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Actualización en El Diagnóstico Radiológico de La Otosclerosis

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Radiología.

2016;58(4):246---256

www.elsevier.es/rx

ACTUALIZACIÓN

Actualización en el diagnóstico radiológico


de la otosclerosis
J. Gredilla Molinero a,∗ , M. Mancheño Losa b , N. Santamaría Guinea a ,
N. Arévalo Galeano a y M. Grande Bárez a

a
Unidad Central de Radiodiagnóstico, Hospital Universitario Infanta Leonor, Madrid, España
b
Servicio de Otorrinolaringología, Hospital Universitario Infanta Leonor, Madrid, España

Recibido el 16 de noviembre de 2015; aceptado el 30 de abril de 2016


Disponible en Internet el 3 de junio de 2016

PALABRAS CLAVE Resumen La otosclerosis es una otodistrofia primaria del hueso temporal que produce una
Otosclerosis; hipoacusia de transmisión progresiva. El diagnóstico es generalmente clínico, pero en ocasio-
Tomografía nes es necesaria la realización de una tomografía computarizada multidetector (TCMD), que es
computarizada la técnica de imagen de elección. El objetivo de este artículo es realizar una actualización sis-
multidetector; temática de la utilidad de las técnicas de imagen en el diagnóstico y la valoración posquirúrgica
Resonancia de la otosclerosis, fundamentalmente del papel de la TCMD, con el fin de disminuir el riesgo
magnética; quirúrgico.
Prótesis de estribo © 2016 SERAM. Publicado por Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.

KEYWORDS Update on the imaging diagnosis of otosclerosis


Otosclerosis;
Multidetector CT; Abstract Otosclerosis is a primary osteodystrophy of the temporal bone that causes progres-
Magnetic resonance sive conductive hearing loss. The diagnosis is generally clinical, but multidetector CT (MDCT),
imaging; the imaging technique of choice, is sometimes necessary. The objective of this article is to
Stapes prosthesis systematically review the usefulness of imaging techniques for the diagnosis and postsurgical
assessment of otosclerosis, fundamentally the role of MDCT, to decrease the surgical risk.
© 2016 SERAM. Published by Elsevier España, S.L.U. All rights reserved.

∗ Autor para correspondencia.


Correo electrónico: jgredmol@yahoo.es (J. Gredilla Molinero).

http://dx.doi.org/10.1016/j.rx.2016.04.008
0033-8338/© 2016 SERAM. Publicado por Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.
Actualización en el diagnóstico radiológico de la otosclerosis 247

