Cuentos de Lobos y Vampiros
Cuentos de Lobos y Vampiros
Cuentos de Lobos y Vampiros
DE
LOBOS Y VAMPIROS
Carol Leons
Introduccin
Hace mucho, mucho tiempo, en un bosque muy lejano, viva una manada de lobos. Pero no
eran lobos comunes y corrientes, ya que llevaban siglos transformndose en hombres. Con
el paso del tiempo, se haban adaptado a la vida de los humanos, reunindose en clanes y
formando pueblos que posean todas las comodidades de una ciudad humana, donde las
grandes familias se unan unas a otras, aumentando su fuera. !ran bellos y poderosos,
conteniendo en su interior tanto la fuera de su lado animal, como la inteligencia de su lado
humano. "u taa de natalidad era alta y pronto se e#tendieron por todo lugar y era, llegando
hasta la poca moderna. $urante la luna llena, la energa de cada lobo aumentaba al doble,
ya que no todos tenan el mismo poder% algunos eran ms rpidos, otros ms fuertes, otros
mejores caadores, otros tenan buena percepci&n sensorial.
' solo haba algo a lo que los lobos teman% "us enemigos mortales, los vampiros.
(os vampiros eran casi tan antiguos como los lobos, nacidos seg)n las leyendas de la ms
profunda oscuridad. *adie saba quien haba sido el primer vampiro, pero sus genes pasaron
de una generaci&n a otra, durmiendo en algunos humanos para ser despertados al recibir el
mordisco de uno de los suyos. !l virus contenido apareca entonces, y perdan sus recuerdos
humanos para transformarse en caminantes nocturnos. Podan comer comida normal, pero la
sangre les daba fuera y poderes especiales. (a lu tambin les afectaba, ya que el virus
activo causaba fotofobia, y podan sufrir ceguera o graves quemaduras, pero sanaban con
rapide. "e reunan en castas divididas por su ascendencia% los vampiros nacidos de
vampiros eran la lite, viviendo con la opulencia de la noblea en ricas mansiones, mientras
que los humanos convertidos por la activaci&n del virus eran de baja clase, transformndose
en sus sirvientes y vasallos.
+mbas raas eran ms fuertes, ms giles y vivan mucho ms tiempo que los humanos
promedio. Por eso quis, y por envidia, estos siempre les haban temido y perseguido,
aunque con poco #ito. !n el pasado tanto lobos como vampiros se haban odiado a muerte,
dndose caa unos a otros sin descanso, hasta que la peligrosa e#pansi&n de los humanos en
sus territorios, la mejora de sus armas con los avances de la tecnologa y el aumento de su
maldad, les hio fijar una tregua. Para ello, los cabeas de ambos grupos fijaron una ve al
a,o una semana en el calendario lunar, durante la cual se llevaba a cabo una gran fiesta, en
la que tanto lobos como vampiros eran bienvenidos en territorio contrario, para durante -
das disfrutar de la compa,a de unos y otros. ' si haba suerte, encontrar pareja en el bando
enemigo. !speraban que la uni&n de ambos grupos creara una raa ms fuerte y unida contra
la amenaa que representaban los humanos.
El Pintor el Bar!an
.ai/el tena la fecha de la fiesta marcada en su calendario. (levaba la cuenta de los das
con sumo cuidado, entre una y otra faena en la gran mansi&n. !se mes haba estado ms
torpe de lo habitual, pero no poda evitarlo. "o,aba con ese da desde que haba alcanado la
mayora de edad vamprica y se haba enterado del encuentro anual entre lobos y vampiros.
"u padre nunca le haba hablado de ello y a veces se preguntaba porqu. 0ueno, era obvio
que los lobos le disgustaban, y aunque siempre haba odo a su se,or y a sus hijos hablar
mal de ellos, las cosas que haba estado leyendo desde entonces en los libros que haba
conseguido de la biblioteca 1al menos sobre la especie animal2 decan que eran pacficos y
sociables. !ra cierto que coman carne muerta, lo que era bastante asqueroso para un
vampiro que tomaba sangre viva, pero 3uin era l para jugar4 +dems, l era un vampiro
de baja clase, torpe y poco atractivo, como se encargaban de decirle todos los das, sin
talento ms que para hacer el ridculo. Pensaba que quis, ya que era tan mal vampiro,
pudiese encontrar entre los lobos a alguien que le aceptase a su lado, si eran tan sociables
como los libros aseguraban. !chaba de menos a su padre. Haca ms de tres a,os que haba
muerto y a)n cuando hubiese dejado de pintar al entrar al servicio de su se,or, .ai/el
conservaba su )ltimo cuadro a buen recaudo detrs del respaldo de su cama, y todas las
ma,anas le miraba antes de irse a dormir.
!sa noche le haban castigado en la cocina a fregar todos los cacharros y los suelos, despus
de romper la botella de vino que iba a servirse en la cena de esa noche en la mesa principal.
5omperla no hubiera significado nada, ya que haban muchas ms en la bodega, pero dio la
mala suerte de que ese da le tocaba ayudar a servir la cena, y la botella se le resbal& de las
manos justo frente a la copa del hijo mayor, quien qued& todo empapado por el rojo lquido.
(uego de gritarle por ms de 67 minutos, el mayordomo le mand& a su castigo y all estaba,
suspirando mientras miraba la luna volverse poco a poco ms llena, se,alando el da de la
fiesta. !n la mansi&n no se hablaba de ello, y pareca que los vampiros solteros de la casa no
estaban interesados en buscar pareja entre los lobos. "i nadie iba a ir al bosque del norte,
donde estaba el pueblo ms cercano, .ai/el no tendra quien le llevase hasta all. 0ueno,
estaba preparado para esa posibilidad. (e haba llevado un tiempo juntar comida y unas
bolsas de sangre para su viaje. +)n tena tiempo, y si todo sala bien, lograra llegar al
pueblo por el camino en el bosque, poco antes del inicio de la fiesta.
!sa ma,ana, mientras todos dorman, .ai/el se bebi& las dos bolsas de sangre. !speraba
que le ayudaran a soportar la larga caminata bajo el sol, mientras se alejaba de la mansi&n.
Cogi& el bolso donde llevaba algo de ropa, la comida y el cuadro de su padre, para salir de
la gran casa. !l sol le ceg& por un momento con su claridad y el virus vamprico grit& en l.
!l sol era un enemigo que produca feroces quemaduras y poda dejarles ciegos
permanentemente, pero .ai/el y su padre tenan un secreto. +ntes de ser mordido y su virus
activado, su padre haba amado los colores y las composiciones de lu. Cuando se
transform&, sus ojos se adaptaron al cambio, permitindole ver a)n con ms claridad a pesar
del sol. "olo tena que esperar un poco y sus ojos se adaptaban, haciendo que los colores
resaltaran y brillaran a)n ms en sus pupilas nuevas. .ai/el haba heredado esa cualidad,
junto con el amor por la pintura, que su padre haba alentado en secreto mientras vivan en
la mansi&n. .uchos vampiros de alta clase se jactaban de sus poderes como nacidos de
sangre vamprica, creyendo que eran los )nicos. 8l no saba si era un poder o no, pero
amaba la lu que le mostraba un mundo brillante y bello, el )nico que conoca, ya que su
padre le haba mordido muy joven y no tena recuerdos de su vida humana. Por eso por las
noches estaba tan so,oliento, ya que mientras los otros dorman, l se dedicaba a mirar por
la ventana y degustar la bellea del mundo diurno.
"e cubri& bien la piel, ya que aunque sus ojos vean, su piel poda quemarse con facilidad
mientras andaba por el camino. *o lament& dejar la mansi&n atrs, pues si bien su se,or les
haba salvado de la miseria que traa la sed de sangre y la persecuci&n de los humanos,
dndoles trabajo en su casa, ellos haban pagado con creces, su padre con su pintura y l con
buena parte de su juventud. +hora quera encontrar algo que le perteneciera solo a l. Haba
dejado una carta, se,alando su renuncia y su agradecimiento por los a,os bajo la tutela de su
se,or. "u padre le haba ense,ado a ser siempre agradecido.
+ medio da ya llevaba avanado un buen trecho, y el sol que estaba en lo ms alto del cielo
le dijo que era hora de parar. "us clulas de vampiro se regeneraban durante cuatro o cinco
horas despus del medio da, lo que haca a su cuerpo entrar en un estado de coma durante
ese tiempo. Claro que poda dormir cuando quisiera a lo largo del da, pero la etapa ms
profunda e importante del sue,o vamprico eran esas pocas horas. "i un vampiro no entraba
en el coma se transformaba en 9nosferatu:, un estado de frenes salvaje, cuya )nica cura era
la muerte. (a falta de sangre tambin produca locura, pero un vampiro poda resistir hasta
un mes y medio sin beber antes de sucumbir, y era mucho ms fcil de matar debido a su
debilidad. !l estado nosferatu se daba tambin en el primer y segundo a,o de vida de un
vampiro tanto nacido como despertado, como una forma primitiva de auto conservaci&n,
que les serva para protegerse de las amenaas del mundo y desarrollar su potencial
vamprico. 8l no recordaba su fase de nosferatu, ya que afortunadamente haba tenido a su
padre para que le cuidara durante ese tiempo.
"e ech& sobre la hierba, a la sombra de unos matorrales y se cubri& bien con su chaqueta
para protegerse del sol, dejando a su cuerpo entrar en el coma. *o tuvo sue,os y cuando
despert&, continu& su camino siempre al norte, hacia su destino.
.att termin& de llevar los vasos y platos a la cocina, apilndolos en el fregadero lleno de
espuma, dando un buen bosteo. Haba sido una larga semana tras la fiesta, con tanto lobo y
vampiro pululando alrededor, el amor y las hormonas flotando en el aire. Haba tenido
suficiente de aquello. (a )ltima parejita que vino, una hermosa hembra vampiro y el hijo de
;om el herrero, le dieron nuseas cada ve que los miraba por tantos besos y arrumacos. (a
vampiro no estaba mal, pero l prefera un buen cuerpo masculino al que someter a su
voluntad, a)n cuando su comple#i&n delgada y su metro sesenta enviaran mensajes err&neos
a los machos a su alrededor, quienes se crean con el deber de ser ellos los 9servidos:,
llevndose un buen par de patadas en su nombre al intentar someterlo. .att saba que su
hermano .arcus se parta de la risa a su costa, cada ve que alg)n nuevo lobo en el pueblo
intentaba pasarse de listo, intentando agarrar su trasero o sentarle en su regao al verle servir
en el 9$emon <olf:, negocio que su padre les haba heredado, para salir aullando como un
cachorro con la cola entre las patas al conocer la furia de sus pu,os y garras. .att poda ser
ms ligero y peque,o que el lobo promedio, pero era fuerte y gil, y eso sin contar las
noches de luna llena cuando el poder de su lobo se desataba por completo. .arcus se haba
casado haca un a,o con su novia de toda la vida y ahora pasaba casi todo su tiempo en casa
cuidando de su familia, dejando el manejo del bar a su hermano peque,o, mientras l se
encargaba de administrar los gastos y las facturas. *o les iba mal, pero a menudo .att
e#tra,aba la presencia de su padre, tan confortadora en ocasiones, sobre todo cuando se
senta tan solo y perdido como esa noche. 5espir& con fuera, pasndose la mano por la cara
para espabilarse. *ecesitaba dormir un poco, esa semana no haba parado. !n la parte
superior del bar haba un amplio cuarto que usaba de vivienda, junto al ba,o. *o era como
tener una casa con jardn, pero le daba intimidad, sobre todo cuando tena a alguien con
quien compartir la noche. $esde cundo que no...4 +lgunos meses, tal ve. Haba perdido la
cuenta ya. *o es que no quisiera, es que no haba con quien. Conoca a prcticamente todo
el pueblo, y para su mala suerte, todos saban de su mal carcter. 0ueno, que se fueran al
infierno. Pronto encontrara a alg)n nuevo lobo que se ajustara a sus deseos y cuando lo
hallara, no le dejara salir de la cama en semanas.
=olvi& al bar para acabar de limpiar antes de fregar el suelo. "ali& para tirar la bolsa de
basura al cubo fuera del local, cuando vio una figura sentada en la entrada. !staba de
espaldas a la lu que sala de las ventanas, pero pudo notar que no le conoca de nada,
adems de que su olor era totalmente distinto, una mecla de hierbas y tierra, con algo
salino y o#ido. =ampiro4 3u estaba haciendo all4 (a fiesta se haba terminado haca un
par de noches, a)n cuando las parejas mi#tas a)n estaban decidiendo si vivir all o en sus
faustas mansiones. !sos vampiros engredos... !l vampiro le mir& en ese momento y casi
pudo ver el desconcierto en sus ojos. "e puso en pie de un salto, solo para tropear con el
escal&n de la entrada y caer c&micamente al suelo. *ada de la grcil soltura de un vampiro
com)n y mordiente. .att tuvo que reprimir la risa, mirando divertido como el recin
llegado bebedor de plasma, se pona torpemente de pie. !l olor a hierbas y hojas del bosque
le lleg& con ms claridad, viendo su pose tmida al tener que enfrentarle tras su fallida
huida, acomodando un bolso viejo sobre su hombro, con la ropa rada y sucia de polvo.
>runci& el ce,o confundido.
?Pero, ;) de d&nde sales4? consult& sin poder evitarlo. !l vampiro apret& la correa del bolso
hasta hacerla crujir, bajando la mirada, algo asustado.
?(o siento, se,or. "olo quera descansar un poco. .e ir y no le molestar ms? sus palabras
le llenaron a)n ms de curiosidad. Por lo que haba visto, los vampiros eran de todo menos
humildes y tmidos. 8ste pareca asustado. .att dio un paso acercndose a l y le vio
retroceder con horror.
?Cuidado? dijo, al verle a punto de volver a tropear con el escal&n. !l vampiro logr&
evadirlo justo a tiempo, pero se le cay& el bolso del hombro. .att le oy& dar un ahogado
gemido de alarma, cuando se acerc& para levantarle del suelo? ;oma.
?@racias. (o siento? volvi& a disculparse, tomndolo de su mano con dedos temblorosos.
.att aspir& con fuera. Hojas, tierra y frutos del bosque llenaron su nari con su aroma
cercano. (e mir& fijamente.
?0ueno, ahora sabes que no voy a morderte. 5esponde a mi pregunta. 3uin eres y de d&nde
sales.
?.e llamo .ai/el y vengo del bosque sur. 0ueno, e#actamente de la mansi&n del se,or $e
=ille que era quin nos tena contratados a mi padre y a m. Pero l muri& hace tres a,os y
yo quera conocer el mundo. *o es que no lo conoca ya que he ledo muchos libros y visto
documentales, pero quera salir y ver como era todo por m mismo y dej la mansi&n para
venir porque ninguno de ellos all quera asistir a la fiesta, pero yo quera venir y ver como
era todo...
?=enas a la fiesta4? interrumpi& su parloteo, y le vio asentir ilusionado? (a fiesta de lobos y
vampiros4
?". He caminado cuatro noches por el bosque para llegar. " que hoy es la )ltima noche de
la fiesta pero estaba un poco cansado y por eso me retras. .e sent un momento aqu para
coger fueras antes de ir, y s que no tengo ropa adecuada para bailar pero no creo que
importe mucho... ;ampoco bailo muy bien, bueno nunca he bailado pero AHay que bailar4
!stoy un poco nervioso as que no s si me quedar mucho rato pero quiero mirar. "abe
usted d&nde est4 + d&nde tengo que ir4 (e agradecera si me indicara el camino... !s que es
la primera ve que vengo y no s a donde ir...
.att sacudi& la cabea ante su acelerado parloteo sin fin, alando una mano para detenerle.
?.ai/el, verdad4 "iento decrtelo, pero la fiesta acab& hace dos das. Creo que calculaste un
poco mal el tiempo? "u cora&n dio un salto de culpa al ver sus ojos abrirse consternados.
?Ha... ha acabado4? pregunt& con un hilo de vo y s&lo pudo asentir en silencio. (e vio bajar
la cabea y quedarse mirando el suelo con gesto derrotado.
?Pero a)n hay vampiros por aqu. +lguno podr llevarte de regreso...
?*o puedo regresar. +bandon la mansi&n de mi se,or y renunci a mi puesto. *o tengo a
donde ir? le oy& decir en un murmullo apesadumbrado. "e mordi& los labios. Por qu
demonios se senta tan acongojado al verle4 *o era su culpa. "i haba llegado tarde y si lo
haba dejado todo para venir a la fiesta, ese vampiro loco era el )nico responsable... .ierda,
!ntonces porque se senta tan mal4 "u cabea a)n estaba gacha y derrotada. Poda ver con la
lu de la entrada que sus rios oscuros estaban revueltos de hojas. 3uin en el mundo lo
dejaba todo atrs por una incierta promesa de encontrar pareja4 .uchos, le dijo su mente, tu
padre lo hio.
?.ira, de verdad lamento que... bueno, hayas llegado tarde a la fiesta. Pero no te rindas. +)n
quedan lobos que podran valer la pena? dijo sin saber porqu. (e vio alar los ojos y darle
esa mirada ilusionada otra ve.
?*o me echarn del pueblo si me ven4 "oy un vampiro? consult& de pronto preocupado.
.att reprimi& una sonrisa. ", uno terrorfico con esos grandes ojos de cachorro perdido,
torpe y adems parloteador. Cualquier lobo saldra corriendo presa del pnico al verle. *ot&
que era unos buenos 67 centmetros ms alto que l, pero su actitud le haca parecer mucho
ms frgil.
?*aa, no somos de los que echan a los e#tra,os nada ms verles. *o creo que haya
problema? su cora&n dio un salto por raones muy distintas, al verle sonrer de una manera
que haca opacar la lu de la entrada.
?Bh, entonces lo que deca el libro era verdad. (os lobos son animales muy sociables y
pacficosC
?0ueno... hay de todo? al& una ceja, intentando controlar a su cora&n para que dejara de
latirle en la entrepierna, al notar la radiante lu en sus ojos. .ir& el bolso que tena
nuevamente colgado del hombro. +l cogerlo le haba parecido muy ligero? $&nde pensabas
quedarte a dormir esta noche4
?Puedo dormir en el bosque. (o he hecho durante estos das *o es problema. ' tambin
puedo encontrar comida all...
?!n el bosque4 Has caado animales4
?*o, no. "oy un vampiro de baja clase, as que nunca he mordido a un donante. Pero no lo
hara, sobre todo a esas pobres cositas peludas que andan por all...
"us palabras le hicieron sonrer, aunque le llenaba de curiosidad su comentario de ser un
vampiro de 9baja clase:, *o eran todos nobles y snob4 Por lo visto no. .ir& al chico, quien
tena la vista perdida en la aul inmensidad del cielo nocturno.
?+dems, en el bosque se pueden ver todas las estrellas y las constelaciones. .i padre deca
que si se escuchaba la noche con atenci&n, se podran or todos los secretos del universo?
"us palabras eran mitad de a,orana, mitad de fascinaci&n y .att se encontr& perdiendo a
su ve la mirada en el nocturno. Cuando volvi& los ojos, se encontr& con su sonrisa? @racias
por hablar conmigo. Cre que no conocera a ning)n lobo amable, a)n cuando viniera.
.uchas gracias y que tenga una buena noche? dijo, volvindose para empear a caminar
alejndose de l y .att se qued& de piedra.
?+ d&nde vas4
?+l bosque. *ecesito descansar un poco? "us palabras le recordaron que el pobre chico
haba vagado entre la espesura por cuatro das. +dems, si no esperaba encontrar gente
amable, 3u haca all4 Por qu lo haba dejado todo atrs4
?!spera. =en, entra. =amos, entra al local? insisti& al ver que no se mova. .ai/el se volvi&
hacia l, mirndole con sus grandes ojos abiertos.
?Pero... soy un vampiro...
?' yo un lobo. !ntra y te pondr algo caliente de comer. 3uieres o no4? su radiante sonrisa
le contest& antes que sus palabras.
?". @racias, se,or lobo.
?.att, me llamo .att... 9"e,or lobo:? protest& divertido, volvindose para entrar seguido
por el chico.
+ .ai/el le gust& el local nada ms entrar. Haba mucha lu en l, y aunque los olores del
alcohol y el tabaco se confundan con el de la comida, no le disgustaron. !ran como una
sinfona de aromas con vida propia. !l ambiente era clido y familiar, y se encontr&
admirando los cuadros que colgaban encima de la barra, hermosas pinturas de paisajes y
bodegones. Cerr& la boca que se le haba quedado abierta, cuando vio que .att le miraba.
?;e gustan4? dijo alando una ceja dudoso.
?"on muy hermosos. .i padre pintaba, sabes4 (o haca antes de ser mordido y
transformado. Poco despus sigui& pintando, pero necesitbamos sangre y entr& al servicio
del se,or $e=ille y despus de un tiempo dej& de pintar. 'o s que le hubiese gustado
continuar, pero haba mucho trabajo en la mansi&n y no tena tiempo. Creo que quis eso
fue tambin causa de su muerte. 0ueno, era un hombre viejo, as que era su tiempo.
?.i padre tambin muri&, hace algunos a,os. !ste bar era suyo y nos lo dej& a mi hermano
y a m. *o s de donde sac& los cuadros, pero creo que eran de un familiar de mi madre? le
oy& decir. "us palabras le admiraron.
?;ienes un hermano4
?", es de una camada anterior. !st casado y tiene un hijo? respondi&, poniendo un
sandDich de queso caliente frente a l y una taa de t humeante. "e le llen& de saliva la
boca y le dio un mordisco hambriento, disfrutando de su sabor. "e rubori& de vergEena al
or a .att rer suavemente. +unque su risa tena un timbre muy agradable.
?Bh, yo quisiera tener ms familia. .i madre muri& cuando yo nac y solo estbamos mi
padre y yo. !l vampiro que le mordi& le abandon& a su suerte.
?'o pens que todos nacan siendo vampiros? pregunt& con curiosidad. .ai/el movi& la
cabea, tragando el resto del pan de un bocado, dando un sorbo al t. !staba dulce y
deliciosamente caliente.
?"olo los vampiros de alta clase nacen de otros vampiros. (os que somos mordidos e
infectados con el virus que nos transforma, somos de baja clase. "e supone que el vampiro
que te muerde crea un vnculo contigo, pero no siempre es as. Hay muchos vampiros
inconscientes por all? protest&, triste por que lo duro que tuvo que haber sido para su padre
sobreponerse a la transformaci&n en su etapa de nosferatu y cuidar de su hijo al mismo
tiempo? .i padre me transform& a m, para no tener que sentir la tentaci&n de beber de mi
sangre cuando el hambre le acosara. Pero eramos pobres y no pudimos conseguir ning)n
donante humano que nos diera su sangre. Por eso mi padre entr& al servicio del se,or $e
=ille.
?' l aprovech& de e#plotar a tu padre mientras estaba a su servicio.
(as palabras de .att le sobresaltaron, y aunque hubiese deseado negarlas, en el fondo saba
que eran verdad.
?.i padre era el mayordomo de la casa. !l se,or $e =ille no fue cruel, pero... creo que no
supo entender su cora&n de artista.
?(o lamento, .ai/el. (o has pasado bastante mal? oy& la tristea en su vo y la vio en sus
ojos. "onri&, a)n cuando senta dolor en su cora&n por los recuerdos, agradecido de que
.att fuese un lobo tan amable.
?+l final pudo descansar. ' no es que halla dejado de amar la pintura. $eca que al igual que
la luna en el cielo vuelve a llenarse cada noche, el cora&n de un artista siempre est lleno
de ideas e ilusiones, que volvern a l para tomar vida... .ira, sta fue su )ltima creaci&n?
dijo sacando con orgullo el peque,o cuadro de su bolso, para e#tenderlo hacia el lobo por
sobre la barra. 8ste lo tom&, mirndolo con atenci&n.
?!s un bonito cuadro. ' ste es un aul poco com)n.
?!s a,il. .i padre lo haca con ptalos de flor de aciano? sinti& que sus ojos se empa,aban y
los escondi&, volviendo a beber del t. "u dulor le calm& un poco la tristea.
+ .att le gust& el cuadro, un bonito paisaje marino, aunque l no saba nada de pintura.
Pero lo que ms le gust& fueron las palabras del chico, su vo, el cari,o con el que hablaba
de su padre y sus ojos, que ahora poda ver con la lu del local, de un color miel brillante,
empapados de sentimientos. Crea que los vampiros eran todos arrogantes y altaneros, pero
.ai/el era todo dulura. 0ueno, normal, con esos enormes ojos de cachorro. (o vio
agarrarse de pronto al ta&n de t con fuera y tambalearse un poco. "ali& de la barra
preocupado y le sostuvo casi al momento justo antes de que se cayera del taburete.
?!sts bien4
?"olo... solo estoy un poco cansado...? le dijo su vo dbilmente, los ojos entrecerrados por
un instante y le pareci& que estaba ms e#hausto de lo que deca. +dems de que no tena ni
un rastro de color en su piel, los labios blancos.
?!n serio4 !sts plido? su cora&n dio un salto preocupado al verle sonrer dbilmente.
?0ueno, soy un vampiro. *o somos precisamente de piel bronceada? sus palabras le hicieron
sonrer. (e ayud& a bajarse del taburete y le sostuvo con firmea contra s.
?+l menos no has perdido el sentido del humor. =en, subamos para que duermas un poco?
intent& acercarle a la escalera que llevaba al piso superior, pero el chico se resisti& un poco.
.att le vio mirarle con esos grande ojos suyos, llenos de preocupaci&n.
?Puedo ir al bosque...
?*i hablar. !sts agotado. Has estado caminando cuatro das. *adie merece una cama ms
que t)? le asegur&, sintiendo el latido intenso de su cora&n en el est&mago. Haca mucho
que no dejaba a nadie subir...? 0ueno, tendrs que conformarte con el sof, pero te aseguro
que es c&modo...
?!res muy amable. *o s como agradecrtelo, .att.
?"e me ocurren un par de ideas? se le escap& a su lbido, atajndola de inmediato. !l pobre
chico estaba agotadoC *o poda ser como ese se,or $e =ille que se haba aprovechado de su
padre... 8l era mejor que eso? 0ueno, puedes ayudarme ma,ana en la cocina. Bdio fregar.
?Claro. 'o ayudaba siempre que poda en la mansi&n, aunque solan rega,arme por romper
cosas. Pero tendr cuidadoC (o prometo? .att sonri& al ver su gesto espantado. +s que no
solo era torpe al ponerse de pie...
(e gui& hasta la escalera, ayudndole a subir. !ntraron en la amplia habitaci&n y le sent& en
el sof. !ra grande y c&modo, lo usaba a veces para leer. (a cama estaba ms all junto a la
ventana, una cama doble y confortable que haba conocido el fuego del amor varios meses
antes... .att tosi& inc&modo, al sentir el estremecimiento en su vientre al pensarlo y ver los
ojos del chico fijos en l en ese mismo momento.
?3utate los apatos. Fr por unas cuantas mantas y tus cosas abajo.
?Bh, el cuadro? le record& su vo preocupada. .att sonri&.
?;ranquilo, lo traer tambin.
?@racias, .att.
!l tono afectuoso en su vo al decir su nombre, hio a su lobo retorcerse de gusto en su
interior.
?+hora vengo? sali& a prisa de all, intentando disimular su conmoci&n A3u tena ese
vampiro para hacerlo sentir as4
?!s un buen chico, es de sentimientos limpios y huele bien? le dijo su lobo, que hasta ese
momento haba permanecido en silencio. .att sola charlar con l cuando se senta solo?
Hay que protegerle.
?Ha venido al baile a buscar pareja. *o es asunto nuestro.
?Podramos ser su pareja. "era asunto nuestro.
?*o. *o quiero los con vampiros? a su mente volvi& la imagen de sus ojos grandes y su
hermosa sonrisa? *o, no. *ada de vampiros. 3uiero mi sangre dentro de mi cuerpo. $&nde
pertenece.
