Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Conceptos Basicos de La Evaluacion Psico

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 6

Conceptos básicos de la evaluación psicológica.

Una prueba psicológica es una muestra de conducta, en esencia, es una medida


objetiva y estandarizada de una muestra de conducta. La función de las pruebas
psicológicas ha sido medir las diferencias entre individuos o entre las reacciones
de la misma persona en circunstancias distintas. Algunas se concentran en los
rasgos cognoscitivos o las habilidades, que pueden ir de aptitudes generales a las
habilidades sensoriomotoras muy especializadas que se requieren para realizar
una operación manual sencilla. Otros instrumentos miden las variables afectivas o
de personalidad, como los rasgos emocionales o motivacionales, la conducta
interpersonal, los intereses, las aptitudes y los valores. En un momento "racional-
especulativo", encontramos las raíces de la evaluación psicológica en disciplinas
tales como la filosofía y la medicina. Es la filosofía de Aristóteles en su doctrina
hilemórfica (Physiognomica ) la que posibilita una primera aproximación al
diagnóstico psicológico a través de la interpretación del carácter y hábitos
psicológicos a partir de las características corporales. Otras elaboraciones
diagnósticas se enraizaron en corrientes filosóficas como el racionalismo
cartesiano o el empirismo. La tercera raíz filosófica que aparece con el empirismo
tiene en Thomas Wright (1601) su mayor exponente ya que sustenta que son los
hechos externos, las acciones, sin mediaciones inferenciales las unidades de
análisis sobre las que debe basarse la evaluación psicológica.

Durante los siglos XVIII y XIX los avances de la medicina y la influencia de


corrientes filosóficas como el empirismo y el positivismo ayudan a la constitución
de la Psicología como disciplina científica y a la evaluación. La Evaluación
Psicológica surgirá entroncada con la Psicología Diferencial, dada la necesidad de
evaluar las características individuales diferenciales presentes en los seres
humanos; y compartirán la paternidad de la constitución del Psicodiagnóstico
como disciplina científica: Francis Galton, McKeen Cattell y Alfred Binet. F. Galton
(1882-1911) utilizó procedimientos de evaluación de algunas funciones
psicológicas creando pruebas y aparatos para medir funciones psicológicas por
ejemplo tiempos de reacción, y su depuración del método de correlaciones en
1877 es considerada como hito en el origen de los tests. Es McKeen Cattell (1861-
1934) en 1890 quien acuña el término "test mental" cuyo objetivo es ser "un
sistema uniforme que permite comparar y combinar en lugares y momentos
diferentes", la medida de las funciones mentales (Cattell, 1890, p.374). La
evaluación psicológica comienza a esbozarse en 1896 cuando publica un estudio
realizado con dos baterías de tests para medir aspectos psicológicos y realiza
trabajos no solo sobre funciones perceptivas sino también sobre procesos
superiores como memoria y asociación verbal.
En relación con la Evaluación Psicológica, A. Binet (1875-1911) define los tres
grandes problemas de la Psicología individual: estudiar las diferencias individuales
de los procesos psicológicos, estudiar las diferencias psíquicas en individuos
aislados o en grupos de individuos y estudiar las relaciones de diferentes procesos
psíquicos en un mismo individuo. Así, centra la instrumentación de su metodología
en los "tests mentales" cuyas reglas fundamentales serán:

1) Que los métodos sean simples y no lleven mucho tiempo

2) Que los medios de determinación sean independientes de la persona del


examinador

3) Que puedan compararse los resultados obtenidos por un observador con los de
otro.

En 1903, publica el primer test de inteligencia, hecho de influencia positiva a


diferencia de la influencia negativa que tuvo el utilizar una terminología "médica"
con constante referencia al diagnóstico de la inteligencia que forjó la aceptación
del término "psicodiagnóstico", con las consecuencias correspondientes en el
objeto de ésta disciplina.

