Diabetes
Diabetes
Diabetes
La dieta es uno de los cuatro pilares fundamentales del tratamiento de la diabetes, junto con el
ejercicio físico, la educación de diabetes y la medicación. Sin embargo, también es el aspecto
que más frecuentemente se descuida.
Obesidad
Muchos diabéticos presentan obesidad. En estos casos es importante seguir una dieta baja en
calorías con el fin de perder peso y poder mantenerse luego en un peso lo más cercano al
ideal. Se ha comprobado que la pérdida de peso mejora la glucemia (el nivel de azúcar en la
sangre), el nivel de colesterol, triglicéridos, y la tensión arterial.
Ejercicio
El ejercicio físico es un componente muy útil en el tratamiento y para controlar el peso corporal.
Es recomendable realizar algún ejercicio físico diario. Si el ejercicio es prolongado se deberá
tomar antes un alimento rico en carbohidratos para prevenir hipoglucemias posteriores, por
ejemplo, una fruta, un batido o un yogur.
Sintomas de diabetes
• Visión borrosa
Tipos de diabetes
Existen tres tipos principales de diabetes: diabetes tipo 1, diabetes tipo 2 y diabetes
gestacional (diabetes durante el embarazo).
Diabetes tipo 1
La diabetes tipo 1 es causada por una reacción autoinmunitaria (el cuerpo se ataca a sí mismo
por error). Esta reacción impide que su cuerpo produzca insulina. Por lo general, los síntomas
de esta diabetes aparecen rápidamente. Ocurre cuando el sistema inmunitario, que combate
las infecciones, ataca y destruye las células beta del páncreas que son las que producen la
insulina.
Diabetes tipo 2
Con la diabetes tipo 2, el cuerpo no usa la insulina adecuadamente y no puede mantener el
azúcar en la sangre a niveles normales. Es un proceso que evoluciona a lo largo de muchos
años y generalmente se diagnostica en los adultos (si bien se está presentando cada vez más
en los niños, los adolescentes y los adultos jóvenes). Es posible que no sienta ningún síntoma;
por lo tanto, es importante que se haga un análisis de sus niveles de azúcar en la sangre si
está en riesgo. La diabetes tipo 2 se puede prevenir o retrasar con cambios de estilo de vida
saludables, como:
Prediabetes
La prediabetes, los niveles de azúcar en la sangre son más altos que lo normal, pero aún no lo
suficientemente altos como para un diagnóstico de diabetes tipo 2. La prediabetes aumenta
el riesgo de diabetes tipo 2, enfermedad del corazón y derrame cerebral. Pero hay buenas
noticias. Si tiene prediabetes, un programa de cambio de estilo de vida reconocido por los CDC
puede ayudarlo a tomar medidas saludables para revertirla.
Diabetes gestacional
La diabetes gestacional aparece en mujeres embarazadas que nunca han tenido diabetes. La
diabetes gestacional generalmente desaparece después de que nace el bebé. Sin embargo,
aumenta el riesgo de que usted tenga diabetes tipo 2 más adelante en la vida. Es más probable
que su bebé tenga obesidad cuando sea niño o adolescente y que presente diabetes tipo 2
más adelante en la vida.
Alimentos recomendados
Sin embargo, es fundamental que la dieta sea individualizada, adaptada a las características de
cada persona, su estilo de vida y tratamiento. Se seleccionarán alimentos bajos en grasa,
limitando el consumo de fritos o cocinados con excesiva grasa, y seleccionando formas de
cocinado saludable (al vapor, al honor, a la plancha, asado, papillote, etc.)
Alcohol
Fibra
la fibra es una mezcla de sustancias de origen vegetal que no se absorbe en su paso por el
intestino. Se ha demostrado que la fibra favorece el control de la glucemia al evitar sus
elevaciones bruscas después de comer.
Los alimentos ricos en fibra son los de origen vegetal, como los cereales integrales, frutos
secos, legumbres, frutas y vegetales.
Productos dietéticos
En los comercios abundan los productos dietéticos especiales para para diabéticos, sin
embargo, salvo contadas excepciones, no se aconseja consumir alimentos especiales, ya que
por lo general reemplazan los carbohidratos por otros nutrientes de mayor contenido calórico
(grasa y proteínas). Además, al considerarlos inofensivos, es muy fácil abusar con ellos.
Hipoglucemia
Puede producirse por diferentes causas, por ejemplo, supresión de algunas comidas, cambio
de medicación, exceso de ejercicio, control inadecuado, etc. Los síntomas característicos con
sudores, palidez, debilidad, dolor de cabeza, hambre y fatiga. El tratamiento requiere una
actuación inmediata, consistente en la administración rápida de glucosa o sacarosa, en forma
de azúcar, miel, refrescos azucarados, zumos naturales.
Pasados unos minutos debe tomarse un alimento rico en carbohidratos complejos, como una
rebanada de pan o galletitas.
Tipos de insulina
Existen tres grupos principales de insulinas: insulina de acción rápida, de acción intermedia y
de acción prolongada.
Análogos de la insulina de acción rápida (insulina Aspart, insulina Lyspro, insulina Glulisina)
que tienen un inicio de la acción de 5 a 15 minutos, efecto pico de 1 a 2 horas y duración de la
acción de unas 4-6 horas.
Insulina humana normal que tiene un inicio de la acción de 1/2 hora a 1 hora, efecto pico en 2
a 4 horas, y duración de la acción de 6 a 8 horas.
Insulina de acción intermedia:
• Se absorbe más lentamente, y dura más
• Se usa para controlar el azúcar en sangre durante la noche, mientras se está en
ayunas y entre comidas
Incluye:
Insulina humana NPH que tiene un inicio del efecto de la insulina de 1 a 2 horas, un efecto
pico de 4 a 6 horas, y una duración de la acción de más de 12 horas.
Insulina premezclada que es NPH premezclada o con insulina humana normal o con un
análogo de la insulina de acción rápida. El perfil de la acción de la insulina es una combinación
de las insulinas de acción corta e intermedia.
Insulina de acción prolongada:
• Se absorbe lentamente, tiene un efecto pico mínimo, y un efecto de meseta estable
que dura la mayor parte del día.
• Se usa para controlar el azúcar en sangre durante la noche, mientras se está en
ayunas y entre comidas
Incluye: