SESIÓN N° 3: “La palabra de Dios alimenta mi vida espiritual”

La Palabra de Dios es la sabiduría que necesitamos para desarrollar nuestras vidas, para
conocer un poco más de que está bien y que
no está bien delante de los ojos de Dios. Es
lo que Dios mismo nos regala para ser perfectos
y para prepararnos a trabajar en la buena obra,
de la forma que Dios desea que lo hagamos.
Seamos personas realmente saludables,
alimentando nuestro espíritu con la Palabra
de Dios, así como alimentamos también
nuestro cuerpo físico con comida.
LA BIBLIA COMO NUESTRO ALIMENTO
ESPIRITUAL
¿Alguna vez ha escuchado que la Biblia debe
ser alimento para los creyentes? Sin
embargo, a menudo muchos de nosotros tenemos la experiencia de sentirnos espiritualmente
secos, sedientos, hambrientos en incluso vacíos en lo más profundo de nuestro ser. Aún
después de haber leído o estudiado la Biblia experimentamos este tipo de sentimiento. ¿A qué
se debe?
Como creyentes, sin duda debemos leer la Palabra de Dios de forma regular e incluso
estudiarla. No obstante, la Biblia no es meramente una obra de literatura, un libro de texto o un
libro de ayuda auto personal. La meta de Dios al darnos Su Palabra escrita no fue con el
propósito de que aprendiéramos más doctrinas, éticas y procedimientos, o aun que
recibiéramos inspiración. Su propósito era que fuésemos alimentados.
ALIMENTO FÍSICO Y ALIMENTO ESPIRITUAL
Hay dos Tipos de alimentos esenciales para los seres humanos, uno
es el alimento físico, y el otro es el alimento espiritual. Dios nos dio
Su Palabra para que sea nuestro alimento espiritual.
Jesús dijo lo siguiente, en Mateo 4:4 Pero Jesús le respondió:
“Escrito está: ‘No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra
que sale de la boca de Dios.
Aquí está la respuesta aparte de pan el hombre necesita ser
alimentado por la palabra de Dios y su palabra es la única que
puede saciar el hambre espiritual que tiene el hombre nada más
puede llenar el espíritu del hombre sino la palabra de Dios.
Hebreo 4:12: Porque la palabra de Dios es viva eficaz, y más
cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta la división
del alma y del espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y es poderosa para discernir (juzgar)
los pensamientos y las intenciones del corazón.
El cuerpo se alimenta con la comida que alimenta, y nutre los huesos y los demás órganos,
pero el espíritu necesita ser alimentado con la comida que nutre al espíritu. Encontramos que
Juan 6:51 Yo soy el pan vivo que bajó del cielo. Si alguno come de este pan, vivirá para
siempre. Este pan es mi carne, que daré para que el mundo viva.
Tanto en lo espiritual como lo natural y el no alimentarse correctamente tiene efectos muy
dañinos a la salud física, y a la salud espiritual. Cuando no, nos alimentamos correctamente
empezamos a experimentar problemas en nuestra salud espiritual, y estos problemas afectan
nuestro espíritu y lo que afecta nuestro espíritu afecta nuestra salud emocional, psicológica (la
mente) y espiritual. Se puede comprobar científicamente que aquellas personas que tienen fe
en Dios viven una vida más alegre, y más tranquila.
El alimento espiritual tiene un efecto sobre nuestras vidas, ya sabemos que el alimento
espiritual del cristiano es la palabra, y esta se puede digerir de diferentes maneras como:
La palabra leída, en donde usted se sienta a leerla, a escudriñar, estudiar.
La palabra hablada (predicas, enseñanzas, dice la biblia que la fe viene por el oír y el oír de la
palabra.
La palabra como alimento sólido para el espíritu tiene otros nutrientes muy beneficiosos y estos
son el ayuno, la oración, la meditación, y memorización, de la palabra y por supuesto que toda
esto conlleva a una práctica. Se convierte en un estilo de vida en donde tú vas aplicar todo lo
que de ella aprendes.
