Rev. Geog. Venez.

Vol 40(1) 1999, 119-131 119

Represamientos y rupturas de embalses naturales

(lagunas de obturación) como efectos cosísmicos:
algunos ejemplos en Los Andes venezolanos
Dammed and failure of natural dams and its relations with
coseismic events: Some examples from the venezuelan Andes

Carlos Ferrer

Resumen
Se documentan y se discuten 35 casos de represamientos, formación de lagunas de obturación,
colapsos y generación de olas de descarga. La mayoría puede, en forma preliminar, ser asocia-
dos con grandes deslizamientos rotacionales (40%) y una combinación compleja de flujos/to-
rrentes y aludes (24%); mientras que la sismicidad constituye el mecanismo detonante más
importante con el 63% del total. Estas características hacen de estas formas de relieve un inte-
resante criterio como guía a la paleosismicidad regional, especialmente a lo largo de la Zona de
fallas de Boconó. Los datos obtenidos para 26 casos son el resultado de la consulta de catálo-
gos, lo que implica una fuerte limitación debido al poco nivel de detalle, y los 9 restantes por
investigaciones de campo completados en estos últimos años. Las lagunas de obturación aquí
reportadas parecen corresponder mayoritariamente al Tipo II (Costa y Schuster, 1988). Los
materiales generados por movimientos de masa pueden ser diferenciados de aquellos deposita-
dos por lluvias concentradas (20%), ya que estos últimos lucen más fluidos y se explayan con
mayor facilidad. Los Andes venezolanos concentran 30 de los ejemplos ilustrativos y de ellos
casi el 50% corresponden al estado Mérida. Es previsible que a medida que se conozcan nuevos
casos, este número inicial se vea incrementado notablemente.
Palabras clave : Deslizamientos; Aludes; Olas de descarga; Sismos; Registros históricos,
Represamientos; Andes venezolanos.

Abstract
Landslide – dammed lakes seem be common in venezuelan steep mountainous regions. Currently,
some 35 cases have been identified, mainly in the venezuelan Andes, specifically in the Mérida
state. The most frecuent initiation mechanisms is caused by large historic earthquakes, and
others are suspected to have had the same cause. The most common types of mass movements

* Universidad de Los Andes, Instituto de Geografía y Conservación de Recursos Naturales, Vía Los
Chorros de Milla, Mérida, Venezuela. E-mail: ferrer@ula.ve
120 C. Ferrer

that form landslide dams are rock and soil slumps (40%) and a complex combination of debris
flows/torrents and rock avalanches (24%). There may be many more examples than have so
far been recognised here and further research are needed to assess the hazards related with
mass movements – dammed lakes and its failures.
Key words: Landslides; Avalanches; Floods; Earthquakes; Historical records; Impounded lakes;
venezuelan Andes.

Introducción sulta de catálogos e inventarios así como

de datos obtenidos en levantamientos
Movimientos de masa inducidos por geológicos y geomorfológicos, casos de
sismicidad y sus efectos colaterales de represamientos y rupturas de embalses
relleno parcial de estrechos valles han naturales, precisando, con las limitacio-
generado represamientos y rupturas nes del caso, su naturaleza y alcances.
como procesos ampliamente extendidos Se hace especial hincapié en el estado
en regiones montañosas. En Venezuela Mérida por formar esta entidad el cen-
existen suficientes ejemplos de la presen- tro piloto de este ensayo.
cia de lagunas de obturación, de presas
naturales colapsadas y evidencias de
grandes olas de descarga, no obstante Distribución de los
ningún esfuerzo serio se ha intentado represamientos y rupturas
hasta los momentos para evaluar los efec- de embalses naturales en
tos y definir los mecanismos implicados Venezuela y, particularmente
en este fenómeno natural. En este senti- en Los Andes venezolanos
do este trabajo puede ser considerado el
esfuerzo inicial de un estudio que requie- De 35 ejemplos evaluados, el 63% (22)
re mucha más investigación, de forma ha tenido un origen sísmico (14 proba-
de no dejar fuera a nuestro país del In- dos; 8 probables); de los 13 restantes, 8
ventario Mundial que sobre este tipo de por tormentas (lluvias concentradas), 3
eventos está actualmente adelantando por causas desconocidas y 2 debidos a obs-
el U.S. Geological Survey (Perrin & trucción artificial y efectos de la
Hancox, 1991). tubificación. La Figura 1 y el Cuadro 1
Inicialmente el interés por este tra- muestran la localización general de este
bajo surgió a raíz de la evaluación del fenómeno en el país, resaltando su estre-
Alud Sísmico de La Playa y del subsi- cha relación con las zonas de fallas más
guiente represamiento/ruptura del río importantes, de allí su utilidad como
Mocotíes, a raíz del Terremoto de indicadores de la paleosismicidad. La fuen-
Bailadores (1610)(Ferrer y Laffaille, te de consulta más útil en la recolección
1998). El objetivo principal de este es- de información fue el Inventario Nacio-
tudio es documentar, mediante la con- nal de Riesgos Geológicos, (Singer et al,
 Represamientos y rupturas de embalses naturales... 121