Introducción En este artículo valoraremos el papel de la radiología en


el diagnóstico de la otosclerosis, así como su utilidad en la
La otosclerosis es una otodistrofia primaria que se carac- disminución del riesgo quirúrgico y en el diagnóstico de las
teriza por una alteración en la remodelación ósea de la complicaciones posquirúrgicas.
cápsula ótica del hueso temporal1---3 . La cápsula ótica está
formada por tres capas con diferente osificación; de ellas,
la capa intermedia presenta típicamente una osificación Diagnóstico radiológico. Papel de la tomografía
endocondral. Por causas desconocidas, en los pacientes con computarizada multidetector
otosclerosis el hueso endocondral es sustituido por hueso
esponjoso desorganizado, menos denso y con mayor compo- La tomografía computarizada multidetector (TCMD) es la
nente vascular, lo cual constituye la fase de otoespongiosis técnica de elección para el diagnóstico radiológico de la
o fase activa. Con la evolución de la enfermedad, en ocasio- otosclerosis4,11---15 . Su sensibilidad varía entre el 80% y el
nes el hueso esponjoso patológico se recalcifica y presenta 95%4,8,11,12,14,16,17 en los estudios más recientes, gracias a las
mayor componente de esclerosis, dando lugar a la fase de mejoras tecnológicas de estos equipos.
otoesclerosis o fase inactiva1,4---6 . Los falsos negativos se deben a focos menores de 1 mm y
Es una enfermedad genética que se hereda mediante un a algunas lesiones en fase esclerosa, de atenuación similar
patrón autosómico dominante, con penetrancia incompleta al hueso normal adyacente1,4,11,18 .
y expresión clínica variable2,3,5,6 . La afectación es bilateral La TCMD preoperatoria permite, en primer lugar, con-
en el 80-85% de los pacientes, presenta predominio feme- firmar el diagnóstico, realizando el diagnóstico diferencial
nino (2:1) y su pico de incidencia es entre la segunda y la con otras patologías que también cursan con hipoacusia de
cuarta décadas de la vida1---3,5,7 . Es más frecuente en los transmisión o mixta, como la fijación de la cadena osicu-
caucásicos5 , con una prevalencia en torno al 0,3-0,4%2 . Aun- lar no otosclerosa, la desconexión osicular, la dehiscencia
que no hay claro consenso, algunos estudios8 confirman que del canal semicircular superior, la dilatación del acueducto
la localización y la extensión de los focos de otosclerosis vestibular, etc. Además, permite identificar factores de mal
condicionan la clínica, y en particular el tipo de hipoacusia, pronóstico y alteraciones anatómicas que puedan dificultar
que presentan estos pacientes. la cirugía, como un nervio facial dehiscente o una platina
El síntoma principal de la enfermedad es una hipoacu- obliterativa.
sia de transmisión progresiva, generalmente bilateral, que Para una óptima caracterización es necesario estanda-
puede estar asociada o no a acúfenos1,3,7 . En ocasiones rizar la obtención de las imágenes. Se realizan recons-
también puede presentarse como una hipoacusia mixta o, trucciones axiales y perpendiculares al plano del conducto
excepcionalmente, neurosensorial pura. semicircular lateral.
El diagnóstico se ha basado clásicamente en la presencia Los cortes axiales son los más útiles para el diagnóstico de
de una clínica compatible en un paciente adulto joven, con la otosclerosis, ya que la ventana oval, la fissula ante fenes-
otoscopia normal y antecedentes familiares de otosclerosis tram y las ramas del estribo se aprecian mejor en este plano,
(tabla 1)4 . y la sensibilidad para la detección de lesiones es mayor en
Para muchos otorrinolaringólogos no es preciso realizar las formas fenestrales13,14,19 (fig. 1).
pruebas de imagen en los casos típicos1,9,10 y el diagnóstico Los cortes coronales permiten valorar una posible dehis-
de confirmación se realiza durante la cirugía, al apre- cencia del segmento horizontal del nervio facial, la altura
ciar focos de otosclerosis en la ventana oval con fijación de la ventana oval, el grosor de la platina del estribo o la
del estribo4,7 . En los casos atípicos (tabla 1) se necesitan
pruebas de imagen para establecer el diagnóstico de confir-
mación preoperatorio10,11 .
El tratamiento de la otosclerosis es fundamentalmente
quirúrgico, mediante la realización de una estapedotomía,
una estapedectomía parcial o completa, y la colocación
posterior de una prótesis de estribo. En casos muy evolucio-
nados puede estar indicado colocar un implante coclear12 .

Tabla 1 Formas de presentación clínica


Clínica típica Clínica atípica
Hipoacusia de transmisión Hipoacusia mixta o
neurosensorial
Afectación bilateral Afectación unilateral
Adulto joven Niños o edad avanzada
Ausencia de reflejo Reflejo estapedial bifásico Figura 1 Anatomía básica de tomografía computarizada de
estapedial peñascos en un plano axial con la localización de la fissula
Antecedentes familiares de Ausencia de antecedentes ante fenestram (flecha larga negra) y de la ventana oval (línea
otosclerosis familiares negra). Cóclea (*), segmento horizontal del nervio facial (líneas
negras paralelas).
248 J. Gredilla Molinero et al.

en la actualidad se considera que ambas son un continuo


más que formas independientes9,19 .

