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Oscar Yanes

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Oscar Armando Yanes González nació en el cerro Buenos Aires,

en Puente Hierro, Caracas, el 25 de abril de 1927. Estudió en la Escuela


Zamora, en la parroquia San Juan, y luego fue a la primera escuela formal
de periodismo que hubo en Venezuela, la Universidad Libre “Augusteo”,
fundada en octubre de 1941 por Monseñor Rafael Lovera. Ya desde niño
era lector y, de hecho, en alguna ocasión dijo que el día más importante
de su vida fue aquel en que conoció la Biblioteca Nacional

A los 13 años tenía la fantasía de ser psiquiatra, pero un aviso en "El


Universal", donde se promocionaba la recién abierta Escuela de
Periodismo le hizo cambiar de proyecto. Oscar Yanes no hizo un
bachillerato muy completo, puesto que el 16 de septiembre de 1941, a los
14 años, se inició como reportero en el diario Últimas Noticias y un año
después ya era Jefe de Redacción del popular periódico. Al completar los
estudios en El Augusteo, se convirtió en profesor de la primera promoción
de la Escuela de Comunicación Social de la Universidad Central de
Venezuela y también enseñó en la Universidad Católica Andrés Bello. A
los 25 años, fue nombrado director del diario La Esfera, cargo que ocupó
hasta 1962. Fue director también de las revistas Élite y Bohemia.

Oscar Yanes publicó su primer libro cuando todavía no tenía 20


años: “Carlos J. Bello, el sabio olvidado” (1946). A este le siguieron: “Vida
íntima de Leo” (1948). “Cosas de Caracas” (1967); “Cosas del
mundo” (1972); “Por qué yo Maté a Delgado Chalbaud, las Confesiones
de Pedro Antonio Díaz” (1980); “Amores de última
página” (1991); “Memorias de Armandito” (1992)

Ya en los años ‘60 compartía el periodismo con la televisión. En 1966, fue


enviado a Vietnam como corresponsal de guerra, por dos meses, tiempo
en el que hizo seis reportajes que fueron distribuidos por toda América
Latina: “La Guerra en el Mar”; “La Guerra en el Aire”; “La Guerra en la
Selva”; “El Vietcong”; “La Religión”, y “La Mujer Vietnamita”. Estos
reportajes abordaban diferentes aspectos de la guerra, y mostraban la
crudeza de los conflictos bélicos y la necesidad de informar con
objetividad y veracidad. Para muchos, esta hazaña fue la que hizo que
realmente se empezara a acrecentar el tamaño de la huella que estaba
dejando.

A finales de la década de los ‘60, contrae matrimonio con la actriz


Agustina Martín, con la que tuvo cuatro hijos.
Desde 1974 fue diputado del Congreso de la República por el
partido Copei, hasta 1989, cuando pasó a ser presidente de la Comisión
Permanente de Medios de Comunicación Social de la Cámara de
Diputados. En su labor política, siempre defendió la democracia y la
libertad de expresión, aspectos a los que también daba mucha
importancia en su faceta como periodista. También escribió varios libros,
todos relacionados con el periodismo y la política venezolana.

Pero sin duda, la faceta por la que Óscar Yanes es y será recordado es
por su labor como periodista y comunicador, y no es para menos,
después de todo, fue uno de los pioneros en el periodismo televisivo, en
particular con sus entrevistas frente a las cámaras.

Su programa “Así son las cosas” fue todo un referente en la televisión


venezolana y que lo hizo crecer muchísimo en popularidad este se
transmitía por Venevisión desde 1994 hasta 2008. En dicho espacio
realizaba investigaciones históricas que revelaban acontecimientos
desconcertantes en la sociedad venezolana, siempre con el objetivo de
informar con veracidad y objetividad.

Por los mismos años hacía entrevistas en televisión a políticos, en clave


de fuerte confrontación, como “La silla caliente” haciéndose famoso con
su típica frase "Chúpate esa mandarina" este tuvo su pico de audiencia en
1998, cuando recibió al entonces candidato a la presidencia, Hugo
Chávez. Allí puede verse el portento de periodista que era Oscar Yanes,
quien no se engañó con el golpista del ‘92 y cuyo proyecto de
constituyente no solo rebatió con admirables argumentos, basados en
hechos de la historia de Venezuela, sino que vaticinó con gran tino las
consecuencias que el ilegal instrumento tendría para Venezuela.

Los espacios televisivos de Oscar Yanes fueron: “Así son las


Cosas” (Premio Monseñor Pellín 1997); “La Silla Caliente” (1998); “La
Mañana Caliente” (1999); “Oscar Yanes en la Guataca” (2000); “Lo que
Usted No Sabe” (2006).

Ganó en tres ocasiones el Premio Nacional de Periodismo, el Premio


Monseñor Pellín y el Primer Premio de la Asociación de Escritores de
Venezuela en el concurso de biografías de los venezolanos famosos, por
su obra titulada «Carlos J. Bello, el Sabio Olvidado». También ganó el
premio Silver Book en 1992, otorgado por Editorial Planeta para el libro de
mayor circulación del año.
En enero de 1996, muere su esposa al caer del décimo piso del
edificio Country, en Chacaíto, donde residía con él, en ese momento
Oscar Yanes era diputado.

Hacia el final de su vida escribió la obra de teatro “Éramos felices y no lo


sabíamos: Un show para morirse de la risa”, que llegó a escena
con Claudio Nazoa, Kiko Bautista y Rolando Salazar.

Desde el 2012 hasta el final de sus días se desempeñó como asistente a


la vicepresidencia ejecutiva de Venevisión.

Sin duda alguna, Óscar Yanes fue una persona que dejó una huella
imborrable en el mundo del periodismo y la política en Venezuela. Falleció
el 21 de octubre de 2013 a los 86 años de edad, pero su inspirador
compromiso con la verdad y la justicia hace que incluso hoy en día, su
labor profesional sirva como ejemplo a todos los latinoamericanos y,
especialmente a los venezolanos a los que les apasiona el periodismo.

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