?.e agrada. Huele a bosque.
!ra in)til discutir con l, sobre todo porque .att saba que no ganara. + l tambin le
agradaba. "ubi& el bolso y el cuadro, cogiendo mantas del armario del pasillo. +l entrar en
la habitaci&n, lo primero que vio fue un pie blanco marfil asomando por el borde del sof.
"onri&, acercndose para ver al chico dormido, con el otro apato a medio sacar. $ej& el
bolso en el suelo a su lado y le acomod& con cuidado, librndole del apato y estirando las
mantas sobre l. +penas se movi&. "ac& una almohada de la cama y la puso bajo su cabea.
+l tocar su pelo, la suavidad de sus rios hio que sus dedos se quedaran atrapados all,
acaricindole un rato, su lobo susurrndole al odo que le protegiera.
!sa madrugada se levant& con ms nimos, a)n cuando la falta de sangre le estaba pasando
factura. "aba que en alg)n momento tendra que atacar alg)n cuello peludo de alg)n pobre
animal del bosque, pero resistira todo lo que pudiese. +dems, no poda fallarle a .att.
Haba sido amable con l, a)n cuando era un vampiro desconocido salido de la nada. 0aj&
con cuidado las escaleras y entr& en la cocina. =io las cosas apiladas en el fregadero y
comen& a limpiarlas. "e senta contento de poder serle )til antes de marcharse. =olvera al
bosque y buscara el camino hacia la carretera. Con suerte, quis hallara otro grupo de
vampiros que le diesen cobijo y alimento, aunque en realidad lo que quera era pintar. ", tal
ve se quedara para siempre en los bosques pintando, hasta que la muerte por falta de
sangre le hiciera sucumbir. +l menos de ese modo no tendra que humillarse ante nadie, y
podra estar de nuevo con su padre. Haba un cielo para los vampiros, eso le haba dicho l
siempre, as que volveran a encontrarse. "olo lamentaba no poder volver a ver a .att. !ra
un buen lobo.
"e despert& de golpe, cuando su lobo le dijo que el vampiro ya no estaba. "ali& de la cama
de un salto y baj& las escaleras inquieto. !l aire volvi& a sus pulmones cuando le vio en la
cocina, fregando cacharros.
?3u haces a estas horas4
?(o... lo siento... cre que podra ser )til? vio sus ojos temblar, enormes de miedo cuando se
apro#im& a l. "e detuvo y dio un suspiro.
?;ranquilo, no voy a hacerte da,o? era la segunda ve que se lo deca, pero le pona de los
nervios verle tan asustado? (o pregunto porque son apenas las G. ' anoche nos acostamos a
las H. "olo has dormido I horas.
?Bh, los vampiros necesitamos de I a J hora en promedio para dormir, aunque lo hacemos al
medio da cuando el sol est en lo ms alto... 'o en lo personal prefiero una peque,a siesta
nocturna que me de margen para soportar mejor la lu del da y as poder observar las cosas
que no se ven por la noche, porque hay mucho que ver y no quiero perdrmelo...
+ll iba su parloteo de nuevo. .att lo tom& como una se,al para acercarse a l.
?$eja eso y vuelve a la cama. +dems, si sigues igual de plido, tendr que llevarte al
bosque a comer? dijo mirando su rostro preocupado, en el que se marcaban claramente las
ojeras, la piel algo ms acartonada que la noche anterior y esos finos labios de apenas un
rosa apagado... "u cora&n dio un salto, al ver el pesar en sus ojos.
?Bh, no. K*o por favorC !stoy bien, en serio. (o superar. " que pareco dbil, pero soy un
vampiro fuerte. *o necesito sangre... no a)n. Por favor, no me hagas matar a nada peludo?
suplic& y casi pudo ver lgrimas en sus ojos. (os vampiros lloraban4 0ueno, coman, as
que era claro que posean otros fluidos.
?*unca he conocido a un vampiro que se niegue a comer? dijo a medias preocupado y
divertido por sus palabras, poniendo una mano sobre su mejilla blanca y tan fra, que casi le
quem& los dedos? Pero necesitas alimentarte, .ai/el. (o necesitas para vivir.
?!star bien? le dijo con vo suave y ojos que de pronto se oscurecieron en lo que .att
identific& como deseo, pero fue breve, pues .ai/el se apart& de su contacto. !l lobo se
quej&, deseando volver a tocar su fra piel? *o necesito sangre, estar bien.
?Por cunto tiempo4 Cunto puede sobrevivir un vampiro sin beber4? intent& buscar sus
ojos, pero el chico se haba vuelto al fregadero y esquiv& su mirada.
?!star bien.
?.ai/el, mrame? insisti&, tirando de su brao y volvindole hacia l. "e qued& mudo al ver
la pena y la resoluci&n en su mirada? .ai/el...
?@racias por cuidar de m. 5egresar al bosque cuando acabe con esto. *o te preocupes,
estar bien.
"us palabras hicieron a su cora&n latir de prisa adolorido, el lobo aullando dentro de l.
?3u piensas hacer4 3uedarte en el bosque para siempre4? sinti& su pulso temblar al verle
arriscar los hombros y la furia apoderarse de l cuando le dio una ve ms la espalda? *o
queras encontrar una pareja en la fiesta4
?*adie me querra de todos modos. *o soy bueno para nada, ms que para hacer el ridculo?
le oy& decir y el lobo ara,& dentro de l, provocndole un sordo dolor.
?!so no es cierto. .rame, .ai/el? volvi& a cogerle del brao y sta ve no se resisti&, pero
su mirada se mantuvo baja? Crees que a tu padre le gustara orte hablar as4 Crees que es
justo que te rindas ahora4 (o dejaste todo atrs por una ra&n... Crees que est bien4
?Pero qu puedo hacer, .att4 $ime, quin me querra si no tengo nada que ofrecer. "olo
se... fregar a medias, cuando no estoy rompiendo cosas, y pensando en pintar cuando
debera centrarme en lo que realmente importa? protest& adolorido. .att le solt& y sostuvo
su rostro entre las manos, mirando sus ojos cercanos que temblaban con tanta tristea que
traspasaron su cora&n.
?Pero eres un pintor. !s lo que eres. =ampiro o no, si quieres pintar es lo que debes hacer.
*o te niegues ese derecho, ahora que lo has conseguido. !res libre. $ebes perseguir tu
sue,o, no rendirte...
?Pero yo... *o quiero matar a un ser vivo para vivir. *o es justo? murmur& y las lgrimas
que se juntaron en sus ojos se derramaron por entre sus dedos. .att crey& que seran fras,
pero eran clidas. !ran lgrimas que quis provenan de su propio cora&n.
?Protgele. ;) puedes hacerlo. Halo? orden& su lobo y ya no tuvo dudas. "e acerc& a la
mesa y sac& un cuchillo del aparador. (e vio mirarle con horror, cuando se hio un corte en
la mu,eca.
?.attC
?$ame un vaso, rpido, antes de que la herida se cierre.
?Pero... pero...
?=amos, .ai/el. + prisa? le urgi& y a pesar de su conmoci&n, el chico le alarg& uno de los
que haba limpiado. .att dej& la sangre caer all y lami& la herida para cerrarla del todo?
;oma, bebe. *o es lo mismo que morder, pero te mantendr con fueras... eso espero? dijo
alargndole el vaso. .ai/el le mir&, con lgrimas a)n cayendo por sus ojos? =amos, que se
enfra? le urgi& otra ve. !l chico tom& el vaso con dedos temblorosos y lo acerc& a su boca,
bebindose en contenido con lentitud, casi con reverencia. .att se encontr& resistiendo la
erecci&n que hio presa de l, al ver el sensual movimiento de su cuello al tragar y el
hermoso sonrojo que hio presa de su piel antes plida, dndole un aire luminoso y lujurioso
a la ve, con los ojos h)medos y los labios hinchados? Creo... creo que ha funcionado? dijo
en un intento por romper el hipn&tico silencio en el que le haba sumido su contemplaci&n.
=io a .ai/el dar un paso hacia l y su cuerpo enloqueci& de deseo, al sentir el suave calor
que irradiaba de su presencia. ;odo eso era producto de su sangre4 =aya, s lo hubiera
sabido antes...
?@racias, .att. *o sabes lo mucho que significa para m. *o s como agradecrtelo.
?$e rodillas y con tu boca en el lugar correcto? le dict& su lbido y su lobo le dio un
mordisco para que recobrara la compostura.
?!s nuestro, es nuestro. Pareja...
?*o? dijo en alto, deteniendo el frenes del lobo. =io a .ai/el fruncir el ce,o confundido?
$igo, que no hay nada que agradecer. +dems, necesito un poco de ayuda aqu. *o ha sido
gratis.
?Bh, .att. !so significa que puedo quedarme4? se dio cuenta de lo que haba dicho cuando
oy& su vo ilusionada, y abri& la boca para retractarse, pero el brillo de sus ojos le detuvo.
?*o puedo pagarte un salario...
?*o importaC *o necesito mucho, solo algo de comer y un sitio donde dormir. Por favor,
deja que me quede, al menos por unos das. "er )til. (o prometoC? ' como prueba de sus
palabras, el vaso que sostena en su mano sali& volando en ese instante y choc& contra el
muro, hacindose a,icos. +mbos se quedaron at&nitos mirando los restos? (o... lo siento...?
comen& a decir con vo llorosa, pero .att no pudo orle, ahogado por las carcajadas. !l
lobo dentro de l salt& feli como un cachorro.
$espus de limpiar y tomar un buen desayuno que .att prepar& para ambos, no haba
mucho ms que hacer. .ai/el a)n estaba at&nito porque el lobo le hubiera dado su sangre,
evitndole tener que cometer un asesinato y dejndole quedarse junto a l. "i tuviera el
poder, caminara sobre las nubes en ese momento. "e ech& a temblar de anhelo y felicidad
cuando le vio acercarse a l.
?!staba pensando en dar un paseo por el bosque. 0ueno, ya s que te has pasado all la
mayor parte de estos das, pero hay un sitio al que mi padre sola llevarnos en el verano a
nadar, y pens que te gustara verlo.
?Bh, s, s. .e encantara, .att. =amos allC? dijo entusiasmado y le vio sonrer con ganas.
.att tena una sonrisa y una risa hermosa, abierta y franca que le haca sentir muy a salvo.
(a gente en la mansi&n rara ve se rea con tanta libertad. 0ueno, a costa de su torpea s
que se rean, al igual que .att, pero era con burla, mientras que el lobo pareca de verdad
contento. (e sigui& hasta la puerta, y frunci& la mirada ante la lu del sol.
?Blvid que a los vampiros les hace da,o el sol en los ojos? oy& su vo preocupada,
guindole de vuelta al interior. .ai/el los restreg& con fuera.
?'o s puedo soportar el sol, aunque tengo que esperar un poco para acostumbrarme a la
intensidad de la lu. ' protegerme la piel del contacto directo. +h, y dormir al medio da.
!so es algo que no puedo evitar. .i cuerpo se desactiva solo por I o J horas.
?(as del sue,o promedio y eso? dijo, y le admir& que lo recordara.
?", as es. !n ese tiempo nuestro cuerpo se repara. "upongo que para los ms guapos
significa algo as como una siesta de bellea? brome&. .att le mir& con una sonrisa.
?0ueno, si a)n quieres salir me llevar la almohada? respondi& a su ve, gui,ndole un ojo?
Para hacer ms c&moda tu 9siesta de bellea:.
?'o estar bien en cualquier rinc&n donde no me de la lu. (a verdad es que me gustara
mucho conocer el sitio donde tu padre te llevaba. "i no es problema para ti, que de pronto
caiga dormido...
?*inguno. =amos. !spera, t&mate unos minutos para acostumbrarte? pidi&, abriendo la
puerta sin dejarle salir, sostenindole con cuidado del brao. .ai/el se sinti& contento al
saber que quera cuidarle. !so le haca sentir feli, como cuando su padre estaba vivo.
?.i padre tambin soportaba bien la lu del sol, sabes4 $eca que era porque su vampiro
quera pintar.
?;u padre era un buen artista. .e encantara ver como pinta su hijo? sus palabras le
sorprendieron, mirndole fijamente durante un momento. (os ojos de .att tenan un claro
color aul, igual que el cielo de una tarde de verano. !ra un color muy hermoso? !sts bien
ya4
?", ya puedo ver.
?=amos. !speraC? volvi& a detenerle antes de cruar la puerta y le vio sacarse la chaqueta
para echrsela encima, protegindole del contacto directo con el sol? (uego buscaremos un
camino a la sombra de los rboles.
?$e acuerdo, .att.
!charon a andar por el sendero, perdindose en medio del bosque, dejando el pueblo atrs.
.ai/el estaba encantado. Caminar por el bosque en compa,a era mucho mejor que hacerlo
solo. +dems la sangre que .att le haba dado le haca sentirse mucho ms fuerte y
recuperadoL haba sido deliciosa, lo ms delicioso que nunca haba probado, pues como
vampiro de baja clase no tena derecho a beber directamente de un donante, sino de bolsas
de plasma que haban sido almacenadas. 8l nunca se haba quejado, pues le mantenan con
fueras, y cuando era peque,o su padre le haba dejado beber de l. Pero la sangre de .att
era dulce y especiada, con un fuerte sabor a vida que se haba transmitido por todo su
cuerpo, despertando los sentidos en su piel. (os colores que ahora vea entre el bosque, el
calor del sol que se filtraba por su ropa, los olores de la naturalea, parecan ms vivos y
ms despiertos que nunca. ;odo gracias a su sangre. (e mir& caminar a su lado, su rostro
sereno, su andar confiado y tranquilo, y se sinti& completamente a salvo. Btros vampiros, y
otros lobos que haba podido atisbar a su llegada al pueblo, le causaban miedo. .att era el
)nico que senta no le hara da,o. ' podra quedarse a su lado un par de das ms.
.ir& la senda por donde caminaban, protegida del sol por la alta c)pula de rboles que se
entrelaaban sobre sus cabeas. !l canto de los pjaros acompa,aba sus pasos y el viento
que sacuda las ramas, con su lenguaje de silbidos les saludaba. !ra un paraje tranquilo y
hermoso. Pronto sus odos de vampiro le trajeron el rumor del agua. .ir& a .att, quin
sonri&, apuntndole a un lado. ;ras pasar unos altos matorrales, .ai/el vio el agua de la
laguna, resplandeciente con la lu de la media ma,ana. "us ojos se abrieron inmensos
contemplando la plcida bellea del lugar, las aguas movindose suavemente con la brisa,
los juncos de la orilla balancendose en una dulce dana, los insectos jugando con sus
sombras en la cristalina superficie.
?Bh, .att K!s tan hermosoC? no pudo evitar e#clamar. =io la sonrisa de orgullo del lobo.
?.i padre nos traa aqu cada verano de peque,os, y con mi hermano seguamos viniendo de
mayores a pescar. 0ueno, no hay peces, pero nos gustaba estar aqu. $espus de su muerte y
la boda de .arcus, no he venido mucho.
?!s un buen lugar para conservar los buenos momentos. .e gustara mucho pintarlo?
admiti&, disfrutando el juego de lu y agua a su vista, el verde de las hojas, el dorado de las
hierbas bajas y las flores, el aul cristalino del agua. ;odo era un caleidoscopio de colores
tan bellos que sinti& una profunda reverencia. Cuando mir& a .att, ste le miraba con una
e#tra,a lu en sus ojos, entre clida y llena de a,orana. .ai/el sinti& ganas de apretarse
fuerte contra l y absorber todo el calor de su cuerpo, empapndose de su esencia vital.
Haca mucho que se senta solo, abandonado en un mundo que le pareca fro y sin forma
entre las paredes de la gran mansi&n, lejos de la lu y el calor que haba conocido junto a su
padre en la peque,a buhardilla, donde haba despertado con sus ojos de vampiro. !ran
pobres, pero se tenan el uno al otro, y el mundo les perteneca para ser contemplado y
alabado por el color de sus pinceles. .uchas veces haban recolectado hierbas del campo
para hacer pintura, y mendigado viejas sbanas donde poder pintar. "u padre se haba
alimentado de ratas, pjaros y otros animales callejeros para darle de beber, y aunque no
siempre era suficiente, y .ai/el recordaba haber pasado hambre muchos das, estaban
juntos y la risa de su padre nunca faltaba entre las estrechas paredes. "inti& la pena oprimir
su pecho de pronto. +hora estaba solo y haba dejado las paredes de su encierro atrs con la
gran mansi&n. !l mundo era otra ve suyo, pero deseaba tener alguien con quin
compartirlo A3uerra .att compartirlo con l4
?=amos a sentarnos aqu un momento? oy& su vo y vio que apuntaba a un grupo de rboles
no lejos. (e sigui& hasta all y se sent& a su lado. "e quedaron all un rato sin decir nada,
contemplando la tranquilidad del lago. "inti& de pronto el peso del sue,o entrar en su
cuerpo, que anunciaba la llegada del medio da.
?.att? dijo y casi sonri& al ver los atentos y bellos ojos aules que le miraron? (o siento,
pero creo que necesito dormir un poco.
?Claro. +delante. 3uiero decir, ya es la hora. ;)mbate y descansa.
?@racias? dijo mirando la hierba y buscando el mejor lugar para no estar e#puesto al sol. "us
ojos encontraron el hueco tibio de su regao y contempl& la idea de pedir que le dejara
dormir all A"era muy atrevido si se lo pidiera4 *o saba si .att tena a alguien en su vida
que compartiera su espacio vital, pero crey& que no, ya que viva solo en el bar. "e encontr&
con sus ojos y enrojeci& sin querer.
?3u ocurre4? pregunt& al verle inquieto. !l vampiro sacudi& la cabea, a)n ruboriado,
apartando la mirada de la suya. .att se pregunt& si sera alg)n ritual de vampiros antes de
dormir, que no quera que viese.
?.e preguntaba si... 0ueno, s que no nos conocemos de nada, pero...? le vio morderse los
labios y su est&mago dio un salto de ganas mal contenidas. Por qu el maldito tena que ser
tan se#y4 $espus de beber su sangre, bueno incluso antes de ello, los gestos y las cosas que
haca, le hacan desear echrsele encima de pronto y marcarlo como suyo. "upuso que
mucho era culpa del lobo en su interior. Pero no poda estar del todo seguro...
?3u pasa .ai/el4? pregunt& alando una ceja y atajando al lobo, antes de que ste dijera
algo que no quera or .=io que el rubor en su rostro aumentaba y se mordi& por dentro.
?Puedo dormir cerca de ti4 .e... me sentira mucho ms a salvo... Puedo4 Por favor? dijo el
chico casi sin aliento, dndole esa mirada con ojos de cachorro perdido de la que no poda
escapar. $emonios...
?Claro? dijo, disimulando su conmoci&n y los saltitos de felicidad que daba el lobo dentro de
su pecho. .ai/el sonri& dulcemente, y casi dio un salto de sorpresa al sentirle acomodarse
en su regao. ' el chico pareca tan inocente... Pero el gesto no le molest&, y se descubri&
acomodando el peso de su cabea sobre sus piernas, disfrutando de su cercana. Fncluso
puso la chaqueta encima de l para que no le llegara nada de sol. !n pocos minutos vio que
se quedaba absolutamente quieto, ni siquiera pareca respirar.
?.ai/el4? pregunt& preocupado, pasando una mano por su mejilla hacia su nari para ver si
respiraba. "u piel era suave aunque fra, y not& una muy leve respiraci&n que calm& su
inquietud. "e qued& contemplndolo. *unca haba visto a un vampiro dormir, bueno, nunca
haba visto a un vampiro tan de cerca que si bajaba el rostro podra besar esos suaves labios
rosas...? Hey, no te pases. 'a sabes que no quiero problemas en mi vida. ' un chupador de
sangre, no es precisamente lo que se llamara un compa,ero ideal...
?Compa,ero, s, s? corrobor& el lobo. .att rod& los ojos.
?*o oyes nada de lo que te digo.
?+ tomado nuestra sangre. *os pertenece. $ebemos cuidar de l. !s nuestro.
?*o. 3u haya tomado de mi... nuestra sangre, no lo hace nada nuestro...
?Hay que protegerlo. *os pertenece.
;estarudo lobo. Pero al mirar el rostro dormido en su regao, .att tuvo una e#tra,a
sensaci&n de calma y familiaridad. !ra increble que solo le conociera de la noche anterior,
pareca como si llevasen juntos mucho tiempo. !l vampiro era dulce y sincero, aunque un
poco torpe, pero de alguna forma e#tra,a le pareca encantador. "uspir&. 3u iba a hacer
ahora4 Porque una ve que a su lobo se le meta algo en la cabea...
Mnas cuantas horas despus se despert&, estirndose con cuidado para no mover a su
vampiro. "e haba quedado dormido con la espalda apoyada contra el rbol, acunado por la
dulce pa del lago y por algo ms que intuyo vena del chico. 3uis los vampiros incitaban
al sue,o con el suyo, pero encontr& que no poda resistirse a echar una cabeadita al ver su
pacfico rostro dormido. (os recuerdos de su padre vinieron a l, su sonrisa junto al lago, su
vo, su acogedora presencia siempre que le necesitaba, siempre paciente. (e echaba mucho
de menos. =io que el chico en su regao se mova con suavidad y sonri& sin querer. 3uin le
iba a decir que un da dormira junto a un vampiro en su laguna4 "u padre sin duda hubiera
echado un par de buenas carcajadas y le hubiera dicho que adelante, que las diferencias no
importaban, si lo esencial estaba all.... !spera, !sencial4 3u era eso de lo esencial4
?.att? oy& su vo, en un susurro ronco por el sue,o que le pareci& perturbadoramente se#y.
+dems de su sonrisa. Casi lament& la perdida del peso de su cabea sobre sus piernas. !l
chico se sacudi& los rios y le dio una suave sonrisa.
?Has dormido bien4? pregunt& para disimular los latidos irregulares de su cora&n.
?". .uchas gracias. !spero no haber sido una molestia? se disculp& y .att se hall&
deseando tirarle sobre la hierba, hacindole cosas que...
?*o. *o ha sido nada. Por qu no caminamos un poco4? se puso de pie sin esperar su
respuesta. .ai/el se puso de pie a su lado. +nduvieron un rato por la orilla del lago y .att
revivi& con ms fuera la presencia de su padre. !ran poco despus de las cinco y el sol
brillaba con tonos dorados sobre el agua. Pronto tendran que regresar al bar para preparar
las faenas del da? ;ienes hambre, .ai/el4 5egresaremos dentro de un rato y comeremos
algo? se volvi& a mirarle, pero no le vio. >runci& el ce,o preocupado, mirando el agua. "e
habra tropeado y cado4 Pero no haba escuchado salpicar agua. .ir& hacia el camino
entre los rboles? .ai/el4 $&nde ests4? llam& inquieto, el lobo urgindole a buscarlo.
?.attC =en, .ira lo que he encontradoC? oy& su vo en un claro no lejos. Corri& hasta all
preocupado y le vio agachado a los pies de un rbol, junto a unas flores de hermoso color
aul. =io la alegra y la ilusi&n en sus ojos? "on flores de acianoCC? e#clam& con una enorme
sonrisa. .att se acerc&, mirndolas interesado.
?(as del cuadro de tu padre.
?". !s una se,al. !stoy seguro de que desea que vuelva a pintar? le asegur& su vo, y los
ojos que le miraron tenan un dulce brillo de a,orana. =io que sus dedos largos y plidos
acariciaban los ptalos de las flores.
?0ien, entonces A+ qu esperas4 Coge las que necesites y nos las llevaremos.
?Pero... no tengo pinceles, ni lieno... +unque puedo comprar algo de papel y usar mechones
de mi pelo para pintar? le oy& decir, cogindose un corto rio y tironendolo como para
sacarlo en ese mismo momento. .att sonri&.
?;ranquilo. ;engo alg)n material en el bar. +lgunas cosas que dej& mi sobrino la )ltima ve
que estuvo, ya sabes pintura, pinceles y papel. *o es mucho, pero puedes utiliarlo? minti&.
=io sus ojos abrirse otra ve enormes y la hermosa sonrisa florecer en su rostro. $ios, le
encantaba su sonrisa. !l lobo le dio su aprobaci&n.
?Bh, .att. .uchas, muchas graciasC
?*o es nada. =amos, no te quedes all. Coge tus flores y vamos a comer algo.
?"? le vio coger con cuidado unas pocas de ellas y hacer un peque,o ramillete.
?Crees que sern suficientes4
?!l tinte de la flor de aciano es muy intenso. +dems, no quiero llevarlas todas. ;ienen
derecho a crecer al sol? dijo de esa manera tan suya, que le hio recordar a como se haba
puesto ante la sola idea de tener que matar a un animal para seguir con vida. 3uin dira que
iba a conocer a un vampiro amigo de la vida natural4 (o pr&#imo que sabra de l, sera que
se unira los grupos rescatistas de animales o estara por all protestando por sus derechos.
(a idea le hio sonrer.
5egresaron con el sol de la tarde dorando las copas de los rboles por sobre sus cabeas.
Haba ms actividad en el pueblo que esa ma,ana y .att salud& a varios de sus amigos al
verles, una ve que salieron del bosque por otro camino ms cerca de las calles. =olvi& el
rostro, viendo el compungido gesto del vampiro, casi hundindose en la chaqueta para
esconderse cuando alguien pasaba cerca, pegndose a l levemente en busca de protecci&n.
!so le hio sonrer. "u vampiro era tmido. Pero bueno, era normal, l tampoco estara muy
tranquilo si estuviera en una calle llena de chupasangres.
?=amos? le tom& del brao y le mantuvo cerca de s mientras se acercaban al bar. *ot& que
le segua d&cil y ms tranquilo. !ra un buen chico. ' casi no notaba ya la diferencia de
altura con la suya. *ada ms entrar en la cocina, le vio buscar un cuenco para poner las
flores y sentarse a la mesa para empear a quitarles los ptalos. "e vea que el artista en l
estaba vido por pintar? =oy a prepararnos algo de comer.
?Bh, djame ayudarte? intent& ponindose de pie, pero .att le detuvo con un gesto.
?;) oc)pate de lo tuyo. 3u necesitas para hacer la pintura4
?"olo un poco de aceite, y un pa,o para prensar las flores? .att le alarg& ambas cosas y
disfrut& al ver de nuevo aquella sonrisa luminosa. "e volvi& hacia la cocina y prepar& algo
rpido en una cauela, dejndole al fuego. "e acerc& a la puerta, mientras le vea
concentrado en su tarea.
?=uelvo en un minuto.
?$e acuerdo. ;en cuidado afuera? le pidi& mirando sus ojos preocupado. .att sonri&. ",
tendra cuidado de los lobos malos que tanto le asustaban, aunque l fuera uno de ellos.
"ali& a la calle y se dirigui& a comprar los materiales para hacer feli a su vampiro.
.ai/el prens& los ptalos de las flores y vio el hermoso color que se destilaba. (e traa
tantos recuerdosC !l aceite era de cocina y el prensado bastante r)stico, pero no le import&.
Fba a volver a pintar, a traer a la vida los colores que tanto haba amado su padre. !l solo
pensamiento enviaba escalofros por su piel. =io a .att regresar y alargarle una caja de
pinceles, una paleta de acuarelas y un bloc/ grande de hojas blancas para pintar. "e qued&
at&nito.
?Pero, esto es de tu sobrino4 Parece material profesional? dijo mirando los artculos.
?3u puedo decir. + su padre le gusta consentirle? (a mentira era obvia, ya que todo estaba
nuevo, y no tena marcas de dedos peque,os y llenos de pintura. "u gesto le emocion&.
?@racias, .att. *o sabes lo mucho que significa para m todo esto? y lo deca de cora&n,
pues nadie hara tanto por un desconocido. ' menos un vampiro, siendo como se supona
eran enemigos naturales, con tregua o sin ella.