Otosclerosis fenestral

El 70-80% de los casos de otosclerosis fenestral son formas


puras8,14,20 . Se caracteriza por lesiones de otoespongio-
sis, osteolíticas, en la fissula ante fenestram, la ventana
oval, la ventana redonda, el canal del nervio facial y el
promontorio5,19 . La localización más frecuente es en la fis-
sula ante fenestram, una fisura cartilaginosa localizada justo
anterior a la ventana oval (figs. 3 y 4).
La afectación de la ventana oval determina la fijación del
estribo que es la causa de la hipoacusia de transmisión.
Los hallazgos son sutiles y la valoración de esta área debe
ser sistemática en cualquier estudio de TC de peñasco. La
bilateralidad es del 78-85%8,14 . La bilateralidad y la sime-
tría de los hallazgos hacen que la comparación con el lado
Figura 2 Anatomía básica de tomografía computarizada de
contralateral con frecuencia sea de poca utilidad para el
peñascos en un plano coronal. Ventana oval (línea blanca corta),
radiólogo con escasa experiencia en el diagnóstico.
segmento horizontal del nervio facial (contorno en negro),
Cualquier foco osteolítico en la fissula ante fenestram es
espira basal de la cóclea (*), conducto semicircular lateral (fle-
sospechoso de otosclerosis.
cha negra) y estribo (flecha blanca).
En un 2% de los casos, la ocupación de la ventana
oval es completa y entonces se habla de «otosclerosis
obliterativa»1,15 . La obliteración es consecuencia del engro-
presencia de dehiscencia del conducto semicircular superior samiento masivo de la platina del estribo, del crecimiento
(fig. 2). de los márgenes de la ventana oval que casi obliteran el
nicho o de una combinación de ambas1 (fig. 5).
Con menor frecuencia existe como único hallazgo
Hallazgos radiológicos radiológico un engrosamiento difuso de la platina del
estribo1,4,14,19,20 . Veillon et al.20 determinaron que el gro-
La otosclerosis se divide radiológicamente en dos tipos: sor de la platina del estribo en la TC es de 0,48 mm, y que
otosclerosis fenestral y otosclerosis coclear. En general, las son patológicos unos valores superiores a 0,6 mm o una irre-
formas cocleares engloban a la forma fenestral, por lo que gularidad mayor del 50% de la longitud de la platina (fig. 6).

Figura 3 Otosclerosis fenestral. Cortes axiales de cuatro pacientes diferentes en los que se aprecian lesiones osteolíticas típicas
en la fissula ante fenestram (flechas negras).
Actualización en el diagnóstico radiológico de la otosclerosis 249

Figura 4 Otosclerosis fenestral sutil. En la imagen de la izquierda se aprecia una tenue lesión osteolítica (flecha negra), inme-
diatamente anterior a la ventana oval. La imagen de la derecha muestra el área más importante a analizar (contorno en negro) con
el foco de otosclerosis (contorno en blanco).

Figura 5 Otosclerosis obliterativa. Se muestra un corte coronal a la altura de la ventana oval (a). Se aprecian focos de otosclerosis
fenestral que obliteran la ventana oval (flechas blancas cortas). La flecha blanca larga señala un marcado engrosamiento del estribo.
En la imagen de la derecha se observa la anatomía normal con el plano de la ventana oval (línea blanca).

Lagleyre et al.11 compararon los hallazgos preoperatorios interno. Esta forma se conoce como otosclerosis coclear o
de la TCMD con los hallazgos quirúrgicos en pacientes opera- retrofenestral.
dos de otosclerosis. Entre los casos dudosos de otosclerosis La forma fenestral está presente en la práctica totali-
en la TCMD, el engrosamiento focal de la región anterior de dad de las formas cocleares5,13,19 . En nuestra experiencia no
la platina del estribo y el engrosamiento de morfología trian- hemos encontrado casos de otosclerosis coclear aislada.
gular de la rama anterior del estribo fueron los hallazgos más Varía desde muy sutiles focos de otoespongiosis hasta una
frecuentes (83%), con diagnóstico positivo en la cirugía en franca desmineralización del hueso pericoclear. Es típico el
el 94% de los casos dudosos. «signo del halo pericoclear»18 (fig. 7).
La ventana redonda se afecta en un 7-10% de Resulta poco frecuente apreciar focos de otosclerosis
los casos8,16 y generalmente se incluye en las formas adyacentes al conducto auditivo interno en los estudios de
fenestrales1,5,14,18,19 . La sensibilidad para la detección de TC, y generalmente se asocian a formas graves de afectación
focos en la ventana redonda es menor que para los focos coclear11 .
anteriores a la ventana oval11 . En los pacientes con afectación coclear se produce sor-
dera neurosensorial, cuya etiología es controvertida. La
teoría más aceptada relaciona el daño del oído interno con
Otosclerosis coclear o retrofenestral la hialinización del ligamento espiral de la cóclea secunda-
ria a la liberación de enzimas proteolíticas desde los focos
En un pequeño porcentaje de los casos4 la enfermedad evo- de otoespongiosis localizados en el endostio próximos al
luciona y los focos osteolíticos se extienden a lo largo de ligamento1,21 . La TC puede detectar estos focos, aunque su
la cápsula ótica, llegando hasta el promontorio, el canal ausencia no descarta la afectación del oído interno por la
del nervio facial, la cóclea e incluso el conducto auditivo enfermedad.
250 J. Gredilla Molinero et al.

