Palabras Mayores
Palabras Mayores
Palabras Mayores
de poder y esto se ve reflejado en el libro Palabras Mayores de Luis Spota, quien describe detalladamente la esfera de lo poltico con personajes, ambientes e instituciones ficticias y haciendo de ello una analoga con el sistema poltico mexicano, fcilmente perceptible e identificable. Palabras Mayores fue escrito en 1975 y en l se desnuda la realidad poltica,
econmica, social y cultural de nuestro pas, a pesar de usar nombres ficticios en los personajes empleados y ello nos llevara tambin a la realidad vivida en los aos en que fue escrito el libro, durante aquella vieja tradicin de los gobiernos pristas, en que bastaba la llana voluntad del Presidente de la Repblica en turno, para desencadenar toda la fuerza de los sectores pblico y privado, en coordinada bsqueda de dar respuesta pronta y efectiva a las que Luis Spota con singular y acertado tino llam palabras mayores, palabras de jerarqua, las palabras del Seor Presidente. Dicha novela gira entorno al Sr. Presidente de la repblica, don Aurelio GmezAnda, quien ante la llegada inminente al trmino de su periodo presidencial se ve en la necesidad de encontrar al hombre idneo para ocupar su lugar, cubrir sus errores, encubrir sus abusos y garantizar el disfrute de sus bienes. Es as como en una charla con un miembro de su gabinete, el definido como tecncrata, Doctor en Economa, Ministro de Industrias y Desarrollo y considerado como representante de una nueva generacin de polticos no polticos, Vctor vila Puig; deja entrever que est interesado en que ste ltimo le suceda en la presidencia. A partir de ese momento se desencadenan una serie de hechos que forman la trama de la novela y con ella la del personaje principal, Vctor vila Puig, quien al vivir una doble vida debido a que se encuentra casado con una mujer de nombre Isabel Vertiz quien est al cuidado de su madre enferma de cncer, doa Elena Puig y tener amoros con otra mujer de nombre Laura Kraus con quien tiene una hija; corrodo
por la doble moral de la que es protagonista y ante los comentarios del Seor Presidente acerca de que las corrientes de opinin le favorecen para estar en la lista de los posibles candidatos a la presidencia de la Repblica, decide a toda costa mantener en secreto dicha relacin ya que de descubrirse su pasado los puntos que en ese momento pudiese tener a favor seran tirados por la borda y con ellos todos sus sueos y aspiraciones en el escalafn de la poltica. Asesorado por uno de sus files amigos Horacio Allende emprende la carrera de defensa de lo que pudiera ser su catapulta poltica y haciendo uso de los recursos que su alcance estuvieran da marcha a la contienda que le espera. Nombres que en poltica pesan como lo son Andrmaco Batis, Jorge Avellaneda Juregui, Francois Millet-Lpez, Espinosa Carrillo, Alfonso Videgaray y Marat Zabala, este ltimo quien funga como ministro de Informacin y Turismo cuya simpata con el Presidente y su esposa era motivo de elogios y buen trato llegndose a pensar que en l estaba el futuro sucesor de la presidencia de la Repblica y quien tambin se convirtiera en el enemigo pblico nmero 1 de Vctor vila Puig, quien como en todos los escenarios sucios de la poltica y haciendo uso de un recurso ms que conocido, el del desprestigio se da a la tarea de desenmaraar los ms ntimos rincones en la vida de Marat Zabala, total nadie en este mundo es una pera en dulce y algo malo deba de tener; es as como despus de una bsqueda exhaustiva y mediante el trabajo de mltiples contactos consigue dar con expedientes que vinculan a Marat Zabala con una violacin a un menor de edad que desencaden en un suicidio por parte del abusado; si analizamos un poco esta situacin este ha resultado ser un recurso empleado por muchos actores polticos que en lugar de trabajar en pro de las personas que los llevan al poder, ambicionan cada vez ms lo que lleva a corromper su misma integridad (si alguna vez la tuvieron) y a daar sin piedad a los que pudiesen ser sus adversarios polticamente hablando. Lo cual nos lleva a hacer una reflexin que en algn momento me pareci importante al respecto cuando se reconoce que el poder no corrompe a la gente sino que la desenmascara mostrndolas tal como son.