?$jate de tonteras. =enga, vamos a comer antes de que se enfre? le e#hort& y .ai/el se
encontr& sonriendo feli, emocionado al ver su gesto tan generoso y falto de pretensi&n. !ra
tan diferente a las cosas que haba odo en la mansi&nC 3ue los lobos eran seres salvajes y
primitivos, sin una ona de bondad en ellos. 0ueno, l no lo crea, pero orlo decir todos los
das, lo haca difcil de evitar pensar a veces...
?'o creo que eres genial. Mn lobo genial? le dijo con orgullo, y le vio alar una ceja
divertida.
?@racias. " que lo soy. .odestia aparte? brome& y eso le hio rer. "e senta feli de poder
estar a su lado, de haberle conocido. *o se senta una nulidad a su lado, como lo haba
sentido tantas veces en la mansi&n. (lev& los platos a la mesa, con cuidado de no dejar caer
nada y se sent& a esperarle para comer. Comieron en silencio y .ai/el hio su decisi&n.
Pintara algo para l, algo hermoso, que fuera un bello recuerdo para que no le olvidara
cuando sus caminos se separaran. (a sola idea le dola de una manera que no haba sentido
desde la muerte de su padre, pero era un hecho que tendra que enfrentar. Por mucho que lo
deseara, no podra estar por siempre a su lado. .att se mereca encontrar a una buena loba
entre su gente, con quin tener lobitos y ser feli. 8l tena su pintura y siempre podra
encontrar un sitio en el bosque donde vivir. +unque la idea de tener que morder a alg)n
animal para sobrevivir no le seduca nada.
?*o te ha gustado4? pregunt& inquieto, al verle hacer una mueca mirando el plato. !l chico
neg& con fuera.
?!st delicioso, .att. (o siento, solo pensaba en otra cosa.
?!n qu4? consult& curioso y le vio ruboriarse.
?Cuellos peludos? sus palabras casi le hicieron atragantarse de una carcajada.
?*ecesitas ms sangre4
?*o, no... estaba pensando en el futuro. *o necesito ms sangre. ' muchas gracias por
darme un poco de la tuya. Ha sido genial... bueno, t) eres genial, pero el hecho de
compartirla conmigo ha sido genial y muy generoso, aunque no nos conocemos de nada y
yo...
?=ale, vale, tranquilo. 5espira. ;e vas a ahogar si hablas tanto sin parar? le aleccion&. +l
parecer, empeaba a parlotear como un poseso cuando se pona nervioso. (e vio tomar una
profunda respiraci&n para calmarse.
?"olo quera agradecerte. (a sangre que me diste me valdr por un tiempo.
?Por cunto4
?+lgunos das? respondi& sin ms aclaraciones, volviendo a comer. .att frunci& el ce,o. '
luego qu4
?' despus qu, piensas morder animales en el bosque4? no pudo evitar preguntar y le vio
hacer un gesto de asco, que casi le arranca una sonrisa. (e vio arriscar los hombros,
hundiendo la mirada en el plato.
?'a me las arreglar.
?*o. !s nuestro. "olo beber de nosotros? protest& el lobo. .att apret& el pu,o, mirndole
intensamente.
?0ueno, cre que venas a buscar una pareja en el baile. ;e piensas rendir entonces4?
consult& y su cora&n empe& a latir irregularmente. .ai/el volvi& a arriscar los hombros.
?*o lo s. *o creo que nadie me quiera a su lado? dijo casi en un murmullo.
?!s nuestroC? volvi& a insistir el lobo y .att le orden& callar.
?*o lo sabrs si no lo intentas? insisti& a su ve, clavando la mirada en los ojos de tono miel
que se suspendieron de los suyos. (e vio sonrer con timide.
?;al ve... ;ienes ra&n. *o pierdo nada. (o peor que pueden decirme es no? admiti& por
fin.
?(o ves4 "eguro que encontrars a alguien bueno para ti? dijo y un pu,o de dolor sordo
golpe& su pecho. +lguien, alguien ms4... By& al lobo gru,ir en protesta. Pero, heyC .ai/el
era un buen chico, mereca encontrar una vida mejor. 8l no tena mucho que ofrecer
tampoco.
?;) has sido bueno conmigo? le oy& decir, y la lu dulce en sus ojos le dej& mudo por un
momento.
?0ueno, eres fcil de tratar. ' nada pomposo, como otros vampiros que he visto? dijo,
apartando un poco la mirada, algo sonrojado sin saber porqu. =io sus ojos abrirse con
sorpresa.
?Has conocido a otros vampiros4
?(os das de la fiesta. +lgunos pasaron por aqu. Pens que todos erais unos engredos,
siempre a la moda y mirando a todo el mundo por encima del hombro.
?Bh, esos solo son los vampiros de alta clase. "on de la noblea y creen que nadie es mejor
que ellos? le sorprendi& el tono resentido de su vo y la amargura en su gesto. Pareca que
no le haban tratado muy bien en ese lugar. 0ueno, ya le haba contado lo de su padre, pero
no imagin& que le haban maltratado tambin. !so le hio enfadar.
?Hey, no creo que ninguno de ellos tenga tus dotes de pintor. "eguro que carecen de todo
talento? dijo, seguro de que nadie podra competir contra el pincel de su vampiro... "uyo...
"u lobo dio su gru,ido de aprobaci&n. (e vio sonrer con timide.
?+)n no has visto ninguna de mis pinturas. !spera primero a verlas? advirti& y volvi& a
comer de su plato. .att neg& con la cabea. !staba seguro de que su vampiro tena mucho
talento, lo vea en sus ojos, en sus manos. =iva y respiraba de su arte.
Cuando acabaron de comer, no dej& que le ayudase, alentndolo a subir a la habitaci&n para
acabar con su destilado de flores y empear a usar los materiales. (e vio subir contento, y
not& que la sonrisa no abandonaba su cara mientras regresaba al bar, para aprestarlo a la
llegada de su clientela habitual. Haca cunto no se senta tan contento4 3uin iba a decirle
que tener bajo su techo a un vampiro pintor le iba a hacer tan feli.
(a jornada de trabajo transcurri& normal, con pocos incidentes, bueno nunca pasaba nada
fuera de lo com)n, pero .att se encontr& ansioso de regresar a sus habitaciones. "upuso que
solo era curiosidad por ver lo que .ai/el haca, ya que no haba asomado ni la punta de la
nari desde que haba subido. Pens& en llevarle algo de comer, pero entre una cosa y otra no
haba podido. Por fin, cuando cerr& el local, subi& con rapide cargando el plato de
bocadillos que haba preparado para l. +l entrar en la habitaci&n, el olor de la pintura llen&
su nari. (e vio de pie frente a una silla que haba improvisado como atril, dando toques
sobre una hoja con el pincel, su camiseta y manos llenas de manchitas coloridas. Haba
varias hojas repartidas por all, estratgicamente colocadas para que se secaran.
?Bh, hola .att. 3uieres que baje a ayudarte4? le salud&, dndole una sonrisa clida que le
lleg& al cora&n.
?*o. He cerrado ya.
?Has... has cerrado4 Pero, qu hora es4? consult& sorprendido. "us palabras le hicieron
sonrer.
?Casi la una. Hoy ha estado tranquilo, as que he cerrado antes? le vio mascullar
sorprendido.
?(o siento... me he... perdido un poco...? se disculp&. .att se acerc& y le estir& el plato de
bocadillos, que tom& con dedos manchados. !so le hio sonrer a)n ms.
?*o pasa nada. ' como te dije, ha estado tranquilo. Has estado pintando todo el tiempo4
Puedo verlos4? pidi&, acercndose a una de las hojas en el suelo. (a imagen de una ventana
abierta, con un puente de piedra cubierto de enredaderas con flores llen& su retina. Pareca
tan real, a)n cuando los colores se difuminaban a la distancia, como si estuviesen envueltos
por la niebla? =aya. !s... muy bonito? no supo que ms decir. +l& los ojos y vio la sonrisa
tmida y el sonrojo del vampiro? ;ienes mucho talento, .ai/el.
?"on solo cosas que recuerdo de mi ni,e. (a ventana por la que miraba la ciudad en la
boardilla donde vivamos, el olor de la madreselva en primavera. ;odos son recuerdos de
aquella poca feli.
?!s muy hermoso. !s un bello recuerdo? dijo sin soltar el que tena en su mano, mirando
otros de calles empedradas que suban, de campos abiertos y dorados por la hierba, de
pjaros aferrados a cuerdas con ropa tendida. Pero e#tra,amente, ninguno de formas
humanas. Pens& que querra pintar a su padre. "e acerc& donde estaba la hoja sobre la silla,
pero el cuerpo del vampiro se interpuso en su camino.
?+)n no est listo? dijo con ojos muy abiertos, casi con pnico y .att se detuvo.
?Podr verlo cuando acabes4? pidi&, y un deseo impaciente por verlo le llen& de improviso.
.ai/el tena mucho talento, y no solo en la mecla de sus colores y dibujos, sino en lo
mucho que estos e#presaban y transmitan. !ra como mirar en lo profundo de su cora&n.
"u lobo estaba sin palabras, y l mismo estaba mudo y absorto en su contemplaci&n. (e vio
sonrer otra ve con timide y apartar los ojos de los suyos.
?!s... es algo que quiero a darle a mi pareja. 3uiero que sienta que vale la pena tenerme a su
lado? dijo de una forma que le hio estremecer, primero de tristea y luego de enojo.
?"era un idiota s no te valorara. !res un gran artista, .ai/el. *o lo dudes nunca? dijo con
fuera y su propio tono le sorprendi&. !l lobo aull& en su interior, rabioso.
?.o, mo. 8l es moC
?@racias? oy& su vo y vio su sonrisa agradecida.
?=oy a acabar abajo. Brdena y lmpiate un poco, antes de irnos a dormir? dijo, intentando
que ese e#tra,o pesar que le coma por dentro no se notara.
?(o har APuedo ayudarte abajo4
?*o, no hace falta? dijo antes de salir por la puerta y bajar la escalera con prisa.
.ai/el suspir&, mirando la hoja sobre la silla, lamentando la mentira. @uard& las cosas y la
dej& a buen recaudo para que se secara, limpiando las manchas que haban cado en el suelo
y lavndose en el ba,o. Cuando .att subi& otra ve, ya estaba en el sof cubierto por sus
mantas. (e sonri&, oyndole ponerse el piyama y meterse a la cama.
?3u duermas bien, .ai/el? le despidi& su vo, apagando la lu.
?;) tambin, .att.
?0uenas noches.
?0uenas noches? y cerr& los ojos en la oscuridad, dejndose acunar por la profunda
respiraci&n del lobo que le haba acogido y protegido, salvndole de s mismo y de la
soledad, evocando el calor del cuerpo que le haba acunado aquella tarde frente al lago,
antes de que el sue,o le venciera.
+l amanecer se levant&, mirando un instante la sombra de su cuerpo dormido en la cama,
a,orando como antes su calor. 0aj& en silencio la escalera, dispuesto a ser de utilidad, ya
que se haba pasado toda la tarde pintando, olvidado de que estaba all para ayudar a .att
con su negocio. +l menos por unos das, hasta que encontrara una pareja... "i la encontraba.
!n ello estaba perdida su mente, cuando al abrir la puerta de la cocina vio una enorme figura
apoyada contra el muro. !l desconocido le mir& y .ai/el not& la larga melena oscura que
cubra la cabea grande, de duras facciones masculinas, el ancho pecho, los musculosos
braos y las enormes manos que sostenan unos papeles. Cunto medira4 $os metros4
?3uin eres t)4? pregunt& el gigante, dando un paso hacia l y el pnico se desat& en su
interior.
?.a...
?.a4
?.++++;;CCC? grit& con toda la fuera de sus pulmones.
.att abri& los ojos de golpe, la respiraci&n acelerada en su pecho.
?K*uestro cachorro est en peligroC? rugi& el lobo dentro de su pecho y un gru,ido sordo
escap& de su boca. "alt& fuera de la cama, las piernas musculosas cubiertas de vello y los
braos convertidos en garras, los colmillos abrindose paso en sus mandbulas modificadas.
"u media transformaci&n era su poder. Poda dejar salir en su cuerpo de hombre las partes
del lobo que necesitaba para luchar. (a mayora de hombres lobo o eran humanos, o eran
lobos, su transformaci&n era siempre completa de un lado u otro. 8l tambin poda, pero su
poder consista en manejar la transformaci&n a su antojo. ' ello implicaba una cone#i&n
constante con su parte animal. "e deca que este poder estaba solo permitido a los alfas de
las manadas, pero para l siempre haba sido algo natural. +unque la posici&n de alfa no le
seduca para nada. !ra demasiado esfuero y poca diversi&n. !l lobo en l le prest& la
velocidad y la fuera, y se dej& caer de un salto por la escalera al suelo del bar, dndole una
buena patada a la puerta, para entrar con un rugido poderoso en la cocina. $e inmediato el
vampiro se ocult& a su espalda y se apret& con fuera contra l. .att rugi& al intruso en
amenaa.
?=aya entrada, hermanito. "i te levantas as todas las ma,anas, nos quedaremos sin local?
escuch&. !l lobo se detuvo en seco.
?.arcus? rugi& con vo rasposa.
?"ip. 0uenos das t) tambin? dijo acercndose a la puerta, que se haba quedado colgando
inerte de un solo gone? !sto tendr que salir de tu salario.
?3u haces aqu4? gru,&, mientras la transformaci&n retroceda. "inti& a su espalda el calor
cercano y los temblores del vampiro. "us braos le rodeaban la cintura, apretndole con
fuera y el latido de su cora&n martilleaba en su espalda. Pas& las manos sobre su piel para
estrecharle ms contra s, infundindole calor para tranquiliarle? !s un poco temprano, no
crees4? rega,&, ya con su vo normal, y le vio alar una ceja curioso.
?=ena por las facturas, para revisarlas antes de llevar a =itor al dentista. !st cambiando los
caninos.
?=aya. !so debe doler? dijo recordando cuando cambi& los suyos. "inti& en su cuello el
aliento de .ai/el. =olvi& un poco el rostro y se encontr& con su mirada cercana llena de
preguntas? ;ranquilo, es solo mi hermano. !s un tipo grande, pero inofensivo.
?Her... hermano4? balbuce&, y de pronto pareci& recordar. .att sinti& como soltaba el agarre
de su cintura un poco? Hermano.
?". "e encarga de la parte administrativa del bar. ;odo lo aburrido.
?@racias. ' tu amigo es4? pregunt& mirndole y .att sinti& que hunda en rostro en su
cuello.
?.ai/el. !s un vampiro del sur que vena a la fiesta de la tregua.
?Pero, la fiesta ya termin&? dijo su hermano alando una ceja. .att arrisc& los hombros.
*ot& que el vampiro pareca a)n asustado, sin querer separarse de l, buscando su
protecci&n. ' not& que sus manos no haban dejado de apretarle tambin contra s. "u lobo
no quera dejarle ir.
?=en, no hay peligro? dijo haciendo un esfuero supremo y separndose de l. =io la mirada
desolada en sus ojos, que le caus& un salto en el cora&n y la consecuente protesta de su
lobo, pero no poda ceder a su debilidad. ;om& la mano del vampiro y se acerc& a su
hermano. Como antes, .ai/el le sigui& d&cilmente? .ira l es .arcus. .arcus, ste es
.ai/el.
?Hola, .ai/el. "iento que nos hallamos conocido as, pero es un placer? dijo estirando una
mano cordial, que el vampiro tom& y apret& tambin.
?0uenos das. Fgualmente... '... yo tambin lo siento? balbuce& nervioso. .att casi sonri&,
entrelaando con fuera sus dedos con los del vampiro para darle apoyo.
?;ranquilo, solo fue un mal entendido. =amos a desayunar? sugiri& mirando a .arcus, quin
asinti&. (lev& al chico hasta la mesa y le sent& all, acercndose luego a la cocina? Huevos
con jam&n4
?", gracias. (a verdad es que .att es un e#celente cocinero? le asegur& al chico, quin
asinti& con sonrisa tmida.
?+ ver que dice .issi cuando te oiga? brome& .att, poniendo la sartn al fuego y cascando
los huevos. Puso otra solo para huevos, ya que .ai/el no coma carne. Cuando volvi& un
poco la vista, vio que ste le miraba, al parecer menos nervioso, pero con ojos que le pedan
no le abandonase? Por qu no pones los platos en la mesa4? le pidi&, y sonri& al verle
levantarse de inmediato para acercarse a la alacena. !so le ayudara a ponerse menos
nervioso. *o saba porque el chico era tan tmido cuando haba ms gente al rededor.
.arcus se qued& en la mesa, echndole un vistao a las facturas. $e reojo vio al tembloroso
y plido vampiro que haba encontrado esa ma,ana en su cocina, moverse con cuidado y
casi grcilmente mientras pona los platos y cubiertos en la mesa. ;uvo buen cuidado de no
moverse cuando pas& a su lado, ya que not& su nerviosismo, y se sorprendi& al ver la sonrisa
florecer en su rostro cuando recibi& alguna palabra de su hermano. Pareca un cachorrito
atento a las &rdenes de su amo, feli de complacer. (a idea le pareci& divertida. .att
siempre haba sido muy independiente, antisocial a su manera, ya que le gustaba que las
cosas se hicieran como l quera o lo dejaba y se marchaba. "e pareca mucho al carcter de
su padre. ' le sorprendi& lo dulcemente que trataba al vampiro, casi con el cuidado que
tendra con un amante, aunque no le haba conocido ninguna relaci&n que durara ms de una
semana. =io los ojos del vampiro, enormes e inocentes, asustados cuando not& que clavaba
la mirada en l, retrocediendo un par de pasos sin querer. *o se pareca en nada a los
vampiros que haba visto la semana de la fiesta, seguros e incluso un tanto arrogantes.
+unque haba odo que no eran malos tipos cuando se los conoca. 8ste pareca un ratoncillo
aterroriado antes las arpas de un gato. !so le hio sonrer. *ot& que se calm& en cuanto su
hermano se sent& a la mesa con ellos, poniendo su silla ms cerca de la suya.
?' entonces, .ai/ A=enas a buscar pareja en la fiesta4? le pregunt& luego de amparse una
buena cucharada de huevos con jam&n, deliciosos como siempre. .mh, la receta familiar. !l
vampiro se atragant&, tosiendo mientras .att le daba palmaditas en la espalda.
?'o... solo... quera... pintar? consigui& decir a medias.
?.ai/el tiene mucho talento. !s un gran pintor. ;rabajaba en la mansi&n de... no me acuerdo
el nombre. Pero bueno, atraves& todo el bosque para venir a la fiesta? dijo su hermano con
orgullo, acariciando su espalda. "onri& al ver al vampiro enrojecer.
?(stima que llegaras un poco tarde. Pero eso se puede arreglar. Hay un par de bellas lobas
solteras que podra presentarte? dijo con toda intensi&n, viendo el gesto de su hermano
endurecerse, aunque no dijo nada. !sto se pona divertido.
?'o, no... @racias, pero las mujeres no me... yo no...? comen& a balbucear otra ve, pasando
del rojo al carmes. .arcus arrisc& los hombros.
?Prefieres un lobo4 *o hay problema. Conoco a varios sin pareja, que podran estar
interesados. (a mayora estaban enamorados de mi hermano, pero ya se han curado?
molest& hacindole un gui,o, pero .att y el chico se miraban estupefactos.
?;e gustan los machos4
?;e atraen los hombres4? se preguntaron al mismo tiempo. .arcus mir& de uno al otro al
verles echarse a rer, alando una ceja curioso.
?Pens que te gustaban las chicas.
?' yo a ti las lobas? respondi& su hermano, sin dejar de sonrerle. .arcus dio una tosecilla
para hacerse notar.
?!ntonces, 3u te parece si esta tarde me traigo algunos amigos al bar y as les conoces4
3uis pueda surgir algo ms? dijo gui,ndole el ojo esta ve al vampiro, que se rubori&
suavemente.
?*o estara mal. Pero promet ayudar a .att en el bar? dijo bajando la mirada y con sonrisa
tmida. .arcus mir& a su hermano y le vio apretar tanto las mandbulas que los huesos se
marcaron en su rostro.
?*o creo que eso sea un problema, verdad hermanito4 Mn vampiro tan lindo y talentoso no
debera estar soltero, no crees4 "eguro que esta noche encuentra al lobo de su destino? dijo
con toda intensi&n, viendo la mirada asesina que le lan& .att. "iempre tan igual... .ir& el
reloj en su mu,eca? .ejor me voy. .issi me est esperando con =itor.
?@racias por venir? oy& a su hermano mascullar de una forma que le dijo senta totalmente
lo contrario.
?!sta tarde vendr a traerte tu novioC? asegur& al vampiro antes de escapar por la puerta,
rindose con ganas en el e#terior.
.att mir& a .ai/el, quien se haba quedado en sonrojado silencio sentado a la mesa. !l
lobo gru,& y refunfu,& en protesta. +pret& los pu,os para mantener la cordura. !se
.arcus... Por qu tena que meterse donde no le llamaban4
?.aldita sea? mascull&, raspando la sartn y dejndola caer dentro del fregadero con fuera.
"e volvi& al or la e#clamaci&n ahogada del vampiro, viendo sus ojos abiertos con miedo?
(o siento, se me ha escapado de las manos.
?*o importa. + m me pasaba todo el tiempo en la mansi&n? dijo con una suave sonrisa
comprensiva. .att se pas& la mano por la cara. !sa sonrisa, todas ellas, todas sus
e#presiones... ? ;u... tu hermano es muy agradable? le oy& decir. (e mir& y vio sus ojos
mirarle preocupados. !l color en ellos cambiaba con la lu, como un bote de miel en la
ventana. !ran hermosos...
?.os. *o son de nadie ms, solo mos? reclam& el lobo herido. .att suspir&. Cuntas ms
locuras le quedaban por hacer4 *unca se haba sentido tan perdido, y al mismo tiempo tan...
tan vivo...
?0ueno. =eremos lo que pase esta tarde? pens& y vio su ce,o fruncirse, dndose cuenta de
que lo haba dicho en vo alta? 3uiero decir... $e qu estbamos hablando4
?$e que tu hermano es agradable.
?0ueno, tiene sus momentos. *o es un mal tipo? admiti& acercndose al fregadero para lavar
la sartn, cuando sinti& el calor de su presencia a su espalda. "u cuerpo e#plot& de
sensaciones, recordando los braos en su cintura, el latido de su cora&n contra su piel, el
aliento en su cuello.
?!s muy amable de buscar a alguien para m. 3uis, quis esta tarde pueda conocer a
alguien especial.
?*o... noC .oC !s moC? grit& su lobo, ara,ndole desesperado.
?$jale ir. !s lo mejor. 3u haramos con un vampiro en nuestras vidas4? le detuvo .att,
pero su dolor tambin le hiri&. "e qued& en silencio mientras limpiaban, dejando a .ai/el
terminar de lavar mientras l suba a cambiarse y bajaba para limpiar el bar.
$espus de acabar, .att le propuso dar una vuelta. !vit& el camino principal, sabiendo lo
nervioso que le pona la presencia de otros lobos, y le llev& otra ve por la senda del bosque
hacia el lago. +l menos all se senta ms en pa. Cuando lleg& la hora de su sue,o
vamprico, .ai/el se recost& a su lado, ya no en su regao como antes, y si bien lament&
que no lo hiciera, no dijo nada al respecto. .ejor acostumbrarse antes de que se marchara.
By& claro el aullido de su lobo, dicindole que no le dejara partir de su lado. "e qued&
mirando su rostro largamente, tratando de grabar en su retina su imagen. "us dedos
acariciaron los casta,os rios del dormido vampiro, disfrutando de su suavidad. 0aj& por sus
ojos, tocando sus pesta,as, sus prpados, el puente de su nari, sus labios. (an& un suspiro,
soltndole y apartndose para ponerse de pie y acercarse a la laguna.
?3u quieres que haga con un vampiro4 +dems, le gusta pintar y yo de pintura no s nada.
+dems... adems...
"e le acababan las raones. 3u ms raones haba para no tenerle a su lado4 (a )nica y la
ms poderosa de todas. Perderle, como haba perdido a su padre, a su hermano, a)n cuando
ste segua cerca. *o quera estar solo de nuevo, pero saba que todos acababan al final
dejndole, marchndose a hacer sus vidas y no tena ganas de volver a tener que lamerse las
heridas, solo y abandonado. !ra mejor si pona sus fueras en lo )nico que vala la pena, que
estaba all y all estara hasta el final% su negocio. "e volvi& y el dolor aguijone& su pecho
cuando mir& al vampiro dormido en la hierba. !ra un lobo solitario, haba decidido serlo,
pero en el fondo, muy en el fondo, a)n quera encontrar a alguien especial.
.ai/el despert& y pens& que se haba quedado solo. "e al& de un salto y mir& alrededor
presa del pnico. .att le haba abandonado4 0usc& con la mirada y no le vio. +quella
ma,ana se haba llevado un susto de muerte, 3uis estaba enojado con l por asustarse de
su hermano4 "us ojos se llenaron de s)bitas lgrimas.
?Hey, ya te has despertado. 3u pasa4? oy& su vo preocupada, girndose para verle de pie
a su espalda.
?.attC? sollo&, acercndose a l.
?3u pasa4 Has tenido un mal sue,o4 ;e ha picado un bicho mientras dormas4? consult&
con vo inquieta, mirndole alarmado. .ai/el se sec& las lgrimas y sorbi&. "iempre haba
sido un vampiro muy llor&n.
?Pens.. cre que te habas marchado. 3u estaras enojado conmigo por lo de esta ma,ana?
admiti&. Cuando le mir&, le vio sonrer con ganas.
?*o seas bobo. Por qu iba a enojarme4 .i hermano es un buen tipo, pero creme, si no
fuera mi hermano, tambin me dara miedo su aspecto? sus palabras le hicieron sonrer.
"inti& una mano clida tocar su mejilla, secando las lgrimas? .i padre tambin era un
hombre grande. 'o soy el )nico que ha heredado el fsico de nuestra madre. Pero no te
enga,es. "oy mucho ms peligroso que .arcus.
?'o creo que eres genial? asegur&, mirndole con orgullo. .att tena un pelo oscuro y
espeso, una piel de suave tinte dorado en la que resaltaban muy bien sus ojos aules. !ra
masculino y hermoso. .ai/el dese& tener a mano papel y lpi para dibujarle? .e gustara
pintarte? se le escap& decir y se sonroj& al ver su mirada sorprendida.
?Pens que no pintabas retratos. 3uiero decir, ayer todo lo que pintaste fueron paisajes. Cre
que haras el retrato de tu padre? sus palabras despertaron el sentimiento en l. 0aj& la
mirada, dando un suspiro profundo que sinti& le desgarraba el alma.
?*o puedo pintar a mi padre... +)n... duele demasiado? admiti&, ms para s mismo que
para l. By& la suave e#clamaci&n de .att.
?(o siento. (o siento mucho .ai/el, no quera...
?*o, est bien. !s solo que a)n no he superado su prdida.
?0ueno, es normal. (a verdad es que no s si es algo que pueda superarse. 'o tambin
e#tra,o al mo. 'o no pinto, pero bueno, tengo su local? sus palabras le dijeron que intentaba
consolarle. "onri& pensando en su propio dolor, en las raones y pensamientos que llevaba
tanto tiempo escondidos en su cora&n.
?+ veces creo que es una maldici&n ser un vampiro? admiti& y vio su ce,o fruncirse.
5egres& al rbol frente al que haba dormido y se sent&. .att se sent& junto a l.