Figura 1. Lagunas de obturación en Venezuela. Los ejemplos numerados se discuten en el texto.

1983), el catálogo mejor documentado Metropolitana, de edades Pleistoceno

sobre el fenómeno, así como la recopila- superior-Holoceno inferior. Del primer
ción de información sísmica debido a caso se mencionan “El Lago de Mari-
Grases (1980). (Figura 1; Cuadro 1). pérez” e “Isla de La Hacienda Ibarra”
(Plaza Venezuela); por la magnitud al-
canzada por este embalse, ya Singer ha-
RegiónCentral bía postulado con anterioridad la posi-
bilidad de un “alud sísmico”, cuya fuen-
Para el caso específico del D.F. y estado te debe ser necesariamente ubicada al
Miranda, Singer et al (1983) reportaron norte de la Ciudad, flancos de la serra-
3 casos de represamiento y ruptura en el nía de El Avila. Los mismos autores re-
río Guaire, y un cuarto en una quebrada portan un represamiento y posterior rup-
como consecuencia de la obstrucción tura del río Guaire en Petare, con un
artificial de su cauce. Notables son las fechamiento entre 1.100 – 1.500 d.c.(33)*.
lagunas de obturación ubicadas al Este Un ejemplo algo impreciso se ubica en
(desde Bello Monte hasta El Conde) y Cariaco (estado Sucre) en 1705, posible-
al Oeste (El Pinar-El Paraíso) del área mente un torrente de detritos[35].
Cuadro 1. Represamiento y rupturas de embalse por causas naturales (casos reportados y potenciales).
122
C. Ferrer
 Represamientos y rupturas de embalses naturales... 123
continuación Cuadro 1
continuación Cuadro 1
124
C. Ferrer
 Represamientos y rupturas de embalses naturales... 125
continuación Cuadro 1
126 C. Ferrer

