Constitución 1929
Constitución 1929
Constitución 1929
Parte primera
No se ejercerá esta atribución en beneficio del que delinquiere por orden del Gobierno o
contra la Hacienda Pública;
19. Permitir o negar, de acuerdo con el Consejo de Estado, el tránsito de tropas o de
aeronaves extranjeras por el territorio de la República, o la permanencia de barcos de
guerra de otras naciones en las aguas territoriales.
Cuando la entrada de tropas extranjeras al territorio de la República, fuere por motivos de
cortesía o para rendir honores, no será necesaria la autorización del Consejo de Estado;
20. Habilitar o cerrar temporalmente puertos, en receso del Congreso, de acuerdo con el
Consejo de Estado; y
21. Ejercer las demás atribuciones que le conceden la Constitución y las Leyes.
Artículo 84.- Es prohibido al Presidente de la República o al Encargado del Poder Ejecutivo,
especialmente, violar las garantías constitucionales; detener el curso de los procedimientos
judiciales; atentar contra la independencia de los jueces; impedir o coartar las elecciones o tomar
parte en ellas, directa o indirectamente; disolver la Legislatura o suspender sus sesiones; ejercer el
Poder Ejecutivo cuando se ausentare de la Capital de la República por más de sesenta días
consecutivos; admitir extranjeros al servicio militar, en clase de jefes u oficiales, sin previo contrato
aprobado por el Congreso o, en receso de éste, por el Consejo de Estado y, finalmente, elevar la
planta de jefes u oficiales, a no ser en los casos de invasión exterior o conmoción interior a mano
armada.
Artículo 85.- El Presidente de la República y el Encargado del Poder Ejecutivo son especialmente
responsables por traición a la República o conspiración contra ella; por infringir la Constitución; por
alentar contra los otros Poderes e impedir la reunión o deliberaciones del Congreso; por obstar el
curso de las leyes y decretos expedidos constitucionalmente; por ejercer una o más de las facultades
extraordinarias sin permiso de la Legislatura o del Consejo de Estado, y por provocar guerra injusta.
Artículo 86.- En caso de inminente invasión exterior, en el de guerra internacional o en el de grave
conmoción interior, el Poder Ejecutivo ocurrirá al Congreso, si estuviere reunido, si no, al Consejo
de Estado, para que, considerada la urgencia y según el informe y los documentos justificativos que
presentare, le conceda o niegue, con las restricciones que estimare convenientes, todas o parte de las
siguientes facultades:
1. Declarar el Ejército en estado de campaña, mientras dure el peligro. En caso de
conmoción interior, la declaratoria se limitará a una o más provincias, según lo exigieren
las circunstancias;
2. Aumentar el Ejército y la Marina y establecer autoridades militares donde lo juzgare
conveniente;
3. Contratar empréstitos;
4. Destinar a la defensa del Estado y a la conservación del orden público las asignaciones
del Presupuesto, aunque estuvieren dedicadas a otros objetos, con excepción de las
pertenecientes al servicio de la Deuda Pública y a los ramos de Educación, Sanidad y
Asistencia Públicas y Ferrocarriles. Estas restricciones no rigen en el caso de guerra
internacional;
5. Variar la Capital del Estado, si se hallare amenazada, o cuando lo exigiere grave
necesidad, hasta que cesen la amenaza o necesidad;
6. Cerrar y habilitar temporalmente puertos o aduanas terrestres;
7. Arrestar o confinar a los indiciados de tomar parte en invasión exterior o conmoción
interior; pero, en el plazo de seis días, los pondrá a disposición del juez competente, con
las diligencias y documentos que justificaren el motivo del arresto, o decretará el
confinamiento, dentro del mismo plazo.
El arresto se guardará en locales que no sean prisiones destinadas a reos comunes.
El confinamiento no podrá verificarse sino en capital de provincia. Prohíbese,
especialmente, confinar en las Provincias Orientales y en el Archipiélago de Colón u
obligar al indiciado a ir al lugar de confinamiento por caminos que no sean los
acostumbrados y directos.
