ADIFERENCIA DE OTROS FUNDA-DORES DE RELIGIONES COMO BUDA, KRISHNA O MAHOMA, CUYAS PERSONALIDADES Y BIOGRAFÍAS SE ANTOJAN TAN ESTÉRILES COMO ABURRIDAS, JESÚS DE NAZARET PRESENTA UNA PERSONALIDAD DE MUCHA MAYOR RIQUEZA PSICOLÓGICA. Es por ello por lo que no han terminado de agotarse ríos de tinta especulando sobre quién fue, cómo transcurrieron los años de su vida oculta. Su identificación como el Hijo de Dios por parte de sus seguidores solo ha contribuido a esquivar un auténtico acercamiento a su auténtica dimensión. Porque la historia de Jesús no deja de ser la historia de un hombre, que muestra los mismos momentos de debilidad que cualquier otro ser humano cuando en el huerto de los olivos, y momentos antes del proceso que le condenará al calvario, suplica al cielo “aparta de mí este cáliz”. Tal y como advertía el doctor Jiménez del Oso: “Jesús es un personaje fascinante. Se ha dicho y escrito todo lo imaginable sobre él; y, sin embargo, uno tiene la sensación de que lo más importante está aún por descubrir…”.
COMIENZA HACIA LOS AÑOS 28 O 29 DE NUESTRA ERA, COINCIDIENDO CON SU BAUTISMO POR JUAN EL BAUTISTA, SEGÚN SE DESPRENDE DEL EVANGELIO DE LUCAS,