El Liderazgo de Josue
El Liderazgo de Josue
El Liderazgo de Josue
En cuanto a la fecha de su autoría, existen dos posibilidades: Probablemente fue escrito en una
fecha temprana entre el 1400-1370 a.C.; o en una fecha más tardía entre el 1240-1200 a.C.
CARACTERÍSTICAS DEL LIBRO DE JOSUÉ
El pueblo que vivía en Canaán era conocido como cananeos; ellos estaban agrupados en seis o siete
naciones y estaban organizados en ciudades-estado regidas por reyes (12:7-24). Estas naciones siempre
fueron recordadas como impías delante de Dios, y esa fue la principal causa de su destrucción.
En términos religiosos los cananeos se caracterizaban por su creencia en varios dioses, los sacerdotes y
sacerdotisas del templo, algunas llamadas prostitutas, formaban parte de este sistema religioso; y los
sacrificios humanos fueron parte su práctica religiosa (Lv. 18:21, Dt. 12:31, 2 R. 23:10, Jer. 7:31).
CARACTERÍSTICAS DEL LIBRO DE JOSUÉ
El Mensaje del Libro: El libro de Josué marca el cumplimiento de las promesas de Dios para el
pueblo escogido, a través de Abraham. Sin embargo, es también el comienzo de una nueva etapa en
la historia de Israel, donde se proyecta su futuro.
Por otra parte, en este libro hay un énfasis en que la posesión de la Tierra Prometida lleva consigo
una gran responsabilidad como es la obediencia a Dios y la fidelidad a su pacto (23:14-16, 24:19-20).
CARACTERÍSTICAS DEL LIBRO DE JOSUÉ
A pesar de toda la actividad que despliega Josué el énfasis del libro está en dar la gloria a Dios y no
a un líder o al esfuerzo de un pueblo; pues ninguna batalla pudo ser ganada a menos que Dios
estuviera presente. Son tres los propósitos por los cuales se escribió el libro:
Orígenes: Nació en Egipto, fue hijo de Nun, integrante de la tribu de Efraín; y descendiente de la
casa de José, que ostentaba gran autoridad. Su nombre original era Oseas (Nm. 13:8, 16); después
le fue cambiado por el de Josué. En lengua hebrea, Josué, significa "Jehová es salvación" o
"Jehová salva" y su forma griega es "Jesús".
BIOGRAFÍA DE JOSUÉ
Cualidades y Trayectoria: Era un hombre de gran fe, firme de carácter y valiente; y aunque fue
un hombre de grandes cualidades naturales, por preparación y experiencia, su mayor cualidad
consistió en ser un hombre investido con el Espíritu Santo (Nm. 27:18).
Fue testigo de las plagas de Egipto, el cruce del mar Rojo, los grandes milagros de Dios y los fallos
de Israel en el desierto; además tuvo un rol destacado en el éxodo judío de Egipto.
En la Biblia se nos presenta como el ayudante de Moisés (Ex. 33:11), y su lugarteniente en la guerra
contra Amalec (Ex.17:9); donde demostró su destreza como comandante militar.
Moisés lo eligió para que lo acompañara al Monte Sinaí donde se iba a encontrar con Dios, donde
permaneció cuidando al pueblo mientras Moisés hablaba con Dios. También, fue encargado del
cuidado del primer tabernáculo.
A los cuarenta años de edad, fue elegido como representante de Efraín, y con otros once
encomendado para espiar los puntos débiles de Canaán. Junto con Caleb se esforzaron en
persuadir al pueblo a avanzar y apoderarse del país, fiados en Dios (Jos. 14:7; Nm. 13:8; 14:6-9).
BIOGRAFÍA DE JOSUÉ
Líder del Pueblo Hebreo: Como líder del pueblo escogido, su tarea no fue legislar, recibir
revelaciones sublimes ni desarrollar conceptos morales y teológicos; sino ser mas bien un
estratega militar.