Andesvenezolanos por la Zona de Fallas de Boconó. El

acontecimiento que puede ser conside-
El 86% de los casos recopilados o apor- rado ‘clásico´ en Venezuela correspon-
tados en el presente trabajo correspon- de con el Alud Sísmico de La Playa
de con esta extensa región. Hacia el ex- (1610), ejemplo histórico que fue pos-
tremo occidental, estado Táchira, de los teriormente verificado por evidencias
cuatros casos reportados, el más conoci- de campo (Simón 1987; Singer y Lugo,
do corresponde con el Sismo de 1982; Singer, 1998; Audemard, 1998;
Bailadores (1610), que además del im- Ferrer y Laffaille, 1998).[5]. Es ésta la
pacto generado en La Playa [5], el cual mejor muestra, prácticamente pedagó-
será referenciado más adelante, produjo gica, de obturación, represamiento,
un efecto particularmente grave al ruptura y generación de ola de descar-
represar las aguas del río La Grita, en sus ga; Ferrer y Laffaille (1998) estimaron
cabeceras [4], tal y como se desprende que como consecuencia de un sismo
de las crónicas históricas (Simón, 1987). de Magnitud 7,2 (ML) y una superfi-
Grases (1980) registra inundaciones cie de ruptura de 9 – 11 km, se produ-
como consecuencia del sismo de 1961 jo un alud al noroeste de La Playa,
al norte de Bucaramanga, sin precisar quebrada Las Delicias, que desplazó un
mayores detalles [3]; con las tormentas volumen entre 14 y 21 x 10 6 m3, gene-
ocurridas en 1981, un año extremada- rando un embalse de 193,75 has y un
mente lluvioso, un flujo de detritos en volumen de 29 – 38,7 x 106 m3, el cual
el sitio de Sabaneta desvió y represó cinco meses después colapsó y generó
esporádicamente el río Torbes [2] una ola de descarga que se explayó
(Singer et al, 1983). Recientemente unos 7 km aguas abajo. Lagunas de
Ferrer (1998), en el transcurso de un obturación cuyas causas están relacio-
levantamiento de campo, reportó lo nadas bien con actividad sísmica, bien
que parece un importante debido a tormentas, han sido reporta-
represamiento, con evidencias de una das en el Pico La Negra [6]
laguna de obturación y posible flujo de (Giengengack et al, 1976; Giraldo et
descarga, como consecuencia de un al, 1981; Singer et al, 1983); en La
gran deslizamiento rotacional (volu- Vega de La González [10] (Ferrer,
men estimado: 225 – 255 x 106 m3), en 1991b; Ferrer y Pérez, 1999), en Ejido
el sitio conocido como Puente de Oro, [12] (Singer et al, 1983), en el río San
sección media – inferior de la quebra- Pedro [13] (MARNR, 1987; Lobo y
da Caño Grande.[1]. Portillo, 1990) y en la cuenca del río
Los casos mejor documentados, has- Aracay [18] (Ferrer, 1992).
ta los momentos, corresponden con la Especial consideración se le deben
región central del estado Mérida, dar a las evidencias de represamientos
específicamente el ‘corredor´ formado detectados en los siguientes casos:
 Represamientos y rupturas de embalses naturales... 127

Chiguará-Estánques [7], donde una ex- [22] con el Terremoto de 1881. En el

tensa y compleja zona de deslizamientos estado Lara destacan Humocaro Alto
asociada a un bloque tectónico, [25] y más recientemente San Pablo
sísmicamente activo, amenaza una sec- [29] en 1975. Hay tres represamientos
ción muy estrecha del río Chama (Ferrer, de origen incierto [26], [27] y [28]. Sin
1991a; Ferrer et al, 1992). El desliza- duda el ejemplo más espectacular co-
miento del Cerro Chorote [8], descrito rresponde al Terremoto de 1812 so-
inicialmente por Ferrer (1993), muy pro- bre San Felipe El Fuerte [30]; ciudad
bablemente generó un represamiento de ésta que fue arrasada por una ola de
corta duración, al igual que el desliza- descarga proveniente del represa-
miento La González [9],(Ferrer, 1991ª). miento del río Yurubí.
En el transcurso de las investigaciones El caso de la quebrada Say-Say
que durante estos últimos años se han (Michuruao)[15] es muy interesante
venido desarrollando a lo largo de la porque las evidencias señalan dos
Zona de fallas de Boconó correspon- represamientos y sus respectivas ruptu-
diente al estado Mérida, se han detecta- ras, donde muy probablemente las olas
do deslizamientos rotacionales (indivi- de descarga debieron haber generado
duales y múltiples) y flujos deslizamientos mucho daño en el actual sitio ocupado
que a su vez han generado lagunas de por San Rafael de Mucuchíes. La prime-
obturación y flujos de descarga al ra laguna de obturación debió haber al-
colapsar los diques naturales; este es el canzado un volumen considerable, tal y
caso del sector El Estanquillo [11], que- como puede ser deducido a partir de la
brada La Toma [14], quebrada Say-Say observación de espesores de 8 – 12 m de
(Michuruao) [15], Barro Negro [16] y sedimentos lacustres y la construcción
El Pedregal [17]. Se debe llamar la aten- de un delta progradante. Según Comu-
ción, por su alta vulnerabilidad, para su nicación Personal de M. Bezada, las eda-
consideración, los sitios potencialmente des radiocarbónicas en estos sedimentos
peligrosos El Arenal (urb. Don Perucho) señalan una edad no menor a 8.000 años
y San Jacinto en las cercanías de la ciu- B.P. En el caso de Barro Negro [16], muy
dad de Mérida. cerca del anterior, es muy posible que el
Para las tres restantes entidades, “till” estuviese parcialmente saturado; la
Trujillo, Lara y Yaracuy (Figura 1), los gran extensión de los deslizamientos
datos publicados (Singer et al, 1983; (rotacionales) y los volúmenes de mate-
Palme, 1997; Altez, 1998) tienden a su- rial involucrado sugieren un indudable
brayar el peso del factor sísmico, es el origen sísmico.
caso de la cuenca superior del río Pocó A pesar de lo poco preciso de la in-
[19][20] con los sismos de 1644 (?) y formación obtenida a partir de la con-
1674; el río Jiménez [21][23], con los sulta de los catálogos y de una evalua-
sismos de 1866 y 1886, y el río Boconó ción preliminar de los testimonios obte-
128 C. Ferrer