?Por qu dices eso4 *o te gusta ser vampiro por lo de tener que morder animales4
?*o. *o me gusta saber que a)n tengo un largo tiempo por vivir. +ntes no me importaba,
porque mi padre estaba conmigo. !l mundo tena el brillo y el color que sus ojos me
mostraban. !staba vivo porque l lo estaba. Pero ahora... todo es tan oscuro y tan sombro?
admiti& y sus ojos se llenaron de lgrimas, evocando el pasado? Cre que estaba prisionero
en la mansi&n, que sus paredes me tenan atrapado en su gris oscuridad, en su soledad, por
eso quera escapar. Pero no sirvi& de nada... el poo, el vaco sigue aqu? dijo apretando la
mano sobre su cora&n? !l mundo es bello y luminoso, mis ojos lo pueden ver... Pero no me
hace feli. *o puedo ser feli .att, Por qu ya no puedo ser feli4? consult& con
desesperaci&n, mirando los ojos que le observaban tan cerca, tan preocupados? 3uiero ver el
mundo como l me lo mostr&, como lo senta cuando estaba a su lado, pero no puedo... he
perdido la lu. !stoy ciego. !n un mundo lleno de bellea, yo estoy ciego y camino entre las
sombras? logr& decir antes de que los solloos cortaran su vo. "inti& los braos de .att
rodearle y el calor de su cuerpo apretarse al suyo.
?*o ests ciego. "olo dolido. !s tu pena la que habla. +yer, cuando mir tus pinturas pude
verte de verdad, la lu que desprendes, el amor en tus recuerdos. !so no es obra de un
hombre ciego.
?'o no quiero vivir en este mundo, .att. 'a no quiero vivir ms? sollo& contra l y sinti&
como le apretaba con ms fuera. "e sostuvo de l y dej& que la pena que lo inundaba desde
haca tanto fluyera de l. 3u ms poda hacer4 Cuntas noches oscuras haba pasado
mirando la luna, solitario desde su ventana, a,orando el pasado que no volvera, el calor del
amor que ya no estaba a su lado. "i la vida era esto, soledad y sombras, ya no quera vivir.
.att le sostuvo contra l y le dej& llorar, sintiendo el estremecimiento en su pecho. (a tarde
caa ya, pero no le import&. !l dolor de .ai/el era real, tan real y profundo como el suyo
propio. *o saba si podra encontrar palabras para aliviarle, pero deseaba estar all,
sostenerle con fuera para que no cayera. (o necesitaba, porque l mismo tambin
tambaleaba. Cuando su llanto se calm&, acarici& su pelo con suavidad.
?.ai/el, no digas que no quieres vivir. +)n hay mucho que no has visto, personas que no
has conocido. ' eres valiente, dime, 3uin cruara todo un bosque durante cuatro das para
llegar hasta aqu4 ' tienes la pintura. *o crees que tu padre estara orgulloso de saber lo
mucho que te has esforado y lo bien que empleas tu talento4 *o te rindas, no dejes de
luchar a)n. =ers que vale la pena? le asegur&, mirando los ojos h)medos que se alaron
para mirarle, escondido a)n en su pecho.
?*o soy valiente. "olo soy un vampiro torpe y desesperado? sus palabras le hicieron sonrer.
?=ale, un poco torpe y algo desesperado. Pero tener valor no significa no tener miedo. !s
cuando a pesar de tu miedo lo intentas, y no te rindes por el camino? le asegur&. .ai/el le
mir&, volviendo a apretarse contra su pecho.
?(os lobos me dan miedo. 3uera conocerles, pero cuando les vi esa noche en el pueblo, me
dieron mucho miedo.
?!n serio4
?Por eso estaba sentado fuera del bar. !staba decidiendo si marcharme de regreso al bosque
o no. Pero tena un poco de fro y por eso me qued cerca de la lu? sus palabras le
sorprendieron. "i hubiese tardado solo un poco ms en salir, nunca se hubieran conocido,
nunca habran compartido risas y lgrimas, nunca le habra tenido entre sus braos.
.ai/el al& el rostro y vio la preocupaci&n en su cara. .ir& el reloj en su mu,eca. !ran casi
las G, le haba hecho perder un buen par de horas, 3u egosta de su parteC Pero su calor era
tan cercano y confortador que no haba podido evitarlo. "e separ& de l de mala gana y se
puso de pie, estirando una mano en su direcci&n. .att le mir& confuso.
?;enemos que regresar.
?.ai/el...
?+gradeco tu inters, .att, pero no deseo hablar ms ahora. Podemos hacerlo luego4? le
pidi&. "u mano apret& la suya y disfrut& de su calor cuando se puso de pie, y le solt& con
suavidad.
?!st bien. =amos de regreso. ;ampoco hemos comido y debes tener hambre? dijo
preocupado. "us palabras afectuosas, sus gestos siempre tan atentos, los e#tra,ara... ;rat&
de darle una sonrisa tranquiliadora.
?!stoy bien? vio que frunca el ce,o, pero no dijo nada. ;omaron el camino de regreso y
mientras .att estaba en la cocina, .ai/el subi& a la habitaci&n. "ac& la hoja ya seca de su
escondite y la puso sobre su almohada, mirndola. *o, no tena porque perderle, quis si
luchaba con todas sus fueras, si se agarraba a su esperana, pero... *o tena nada ms que
darle A+ceptara .att lo poco que poda ofrecerle4 +pret& su cora&n con la mano, el latido
intenso y adolorido.
?Por favor... deja que me quede a tu lado...
Comieron en silencio, .att mirndole preocupado al verle picotear apenas la comida.
!ntenda su pena, el dolor de la prdida, pero le asustaban sus palabrasL no quera vivir... '
si cometa una locura4 +l menos ya no haba sol, as que no haba riesgo de que quisiera
rostiarse como un pavo, pero...
?3u pasa, no sabe bien4? consult& preocupado y vio sus ojos alarse hacia l, a)n con ese
velo de tristea que le rompa el cora&n.
?*o, est muy bien. !s... solo estoy un poco nervioso, por lo de esta tarde? sus palabras le
recordaron la amenaa de su hermano. .aldita seaC !ra el peor de los momentos. ' si
.ai/el se enganchaba a una de esas sanguijuelas lobunas4 0ueno, al menos as olvidara la
idea de morir, pero... "u lobo protest& con energa y por una ve le dio la ra&n. .ierda, no
quera admitirlo, pero quera al vampiro para s, lo necesitaba. ' .ai/el no estara con nadie
mejor cuidado que con l.
?!so es. !s nuestro. (e cuidaremos? aprob& el lobo.
?*o tienes que ponerte nervioso, .ai/el. !res muy guapo y dulce, y talentoso. ' cualquier
lobo estara orgulloso de tenerte a su lado? asegur& mirando sus ojos y le vio sonrojarse
levemente. "u lobo aprob& sus palabras, incitndole a continuar preparando el terreno? "i yo
estuviera en su lugar, estara dando saltos de felicidad...
?@racias? dijo con una de sus hermosas sonrisas, que le dej& mudo y fascinado por un
momento, hasta que el lobo le urgi& a continuar. "inti& que el cora&n le lata en la boca,
nervioso por primera ve. *unca se haba declarado antes.
?(a verdad es que... "i t) quieres, yo podra.. 'a sabes, t) y yo... +qu en el bar... 3uiero
decir, que puedes quedarte todo lo que quieras en el bar? intent&, fallando miserablemente y
oyendo gru,ir a su lobo en reproche.
?Bh, .att, me encanta estar aqu. (a verdad es que yo, bueno...
?!spera, hay algo que tengo que decir primero, bueno, que tienes que saber...
?", pero antes, yo... quiero mostrarte una cosa? le interrumpi& .ai/el, se,alndole la
escalera? *o es mucho, pero... Podras verlo4 .e... me gustara saber lo que piensas.
?Mna pintura4? le vio asentir. "onri&, ponindose de pie. !l arte era importante para l, as
que poda esperar un poco. "e acerc& a la escalera y .ai/el se uni& a l mientras suban? !s
algo de lo que pintabas ayer4? consult& curioso.
?!s lo quiero regalarle a mi compa,ero? sus palabras le dejaron fro A3uera que viera el
cuadro que haba pintado para otro4 "e detuvo en seco a mitad de la escalera, mirndole con
profundidad. "us ojos le devolvieron una mirada confusa, un par de pelda,os sobre l. +bri&
la boca para protestar, cuando en ese momento oy& la puerta de la entrada abrirse.
?Pasad muchachos. !s pronto a)n, pero as le echareis un buen ojo al lindo vampiro. !s un
poco tmido? se oy& la vo clara de .arcus. .att dio un gru,ido ronco y enfadado. .ai/el
le mir& sobresaltado? Bh, mirad, all est. 8ste es nuestro lindo vampiro .ai/el. !llos son
>ergus, !fren y Peterson? present& a los tres enormes lobos que le acompa,aban, quienes se
acercaron a la escalera con la confiana de quienes llevaban toda la vida frecuentando el
local. .att sinti& las garras crecer en sus manos, pero lo que llam& de verdad su atenci&n
fue el gesto aterroriado del vampiro, quin dio un salto hacia atrs para huir de los lobos
que suban, con tan mala suerte que trope& con el escal&n, agarrndose a l para intentar
no caer, trayendo como resultado que ambos perdieran el equilibrio y cayeran por las
escaleras en un enredo de piernas, braos y cabeas. (os lobos que suban, se hicieron
inteligentemente a un lado, al ver la masa que se acercaba golpendose en los escalones,
para dejarla aterriar en el suelo despatarrada y amoratada.
.att dej& salir el aire de sus pulmones en un bufido, sosteniendo sobre s el cuerpo de
.ai/el. Haba intentado sostenerlo con fuera contra su cuerpo mientras caan, para
absorber la mayor parte de los golpes, pero no saba que tan lastimado estaba. =io que sus
ojos le miraban a travs de sus rios revueltos muy cerca y sinti& su aliento agitado sobre la
boca.
?!stis bien4 =aya cada habis tenido? dijo su hermano, y le disgust& la risa que oy& en su
vo. Ba un par de risas ahogadas a su espalda de individuos que no poda ver. 'a se
ocupara de ellos, primero tena que comprobar el estado de su vampiro.
?!sts bien4? le pregunt& al rostro cercano y oy& un suave quejido, que se transform& de
pronto en un chillido de pnico. >runci& el ce,o preocupado, cuando entonces not& que uno
de los lobos se haba acercado para intentar ayudarles, poniendo evidentemente muy
nervioso a su vampiro. (an& un gru,ido de advertencia y el lobo retrocedi&, pero .ai/el
peg& un salto asustado y sali& corriendo escaleras arriba. 0ueno, tropendose escaleras
arriba, aunque consigui& llegar y cerrar la puerta tras l.
?!" .NBC? rugi& el lobo por su garganta y se lan& por las escaleras tras l.
.arcus sonri&, sacudiendo la cabea.
?(o siento chicos, parece que el vampiro ya tiene due,o? se disculp&. !fren, cru& los
braos sobre el pecho, alando una ceja.
?"i ya lo sabas, tendras que habrnoslo dicho.
?Bh, pero es que mi hermano es un cabeota. "i no se lo restriegas en su propia nari, no
hay manera de que lo huela.
?*os debes un par de cerveas. $e las grandes y de marca? dijo >ergus, apuntando un dedo
acusador en su direcci&n.
?' unos bocadillos e#tra grandes? agreg& Peterson y todos asintieron. .arcus al& las
manos aplacador.
?=ale, vale. +hora os lo pongo todo. =oy a abrir el local primero. *o creo que mi hermano
est visible hoy para nadie? dijo con sonrisa maliciosa.
?'a era hora, le ha tomado lo suyo capturar a su presa? agreg& de igual manera >ergus,
ayudndole con las cosas en la barra. Conoca a los hermanos de toda la vida y haba
trabajado en el bar haca unos cuantos a,os, cuando el padre de los chicos estaba vivo.
.arcus sonri& con ganas.
?B ser capturado. 3uin lo dira... mi hermanito en braos de un lindo vampiro.
?"abes si tiene alg)n hermano4 *o creo que me disguste la idea de que alguien como l me
clave los colmillos? consult& !fren y se echaron a rer.
.att entr& en la habitaci&n. !staba oscuro, pero poda ver con sus ojos de lobo. (as garras
retrocedieron en sus manos.
?.ai/el4? llam& preocupado. "inti& el choque de un cuerpo contra el suyo, tan fuerte que le
hio perder el aliento, apresndole contra el muro.
?*o, no quiero... no. *oC? le oy& mascullar, la vo rasposa y ronca en su odo. *o era la vo
dulce de .ai/el, era una vo ms salvaje, primitiva. "inti& el cuerpo apretarse ms al suyo y
aprisionarle contra el muro con tanta fuera, que parte de la pintura se cay&. Pas& los braos
a su alrededor como pudo y se sostuvo de l.
?.ai/el, soy yo. Clmate? pidi& al sentir contra s el galopante latido de su cora&n, la
agitada respiraci&n? "oy yo...
?*o... no quiero? volvi& a rugir esa vo gutural, clavndole las u,as en la piel hasta hacerle
sentir dolor. !staba en alg)n estado primario de pnico. !ra por que se haba cado4
?"olo quiero verte. $jame verte? le pidi&, intentando que le soltara un poco, pero su presa
no cedi&? .ai/el, esc)chame. $jame verte. *ecesito saber que ests bien? le pidi&, su vo
esta ve ms firme, un tono de mando que pareci& surtir efecto. "inti& que le soltaba, solo
un poco, lo justo para poder ver su rostro. "us ojos de lobo le mostraron la mirada
enloquecida, los ojos luminosos y los colmillos e#puestos de su vampiro. 0ello y salvaje,
tan sensual? !res tan hermoso? no pudo evitar e#clamar. !n respuesta, el vampiro se apret&
contra l, restregndose contra su cuerpo y sinti& claramente el duro bulto entre sus piernas,
que hablaba de su e#citaci&n.
?.att? oy& su vo opacada de deseo mientras se restregaba contra l? .att... .att...
?.ai/el. .i hermoso .ai/el? respondi& a su ve, roando su cuerpo contra el suyo de la
misma forma, encontrando su durea para apretarla contra la suya. (e oy& jadear de placer.
?*o me dejes. *o quiero a nadie ms, solo a ti...? oy& su vo enronquecida, volverse poco a
poco ms la suya, ms la de su vampiro? "olo a ti, .att...
?.ai/el. 3udate conmigo. *o te marches con nadie. " mi vampiro. "olo mo? le pidi& al
odo, sin dejar de tocarle, bajando las manos que haba podido liberar por su espalda hasta
su trasero, apretndole contra s con fuera, buscando sus labios? .o, solo mo...
?"oy tuyo? dijo antes de hundirse en su boca. "e besaron salvjemente contra el muro,
haciendo volar las costras de blanca pintura. .ai/el le mordi& los labios y la lengua con sus
colmillos chupando su sangre, mientras .att lo levantaba un poco sin soltarle y se acercaba
al sof, para dejarle caer all, soltndose de su agarre y enterrando sus propios colmillos en
su cuello, lanando un rugido posesivo. "u lobo e#clam& de jubilo y .att comparti& su
alegra. .ai/el contorsion& el cuello de tal forma, que logr& morder el suyo sin soltarse de
su agarre, marcndole tambin con su beso de vampiro. "e quedaron all, prisioneros del
otro, con el pulso acelerado y la piel palpitante por donde estaban unidos. Poco a poco la
calma retorn& y los colmillos de ambos comenaron a retraerse. .att lami& la herida que se
cerraba en el cuello de .ai/el y sinti& el beso que ste le daba en el suyo. "e encontr& con
sus ojos y vio la misma verdad en ellos.
?.e perteneces? le dijo sin dudas ni remordimientos, y le vio sonrer de la misma manera.
?' t) a m.
?Para siempre? se besaron, esta ve con una pasi&n ms calmada, ms profunda, que sellaba
al completo su promesa? " mi vampiro para siempre, .ai/el.
?(o ser A' t) sers mi lobo4 *o quiero a otro, .att.
?*o dejar que nadie te separe de mi lado? le jur&, abrandole contra su cuerpo con fuera,
sintiendo su pecho apretarse de latidos intensos contra el suyo.
?;e amo, .att. ;e am desde el primer segundo, pero no cre que tuviera nada para darte y
que quisieras tenerme a tu lado? oy& decirle. (e mir& y vio el temblor en sus ojos,
acariciando su mejilla.
?0romeas4 ;) eres todo lo que siempre he querido. .i lobo lo supo siempre, pero me
negaba a hacerle caso. *o saba que hacer con un vampiro en mi vida? admiti& y le vio bajar
un poco la mirada. +l& su rostro hacia l, acariciando sus labios con los suyos en un beso?
Pero la )nica verdad, es que no sabra que hacer con mi propia vida sin mi lindo vampiro.
.e pona como un loco con la sola idea de que te fueras con otro...
?A"e lo dices a quin a probado la madera de todos los escalones, tratando de huir del toque
de alguien que no fueras t)4
?!stabas huyendo por m4
?Claro. *o quera que nadie me llevara lejos de ti. Haba pensado dar una negativa muy
educada a tu hermano, pero el pnico pudo conmigo? admiti&, sonrojndose y .att no pudo
evitar morderle los labios con un beso. "u se#y vampiro...
?;odo por m. !n compensaci&n, me tendrs para ti las HI horas del da.
?Prometido4
?Claro... +h, bueno, pero supongo que no puedo pedir lo mismo. 3uin puede competir
contra el arte? dijo fingindose enfadado. .ai/el sonri&, pegando un salto repentino que casi
lo tir& del sof.
?.attC (o siento... es que record el cuadro...
?!s moC *o se lo des a nadie msC ;e lo prohboC? rugi& con enfado y vio su gesto
sorprendido. (e vio acercarse a la cama y coger una hoja, acercndose luego a l.
?*o pensaba drselo a nadie ms. 3uera que t) lo tuvieras. 3uera que fuese la forma en
que supieras que te deseaba para m. (o pint para ti? dijo alargndoselo. .att lo mir& y se
qued& mudo por un instante. Mna hermosa reproducci&n de su lago llen& sus ojos, con los
colores vibrantes del medio da, la pintura tan clara y ntida que casi poda tocar el agua y
sentir el olor de la hierba. "in querer sus ojos se llenaron de lgrimas. + su padre le hubiese
gustado tanto verla.
?.ai/el... es... es? pero no pudo continuar, y las lgrimas tanto tiempo encerradas en l
e#plotaron por sus ojos. "e aferr& con fuera al cuerpo de su vampiro, que lo sostuvo contra
s. ;al ve su cuerpo era ms fro y ms delgado que el suyo, pero se sinti& confortado y
apoyado. Compartan los mismos recuerdos, el mismo dolor, el mismo miedo a la soledad.
"e haban encontrado en un camino que ambos crean que recorran solos y perdidos, ciegos
en la oscuridad, pero al hallarse podan sostenerse juntos y encontrar los puntos de lu a su
alrededor, que llenaban de vida su e#istencia.
"e sentaron en el sof y .ai/el le abra& contra s, feli de poder estar a su lado, de ser
capa al fin de transmitirle sus sentimientos. Cuando .att estuvo ms calmado, le llev& a la
cama y le recost&, apretndose a su lado, acariciando su rostro con sus dedos de pintor,
grabando en ellos todas sus facciones. .att le mir& y sonri&.
?Creo que voy a sentir celos cada ve que te vea acariciar una tela, sabiendo que tus dedos
tocan algo que no sea yo.
?;) siempre estars en mis cuadros. "iempre sers mi inspiraci&n? le asegur& y le vio
sonrer ampliamente, con orgullo y amor. .att se acomod& un poco sobre l y repiti& el
mismo movimiento con su mano sobre su rostro. "us manos eran clidas y algo ms torpes,
callosas por el trabajo en el bar, pero .ai/el las am&. $ej& besos en sus dedos cada ve que
pasaron por sus labios, vindole sonrer. "us ojos aules tenan otra ve el brillo del cielo en
el verano. !ran tan hermosos? ;e amo, .att. "iempre te amar.
?.i dulce y bello, .ai/el. 'o tambin te amo. "iempre lo har? susurr& y el aliento se
perdi& en su boca. "e besaron entre caricias, que se volvieron dolorosas de necesidad,
quitndose la ropa a tirones para hallar la piel y arderse en ella, entre gemidos agitados que
les llevaron rpidamente a la locura. (a cama se agit& al ritmo de sus cuerpos que se
encontraban y se fundan en la piel del otro, hasta hacerse uno por primera ve como
preludio de muchas ms.
!l amanecer les encontr& abraados bajo las sbanas, entrelaados de piel y amor. .ai/el
abri& los ojos y sonri& al sentir la tibia respiraci&n de .att contra su odo. "e apret& con
ganas contra l, disfrutando del calor intenso que irradiaba su cuerpo.
?=ampiro madrugador? protest& ste adormilado. .ai/el se ri& contra su piel, bajando por su
pecho para mordisquear su pe&n, rondole con un colmillo juguet&n? .e quieres
desayunar4
?*o es mala idea? dijo chupando suavemente de la endurecida punta. .att sonri&, atrapando
su cabea entre sus manos, para apretarla con fuera contra su pecho, oyendo su protesta
ahogada. (e liber&, acercando sus labios a los suyos.
?.i vampiro hambriento? volvi& a protestar antes de besarle con ganas.
?.i bocadillo de lobo? respondi&, tras treparse sobre l y volver a reclamar sus labios.
!ra una bendici&n. !l tiempo de la tristea volvera a llegar para sacudirles con sus
recuerdos, era inevitable, pero cuando eso pasara, se tendran el uno al otro para recordar
que tras el dolor y la pena, siempre hay amor, compa,a y la alegra de estar con vida, de
recordar los buenos momentos y compartir la dicha que los una en su caminar.
Mn par de semanas despus, celebraron en el bar el nuevo embarao de .issi. .att estaba
feli de volver a ser to, y sobre todo porque ahora tena con quin compartir su felicidad.
.ai/el era una bendici&n en su vida, haciendo que los colores volvieran a brillar en su
paleta cada da. "u amor le daba la fuera y la alegra que tanto tiempo haba sentido
sumergida y olvidada por el dolor.
.ai/el estaba feli y agradecido. ;ena el amor que siempre dese& volver a sentir, y poda
desarrollar su arte. +lguna gente del pueblo que vio sus pinturas, le contrataron para
embellecer sus negocios. $e esa manera poda ayudar a .att, sentirse ms parte del pueblo
de los lobos y honrar a su padre con su arte. .att mand& a enmarcar el cuadro de la laguna,
junto con el pintado por su padre al carpintero del pueblo, y los colg& en un sitio especial
sobre la barra. Cada ve que .ai/el los miraba, saba que all estaba su hogar, su pasado, su
presente y su futuro.
!l amor que compartan en cada cosa cotidiana era en s un hermoso regalo. +)n quedaban
muchos das por pasar, muchas estaciones en las que la tristea se unira y meclara a la
alegra, pero mientras estuviesen juntos podran afrontar todo lo que les deparase la vida.
$espus de todo, 3u cadena es ms fuerte e imperecedera que el amor4
El "uarter#ac$ el Valet
+lbert estaba e#hausto. !sos das no haba parado, siguiendo a los hijos de su se,or de una
punta a otra del pueblo de los lobos. Por suerte, ste no era demasiado grande y no haba
demasiadas tiendas, as que solo haban entrado en las de recuerdos locales y en algunas de
ropa. !n stas solo haban estado un par de horas, probndose prendas que al final dejaron
tiradas por doquier para horror de la atendienta, tocndole a l dar las respectivas disculpas
y encargarse de ordenarlo todo. "er valet de un par de ricos y adolescentes vampiros no era
tarea fcil. Pero l se haba presentado voluntario, creyendo 1iluso de lC2 que al estar
entretenidos con los preparativos de la fiesta, los j&venes $e @uille le ignoraran como
siempre hacan y podra descansar. 0ueno, le seguan ignorando como sirviente que era,
pero de descanso nada, si acaso haba ms trabajo a)n por hacer, sin hablar de la vergEena
ajena a pasar. (a parejita de gemelos, pareca decidida a robar toda la atenci&n de las lobas
del pueblo. +lbert rodaba los ojos mentalmente cada ve que alguno de ellos se pavoneaba
por las calles con sus mejores galas, lanando sonrisas y gui,os a todas las fminas lobunas.
+lgunas se rean y otras les ignoraban 10ien por ellasC2 pero los vampiros no se daban por
aludidos. !n fin, la noche de la fiesta, despus de pasar todo el da ordenando la ropa tirada
en la habitaci&n que haban alquilado, preparar infusiones calmantes de nervios para cada
vampiro, correr con bolsas de sangre clase + e#tra?premium, cambiarlas por + e#tra?super?
premium, ser gritado por ms de 67 minutos por un enojado adolescente que haba perdido
su corbata de seda favorita 1por supuesto, todo era culpa de +lbert, ya que era un gand)l que
nunca ordenaba nada2 para hallarla luego en el ba,o, junto a sus caloncillos de la suerte,
soportar las quejas interminables y lo que era a)n peor, or las autoalabanas y planes de
certera conquista para esa noche, sus nimos no estaban como para disfrutar de la compa,a
de nadie. Como todos los sirvientes que haban acompa,ado a sus se,ores a la fiesta, l y el
ch&fer, se haban quedado fuera de la gran casa patronal donde se llevara a cabo el
encuentro, viendo a la crema y nata de su sociedad vamprica entrar con porte majestuoso al
recinto, vistiendo sus mejores galas. =io que los lobos llevaban atuendos sencillos, sin tanta
seda y encaje como la mayora de los suyos, y les felicit& en silencio. ;anta pompa y
e#ageraci&n terminaban por aburrir 13u se lo preguntaran a lC2 Cuando el )ltimo vampiro
entr&, se le escap& un profundo suspiro de decepci&n. (e hubiese gustado mirar un poco, ya
que lo )nico que haba visto de la sociedad lobuna esos das, haban sido retaos del paisaje
entrevistos por las espaldas de los gemelos, mientras les segua incansablemente. By& un
suspiro a su lado de la misma naturalea.
?0ueno. +l menos nos dejarn en pa por un momento? escuch& al ch&fer decir. !l pobre
vampiro haba tenido tambin su cuota de migra,a esa semana, gracias a los colmilludos
adolescentes.
?(stima. .e hubiese gustado tanto entrarC? protest& con vo de plata una mucama ms all,
diminuta como una mu,eca de porcelana, ponindose en puntas de pie, como si as pudiese
atisbar algo de lo que se coca en el interior. ", bueno, l tambin tena un poco de
curiosidad, pero si le daban a elegir, preferira una buena y blandita cama en ese momento.
$e pronto, mientras uno que otro comentaba lo que estara pasando en la fiesta, un par de
lobos se acercaron a ellos. +l llegar al pueblo, +lbert se haba asustado un poco al ver que la
mayora de los lobos eran gente enorme, llena de m)sculos y una salvaje libertad, tan
diferentes de los estiliados vampiros que siempre haba conocido, a)n cuando l era de baja
clase y por lo tanto no posea ni la bellea, ni la gracia de los nobles. Pero pronto se dio
cuenta de que los lobos, a pesar de su aspecto fero, eran gente tranquila y sencilla, que
disfrutaba los placeres corrientes de la vida. +mbos lobos miraron a los all reunidos con
curiosidad, los cuales se haban quedado mudos y quis un poco asustados al verles.
?3u hacis aqu4 *o vais a entrar4 (a fiesta ha empeado ya? dijo uno de ellos mirndoles
con atenci&n. +lbert vio que los vampiros se miraban unos a otros. 0ueno, l tambin mir& a
los dems, esperando que alguno tomara la palabra. 8l no, por supuesto.
?Hay alg)n problema4? inquiri& el otro, con vo profunda y masculina.
?*osotros, bueno... no tenemos categora suficiente para entrar? e#plic& uno de los
vampiros, y el resto asinti& en silencio, +lbert incluido. C&mo e#plicarles a ellos, que vivan
con tanta libertad, las restricciones de su sociedad4 +mbos les miraron frunciendo el ce,o.
?$e qu estis hablando4 ;odos los vampiros estn invitados a la fiesta, es parte del acuerdo
de la tregua.
