Electroimán
Electroimán
Electroimán
¿Qué es un electroimán?
Como su nombre lo indica, este componente es un tipo de imán que genera un campo
magnético a través de una corriente eléctrica. Es decir que, un electroimán es un tipo de
imán artificial, que tiene las mismas características que uno convencional. Pero agrega la
capacidad de activar y desactivar el magnetismo a través de un suministro de corriente
eléctrica. Un dato interesante y por lo que son muy utilizados, es por que la fuerza del
magnetismo puede ser controlada con la cantidad de corriente, ya que a mayor corriente
mayor fuerza magnética.
Partes de un electroimán
Aunque no lo parezca un electroimán es un dispositivo bastante sencillo y solo tiene 3
partes que son indispensables para su funcionamiento.
• Núcleo: Es una pieza metálica que se utiliza para ampliar el campo magnético que
se genera. Los materiales más comunes utilizados para el núcleo son el hierro
dulce y las aleaciones de hierro-silicio. Estos materiales se eligen debido a su alta
permeabilidad magnética, lo que significa que permiten un mejor flujo de las
líneas de campo magnético a través de ellos, aumentando así la eficiencia del
electroimán.
• Bobina: Es el encargado de generar el magnetismo, generalmente es un alambre
de cobre que se enrollado alrededor del núcleo. El material más utilizado para la
bobina de un electroimán es el cobre, debido a su alta conductividad eléctrica y
resistencia a la corrosión. La elección del diámetro del alambre de cobre y el
número de vueltas de la bobina influye directamente en la fuerza magnética
generada. Un alambre de menor diámetro y un mayor número de vueltas
permitirán generar un campo magnético más intenso, pero también aumentarán
la resistencia eléctrica de la bobina, requiriendo más corriente para su
funcionamiento.
• Alimentación: Un electroimán no es capaz de generar un campo magnético sin
una corriente eléctrica.
¿Cómo funciona?
Cuando un flujo de electrones pasa a través de un conductor, se dice que se genera una
corriente eléctrica. Pero en realidad no es lo único que se genera, si no que también se
genera un flujo magnético. Es decir que, la corriente eléctrica y el magnetismo van de la
mano, ya que si tenemos un conductor y le pasamos una corriente también se va a
generar un campo magnético.
Materiales necesarios:
• Un clavo de hierro o una varilla de metal ferroso
• Alambre de cobre esmaltado
• Una pila o fuente de alimentación de corriente continua
• Objetos metálicos pequeños (clips, tornillos, etc.)
Pasos a seguir:
• Enrolla varias vueltas del alambre de cobre alrededor del clavo o varilla de metal,
dejando un poco de alambre libre en ambos extremos.
• Conecta un extremo del alambre al terminal positivo de la pila y el otro extremo al
terminal negativo.
• Acerca los objetos metálicos pequeños al clavo o varilla mientras esté conectado
a la pila.
• Observa cómo los objetos metálicos son atraídos por el electroimán creado.
• Desconecta la pila y verifica que los objetos metálicos ya no son atraídos.
Mediciones y observaciones:
• Cuenta el número de vueltas del alambre y anota si influye en la fuerza de
atracción del electroimán.
• Prueba con diferentes voltajes de la pila o fuente de alimentación y observa si hay
cambios en la fuerza magnética.
• Experimenta con diferentes materiales para el núcleo (clavo, varilla, etc.) y
compara sus efectos.
• Registra tus observaciones y conclusiones sobre el funcionamiento del
electroimán.
Conclusión
Los electroimanes son dispositivos versátiles y de gran utilidad en diversas aplicaciones,
tanto domésticas como industriales. A través de este informe, hemos explorado su
funcionamiento básico, partes fundamentales y los materiales comúnmente utilizados en
su construcción.