Conceptos

Evaluación psicológica: es una disciplina dinámica que ha evolucionado y


avanzado desde el psicodiagnóstico. Ha tenido enfoques, técnicas, objetivos,
aplicaciones e interpretaciones y denominaciones. Se ocupa del estudio científico
del comportamiento (a los niveles de complejidad necesarios) de un sujeto (o un
grupo especificado de sujetos) con el fin de describir, clasificar, predecir y, en su
caso, explicar y controlar tal conducta"

“La evaluación psicológica nos propone un interesante desafío que consiste en


integrar conceptualmente aportes de múltiples enfoques psicológicos, con la
posibilidad de utilizar los últimos desarrollos tecnológicos puestos al servicio de las
crecientes demandas del medio en la necesidad de dar solución a diversos
problemas humanos centrándose en una perspectiva totalizadora del hombre y su
entorno. La Psicología delimita su objeto de estudio y con ello determina el tipo de
evaluación posible de realizar a nivel de los contenidos y modos de llevarla a
cabo. También, influye la concepción teórica de la psicología en sus
determinaciones evaluativas en la medida en que la aceptación de unos supuestos
teóricos determinan el modo de interpretar los resultados de las evaluaciones
psicológicas. Si bien es cierto que en el origen de algunas alternativas teóricas se
planteó un específico modo de evaluación, no es menos cierto que con el
desarrollo de cada teoría, al ampliar el foco de aplicación se ha ampliado la
manera de evaluar y psicodiagnosticar.”

La denominación de evaluación psicológica ha ido sustituyendo a la denominación


de test psicológicos o medición, debido a que los contenidos de esta disciplina han
ido evolucionando desde sus inicios hasta la actualidad. Desde un punto de vista
semántico, el término “Evaluación psicológica” es la traducción de
“assessment”=”valoración”. Evaluación o assessment se refiere al proceso y
herramientas en el análisis psicológico de los sujetos humanos, y valoración se
utiliza para definir el conjunto de actividades por las que se llega a establecer el
mérito, valor o eficacia de algo, generalmente referido a programas o
intervenciones. La valoración sería el continuo de la evaluación.

La evaluación psicológica estudia los principios generales aplicables a la conducta


humana, utilizando los mismos métodos que la Psicología científica. Así es una
ciencia claramente nomotética ya que estudia cómo se cumplen y se organizan los
principios psicológicos básicos en un sujeto o grupo de sujetos. Será así un
proceso o sucesión de pasos destinado a recabar y valorar la información
necesaria para poder llegar a tomar decisiones racionales con respecto al sujeto o
grupo que se estudia. Goldstein y Hersen(1990) en su Handbook of Psychological
Assessment afirman que assessment implica que hay muchos caminos para
evaluar las diferencias individuales, uno de ellos serían los tests, pero también
podría utilizarse la entrevista, la observación de la conducta en los ambientes
naturales y el registro de variables psicofisiológicas. Esta diversidad que
caracteriza a la evaluación psicológica también está presente en sus objetivos; así
entre estos se señalan la identificación de conductas problemas y sus relaciones
causales, el diagnóstico, la evaluación de los resultados del tratamiento, los
peritajes jurídicos y la predicción de riesgos de futuras conductas problemas.

Psicodiagnóstico: Recogida de información que procede de procedimientos no


experimentales. Se asienta originalmente en modelos proyectivos y su
procedimiento principal de validación es en relación con un criterio previo. Se
apela a juicios globales (no analíticos) y no cuantitativos. Su compromiso con un
modelo médico le lleva a insistir en los aspectos negativos del funcionamiento
psicológico. Es el proceso por el que utilizando distintos medios alcanzamos un
conocimiento del sujeto, que nos permite describir su personalidad.