Prohíbese, también, confinar en las provincias del Litoral a los residentes en la Sierra y
viceversa, a menos que el confinado eligiere, de acuerdo con la autoridad, alguno de los
lugares excluidos para el confinamiento, en este Artículo.
Si el confinado pidiere pasaporte para salir de la República, se le concederá
inmediatamente, dándole, por lo menos, un plazo prudencial de ocho días, a fin de que
pueda arreglar sus intereses y dejando a su arbitrio elegir la vía.
Al cesar las facultades extraordinarias, el confinado o el expatriado recobrarán de hecho la
libertad y podrán regresan al lugar de su residencia sin salvoconducto. Al expatriado que
lo solicitare, se le concederá, necesariamente, el pasaporte respectivo. Lo dispuesto en los
incisos anteriores no se opone a que los indiciados sean sometidos a juicio o penados por
los tribunales comunes, siempre que no hubieren sido amnistiados o indultados. Si se
pronunciare sentencia condenatoria, se imputará a la pena el tiempo del confinamiento o
el de expatriación en el caso del inciso 5 de este mismo número.
Artículo 87.- Si se tratare únicamente de conmoción interior, las facultades concedidas al Poder
Ejecutivo en el Artículo anterior se limitarán al lugar y a los objetos indispensables para el
restablecimiento de la tranquilidad o seguridad de la República. La concesión no podrá exceder de
sesenta días, a menos que se la renueve expresamente por el Congreso o por el Consejo de Estado,
todo lo cual se puntualizará en el acuerdo respectivo.
Luego que desaparecieren los motivos que hubieren justificado la concesión de las facultades
extraordinarias, el Poder Ejecutivo cesará de ejercerlas, o le serán retiradas, totalmente, por el
Congreso si estuviese reunidos y si no lo estuviere, por el Consejo de Estado, bajo su
responsabilidad.
El Poder Ejecutivo no podrá delegar las facultades extraordinarias, sino a los Gobernadores de
Provincia y de acuerdo con el Consejo de Estado; pero los Gobernadores no podrán confinar sin
orden expresa del Poder Ejecutivo.
Éste y las autoridades a quienes se ordenare la ejecución de sus mandatos serán responsables por los
abusos que cometieren.
Las autoridades de que habla el inciso anterior serán, también, responsables por el cumplimiento de
disposiciones que el Poder Ejecutivo dictare excediéndose de sus facultades.
Artículo 88.- El Poder Ejecutivo cesará en el ejercicio de las facultades extraordinarias por el hecho
de instalarse el Congreso, a quien presentará, dentro de los ocho primeros días de sesiones, informe
detallado del uso que hubiere hecho de tales facultades.
El Congreso, por Resolución, aprobará el procedimiento del Gobierno o declarará su
responsabilidad.
Artículo 89.- El Presidente o el Encargado del Poder Ejecutivo leerá personalmente ante el
Congreso, en el primer día de su reunión, el Mensaje en que dé cuenta del estado general de la
República o indique las mejoras y reformas necesarias en cada ramo de la Administración.
Sección III. De los Ministros de Estado
Artículo 90.- El Presidente de la República nombrará Ministros para el despacho de los negocios
que corresponden al Poder Ejecutivo. La Ley determinará el número de Ministros de Estado y sus
atribuciones.
Ninguna Cartera permanecerá sin Ministro titular por más de treinta días.
Artículo 91.- Para el cargo de Ministro de Estado se requiere:
1. Ser ecuatoriano de nacimiento;
2. En ejercicio de los derechos de ciudadanía; y
3. Tener, por lo menos, treinta años de edad.
Artículo 92.- Los decretos, órdenes o resoluciones del Poder Ejecutivo, de cualquier clase que
fueren, si no estuvieren autorizados por el respectivo Ministro de Estado, no tendrán valor legal ni
serán obedecidos por autoridad ni persona alguna. Exceptúase el nombramiento o remoción de los
mismos Ministros, que el Presidente de la República los hará por sí solo.
Artículo 93.- Habrá un Consejo de Ministros, compuesto de todos los Ministros titulares en ejercicio
y presidido por el Presidente de la República. Su funcionamiento se determinara, en la Ley de
Régimen Administrativo Interior.
