Las Almas
Las Almas
Las Almas
Había una vez un señor, en la Quebrada de Humahuaca, que no creía en el regreso de las almas.
Tenía su señora, y ella, que era muy humilde, quería hacer y poner “ofrenditas” para las almas de
los difuntos queridos, como se acostumbra para el Día de Todos los Santos. Su marido no creía en
nada, le decía cosas malas, la retaba y no le dejaba poner nada
Sin embargo, la señora había buscado un poquito de harina, una jarrita de agua, y una cuchara y
una bolsita; las había puesto en el medio de su casa y se había ido a pastar sus ovejitas. Al ver que la
esposa había dejado esas ofrendas, el hombre murmuraba:
–¿Para qué ha puesto?
Él entró a la casa, se escondió en una parte donde no lo veía nadie y, ahí sentado, esperó un buen
rato para ver si alguien entraba a comer y beber las ofrendas.
Finalmente entraron las almas de sus compadres, su padre, la madre de la señora…
Cuando los vio les dijo:
–Pase, pase compadre, pase comadre, pasen.
No había nada en la casa, apenas esa agüita, esa bolsita con harina, nada más. Las almas levantaron
lo que la señora les había dejado. La madre de la señora lloraba y decía:
–Mi hija no tiene nada. Mejor ahora me la voy a llevar. Mi hija sufre, no tiene nada en su casa.
Y las almas se fueron.
El hombre no entendía nada y se desmayó.
Cuando las almas ya no estaban, el hombre se despertó y entonces recién creyó.
Salió a buscar a la señora para poner las ofrendas… pero las almas ya no estaban… ya se habían ido.
Al año siguiente, la señora murió y el hombre se convenció de que las almas volvían para el Día de
Todos los Santos.
Indicaciones: A continuación, tendrás la oportunidad de leer 2 reseñas de diferentes obras y
autores que presentan situaciones de conflicto que te permitirán explorar diferentes contextos
y perspectivas. Posteriormente responde las preguntas.
“Diles que no me maten” es un conmovedor cuento escrito por Juan Rulfo, incluido en su reconocida
colección de relatos cortos “El Llano en llamas”. Publicado por primera vez en 1953.
Este cuento destaca la maestría narrativa de Rulfo y su habilidad para explorar la complejidad de
las relaciones humanas en el árido y desolado paisaje mexicano.
La historia se centra en la figura de Juvencio Nava, un hombre ya anciano que ha vivido una vida
marcada por la violencia y la injusticia. A punto de ser ejecutado, Juvencio recibe la visita de su
compadre Tanilo, quien actúa como intermediario entre él y el verdugo.
La trama se desarrolla a través de la conversación entre estos dos personajes, revelando
progresivamente los eventos que llevaron a Juvencio a enfrentarse a la pena de muerte.
Lo notable de “Diles que no me maten” es la capacidad de Rulfo para tejer una narrativa que no
solo aborda la brutalidad de la vida en el contexto rural mexicano, sino también las complejas
relaciones entre amigos, familiares y comunidades. La obra expone la dureza de la realidad, donde la
muerte es una presencia constante y la justicia puede ser implacable.
El conflicto que se o0resenbta en el cuento es la venganza del Coronel contra Juvencio Nava, quien
había matado a su compadre Don Lupe, quien asesinó a uno de los hijos de Juvencio por una disputa
de terrenos y ganado. El Coronel era hijo de Don Lupe, quien persigue a Juvencio por muchos años y
al final logra atraparlo. Juvencio le pide a su hijo Juventino que le pida al Coronel que no lo mate, y le
implora con mucho temor ¡Diles que no me maten!
La prosa de Juan Rulfo es concisa pero impactante, cargada de simbolismo y metáforas que revelan
las cicatrices físicas y emocionales de sus personajes. A través de la historia de Juvencio, el autor
examina temas universales como la traición, la lealtad y la inevitable crueldad de la vida en un entorno
inhóspito.
En resumen, “Diles que no me maten” es una obra maestra literaria que destaca por la habilidad
de Juan Rulfo para capturar la esencia de la condición humana en un entorno desafiante. La
narrativa evocadora y los personajes vividos hacen de este cuento una contribución significativa a
la literatura latinoamericana.
El señor de las moscas
William Golding
“El señor de las moscas” es una obra maestra de la literatura moderna que explora las complejidades
de la naturaleza humana y la civilización. Publicada por primera vez en 1954, la novela ha perdurado
a lo largo del tiempo y ha sido objeto de análisis y estudio en todo el mundo.
La trama se inicia con el naufragio de un grupo de niños británicos en una isla desierta durante una
guerra. Sin adultos supervisando, los niños se ven obligados a organizarse y establecer sus propias
reglas para sobrevivir. Ralph, elegido como líder, representa la civilización y el orden, mientras que
Jack, un niño impulsivo y violento, encabeza una facción que se inclina hacia la barbarie y la anarquía.
La isla paradisiaca se convierte en un microcosmos que refleja los aspectos más oscuros de la
sociedad humana. A medida que los niños luchan por la supervivencia, surgen tensiones y rivalidades
que desencadenan la pérdida de la civilización y el surgimiento de la brutalidad. La aparición de una
criatura mitológica llamada “El Señor de las Moscas” simboliza la descomposición moral y la
disolución de las estructuras sociales.
El conflicto de interés en la trama ocurre cuando los niños de repente se hacen responsables de sí
mismos y de los demás. Todavía están creciendo y madurando y no están seguros de quiénes son y
Ralph lucha por su confianza como líder.
La fuerza de la novela radica en la habilidad de Golding para explorar la fragilidad de la civilización y
la facilidad con la que la humanidad puede caer en la barbarie cuando se eliminan las restricciones
sociales. El autor utiliza alegorías y simbolismos de manera magistral para comentar sobre la
condición humana y la dualidad entre el bien y el mal.
Los personajes desde el idealista Ralph hasta el primitivo y salvaje Jack, se desarrollan de manera
convincente a medida que la historia avanza. La tensión psicológica aumenta a medida que el
conflicto entre el orden y el caos se intensifica, llevando a un desenlace impactante y reflexivo.
“El Señor de las Moscas” no solo es una novela apasionante sino también una exploración
profunda de la psicología humana y la sociedad. A través de su narrativa visceral y sus personajes
inolvidables, William Golding ofrece una obra que invita a la reflexión sobre la esencia misma de la
humanidad y sus instintos más primitivos.