El término psicodiagnóstico surgió del ámbito médico-psiquiátrico en el que el


médico asumía el papel del actual psicólogo. Se empleó por primera vez en Suiza
en 1921 por Rorschach, quien hizo el primer acercamiento cualitativo al estudio de
la personalidad, a través de una tarea en la que predominaba la observación. Se
trataba de una monografía sobre las técnicas de interpretación de manchas de
tinta sin formas determinadas. Su origen etimológico significa “aprender a
conocer”. Las primeras definiciones de psicodiagnóstico provienen de una
tradición médica, e identifican las alteraciones psicológicas como signos de
enfermedad o trastorno orgánico que se detectan a través de pruebas cualitativas
de interpretación libre, técnica utilizada en sus inicios para el estudio de la
personalidad y del inconsciente. En estas primeras definiciones no se tienen en
cuenta los aspectos funcionales ni cuantitativos, ni contempla el estudio de grupos
u organizaciones ni los aspectos positivos de los individuos.

Test psicológicos: procedimiento sistemático para observar la conducta y


describirla con ayuda de escalas numéricas o categorías establecidas. Frente a la
concepción anterior de ‘psicodiagnóstico’, encontramos otra de orientación
funcionalista y psicométrica, ‘test mental’. La expresión testing se identifica casi
exclusivamente con la elaboración de tests, validación, aplicación e interpretación
de los mismos. Se rechaza la introspección, se propicia la búsqueda de
dimensiones tanto positivas como negativas del sujeto, la interpretación de signos,
y el concepto de rasgo como dimensión permanente del sujeto. Este cambio en la
concepción del “psicodiagnóstico” basado en la aplicación de pruebas, dio lugar a
una nueva especialidad de la psicología: la Psicometría, cuya función principal es
el desarrollo de métodos cuantitativos para el estudio de problemas psicológicos.
Desde esta perspectiva el evaluador adquiere un papel de metodólogo. La
identificación de psicodiagnóstico con tests psicológicos suscitó enormes
protestas. La denominación de “tests psicológicos” sirvió como rótulo de nuestra
disciplina presentando distintas acepciones en función del aspecto que cada autor
ha resaltado. Se produjo en ese momento una equiparación de la evaluación
psicológica con los procedimientos de recogida de información, y más
concretamente, con los tests.

Supuestos que caracterizan a los “tests psicológicos” (Pelechano, 1980, 1981,


1988): ‚

 Tests psicológicos: elaboración de pruebas, validación, aplicación e


interpretación de las mismas. ‚
 El modelo científico básico de construcción y corrección de los tests es el
asociacionismo. ‚
 Las puntuaciones de los tests son interpretadas como síntomas o signos de
algo real y tangible. ‚
 Los tests son susceptibles de aplicación social inmediata. ‚
 Se ha defendido la invariabilidad de las dimensiones diagnosticadas. ‚
 Psicometría aplicada. ‚
 Prima lo cuantitativo.
No obstante, la evaluación es más que la mera aplicación de tests, ya que
conlleva la integración y la valoración de la información recogida (Cronbach,
1990).

Valoración: La “evaluación” y “valoración” son sinónimos, presentan cierta


relación y puntos coincidentes en psicología, pero a su vez implican conceptos
diferentes. Evaluación se refiere al proceso y herramientas en el análisis
psicológico de los sujetos humanos. Esta se caracteriza por la recogida de
información sobre el caso, selección de las variables relevantes, de las técnicas y
procedimiento a aplicar, y de la selección de un determinado tratamiento.
Valoración sirve para denominar aquel conjunto de actividades por las que se llega
a establecer el mérito, valor o eficacia de algo, generalmente referido a programas
o intervenciones. Es la segunda parte del proceso experimental, se aplica y se
valora la intervención con el fin de verificar las hipótesis funcionales sobre el caso.
La valoración se define como "la sistemática investigación del mérito, valor o éxito
de concretos tratamientos, intervenciones o programas llevados a cabo con el fin
de producir cambios comportamentales en el contexto social".

