Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                
0% encontró este documento útil (0 votos)
29 vistas8 páginas

Poemas Piñas

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1/ 8

UNA ROSA

De las generaciones de las rosas


que en el fondo del tiempo se han perdido
quiero que una se salve del olvido,
una sin marca o signo entre las cosas

que fueron. El destino me depara


este don de nombrar por vez primera
esa flor silenciosa, la postrera
rosa que Milton acercó a su cara,

sin verla. Oh tú bermeja o amarilla


o blanca rosa de un jardín borrado,
deja mágicamente tu pasado

inmemorial y en este verso brilla,


oro, sangre o marfil o tenebrosa
como en sus manos, invisible rosa.

Autor del poema: Jorge Luis Borges

LLUEVE SOBRE EL CAMPO VERDE

Llueve sobre el campo verde...


¡Qué paz! El agua se abre
y la hierba de noviembre
es de pálidos diamantes.

Se apaga el sol; de la choza


de la huerta se ve el valle
más verde, más oloroso,
más idílico que antes.

Llueve; los álamos blancos


se ennegrecen; los pinares
se alejan; todo está gris
melancólico y fragante.

Y en el ocaso doliente
surgen vagas claridades
malvas, rosas, amarillas,
de sedas y de cristales...

¡Oh la lluvia sobre el campo


verde! ¡Qué paz! En el aire
vienen aromas mojados
de violetas otoñales.
Autor del poema: Juan Ramón Jiménez

LOS SUEÑOS

El hada más hermosa ha sonreído


al ver la lumbre de una estrella pálida,
que en hilo suave, blanco y silencioso
se enrosca al huso de su rubia hermana.

Y vuelve a sonreír porque en su rueca


el hilo de los campos se enmaraña.
Tras la tenue cortina de la alcoba
está el jardín envuelto en luz dorada.

La cuna, casi en sombra. El niño duerme.


Dos hadas laboriosas lo acompañan,
hilando de los sueños los sutiles
copos en ruecas de marfil y plata.

Autor del poema: Antonio Machado

A LAS ESTRELLAS

Esos rasgos de luz, esas centellas


que cobran con amagos superiores
alimentos del sol en resplandores,
aquello viven, si se duelen dellas.

Flores nocturnas son; aunque tan bellas,


efímeras padecen sus ardores;
pues si un día es el siglo de las flores,
una noche es la edad de las estrellas.

De esa, pues, primavera fugitiva,


ya nuestro mal, ya nuestro bien se infiere;
registro es nuestro, o muera el sol o viva.

¿Qué duración habrá que el hombre espere,


o qué mudanza habrá que no reciba
de astro que cada noche nace y muere.

Autor del poema: Pedro Calderón de la Barca


ENSUEÑO

Para fugarnos de la tierra


un libro es el mejor bajel;
y se viaja mejor en el poema
que en el más brioso y rápido corcel
Aun el más pobre puede hacerlo,
nada por ello ha de pagar:
el alma en el transporte de su sueño
se nutre sólo de silencio y paz.

Autor del poema: Emily Dickinson

EN ESTE MOMENTO

En este momento, sentado a solas, anhelante y pensativo,


Me parece que en otras tierras hay otros hombres también anhelantes y pensativos,
Me parece que puedo mirar más lejos aún y divisarlos en Germania, Italia, Francia, España,
Y lejos, más todavía, en China, o en Rusia, o en Japón, hablando otros dialectos,
Y pienso que si me fuera posible conocer a estos hombres
con ellos me uniría, tal como lo hago con los hombres de mi propia tierra,
¡Oh! Yo comprendo que nos convertiríamos en hermanos y amantes,
Yo sé que llegaría a ser feliz con ellos.

Autor del poema: Walt Whitman

EL NIDO

Es porque un pajarito de la montaña ha hecho,


en el hueco de un árbol, su nido matinal,
que el árbol amanece con música en el pecho,
como que si tuviera corazón musical.

Si el dulce pajarito por entre el hueco asoma,


para beber rocío, para beber aroma,
el árbol de la sierra me da la sensación
de que se le ha salido, cantando, el corazón.

