Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

U1 - T1 - Qué Es La Filosofía

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 4

¿Qué es la Filosofía?

Partiendo de “la palabra griega Φιλοσοφία (Filosofía) se remonta a la palabra


φιλόσοφος (Filósofos). Acuñada presumiblemente por Heráclito”; y se define
que, el filósofo sería aquella persona que busca la armonía o relación de
correspondencia con el Λόγος (logos), de modo que “la filosofía [es la que]
busca … el ente en cuanto ente”. Definición que muestra la circularidad misma
de la filosofía como del lenguaje, al hacer una reflexión sobre si misma o un
metalenguaje que permite hablar de ella como objeto, esto muestra los
cimientos de la filosofía en esta congruencia entre el ser o el ente y el logos
o los concepto e ideas, como una herramienta para escudriñar el ser, las
cosas, los conceptos, las ideas, la materia misma, el todo, por eso Aristóteles
en su libro de Metafísica nos recalca que: “la filosofía es la ciencia que
contempla los primeros principios y causas. La palabra ἐπιστήμη (episteme)
deriva del participio ἐπιστάμενος (epistamenos), que significa el hombre que
es competente y experto en alguna cosa”.

Esa sería la primera formación de la filosofía occidental. Se entiende, que “la


filosofía es un tipo de competencia particular que permite aprehender el ente
con la mirada, poniendo a la vista lo que éste es en tanto que ente”.

Al preguntarnos por el ¿Qué es algo?, ¿Qué es esto o aquello? Estamos


realizando un ejercicio donde es posible que “esto” o ese “algo” o ese “ente”
tenga su concepto o la idea ya determinado por una historia, una cultura, un
idioma, un contexto o algo que lo relacione al ser o ente.

Por ejemplo: Cuando nos preguntamos ¿Qué son las plantas? Evidentemente
el concepto “planta” nos remite a una realidad en concreto. Si somos más
específicos, nos referimos en este caso a un ser vivo, a una estructura
orgánica, que tiene raíz, tallo, ramas, hojas, flores, frutos, pero también ese
concepto puede cambiar su uso o contexto, podríamos referirnos a la primera
“planta” del edificio, o a las “plantas” nucleares de energía, asociando la
referencia de ese concepto en base a nuestro lenguaje, en este caso, en
primer lugar, usamos un lenguaje de corte positivo o científico para luego
referirse a otros tipos de usos.

De tal manera que, los conceptos despegan hacia una variedad de formas o
ideas, que pueden o no estar en concreto, en el ser o ente, y es en este afán
de querer saber, donde la filosofía intenta responder ante ese “algo”, a esa
cosa o se manifiesta bien de forma material o conceptual; pero dicha
respuesta no se realiza desde una forma simple o de mera opinión, ya que la
misma filosofía exige claridad, pero a la vez profundidad, y rigurosidad al
querer definir algo.
Son los caminos que inicia la filosofía desde la antigua Grecia, con el uso de
un logos o una razón que nos permita comprender el mundo o la realidad a
partir de una construcción o cosmovisión humana que se aleja de la fantasía,
que busca la verdad que se encuentra oculta, como lo menciona Aristóteles,
para que las “cosas” tenga un sentido que pueda ser entendido de manera
unilateral o universal. Por eso la filosofía no puede valerse por sí misma sin
las técnicas o ciencias que investigan y profundizan en las “cosas” u “objetos”
de la realidad. La filosofía vendrá a dar una revisión sobre lo que producen
las ciencias, pero no solo a la ciencia en sí, si no que será una visión más
holística de ese “algo” en la realidad misma.

Por un lado, en el ámbito científico, al concentrarse exclusivamente en un


fenómeno u objeto, se suele generar una fragmentación de la realidad, es
decir, se divide la realidad en segmentos para su estudio y análisis detallado.
Esta división conlleva a la aparición de diferentes perspectivas o disciplinas
científicas que abordan distintos elementos o áreas, las cuales en ocasiones
pueden ser discordantes entre sí debido a la marcada separación entre las
disciplinas y, en un sentido más amplio, entre la ciencia y otras esferas del
conocimiento.

Ante esta impronta Russell nos menciona que:

El conocimiento filosófico no difiere esencialmente del conocimiento


científico; no hay fuente especial de sabiduría, abierta a la filosofía y no a la
ciencia, y los resultados obtenidos por la filosofía no son radicalmente
diferentes de los obtenidos por la ciencia. La característica esencial de la
filosofía, que hace de ella un estudio distinto de la ciencia, es la crítica.
Examina críticamente los principios empleados en la ciencia y en la vida
diaria, inquiere las incongruencias que pueden hallarse en estos principios, y
sólo los acepta si, como resultado de la investigación crítica, no aparece razón
alguna para rechazarlos.

