Recurso Carmen Gómez
Recurso Carmen Gómez
Recurso Carmen Gómez
Que por este acto y encontrándome dentro de plazo, vengo en deducir recurso de
protección,en contra de BANCO SANTANDER-CHILE S.A, rol único tributario
97.004.000-5, representado legalmente por su Gerente General Miguel Arturo Mata Huerta,
chileno, casado, Ingeniero Industrial, cédula nacional de identidad número 9.496.096-7 , o
quien legalmente lo subrogue o reemplace, ambos domiciliados para estos efectos en calle
Claro Solar N° 757, de la comuna de Temuco, por las actuaciones ilegales y arbitrarias
cometidas en contra mi contra, en atención a las consideraciones de hecho y derecho que
paso a exponer:
I. LOS HECHOS
1. Que con fecha 23 de junio de año en curso, la recurrente intenta hacer ingreso al portal
web del banco recurrido: https://banco.santander.cl/personas para acceder a su portal
de usuario de la cuenta corriente número 71769178 que mantiene en dicha institución,
esto a fin de corroborar el monto del crédito hipotecario que mantiene con el banco en
relación a la variación de la UF y porque se aproximaba su fecha de pago. Siendo así, al
digitar su clave y rut la la plataforma le arroja error indicando que su clave de acceso es
incorrecta, ante lo cual realiza numerosos intentos pero no logra ingresar, motivo por el
cual decide llamar al call center de Emergencias Bancarias de Banco Santander que
corresponde al número 600 320 3000, donde toma contacto con la ejecutiva telefónica
quien al comenzar a corroborar los datos de identidad del titular de la cuenta le indica
la existencia de un correo electrónico y número de celular desconocidos para la
recurrente, los que nunca han sido suyos ni sabe a quién le pertenecen pero que se
encontraban registrados en sus datos personales bancarios.
2. Posteriormente, la ejecutiva del call center soluciona el bloqueo de la plataforma de la
recurrente al actualizar su clave de acceso, por lo cual esta logra ingresar al banco en
línea percatarse inmediatamente de la existencia de movimientos que ella no había
realizado y que desconocía, se lo menciona a la ejecutiva del banco con quien seguía al
teléfono, comienzan a revisar los datos y nuevamente se le señala un correo electrónico
y teléfono que no corresponden a los registrados por la titular de la cuenta, razón por
lo cual esta le recomienda dirigirse a la entidad bancaria de manera presencial, la
recurrente menciona en el instante que es imposible que existieran movimientos en su
cuenta debido a que esta no tenía dinero en sus fondos y que la última vez que ingreso a
la misma, fue mediante un giro por cajero bancario con fecha 14 de junio del 2022, el
monto de dicho giro fue de $ 20.000 mil pesos, quedando la cuenta corriente sin saldo.
3. Una vez que nuestra representada tuvo acceso al banco en línea encontró giros,
solicitudes de créditos de consumo y movimiento de transferencia que ella jamás realizó
por montos sumamente excesivos a su capacidad financiera, todos realizados entre las
fechas del 16 al 20 de junio del 2022, de lo cual ella nunca tuvo conocimiento dado que
el banco jamás la contacto para corroborar dichas transferencias o solicitudes, no
existiendo mensaje de texto, tercera clave, llamada telefónica y correo
electrónico, o cualquier otra medida que el recurrido debió ejercer como medida
de seguridad para notificar y verificar dichas transacciones.
4. Que según detalle de cuenta corriente entregada por la entidad bancaria se verifica la
concesión de dos créditos de consumo otorgados a nombre de la recurrente y que se
detallan a continuación:
Estos productos financieros nunca fueron solicitados por nuestra representada, sin
embargo el banco aprobó y transfirió a su cuenta corriente, siendo cada uno por el
monto de $12.230.000 mil pesos y concedidos con solo 4 días de diferencia,
prescindiendo de aplicar las “Condiciones objetivas de contratación de productos
y servicios financieros” de las personas naturales sin giro, en donde se estipula entre
otras cosas que: “Para clientes dependientes: Deben ser demostrables mediante últimas 3
liquidaciones de sueldo, Contrato de trabajo y Certificado de cotizaciones previsionales AFP
últimos 12 meses”, “Los ingresos deben ser estables, recurrentes y estar debidamente
acreditados con sus documentos correspondientes”, “El cliente deberá acreditar su situación con
todos los documentos necesarios y suficientes, que permitan validar su solicitud” , “Los clientes
deben cumplir con los parámetros objetivos de endeudamiento determinados en la política de riesgos del
Banco Santander.”El patrimonio del cliente debe ser suficiente para respaldar la solicitud de productos
(cuando se requiera).” y en lo específico respecto de la solicitud de créditos de consumo se
señala “Montos a otorgar dependerá de la capacidad de pago del cliente.” Todos estos requisitos
no fueron cumplidos, puesto que no se allegaron dichos documentos para realizar la
correspondiente evaluación económica y por lo demás, la capacidad económica de la
recurrente y su patrimonio se encuentran disminuidos en razón de la deuda hipotecaria
que esta mantiene con el mismo banco recurrido, siendo así, doña Carmen mantiene
un mutuo hipotecario que debe pagar mensualmente por $ 313.748, lo que agregado
a los dos créditos de consumo antes referidos suman un total de $ 1.009.399 que
deben ser pagados mensualmente en beneficio del banco recurrido, cifra que
considerando la remuneración mensual de la recurrente y que corresponde a
$1.200.000 en promedio, es absolutamente irracional e injustificada.