DESNUTRICIÓN ESPIRITUAL: Creo que muchos de los problemas que enfrentamos hoy en
la vida cristiana son causados por la desnutrición espiritual porque no le damos importancia a
las escrituras y no meditamos la palabra de Dios, esto podría resolverse si le damos a la Palabra
el lugar apropiado en nuestras vidas.
Cuando una persona no tiene alimentación adecuada se encuentra desnutrida, espiritualmente
sucede exactamente lo mismo. Cuando no recibes los nutrientes necesarios para seguir
adelante, nos encontramos desnutridos espiritualmente. La Biblia es mucho más que un manual
de doctrinas. La Palabra de Dios genera vida, crea la fe, produce cambios, realiza milagros,
curas heridas, edifica el carácter, transmite alegría, supera la adversidad, derrota la tentación,
limpia nuestras mentes... ¡Y nos garantiza un futuro eterno! ¡No podemos vivir sin la Palabra de
Dios! Usted debe considerarla tan esencial para su vida como la comida.
Lo más peligroso de la desnutrición espiritual es que una persona físicamente se puede
encontrar bien, incluso saludable, sin embargo tiene desnutrición espiritual, para esto es
necesario pedir ayuda, acudir a Dios, tener fe, esperanza y escuchar la Palabra de Dios.
1. BENEFICIOS DE LEER LA PALABRA DE DIOS DIARIAMENTE:
 Nos hace sabios: la Palabra nos da la sabiduría para tomar decisiones correctas, cuando
estamos en medio de alguna situación difícil, nos guía para actuar.
 Nos enseña a vivir la vida que agrada a Dios. La Biblia es clara en enseñarnos
aquellas cosas que agradan y desagradan a Dios:
 Nos permite discriminar las cosas que son correctas y las que no. Si tomamos los
mandamientos de la Ley de Dios, ellos dirigen nuestra vida señalando lo que es correcto
hacer y lo que no es correcto.
 Nos corrige: Enderezar lo que está equivocado o errado. Nos cambia, mejora la vida y el
carácter.
 Nos instruye en justicia: la Palabra nos ayuda a actuar rectamente, entendiendo por
justicia: rectitud aquello que debe hacerse de acuerdo con el derecho o la razón.
 Nos perfecciona: somos perfeccionados por medio de la Palabra cuando la practicamos
nos parecemos más a Cristo.
 Nos prepara para toda buena obra: nos prepara para hacer lo bueno, para actuar con
bondad, con paciencia, misericordia y amor con los que nos rodean.
La Biblia dice en colosenses 3:16 “Que habite en ustedes la palabra de Cristo con toda su
riqueza” . Pablo nos está diciendo que permitamos que la Biblia habite en nuestras vidas de una
manera rica, profunda y entregada.
Definitivamente, que son innumerables los beneficios de la palabra de Dios, pero para poder
gozar de estos beneficios hay que alimentarse con este pan que bajo del cielo y esto no solo
se hace en día sino todos los días. Así como usted necesita la comida física para vivir
usted necesita esta comida espiritual para mantenerse vivo, renovado, lleno de
sabiduría, discernimiento, viviendo una vida victoriosa, transformado, y
restaurado. Ese es el trabajo constante de la palabra de Dios en nuestras vidas
mantenernos limpios, y purificado hasta la venida de nuestro rey triunfante. Se
puede notar cuando alguien está mal alimentado espiritualmente. El creyente que se
mantiene alimentado con este pan que sacia el espíritu resplandece como la luz del
alba que va en aumento. si usted no está gozando de estos beneficios es obvios que
no se está alimentando correctamente así que no es tarde para disfrutar de este
manjar espiritual tome esa biblia, léala y medítela y vera como su vida empieza a
cambiar.
RESPONDE:
1. ¿Cómo nos alimentamos de la palabra de Dios?
2. ¿Qué entiendes por desnutrición espiritual?
3. ¿Qué cambios necesitas hacer en tu vida para que seas nutrido espiritualmente?
4. ¿Escribes lo que Dios te enseña a través de su palabra?