particiones. Dentro de una partición extendida se pueden
definir particiones lógicas sin límite. El espacio de la partición extendida puede estar ocupado en
su totalidad por particiones lógicas o bien, tener espacio libre sin particionar.
Veamos el mecanismo que se utiliza para crear la lista de particiones lógicas. En la tabla de
particiones del Master Boot Record debe existir una entrada con una partición extendida (la cual no
tiene sentido activar). Esta entrada apunta a una nueva tabla de particiones similar a la ya
estudiada, de la que sólo se utilizan sus dos primeras entradas. La primera entrada corresponde a
la primera partición lógica; la segunda, apuntará a una nueva tabla de particiones. Esta nueva tabla
contendrá en su primera entrada la segunda partición lógica y en su segunda, una nueva referencia
a otra tabla. De esta manera, se va creando una cadena de tablas de particiones hasta llegar a la
última, identificada por tener su segunda entrada en blanco.
Ambos tipos de particiones generan las correspondientes unidades lógicas del ordenador. Sin
embargo, hay una diferencia importante: sólo las particiones primarias se pueden activar. Además,
algunos sistemas operativos no pueden acceder a particiones primarias distintas a la suya.
Lo anterior nos da una idea de qué tipo de partición utilizar para cada necesidad. Los sistemas
operativos deben instalarse en particiones primarias, ya que de otra manera no podrían arrancar.
El resto de particiones que no contengan un sistema operativo, es más conveniente crearlas como
particiones lógicas. Por dos razones: primera, no se malgastan entradas de la tabla de particiones
del disco duro y, segunda, se evitan problemas para acceder a estos datos desde los sistemas
operativos instalados. Las particiones lógicas son los lugares ideales para contener las unidades
que deben ser visibles desde todos los sistemas operativos.
Algunos sistemas operativos presumen de poder ser instalados en particiones lógicas (Windows
NT), sin embargo, esto no es del todo cierto: necesitan instalar un pequeño programa en una
partición primaria que sea capaz de cederles el control.