nidos en campo, la gran mayoría de los Conclusiones

deslizamientos que han inducido
represamientos, entran en la categoría Lagos / Lagunas de obturación parece
de rotacionales (40%), en un segundo que son bastantes comunes en las regio-
lugar resultan de una combinación com- nes montañosas de Venezuela, especial-
pleja entre flujos/torrentes de detritos y mente en Los Andes venezolanos, don-
aludes sísmicos (24%), desarrollados en de se han podido identificar un total de
materiales altamente tectonizados, 30 ejemplos, incluidos 9 casos descritos
meteorizados, sedimentos sueltos y ma- en este trabajo y correspondientes al es-
cizos rocosos con numerosos planos de tado Mérida. Esta última afirmación con-
debilidad / discontinuidad (rocas firma que a medida que se avance en las
estratificadas, diaclasas maestras, etc...). exploraciones y nuevas tecnologías de
Dos son los principales mecanismos de- detección sean agregadas, eventos aso-
tonantes: la sismicidad con un total del ciados con movimientos de masa que
63% de los casos aquí reseñados e inten- han inducidos y son propensos a inducir
sas precipitaciones con un lejano 20% represamientos y posterior rupturas (ola
(Cuadro 1); estos resultados coinciden de descarga) se irán agregando al lista-
con observaciones realizadas en otras do.
regiones del mundo (Schuster y Costa, El factor sísmico se considera la prin-
1986; Costa y Schuster, 1988; Perrin y cipal causa para la ocurrencia de este
Hancox, 1991). De los sitios observados, fenómeno con un 63% del total analiza-
las lagunas de obturación corresponden do, le sigue en orden de importancia las
al Tipo II de Costa y Schuster (1988;p. tormentas con precipitaciones intensas
1057) (“...estos represamientos alcanzan (20%). Una gran parte de los movimien-
grandes volumenes y ocupan el cauce tos de masa inducidos por terremotos,
completo, en algunos casos depositan pueden ser clasificados como
material a altas cotas en las laderas deslizamientos rotacionales y aludes
opuestas”). Los sedimentos que consti- sísmicos; cuyos materiales en reposo pue-
tuyen estas presas naturales forman una den ser diferenciados de aquellos depo-
mezcla altamente heterométrica, pobre- sitados por lluvias, los cuales lucen mu-
mente seleccionada y carentes de cho más fluidos y se explayan con más
compactación, en los casos mejor docu- facilidad, es el caso de los flujos de detri-
mentados colapsan por efecto de la tos ubicados en La Vega de La González
tubificación / erosión en túnel y [10]. Esta observación confirma lo ex-
socavación retrogresiva, su longevidad es presado por Perrin y Hancox (1991)en
corta, varía de días a meses (para deta- su trabajo sobre Nueva Zelandia. Del
lles analizar el colapso del lago de análisis, ahora presentado, resalta, por su
obturación de La Playa en el año 1610: rica y detallada información, el
Ferrer y Laffaille, 1998). represamiento del río Mocotíes en el si-
 Represamientos y rupturas de embalses naturales... 129

