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Parque Guells

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Introducción

En 1984 la Convención del Patrimonio Mundial de la UNESCO declaró las tres obras
de Gaudí; el Park Güell, El Palacio Güell y la Casa Milá como Patrimonio de la
Humanidad. Esta nominación resaltó por varios motivos, entre estos el de ser un
conjunto de obras, y no una sola; y el ser las primeras obras vanguardistas del siglo XX
en realzarse con este logro. Décadas después, en 2005, se amplió esta lista para incluir a
la Fachada de la Natividad, la Cripta del Templo de la Sagrada Familia, La casa Batlló,
La Casa Vicens y la cripta de la colonia Güell.

Los sitios Patrimonio Mundial son reconocidos por su valor multidisciplinar para la
humanidad, en este caso el conjunto de obras de Gaudí en la ciudad de Barcelona son
una muestra de lo mejor del legado arquitectónico de este genio y representan tanto a la
cultura española como a la humanidad. Obtener esta categoría de manos de la UNESCO
conlleva a un gran impacto no solo cultural, sino que de muchas índoles pues fija la
atención de múltiples factores en el sitio nombrado. Uno de los mayores efectos que
tiene este nombramiento es que acentúa y redirige el tráfico de personas hacia dicho
sitio con todas las consecuencias buenas y malas que esto conlleva.

Este fenómeno es contradictorio pues se pudiera pensar que al nombrar un sitio


Patrimonio de la Humanidad garantizará su protección, sin embargo, esto no siempre
sucede. La relación entre Patrimonio y Turismo es intrínseca y es a la vez uno de los
factores mediante el cual se ha tenido que diseñar estrategias que permitan la
convivencia de ambas sin tener que limitar su interacción.

La ciudad de Barcelona es una de las más visitadas por los turistas en el mundo. Según
datos del ayuntamiento de Barcelona, la ciudad recibió 18.649.866 pernoctantes en
2023, mientras que la provincia recibió 30.611.195 1. Estas cifras la convierten en la
segunda ciudad más visitada en España luego de Madrid. Una particularidad que se
debe resaltar es que la mayoría de estas visitas se concentran en puntos específicos de la
ciudad que permiten conocer cuáles son los sitios de mayor interés para el turista y el
por qué

1
Datos tomados del departamento de estadística del Ayuntamiento de Barcelona:
https://ajuntament.barcelona.cat/estadistica/castella/Estadistiques_per_temes/
Turisme_i_promocio_economica/index.htm
También ver mapa de vuelos a fecha de 14 de marzo. Claramente se ve a Barcelona como segundo
destino más grande luego de Madrid. Datos tomados de la página web:
https://www.flightradar24.com/airport/bcn
Un análisis de los lugares de interés más visitados muestra cómo dichos puntos son la
ubicación de recursos patrimoniales que están relacionados con la arquitectura de la
ciudad, en particular con la arquitectura modernista perteneciente a Gaudí. Esta
característica no es casualidad pues es el resultado de una muy buena campaña de
marketing y puesta en valor de las obras del arquitecto catalán, que lo han situado en el
imaginario turístico como una de las marcas de Barcelona.

Al analizar las figuras del Anexo 1 y 2, se aprecia que destacan como sitio de interés un
punto en particular alejado del entramado urbano de Barcelona, el Parque Güell. Al
estar alejado de los demás centros patrimoniales, el parque tiene que resaltar por su
atractivo, pues a él sólo asisten los visitantes realmente interesados en visitarlo, y no
recibe visitantes ajenos que estén cerca por casualidad.

El objetivo del presente ensayo es analizar cuáles son las principales características del
Park Güells que le permiten sobrevivir y recibir un número elevado de visitas a pesar de
estar aislado del resto de obras patrimoniales de la ciudad. Para esto es necesario revisar
disímiles fenómenos propios de este tipo de obras, como lo son: su historia; su
conservación, preservación y puesta en valor por parte de las entidades competentes; y,
cuáles son los principales desafíos a los que se enfrenta el parque y su directiva ante el
ente destructor que significa el turismo cuando no se controla.

Breve historia de Gaudí y la creación del Park Güell

Antoni Gaudí fue un destacado arquitecto catalán nacido en Reus, España, en 1852 y
fallecido en Barcelona en 1926. Su vida profesional luego de graduarse de arquitecto en
la Escuela Provincial de Arquitectura de Barcelona se desarrolló en la propia ciudad,
donde pudo materializar la mayoría de su trabajo. Sus obras se caracterizan por un estilo
único y distintivo, influenciado por el modernismo y su profunda conexión con la
naturaleza. Graduado en arquitectura en 1878, Gaudí se convirtió en un visionario que
desafiaba las convenciones arquitectónicas de su tiempo, creando edificaciones
innovadoras y surrealistas. Sus obras más conocidas incluyen la Sagrada Familia, la
Casa Batlló, la Casa Milá, las Farolas de la Plaza Real y el Parque Güell.

Es necesario resaltar que Gaudí convivió en un contexto histórico propicio para


desarrollar sus obras pues era una época en la que la ciudad presentaba un fuerte
crecimiento económico y además en pleno desarrollo cultural con el movimiento
conocido por la historiografía como “Renaixença”. Este entorno favoreció sin dudas que
el genio arquitectónico de Gaudí evolucionara sin limitación alguna.

Su estilo arquitectónico es diverso y presenta una evolución que atraviesa desde


características propias del arte Mudejar en donde resaltan la policromía; el Gótico
presente en muchas de sus obras; y el naturalismo expresionista que utilizó en la
construcción del Parque Güells. Sin dudas esta fusión de estilos fue su mayor impronta
pues legó a la humanidad un estilo único que lo hizo convertirse en uno de los más
aclamados arquitectos en vida de la España de su época.

La obra arquitectónica de Gaudí está estrechamente relacionada con la familia Güells, la


cual era famosa y rica en la ciudad y para la cual desarrollaría numerosos trabajos como
el Palau Güell y La Cripta de la Colonia Güell. Ambos se conocieron a través del
maestro de Gaudí Joan Martorell, quien era a su vez arquitecto del magnate Eusebi
Güell. Luego de realizar algunos trabajos para dicho magnate, este le encarga a Gaudí el
primer gran trabajo, la construcción del Palau Güell, en la calle de la Rambla. El éxito
de Gaudí en esta construcción viabilizó que en 1900 recibiera el encargo de construir el
Park Güell.2

La construcción del parque fue un resultado de la maduración artística de Gaudí, el cual


venía de realizar trabajos muy elaborados influenciado por la arquitectura francesa y
británica. Este está caracterizado por la inclusión y alusión de los elementos naturales y
la libertad de diseño en armonía con el entorno de la montaña donde se construyó.

El parque se crea como un proyecto concebido entre Güell y Gaudí como un conjunto
de construcciones, que integrado con la naturaleza y lejos del centro de la urbe de
Barcelona, se edificarían una serie de viviendas de lujo que sirvieran como retiro para
las élites. Dichas viviendas serían instaladas con todos los lujos y confort posibles. La
idea comercial era crear una especie de resort en el que una vez se fueran comprando las
distintas viviendas pudieran establecer una comunidad donde retirarse cuando el
dinamismo de las ciudades fuera agobiante.

De esta forma se inició la construcción del parque, y se proyectó el mismo con


características únicas como la posibilidad de ver desde el balcón de cada casa el
anfiteatro en donde se llevarían a cabo obras teatrales; se priorizó la vista al mar, y se
2
Se nombró originalmente en inglés pues el mecenas de la obra quería emular la recreación de los
parques residenciales británicos. (dato tomado del sitio web oficial del Park Güell:
https://parkguell.barcelona/es/el-park-guell/mas-100-anos-historia)
introdujo una serie de plantas provenientes del mediterráneo con el objetivo de
mantener la armonía con la naturaleza.

A pesar de ser una obra arquitectónica de renombre desde su apertura, el parque, como
negocio, no funcionó. Debido a la lejanía con la urbe y la poca conexión de transportes
hacia la misma, los pobladores de la ciudad no se sintieron atraídos hacia el mismo, y en
un final sólo se vendieron dos parcelas. A pesar de este fracaso empresarial, el parque
continuó su construcción hasta 1914, año en que se detuvo su obra debido al estallido de
la 1ra Guerra Mundial. Luego de la muerte de Güell en 1918 sus hijos herederos
vendieron el parque al Ayuntamiento de Barcelona, el cual lo convirtió en un sitio
público.

