We would like to thank all people listed below for their expert reviews of submitted manuscripts ... more We would like to thank all people listed below for their expert reviews of submitted manuscripts in 2011. Our reviewers greatly contribute to the high standards of the Journal, and we sincerely hope we can count on the continuous participation of all of you in the future.
ABSTRACT El Cerro Domuyo se encuentra ubicado en el extremo norte de la Cordillera del Viento (36... more ABSTRACT El Cerro Domuyo se encuentra ubicado en el extremo norte de la Cordillera del Viento (36°38´S, 70°25´O) en el límite entre los Departamentos de Minas y ChosMalal, Provincia de Neuquén, Argentina. En el presente trabajo se presentan nuevas observaciones de campo e interpretaciones sobre el ciclo volcánico más joven (Pleistoceno Superior) registrado en el Cerro Domuyo, y que fuese denominado Complejo Volcánico Domuyo por Llambías et al. (1978) o Magmatismo Dómico por Brousse y Pesce (1982). El cuerpo principal del Cerro Domuyo está constituido por un conjunto de rocas ígneas y sedimentarias pertenecientes al relleno de la Cuenca Neuquina (Ciclo Precuyano, Grupo Cuyo y Grupo Mendoza) y su basamento (Grupo Choiyoi y Granodiorita Varvarco), que fueron invertidos y deformados en dos etapas (Cretácico Superior y Mioceno-Plioceno) e intruídos por un stock granítico Plioceno (Llambías et al., 1978; Miranda et al., 2006). El volcanismo Cenozoico más antiguo comienza con rocas intermedias a básicas del Mioceno (Fm. Charilehue) que fueron afectadas por el último evento de deformación tectónico (Miranda et al., 2006). Sobre estas, y en discordancia angular, se desarrolla un profuso vulcanismo representado por un ciclo volcánico que comenzó en el Plioceno Superior y se extendió hasta el Pleistoceno Superior (Llambías et al., 1978; Brousse y Pesce, 1982 y JICA, 1983; Miranda et al., 2006). En este sentido, los trabajos de Brousse y Pesce (1982) y JICA (1983) permitieron diferenciar dos ciclos volcánicos composicional y temporalmente diferenciables: un Ciclo Volcánico Inferior (Plioceno Superior a Pleistoceno Inferior) de características calcoalcalinas y composiciones mayormente andesíticas; y un Ciclo Volcánico Superior (Pleistoceno Medio a Superior), de naturaleza calcoalcalina de alto potasio, y dominado mayormente por rocas dacíticas a riolítitas. Las observaciones realizadas en este trabajo implican que esta superficie de discontinuidad corresponde con el desarrollo de un nivel de aterrazamiento y cambios en el nivel de base, denotando un importante hiato estratigráfico entre los dos subciclos. De esta manera, el Cerro Domuyo no constituiría un volcán asociado a un conducto central, sino que en su lugar el vulcanismo se habría desarrollado a partir de centros de emisión de tipo monogenético, distribuidos en los alrededores del Cerro Domuyo. En este esquema, el Complejo Volcánico Domuyo (Ciclo Volcánico Superior) se desarrolló entre los 0,72 ± 0,1 Ma y los 0,11 ± 0,02 Ma (Pleistoceno Superior, Brousse y Pesce, 1982 y JICA, 1983), a lo largo de los Arroyos Covunco, Atreuco y MachanaCovunco sobre la vertiente occidental del Cerro Domuyo. Los trabajos de campo realizados durante febrero y abril de 2013 permitieron definir un conjunto de facies volcánicas, que analizadas en su conjunto posibilitan delinear los procesos que caracterizaron al último ciclo eruptivo registrado en el Cerro Domuyo. Actualmente se están desarrollando estudios de detalle (petrografía, geoquímica y dataciones) con el fin de complementar las observaciones de campo presentadas en este resumen. La actividad volcánica del Complejo Volcánico Domuyo se inicia con una serie de depósitos de corrientes piroclásticas que se depositaron principalmente de manera encausada a lo largo de paleo-valles y minoritariamente, disminuyendo su espesor, sobre niveles aterrazados de carácter regional. En las partes centrales de los valles, estos depósitos están compuestos por facies de tobas lapillíticas masivas o con estratificación difusa (Facies 1) caracterizadas por la presencia de abundantes fragmentos pumíceos irregulares y de grandes dimensiones (hasta 30 cm), líticos polimícticos (hasta 10 cm), y una abundante matriz fina de colores amarillentos. Hacia las paredes de los valles, y en la base de los depósitos, las tobas lapillíticas pasan transicionalmente a facies de tobas y lapillitas finas con estratificación horizontal y estratificación entrecruzada (Facies 2), caracterizadas por una moderada selección, y con presencia de fragmentos pumíceos más pequeños (hasta 3-4 cm) y líticos polimícticos (de hasta 2 cm) dispuestos en un arreglo matriz a clasto sostén. Los depósitos piroclásticos en su conjunto se presentan con espesores máximos de alrededor de 110 m (centro del paleo-canal), y se desarrollan mayormente a lo largo de los arroyos Covunco y Atreuco, aproximadamente desde el paraje " Los Tachos " , hasta luego converger con el Río Varvarco y continuar en dirección a la localidad
Revista De La Asociacion Geologica Argentina, Mar 1, 2010
... Fernando Hongn 1 , Ricardo Mon 2 , Iván Petrinovic 3 , Cecilia Del Papa 1 y Jaime Powell 2 . ... more ... Fernando Hongn 1 , Ricardo Mon 2 , Iván Petrinovic 3 , Cecilia Del Papa 1 y Jaime Powell 2 . ... Emails: ricardomon@arnet.com.ar, powell.jaime@gmail.com. ... y Hervé 1997, Ramos 2008), los arcos o cinturones magmáticos desarrollados a partir del Paleozoico (Méndez et al. ...