Artículo 94.- Corresponde al Consejo de Ministros:
1. Intervenir en la formación del proyecto de Presupuesto que el Presidente de la
República está obligado a presentar al Congreso;
2. Dar su dictamen acerca de los proyectos de Ley que el Poder Ejecutivo propusiere a la
Legislatura, y cuando se trate de convocatoria a Congreso Extraordinario, de petición de
facultades extraordinarias y de nombramiento de los funcionarios determinados en el
inciso segundo, del número 6 del Artículo 83; y
3. Dar, asimismo, dictamen sobre todo asunto que le fuere sometido por el Presidente de
la República o por cualquiera de los Ministros de Estado.
Artículo 95.- Los Ministros de Estado serán personalmente responsables por los actos que
autorizaren en su respectivo Departamento y, solidariamente, por las resoluciones dictadas en
Consejo de Ministros y por los actos y decretos que suscribieren, sin salvar el voto.
Artículo 96.- Los Ministros de Estado serán igualmente responsables en los casos de los Artículos
84 y 85 y, además:
1. Por infracción de Ley, corrupción o soborno, concusión o malversación de caudales
públicos;
2. Por autorizar decretos o resoluciones del Presidente de la República, expedidos sin el
dictamen o acuerdo del Consejo de Estado o del Consejo de Ministros, siempre que la
Constitución o las leyes lo prescriban; y
3. Por retardar la ejecución de dichos decretos o resoluciones o no haber cuidado de su
cumplimiento.
No exonera de responsabilidad a los Ministros de Estado la orden verbal o escrita del
Presidente de la República.
Artículo 97.- El Ministro o Ministros a quienes se hubiere dado voto de desconfianza en el
Congreso, cesarán en sus funciones. Si fueren censurados, no podrán, además, desempeñar ninguna
Cartera durante dos años.
Para que el Congreso pueda considerar un voto de desconfianza, es necesario que lo propongan
cinco representantes, por lo menos.
Artículo 98.- Los Ministros de Estado deben dar al Congreso, con conocimiento del Presidente de la
República, las informaciones que se les pidan, relativas a los negocios de sus departamentos. De
aquellos cuya reserva fuere necesaria, a juicio del Poder Ejecutivo, darán cuenta en sesión secreta.
Artículo 99.- Los Ministros de Estado publicarán cada año, a más tardar hasta el 10 de Julio,
Informes por medio de los cuales pondrán en conocimiento de la Nación el estado de los asuntos
correspondientes a sus Departamentos, y acompañarán los proyectos de leyes o decretos que
estimaren necesarios.
El Ministro de Hacienda publicará, además, trimestralmente, en el periódico oficial, el estado
comparativo de la recaudación e inversión de las rentas nacionales, sin que sea preciso detallarlo.
Artículo 100.- Los Ministros de Estado pueden tomar parte, sin voto, en los debates de los proyectos
de leyes o decretos que presentaren a las Cámaras o en cualesquiera otras discusiones, y deben
concurrir al Congreso cuando fueren llamados.
Título VII. Del Presupuesto Nacional
Artículo 101.- No podrá el Poder Ejecutivo someter al Congreso ningún Presupuesto Nacional
cuyos Egresos no estén equilibrados con los Ingresos.
Artículo 102.- Todos los Ingresos y Egresos del estado constarán en la Ley de Presupuesto que se
dictará, anualmente, con arreglo a lo determinado en este Titulo. Salvo las obligaciones procedentes
de contrato, podrá prescindirse en el Presupuesto de los gastos ordenados por leyes especiales, las
que se entenderán suspensas, en cuanto al Egreso, hasta que lo considere otro Presupuesto.
Artículo 103.- Todos los Ingresos ordinarios constituirán un solo fondo que se denominará «Fondo
General del Tesoro», destinado a todos los Egresos ordinarios, y a ninguno de éstos podrá señalarse
partida o fuente alguna determinada de Ingreso.
Artículo 104.- Prohíbese destinar a Egresos administrativos de carácter permanente el producto de
empréstitos.