?Pero somos sirvientes... nosotros no podemos...? intent& otra de las peque,as mu,ecas, y
+lbert vio que tambin eran gemelas. Mff, como detestaba a los que venan siempre en pac/
de dos.
?;onteras. "ois vampiros. "i queris entrar, entrad. Hay comida y bebida suficiente para
todos? dijo el primer lobo, anjando el asunto. "e miraron otra ve unos a otros y +lbert vio
la sonrisa florecer en muchos rostros. "ecretamente se alegr& tambin. Por una noche daban
igual las diferencias sociales. ;odos eran vampiros, todos tenan derecho a un poco de
diversi&n. Como un solo vampiro, la masa de sirvientes se movi& hacia la puerta de entrada,
y +lbert se encontr& yendo con ellos. +l entrar, los ruidos, la charla y las risas se detuvieron.
"e quedaron quietos tambin, cada uno buscando por instinto la figura de sus amos. +mos y
sirvientes se miraron a los ojos, midindose con ellos. (os lobos murmuraron intrigados por
el repentino silencio de los vampiros.
?3u hacen ellos aqu4
?(os sirvientes deberan saber cual es su lugar? se oy& claro por entre el silencio y los
murmullos.
?;onteras. (a tregua es para todos por igual. =ampiros y lobos? se oy& tambin decir. +lbert
no supo si fue un lobo o un vampiro quin lo dijo, pero eso encendi& el apoyo de otros?
+cercaosC? les invitaron y por fin se sintieron bienvenidos, valientes y vencedores por una
ve en su vida de obediencia. =io a las mu,equitas gemelas entrar de la mano, a la pista
donde se hallaba un grupo de lobos charlando, y sin miedo alguno coger a un par de ellos
para llevrselos. Crey& que los enormes lobos las rechaaran, pero vio con asombro que
ambos les miraban con adoraci&n, y pocos minutos despus, ambos escaparon con su bello
botn, la risa tintineante de las gemelas perdindose a travs de la puerta. "in que +lbert se
diera cuenta, la mayora de los sirvientes y vasallos que haban entrado con l ya estaban
distribuidos a un lado y otro del enorme sal&n, rodeados por sonrientes lobos y lobas que se
peleaban por su compa,a. (e gust& ver a algunos de los pomposos nobles, api,ados en
grupos solitarios de vampiros, con mirada envidiosa. *i siquiera hio el esfuero de buscar
a los adolescentes infernales, buscando en cambio una salida discreta, que le llevase a un
sitio tranquilo donde poder descansar. "ali& a un pasillo, alejndose del ruido de la fiesta y
de all a una puerta que conectaba con el jardn. +costumbrado como estaba a las
mansiones, el pueblo de los lobos le pareca un laberinto en la oscuridad, pero pronto
encontr& el camino que deseaba, hacia un almacn en una esquina apartada de la fiesta,
donde el ruido no llegase. !ntr& y vio en la oscuridad varias sillas ordenadamente puestas
contra la pared, al lado de una larga escalera. Pareca un almacn muy bien cuidado.
!ncontr& una puerta bajo la escalera y all, oh, bendici&nC un peque,o habitculo del tama,o
e#acto para contener su cuerpo. Haba alguna superficie blanda y afelpada sobre la que se
tendi&, y con un suspiro satisfecho de haber encontrado por fin santuario, cerr& los ojos y se
durmi&.
=incent estaba famlico y sordo. *o ayudaba en nada que su hermano se hubiese pasado
todo el partido comiendo perritos calientes a su lado, y gritando entre uno y otro touchdoDn
como un poseso. 8l tambin haba gritado, pero aceptmoslo, sus gritos eran quejidos de
cachorrito recin nacido al lado del sonoro rugido de Price. "u hermano era un lobo grande
y con aspecto salvaje, pero en el fondo segua siendo un cachorro. !l mdico dijo que le
haba faltado un poco de o#geno en el cerebro al nacer, lo que significaba que tendra
siempre un peque,o retraso en el aprendiaje. 0ueno, era un buen chico, aunque un poco
bruto. (e costaba medir su fuera. Prueba de ello fue que cuando llegaron al estadio de la
universidad donde jugaba el equipo de =ince la tarde anterior, lo primero que hio fue
intentar subirse a su espalda gritando un 9=amos (eonesC: para animarles, olvidando la
lesi&n en su hombro que le impeda tomar parte en el partido. Cuando lo record&, sobre todo
por el gru,ido que lan& =ince, se disculp& torpemente, cogindole arrepentido entre sus
braos para llevarle a su butaca, cual princesa de cuentos. +hh, su querido y torpe hermano
mayorC ' no ayudaba en nada que fuera ms alto, ms fuerte y sobre todo que pudiese
transformarse sin problemas, al contrario que l. =ince llevaba toda su joven vida batallando
por encontrar su lobo interno, fallando miserablemente. !n las noches de luna llena lograba
sentir un rastro de l, pero no era suficiente para poder despertar su naturalea animal. "u
familia le quera y le apoyaba, pero nunca haba dejado de sentirse una nulidad total. ' no
ayudaba el que sus lesiones tardaran ms de lo normal en sanar. .ir& su hombro, la causa de
su ausencia en el partido. 0ueno, al menos los (eones haban ganado. "uspir& cansado al
entrar esa ma,ana por la puerta de casa, queriendo una ducha, un filete jugoso y sumergirse
en su juego de video favorito para olvidar al mundo y su miseria. ;racy, su hermana mayor,
puso la tarta que haba comprado para celebrar la victoria en la mesa, dndole un golpe
certero a la mano de Price, que se haba alargado para coger un bocado.
?Platos y cubiertos, ahoraC? orden& y l obedeci& como un cachorrito, un enorme y
musculoso cachorrito. =incent rod& los ojos al orle romper un plato... bueno, el primero del
da.
?(o siento, ;ry. (o recoger de inmediato? se disculp&, como siempre.
?$jalo. .ejor un plato vaco, que pastel por todos sitios. =ince, traes el recogedor por
favor4? pidi& amablemente, pero =ince vio la furia en sus ojos. 3uis estaba tan
hambrienta y sorda como l. Camin& sin decir nada hasta el cuarto de las escobas bajo la
escalera, pensando en jugosos filetes y muerte de dragones a sus manos, cuando al abrir la
puerta para tomar el recogedor, sus ojos se toparon con una figura acurrucada sobre la vieja
alfombra del sal&n. "e qued& mudo, petrificado al verle y ms al notar el olor que
desprenda... =ampiroC >ue incapa de gritar o hacer nada, tan paraliado por la sorpresa
como estaba. "u madre casi los haba retenido secuestrados en casa esa semana, prete#tando
querer remodelar el sal&n 1por eso haban sacado toda la enorme alfombra2 empujndoles
fuera el fin de semana, para que no estuvieran presentes cuando lo de la fiesta entre
vampiros y lobos. + pesar de la tregua, su madre no conceba la idea de fraterniar con esas
9sanguijuelas chupasangre: que por lo visto, se lo haban hecho pasar muy mal a sus
antepasados. Por lo tanto, sus chicos deban estar lo ms lejos posible de su perjudicial
influencia. =ince haba odo en universidad a otros lobos comentar sobre lo sofisticado que
eran, sus coches, sus mansiones, su ropa de estilo. !n una palabra, lujo y dinero. +s que no
tena ni idea de que pensar de ellos. (a verdad es que le daban lo mismoL ninguno
solucionara su problema, y tener a un lobo escondido en alg)n rinc&n de su alma era un
problema con P may)scula. 0ueno, hallarse con uno de esa raa amante de dar bocados y
beberte toda la sangre hasta dejarte seco, dormido bajo su escalera entre las escobas y la
ropa vieja, tambin contaba como problema grave. 3u haca4 "e lo deca a sus hermanos4
"eguro que le saltaran encima y comenara una lucha fero por la supervivencia. 8l estaba
lesionado, as que mejor no tomar parte. ' si lo retenan all, mientras llamaban al sheriff4
3uis el vampiro enloquecera, intentando morder la puerta, rompiendo la escalera y
haciendo la casa e#plotar por las nubes... 0ueno, no pareca tan violento, all dormido hecho
una bola y sonriendo en sue,os.
?=ince, el recogedorC? grit& su hermana y dio un salto. .ierda, se haba olvidado. Cuando
estir& la mano para coger el objeto requerido, sus ojos y los del vampiro se encontraron. =io
el horror pintado en ellos y el olor acre de su miedo llen& su nari. (e vio ponerse ms
plido a)n si caba y abrir la boca, para lanar un quejido ahogado, casi insonoro,
arrinconndose desesperadamente contra el muro, como para intentar escapar de l, igual
que un rat&n atrapado en una esquina por un hambriento gato. "e dio cuenta de que su mano
alada en busca del recogedor, pareca amenaante. Claro, si lo primero que ves al despertar
es la garra de un lobo en tu direcci&n, no parece que precisamente vaya a darte los buenos
das. 0aj& la mano y el vampiro pareci& querer dejar de perforar la pared con sus u,as,
mirndolo quieto, a)n asustado.
?Pero qu haces all4 ' el recogedor4 *o tengo todo el daC? protest& ;racy, apareciendo a su
lado. (a puerta se abra hacia afuera, as que era imposible que viera lo que haba en el
interior. =ince agarr& el palo con prisa y cerr& la puerta de un golpe? Pero qu te pasa4
?*ada, estoy cansado, solo eso? respondi&, apoyando la mano sobre la puerta cerrada,
alargndole la otra a su hermana con el artculo de limpiea. 8sta le mir& con curiosidad y
preocupaci&n.
?;e duele la lesi&n4? en respuesta asinti&? $eberas descansar un poco. Price y yo
ordenaremos antes de que lleguen pap y mam. $ate una ducha y descansa, luego te subir
pastel? le dijo. =ince volvi& a asentir. .ir& la espalda de su hermana que se alejaba y volvi&
la vista a la puerta. Por qu lo haba hecho4 .ir& la madera y casi pudo ver los ojos a travs
de ella. .ierda... Por qu hoy, de todos los das4 5espir& profundo y tom& una decisi&n. *o
tena tiempo para estarlo perdiendo en tonteras. +bri& la puerta con cuidado de no hacer
ruido, mirando al asustado vampiro en su interior.
$iosesC $&nde estaba4 3u era ese lugar4 3uin era el chico, la chica4 (obos, eran lobos.
Pero, no era un almacn4 $&nde demonios estaba4 "u cora&n lata a mil por hora. "e haba
dormido tan tranquilo, pensando que estaba a salvo y ahora... Cuando la puerta se abri& otra
ve, vio al mismo lobo y se intrig& al verle hacer un signo de silencio. "acudi& la cabea,
asintiendo con fuera. "e quedara mudo, muy mudo, pero por favor, 3u no le destroaseC
"u vida no haba sido fcil hasta ahora, pero se dio cuenta de que a pesar de todo lo pasado,
no quera perderla tan pronto. ' prometa no volver a quejarse de los gemelos. Casi lan& un
chillido al ver la garra que se e#tendi& otra ve hacia l, apretndose contra el muro. (e vio
lanar un bufido y rodar los ojos e#asperado. $ios, y si se pona violento4 !mpe& a
temblar.
?"olo quiero sacarte de aqu. =en? dijo en un murmullo, haciendo un gesto con su mano
para animarle a acercarse.
?*o me hagas da,o? suplic& de la misma forma. (e vio sonrer moviendo la cabea.
?3u no. =amos, sal. .is hermanos estn en la cocina. Puedes salir por la puerta principal.
?!l sol...? comen& a decir, pero se call&. 0ueno, mejor quemarse un poco a e#ponerse a ser
desgarrado y devorado por un grupo de lobos enfurecidos. (e vio fruncir el ce,o.
?=aya, casi es medio da. Fmagino que no es buen momento para ti? le oy& decir y sus
palabras le asombraron. 3u saba del sue,o de los vampiros4 Pero no tuvo mucho tiempo
para elucubrar, pues el sonido de unas llaves en la puerta les alert&. =io al chico mirar hacia
un lado y volver el rostro al suyo con alarma.
?!s mi padre, "al yaC? le orden&, estirando su gran mano hacia l y +lbert obedeci&,
cogindola con fuera. !ra clida y le apret& con firmea, ayudndole a salir del oscuro
interior. (a lu le ceg& y fue incapa de orientarse? "ube por las escaleras, rpidoC? le
orden&, mientras los silbidos de una meloda tras la puerta le llegaron a los odos con toda
claridad.
?*o puedo ver? protest& con vo suave.
?.ierdaC? oy& a su lado y sinti& unas manos que le cogieron por la cintura, elevndolo del
suelo y el movimiento rpido bajo su cuerpo. *o tuvo tiempo de lanar ni una e#clamaci&n
de protesta, cuando la oscuridad volvi& a envolverle. +bri& los ojos antes cegados y not&
con su vista de vampiro que estaba en una habitaci&n. (as cortinas eran de un aul oscuro y
estaban cerradas. 0endici&n para sus ojos. Haba una cama con doseles, a un lado un
escritorio con libros desordenados, un armario y una enorme televisi&n con un juego
conectado. ' muchos posters de musculosos chicos en distintas poses de juego deportivo,
todos con muy escasa ropa. "e qued& mirndoles con la boca abierta. !l lobo estaba oteando
el e#terior por la puerta entre abierta y cuando se volvi&, le pill& contemplndolos.
?$eja de babear. *o quiero saliva de vampiro en mi habitaci&n? dijo, y +lbert no supo si
bromeaba o lo deca en serio. .ejor no hacerle enojar.
?(o siento. "olo admiraba la decoraci&n...
?$ecoraci&n4? dijo alando una ceja. +lbert dio un paso atrs.
?$e... decoraci&n, bella y masculina decoraci&n... Mn gusto de lo ms e#quisito...? intent&
sobornarle con palabras, vindole cerrar la puerta y acercarse? *o me matesC Por favorC Ouro
que no saba que era tu casaC? grit&, alando las manos para proteger su cabea. "e qued&
quieto, esperando el golpe, pero cuando no lleg&, al& un poco la mirada. (e vio con el ce,o
fruncido.
?Bye, ya s que soy un poco grande y todo eso... bueno, o t) eres muy peque,o, pero... "oy
un lobo, sabes4 "oy de los buenos. ' es mejor que no alces mucho la vo, mi hermana tiene
los odos muy finos.
?(o... lo siento...? se disculp&, temblando a su pesar. !l chico sonri&, y e#tra,amente su
gesto le pareci& confortador.
?=ale, no pasa nada. Pero me pone un poco de los nervios verte tan asustado. +unque,
entenders que no sea muy agradable llegar a tu casa y encontrarte con un e#tra,o
durmiendo entre las escobas. +s que espero que comprendas que no te haya dado
precisamente la bienvenida.
?"... lo entiendo. ' lo siento. 'o... yo solo estaba cansado y quera un sitio para dormir.
Pens que era un almacn, no saba que era tu hogar. (o siento mucho? se disculp& de
cora&n. =io al lobo mirarle con curiosidad.
?C&mo te llamas4
?+l... +lbert, se,or? respondi& automticamente. !l chico sonri& con ganas.
?Hey, nada de se,or. "oy =ince, =incent? dijo estirando su mano en su direcci&n. +lbert la
mir& asombrado por un instante? 3u, los vampiros no saludis as4
?"... !s solo que... !res muy amable. ' educado.
?@racias? respondi&, hacindole un gesto para que estrechara su mano. +lbert no pudo evitar
sonrer, apretndola con ganas. 3u tibia era y qu bien se senta en su piel antes
aterroriadaC !ra bueno saber que el lobo no le atacara.
?!ntonces... =incent... 8sta es tu casa? pregunt& para iniciar la charla. =io al chico arriscar
los hombros.
?", bueno la casa de mis padres. Pero s, mi casa? dijo el chico mirando alrededor con gesto
de orgullo.
?(amento haber entrado sin tu permiso? se disculp& otra ve, arrepentido de no haber tenido
ms cuidado. (e vio sonrer y le pareci& un gesto tan confortador, que calm& del todo sus
anteriores inquietudes.
?0ueno, fue un accidente, +lbert. 'a pas&. ' no estabas en la fiesta4? consult& interesado. !l
vampiro dio un suspiro profundo de pesar.
?". =ine para servir a los hijos de mi se,or que asistiran. !ntr en la fiesta un momento,
pero estaba muy cansado y quera hallar un sitio tranquilo donde dormir. Cre que tu casa
era parte del sal&n de baile, una especie de almacn y por eso entr...
?0ueno, eso aclara un poco ms las cosas. !l problema ahora es como sacarte de aqu. .is
padres no son... digamos, muy partidarios de la tregua.
?Bh? fue todo lo que pudo decir al or sus palabras, sintiendo su cora&n volver a galopar de
latidos y un sudor helado bajar por su espalda. =incent se acerc& a l, como notando su
conmoci&n.
?;ranquilo, no van a hacerte da,o. "e enojan mucho, pero son gente pacfica. !s solo que,
bueno, es mejor que te marches antes de que te vean. +s evitaremos un disgusto para ambas
partes? e#plic& con paciencia.
?!ntiendo? dijo mirando la ventana con apuro. +)n no era momento para salir, pero...
?!l sol te hace da,o, no4? oy& que le preguntaba y vio la preocupaci&n en su rostro.
?". *os deja ciegos y nos produce quemaduras? nada ms decirlo se arrepinti& A' si usaba
esa informaci&n en su contra4 (e mir& aterroriado y l pareci& leer en su gesto.
?$e acuerdo, nada de sol. !speraremos a que caiga la noche. Pero tendrs que quedarte aqu,
lo entiendes4 "i mi padre te olfatea... 0ueno, tranquilo. *o lo har. .i olor es muy fuerte? le
asegur& sonriendo con malicia, al verle sobresaltarse. "u gesto le tranquili& de alguna
manera. (e vio dar un paso en su direcci&n y no supo porqu, pero ya no tuvo miedo?
"aldrs cuando caiga la noche. ;engo algunos juegos de video y revistas. 3uieres jugar o
leer algo, +l4? su apodo le gust& y asinti& en silencio. (a verdad, es que lo )nico que quera
en ese momento era dormir. !l sue,o del medio da lo llamaba.
=ince conect& la consola y le hio un gesto para que se sentara a su lado. !l pobre y
asustado vampiro se sent& grcilmente, sin ruido. !ra delgado y peque,o, con el negro
cabello largo y liso, flotante a su espalda, y cuando sali& del cuarto de escobas, =ince vio
que sus ojos eran de un aul oscuro muy hermoso, igual al color de las nubes de tormenta.
(e gustaban las tormentas. !ra hermoso y etreo, nada que ver con las ideas que tenan sus
padres de seres salvajes, sedientos de sangre y muerte. !l pobre estaba ms asustado de l
que al contrario, y ahora a su lado pareca haberse calmado un poco. (e mir& y se encontr&
con sus ojos cercanos, cuyo brillo poda ver a)n en la penumbra.
?!ntonces, eres un sirviente4? pregunt& por preguntar, solo por or el timbre claro y dulce de
su vo.
?"oy un valet.
?Como esos que bailan con apatillas y tut)4? se sorprendi& al or su hermosa risa, como el
tintineo de una campana de plata. *unca haba odo una risa igual y la sinti& resonar en su
cora&n, haciendo eco con sus latidos. >ij& la vista en su rostro y le pareci& ms suave con
la alegra, hermoso y cercano.
?*o. Mn valet es un sirviente encargado de la ropa de su se,or. Brdena los armarios y le
presenta posibles atuendos. Bh, y se encarga de alg)n arreglo, si sta lo necesita.
?B sea que sabes coser.
?". +ntes de ser mordido, trabajaba en una sastrera. !l vampiro que me transform& me
llev& con l, y poco despus me vendi& al servicio del se,or $e @uille? sus palabras le
dejaron at&nito y una ola de molestia se e#tendi& por todo su cuerpo. By& a lo lejos el eco
de un gru,ido enojado.
?;e vendi&4
?0ueno, no poda hacerse cargo de m? e#plic&, como si fuese la cosa ms natural del
mundo. =ince frunci& el ce,o? =ers, hay dos clases de vampiros. !stn los de lite, que son
nacidos con sangre y poderes de vampiro. (o que son mordidos e infectados con el virus y
no mueren como yo, sino que se transforman, somos de clase baja. *o tenemos la misma
fuera y poder que los de clase alta, y por ello necesitamos ms cuidados y protecci&n. !l
se,or $e @uille me acogi& en su casa y me dio trabajo.
?' te envi& para que participaras en la fiesta4? consult& dudoso. !mpeaba a fastidiarle ese
tal se,or $e @uille y las est)pidas diferencias de los vampiros por como haban nacido. 3u
ms daba4 (o que contaba es lo que podan hacer por ellos mismos, su familia y su
comunidad, *o era as4
?*o se nos permite asistir. 0ueno, al final he entrado junto a los dems, porque unos lobos
insistieron, pero... He venido a trabajar. Como el valet de sus hijos que soy, debo
encargarme de su ropa en todo momento. *o tengo tiempo para divertirme? frunci& el ce,o,
recordando con pesar al par de problemticos gemelos. =io que =ince lo miraba
preocupado.
?!so es muy injusto. "e supone que la tregua es para todos? dijo y not& la molestia en su
vo. !so le hio sonrer.
?0ueno, nuestra sociedad es un poco diferente a la vuestra...
?;onteras? sus palabras y gestos le recordaron al par de lobos de la noche anterior? +dems,
+caso no te ganas la vida honradamente4 $e seguro que si no fuera por ti, esos nobles a los
que sirves no sabran que hacer con propia su vida...
?"on adolescentes, bueno, es normal que sean un poco... un poco...
?3u4 @randes bebes chillones4 B pedantes idiotas sin remedio4? sus palabras le hicieron
sonrer.
?0ueno, ms o menos? admiti&. (e vio lanar un bufido molesto y no pudo evitar rer ante su
gesto.
?*o seas modesto. $i que son dos desperdicios de colmillos y carne, y qudate a gusto. ;e
lo mereces.
?0ueno, la verdad es que s lo son. " que no es justo decirlo, pero me dejaron tan agotado
ayer con sus quejas mientras les ayudaba a prepararse para la fiesta, que lo )nico que
deseaba era huir y esconderme del mundo.
?+puesto a que si tuvieran que hacer solo una hora del trabajo que haces por ellos en un da,
te tendran por su hroe? insisti&, y no pudo evitar sentirse feli al verse comprendido y
apoyado de esa manera. =incent era algo especial. "e acerc& un poco ms a l, sintiendo el
calor y el aroma a madera que desprenda su cuerpo. !ra ciertamente delicioso.
?@racias por tus palabras, =ince. !s difcil encontrar a alguien que entienda lo frustrante que
es sentir que ests luchando solo contra el mundo? le confes&. !ra su realidad de todos los
das, sentirse invisible, solo para que le notaran cuando haca algo mal. (o bueno nunca era
reconocido por nadie, y eso lo dejaba siempre insatisfecho.
?0ienvenido al club? le oy& decir, y mir& a =ince con curiosidad. !l lobo dio un suspiro
profundo? 0ueno, yo no tengo a un par de idiotas bebes grandes que cuidar, pero creme,
tengo mis propios problemas...
?Puedes hablarme de ello4 "oy bueno escuchando? le pidi&. =ince le mir& y +lbert sinti&
que deseaba desesperadamente descargar la tristea reflejada en esos ojos. "e alegraba de
estar all y poder prestarle apoyo.
?0ueno, pero solo porque no hay nada mejor que hacer un sbado por la tarde, que ponerme
a protestar? brome&.
?+delante. Pnete a m y protestemos juntos al mundoC? e#clam& para animarle, acercndose
ms a l.
?Hey, eres un vampiro divertidoC? le dijo con una bella sonrisa y +lbert se alegr& de estar
con vida? Para empear, los lobos nos transformamos en animales, lo sabes, no4 0ueno, mi
problema es que no puedo transformarme.
?*o puedes4
?*o. *unca he podido. (a transformaci&n empiea en la pre?adolescencia, para afinarse
hacia la adulte, eso dice toda la gente, pero en mi caso, nunca he sido capa de
transformarme en lobo. +unque el lobo est all, a veces puedo sentirlo, pero no puedo
conectar con l y hacer que salga.
?=aya? dijo mirndole preocupado y le vio sonrer con tristea, sintiendo su cora&n
apretarse de pesar por l.
?.i familia trata de minimiar el asunto diciendo que tenga paciencia, que soy una especie
de 9flor tarda:, que lo bueno siempre vale la espera, etc, etc? lan& un bufido, sacudiendo la
cabea? (a verdad es que estoy un poco harto de esperar.
?' que pasa si... bueno, si no puedes transformarte4? consult& con cuidado, pero solo le vio
arriscar los hombros. "e vea que haba pensado mucho en ello.
?;endr que vivir con eso. +unque, es un poco frustrante ser un hombre lobo y no poder ser
un 9lobo: en toda la e#tensi&n de la palabra...
+lbert iba a intentar animarle, cuando alguien llam& a la puerta. =ince y l se miraron
preocupados. =ince le se,al& la cama y entendiendo, +lbert se lan& tras ella por el lado que
no se vea de la puerta, agachndose en el suelo.
+bri& la puerta, para ver a su hermana de pie con un plato en la mano.
?Hey, no te has duchado4? dijo arriscando la nari con gesto de asco? Mff, hermanito. *o s
lo que tienes por aqu, pero huele fatal.
?@racias, lo estaba reservando para ti? respondi&, tomando el plato de su mano con el pastel.
?=as a bajar4
?*o. 3uiero descansar toda la tarde. .e duele la lesi&n a)n.
?=ale. Pap ya est aqu. (e dir que bajars para la cena.
?$e acuerdo? cerr& la puerta y prest& atenci&n un momento a los ruidos e#teriores, lanando
un suspiro profundo cuando not& que ;racy se haba marchado? +l, sal ya. *o hay peligro.
?"iento que tengas que mentir por m? le oy& disculparse. .ir& sus ojos llenos de tristea y
sonri& para quitarle importancia al asunto, para que no se sintiera tan mal por l.
?*o importa. +s descansar un poco de mis hermanos? (e vio acercarse y sentarse junto a
l una ve ms, mirando interesado el plato de pastel? ;ienes hambre4
?Mn poco.
?Come. Puedes comer, no4? le vio asentir y sonri&? @enial.
!l vampiro comi& un troo del pastel en peque,os bocados, aunque con apetito y a =ince le
pareci& se#y y al mismo tiempo encantador.
?;e o decir que estabas lesionado? pregunt& entre un bocado y otro, mirndole con sus
grandes ojos aul tormenta. =ince movi& un poco el hombro.
?", me dieron un golpe la semana pasada en el entrenamiento. Btro problema de no poder
cambiar, es que mis heridas tardan ms en curarse.
?$e qu era el entrenamiento4
?>)tbol "occer. "oy uno de los quarterbac/.
?=aya. Mn lobo luchando en los campos del deporte tras la esquiva victoria? brome& con una
sonrisa.
?(o dice alguien que sobrevive en los campos de batalla adolescente todos los das?
respondi& de igual forma. !l gesto del vampiro se entristeci&.
?*o me lo recuerdes. $e solo pensar que tendr que ver a ese par de ni,os tontos, me entran
ganas de huir al bosque? sus palabras le llenaron de un e#tra,o sentimiento, deseando de
pronto huir con l, correr a su lado entre las sombras del bosque, dormir en los claros, aullar
de noche a la luna llena junto a l. =io que +lbert le miraba intrigado.
?3u4
?!stabas... gru,endo o algo as...
?Bh... !n serio4? le vio asentir? @ru,ido, como de hambre4
?Como de animal? asegur&. =ince se qued& sorprendido, buscando en su interior la pista de
su lobo, pero no sinti& nada? !sts bien4
?", solo... bueno, lo que dijiste de huir. "i yo pudiera, huira contigo? le vio sonrer con
tristea.
?;u familia te echara de menos.
?0ueno, supongo...
?;u hermana pareca muy preocupada por ti? dijo de una forma un tanto anhelante. =incent
le mir& con atenci&n.