Figura 6 Otosclerosis fenestral con afectación de la platina del estribo en dos pacientes diferentes (a y b, c y d). Se aprecia un
foco de otosclerosis fenestral en la localización típica con extensión a la región anterior de la ventana oval (a); la imagen ampliada
(b) muestra el contorno lesional en blanco. Se observa un foco sutil de otosclerosis en la platina del estribo (c); la imagen ampliada
(d) muestra el contorno lesional.

Figura 7 Otosclerosis coclear florida en dos cortes de tomografía computarizada en un mismo paciente. Se aprecia una extensa
desmineralización ósea pericoclear bilateral con signo del «halo pericoclear» (flechas cortas blancas). Se muestra un foco de
otosclerosis en el conducto auditivo interno en el oído izquierdo (flecha negra).

Existen varias clasificaciones por TC que gradúan la gra- Diagnóstico diferencial


vedad de la otosclerosis. Valvassori, Symons y Fanning, y los
grupos de trabajo de Shin, Rotteveel y Veillon, han estable- El diagnóstico diferencial de esta enfermedad es limitado.
cido varias clasificaciones8,9,20,22---24 , pero ninguna de ellas Es importante conocer la edad del paciente. En los niños
tiene una gran aceptación ni un uso predominante sobre las es muy frecuente la existencia de la hendidura coclear, un
demás. En la práctica clínica, las clasificaciones no son de remanente de la fissula ante fenestram embrionaria cuya
uso mayoritario y es necesario determinar su utilidad clí- frecuencia disminuye con la edad25 (fig. 8): en los menores
nica, si cambian el tratamiento de los pacientes y su valor de 4 años es mayor del 60% y entre los 10 y los 19 años su
predictivo previo a la cirugía4,9 . frecuencia es de alrededor del 20%.
Actualización en el diagnóstico radiológico de la otosclerosis 251

atenuación de la platina es mayor en la timpanosclerosis,


y los focos de timpanosclerosis suelen ser más irregulares5 .
Es habitual el hallazgo de signos asociados de inflamación
crónica en el oído medio, alteraciones en la neumatización
mastoidea y una historia clínica compatible en la timpanos-
clerosis.
En fases muy evolucionadas de otosclerosis coclear, el
diagnóstico diferencial con otras afecciones que desminera-
lizan la cápsula ótica, como la neurosífilis, la enfermedad de
Paget, la displasia fibrosa y la osteogénesis imperfecta, es
prácticamente imposible, si bien la correlación clínica suele
ser suficiente para su diferenciación18,19 .

Figura 8 Hendidura coclear (flecha) en un paciente de 5 años Diagnóstico mediante otras pruebas de imagen
de edad. La hendidura coclear es una imagen radiotransparente
con morfología curvilínea, y es el diagnóstico diferencial más En ocasiones, el diagnóstico de otosclerosis puede esta-
importante de la otosclerosis. blecerse o sugerirse en una resonancia magnética (RM)
realizada por otro motivo, frecuentemente durante la valo-
ración de una sordera neurosensorial. La RM muestra un
Se han descrito falsos positivos en el diagnóstico de otos- halo pericoclear de intensidad de señal intermedia en las
clerosis en caso de sutiles radiotransparencias en la teórica secuencias potenciadas en T1, con realce pericoclear en las
fissula ante fenestram que se correlacionan con áreas de secuencias poscontraste1,5,15,18,19,26 (fig. 9).
mayor presencia de tejido conectivo y vasos17 ; por tanto, Se cree que el realce se debe al paso del contraste a
los focos osteolíticos anteriores a la ventana oval son siem- los numerosos vasos en los focos de otosclerosis18 y que se
pre sospechosos de estar en relación con otosclerosis, pero relaciona con la actividad de la enfermedad1 . También la
no son patognomónicos. RM permite diagnosticar posibles lesiones asociadas del oído
El diagnóstico diferencial se realiza también con lesio- interno.
nes de timpanosclerosis en el oído medio, en las que Cuando se plantea la realización de un implante coclear,
puede apreciarse un engrosamiento difuso de la platina del la RM permite valorar la permeabilidad de la cóclea1,4,26 ,
estribo similar al presente en la otosclerosis. En general, la ya que, aunque es poco frecuente, en casos de otosclerosis