Atractivo Turístico del Park Güell

Luego de ser vendido al ayuntamiento, fue inaugurado como público en 1922 y a partir
de ahí comenzaría a tener mejor aceptación, pero sólo como lugar de destino turístico.
Con el auge y el trabajo divulgativo del ayuntamiento la obra comenzó a tener el valor y
reconocimiento que merecía desde siempre. A esto se le sumó la relevancia del resto de
las obras arquitectónicas que Gaudí había desarrollado en la ciudad y que comenzaron a
apreciarse como un conjunto artístico.

Gaudí concibió desde su construcción al parque con un sentido religioso que integrara
lo más avanzado del urbanismo modernista catalán y los elementos naturales donde se
insertaría el parque. Desde este enfoque se puede dividir el parque a través del análisis
arquitectónico y cultual de varios de sus elementos característicos.

La entrada al parque la situó lo más cerca posible de la urbanización de la ciudad y esta


queda justo en frente de una escalinata majestuosa que representa la entrada a ese
paraíso terrenal. Conocida como “La escalinata del dragón” se presenta una escalinata
doble donde se ve el escudo de Cataluña, y más arriba una slamandra (dragón) que se ha
convertido en una de las imágenes turísticas más representativas del sitio.
En la misma entrada antes de acceder a la escalinata se encuentran dos pabellones que, a
pesar de que estaban destinados al personal de mantenimiento y administración,
representan en sí obras maestras de la arquitectura. Ambos realizados con materiales
propios de la misma montaña y en sintonía con la naturaleza del lugar. Desarrollados
con la técnica de la bóveda catalana, y con la técnica de “trencadís” también
desarrollada en Barcelona en la cual se troceaban mosaicos y se unían con argamasa.

Al subir la escalinata se encuentra la Sala Hipóstila o Sala de las 100 columnas. Esta
sala es la parte inferior de la plaza suprior (anfiteatro) y originariamente se ideó como
un posible centro comercial para la urbanización. En ella se encuentran 86 columnas
realizadas con escombros y rocas de la propia montaña, y en su interior (techo) se
aprecia el trabajo de uno de los ayudantes de Gaudí, Joseph María Jujol, quien realizó el
diseño de 4 plataformas circulares. En este punto se hace necesario resaltar de nuevo la
utilización de la técnica de trencadís para revestir toda la sala, y, también resaltar el
aprovechamiento de los materiales que realiza Gaudí pues prácticamente todo el parque
lo lleva a cabo con materiales autóctonos de la propia montaña, reduciendo
notablemente los costos.

Este complejo de escalinata, Sala Hipóstila y plaza superior es el centro del parque. El
mismo conjunto Gaudí lo realizó con tal creatividad que toda el agua es almacenada en
el interior a través de sistemas de desagües, y la misma se usa para regar las plantas del
parque, demostrando una vez más su preocupación del aprovechamiento de los
materiales y del cuido de la naturaleza. Esta característica resalta pues la construcción
del parque fue lo menos invasiva posible.

Por último, resaltan a la vista sus caminos, viaductos, y en un final, como punto más
alto del parque desde donde se ve la ciudad el Calvario. Los viaductos, nuevamente
realizados con desechos y piedras de la montaña, cuentan con desagües naturales y dan
un recorrido por todo el parque. Además, eran lo suficientemente amplios en algunos
sitios como para que pasaran carruajes. En un final del recorrido se encuentra el
Calvario, un montículo de piedras en donde originalmente iría una capilla, pero ante el
descubrimiento de yacimientos prehistóricos, Gaudí decide hacerlo en conmemoración
de los hombres de antaño.