Tras derrotar a las naciones cananeas, se dio a la tarea de repartir el territorio conquistado y
organizar a Israel por tribus. Al igual que Moisés, gozaba también de comunión con Dios (Jos. 1:1-9;
5:13-15), aunque no al mismo nivel.
BIOGRAFÍA DE JOSUÉ
Muerte: Por ser uno de los dos sobrevivientes del éxodo de Egipto (Caleb), Josué era ya un
hombre anciano (80 años) cuando invadió Canaán; pero a pesar de ello fue un gran hombre de
acción. Josué falleció a los ciento diez años de edad, y fue sepultado en su heredad en Timnat-será.
PREPARATIVOS PARA LA CONQUISTA
Josué es Comisionado (Jos. 1): Como mano derecha de Moisés; asumió el liderazgo, luego de
su muerte; para conducir al pueblo, hacia la Tierra Prometida (vv. 1-2). Se le aseguró el éxito de su
misión (vv. 3-5), siempre que tuviera el cuidado de seguir las instrucciones de la Ley y fuera
esforzado y valiente (vv. 6-9).
En este pasaje Dios le revelo dos principios fundamentales para el ejercicio de su liderazgo:
a) La primera está relacionada con la actitud que debe tener hacia la tarea encomendada. Esto es
que Josué será un mediador de la acción divina, y para ello se requiere esfuerzo y ánimo.
b) La segunda está relacionada con la obediencia que debe tener a la ley de Dios. El éxito del
liderazgo de Josué radica en la fidelidad que tenga hacia la Ley (v. 8); la cual puede ser guardada en
la medida en que es consultada y meditada constantemente; y cumplida incondicionalmente.
PREPARATIVOS PARA LA CONQUISTA
Al ser comisionado, Josué tomó medidas para invadir la Tierra Prometida. Los preparativos para el
cruce del río Jordán estuvieron acompañados del encargo que Dios hace a Josué y que este
extiende a los oficiales del ejército.
El N.T. elogia a Rahab por su fe (Stg. 2:25, He. 11:31); quien, a pesar de su raza y su pasado inmoral,
fue salva. Más adelante Rahab se casó con un hebreo llamado Salmón (Mt. 1:5), convirtiéndose así
en antepasada del gran rey David y del Mesías mismo.
PREPARATIVOS PARA LA CONQUISTA
El Cruce del Jordán (Jos. 3-4): El
acontecimiento principal en la preparación de la
conquista, es la milagrosa división de las aguas
del río Jordán, que permitió al pueblo pasar a la
Tierra Prometida. El río se convirtió en un
obstáculo formidable ante los hebreos; quienes
no tenían embarcaciones, ni medio alguno de
cruzar; sin embargo, Dios obro un milagro.
¿Por qué abrió Dios el Jordán de una manera sobrenatural? el autor da tres importantes razones:
1. Para engrandecer a Josué ante los ojos de los israelitas, con el fin de confirmar su confianza y
lealtad al nuevo líder (3:7).
2. Para desarrollar la fe de los hebreos y demostrarles que Dios echaría a los cananeos (3:10).
3. Para sembrar terror en sus enemigos y dar un testimonio a todos los pueblos del poder y la
fidelidad de Dios (4:23-24, 5:1).
PREPARATIVOS PARA LA CONQUISTA
Los israelitas tenían que dar dos pasos para que se realizara el milagro: Primero, debían
santificarse (3:5); y segundo, fueron guiados por el arca, que representaba la presencia de Dios;
llevada por los sacerdotes; dando una imagen más de procesión litúrgica que de campaña militar.
Otro hecho importante, es que, a partir de ese momento, el maná cesó, pues ya no era necesario
sostener a Israel milagrosamente; pues estaban en una tierra donde abundaba el alimento natural.
Conclusión: La posesión de la Tierra Prometida no tiene razones exclusivamente económicas,
sino que implica la creación de un nuevo pueblo, distinto al que estaba en Egipto, un alternativo en
el sentido de que otros pueblos vean en él la creación de una nueva humanidad.