DEBATE
DEBATE
DEBATE
1. Investiga a fondo
Prepárate bien sobre el tema del debate. Conocer tanto los argumentos a favor como en
contra te permitirá anticipar objeciones y defender tu posición con hechos y datos sólidos.
2. Estructura clara
3. Sé conciso y claro
Evita divagar. Presenta tus ideas de manera clara y directa para no perder la atención del
público ni del oponente. Menos, es más: elige bien tus palabras.
4. Anticipa contraargumentos
Prevé los posibles puntos que podría usar tu oponente y prepara respuestas para
desarmarlos. Si te adelantas a las objeciones, tendrás más control sobre la discusión.
Conocer los distintos tipos de falacias y el tema, hace posible que podamos anticiparnos a
las preguntas y ataques que nos hagan, y al reconocer sus falacias podemos saber cómo
refutarlas y defendernos
6. Escucha activamente
No solo te concentres en lo que vas a decir, escucha bien a tu oponente para poder
identificar fallos en sus argumentos y refutarlos de manera más eficaz.
7. Toma apuntes
8. Mantén la calma
Mantén una actitud serena y educada, aunque te enfrentes a críticas. Los debates se
ganan con argumentos, no con ataques emocionales. Una actitud tranquila te hará ver
más convincente.
Apoyar tus argumentos con datos, estadísticas o ejemplos reales puede hacer que tus
puntos sean más persuasivos. Las evidencias concretas fortalecen cualquier discurso.
11. Sé flexible
Si te das cuenta de que uno de tus puntos no es tan fuerte como pensabas, adáptate. No
tengas miedo de modificar tu enfoque o de conceder puntos menores, lo que puede
reforzar tu credibilidad.
12. Sé respetuoso
“Tendrás receptores que serán más críticos a la hora de juzgar la veracidad de una
noticia. Por ende, exigirán mejor calidad de información”, asegura.
1. Prepárate y lee
Sin una búsqueda apropiada de fuentes, tus argumentos serán débiles y fáciles de rebatir.
Por eso, realiza una búsqueda de fuentes confiables, léelas a conciencia y enriquece tu
postura con lo mejor de cada una. A más fuentes, más enfoques tendrás para estar a la
altura de una moción.
Ahora que ya tienes todas las ideas claras, es hora de darles un orden. Si quieres que tu
discurso no pierda fuerza, arma una estructura con el orden en el que quieras decir las
cosas. Así, tu argumento será sólido y no dejarás cabos sueltos para que tu oponente te
refute.
No caigas en argumentos que todos conocen porque son los más fáciles de rebatir. Por
esto, Álvaro Gastañadui asegura que las analogías son claves para un discurso potente.
“Lo que te permiten es elaborar posiciones más complejas y elaboradas. Para eso,
necesitas ser creativo y abrir tu perspectiva a algo mayor”, comenta.
Si vas a participar de un debate por equipos, es trascendental que coordines con tus
compañeros antes de iniciar. De esta manera, sabrás cuáles son sus argumentos y
tendrás la posibilidad de apoyarlos y reforzar tu posición sobre la tesis a tratar.
Sabemos que en los debates las emociones son muchas, más aún si varios puntos de
vista se contraponen. Por eso, respira un poco y no te dejes llevar por tus impulsos.
Recuerda que el debate debe ser constructivo. “Si sabes que tu misión no es imponer
todo lo que crees, sino aprender, ya habrás dado un gran paso”, comenta Álvaro.