Autor del poema: Alfredo Espino

NO QUIERO ROSAS

No quiero rosas, con tal que haya rosas.


Las quiero sólo cuando no las pueda haber.
¿Qué voy a hacer con las cosas
que cualquier mano puede coger?

No quiero la noche sino cuando la aurora


la hizo diluirse en oro y azul.
Lo que mi alma ignora
eso es lo que quiero poseer.

¿Para qué?... Si lo supiese, no haría


versos para decir que aún no lo sé.
Tengo el alma pobre y fría...
Ah, ¿con qué limosna la calentaré?...

Autor del poema: Fernando Pessoa

OCTUBRE

Estaba echado yo en la tierra, enfrente


del infinito campo de Castilla,
que el otoño envolvía en la amarilla
dulzura de su claro sol poniente.
Lento, el arado, paralelamente
abría el haza oscura, y la sencilla
mano abierta dejaba la semilla
en su entraña partida honradamente.
Pensé arrancarme el corazón, y echarlo,
pleno de su sentir alto y profundo,
al ancho surco del terruño tierno;
a ver si con romperlo y con sembrarlo,
la primavera le mostraba al mundo
el árbol puro del amor eterno.

Autor del poema: Juan Ramón Jiménez

LA VOZ

No es la guitarra lo que alegra


o ahuyenta el miedo en la medianoche
No es su bordón redondo y manso
como el ojo de un buey
No es la mano que roza o se aferra a las cuerdas
buscando los sonidos
sino la voz humana cuando canta
y propaga los ensueños del hombre.

Autor del poema: Heberto Padilla


LAS SIRENAS DEL PUENTE BOLOGNESI

Si una persona transita por Arequipa y se topa con el tradicional puente de fierro Bolognesi
se dará cuenta que esta construcción imponente tiene pegada a su risco una gigante piedra, donde creen
los residentes, viven hermosas sirenas que encantan con sus melodiosos cantos a hombres ingenuos.
Esta piedra fue llamada Machiruna, se cuenta que posee una entrada a un río subterráneo (hogar de las
sirenas) que se encuentra justo detrás del Río Chili.
También se cuenta que la piedra se mantiene en su lugar gracias a la fuerza de los brazos de todos los
hombres que fueron atrapados por ellas.
Cuando hay celebraciones y fiestas importantes para las sirenas, salen de su hogar subterráneo a las 6 o 7
de la noche buscando jóvenes para atraparlos y divertirse a su manera.
Salen de su casa y se posan coquetamente en la gran piedra atrayendo a los incautos jóvenes que pasen
por ahí, los hombres al verlas quedan encantados y no resisten a sus dulces encantos, por lo que se
acercan cada vez más a las sirenas que se presentan con largos y sedosos cabellos, siluetas hermosas y
colas de bellos y brillantes colores.
Una vez que el desdichado joven es atrapado por las mujeres, desaparece entre las espumosas aguas
del Río Chili y no es visto nunca más.

LA MONJA CONDENADA DE SAN ANTONIO

En Arequipa existe la calle San Antonio en donde antiguamente se encontraba una casona que ahora
funciona como un colegio, aunque todas las habitaciones de la institución están siendo ocupadas, existe
un cuarto que aún queda solitario con el paso de los años.
Narra la leyenda que esa casona era antiguamente un convento en el cual existió una hermana
muy devota a la religión, así que como último deseo en su lecho de muerte le pidió a sus hermanas
monjas que la dejaran descansar por siempre en esa habitación, al enterarse de la leyenda muchos
alumnos del colegio comentaban que por las ranuras de la puerta observan una cama y un antiguo
velador, aunque muchas veces también divisan dentro de la habitación a una monja
que aparecía espantando a los curiosos que se atreven a interrumpir su descanso eterno en ese cuarto, y
que luego, sin ninguna explicación, desaparece en la nada.
Se cuenta las personas que ha lograron entrar en la habitación solo para jugar o burlarse de la monja
condenada no han vuelto a ser vistas con vida.