Revista De La Asociacion Geologica Argentina, Mar 1, 2010
ABSTRACT The Neoproterozoic-Lower Paleozoic basement structural features have influenced in diffe... more ABSTRACT The Neoproterozoic-Lower Paleozoic basement structural features have influenced in different ways the development of later both extensional Cretaceous and contractional Cenozoic structures. Tectonic inversion of normal faults related to the Cretaceous rift has been frequently addressed as the main mechanism for explaining double-vergent and retrovergent structures in the hinterland of the Andean orogen in northwestern Argentina. This paper proposes that basement structures played a primary role in the nucleation of both Cretaceous normal faults showing Cenozoic tectonic inversion and Cenozoic reverse faults. A regional section between the Domeyko Cordillera (Chile) and the Santa Bárbara System (nearly at 24°-25°SL) shows portions with opposite Cenozoic vergence, each one related to different controls made by previous structures. The inversion of Mesozoic rift-related faults mainly influenced the geometry and vergence of the Cenozoic structures linked to Andean shortening in the Domeyko Cordillera, in the Calchaquí Valleys region and in the Santa Bárbara System. Reactivation of structures and heterogeneities formed during the Neoproterozoic-lower Paleozoic tectonic evolution of the basement controlled the Andean contractional structures in the Puna. Reactivation of Neoproterozoic-lower Paleozoic basement heterogeneities not only contributes to changes in attitude and vergence but also to the irregular time distribution showed by the Andean shortening since many of the reactivated or inverted (positive and negative inversion) structures record superposed movements from the Cretaceous up to the Quaternary.
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ABSTRACT El Cerro Domuyo se encuentra ubicado en el extremo norte de la Cordillera del Viento (36... more ABSTRACT El Cerro Domuyo se encuentra ubicado en el extremo norte de la Cordillera del Viento (36°38´S, 70°25´O) en el límite entre los Departamentos de Minas y ChosMalal, Provincia de Neuquén, Argentina. En el presente trabajo se presentan nuevas observaciones de campo e interpretaciones sobre el ciclo volcánico más joven (Pleistoceno Superior) registrado en el Cerro Domuyo, y que fuese denominado Complejo Volcánico Domuyo por Llambías et al. (1978) o Magmatismo Dómico por Brousse y Pesce (1982). El cuerpo principal del Cerro Domuyo está constituido por un conjunto de rocas ígneas y sedimentarias pertenecientes al relleno de la Cuenca Neuquina (Ciclo Precuyano, Grupo Cuyo y Grupo Mendoza) y su basamento (Grupo Choiyoi y Granodiorita Varvarco), que fueron invertidos y deformados en dos etapas (Cretácico Superior y Mioceno-Plioceno) e intruídos por un stock granítico Plioceno (Llambías et al., 1978; Miranda et al., 2006). El volcanismo Cenozoico más antiguo comienza con rocas intermedias a básicas del Mioceno (Fm. Charilehue) que fueron afectadas por el último evento de deformación tectónico (Miranda et al., 2006). Sobre estas, y en discordancia angular, se desarrolla un profuso vulcanismo representado por un ciclo volcánico que comenzó en el Plioceno Superior y se extendió hasta el Pleistoceno Superior (Llambías et al., 1978; Brousse y Pesce, 1982 y JICA, 1983; Miranda et al., 2006). En este sentido, los trabajos de Brousse y Pesce (1982) y JICA (1983) permitieron diferenciar dos ciclos volcánicos composicional y temporalmente diferenciables: un Ciclo Volcánico Inferior (Plioceno Superior a Pleistoceno Inferior) de características calcoalcalinas y composiciones mayormente andesíticas; y un Ciclo Volcánico Superior (Pleistoceno Medio a Superior), de naturaleza calcoalcalina de alto potasio, y dominado mayormente por rocas dacíticas a riolítitas. Las observaciones realizadas en este trabajo implican que esta superficie de discontinuidad corresponde con el desarrollo de un nivel de aterrazamiento y cambios en el nivel de base, denotando un importante hiato estratigráfico entre los dos subciclos. De esta manera, el Cerro Domuyo no constituiría un volcán asociado a un conducto central, sino que en su lugar el vulcanismo se habría desarrollado a partir de centros de emisión de tipo monogenético, distribuidos en los alrededores del Cerro Domuyo. En este esquema, el Complejo Volcánico Domuyo (Ciclo Volcánico Superior) se desarrolló entre los 0,72 ± 0,1 Ma y los 0,11 ± 0,02 Ma (Pleistoceno Superior, Brousse y Pesce, 1982 y JICA, 1983), a lo largo de los Arroyos Covunco, Atreuco y MachanaCovunco sobre la vertiente occidental del Cerro Domuyo. Los trabajos de campo realizados durante febrero y abril de 2013 permitieron definir un conjunto de facies volcánicas, que analizadas en su conjunto posibilitan delinear los procesos que caracterizaron al último ciclo eruptivo registrado en el Cerro Domuyo. Actualmente se están desarrollando estudios de detalle (petrografía, geoquímica y dataciones) con el fin de complementar las observaciones de campo presentadas en este resumen. La actividad volcánica del Complejo Volcánico Domuyo se inicia con una serie de depósitos de corrientes piroclásticas que se depositaron principalmente de manera encausada a lo largo de paleo-valles y minoritariamente, disminuyendo su espesor, sobre niveles aterrazados de carácter regional. En las partes centrales de los valles, estos depósitos están compuestos por facies de tobas lapillíticas masivas o con estratificación difusa (Facies 1) caracterizadas por la presencia de abundantes fragmentos pumíceos irregulares y de grandes dimensiones (hasta 30 cm), líticos polimícticos (hasta 10 cm), y una abundante matriz fina de colores amarillentos. Hacia las paredes de los valles, y en la base de los depósitos, las tobas lapillíticas pasan transicionalmente a facies de tobas y lapillitas finas con estratificación horizontal y estratificación entrecruzada (Facies 2), caracterizadas por una moderada selección, y con presencia de fragmentos pumíceos más pequeños (hasta 3-4 cm) y líticos polimícticos (de hasta 2 cm) dispuestos en un arreglo matriz a clasto sostén. Los depósitos piroclásticos en su conjunto se presentan con espesores máximos de alrededor de 110 m (centro del paleo-canal), y se desarrollan mayormente a lo largo de los arroyos Covunco y Atreuco, aproximadamente desde el paraje " Los Tachos " , hasta luego converger con el Río Varvarco y continuar en dirección a la localidad
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... Fernando Hongn 1 , Ricardo Mon 2 , Iván Petrinovic 3 , Cecilia Del Papa 1 y Jaime Powell 2 . ... more ... Fernando Hongn 1 , Ricardo Mon 2 , Iván Petrinovic 3 , Cecilia Del Papa 1 y Jaime Powell 2 . ... Emails: ricardomon@arnet.com.ar, powell.jaime@gmail.com. ... y Hervé 1997, Ramos 2008), los arcos o cinturones magmáticos desarrollados a partir del Paleozoico (Méndez et al. ...
Revista De La Asociacion Geologica Argentina, Mar 1, 2010
ABSTRACT The Neoproterozoic-Lower Paleozoic basement structural features have influenced in diffe... more ABSTRACT The Neoproterozoic-Lower Paleozoic basement structural features have influenced in different ways the development of later both extensional Cretaceous and contractional Cenozoic structures. Tectonic inversion of normal faults related to the Cretaceous rift has been frequently addressed as the main mechanism for explaining double-vergent and retrovergent structures in the hinterland of the Andean orogen in northwestern Argentina. This paper proposes that basement structures played a primary role in the nucleation of both Cretaceous normal faults showing Cenozoic tectonic inversion and Cenozoic reverse faults. A regional section between the Domeyko Cordillera (Chile) and the Santa Bárbara System (nearly at 24°-25°SL) shows portions with opposite Cenozoic vergence, each one related to different controls made by previous structures. The inversion of Mesozoic rift-related faults mainly influenced the geometry and vergence of the Cenozoic structures linked to Andean shortening in the Domeyko Cordillera, in the Calchaquí Valleys region and in the Santa Bárbara System. Reactivation of structures and heterogeneities formed during the Neoproterozoic-lower Paleozoic tectonic evolution of the basement controlled the Andean contractional structures in the Puna. Reactivation of Neoproterozoic-lower Paleozoic basement heterogeneities not only contributes to changes in attitude and vergence but also to the irregular time distribution showed by the Andean shortening since many of the reactivated or inverted (positive and negative inversion) structures record superposed movements from the Cretaceous up to the Quaternary.
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