Análisis de las estrategias turísticas en torno a Gaudí y el Park Güell

Para realizar un análisis de la estrategia turística que otorgó valor al parque, es necesario
partir de que la ciudad de Barcelona; esta, es una de las ciudades más visitadas del
mundo, por lo que el propio acto de las entidades turísticas (Guías turísticos nacionales
e internacionales, casas de renta, AIRBNB, hoteles etc) y las autoridades
gubernamentales, configuraron el espacio geográfico para que esto fuese posible.

En este sentido, a partir del siglo XX los distintos entes promocionales van a comenzar
a trabajar en favor de la ciudad como destino turístico, y dentro de esta estrategia, las
obras de Gaudí serán un pilar importantísimo. Las primeras técnicas promocionales que
se usan con fines turísticos son los carteles:

En estos tres ejemplos se aprecia como se trata de posicionar a la ciudad como un


destino interesante a visitar, y además resaltar que se utiliza la obra más icónica de
Gaudí, demostrando que desde estos años ya las obras de este artista eran una referencia
turística. Estos hechos tan tempranos confirman la idea de que, a pesar del tiempo, las
estrategias de posicionamiento turístico de un lugar es en parte un acto ideológico y que
por tanto debe acudir a memorias, sentimientos y vivencias para hacer efecto. Las
construcciones modernistas de Gaudí, en especial la Sagrada Familia, La casa Milá y el
Park Güell fueron los tres elementos distintivos en estos años en los que se comienza a
poner en valor los atributos de dichas construcciones.

Durante los años de guerra civil y dictadura la actividad turística de la ciudad como es
de esperar quedó estancada. Según (Rubio, 2020, pp.18), durante esta época el turismo
cultural estuvo en decadencia, y ponderó la actividad de sol y playa. Por su parte
(Afinoguénova, 2010) durante el tiempo de dictadura, las políticas turísticas de la
ciudad estarán vinculadas en todo momento con el interés de Franco, por lo que la
misma estará limitada a contribuir a la exaltación del régimen. Esto comenzaría a
cambiar con el advenimiento de la transición a la democracia y el cambio que vino con
esta.

Durante esta etapa, es de destacar que el parque, luego de ser adquirido por el
Ayuntamiento de Barcelona, se utilizó como espacio ciudadano. El Park Güell pasó a
ser un parque municipal que era a menudo visitado por múltiples personas, no solo
nacionales y miembros de la comunidad, sino también por gran número de turistas que
se sentían atraídos esencialmente por la influencia gaudiana.

En 1984 ante el auge del turismo a Barcelona y la importancia que alcanza la obra de
Gaudí en el mundo, el Park Guell es declarado Patrimonio de la Humanidad por la
UNESCO. Con esta declaración comienza el uso intensivo del parque con fines
turísticos. Esta tendencia se acrecentó con la esquematización del tema Gaudí como
estrategia de marqueting, como muestra están varios de los slogan de la época:

“Por encima de la obra Gaudí” (Alemania); “Una Ciudad espectáculo” (Francia);


“Barcelona la catalana orgullosa” (Francia); “La Ciudad misteriosa, maravillosa,
miraculosa y sofisticada” (Estados Unidos); “Barcelona, la Ciudad más europea de
España” (España); “La Barcelona de Gaudí” (Estados Unidos); “Un paseo con Gaudí”
(Itália); “Un sueño increïble a medio terminar” (Estados Unidos); “La Ciudad del
cambio” (Alemania); “Barcelona: Gaudí y el Modernismo catalán” (Japón)3

Evidentemente se pretende establecer para la ciudad de Barcelona la marca Gaudí, y con


esta se impulsa inevitablemente la visibilidad de sus obras incluida el parque. A este
impulso se le puede sumar la importancia de que España fuera la auspiciadora de los
Juegos Olímpicos de Barcelona lo que sin dudas la situó en la mira de todos. Como se
puede apreciar en el párrafo anterior la estrategia que se comienza a desarrollar tiene a
Gaudí como eje central por lo que tanto las obras que se encuentran en el centro
neurálgico de la ciudad como las que se encuentran más alejadas (Park Güell) van a
situarse dentro de los puntos de interés de los visitantes.