EL PUENTE DEL DIABLO

El puente Juan Pablo II que se encuentra al final de la avenida Ejercito que limita con Cerro Colorado,
antiguamente se llamaba “El puente del diablo” según las versiones de antiguos arequipeños lo sabemos
porque lo llaman así:
Se cuenta en Arequipa, que por una subida en Cerro Colorado se encontraba antiguamente una excelente
picantería, una de las mejores de toda la Ciudad Blanca. La dueña contrato en primavera a una bella joven
para que atrajera a la clientela, esta joven con el tiempo se ganó su confianza y comenzaron a quererse
como madre e hija, conforme más crecía la muchacha sus intereses se iban enfocando cada vez más en
un joven ranchero de la zona, con el que después de un corto amorío concibió a una pequeña criatura.
La dueña indignada al enterarse de la noticia le propuso a la joven extraerle al niño, ella entre la confusión
y el pánico acepto la propuesta.
Luego de que retiraron el feto lo arrojaron bajo un puente que aún no tenía nombre.

Años después la misma joven ya adulta paseaba por aquel puente cuando de repente escucho los llantos
desgarradores de un bebe, "Que madre tan desnaturalizada abandona a su bebe bajo este peligroso
puente" pensó mientras bajaba dispuesta a recoger a la criatura. Finalmente logro alcanzarla y la enrollo
con su manta, poco a poco la joven se dio cuenta que los llantos del bebe cada vez se hacían más fuertes y
ya no sonaban como llantos sino como gruñidos chillones y perturbadores, cuando se dispuso a ver en
qué condiciones estaba el niño vio con horror que era el mismísimo demonio, el cual rápidamente la
mordió y araño hasta dejar su espalda en carne viva.
La joven se arrastró a duras penas pidiendo ayuda, hasta que finalmente le dieron atención médica,
aunque nunca fueron capaces de creerle.
Desde ese día debido a esa historia ese puente fue bautizado como " El puente del Diablo" por los
pobladores, que actualmente es conocido como el puente "Juan Pablo II".
EL BOTO O DELFÍN ROSADO DEL AMAZONAS

Los pobladores del Amazonas narran que si pasas a orillas del Rio Amazonas en las noches debes tener
mucho cuidado, ya que según ellos, cada vez que un joven pescador se acerca a sus orillas es embelesado
por los dulces cantos de una misteriosa mujer, que sería en realidad un delfín rosado o
boto hembra (como lo conocen los pobladores) que seduce y arrastra a los incautos chicos hasta las
profundidades del Rio Amazonas donde reina su amor eterno, es cierto que muchos jóvenes desaparecen
en sus orillas por las noches y nunca más se les vuelve a ver.
Ahora, si el delfín es macho, se cuenta que toma la forma de un bello hombre de ojos azules y cabellos
castaños en las noches donde hay alguna fiesta e invita a una joven muchacha a bailar, poco a poca la
enamora, luego toma su forma original y regresa al rio, tiempo después, de esa relación nacen los
llamados "hijos del boto" que son niños muy respetados por la comunidad.
PAITITI (EL DORADO)

Se dice que es una ciudad legendaria la cual está pérdida al este de los Andes, escondida en alguna parte
de la selva tropical del sureste del Perú, norte de Bolivia y suroeste de Brasil.
Cuenta la leyenda que fue el lecho de muerte del gran héroe Inkarri quien después de una larga agonía
falleció en ese mismo templo imponente de oro maciso.
Se cuenta que existieron muchos exploradores que estaban decididos a encontrar esta ciudad de las
riquezas, al llegar descubrieron pequeños pueblos indígenas y algunas cantidades de oro, aunque esto
nunca llego a ser confirmado.
Desde entonces, se han llevado a cabo investigaciones más serias asociadas con Paititi en lugares perdidos
de montañas y selvas peruanas. Algunos de estos nuevos exploradores son: Carlos Neuenschwander
Landa y Juan Carlos Polentini Wester, también se han publicado algunos libros como "Paititi En la Bruma
de la Historia", y "Paititi".

También podría gustarte