Figura 9 Otosclerosis coclear incidental en una resonancia magnética realizada a un paciente con clínica de hipoacusia neurosen-
sorial y síntomas vestibulares, sin sospecha de otosclerosis. Se aprecian lesiones pericocleares y fenestrales (flechas blancas) en la
secuencia FIESTA (a) y en la secuencia axial T1 (b). La secuencia poscontraste axial T1 (c) muestra realce pericoclear. La tomografía
computarizada multidetector realizada posteriormente (d) confirmó los hallazgos de la RM (flechas blanca y negras).
252 J. Gredilla Molinero et al.

Figura 10 Cálculo de la altura de la ventana oval. Se traza un plano paralelo a la ventana oval y el eje mayor del vestíbulo (líneas
1), y posteriormente se traza un eje perpendicular a la altura del margen inferior de la ventana oval (líneas 2). Finalmente se traza
una perpendicular a la línea 2 hasta el margen inferior del nervio facial en su segmento horizontal (líneas cortas blancas). La imagen
de la derecha corresponde a una medición normal. En la imagen de la izquierda se observa una disminución de la altura en relación
con una dehiscencia del segmento horizontal del nervio facial. Los contornos en blanco delimitan los segmentos horizontales del
nervio facial.

avanzada puede haber una osificación de la espira basal que causa de disminución del calibre del nicho de la ven-
dificulte o incluso impida la correcta inserción del implante. tana oval. Un nervio facial dehiscente puede dificultar
Se han realizado estudios que valoran la TC de haz o incluso impedir la realización de una estapedotomía o
cónico para el diagnóstico de la otosclerosis16 , con resul- de una estapedectomía. Su estado debe ser sistemática-
tados prometedores, aunque su utilidad clínica esta aún por mente evaluado en todos los pacientes a quienes se les
determinar. Si bien la dosis de radiación es menor, la sensi- vaya a realizar cirugía de otosclerosis.
bilidad para la detección de las formas fenestrales es más 3. El estado de la ventana redonda: es importante su
baja en la TC de haz cónico que en la TCMD16 . exploración sistemática, ya que su afectación se aso-
cia a un mayor riesgo de hipoacusia neurosensorial
posquirúrgica4,11,19,26 . La obliteración de la ventana
Evaluación sistemática de la TC de peñasco redonda, aunque es rara, puede objetivarse preope-
preoperatoria ratoriamente y podría contraindicar el tratamiento
quirúrgico19 .
La evidencia actual asocia determinados hallazgos de la 4. Lagleyre et al.11 encuentran un mayor riesgo de com-
TC con un riesgo aumentado de complicaciones intraope- plicaciones intraoperatorias en la platina del estribo en
ratorias, así como un mal resultado funcional y posibles casos de TCMD dudosos o negativos, probablemente por
complicaciones postoperatorias. tratarse de focos más superficiales en los que el estribo
Debemos considerar: presenta mayor movilidad y la platina es más frágil11 .
5. La afectación extensa de la cápsula ótica y del conducto
1. El tamaño del nicho de la ventana oval: puede estar dis- auditivo interno se relaciona con un mayor riesgo de
minuido por hipertrofia ósea de las paredes de la ventana hipoacusia neurosensorial posquirúrgica4 .
oval, de forma congénita o secundaria a la existencia 6. Descartar otras causas de hipoacusia de transmisión,
de focos de otosclerosis, o por prolapso o dehiscencia mixta o neurosensorial, como la dehiscencia del con-
del nervio facial. Si bien la determinación de su tamaño ducto semicircular superior, una alteración congénita o
ha sido clásicamente subjetiva, Ukkola-Pons et al.27 han la desconexión de la cadena osicular (patología inflama-
publicado un artículo en el que cuantifican de forma toria crónica del oído medio o patología del oído interno,
preoperatoria la altura del nicho de la ventana oval. como un acueducto vestibular dilatado o una laberintitis
Establecen un valor de 1,4 mm como límite inferior de la osificante)5,19 . La dehiscencia del conducto semicircular
normalidad. Valores menores se asociaban con un riesgo superior es relativamente frecuente y puede cursar con
mayor de tener dificultades técnicas durante la cirugía un cuadro clínico similar al de la otosclerosis. Es una
del estribo (fig. 10). Debe descartarse una otosclerosis causa reconocida de fracaso terapéutico en pacientes
obliterativa, ya que esta variante presenta mayor riesgo operados por sospecha de otosclerosis. Es muy rara su
de complicaciones intraoperatorias y requerirá el fresado coexistencia con otosclerosis28,29 .
de la platina para poder colocar la prótesis. 7. Descartar la presencia de un bulbo de la vena yugular
2. La relación del nervio facial con la ventana oval: el pro- interna alto que pueda dificultar el acto quirúrgico.
lapso y la dehiscencia del nervio facial son la segunda 8. Valoración del oído contralateral.
Actualización en el diagnóstico radiológico de la otosclerosis 253