Que en lo que respecta al acto ilegal y arbitrario, podemos afirmar que el cobro
mensual que ha comenzado a realizar el banco recurrido y directamente en la sustracción de
dineros que este realiza desde la línea de crédito de la titular bancaria para los efectos de
proceder al pago de los créditos de consumo señalados anteriormente, se constituyen como los
últimos hechos vulneratorios de una cadena de circunstancias que necesariamente se suceden
en el tiempo una tras otra y que principian con la infracción al deber de seguridad que debe
cumplir el Banco recurrido respecto de los fondos que se ponen a su disposición, el cual fue
infringido por permitir que terceros no autorizados ingresen a la cuenta corriente de la
recurrente defraudando la suma total de 39.739.372, sin que el Banco se haga cargo de restituir
íntegramente el monto de los mismos, abonando conforme lo estipula el artículo 5 de la ley
20.009 tan solo el equivalente a 35 UF, pero sin reintegrar lo demás, incumpliendo igualmente
en la parte que señala: “Si el monto reclamado fuere superior a 35 unidades de fomento, el emisor deberá
proceder a la cancelación de los cargos o la restitución de los fondos, según corresponda, por un valor de 35
unidades de fomento en igual plazo que el inciso precedente. Respecto del monto superior a dicha cifra el emisor
tendrá siete días adicionales para cancelarlos, restituirlos al usuario o ejercer las acciones del inciso siguiente,
debiendo notificar al usuario la decisión que adopte de la manera indicada en el inciso tercero del artículo 2.”
Puesto que en el plazo señalado no se hizo restitución de las cifras que excedían las 35 UF ni
tampoco se accionó conforme lo señala el inciso siguiente de dicho artículo, el que indica: “ Si
en el plazo anterior, el emisor recopilare antecedentes que acrediten la existencia de dolo o culpa grave por parte
del usuario, podrá ejercer ante el juez de policía local todas las acciones que emanan de esta ley, siendo
competente aquel que corresponda a la comuna del domicilio del usuario.” Siendo así, que hasta el día de
hoy, la recurrente no presenta una demanda interpuesta en su contra por Banco Santander
conforme los hechos antes señalados, por lo demás el plazo para interponer dicha acción se
encuentra vencido, y sin embargo, el recurrido no ha procedido a restituir íntegramente el
monto defraudado conforme lo estipula la ley 20.009. Por lo demás los actuales cobros que la
recurrida ha comenzado a solicitar mensualmente y el dinero que finalmente sustrae de la línea
de crédito de nuestra representada, son actos que nacen como consecuencia de la infracción al
deber de seguridad que el Banco debió haber cumplido respecto de resguardar y asegurar la
cuenta corriente de la recurrente, y que además tiene su origen directo en la solicitud de
créditos de consumo que estos terceros no autorizados requirieron fraudulentamente bajo el
nombre y patrimonio de nuestra representada, circunstancia que no solo es ilegal por sí misma,
sino que además es ilegítima porque se concedieron dichos productos bancarios faltando a las
condiciones establecidas por el mismo banco recurrido para los efectos de sus otorgamientos,
puesto que la clienta no cumplía con las Condiciones Mínimas de Contratación de créditos de
consumos publicadas por el Banco Santander en su sitio web, ya que su patrimonio no era
suficiente para respaldar la solicitud del producto, y tampoco cumplía con los parámetros
objetivos de endeudamiento determinados por la política de riesgos de Bando Santander, ya
que la capacidad financiera de la recurrente se encontraba completamente a tope puesto que se
encontraba obligada al pago de un mutuo hipotecario con el mismo banco por el monto
mensual de $313.748, siendo así, cuando se otorgaron los dos créditos de consumo antes
señalados cada cuota se consigna por la cifra de $362.381 y $333.270, deudas que en total
suman $ 1.009.399, lo que considerando la remuneración mensual de la recurrente y que
corresponde a $1.200.000 en promedio, es absolutamente irracional e injustificada puesto que
claramente su patrimonio no podía sustentar el pago de la misma. dicha deuda, a pesar de ello,
los créditos de consumo fueron otorgados y con una diferencia de tal solo 3 días entre uno y
otro. Por lo demás tampoco se acompañaron documentos para acreditar la situación
económica de la recurrente, tales como contrato de trabajo, liquidaciones de sueldo, etc, siendo
así, no es posible entender cómo fue posible que el Banco recurrido haya otorgado dichos
productos financieros, puesto que escapan a la misma política de la empresa y a toda lógica, lo
que necesariamente lleva a concluir que al concederse estos referidos productos, no solo se
vulnero la seguridad de la cuenta corriente de la recurrente, sino que además de manera
absolutamente injustificada y arbitraria se concedieron estos créditos por sumas que eran
imposibles de pagar por nuestra representada, y que no se ajustaban de ninguna forma a las
condiciones generales de contratación del Banco Santander.