Artículo 105.- Ningún Egreso podrá efectuarse sino conforme a disposición expresa de la Ley de
Presupuesto, excepto por transferencia de asignaciones, de acuerdo con la Ley. El Contralor General
será responsable por autorizar un gasto para el que no haya partida disponible en el Presupuesto, o
fondo especial.
Artículo 106.- En el Presupuesto de Egresos ordinarios constará una partida con la denominación
«Reserva del Tesoro», la que se constituirá con la diferencia entre el total de los Ingresos ordinarios
y los gastos presupuestos.
Artículo 107.- El Presidente de la República presentará anualmente al Congreso, con mensaje
especial, y en los tres primeros días de las sesiones ordinarias, el proyecto de Presupuesto para el
ejercicio económico del año siguiente.
El Presupuesto se formulará de acuerdo con el Consejo de Ministros, y acerca de él emitirá dictamen
razonado, hasta el primero de Agosto, el Consejo de Estado.
Si no diere el Consejo de Estado el dictamen requerido, el Poder Ejecutivo enviará el Proyecto a la
Legislatura sin dicho dictamen.
El mensaje, que se presentará con los anexos que determine la Ley, expresará la situación de la
Hacienda Pública, la del Crédito interior y exterior del Estado y las líneas generales de la política
fiscal.
Artículo 108.- Las Cámaras, reunidas en Congreso, expedirán el Presupuesto Nacional, en tres
debates.
El Congreso discutirá de preferencia el Presupuesto, de modo que se halle aprobado basta el 9 de
Octubre. De no aprobarlo dentro de este plazo, lo considerará, con exclusión de cualquier otro
asunto, en días seguidos, a fin de que dicha Ley se sancione antes de la clausura de las sesiones
ordinarias.
Si no llegare a dictarse dentro de este término, el Poder Ejecutivo estará obligado a convocar
Congreso Extraordinario, con este solo objeto.
Artículo 109.- El Congreso podrá, siempre que no sufra alteración el equilibrio del Presupuesto y
sobre la base de datos estadísticos correspondientes a recaudaciones anteriores que Justificaren la
modificación, aumentar o disminuir los cálculos de Ingresos, aumentar las partidas de Egresos del
Proyecto presentado por el Presidente de la República, disminuirlas, eliminarlas o agregar nuevas
partidas. Si el Presidente de la República objetare el Presupuesto dictado por el Congreso, podrá éste
insistir con el voto de la mayoría de los miembros, concurrentes a la sesión.
Artículo 110.- El Congreso no podrá expedir leyes que deroguen o modifiquen las que establecen
ingresos comprendidos en el Presupuesto vigente o en el dictado para el siguiente año fiscal, sino a
condición de que, al propio tiempo, establezca nuevas rentas o aumente las existentes, para sustituir
a las que trate de modificar o derogar. En ningún caso podrá aprobar ley alguna que desequilibre el
Presupuesto.
Artículo 111.- No podrá expedirse Presupuesto alguno que no contenga partida destinada al pago de
la Deuda Pública.
Artículo 112.- Cualquier saldo que, de la liquidación efectivo de un ejercicio financiero, resultare en
el Fondo General del Tesoro, se denominará superávit y aumentará la Reserva del Tesoro.
Se exceptúan los saldos que formen fondo especial, según Ley.
Artículo 113.- No podrán hacerse retiros de la Reserva del Tesoro sino con arreglo a la Ley.
Artículo 114.- Cuando resultare algún déficit en la liquidación definitiva del Presupuesto anual, el
Presidente de la República presentará al Congreso un mensaje especial que explique las causas del
déficit, y acompañará al mensaje los documentos justificativos correspondientes.
Parte segunda
Parte tercera
Disposiciones transitorias
1.- La Asamblea Constituyente, aun después de promulgada esta Constitución, puede dictar las
leyes, decretos y resoluciones que juzgare necesarios y ejercer todas las atribuciones que le
corresponden.
2.- La Convención elegirá, por votación secreta y mayoría absoluta de votos, Presidente de la
República, Consejeros de Estado, Ministros de la Corte Suprema y de las Cortes Superiores,
Procurador General de la Nación, Contralor General y Subcontralor, Superintendente de Bancos y
otros funcionarios cuyo nombramiento la Ley atribuye al Congreso.