El nuevo milenio y la controversia del Park Güell

3
Barcelona dossier de prensa internacional: Colaboraciones de turismo de Barcelona, primer semestre
2000. Tomado de (Rubio, 2020, pp.20)
A partir del nuevo milenio la estrategia turística que va a seguir el ayuntamiento de la
ciudad va a girar en torno a la figura de Gaudí. El gobierno municipal va a llevar a cabo
en el 2002 el “año Gaudí” con el objetivo de celebrar el 150 aniversario del natalicio del
afamado arquitecto. Este evento, en mi opinión va a dar continuidad a la
esquematización del tema Gaudí como principal atractivo turístico de la ciudad.

A su vez, la cantidad de visitas que recibe el parque en estos años se incrementa


exponencialmente dando comienzo a la gran controversia del parque, pues ante la
desmedida visita de turistas y nacionales comienzan a aparecer problemas asociados a
este fenómenos como la movilidad, el over-tourism, el excesivo comercio y el
incivismo. En el año 2007 ocurre un hecho delictivo en el que se trata de destruir con
una barra de hierro la icónica salamandra del parque. Como consecuencia, la prensa y
muchos historiadores y arquitectos comienzan a insistir sobre la protección del
inmueble

Antes estas presiones el ayuntamiento de Madrid, a través de un proceso de estudio de


la afluencia de público decide limitar la entrada al parque. En este sentido es importante
señalar que este estudio no se hizo público por lo que en su momento se llegó a criticar
que la decisión estuviese movida debido a intereses económicos, más allá de un interés
de conservación.

Sin embargo, una vez concluido esta fase se llevo a comisión pública todo el proyecto
de remodelación del parque bajo el nombre de “Comisión Park Guell”, mediante el cual
se incluyó tres aspectos fundamentales:

1- Ordenar los usos del parque para adecuar los espacios y servicios a todos los
usuarios (visitantes y vecinos)
2- Mejorar el conocimiento y la presentación del parque desde las perspectivas de
la sostenibilidad y la cultura
3- Mejorar la gestión general del parque y de los públicos a través de un plan de
gestión

En este sentido la comisión buscaba llevar a cabo un proyecto integrador tratando de


encontrar un equilibrio entre turismo y patrimonio. Aunque las intenciones fueron
loables, lograr el equilibrio visitantes-bien patrimonial es en extremo difícil y el
proyecto se va a enfrentar a varios problemas entre los cuales estuvo el posible desalojo
de vecinos que vivían cerca del parque y la entrada gratuita a personalidades o a la
vecindad.

Los conflictos entre los vecinos y los intereses del ayuntamiento de Barcelona
continuaron agudizándose al punto de que en 2009 quedó vetado el proyecto de limitar
el parque. En los dos años no fue posible un punto en común entre todos los intereses
económicos, sociales, políticos y culturales involucrados en el proyecto. Sin embargo, la
destrucción del parque y la denuncia en periódicos locales y nacionales continuaron
debido a la acción invasiva del turista.

Link al video de vecinos protestando por la privatización del parque.

https://www.lavanguardia.com/vida/20110410/54138704381/vecinos-y-trabajadores-
del-parc-guell-protestan-contra-su-privatizacion.html

Es importante destacar que debido a las particularidades del parque resultaba muy difícil
protegerlo siendo un espacio abierto y que además en palabras de la propia Alcalde de
Medio Ambiente de este tiempo “hay que hacer un cambio cultural: de ir de visitante a
un parque, a ir de visitante a un monumento mundial” (Bonet, 2010). Esta demora en la
actuación para preservar el parque produjo que en lo adelante se agudizaran los
fenómenos asociados a la acción del turismo, en su versión más oscura:
Con el cambio de gobierno comienza una nueva negociación por la limitación del
parque. Para (Arias, 2016) el nuevo gobierno va a llevar a cabo una negociación
dinámica en la que la “política” se hace notar. Para comenzar este autor define varias
pautas que se tomaron en esta negociación en donde la “protección patrimonial” pasó a
un segundo plano y primó la “movilidad” y “negociación” de intereses de las partes. El
proceso (escabroso) se fue haciendo por etapas progresivas en donde se abordaron todos
los intereses implicados entre estos comerciales y económicos, territoriales, de acceso y
de inmuebles.