tio de La Playa debido al Sismo de 1610 (FUNDAPRIS) del Estado Mérida por
[5], y, por su dramatismo, la desapari- el financiamiento de este proyecto.
ción de San Felipe El Fuerte [30] por
efecto de una ola de descarga provenien-
te del río Yurubí, a raíz del Terremoto Referencias citadas
de 1812. Otros casos interesantes y que
ameritan una minuciosa investigación, ALTEZ, R. 1998. Cronometrización extem-
son los lagos de obturación reportados poránea: Los sismos de 1812 en Caracas
por Singer et al (1983) en el valle de y Mérida. Rev. Geog. Venez., 39: 297 –
326.
Caracas.
AUDEMARD, F.A. 1998. Contribuciones de
Finalmente, es oportuno puntualizar
la paleosismología a la sismicidad históri-
que los mayores “picos” de crecida regis-
ca: Los terremotos de 1610 y 1894 en los
trados en la historia del planeta están Andes venezolanos meridionales. Rev.
directamente relacionados con el colap- Geog. Venez.39: 87-105.
so de presas naturales (ver por ejemplo: Baker, V.R. 1973. Paleohydrology and
Baker, 1973). No obstante que la mayo- sedimentology of Lake Missoula flooding
ría de los ejemplos aquí ilustrados no pre- in eastern Washington. Spec. Paper –
sentan gran riesgo para los pobladores Geol.Soc.Am., 144: 1-79.
asentados en sus cercanías, se discuten COSTA, J. E. y SCHUSTER, R.L. 1988. The
algunos casos donde es recomendable formation and failure of natural dams. Geol.
tomar medidas preventivas y proceder a Soc. of Amer. Bull., 100: 1054-1068.
FERRER, C. 1991a. Posibles relaciones entre
una evaluación lo más detallada posible
movimientos de masa y fallamiento acti-
de las condiciones geomorfológicas y
vo en un segmento de la falla de Boconó.
geotécnicas de esos sitios. Rev. Geog. Venez., 32:49-88.
Agradecimientos _____. 1991b. Geomorfología de una secuen-
Una versión preliminar de este trabajo cia de flujos de detritos en los Andes ve-
fue presentada en el VI Congreso Ve- nezolanos XLI Convención Anual
nezolano de Sismología e Ingeniería ASOVAC: Maracaibo, Venezuela (24-29
Sísmica llevado a cabo en Mérida, Ve- noviembre). Resumen.
nezuela, los días 12-15 de Mayo de 1999. _____. 1992. El deslizamiento de Buena Vis-
Deseo agradecer los comentarios críti- ta: Un gran movimiento de masa asocia-
cos de Jaime Laffaille, Martín Rengifo, do con fallamiento activo en los Andes
venezolanos. Rev.Geog. Venez., 33: 95-
Ludolfo Martínez, Rosa Ramírez y
156.
Marbella Dugarte, lo que sin duda me-
_____. 1993. Cerro Chorote: Ejemplo de un
joró los alcances de este estudio. La fi- bloque deslizado en una falla activa de los
gura que acompaña el trabajo se debe a Andes venezolanos. IV Encuentro de Geó-
Luis Dugarte. Un testimonio muy espe- grafos de América Latina, Tomo 1: 441-
cial a la Fundación para la Asesoría y 453. Mérida, Venezuela (27-4, marzo-
Prevención del Riesgo Sísmico abril).
130 C. Ferrer