Figura 11 Malposición de la prótesis con desplazamiento medial (flecha en la imagen de la izquierda) y desconexión (flecha en
la imagen de la derecha).

Utilidad postoperatoria prótesis respecto a la apófisis larga del yunque, y en este


caso la luxación suele ser muy evidente (fig. 11).
El valor de la TCMC es fundamental en los pacientes posqui- 2. Necrosis con erosión parcial o completa del yunque, fun-
rúrgicos con mala evolución clínica30---33 . damentalmente la apófisis larga del yunque30,35---37 . En
Las causas del fracaso terapéutico con persistencia de la íntima relación con el movimiento de la prótesis, su
sordera de conducción son: asociación es muy frecuente. Lesinski36 postula que la
prótesis desplazada se fija de nuevo sobre la platina resi-
dual, y que el extremo medial de la prótesis continúa
1. Malposición de la prótesis respecto a la fenestración en la vibrando sobre el yunque condicionando su necrosis. Se
ventana oval: es la causa más frecuente de fracaso tera- describe hasta en un 90% de los casos de movimiento de la
péutico posquirúrgico30,34---36 . La prótesis tiene que tener prótesis. De diagnóstico habitual en la cirugía, es difícil
una orientación medial, posterior y craneal30 , y la punta su detección radiológica previa (fig. 12). Las dos prime-
de la prótesis debe estar en contacto con la ventana oval. ras causas representan un 80% del total de los fracasos
Swartz19 considera que no es necesario que la prótesis terapéuticos.
esté en el centro de la ventana oval; leves desplaza- 3. Fijación posquirúrgica de la prótesis o de la cadena de
mientos anteriores o posteriores son considerados como huesecillos por tejido de granulación (granuloma repa-
normales. Lo más frecuente es el desplazamiento del rativo) o por adherencias. Transcurrido un mes desde la
extremo medial de la prótesis30,34 ; Williams et al.34 consi- cirugía, no debe haber aumentos de partes blandas en la
deran patológicos los desplazamientos submilimétricos. ventana oval38 , por lo que la presencia de un aumento
La desconexión, infrecuente, implica la separación de la de partes blandas adyacente a la punta de la prótesis en

Figura 12 Reconstrucciones en el plano de la ventana oval en un paciente con una prótesis metálica de estribo bilateral. En la
imagen de la izquierda se observa una separación milimétrica en relación con una sutil necrosis de la apófisis lenticular del yunque
(flecha blanca). Se aprecia también una protrusión intravestibular de la prótesis sin repercusión clínica (flecha negra). En la imagen
de la derecha puede verse la prótesis de estribo en su posición normal.
254 J. Gredilla Molinero et al.