Otra táctica usada por el gobierno y el ayuntamiento de Barcelona fue la utilización de


un enemigo único y común de las partes, el turista. Se planificó también un desvío de la
ganancia que contrajese el parque a través de las visitas turísticas con el objetivo de ser
reinvertidas en los barrios colindantes y en la ciudad. Con esta última estratagema,
quedó prácticamente zanjado el asunto y se logró finalmente la aprobación del decreto
de limitación del parque.

Con respecto a esto se debe señalar, que la cuestión patrimonial no fue en ningún
momento predominante en la negociación, esto no quiere decir en mi opinión que a esta
no se le diera importancia por parte de las autoridades, si no que la salida de la cuestión
patrimonial de las diferentes etapas de negociación fue parte de la estrategia llevada a
cabo. Además, la negociación, movilidad y concesiones, no están alejados de los
procesos de protección del patrimonio, sino que son una parte inherente de dichas
negociaciones políticas.

Principales problemas y retos a los que se enfrenta el parque en la actualidad

Con la limitación del parque, su conservación, control y puesta en valor mejoró


notablemente. Las dos últimas décadas se ha caracterizado por el incremento del
turismo, y la ciudad de Barcelona se catapultó hacia los primeros puestos dentro de las
ciudades más visitadas, continuando con el legado de la marca Gaudí.

El principal problema que se mantiene hoy día es el masivo arribo de turistas a la ciudad
y de visitantes al parque. La paradoja que existe en el bran reto de dar promoción a la
vez que se intenta preservar el parque como bien patrimonial. También queda latente el
reto de dar promoción al parque a la misma vez que se intenta mantener su valor y uso
social por parte de los barrios aledaños.

Debido a esto las medidas de protección con respecto al parque no han podido sólo
centrar su atención en el área patrimonial, sino que han tenido que abordar una gama
mucho más amplia para de este modo poder integrar a todo el entramado urbano
relacionado con el parque, así como a los factores externos que de una forma u otra
escapan al control gubernamental como pueden ser los turoperadores, el tiempo de
estancia de los turistas entre otros fenómenos.

Otro de los retos a los que se enfrenta la dirección del parque en particular es al control
de lo que se denomina por algunos autores como fenómenos silenciosos o subyacente a
los bienes patrimoniales, y no es más que toda la serie de actividades comerciales y de
venta que se relaciona con el parque y sus alrededores. Actualmente proliferan los
pequeños negocios que utilizan la imagen y marca del parque para establecer sus
negocios como pueden ser ventas de souvenires, venta de viajes guiados y hostelería. En
este sentido, creo que el reto más importante sería controlar que esos establecimientos
mantengan y no desvirtúen los valores culturales y patrimoniales que representa el Park
Güell.

Se debe resaltar que a partir de 2017 se creó un Plan Estratégico para el Park Güell en el
cual se exponen como principales objetivos “un nuevo modelo de gobernanza que busca
la coordinación e implicación de la diversidad de operadores municipales implicados en
la gestión del parque, de sus vecinos y también de las entidades a través del grupo de
4
impulso y seguimiento, los grupos de trabajo u otros espacios y mecanismos.” Lo
positivo de este nuevo plan es que incluye dentro del proceso a una sección de trabajo
de patrimonio.

Trabajo patrimonial y buenas prácticas.

El grupo de patrimonio y cultura compuesto en febrero de 2019 se reconoce al Park


Güell, no solo como patrimonio de la humanidad, sino como un espacio de convivencia
y de promoción social de visitantes y vecinos. Este grupo de trabajo tiene como
principal objetivo el de formar una propuesta conjunta de actividades y la elaboración
de un nuevo discurso museográfico, tanto de la zona regulada como de la monumental.

Gracias a este grupo de trabajo se ha logrado la rehabilitación del mirador sobre la


bajada de la Glòria; una nueva señalización del parque permitiendo la homogenización
de estas; mejorar el camino de la Pressió, acondicionamiento del área para niños entre
otros. Además, se han mejorado las medidas de seguridad en el parque, así como la
limitación a algunos monumentos del mismo los días de mayor afluencia al parque.