Estandarización: la estandarización supone la uniformidad de los procedimientos


en la aplicación y calificación de la prueba. Para asegurar la uniformidad de las
condiciones de prueba quien la elabora proporciona instrucciones detalladas para
la aplicación de cada nuevo instrumento. La formulación de instrucciones se
extiende a los materiales exactos que debe emplearse, los límites de tiempo,
instrucciones orales, demostraciones previas, formas de manejar las dudas de los
examinados y cualquier otro detalle de la situación de examinación. Es importante
también el establecimiento de normas siendo éstas el desempeño de lo normal o
promedio. Para los tests de personalidad, las normas se establecen
esencialmente de la misma manera que para los de aptitud.

Confiabilidad: ¿Qué tan buena es la prueba? El término confiabilidad significa


básicamente consistencia. La confiabilidad de una prueba es la consistencia de las
puntuaciones obtenidas por las mismas personas cuando se les aplica la misma
prueba o una forma equivalente. Para comprobar la confiabilidad se comparan las
puntuaciones obtenidas por las mismas personas en diversos momentos con
diferentes conjuntos de reactivos, examinadores o calificadores, o en cualquier
otra condición de examinación pertinente. Es esencial especificar el tipo de
confiabilidad y el método empleado para determinarlo, ya que la misma prueba
puede variar en esos diferentes aspectos. También hay que informar del número y
la clase de personas con las que se hizo la verificación.

Validez: Es el grado con el que verdaderamente mide lo que tiende medir la


prueba psicológica. La validez proporciona una comprobación directa de qué tan
bien cumple una prueba su función. Por lo general, para determinarla se requiere
de criterios independientes y externos de lo que la prueba intenta medir. Durante
el proceso de validación, la prueba debe aplicarse a un grupo grande de
estudiantes en el momento de su admisión. Sería más preciso definir la validez
como el grado en que sabemos qué es lo que mide la prueba. La interpretación de
las puntuaciones sería indudablemente más clara y menos ambigua si las pruebas
recibieran su nombre de acuerda con las relaciones empíricas que las validaron.
Se observa una tendencia en esta dirección en nombres como “prueba de
evaluación académica” y “prueba de clasificación de personal” en lugar de títulos
tan vagos como “test de inteligencia”.

Medición objetiva de la dificultad: la aplicación, calificación e interpretación de


los resultados serán objetivas en la medida en que sean independientes del juicio
subjetivo del examinador. La objetividad es la meta de la elaboración de
instrumentos y casi todos la demuestran en un grado razonablemente elevado.
Otras condiciones que permiten señalar a las pruebas psicológicas como
objetivas. La determinación del grado de dificultad de un reactivo o de toda la
prueba se basa en procedimientos objetivos empíricos.

Medición: En el contexto de la testología o test psicológicos se habla de medida o


medición psicológica. Este término hace referencia a todas las operaciones de
medida que se llevan a cabo en los tests psicológicos y los resultados de los
mismos. La principal característica que diferencia la “medición” del
“psicodiagnóstico”, es la cuantificación o medida aplicada a la psicología. La
medición es una técnica que permite tener precisión en las restantes operaciones
de comparación que el investigador ha de realizar. En el campo de la psicología, la
medición que se realiza es sobre las variables psicológicas, por lo que el proceso
no puede ser lineal, sino que se trata de un proceso que relaciona dos mundos
distintos, el teórico o abstracto y el real o empírico.

Modelos en evaluación psicológica:

Según la propuesta clasificatoria de R. Fernández Ballesteros (1983) tendremos


centrada a la evaluación psicológica en tres ejes: el sujeto, la teoría y las técnicas.
Otra alternativa sería sintetizar los principales paradigmas evaluativos ya que la
dificultad por encontrar una definición única de Evaluación proviene del énfasis
que puede darse a aspectos diversos, en función de los objetivos de medida y de
las opciones teóricas asumidas. Al referirnos a "modelo" queremos significar un
constructo epistemológico en el que se encuentran implicados tanto los datos
empíricos, como los postulados teóricos que posibilitan su adecuada
contextualización, Torres (1988).

También podría gustarte