Figura 13 Fijación posquirúrgica de la prótesis de estribo. Se Figura 14 Protrusión intravestibular de la prótesis de estribo
observa un pequeño aumento de partes blandas (flecha blanca) sin síntomas vestibulares. Incidentalmente se aprecia dehiscen-
compatible con fibrosis adyacente a la punta de la prótesis de cia del conducto semicircular superior (flecha blanca).
estribo fluoroplástica (flecha negra).

oval con extensión intravestibular, fístula perilinfática o


la ventana oval será siempre sospechosa de granuloma
malformaciones del oído interno30,39 .
reparativo30,35,38 (fig. 13).
En la hemorragia intralaberíntica, las estructuras del oído
4. Progresión de la enfermedad, otosclerosis obliterativa
interno presentan hiperintensidad de señal en las secuencias
(poco frecuente)30,34,35 . Los focos de otosclerosis oblite-
potenciadas en T1 y T2. El granuloma reparativo presenta
ran de nuevo la platina en un corto periodo de tiempo.
una disminución focal de la intensidad de señal en las
En la TC se aprecia un aumento de partes blandas hiper-
secuencias potenciadas en T2, con realce en las secuen-
denso en el nicho de la ventana oval, adyacente al
cias poscontraste. El diagnóstico de laberintitis se realiza
margen medial de la prótesis30 , con disminución del cali-
al objetivar una ocupación del laberinto con realce en las
bre de la ventana.
secuencias poscontraste.
5. Dislocación de la articulación incudomaleolar30,34,36 .
Hay una gran variedad en la composición de las prótesis
6. Fijación prequirúrgica del martillo. Generalmente no se
de estribo. Todas son consideradas seguras o de uso con-
detecta en la TC.
dicional en la RM42,43 , a excepción del modelo 1987 McGee
(Richards Company, Memphis, TN, USA), ya retirado del mer-
En caso de aparición o progresión de una sordera neuro-
cado.
sensorial o de síntomas vestibulares habría que sospechar la
existencia de una complicación que afecta al oído interno y
considerar la realización de una TC, una RM o ambas30,31,39 , Conclusiones
pero generalmente la técnica inicial es la TC39 .
Se ha descrito la utilidad de la TC en la valoración de La TCMD es la técnica de elección para el diagnóstico radio-
la protrusión intravestibular de la prótesis con diferentes lógico de pacientes con otoesclerosis y permite realizar
criterios. Williams y Ayache30 establecen 1 mm como límite el diagnóstico diferencial con otras patologías que cursan
de la protrusión; Rangheard et al.39 , 2 mm; y Whetstone con sintomatología similar. Ofrece información pronóstica
et al.31 , el 50% de la dimensión del ancho del vestíbulo. En y permite identificar aquellos casos con un mayor riesgo
los estudios que comparan las imágenes de TC con cortes quirúrgico. En el seguimiento postoperatorio de las compli-
anatómicos37,40,41 , la profundidad de la punta de las prótesis caciones puede realizarse una TCMD o una RM en función de
fluoroplásticas en el vestíbulo se encuentra infraestimada37 , la sospecha clínica.
mientras que en las prótesis metálicas se encuentra sobredi-
mensionada, de forma variable en todos los estudios debido
al artefacto que provoca el material metálico1,37,40,41 . La
Responsabilidades éticas
conclusión general es que la TCMD de hasta 64 detectores
no permite la correcta valoración de la protrusión intraves- Protección de personas y animales. Los autores declaran
tibular de la prótesis de estribo40,41 (fig. 14). que para esta investigación no se han realizado experimen-
La fístula perilinfática se sospecha si existe un nivel tos en seres humanos ni en animales.
hidroaéreo en el oído medio, con burbujas aéreas en el
vestíbulo adyacentes a la punta de la prótesis39 . Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que
La RM puede evaluar la existencia de hemorragia intrala- han seguido los protocolos de su centro de trabajo sobre
beríntica, laberintitis, granuloma reparativo en la ventana la publicación de datos de pacientes.
Actualización en el diagnóstico radiológico de la otosclerosis 255

Derecho a la privacidad y consentimiento informado. Los 15. Goh JP, Chan LL, Tan TY. MRI of cochlear otosclerosis B J Radiol.
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