En este sentido, la contemplación filosófica, cuando sus perspectivas son


muy amplias, no divide el Universo en dos campos hostiles: los amigos y los
enemigos, lo útil y lo adverso, lo bueno y lo malo; contempla el todo de un
modo imparcial. La contemplación filosófica, cuando es pura, no intenta
probar que el resto del Universo sea afín al hombre. Toda adquisición de
conocimiento es una ampliación del yo, pero esta ampliación es alcanzada
cuando no se busca directamente. Se adquiere cuando el deseo de conocer
actúa por sí solo, mediante un estudio en el cual no se desea previamente que
los objetos tengan tal o cual carácter, sino que el yo se adapta a los caracteres
que halla en los objetos.
Por ello, la filosofía, ya es interdisciplinaria, es decir que intenta crear un
discurso y lógica que implica la amalgama de todas las ciencias, por ende,
crear un pensamiento de este tipo se vuelve algo muy complejo, de ahí como
la filosofía puede denominarse madre de todas las ciencias.

Pero, a pesar de ostentar dicha posición, la filosofía se aleja por mucho del
sentido común, o de la opinión, no es un conocimiento que interese a la
mayoría de las personas, debido a su alta complejidad, que a su vez también
puede caer en el peligro de alejarse totalmente de la realidad concreta y
quedarse solo como una teoría. Crítica que le realizó Marx - Feuerbach a la
misma filosofía, porque nosotros como humanos no solo nos dedicamos a
“interpretar el mundo, sino también a transformarlo”, por lo que, la filosofía
puede tener un basamento que la fije a la existencia, es decir que también
está ligada a la praxis humana.

La filosofía sería entonces, una forma de ver el mundo de manera holística,


utilizando la razón, el método científico u otros métodos, ya que el sujeto que
percibe, es decir el humano, no todo el tiempo es racional o científico, sino
que también, es emocional o sentimental, es decir que a la filosofía también
le interesa una compresión de nuestra Ψυχή (Psyche) o espíritu, y en ella
encontramos todavía muchas cosas que pueden alejarnos más de la razón o
la ciencia, por ejemplo la imaginación, la religión, los sueños o el arte.

Por ello Russell nos enfatiza que, la verdadera contemplación filosófica, por
el contrario, halla su satisfacción en toda ampliación del no yo, en todo lo que
magnifica el objeto contemplado, y con ello el sujeto que lo contempla. En la
contemplación, todo lo personal o privado, todo lo que depende del hábito,
del interés propio o del deseo perturba el objeto, y, por consiguiente, la unión
que busca el De modo que:

La filosofía debe ser estudiada, no por las respuestas concretas a los


problemas que plantea, puesto que, por lo general, ninguna respuesta precisa
puede ser conocida como verdadera, sino más bien por el valor de los
problemas mismos; porque estos problemas amplían nuestra concepción de
lo posible, enriquecen nuestra imaginación intelectual y disminuyen la
seguridad dogmática que cierra el espíritu a la investigación; pero, ante todo,
porque por la grandeza del Universo que la filosofía contempla, el espíritu se
hace a su vez grande, y llega a ser capaz de la unión con el Universo que
constituye su supremo bien…

En conclusión, el XIII congreso Centroamericano de Filosofía realizado el año


2023, nos propone que:

La Filosofía es una disciplina transversal y fundamental para promover el


desarrollo integral del ser humano. Estimula capacidades específicas tales
como las racionales, éticas, antropológicas, epistemológicas, lógicas y
políticas; y promueve una actitud analítica sobre la realidad en sus diversos
niveles de manifestación y desde la integración de múltiples aristas. Además,
otorga a cada persona mayor autonomía existencial. Estimula la reflexión
permanente sobre los diversos saberes que las personas estudiantes
adquieren, los prepara en lo inmediato para un mayor aprovechamiento de la
universidad, del quehacer laboral y la vida misma. Ofrece una aproximación
solvente, merced al desarrollo de virtudes éticas y dianoéticas, facilita la
construcción y el aporte de soluciones prácticas y viables para tales
situaciones de la vida cotidiana. Todo ello en pro de la construcción de un
mundo mejor para todos. Es parte indispensable de las Humanidades y
acompaña la formación de las personas con una visión de mundo amplia y
solidaria, en constante búsqueda del conocimiento, a partir de su propia
realidad para la realización de la sociedad. Todo ello es punto de partida para
valorar la identidad, el presente y el destino de los pueblos.
(Declaración por la defensa de la filosofía, 2023)

También podría gustarte