Posteriormente vila Puig comienza a tener una proyeccin descomunal, al grado de ser apoyado por distintos sectores de organizaciones dependientes del gobierno, grupos de obreros, campesinos, maestros, grupos estudiantiles, mujeres que lanzaban vivas y porras y lo consideraban adems de un hombre recto, responsable, respetuoso, propio, simptico y guapo (cosa que no es nada raro verla en la vida actual de la poltica mexicana). Grupos de empresarios que tambin respaldan al posible candidato del Seor Presidente, debido a que tambin con ello se vern en un futuro no muy lejano apoyados y beneficiados. Aunado a la proyeccin que en el marco internacional tambin estaba obteniendo como ministro de gobierno. Parece increble cmo el hecho de que se corriera el rumor de que vila Puig figuraba como uno de los hombres de la lista le dotara de cierta potestad, respeto, admiracin, falsa adulacin y respaldo incondicional. Resulta un tanto irrisoria la forma en que sus allegados le rinden pleitesa, procurando en todo momento su seguridad, cuando si bien como ministro de Estado haba tenido ciertos privilegios que por ley le pertenecen, ahora como uno de los nombres puestos en la mesa o la lista era necesaria a toda costa el velar por su seguridad. Otro aspecto que debe ser considerado es el concerniente a la privacidad, ya que vila Puig tambin pierde cierta parte de ella, tareas que en un momento le resultaban sencillas de hacer y de las cuales no tena que depender de nadie, ahora se ven invadidas y en determinados casos erradicadas. Una mscara cubre su verdadera personalidad, no es en realidad el ser honesto y transparente que da a conocer; y quin pudiera serlo en un ambiente tan viciado y lleno de falsedad como lo ha sido de manera desafortunada la poltica mexicana, donde la corrupcin ha sido el pan nuestro de cada da, donde la desigualdad econmica, social y cultural son perceptibles a simple vista. El mismo vila Puig conocedor de lo que le rodea busca la forma de engaar al pueblo hacindoles creer que es un hombre bueno y ejemplar, que sus propiedades y dinero ha sido ganado de manera transparente y honesta, cuando en realidad l mismo reconoce que debe armar una treta para justificar la legalidad de sus bienes. Uno de los recursos empleados por muchos hombres de poltica ha sido de manera desafortunada la mentira, el engao, la falsedad y muestra de ello es cuando se
oculta cierta informacin que puede perjudicar a alguno de los entes en curso. Gente dispuesta a dar a conocer a la luz pblica las ms grandes atrocidades o pequeos deslices de algunas de las figuras pblicas y otros tantos dispuestos a pagar sumas exorbitantes de dinero con tal de evitar a toda costa que se den a conocer esos detalles de sus vidas. Ejemplo de ello lo fue la doble vida amorosa de vila Puig y el mantener la posicin de incluso ocultar una hija que pondra en entredicho la calidad moral del candidato y posible presidente. Otro aspecto que resulta importante mencionar es el hecho de considerar a vila Puig como el mejor hombre, el que la gente quiere, al que las mujeres admiran, el idneo para los hombres de negocios, la misma prensa lo respalda. Resultara sorpresivo pensar siquiera que detrs de vila Puig, don Aurelio pudiese ser el titiretero que mueva los hilos, dado que no ha sido del todo capaz de poner orden en la dependencia a su cargo y seguir mandando dado que es la potestad que adquiere el Presidente al tambin designar a su sucesor. Vctor vila Puig asiste a una gran cantidad de reuniones con distintos sectores sociales que brindan su apoyo, a cambio obviamente de favores personales de los cuales tambin se vean beneficiados. Al dejar fuera a algunos de sus adversarios polticos por ineptitud de estos ltimos o por que el politiqueo lleva a eliminarlos de la escena en cuestin. Slo un hombre Vallado Fajer de quien se lleg a pensar que estaba decidido como el ya cantado candidato, pero las cosas no resultaron del todo favorecedoras para l ya que se anuncio que no estaba en condiciones porque se encontraba muy mal de salud y todas las personas se abalanzaron sobre Vctor vila Puig y Marat Zabala. Ante la esperada inminente de la muerte de la Seora Madre del Doctor vila Pig y reunidos en su casa llama el an Presidente dicindole que la decisin estaba tomada y que le haba agradado mucho lo que haba dicho en televisin con sumo valor e inteligencia, y as finaliza la historia de las Palabras Mayores. La temtica que envuelve este texto, tiene que ver con la antigua tradicin empleada principalmente y valga la redundancia tradicionalmente por gobiernos
pristas del famoso tapado que se refiere a un personaje desconocido para todos, que sera sealado por el Presidente de la Repblica para ser su sucesor, es decir, sera postulado por el partido en cuestin. Este partido se mantuvo durante 70 aos en el poder y su candidato era considerado el virtual mandatario electo, desde que se empezaba a mover la caballada coloquialmente hablando y que muy acertadamente Luis Spota retrata en Palabras Mayores, ya que lo dicho por el presidente en turno era ley.
El secreto de la identidad de el famoso tapado o el que figuraba en la lista del Seor Presidente tena su importancia porque, en muchas ocasiones, los presidentes jugaban a insinuar que postulaban o que apoyaban a otros candidatos, para desorientar a los polticos que aspiraban a ser presidentes de la Repblica. Con eso se evitaba el desgaste de quien era su verdadero elegido; y el que resultara el candidato electo se mantena en la sombra hasta el ltimo momento posible como fue el caso de vila Puig, ya que cualquiera hubiese podido pensar que sera Marat Zabala el elegido debido a la cercana con el presidente, las esposas de ambos y elementos que podran llegar a asociarse a una preferencia por parte del mandatario de mayor rango, para esperar el acto supremo de su destape que deja entrever al final de la novela. Entonces pudisemos suponer como lo ha sido en la realidad que comenzara su espiral de ascenso, a la par que iniciaba la de descenso del presidente saliente y como lo narra Luis Spota La Momia Gmez-Anda. El momento de mayor poder de un Presidente es cuando, ante su sucesor, pronuncia las palabras t sers.
Hoy, afortunadamente, el Presidente no tiene la ltima palabra y cada una de sus decisiones implica una serie de procesos de coordinacin institucional, encaminados a crear condiciones que hagan viables las Palabras mayores