_____. 1998. Evaluación de las condiciones ge- Petróleo (INTEVEP), Caracas: 450 p.
nerales de sitio: Puente de Oro; troncal 09, (dos volúmenes). Inédito.
vía El Mirador-Rubio, estado Táchira. Pro- LOBO, V. y PORTILLO, M. 1990. Utiliza-
grama caf-mtc; 16 p. Informe técnico; ción de metodologías para la determina-
Inédito. ción de prioridades: Caso cuenca del río
FERRER, C., GIRALDO, C. y SCHUBERT, San Pedro. II Cong. Ven. de Geografía;
C. 1992. Guía de la Excursión a lo largo 403-417. Mérida, Venezuela (19-23 mar-
de la Falla de Boconó. Segundo Simposio zo, 1990).
de Fallas Activas y Deformaciones MARNR. 1987. Informe de la creciente en el río
Cuaternarias en la Cordillera de los Andes: San Pedro en la cuenca alta. Zona Sur del
45 p. Mérida, Venezuela (20-24, enero). Lago de Maracaibo del 13/06/87. Div.
FERRER, C. y LAFFAILLE, J. 1998. El alud Tec., Dep. Infraestructura, Planificación
sísmico de La Playa: Causas y efectos. El y Ordenación del Territorio. Mérida, zona
Terremoto de Bailadores (1610), Andes 16:39 p. Informe Inédito.
venezolanos. Rev. Geog. Venez. 39: 23-86. PALME, C. 1993. Los terremotos de los años
FERRER, C. y PÉREZ, R. 1999. 1674, 1775 y 1886 en Trujillo. Trujillo,
Geomorfología de una secuencia de flu- Dept. Física y Matemática, Núcleo
jos de detritos. I: Aspectos mecánicos. Univers. “Rafael Rangel”, Universidad de
Trabajo Manuscrito. Inédito. los Andes: 68 p.
FIELDLER, G. 1961. Areas Afectadas por te- _____.1997. Sismos históricos en el estado
rremotos en Venezuela. 3er Congreso Trujillo. 1eras. Jornadas de Sismicidad His-
Geol. Ven., Tomo IV; 1791-1810; Cara- tórica en Venezuela: p. 29. Trujillo, Vene-
cas, Venezuela. (22-29 Noviembre, zuela (15-16 mayo, 1997). Resumen.
1959). PERRIN, N.D. y HANCOX, G.T. 1991.
GIENGENGACK, R., GRAUCH, R. y Landslide – dammed lakes in New
SHAGAM, R. 1976. Geometry of Late- Zealand – Preliminary studies on their
Cenozoic displacement along the Boconó distribution, causes and effects. En: J. Bell
fault, Venezuelan Andes. 2do Congreso (Editor), Landslide: 1457-1466. Balkema,
Lat. de Geología, Mem. Tomo II: 1201- Rotterdam.
1225; Caracas, Venezuela (11-16 noviem- SCHUBERT, C y RINALDI, M. 1987. Nue-
bre, 1973). vos datos sobre la cronología del Estadio
GIRALDO, C., ROJAS, C. y SAURET, B. Tardío de la Glaciación Mérida, Andes
1981. Evidencias de deformaciones venezolanos. Acta Científica Venez.
gravitacionales profundas en la región de 38:135-136.
Bailadores – La Grita (Páramos La Negra SCHUSTER. R.L. y COSTA, J.E. 1986. A
y El Rosario, edos. Mérida y Táchira, perspective on landslide dams.
Andes venezolanos). XXXI Convención Geotechnical Sp. Pub. 3, American Society
Anual de la ASOVAC. Maracaibo, Vene- of Civil Engineers: 1-20.
zuela. Resumen. SIMÓN, Fray Pedro. 1987. Noticias historiales
GRASES, J. 1980. Investigaciones sobre sismos de Venezuela. Academia Nacional de la
destructores que han afectado el centro y el Historia. Caracas. Vols. 66-67; tomo II:
occidente de Venezuela. Inst. Tec. Ven. del p. 269-273.
 Represamientos y rupturas de embalses naturales... 131

SINGER, A. 1998. Evaluación retrospectiva

de los efectos geológicos destructores del
Terremoto de 1610 en los Andes venezo-
lanos por medio de la confrontación de
testimonios del siglo 17 y de observacio-
nes de campo actuales. Rev. Geog. Venez.,
39: 289-296.
SINGER, A., y LUGO, M. 1982. El alud
sísmico del 03-02-1610 en el valle del
Mocotíes (Andes venezolanos). Confron-
tación con los testimonios del siglo XVII
y de las evidencias de campo actuales.
Acta Científica Venez., 33: p. 214. Resu-
men.
SINGER, A., ROJAS, C. y LUGO, M. 1983.
Inventario Nacional de Riesgos Geológicos.
Estado Preliminar. Caracas, Fundación
Venezolana de Investigaciones
Sismológicas (FUNVISIS): 128 p.