Esta acción constitucional de protección ha sido presentada dentro del plazo que
establece el Nº 1 del auto acordado sobre tramitación y fallo del recurso de protección de las
garantías constitucionales, toda vez que el actuar vulneratorio de la recurrida se verifica y se
ha comenzado a producir periódicamente cada mes con los cobros que el Banco ha
comenzado a efectuar con motivo de los hechos narrados, perjudicando a la recurrente y
vulnerado su derecho a la propiedad de manera mensual al intentar que esta pague los montos
defraudados, siendo así, los actos vulneratorios han tomado el carácter de hechos de tracto
sucesivo en el tiempo, por lo tanto, en la interposición del presente recurso se ha cumplido
con lo establecido respecto de interponer la acción de protección en el plazo de treinta días
corridos desde que el recurrente tomó conocimiento del acto ilegal y arbitrario de la recurrida,
y de la ejecución reiterada del acto vulneratorio.
II. GARANTÍAS CONSTITUCIONALES CONCULCADOS POR LOS ACTOS
ARBITRARIO E ILEGALES QUE SE DENUNCIAN.
PRIMER OTROSÍ: Que, en este acto, en conformidad con lo establecido en el inciso final
de la Regla 3º del “Auto Acordado de la Corte Suprema sobre Tramitación y Fallo del
Recurso de Protección de Garantías Constitucionales”, vengo en solicitar a SS. Iltma., que
decrete de inmediato y en carácter de urgente, la paralización de los efectos del acto arbitrario
ilegal recurrido, a través de la dictación de la correspondiente orden de no innovar a la
recurrida BANCO SANTANDER-CHILE S.A. para que detenga el cobro de los créditos de
consumo N°00350401650041257401 y N° 00350401650041269272, de fecha 16 y 20 de Junio
de 2022 respectivamente. De los antecedentes expuestos en lo principal y que doy por
expresamente reproducidos, se demuestra la real necesidad de que SS. Iltma., decrete esta
medida, mientras se tramita el presente recurso de protección.
SEGUNDO OTROSÍ: Que, en este acto, vengo en acompañar los siguientes documentos
bajo el apercibimiento legal que se indica:
- Bajo el apercibimiento legal del art. 346 N°3 del Código de Procedimiento Civil
10. Escritura pública de mandato judicial con fecha 10 de agosto de 2022, ante la
Notaría de doña Sylvia Alicia Hueche Fuchslocher de Padre las casas anotado en su
repertorio bajo el número 1436-2022.
TERCER OTROSÍ: Ruego a S.S., se sirva conceder para esta parte la notificación
electrónica realizada al correo abogados.chile.sur@gmail.com,
abogadavictoriacaceres@gmail.com ello en virtud de lo estipulado en el artículo 18 inciso 4 de
la Ley 18.287.
POR TANTO: Ruego a S.S., conceder la notificación electrónica. -
CUARTO OTROSÍ: Ruego A VS., tener presente que en virtud de las facultades de
representación que investimos para actuar en nombre de doña CARMEN GLORIA
GÓMEZ CASTRO, ya individualizada, las cuales constan en mandato judicial otorgado por
escritura pública con fecha 10 de agosto de 2022, ante la Notaría de doña Sylvia Alicia
Hueche Fuchslocher, de Padre las casas y que fue anotado en su repertorio bajo el número
1436-2022, junto a nuestra calidades de abogadas habilitadas para el ejercicio de la profesión,
venimos en este acto en asumir el patrocinio y poder de la presente causa con todas las
facultades concedidas en dicho instrumento.