Un aspecto a destacar es el sistema creado con el objetivo de promocionar el parque el


“Gaudir Més”. Este es un sistema de registro virtual mediante el cual los ciudadanos de
Barcelona se pueden registrar y luego hacer uso de diversos espacios patrimoniales de la
ciudad de manera gratuita, entre estos del mismo parque.

Otras de las buenas prácticas que se ejercen en el Park Güell y que es impulsada por el
ayuntamiento de Barcelona y la comisión de patrimonio del parque es el plan director de
infraestructuras y servicios. El mismo impulsado con un presupuesto de 120 mil euros
ha logra do llevar a cabo diversas restauraciones como la de la sala Hipóstila, los bancos
exteriores y los viaductos. Entre las principales actividades se pueden mencionar la
4
Tomado de Secretaría Técnica del Park Güell:
https://parkguell.barcelona/sites/default/files/memoria/ParkGuell_memoria_web_es_2018-2019.pdf
sustitución de metales oxidados que deforman el trencadis del techo de la sala y el
cambio de los azulejos del trencadis de bancos y techo de la sala Hipóstila que
presentan fisuras debido al deterioro del paso de los años.

Por último, el grupo de patrimonio también se ha encargado de administrar y


acondicionar algunas de las áreas aledañas al parque como pueden ser el acceso a él a
través de las escaleras eléctricas; la coordinación de actividades literarias y culturales
con las escuelas de las 5 comunidades aledañas al parque; la reestructuración del sitio
web del parque ; y responsabilizar a cada entidad gubernamental de Barcelona con
actividades culturales que involucren a la ciudadanía como al Ayuntamiento de
Barcelona; Museo de Historia de Barcelona y Municipalidad de Barcelona.

Conclusiones

Las obras de Gaudí en Barcelona son un testimonio del legado arquitectónico


excepcional de este genio y representan tanto la cultura española como la humanidad en
su conjunto. La designación de la UNESCO del Park Güell como Patrimonio de la
Humanidad no solo tuvo un impacto cultural, sino también otras implicaciones. Por un
lado, atrajo la atención de diversos visitantes hacia el sitio, lo que puede ser beneficioso
y perjudicial a la vez; y por otro promueve su conservación y puesta en valor.

La historia del Park Güell es interesante en cuanto a que significó un fracaso como
proyecto económico, pero todo un legado patrimonial para la humanidad. El parque
nunca llegó a ser el lugar de retiro espiritual para el que fue creado, no obstante, el
genio intelectual y arquitectónico de Gaudí permitió que años después fuera adquirido
por el ayuntamiento de Barcelona, como muestra del modernismo arquitectónico de la
época.

El parque resalta por las particularidades arquitectónicas pertenecientes al modernismo


catalán con Gaudí como principal ejecutor. De este modo contribuyeron a su
nombramiento como patrimonio la implementación de técnicas como el trencadís, la
reutilización de materiales, el aprovechamiento de la luz y el aprovechamiento del
entorno natural como recurso.

Resulta paradójico que, aunque se espera que el nombramiento como Patrimonio de la


Humanidad garantice la protección del parque, esto no ocurrió de esa forma. La relación
entre Patrimonio y Turismo es intrínseca y compleja, y en el caso del Park Güell ha
sido motivo de muchas disputas a lo largo de su historia.

La gestión turística del parque resultó compleja, sobre todo con la entrada del nuevo
siglo y el arribo del turismo masivo a Barcelona. La directiva del parque, dividida en
tres secciones fundamentales, tuvo que llevar a cabo varios planes estratégicos en donde
primó la negociación y los resultados económicos por encima del bienestar del inmueble
hasta lograr un equilibrio entre la demanda del turismo y las necesidades de las partes
más interesadas en la privatización del parque.

No obstante, estos problemas, es necesario destacar como positivo el plan de actuación


que se viene desarrollando desde 2019, el cual ha logrado cambios significativos en la
gestión turística y patrimonial del parque. En este sentido se ha logrado posicionar al
parque como un centro social y cultural, digno de visitar a pesar de estar alejado con
respecto a las restantes obras de Gaudí.

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