?' t), tienes familia4
?*o. Cuando me transform, perd todos mis recuerdos humanos. " que trabajaba en una
sastrera, por que el vampiro que me convirti& me lo dijo, pero no tena a nadie ms. !stoy
solo? sus palabras tocaron su cora&n, y su gesto triste, lleno de a,orana le hio desear
borrar la tristea de l. +l& la mano y la pos& suavemente en su mejilla. !staba tan fra, que
dese& desesperadamente infundirle su calor.
?!st bien, no ests solo ahora, +l. !stoy contigo? y sus dedos roaron su mejilla con ganas,
mirando los ojos que se fijaron en los suyos, oscurecidos, bellos y h)medos como las nubes
antes de la tormenta, trayendo desde lejos su aroma a lluvia y a rfaga. "inti& el latido en su
interior de algo que se movi& a la superficie y susurr& en su odo. "u mano recorri& las
facciones de su cara y se hundi& en su pelo, disfrutando su te#tura suave y etrea, posndose
en el cuello blanco y frgil, sostenindole con su calor.
?.o? oy& clara la vo en su odo. ' le solt& repentinamente, presa de la sorpresa.
?=ince4 3u pasa4
?*ada. ;ermnate el pastel? dijo apretando su mano en un pu,o. (o haba odo claramente,
estaba all, "u loboC Pareca querer salir para estar con el vampiro. (e mir& comer y vio el
gesto preocupado en sus ojos mientras le observaba. Por qu su lobo quera estar con l4 !ra
un vampiro... bueno, uno muy lindo y que le pareca e#tremadamente encantador. +dems
estaba solo y era valiente. Haba tenido una vida difcil, pero no era un idiota pomposo. "e
mantena en su lugar. ' era muy atractivo.
+lbert le vio mirarle con ojos de pronto perdidos en un ensue,o y se pregunt& que estara
pensando. !l pastel era dulce y estaba delicioso, pero no tanto como el calor que sus dedos
haban transmitido a su piel. !staba contento, feli de haberle conocido. .ientras le miraba,
empe& a sentir la pesade en su cuerpo que le anunciaba el sue,o. $io un gran bosteo sin
querer y vio a =ince mirarle con sorpresa.
?=aya, casi me tragas? brome&, y l se cubri& la boca de inmediato. 3u maleducadoC
?(o siento.
?;ranquilo. ;ienes sue,o4
?!s el sue,o de los vampiros. + medio da nuestro cuerpo se regenera y necesitamos dormir
algunas horas. !n realidad, caemos en un coma. Por eso, en el pasado la gente crea que
estbamos muertos y solo salamos de noche, a incordiar por ah.
?", he visto las pelis. 0ueno, los hombres lobo tampoco hemos sido catalogados
precisamente de 9amigos de la humanidad:? sus palabras le hicieron rer, bosteando otra
ve, pero logrando cubrirse la boca a tiempo, vindole sonrer con ganas? =aya, veo que
mis palabras te aburren...
?(o siento. *ecesito echarme un rato.
?Msa la cama? dijo apuntndosela y su cora&n comen& a latir con fuera. 3u el lobo fuera
tan generoso con alguien como l le maravillaba.
?!sts seguro4 Puedo dormir en el suelo? asegur&, sintiendo sus ojos volverse ms pesados
sin poder evitarlo. !l sol deba estar casi en lo ms alto. (e vio torcer el gesto y oy& su
gru,ido enfadado.
?Como los adolescentes esos te hayan obligado a dormir en el suelo, me los cargoC?
amena&. "us palabras le gustaron, y ms sentir que quera protegerle. Haca mucho que
nadie se preocupaba por l.
?*o. ;engo una cama para m en la mansi&n. !s solo que mi olor quedar en tu cama y
puede que te resulte desagradable despus.
?"ube, o me pondr a cantar el himno de la bandera a gritos y cortar tu sue,o de ra?
brome& y +lbert sonri&, subindose a ella.
?@racias... =ince? logr& decir, antes de que sus ojos se cerraran.
?$ulces sue,os, mi vampiro? susurr& y le vio quedarse completamente quieto. !l delicioso
olor que desprenda con fuera ahora que no estaba asustado, como el aire huele antes de la
tormenta y el aroma de la tierra bajo la lluvia, llen& por completo su nari y dese& que se
impregnara en sus sbanas para siempre. "e inclin& sobre l y aspir& profundamente. ", le
gustaba mucho. By& el gru,ido de gusto dentro de s. + su lobo tambin le gustaba...
!spera...
?(obo4? llam& en vo baja, concentrndose en su interior? (obo, ests ah4? Para invitarle,
volvi& a acercarse al rostro dormido de +lbert, plido y quieto, casi sin vida, lo que le llen&
de una repentina aprensi&n? +lbert4? llam&, colocando los dedos en su mejilla fra para
acariciarla. "inti& al lobo apro#imarse para disfrutar de su toque, lanando un suave quejido
preocupado? ;ranquilo, solo est dormido? le dijo con una sonrisa y le sinti& calmarse. !ra
increble que apareciera ahora. !staba claro que la presencia del vampiro le llamaba. Hio
otra prueba, sentndose a su lado para coger con la otra mano la suya, entrelaando sus
dedos, sin dejar de acariciar su rostro? ;e gusta4 (a verdad es que es muy lindo y est muy
solo. Pens que ste iba a ser el peor da de mi vida, pero ha resultado ser genial. ;odo por
+lbert. (stima que tenga que marcharse...
?*o? oy& claramente y sinti& el quejido apenado del lobo? !s mo...
?(o quieres4 Pero es un vampiro...
?.o... mo... *uestro...
?*uestro? repiti&, consciente ahora de que el lobo y l eran uno solo. *o eran dos seres
separadosL eran la misma conciencia y los mismos sentimientos. .ir& el rostro del vampiro,
acariciando sus dedos y las formas de su cara, tan bello, tan frgil, tan suyo? *uestro... 'o
tampoco quiero que se marche. Crees que quiera quedarse con nosotros4
?*uestroC
?(a gente de la mansi&n parece que no le trata muy bien. 3uiero cuidar de l.
?", s... Cuidar.
?Pero, c&mo se cuida de un vampiro4? pregunt& mirando los labios plidos y rondoles con
su dedo. +lbert abri& la boca a)n dormido, dejando escapar un suave bufido y sus colmillos
se e#tendieron. =ince retrocedi& un poco, sorprendido pero no se apart&. (a visi&n de sus
colmillos e#puestos le pareci& muy se#y. (os labios del vampiro se cerraron, aunque sus
colmillos se quedaron fuera. !l lobo sigui& acaricindole suavemente, disfrutando de las
formas fras de su rostro. 3uis estaba so,ando...
?Con qu sue,as, mi bello vampiro4 "ue,as conmigo4? le pregunt& en un susurro, cerca de
sus labios, mirando los blancos y puntiagudos colmillos, preguntndose como sera recibir
un mordisco de ellos. !l lobo le urgi& a protegerle, susurrndole una palabra a su mente que
entendi& perfectamente% +limento.
+lbert despert& con una e#tra,a sensaci&n de calor. Cuando abri& los ojos, vio al lobo
recostado a su lado, su mano apretando la suya, un largo brao pasando por su pecho para
apretarle contra s. "e senta bien, clido y protegido. *o quiso moverse y despertarle,
disfrutando un poco ms de su cercana. (e dolan un poco la encas. +l llevarse una mano a
la boca, descubri& que sus colmillos haban bajado mientras dorma. $iosesC "e cubri& con
la mano, mirando preocupado la forma de =ince a su lado, tratando de que subieran antes de
que despertara. ' el peso de ese brao en su pecho, su calor y aroma no estaban ayudando
en nada. $ebi& haberse movido, porque el chico se removi& un poco y abri& los ojos.
?Hola, bello vampiro durmiente? le salud& con una sonrisa.
?Hola? le salud& a su ve, con la vo amortiguada por su mano. =ince frunci& el ce,o,
alndose a medias para recostarse de lado y mirarle.
?3u pasa4 Por qu te cubres la boca4
?*o es nada...? intent&, pero el chico cogi& su mano y la separ&, e#poniendo su vergEena.
?$jame ver... +h, tus colmillos bajaron mientras dormas. *o pasa nada? pero no pudo
evitar ruboriarse. =ince le dio una sonrisa y un gui,o c&mplice? !s como una erecci&n
matutina, no es as4
?(o sientoC? se disculp&, sta ve cubrindose el rostro con ambas manos. .ir& con un solo
ojo cuando le oy& rer.
?!res muy lindo cuando te avergEenas? le dijo, y se qued& mirando sorprendido su rostro y
ojos cercanos. Poda verle mejor ahora, ya que el chico haba descorrido las cortinas y la
clara lu de la tarde entraba por las ventanas. *o era una lu perjudicial para sus ojos, igual
que la de la ma,ana. "olo las horas ms radiantes les da,aban de verdad. "e qued&
contemplndole fascinado al tenerle tan cerca. !l rubio y corto cabello de =ince lanaba un
suave destello dorado y clido como el trigo, sus ojos de color dorado le miraban con
dulura. "u rostro de una bellea masculina, cincelada para transmitir fuera y seguridad, y
su sonrisa acogedora se le antojaron sencillamente perfectos. "inti& de pronto tal golpe de
deseo en su interior, que fue como si electrificara todo su cuerpo. =ince tuvo que haber
notado el cambio en l, porque sus ojos antes dorados, se oscurecieron en aterciopelada
negrura. +lbert se enamor& de ellos en ese mismo instante. !l dolor en sus colmillos se hio
insoportable y se encontr& lanando un rugido hambriento y lleno de deseo. =ince le
respondi& con un gru,ido animal. =io el par de colmillos del lobo bajar y gotear saliva. Mna
visi&n hermosa y sensual.
?3uiero morderte...
?$jame marcarte? se dijeron al mismo tiempo, quedndose quietos y at&nitos por un
momento mientras se miraban.
?$jame beber de ti? le pidi& +lbert, no solo sediento por su sangre sino por l. =incent le
mir& con profundidad? "olo un poco... Mnas gotas...? comenaba a decir, cuando sinti& su
mano introducirse por su pelo y coger su nuca, para acercarle a l con fuera, casi con furia
repentina y sinti& el mordisco en sus labios, la espesa saliva y la caliente lengua que
invandi& su boca de forma posesiva. "e dej& llevar por el beso, apretndose contra l, pecho
con pecho, vientre con vientre sobre la cama, hasta que su erecci&n toc& la suya. (e sinti&
gemir entre sus labios y gimi& cuando su lengua caliente le acarici& los colmillos,
incitndole al mordisco. Clav& los dientes en su lengua y el sabor de la sangre de =ince
e#plot& en su boca, rico y embriagador como un buen vino. !mpe& a chupar de ella y oy&
los gemidos entrecortados del lobo entre sus labios, la lengua prisionera entre sus colmillos
retorcerse caliente y ansiosa, su cuerpo ahora bajo el suyo moverse frentico, aferrndose a
l desesperadamente. ;odo eso hio que la energa se desatara en su interior, el deseo y la
pasi&n agitndose sobre su piel y comen& a gemir a su ve dentro de la boca del lobo, su
placer construyndose al unsono con el suyo, como uno solo. "olt& su lengua, para lanar
un gemido ahogado contra su cuello cuando el orgasmo e#plot& en l y sinti& que =incent se
agarraba a su cuerpo de igual manera, estremecindose entre convulsiones de placer, y el
calor en ellos se derram& entre esperma compartida.
=ince ya estaba harto. !sos mocosos desagradecidos, Cundo dejaran de hacer su vida un
pesar constante4 "e chup& el dedo que se haba pinchado con la aguja, sus ojos empa,ados.
.ir& las oscuras paredes, acechando de sombras a la escasa lu de la lmpara, quis como
un eco de los fantasmas en su cora&n. 3uin era l para quejarse4 ;ena un techo bajo su
cabea, comida... "e levant& y la ropa cay& de su regao al suelo. 3uin era l4 !staba solo
y perdido en el mundo, si muriese ahora A3uin le e#tra,ara4 !l peso de los a,os y los
recuerdos era doloroso, pero ms doloroso a)n saber que estara siempre solo, que las
estaciones pasaran, que la gente reira a su lado, bebera el vino de la vida y l se
marchitara solo, abandonado a su suerte. +bri& la ventana y mir& la noche, como tantas
veces haca, las bellas estrellas en lo alto. +lguna ve haba conocido el amor4 *o poda
recordarlo, 0ernard le haba dicho que no haba sido nadie, que era menos que un perro
tirado a la calle cuando l le transform&, que le haba dado una vida nueva, que deba estar
agradecido. +gradecido de qu4 $e su soledad, de su pena4 Contempl& como siempre la
idea de tirarse por el balc&n, pero KPobre cobarde que eraC *unca consegua pasar del solo
pensamiento. +dems, le tema al dolor. !ra un vampiro, 3u poda matarlo4 Por qu no
haba muerto cuando 0ernard le mordi&4 Por qu no descansaba en la tierra, siendo polvo
del polvo... 3u pecado haba cometido para continuar aquella maldita e#istencia4 "ollo&
aferrado al balc&n, susurrando entre lgrimas a la noche.
?"lvameC *o me dejes soloC =en a mC
+lbert se sec& el sudor con el brao, haciendo una mueca al mover el hombro. .ierda, el
bruto de +lan le haba dado un buen golpe. !l tipo pesaba casi cien /ilos, 3u estaba
pensando cuando se le ech& encima4 ' el partido era en una semana, 3u iba a ser4 !staba
muy jodido. *o solo era una nulidad como lobo, ahora tampoco serva para jugar... 3uiso
echarse a llorar. "e levant& de la banca y se fue a las duchas. @olpe& con su pu,o el muro y
el dolor en su mano le record& lo dbil que era, engendro de la naturalea, in)til pedao de
mierda... "i no poda jugar, ya no le quedaba nada. 3uin iba a querer estar con l4 Con un
engendro amorfo que era incapa de transformarse4 3uin iba a respetarle, a tocarle4 $esde
que era un ni,o haba visto a sus hermanos evolucionar, con sus poderes, su fuera, su
bellea y l quedarse siempre atrsL su familia, sus amigos, todos iban por delante y l era el
)nico que se quedaba atrs, solo, abandonadoL a)n cuando trataba de correr lo ms rpido
que poda, terminaba siempre tirado en el sendero, estirando una mano suplicante en
direcci&n a los que se alejaban.
?*o me dejisC 5egresadC !stoy aquC
=ince se sec& las lgrimas, apartndose del balc&n, mirando confuso a su alrededor. Mna
habitaci&n peque,a, casi vaca, $&nde estaba4 !ntonces lo vio, su reflejo lloroso en el
cristal de la ventana.
+lbert se restreg& el pu,o dolorido, confuso y apesadumbrado al mismo tiempo. "e
sobresalt& al ver la imagen que le devolvi& el espejo del ba,o.
+mbos se despertaron en la cama, abraados a)n, entre el calor y la humedad que
compartan. "e miraron a los ojos, incapaces de decir nada, las lgrimas a)n rodando por sus
mejillas. +lbert estaba encima de l y acun& con su mano su mejilla, acercndose a sus
labios para darle un dulce beso. =incent cerr& los ojos, apretndole contra s con fuera
mientras se besaban. "e acariciaron por entre suaves besos, calmando la pena y el dolor,
confortndose con su lenguaje sin palabras. Cuando =incent abri& los ojos le contempl&,
acariciando las facciones de su ahora despierto vampiro.
?+qu estoy. *o me ir de tu lado? le susurr&, besndole con suavidad? 3udate conmigo,
+lbert? pidi&, cogiendo su mano para besarla. (e oy& solloar suavemente.
?'o... yo nunca te dejar en el camino. Fremos juntos, =ince. $&nde quiera que sea? le jur& y
=ince le apret& con fuera contra s, hundiendo la nari en su negro pelo. +lbert se agarr&
con fuera de l, solloando contra su pecho, la pena y dolor de tantos a,os brotando junto
con sus lgrimas.
?!res mo. "iempre lo has sido y siempre lo sers? oy& su vo en su odo y la oy& h)meda
tambin de lgrimas? ;e he esperado por siempre...
?'o tambin? le respondi&, alando el rostro lloroso para buscar sus labios y besarle por
entre la sal de sus lgrimas? 'o tambin te he esperado... siempre...
"e besaron con locura, quitndose la ropa con prisas, tocndose con desesperaci&n,
hambrientos por la piel del otro, fundindose en un abrao h)medo de sudor y semen,
salpicado de gemidos, entregndose al otro en cuerpo y alma, como si compartieran la
misma piel, los mismos sentidos. "e quedaron abraados un momento tras el placer,
mientras recuperaban la respiraci&n
?$ios, nunca haba sentido nada igual? oy& decir a =ince. +l& el rostro de su pecho, donde
oa el latido de su cora&n y le mir& con una sonrisa.
?;ampoco yo.
?(o repetiremos, verdad4? asinti& sin decir nada. !ra como si las palabras sobrasen. "e
abraaron con fuera sobre la cama y disfrut& el calor de su pecho en el suyo y el ritmo
constante de su cora&n infundirle vida, sintindole olfatear su pelo? 3u crees que fue lo de
antes4? le oy& preguntar de pronto y supo e#actamente de lo que hablaba.
?*o lo s. *unca me haba pasado con nadie? admiti& mirando sus ojos y alando una mano
para acunar nuevamente su mejilla? Pero me alegro que haya sido contigo. Ha dolido, pero
siento que ahora te conoco mejor.
?'o tambin, +l. ' quiero seguir conocindote. 3uiero que ests a mi lado siempre? dijo con
vo que sinti& tan temblorosa de emoci&n como la mirada en sus ojos. "u propio cora&n
lati& con fuera.
?$e verdad quieres que me quede4 $e verdad puedo quedarme4? consult& ilusionado. =ince
se sent& contra el respaldo de la cama y le atrajo contra s, sin querer liberarle de la crcel de
sus braos.
?!res mo. .i lobo y yo no te dejaremos ir? asegur& besndole en los labios. "us palabras le
llenaron de sorpresa.
?;u loboC Has encontrado a tu lobo4? y por respuesta sinti& en su mente un gemido suave,
casi como una caricia.
?+lbert? susurr& su nombre. .ir& a =ince con sorpresa y vio que ste le miraba de igual
manera.
?(e has odo4? +lbert asinti&, sintiendo sus ojos llenarse de lgrimas, volviendo a or su
nombre? (o ves4 8l te conoce, sabe que eres suyo. ;) lo has encontrado para m. Ha sido
atrado por tu presencia.
?C&mo es posible4? consult& secndose las lgrimas. "u mirada de amor calm& su inquietud.
+ su mente lleg& la imagen clara del sue,o que haban compartido, las emociones de =ince
siendo las mismas, las propias, compartiendo su dolor? Parece... !s como si fuera una
especie de lao psquico...
?;) llamas, yo respondo? dijo el lobo, y vio a =ince sonrer con ganas? ;) eres yo. 'o soy
t)...
?"omos uno solo. ;) y yo. *o podemos estar separados? le asegur& =ince. ' +lbert lo crey&
con todo su cora&n, pues lo saba ya en lo profundo de su alma. 8l le pertenenca por
completo. "e estir& hacia l y le bes& con ganas
?Bh, =inceC .e hace tan feli estar a tu lado. *o quiero dejarte, no dejes que me vaya.
3uiero estar contigo? le suplic& mirando sus ojos y recordando su sue,o? !stabas tan triste,
tu dolor era tan grande, lo senta en mi propio cora&n. 3uiero estar all para que no vuelvas
a sentirte solo nunca ms, para protegerte? le confes&. "inti& el latido intenso de su cora&n
en el pecho cuando le apret& contra l con fuera.
?'o tambin pude sentir tu dolor y tu miedo, tu soledad. *o quiero que vuelvas a esa casa.
3udate conmigo. " que no tengo mucho... por ahora. Pero te dar lo que necesites. (o
compartiremos todo, lo prometo.
?;) eres lo que necesito. *o quiero nada ms. $eja que me quede contigo? !n respuesta,
=ince le acun& contra l feli? Crees que tu familia lo entienda4? pregunt& de pronto
preocupado, mirando sus hermosos ojos dorados. !l lobo acarici& su mejilla amorosamente.
?;endrn que aceptarlo. !l vnculo de pareja es sagrado para nosotros. +dems, eres
encantador. "eguro que a mi familia le agradas de inmediato? dijo con una sonrisa tranquila
que le anim&. 8l no tena mucho tampoco, pero era algo que poda compartir con l. (e dio
una mirada confiada.
?Puedo trabajar. Puedo buscar trabajo en el pueblo. ' tengo alg)n dinero ahorrado. *o es
mucho, pero ser todo nuestro.
?+lbert. *o tienes...
?3uiero hacerlo. 3uiero cuidar de ti? volvi& a asegurarle, esta ve con total firmea. (a
sonrisa de =ince ilumin& su cora&n.
?' yo de ti? se besaron, +lbert sintiendo la felicidad aletear por todo su cuerpo, no solo por
la cone#i&n psquica que lo una al lobo, sino por que haba encontrado a su compa,ero de
vida y ya nunca estara solo. "e qued& mirando el rostro bello y los dulces ojos clidos de su
lobo amado, sintiendo los dedos que jugaban con su pelo? Puedo decirte algo, +lbi4
?Claro? ri& encantado por su nuevo sobrenombre, y vio la luminosa sonrisa en su rostro.
?;e amo. " que nos conocimos de una manera poco convencional, pero pens que eras una
cosa peque,a y deliciosa en cuanto te vi. .e alegro de haberte conocido? sus palabras le
llenaron de felicidad. "e acomod& contra l para acercar su rostro al suyo, apoyando la
frente en la suya, mirando sus ojos como uno solo.
?'o tambin te amo, =incent. !s cierto que cuando despert esta ma,ana pens que ibas a
comerme, pero pensndolo mejor, ahora no me parece tan mala idea? dijo con sonrisa
pcara.
?.i se#y vampiroC? dijo buscando sus labios y +lbert se ofreci& a su beso, acaricindole una
ve ms.
?.i hermoso lobo? susurr& entre sus labios y oy& un sensual ronquido en su garganta.
"onri&, acariciando con su cuerpo el se#y bulto entre sus piernas que haba vuelto a
despertar, invitndole con el suyo.
=olvieron a tocarse, esta ve con calma suficiente para e#plorarse, el deseo construyndose
en ellos mientras se besaban, mirndose a los ojos. =incent cogi& en su mano ambas
erecciones para agitarlas al mismo ritmo, perdido el aliento en la boca de su bello vampiro,
necesitado de respirar su mismo aire, beber su misma esencia, sentirse parte de su piel,
lanando un gemido ahogado en su odo con su nombre, al liberarse ambos de placer al
unsono, dejndose caer agotado sobre la colcha, satisfecho a su lado. "inti& la mano de
+lbert buscar la suya y entrela& sus dedos con fuera. "e al& un poco, para cubrirles con
la manta a los pies de la cama luego de limpiarse y le abra& contra s, para cerrar los ojos y
so,ar sus mismos sue,os.
;racy subi& la escalera inquieta. (e haba llamado dos veces a cenar y no le haba
respondido. "i tanto le dola la lesi&n era mejor que lo viese un mdico. 3uis no era bueno
forarlo, pero tampoco se poda pasar todo el da encerrado en su cuarto. Fntua que estaba
molesto por no haber podido jugar con su equipo, pero esconder la cabea y ahogarse en la
depresi&n no era forma de enfrentar las cosas. "ubi&, decidida a sacarle de su concha. "i su
hermano no quera ver por s mismo la perla que era, se lo hara saber a la fuera. Puso la
mano en el pomo de la puerta y ya antes de abrir, ese olor volvi& a invadir a su nari. Puaj,
la habitaci&n necesitaba ventilarse un poco y una urgente limpiea a fondo. "aba que su
hermano, bueno, hermanos en general, eran un desastre limpiando, pero eso no era ra&n
para morir de into#icaci&n olfativa. *o saba por qu, pero desde que haban llegado a casa,
un e#tra,o olor dominaba el lugar. Habra una fuga en alguna parte4
+l abrir la puerta, una forma enorme y peluda salt& frente a ella, y el rugido furioso de un
animal sacudi& sus tmpanos Mn enorme lobo, con el pelo eriado y los dientes al
descubierto gru,& en su direcci&n, los ojos echando chispas. ;racy retrocedi& sin querer, su
propio lobo preparando la huda.
?=ince, noC !s tu hermanaC? oy& un grito autoritario. Cuando mir&, vio a un chico de pie
detrs del lobo, de aspecto delicado, la plida piel de su cuerpo solo cubierta por un velo
negro y sedoso de largo cabello. "us ojos le miraron y vio consternaci&n en ellos. !ntonces
la verdad la golpe&. !l chico desnudo era un vampiro y el lobo...
?=inceC? dijo con sorpresa. !l lobo la mir&, ya sin gru,ir y camin& tranquilo para posarse al
lado del vampiro. 8ste le acarici&.
?=uelve a m? le pidi&, y sin dar crdito a sus ojos, ;racy le vio volver a tomar forma
humana. (os ojos de su hermano se encontraron con los suyos, algo avergonados.
?(o siento, ;ry. 5eaccion por impulso. *o iba a lastimarte...
?;)... t)... te has transformadoC? e#clam&, entrando en la habitaci&n y el aroma la retuvo,
mirando al vampiro? 3uin eres t)4 3u hacer aqu4
?8l es +lbert. !s mi pareja? las palabras de su hermano la dejaron muda. =ince pareca tan
tranquilo, incluso orgulloso.
?Pareja4? entonces not& que su hermano estaba tambin desnudo. +bri& los ojos enormes?
=osotros estabais...? pero no pudo continuar. +lbert se rubori&, saltando tras la espalda de
=ince, mientras ste se cubra entre las piernas? +gg, no quiero saberlo? dijo dndoles la
espalda? Ponos algo encima, yaC? orden&. By& carrerillas a su espalda.
?!st todo manchado? oy& la vo del vampiro.
?Ponte la ma.
?@racias? y oy& claro el rumor de un beso.
?$ejos de arrumacos y decidme que ha pasado. ;oda la verdad? e#igi&.
?+lbert entr& anoche en casa y se qued& dormido en el cuarto de las escobas.
?>ue un accidenteC
?", amor, tranquilo? ;racy rod& los ojos? !l caso es que le encontr y como no poda salir al
sol porque se quemara, le dej quedarse en mi cuarto hasta que cayera la noche y pudiera
regresar. Pero entonces descubr que era mi pareja. !l lobo me lo dijo.
?;u lobo4
?". *o quera que +lbi se marchara? oy& otro beso, y refunfu,&? !s mo y me lo quedar?
asegur&. ;racy se dio la vuelta, vindoles ya vestidos. !l peque,o vampiro llevaba una
camiseta de su hermano, que le quedaba grande y le daba un aspecto de cosita abraable.
5eprimi& el instinto de estrujarle entre sus braos.
?"abes que tendrs que decrselo a pap y mam.
?(o s. *o puedo dejar que mi +lbi se vaya. (e necesito. "in l no puedo controlar a mi
lobo? dijo apretando al vampiro contra s, y ;racy vio que ste le miraba con ojos de
adoraci&n.
?' yo no quiero estar sin ti. ;e necesito? susurr&, y casi pudo ver a su hermano derretirse en
el suelo.
?=enga, vamos abajo. .ejor ahora, que me tenis de vuestro lado? dijo, acercndose a la
puerta y viendo por sobre su hombro como se besaban? =is a venir o qu4
?", s. @racias ;ry? dijo al pasar a su lado de la mano del peque,o vampiro. Por respuesta
ella lan& un bufido, moviendo la cabea.