En vez de los dos Senadores y dos Diputados que prescribe el Artículo 115, la Asamblea nombrará
cuatro de sus miembros para Consejeros de Estado principales y otros cuatro para suplentes.
Nombrará, igualmente, a un ciudadano para miembro principal del Consejo de Estado y a otro para
suplente.
3.- El Presidente de la República elegido por esta Asamblea concluirá su período constitucional el 31
de Agosto de 1932.
4.- La primera elección de Senadores y Diputados se efectuará este año, en la fecha que señale la
Ley de Elecciones, y la reunión del primer Congreso Ordinario, el 10 de Agosto de 1930.
La segunda elección de Senadores y Diputados se efectuará en 1932.
5.- Mientras se haga el censo de la República, cada provincia elegirá sus Diputados en la proporción
siguiente: las de Pichincha, Azuay y Guayas, cinco cada una; las de Chimborazo, Loja y Manabí,
cuatro cada una; las de Carchi, Imbabura, León, Tungurahua, Bolívar, Cañar, El Oro, Esmeralda y
Los Ríos, tres cada una, y uno cada una de las Provincias Orientales.
6.- Los Diputados a la actual Asamblea Constituyente durarán en el cargo hasta que se verifique la
Primera elección de Senadores y Diputados.
Si, terminado el período de las actuales sesiones, la Asamblea tuviere que reunirse nuevamente,
tendrá las facultades el Poder Legislativo.
7.- Hasta que se adapte la legislación vigente a las disposiciones de los Artículos 131 y 151, numeral
19 de la Constitución, éstos no podrán aplicarse.
La próxima Legislatura hará necesariamente dicha adaptación, si la Asamblea no la hiciere.
8.- Bastará la aprobación del Consejo de Estado para que el Poder Ejecutivo lleve a ejecución los
empréstitos parciales, cuya Contratación ha sido autorizada por la Asamblea en Leyes de 8, 9 y 14
de Enero de este año, para las obras del ferrocarril de Puerto Bolívar a Río Amarillo y de la carretera
de este punto a la ciudad de Loja, del saneamiento de Guayaquil, el ferrocarril de Sibambe a Cuenca
y del ferrocarril de Quito a Esmeraldas.
9.- El Consejo de Estado reemplazará al Congreso para expedición del Presupuesto de 1930 y, una
vez clausurada la Asamblea, para las reformas y transferencias que fuere necesario hacer en el de
1929.
10.- El superávit efectivo que, incluyendo lo destinado a partida de «Reserva del Tesoro» resultare
de la liquidación del Presupuesto de 1928, se agregará a los Ingresos del Presupuesto de 1929, y
constituirá una partida especial de Egresos que solamente podrá ser invertida por el Poder Ejecutivo,
de acuerdo con el Consejo de Estado.
11.- Mientras el Director General de Aduanas sea extranjero, de acuerdo con el actual contrato,
ejercerá las funciones jurisdiccionales el Subdirector, quien procederá, en estos casos, previa
consulta con el Director, sin perjuicio de lo que disponga la Ley Orgánica de Aduanas, en
concordancia con el Artículo 152 de la Constitución.
12.- La prohibición de los juegos de azar entrará en vigencia el 1 de Enero de 1930.
13.- Hasta la terminación del presente curso escolar, la incompatibilidad determinada en el segundo
inciso del número 29 del Artículo 151, no se hará efectiva para los profesores de Instrucción Pública
que en la actualidad desempeñan otro cargo público.
14.- La situación jurídica de los Estancos que, en la actualidad, no estuvieren administrados
directamente por el Estado, se determinará de un modo definitivo, en cuanto a la subsistencia, o
terminación de ellos, por ley especial.
Artículo final
La presente Constitución regirá en la República desde el día de su promulgación en la Capital.
El Presidente de la República la mandará imprimir bajo su inmediata vigilancia, y solamente la
edición autorizada por él se considerará auténtica.
Dada en el Palacio Nacional, en Quito, Capital de la República del Ecuador, a veintiséis de Marzo de
mil novecientos veintinueve.