!l cora&n de +lbert retumbaba en su pecho. 3uera estar con su lobo. *unca haba querido
tanto algo en la vida. *o importaba el c&mo, solo saba que sin =ince no poda vivir. (e
mir& y vio el mismo deseo en sus ojos. +pret& su mano y sus dedos se entrelaaron a los
cuyos clidos y con fuera, transmitindole su amor. 0aj& las escaleras que antes no haba
podido ver en su ceguera de vampiro, y reconoci& el pasillo y las sillas que haba visto la
noche anterior. C&mo pudo confundirlo con un almacn4 !ra claramente una casa. Pero se
alegraba de su confusi&n, ya que ella le haba permitido encontrar al hermoso y dulce lobo
de sus sue,os. (a familia estaba sentada a la mesa. ;odos grandes, hermosos y rubios lobos
que le miraron con ojos enormes. =io al padre de ojos oscuros y a la madre de ojos dorados,
iguales a los de =ince, y un chico que era claramente su hermano, pues tena sus mismas
facciones, aunque pareca ms grande y fuerte, pero no tan bello como su lobo. !l chico
dej& caer la mandbula abierta nada ms verle, sin pudor alguno y de forma tan c&mica, que
+lbert no pudo evitar sonrer a medias.
?3u se supone que significa esto4? consult& el padre. =ince iba a hablar, pero ;racy se le
adelant&.
?8l es +lbert. !s un vampiro, y es el compa,ero de =ince.
?Compa,ero4 C&mo que compa,ero4? consult& la madre. +lbert esperaba ver enojo en ellos,
furia vengativa, pero solo percibi& curiosidad. ;racy e#plic& la historia que ellos le haban
contado antes.
?+dems, =ince puede transformarse ya. (o he visto? agreg& y volvi& el rostro, gui,ndole
un ojo a su hermano. =ince sonri& con ganas.
?!s cierto eso, hijo4
?", pap. .i lobo responde a +lbert. 8l lo ha despertado en m.
?*o puede ser...? oy& el susurro asombrado de la madre, mirando a su hijo. Pens& en su
propia madre, una que no recordaba. (e habra amado de igual manera que los ojos de ella
le transmitan su amor y su preocupaci&n4
?'o quiero uno? oy& de pronto e#clamar, y vio al hermano del chico ponerse en pie de un
salto, acercndose y e#tendiendo los braos en su direcci&n? K'o quiero uno tambinC?
+lbert dio un saltito asustado, tropendose con el pecho de su lobo, pero el gru,ido
profundo que sali& de =ince detuvo al otro, quin le mir& at&nito? =ince4
?!s .oC? rugi&, abrandole con fuera contra s.
?Chicos, tranquiliaos? dijo el padre levantndose y vio la alarma en el rostro de su madre.
*o, no poda permitir que se pelearan por l. "e volvi&, apretndose contra el pecho de
=ince y puso una mano en su cora&n, galopante de latidos.
?!sc)chame, =incent. !stamos a salvo. "on tu familia, estamos a salvo. =uelve a m. =en? le
llam&? =en a m...
(e oy& respirar profundo y el intenso latido se calm&. "e volvi&, viendo los rostros
consternados de la familia.
?Creo... que ya todo est bien? dijo algo avergonado. =io al rubio lobo colocar una mano
enorme en su hombro.
?Hermanito... 3u suerte tienesC $&nde puedo conseguir uno tan lindo para m4
?+uch, Price, mi hombro...
?(o siento? dijo soltndole de inmediato, mirndole con aprensi&n.
?Has picadoC? le oy& rerse, abrandole contra s. +lbert se ri& tambin, acunado por los
braos de su hermoso lobo.
?=aya... K3u susto me has dadoC? protest& Price, unindose a sus risas. .ir& al resto de la
familia, la calma y la sonrisa otra ve en sus rostros. !l padre se sent& a la mesa.
?0ueno, creo que eso aclara las cosas.
?=olved a la mesa y continuad cenando? orden& la madre. (os chicos se sentaron en sus
lugares y =ince se separ& de l, acercndose a la olla que humeaba en la cocina.
?Coger otro plato de guiso para +lbi.
?$e ninguna maneraC? protest& la madre con fuera, ponindose en pie de un salto. +lbert
sinti& su cora&n hundirse. =ince le mir& compungido, intentando acercarse a l, pero su
madre le dio un golpe en la nuca? (os vampiros no comen carne, les hace enfermar... "i vas
a ser su compa,ero, tendrs que aprender a cuidarle. =uelve a tu lugarC ' t), coge una silla y
sintate a su lado, mientras preparo una ensalada? dijo con una sonrisa en su direcci&n.
+lbert sinti& la sangre volver a correr por sus venas y corri& a hacer lo que le haban
ordenado. "e sent& feli al lado de su lobo, quin apret& su mano con cari,o, mirando a la
nueva familia que le daba la bienvenida en su hogar.
Mnos cuantos das despus de la fiesta, el coche de los se,oritos $e @uille se marchaba del
pueblo con un miembro menos. +lbert les haba llevado al da siguiente de su encuentro con
=incent su carta de renuncia. *o tena posesiones en la mansi&n, y aunque las tuviera, no las
necesitaba. !l dinero que haba ahorrado durante sus a,os de trabajo, lo tena en una cuenta
que transform& en conjunta con su lobo. "u cone#i&n psquica con =ince creci& a medida
que se conocan ms y los laos del amor se estrechaban entre ellos. 'a no se senta solo en
ning)n aspecto, tena una familia que le quera y un hombre con quin compartir su vida.
=incent se recuper& de su lesi&n por completo y regres& a jugar en el equipo. +ntes haba
descuidado un poco sus estudios, pero eso cambi& por completo. +hora tena un compa,ero
al que cuidar y un futuro brillante al alcance de sus manos. ' estaba feli de poder
compartirlo con +lbert. "u madre se qued& muda de asombro al ver el talento de su vampiro
con la aguja y le propuso poner un negocio de arreglo de ropa en su propio domicilio. $e
esa manera, +lbert pudo empear a ganarse la vida, adems de estar en casa a salvo del sol y
la mirada de otros lobos. 0ueno, Price estaba siempre al acecho para abraarle cuando
poda, pero =ince estaba seguro de que su vampiro era capa de manejar a su antojo al
enorme, pero d&cil lobo.
' por las noches era todo suyo, su vampiro, que una ve encontr& dormido en el cuarto de
las escobas, y con su presencia y amor haba cambiado su vida para siempre.
3u ms poda pedir4
El Cone%o el &orro
>o# Harper se hallaba como siempre tomando su cena en el bar del pueblo, el 9$emon
<olf:. !l hijo menor del antiguo due,o, .att, cocinaba como los dioses, y aunque a l no se
le daba mal la cocina en particular, no tena demasiado tiempo para preparar nada con todo
el trabajo en la carpintera. ;ena muchas cosas a)n que terminar en su taller, ya que desde
su llegada al pueblo haca varios a,os, los lobos atrados por su talento con la madera no
haban dejado de tocar a su puerta. !ra bueno que no le faltara el trabajo, y adems amaba el
olor de la madera al ser tallada, pero no haba tenido mucho tiempo para socialiar. (a
manada donde creci& le haba cerrado sus puertas, debido a que no estaba conforme con el
mandato del actual alfa, un lobo demasiado cerrado a los cambios del nuevo mundo, y eso
no haba sido nada bueno para su persona y su creatividad. Por fortuna, se haba sentido
acogido en ese pueblo y haba podido dedicarse a su profesi&n sin contratiempos. Pero a
veces deseaba algo ms en su vida, algo que llenara los espacios vacos que haba
comenado poco a poco a notar.
!staba atacando hambriento su filete en la barra, cuando les vio entrar. +bri& los ojos
sorprendido y no fue el )nico en el bar. !sa semana era la de la tregua anual, y todo el
pueblo se haba llenado de vampiros que recorran las calles envueltos en sus suntuosos y
atractivos atuendos. !ran la eptome de la elegancia y la finura, por no decir bellea, y all
estaban, sentndose a una mesa en medio de la concurrencia lobuna, que se haba quedado
muda y admirada en su contemplaci&n. (a mayora de los vampiros eran de la noblea y se
notaba por su elevado porte, las lujosas ropas que vestan y la forma un tanto altanera con la
que miraban a los dems. Pidieron ser servidos, casi como si estuvieran haciendo un favor
por haber entrado a ese local para inundarle con su estilo, y les vio arriscar la nari al mirar
el men) que .att les alarg& con un gru,ido. (a pareja del chico tambin era un vampiro,
algo tmido pero con mucho talento, y por todos era sabido que al joven lobo no le gustaban
los pomposos nobles, ya que al parecer no haban tratado muy bien a su vampiro cuando
estaba bajo su servicio. Para todos ellos, a)n era e#tra,a la forma en la que la sociedad
vamprica estaba organiada, dividida al parecer entre amos y sirvientes, un rango adquirido
seg)n si haban nacido vampiros o si haban sido convertidos. !llos tambin tenan sus
diferencias, desde el alfa hasta el omega de la manada, pero trabajaban en conjunto y el
rango no era tan importante en s, como lo que podan hacer por su comunidad. 0ueno, al
menos as era en ese pueblo.
>o# sonri& con tristea, recordando a su antigua manadaL la vida le haba ense,ado que no
todo lo que brillaba estaba hecho de oro, y que a veces los amigos podan volverse contra ti.
0ueno, mejor no pensar en ello. Haba pasado mucho tiempo ya. =olvi& la vista a su filete,
pero se qued& con el bocado a medias en la boca, al ver al vampiro que entr& en ese
momento. !ra el )ltimo de la comitiva y se qued& de pie frente a la mesa de los otros, las
manos en los bolsillos de su chaqueta, la capucha cubriendo su cabea, pero dejando ver
unos blancos mechones que brillaban argentas a la lu del local. $esde su sitio en la barra,
>o# pudo ver claro el rostro plido e inm&vil del peque,o vampiro, hermoso y sin mcula,
como un troo bien cortado y pulido de abedul, la mirada puesta en los de la mesa pero
perdida, como si sus pensamientos estuviesen muy lejos de all. !ra peque,o pero esbelto,
enteramente vestido de negro, una ropa que se ajustaba perfectamente a sus formas. Pero lo
que ms le atrajo de l fue el color de sus ojos, de un suave tono rosa igual a los de un
conejo. "onri&, pensando en que sera la presa ideal para ser capturada y llevada su cama.
$esde que era muy joven, haba sabido que le atraan ms los machos que las hembras. !so
no estaba del todo permitido en su manada, ya que a su antiguo alfa no le gustaban las
9meclas e#tra,as:, una ra&n ms para marcharse de all, a)n cuando tena el apoyo total
de su padre. 8ste haba perdido a su pareja tras un mal alumbramiento, y se qued& solo con
su hijo, volcando en l todo su afecto y sus dotes para la carpintera. >o# amaba el aroma de
la madera recin tallada, que le traa siempre recuerdos de su ni,e. "u padre haba muerto
haca a,os, pero ese aroma siempre le haca sentir cerca de l.
$e pronto el aliento se detuvo en su garganta, cuando vio la mirada del vampiro alarse
hasta l, y sus rosas pupilas clavarse en las suyas.
5abbit suspir& internamente, aguardando con paciencia a que el se,orito (e 0lanc hiciera su
apuesta. +l chiquillo le encantaba desafiar a todo el mundo A3u sera esta ve4 (a )ltima,
le hio saltar desde el edificio ms alto de la mansi&n, para demostrar a su primo que su casa
tena la torre ms alta. + l le daba igual, tena un contrato con su padre y no poda
romperlo. "olo una clusula lo e#ima de su lao con los (e 0lanc, pero era una imposible
de cumplir, al menos para l. +pret& los pu,os dentro de los bolsillos de su chaqueta de
carreras. *o volvera a hablar, nunca lo hara. +pret& las mandbulas con furia y sus ojos se
toparon con la mirada de un lobo. *o quera estar all, pero no tena opci&n alguna. "u
pasado le persegua.
?!n menos de 67 horas? oy& que deca el se,orito a uno de sus amigos, y empe& a temerse
lo peor.
?Pero eso significa el medio daC? protest& ste con horror. !l joven (e 0lanc sonri&
malvadamente.
?"i no te crees capa de hacerlo, yo gano. (o har de todas maneras. 5abbit es mucho ms
gil y capa que esa carcacha tuya? 5abbit rod& los ojos. "aba que haca mucho el chiquillo
quera el
162
>errari de su amigo. 8ste apret& los dientes con enojo.
?!st bien. Pero sin trampas. *o podr usar ning)n transporte.
?Bh, no har falta. *uestro 9conejo: aqu no necesita nada de eso? dijo sonriendo en su
direcci&n con travesura. ' una mierdaC 3u estaba planeando4 (e mir& arriscando los ojos.
3ue no pudiese hablar, no significaba que iba a dejar que abusara de l sin protestar? Podr
ir a las afueras del bosque y regresar en menos de 67 horas. Ousto antes del medio da? abri&
la boca para protestar? Por supuesto, despus de haber bebido una buena cantidad de +
!#tra?"uper?Premium. 5aci&n doble? ofreci& gui,ndole un ojo y 5abbit olvid& su protesta.
*o siempre poda conseguir sangre de calidad superior. "egua siendo un sirviente, a)n
cuando sus HQ7 a,os eran una edad ms que respetable y tendran que suponer un puesto de
ms honor entre el servicio de los (e 0lanc, pero la sola idea le sonaba mortalmente
aburrida. ' admitmoslo, estaba fenomenal para su edad. .ir& al chico y termin& por ceder,
rodando los ojos con un suspiro fastidiado. 3u mal que le gustara tanto la aventuraC !l
chico lo saba y por eso le haba llevado con l. !n el fondo, no era un mal muchacho. "ac&
su telfono?agenda electr&nica de )ltima generaci&n y tecle& con rapide, poniendo luego la
pantalla frente a l.
?$oble raci&n ahora y doble despus. 5uta de ida y vuelta a discreci&n ma? !l chico ley& y
sopes& el mensaje.
?;endr que traer una prueba? interrumpi& el otro vampiro, leyendo tambin.
?Por supuesto. ;u ch&fer tambin? agreg&, mirndole luego? !mpearemos la apuesta ahora.
!sts listo4? por respuesta 5abbit arrisc& los hombros, guardando el telfono en su bolsillo.
Cundo no lo estaba4
>o# vio al joven vampiro sacar un par de tubos grandes con un lquido de color oscuro del
bolso que traa consigo. >runci& las cejas al ver que se los alargaba al peque,o de pelo
blanco, y su cora&n alete& en su pecho al ver su sonrisa. Bh, 3u bello era cuando sonreaC
8ste abri& ambos tubos y se los ech& en la boca. "angreC (e vio cerrar los ojos un momento,
relamindose sensualmente los labios y cuando los abri&, sus iris se haban vuelto de fuego,
las pupilas brillantes y resplandecientes. (e pareci& lo ms hermoso y se#y que haba visto
nunca. Pero entonces, el blanco vampiro dio un salto en el aire, una grcil voltereta encima
de las asombradas cabeas de los concurrentes, aterriando en el suelo cerca de la puerta
con la elegancia de un felino y la atraves& con tal velocidad, que solo sintieron el aire que
dej& su ausencia. (os vampiros se haban puesto de pie, asombrados al igual que el resto de
los lobos. >o# sali& corriendo al e#terior y pudo ver su forma perderse a la distancia, apenas
una mancha mientras se alejaba. !l lobo en su interior llor& de desesperaci&n, queriendo
seguirle. .ir& al par de vampiros que haban salido tambin.
?=aya, tu sirviente es increble.
?", 5abbit es el mejor A*o sera hora de que le avisaras a tu ch&fer4 B me quieres dar
ventaja4? vio desaparecer al otro con apuro en direcci&n contraria y al que quedaba regresar
al bar, perdiendo la mirada por donde su vampiro se haba marchado, una sombra blanca y
negra a la distancia.
?5abbit? susurr& y su cora&n se llen& de latidos, la vo del lobo repitiendo su nombre.
Corri& desafiando las formas del bosque, midiendo la distancia y las horas por el
movimiento del cielo. (a sangre de calidad superior le haba dado energas, pero su
verdadera fuera radicaba en el control que ejerca sobre su nosferatu. $esde su despertar
como vampiro, se haba dado cuenta de que poda manejar al nosferatu dentro de s y
controlar su fuera y habilidades. *adie lo saba. 0ueno, solo Fan su creador, aunque le
haba usado para la vida delictiva. +hora, l mismo era su due,o y poda hacer su voluntad,
al menos dentro de los lmites que le dejaba su contrato con los (e 0lanc. +rtemis (e 0lanc
haba acabado con Fan cuando intent& matarle y le haba salvado de la vida criminal,
dndole un sitio en su casa como sirviente. (e deba mucho.
"u nosferatu marc& las posibles rutas, calculando los cuadrantes de distancia, la velocidad
del viento y los escollos en el camino. !ra un buen estratega. 5abbit se dej& guiar por l.
Corri& toda la noche hasta llegar a las afueras y hacer una foto a la primera se,al de marca
/il&metros que encontr&, envindosela al chiquillo. Cogi& un troo del metal pintado y con
l regres& por el camino. Corri& de vuelta el resto de lo que quedaba de la noche y las horas
que siguieron al amanecer. Casi era media ma,ana cuando consigui& llegar frente al bar.
!staba cerrado. .aldici&nC 'a no poda ms, estaba agotado y el sue,o vamprico estaba por
hacer presa de l. "inti& el telfono vibrar en su bolsillo y lo sac&, sin poder leer el mensaje
que el chico le haba enviado, ya que solo vea manchas. "inti& que las rodillas no le
sostenan y cuando crey& que se golpeara en el suelo, un par de braos le sujetaron. "inti&
que algo suave y tibio sostena su cabea y se hall& recostado en el suelo. +l& la vista, y un
par de ojos color esmeralda le miraron. !se color le record& a los campos de trbol de su
infancia, que se e#tendan h)medos de roco por los verdes valles en el verano, el olor de
sus flores llenando sus pulmones mientras su madre sonrea y le mostraba uno de cuatro
hojas que haba encontrado para l.
?;e proteger? le oy& decir, ponindolo en su mano y cerr& los ojos, dejndose acunar por el
calor de su regao? 5abbit...
?5abbit? susurr& preocupado al verle perder la conciencia. (e levant& con cuidado,
acomodndole entre sus braos para llevarle consigo. Cuando entr& en su casa, le puso en el
sof grande y toc& su rostro con dedos inquietos. !staba tan fro, y su ropa sucia de tierra y
hojas, un par de agujeros desgarrados en sus pantalones. (e abri& la chaqueta y vio que no
llevaba camisa, su blanco pecho delgado y desnudo con solo una gruesa venda en el cuello.
!stara herido4 "u lobo aull& dentro de l. (e acarici& el pelo, mirando su rostro desmayado,
maldiciendo al vampiro que le haba hecho correr por el bosque en esas condiciones. "inti&
de pronto la vibraci&n de un aparato electr&nico y lo encontr& en su bolsillo, viendo que era
una llamada marcada como 9.ocoso:. +pret& las mandbulas con furia alejndose del sof,
antes de abrir el telfono y conectar el altavo.
?5abbit, $&nde ests4 ;engo aqu tu sangre. =en al hotel ya? la vo que perciba del otro
lado tena un tono que no le gust& nada. +pret& los dientes lanando un rugido enojado?
5abbit4 3u te pasa4 @anamos la apuesta...
?*o te atrevas a acercarte a l. Como te encuentre rondndole, juro te destripar vivo?
amena& en un ronco grito.
?3uin... quin eres4 $o... d&nde est 5abbit4
?'o me har cargo de l. *o vuelvas a meterte en su camino? advirti& por )ltima ve antes
de hacer trias el telfono en su mano, lanndolo por la ventana al bosque. *adie hara
da,o a su vampiro. *unca ms.
By& las voces que se acercaban y sinti& el temblor de su madre cuando le abra& con fuera.
?*o dejar que te lleven? le prometi& al odo, pero Claus saba que era in)til. (a sequa en
las cosechas, el incendio en el granero. ;odo era su culpa... *o saba e#actamente porqu,
pero todo el mundo lo deca. !l ni,o de pelo blanco y ojos de demonio rojo... !l ni,o
maldito...
?!ntrganoslo, Fvanna. !s lo mejor para l y para nuestro puebloC? gritaron a la puerta de su
casa.
?*uncaC ;endris que pasar por sobre mi cadverC? grit& ella de regreso y lo apret& ms
contra s. Claus no quera que la lastimaran. Cuando entraron a la fuera, l les detuvo.
?Fr con vosotros, no la lastimis? y se march& con ellos, oyendo los gritos de su madre que
se perdan a la distancia.
>o# sec& las lgrimas que caan de sus ojos dormidos. Con qu so,aba4 3u le haca sufrir
en sue,os de esa manera4 $ese& meterse en su mente y buscarle all para consolar su dolor.
Haba visto la terrible cicatri en su cuello cuando retir& la venda, y se qued& de piedra. "e
acurruc& a su lado y apret& su cuerpo inerte contra el suyo, intentando infundirle calor a su
fra y plida piel.
=io la cuerda y comprendi& que era su fin. =io el odio en algunas miradas y la lstima en
otras.
?"olo es un ni,oC $ejadle irC ;omadme a m en su lugarC? suplic& su madre al pie de la
horca, sujeta entre dos de los aldeanos, la mirada enfebrecida de dolor y pena. Claus quiso
que se la llevaran para que no lo viera morir. "aba que era lo correcto, que s no mora la
gente nunca estara libre de su maldici&n? HijoooC? grit& entre lgrimas.
?;e amo? logr& susurrar, antes de que la capucha cayera sobre su rostro y le oscureciera del
mundo. (uego, ya no pudo recordar nada ms.
$espert& con los temblores que sacudan su cuerpo. ;anto fro, tanto miedoC By& un rugido
e#tra,o y not& que sala de su garganta. "us ojos vean formas y colores en las paredes que
no conoca, que no haba visto nunca, y el olor de cosas e#tra,as saturaban su nari. !l
chillido de los animales que se arrastraban bajo la tierra llen& sus odos con ecos
sobrenaturales, aterrorindolo. 3u era todo eso4 Mn miedo oscuro se filtr& desde el mismo
suelo, entrando en su cuerpo y hacindole temblar de espanto. $e pronto, sus ojos captaron
una forma oscura que se acercaba y una vo ronca retumb& a su lado.
?Por fin has despertado? abri& la boca para hablar, pero un chirrido e#tra,o sali& de l,
aterrorindole a)n ms. Mn hombre le miraba, sus ojos encendidos en medio de la noche.
*o, no era un hombre, era un demonio. (e vio sonrer y la visi&n un par de blancos
colmillos le estremecieron completamente? !sos idiotas ignorantes... Casi mueres, pero yo
te salv la vida. +hora me perteneces. 3u quieres hacer4 ;ienes hambre4 Podramos darnos
un festn con su sangre? dijo y le vio mirar hacia donde las casas de la aldea dorman a la
vera del camino. !l rostro de su madre lleg& a su memoria y un rugido de rabia sacudi& su
pecho. !l vampiro frunci& el ce,o.
?Bh, la recuerdas4 !so es inusual... 0ueno, les dejaremos en pa, al menos de momento.
Pero tendrs que trabajar para m. B ella ser mi primera presa...
' Claus acept&, evolucionando en sus poderes de la mano de Fan, ganando fuera y agilidad
vamprica para robar, estafar y cometer otros crmenes, aunque siempre se neg& a matar. !sa
era la misi&n de Fan. Btros como l fueron despertados por el vampiro a lo largo de los a,os,
y algunos murieron a sus manos. Claus haba sido el )ltimo, atado a)n al juramento por la
vida de su madre. 8l no saba que haca mucho la mujer haba muerto. Cuando lo supo,
quiso apartarse de l, pero Fan no lo permiti&, aprisionndole para dejarle sin sangre y
acabar con su vida. Hubiera muerto, pero un miembro del concilio, que haba estado
investigando sus crmenes les encontr&. .at& al cruel vampiro y le liber& de su prisi&n.
Claus estaba aterrado en su imponente presencia. Fan no haba sido ms que cruel con l, por
lo que cuando el otro le tendi& su mano, se agach& para protegerse del golpe.
?;ranquilo, conejito. !sts a salvo. !se vampiro ya no volver a molestarte? le asegur&. ' le
llev& a su mansi&n, donde por primera ve conoci& una vida de trabajo honrado.
Pero las pesadillas de sus recuerdos siempre volvan, y la marca en su cuello donde su
trquea haba sido aplastada, le recordaban su pasado y sus pecados. Por entre el fro de sus
recuerdos, sinti& un calor envolverle y llenarle de pronto, y e#tra,amente se sinti& a salvo
del todo.
>o# se lami& la herida en su mu,eca para cerrarla. +l menos el vampiro pareca menos
plido ahora. 0ueno, no se haba despertado a)n, pero haba conseguido alimentarle. .ir&
su rostro y vio el color volver rosadas sus mejillas, sonriendo contento para volver a
acariciar su pelo, y estrechndole contra s cerr& los ojos para dormirse con la nari
enterrada en su blanco pelo.
5abbit despert& esa tarde, inundado por el aroma a flores de trbol. Cerr& los ojos otra ve,
aspirando el calor y el olor tan cercanos a su cuerpo, notando de pronto que algo lo
sostena. +l& la mirada y vio a alguien dormido junto a l, tan cerca que su aliento le
cosquilleaba en la piel. +bri& la boca at&nito, cuando not& que el aroma sala del
desconocido, y es ms, era claro que no era un vampiro, sino un lobo. Pero quin era4
$&nde estaba4 .irando un poco, lo que pudo ya que sus braos le retenan con fuera
apretndole contra l en el enorme sof, vio una sencilla habitaci&n, como una caba,a en el
bosque. .esas y sillas de madera, una tele vieja, revistas, libros, un reloj de cuerda en la
pared. =olvi& a mirar el rostro cerca del suyo y le pareci& vagamente familiar. Mn destello
de esmeralda le sac& de pronto de sus cavilaciones, cuando el lobo despert&.
?5abbit? le dijo con una sonrisa y se sorprendi& al or su nombre. (e solt& con suavidad,
sentndose a su lado para mirarle con atenci&n? !sts bien4 .e tenas muy preocupado.
!l vampiro se incorpor& un poco, observndole con sus ojos enormes y rosas, y no pudo
evitar sonrer.
?!sts a salvo. 8sta es mi casa. "oy >o# Harper? dijo alando su mano. !l vampiro la mir& y
volvi& a observarle con una ceja alada, como si le dijera que estaba loco. !so le pareci&
muy divertido? !ncantado de conocerte? salud&, revolvindole el pelo con ganas al ver que
no iba a responder a su apret&n de manos, sobre todo por que quera orle rer y tocar su
blanco pelo suave. (e oy& lanar un rasposo quejido de protesta, que le pareci& encantador.
"e levant& del sof y se estir& con ganas, sin dejar de mirarle? ;ienes hambre4 " que los
vampiros comis, aparte de tomar sangre. =oy a preparar algo. 3uieres ayudarme4?
pregunt& mirando sus hermosos ojos, viendo a)n la confusi&n en ellos y sin esperar
respuesta se acerc& a la cocina. "ac& la sartn, unos huevos, filetes y tomates. .ientras
pona el aceite a calentar, vio de reojo que el vampiro se acercaba lentamente, casi con
cautela. 0ueno, era bueno saber que su chico era un hombre precavido? Har huevos con
tomate para ti y filetes para m. " que no tomis carne, pero unos huevos estn bien, no4? el
vampiro le mir& at&nito por un instante, asintiendo con un ligero movimiento de cabea.
>o# sonri&. "u pelo brillaba al sol de la media tarde, lanando destellos de plata. !ra muy
hermoso.
5abbit pudo observar la casa con detenimiento, comprobando que era bastante acogedora, a
pesar de lo peque,a que pareca. ;rat& de meter las manos en los bolsillos como siempre
haca, pero descubri& que no llevaba su chaquetaL es ms, estaba vestido con ropa grande y
simple, que se vea a /il&metros que no era la suya. (an& gemidos de protesta, vindose
envuelto por la larga camiseta y los pantalones deportivos. Fncluso llevaba calcetines, por
amor de $iosC ' para rematar, la venda en su cuello haba desaparecido. !l lobo no hio
caso a sus chirriantes protestas, ocupado en revolver los huevos y el tomate. "e acerc& y tir&
de su manga con fuera.
?3u ocurre4 +h, bueno, tu ropa estaba rota y manchada. (a he metido en la lavadora, pero
tema despertarte con el ruido si la pona en marcha? +l orlo, rod& los ojos lanando un
bufido e#asperado. !l sue,o de los vampiros era pesado y no se hubiese despertado ni con
una bomba at&mica. >o# le sonri& con disculpa? Conctala, si quieres. "olo tienes que
apretar el bot&n rojo? se acerc& al aparato y lo encendi&. "e volvi& a mirarle, alando una
ceja enojado. *o le gustaba la idea de ser desnudado por un desconocido mientras estaba en
su coma vamprico. 5ecord& de pronto su telfono, la )nica cone#i&n que tena con el
chiquillo (e 0lanc y lo busc& por los alrededores. !l lobo le estaba mirando, as que imit&
con sus dedos estar hablando por telfono, interrogndole con el gesto? Bh, pues... (o
siento, pero se ha roto? dio un gru,ido consternado y luego enojado.
?FdiotaC +hora no tengo como contactar con casaC? protest& entre rasposos desacordes
vocales. =io al lobo sonrer y dese& echarse sobre su cuello.
?(o siento, de verdad. Pero no hay problema. Come y descansa aqu, hasta que te sientas
recuperado y luego te acompa,ar de regreso? le dijo con una sonrisa.
?' una mierdaC? le grit& con su vo rota, mostrndole el dedo cora&n para mayor
aclaraci&n. Contrario a lo que esperaba, el lobo se ech& a rer con ganas.
?Coge un plato de la alacena y sintate a la mesa? le pidi& con una sonrisa, sacando la sartn
del fuego. 5abbit percibi& el olor de la comida hecha y contra su voluntad, se le hio agua la
boca. $ecidi& que al menos deba comer antes de marcharse y busc& un plato, sentndose
para recibir una generosa porci&n de huevos revueltos con tomate y albaca. Blan
fenomenal. =io al lobo cortar algo de pan y poner las rebanadas a su alcance? !st un poco
duro porque es pan de hace dos das, pero sabe bien. +delante, come antes de que se enfre?
le invit&. 5abbit se llev& una buena cuchara a la boca, y su est&mago cant& de felicidad al
percibir el sabor de los alimentos y su calor. !l lobo regres& a la cocina y empe& a preparar
su filete. "e volvi& a mirarle? 3u tal est4 ;e ha gustado4? 5abbit asinti& y le vio sonrer
con ganas? @enial. Hay ms, por si quieres repetir.
"igui& comiendo, mirando su espalda fuerte aunque delgada. Contrario a la mayora de
lobos que haba visto esos das, tipos enormes y llenos de pesados m)sculos, ste pareca
mucho ms esbelto, todo fibras y m)sculos ligeros. +unque era igual de alto. .ir& su plato,
el )nico que haba en la mesa y se sinti& un poco mal. + pesar de haberle secuestrado, no le
haba tratado mal. *o poda decir que le agradaba del todo su actual situaci&n, pero saba
que al menos no deba mostrarse desagradecido. Camin& hasta la alacena y cogi& otro plato,
ponindolo en la mesa para l.
>o# le mir& y sonri&.
?@racias? dijo, poniendo sus filetes a medio hacer en el plato y dejando la sartn en el
fregadero. Cuando se sent& a comer, vio que el vampiro haba repartido el resto del pan con
l? .e alegro de que te hayan gustado los huevos. 3uieres ms4? neg& con la cabea. >o# y
l comieron en silencio. "e senta bien tener compa,a para desayunar. Mn desayuno tardo,
pues apenas se haba tomado un caf esa ma,ana, antes de ir a esperarle al bar. "aba que
tendra que pasar por all de regreso y esperaba poder verle. (o que no haba imaginado, era
que podra tenerle tan cerca de s como ahora. (e mir& comer con ganas y se alegr& por ello.
"us lgrimas mientras dorma y la fero cicatri en su cuello le haban dejado muy inquieto.
!ra bueno saber que poda procurarle no solo alimento a su cuerpo, sino calma y bienestar a
su ser. (e sonri& cuando sus ojos rosados le miraron, y dese& acariciar su blanco pelo.
+dems, K"e vea tan adorable con su ropaC Cuando la que estaba en la lavadora se secara,
tal ve querra marcharse. ;al ve, pues >o# esperaba convencerle para que se quedara a su
lado.
(uego de comer, le ayud& con la limpiea de la mesa y los platos. !l lobo era muy tranquilo,
y no empe& a hacer preguntas que 5abbit saba que no quera, y no poda contestar.
?=oy al taller ahora. Hay un par de cosas que necesito terminar? le e#plic& cuando acabaron.
5abbit frunci& el ce,o.
?;aller4 ;aller de qu4? pregunt& y le vio sonrer. !ra mecnico o algo as4
?"oy carpintero. .i taller est en la parte de atrs de la casa. Puedes quedarte aqu a
descansar o ver la tele, o puedes ayudarme un rato, s quieres? le propuso. !l arrisc& los
hombros. !l lobo volvi& a sonrer y empe& a caminar. 5abbit se qued& mirando su espalda
y decidi& seguirle curioso. Cuando entraron por una puerta lateral, el olor a madera golpe&
su nari. Bla bien, pero sus ojos se abrieron enormes al ver las hermosas tallas que all
haba. "illas, mesas, peque,os armarios labrados en madera oscura y clara, brillante u
opaca, todos trabajados con mucho amor y detalle. "e qued& tocando una escultura que
representaba a un caballo al galope, tan real que solo le faltaba respirar.
?;e gusta4? oy& al lobo decir y asinti& con suavidad, sin dejar de tocarla. (e vio sonrer? (a
mayora son encargos de lobos del pueblo. Pero algunos son desafos personales? dijo y le
vio apuntar a una silla mecedora en una esquina de la habitaci&n. !ra vieja, pero se vea que
el lobo le haba dedicado tiempo, cambiando las pieas desgastadas por otras de madera
nueva y pulida, tallndola con esmero? +)n no la he terminado. !ra de una anciana loba,
muy querida por su comunidad, que muri& el a,o pasado. 3uieren que la silla sea reparada
para ponerla en un sitio de honor en la casa patronal? e#plic&. 5abbit se acerc& a ella y not&
que estaba rodeada por el olor de las flores de trbol. "in duda el lobo pasaba mucho de su
tiempo con ella, quis incluso se sentaba all un par de veces. "e volvi& y vio que le
observaba? *o tengo mucho tiempo ahora para dedicarle, y a)n falta cepillar las viejas
costras. ;e gustara ayudar4 *o es una tarea difcil? pidi& con sus ojos esmeraldas clavados a
los suyos. 5abbit sinti& su cora&n latir con rapide. 3u le pasaba4 +rrisc& los hombros en
respuesta.
?*o me importa? contest& con su vo rota y le vio sonrer, acercndose a l con una
herramienta en su mano.
?"e hace as? y le ense,& el movimiento de suave lijado. (e imit&, y cuando volvi& la vista
el lobo se haba alejado un poco ms all para continuar con su propia tarea, al parecer
reparando las gruesas patas de una mesa familiar. 5abbit le mir& un instante y volvi& a su
silla.
;rabajaron buena parte de la tarde, y la noche cay& sin que se diera cuenta. "e haba
divertido trabajando en su taller, con el olor de la madera y las flores de trbol rodendole.
*unca haba hecho nada igual en su vida y le agradaba. =io de pronto al lobo de pie a su
lado, su mano larga y callosa pasar sobre la madera que haba estado puliendo.
?Has hecho un gran trabajo? le felicit& y sinti& su cora&n latir de alegra, un rubor nuevo
cubrir sus mejillas.
?*o ha sido difcil? dijo intentando disimular su conmoci&n y sonrojo, y vio al lobo sonrer
con ganas, tendiendo luego una mano hacia l.
?=amos a cenar? le invit& y mir& su mano un instante, antes de cogerla y alarse del suelo
para seguirle de regreso a la peque,a casa. +pret& en su pu,o el calor que su mano grande y
tibia haba dejado en su piel.
>o# prepar& algo sencillo para ambos, y sonri& al ver los platos y cubiertos ya puestos en la
mesa cuando se acerc& a servir, el pan rebanado y repartido para dos. !so alegr& mucho su
cora&n.
.ientras coman, hio la pregunta que deseaba hacer desde haca mucho.
?+s que te llaman 5abbit. Pero ese no es tu verdadero nombre? dijo, seguro de sus palabras.
!l vampiro lo mir& con ojos abiertos de sorpresa, la cucharada a medias en su boca? 0ueno,
imagin que era por el color de tu pelo y ojos. (a verdad, es que pareces un hermoso
conejito blanco? confes&, vindole ruboriarse adorablemente. !so le hio sonrer.
?' >o#4 !s tu nombre real4? le vio preguntar.
?0ueno, mi padre tena mucho sentido del humor. ' deca que quera que fuese un lobo tan
astuto como un orro? e#plic& y le vio mirarle con asombro, frunciendo luego el ce,o
confundido.
?.e oyes4? vio que volva a preguntar. "acudi& la cabea.
?*o. Pero puedo leer tus labios? le confes&. !l chico le mir& con la boca abierta por un
momento. >o# se levant& y cogi& una servilleta, pasndola con cuidado por su barbilla, que
se haba manchado de guiso. !l vampiro lo mir& con ojos grandes y llenos de estremecidos
sentimientos. (e parecieron muy hermosos? (a verdad, es que he tenido que aprender a
hacerlo, ya que estoy quedndome sordo? =io el horror en sus pupilas.
?C&mo es posible4? le pregunt& y aunque solo percibi& las notas distorsionadas de su vo a
la lejana, supo por su gesto que estaba lleno de preocupaci&n. $io un suspiro profundo,
mirando sus ojos.
?=ers, yo antes viva en otra aldea de lobos. Pero no estaba de acuerdo con la forma de
gobernar del alfa y me rebel. Cuando me echaron de all, intent regresar por las cosas de
mi padre. 8l tambin tallaba y quera sus herramientas, pero ya no era bienvenido, as que
bueno... *o fueron muy amables conmigo. + causa de las heridas que sufr, estoy perdiendo
la audici&n.
?Pero, los lobos no se curan4? le vio preguntar con mirada desolada.
?(o hacen. Con ms rapide que otras especies. Pero hay heridas que no se reparan, como la
prdida de miembros. ' en mi caso, los tmpanos quedaron destroados? e#plic& y vio sus
ojos volverse h)medos de tristea y su cuerpo temblar. Pas& el dorso de su mano por su
plida mejilla, sabiendo lo callosas que eran sus manos? !st bien. +hora estoy aqu, y la
gente es buena conmigo. Puedo trabajar con mis manos, y a)n sin las herramientas de mi
padre, puedo honrar su profesi&n.
?.alditos? le vio mascullar, y eso aliger& el peso en su cora&n. "aberse apoyado y
comprendido por su vampiro significaba mucho l.
?' ahora t) ests aqu. +s que, ya no estoy solo? susurr& mirando sus ojos, que le miraron
con sorpresa, dulcificndose luego.
"us palabras le llenaron de un sentimiento profundo, que nunca antes haba conocido. .uy
pocas veces se haba sentido necesitado de aquella manera, su compa,a agradecida de la
forma en la que el lobo lo haca. !ra e#tra,o, y a la ve confortador. Cuando acabaron de
cenar, le ayud& otra ve con la limpiea de los platos. =io que >o# le sonrea, y no record&
haber visto nunca una sonrisa tan clida y abierta en su direcci&n. 0ueno, quis haca
mucho tiempo, tanto que casi no lo recordaba.
?+)n no me has dicho cual es tu nombre? insisti&. 5abbit sopes& la pregunta. !n realidad
haca mucho que no usaba su nombre real, ya que le traa recuerdos que prefera dejar en el
olvido, pero tambin era cierto que nunca nadie se lo haba preguntado. $ado su aspecto,
todos crean que 9conejo: era su nombre real. $ibuj& una letra con su dedo, en la espuma
que haba quedado sobre un plato sin enjuagar. >o# la mir& con atenci&n.
?C... .mh, eso acorta posibilidades... ', si me das otra4? pidi& con ojos llenos de esperana
pero 5abbit neg& con la cabea, sin poder evitar una sonrisa? =aya, creo que tendr que
ganrmela? dijo el lobo luego de un momento, y 5abbit sinti& un calocillo de gusto llenar su
cora&n. !ra increble la forma en la que el lobo pareca comprenderle, tan fcil y
espontneamente que era como si leyera su mente. +l& la vista y vio su profunda mirada de
color esmeralda muy cercana? 3u te parece si preparo una tarta de frutas4 ' si te gusta, me
dars la segunda letra? su propuesta le dej& mudo por un momento. Por qu >o# quera tanto
saber su nombre4 !n realidad, no era algo importante. Pero la idea de la tarta le sedujo. !n
la mansi&n poda comer lo que quisiera, pero nunca nadie haba preparado algo
especialmente para l.
?+yudar? dijo con vo que saba sonaba rota, pero al ver la enorme sonrisa en el rostro del
lobo no le import&. Cogieron fruta de la nevera y la pel&, cortndola mientras >o# haca una
masa rpida y la colocaba en el molde. (e vio preparar una mecla de a)car, especias y ron
para combinarla a la fruta cortada? Huele bien? dijo mirando sus ojos.
?!s una receta familiar.
?$e tu padre4? le vio asentir con orgullo, y volvi& a aspirar el aroma. Mn dejo de nostalgia
vino a l, trayndole olores, sabores y sentimientos de un tiempo perdido en la distancia,
das felices e inocentes. (a mayora de los vampiros de baja clase no recordaban su vida
antes de ser mordidos y transformados, pero en su caso, a)n tena recuerdos que volva a l
al dormir, y a veces al estar despierto. ' siempre le dejaban triste. Pero ver la alegra con
que el lobo comparta con l parte de los suyos, la lu suave y clida de su mirada mientras
cortaban la tarta y la coman, la alegra con que comparta su tiempo con l, le hicieron
sentir menos dolor y menos nostalgia.
?' bien4? pregunt& mirndole cuando acabaron, con lu de e#pectaci&n en su mirada.
5abbit mir& a un lado y otro de la habitaci&n, como sopesando la respuesta y agit& la
cabea? *o4 *o te ha gustado4? consult& con vo decepcionada, pero no pudo evitar una
risa entrecortada, vindole sonrer ampliamente? (o sabaC =enga, dame esa letra? pidi&, y
no pudo negarse. *o saba porqu, pero la actitud del lobo, incluso la confidencia que haba
compartido con l sobre su sordera, lo hacan sentir muy cerca, como si le hubiese conocido
desde haca mucho tiempo. Haba olvidado por completo que el lobo le tena a medias
9secuestrado:. !scribi& la letra sobre la mesa y le vio abrir los ojos con alegra? (... CliveC
Clement4 CliffordC? y as empe& a dictar nombres, hacindole rer al crear algunos de
imposible combinaci&n? Claremont, Clusicornelis, Cleforarmeticus...
?*o, noC "oy ClausC C?l?a?u?sC? deletre& por fin, vencido por la risa al or tantos e#tra,os,
cuando el suyo era tan sencillo.
?Claus... !s un nombre muy bello A"abas que tienes un compa,ero de nombre muy famoso,
no es as4? dijo gui,ndole un ojo con una bella sonrisa, y se sinti& sonrojar de placer?
Fmagino que los vampiros celebris la navidad.
?+lgunos? respondi&.
?3u hay de ti4? sus preguntas a un nivel ntimo y personal, al que nadie se haba acercado
antes no le incomodaron, por el contrario, se senta e#tra,amente a gusto. +rrisc& los
hombros.
?*o significa mucho? decidi& ser sincero. (as fiestas nunca haban sido de importancia para
l, envuelto como estaba primero en la vida delictiva que no le dejaba respiro, y luego en la
mansi&n (e 0lanc, donde se le trataba bien, pero no a un nivel tan familiar que le hiciera
desear compartir esos momentos con nadie o sentirlos especiales. =io al lobo mirarle con las
cejas aladas en gesto triste? .e gusta el invierno. (a nieve.
?", eso es lo mejor de la navidad? le respondi& con una sonrisa. Claus baj& la mirada,
incapa de soportar el brillo de sus ojos? 0ueno, ya es tarde. Ha sido un largo da. ;e bajar
unas cuantas mantas, y te har una buena cama en el sof. B prefieres dormir en la cama4
?!l sof.
?$e acuerdo. $ejaremos el resto de tarta aqu, para el desayuno? dijo acercndose a las
escaleras para empear a subir? Bh, tengo un par de piyamas e#tra, pero creo que te
quedarn grandes? ofreci& cuando iba a mitad de camino. Claus neg& con la cabea. (e
gustaba dormir desnudo? !st bien. +hora vengo.
"e sent& en el sal&n solitario, aspirando el aroma que quedaba de la comida hecha y de la
madera. "e senta bien, clido y familiar. Pas& una mano suave por el enorme y confortable
sof donde haba despertado esa tarde. Haca mucho que no se senta tan a gusto y a salvo.
!ra e#tra,o que hubiese encontrado todo eso en la casa del lobo que le haba secuestrado.
(e vio bajar, la lu en su mirada esmeralda mientras le preparaba la cama y se sinti& muy en
pa. "e meti& bajo las mantas, vestido a)n y el lobo le dio una mirada cari,osa.
?0uenas noches, Claus. 3u duermas bien.
?@racias. ;) tambin? se despidi&, y lo )ltimo que vio fue la sonrisa del lobo al apagar la
lu, observando con sus ojos de vampiro su forma subir otra ve por la escalera. "onri& sin
querer? >o#? susurr&, sabiendo que no le oira. Cuando crey& que era oportuno, se quit& la
ropa y se hundi& dentro del calor atrapado entre esas mantas, calor de hogar, olfateando con
ganas su aroma a madera. (e gustaba. (os vampiros solan ser ms activos por la noche que
otras criaturas, pero l estaba cansado. *o, cansado no. !staba en pa. Cerr& los ojos con
ese aroma inundando su nari y el temblor dulce de un par de ojos esmeralda en su
memoria.
>o# solt& un suspiro, agitando la cabea con una sonrisa, antes de meterse a la cama. (e
gustaba la idea de tener a su vampiro cerca de s, a)n cuando no estuviese todo lo cerca que
quera, pero al menos era algo. ' no pareca desesperado por marcharse. !so le alegraba.
?Claus? susurr&, quedndose dormido con su nombre en los labios.
Pasaba de la medianoche. !l lobo dentro de l le despert&, sintiendo la te#tura de una piel
fra apretarse a su cuerpo. +bri& los ojos y el aroma a mar llen& su nari, agua, sal y arena.
"inti& que su cora&n lata con fuera. !ra el aroma de su vampiro, un olor tan
inconfundible, que nunca ms podra olvidarlo. !stir& la mano, sintiendo la suavidad de su
blanco pelo, envolviendo los dedos en l para acariciarle. !l vampiro se movi& suavemente,
apretndose ms a su pecho y sinti& el estremecimiento de su cuerpo, como si llorara. (e
envolvi& con sus braos y le sostuvo contra s, hundiendo su nari en el olor salino de su
cabello, mientras le acariciaba tranquiliadoramente, y poco a poco su temblor herido se
calm&. "e durmi& con l entre sus braos, hasta que la tibia de lu de la ma,ana toc& las
ventanas.
Claus despert& en un sitio desconocido. +l& la cabea y mir& alrededor consternado. $&nde
demonios estaba ahora4 Pero entonces, el olor a flores de trbol llen& otra ve su nari y la
pa volvi& a inundar sus sentidos. .ir& con cuidado y vio los hermosos muebles tallados, la
ropa algo desarreglada sobre una silla a los pies de una cama, el calor que las sbanas
desprendan, incluso unas gotas oscuras sobre la almohada. 0aj& la nari hasta ellas y
percibi& el olor a sangre y trboles con mucha fuera. !ra la sangre del lobo, pero Por qu4
+caso se haba herido4 *ot& entonces que estaba desnudo en su cama. 3u haba pasado4
*o poda recordar nada...
!staba intentando hacer memoria, cuando oy& el sonido del aceite hirviendo y oli& los
alimentos. "ali& de la cama con cuidado y se puso encima una manta que haba a los pies
junto a la ropa, saliendo a la puerta. (a imagen clida y familiar del sal&n de >o# le recibi&.
"u cora&n se sinti& otra ve en pa, arrullado por la presencia del lobo que le haba
secuestrado la ma,ana anterior. 0aj& las escaleras de madera, que crujieron bajo su pie y al
llegar cerca, movi& una de las sillas de la mesa con ruido, pero el lobo no se volvi&. "u
cora&n volvi& a latir rpido, pero esta ve de tristea. !ntonces era verdad, se estaba
quedando sordo. !ra tan e#tra,oC Pens& que los lobos eran criaturas invencibles, que no
sentan dolor ni remordimiento. Pero l no era as. ' era e#tra,o tambin que un lobo sordo
hubiese encontrado a un vampiro mudo, y le quisiera a su lado. ' le entendiese, como nunca
nadie le haba comprendido. "e qued& mirando su figura gil y su cuerpo delgado, moverse
con soltura mientras cocinaba. (a verdad es que la comida del lobo era bastante buena.
?>o#? dijo con su vo rota, deseando que lo oyera, pero temindolo al mismo tiempo?
(oboC? chirri& en un grito, y le vio volver el rostro como hubiese captado por fin su vo.
?0uenos das, Claus? le salud& con una sonrisa. 8l se acerc& y mir& por sobre su brao lo
que revolva en la sartn? "etas y huevos. 'a s que has comido huevos ayer tambin, pero
no se me ocurre que ms preparar, lo siento.
?.e gustan. "etas y huevos. .e gustan? le asegur&, marcando bien sus palabras para que le
entendiera. "u sonrisa ilumin& todo el lugar.
?@enialC Pondras la mesa4 Bh, bueno, vstete primero? dijo al ver la manta que lo cubra.
Claus asinti&, acercndose al sof donde haba dejado su ropa, para dejar caer la manta a sus
pies y empear a vestirse. "e dio la vuelta mientras se colocaba los pantalones, y pill& al
lobo observndole con atenci&n. "onri& al verle volver la vista con rapide a su sartn y
notar un sonrojo en sus mejillas. Cuando acab&, regres& para poner la mesa y cortar el pan.
Fgual que el da anterior, la comida estaba deliciosa, y tras limpiar todo sin ms charla,
entraron al taller. Claus se entretuvo cepillando la silla mecedora, contento al ver la mirada
admirada del lobo ante su trabajo. Cuando regresaron por algo ligero de comer, su cora&n
lanaba notas de alegra que nunca crey& que fuera a sentir, y menos en la casa de un lobo y
tras una tarea tan r)stica como pulir madera. Cuando el lobo puso un bocadillo frente a l,
se dio cuenta de que tampoco tena sed de sangre y eso era muy e#tra,o, despus de la larga
carrera que haba hecho para cumplir la apuesta el da anterior. (a sangre de calidad
superior le haba ayudado, pero no le alimentara para siempre.
?3u sucede4 *o te gusta4? oy& la vo preocupada del lobo y vio sus ojos esmeraldas
temblar cerca de l. .ir& al bocadillo que a)n no haba tocado.
?!s delicioso, pero... !s la sed de sangre. Creo que debera buscar un poco? admiti&, sin
saber como e#plicar que s no la tomaba, podra entrar en nosferatu y hacerle da,o. !l lobo
le mir& frunciendo el ce,o.
?*ecesitas sangre ahora4
?*o lo s...? +bri& los ojos al verle descubrirse la mu,eca y ofrecrsela. *unca nadie le
haba ofrecido su sangre de esa manera tan libre y esp&ntanea.
?;oma un poco ms. +noche bebiste algo, pero quis no fue suficiente? oy& decirle, y se
qued& por un instante congelado.
?.e... me has dado tu sangre4? pregunt& at&nito, recordando las manchas oscuras en su
almohada. +caso le haba mordido por accidente4 (e vio arriscar los hombros con suavidad.
?(a necesitabas, y yo poda drtela? dijo como sin darle importancia al asunto, pero Claus
saba lo importante que era. "er un donante implicaba una cierta cone#i&n, tanto a nivel
fsico como a nivel emocional. Por eso los vampiros de baja clase no tenan permitido beber
de un donante, ya que no tenan el estatus ni la capacidad de responder a esa cone#i&n. +l
menos eso se pensaba, y l nunca lo haba cuestionado. Conoca a algunos donantes
humanos del joven (e 0lanc y saba que para ellos el vampiro representaba algo especial.
(es haba visto un par de veces alimentarle por curiosidad, notando la estrecha relaci&n
entre ellos, la cone#i&n fsica y casi se#ual, pues beber de alguien era un ritual muy er&tico.
' saba que era algo vedado para l. Pero el que >o# quisiera ser su donante, as como as...
?!sts... ests bien4? consult&, de pronto preocupado por si le haba hecho alg)n da,o, pero
el lobo sacudi& la cabea? *o tendras que haberlo hecho? comen& a decir ponindose de
pie consternado, con el cora&n desatado de latidos, pero el lobo le detuvo poniendo una
mano clida y grande sobre su brao.
?(o necesitabas. ' me alegro de haberlo hecho. 'o... he querido hacerte feli desde el
momento en que te vi, Claus. .e alegra haberlo hecho de esta manera? le asegur& con ojos
luminosos, y sinti& que sus palabras quemaban en un lugar muy profundo de su interior,
dolorosa y placenteramente. "e cubri& el rostro que senta arderle de pronto, con ambas
manos.
?Por qu4 *o lo entiendo... Por qu4? susurr& y oy& el chirrido e#tra,o de su propia vo,
alando la mirada hacia l, vindole por entre un repentino velo de lgrimas? *o soy nada...
Por qu t)4 Por qu... >o#4
?Por fin has dicho mi nombre? susurr& l, con una dulce sonrisa que le trajo ecos de un
pasado distante, de una vo y una mirada llena del mismo afecto que ahora vea. Mna
presencia con la que haba so,ado, deseando desesperadamente alcanarla, perdida para
siempre del toque de sus manos. *unca volvera a verla, a sentir el amor que haban
compartido para curar el dolor y la tristea que le haba causado. "inti& las lgrimas
derramarse por sus ojos y ba,ar sin tregua sus mejillas, dolorosa, ardientemente. "inti& algo
suave y clido envolverle, y oli& por entre su llanto el aroma de las flores de trbol? $ilo
otra ve... d mi nombre? oy& muy cerca de su odo, y a pesar de sus lgrimas y su vo rota,
mal herida por un crimen que no haba cometido, lo repiti& una y otra ve, con la mano
clida del lobo acariciando la cicatri en su garganta.
?>o#... >o#... >o#....
Casi no poda orlo, pero senta el estremecimiento de su llanto y sus dedos tocaron la
vibraci&n de su vo. "onri&, acunndole entre sus lgrimas hasta que se qued& sin fueras
para llorar. (e cogi& en braos como a un ni,o, y su cuerpo peque,o y frgil se ajust& al
suyo en el sof, como si siempre hubiese pertenecido a l.
?.i dulce conejito, quiero que seas feli, siempre lo he deseado. 3udate a mi lado. " que
no puedo darte mucho, ya que solo soy un pobre lobo carpintero, pero prometo estar
siempre contigo, orte siempre, amarte siempre? le susurr& al odo, apretndole contra s. (as
manos del vampiro se aferraron a l con fuera? 3udate conmigo.
?!stoy roto? vio que le deca, y sus ojos le miraron con pena y dolor. +carici& su cabello y
baj& hasta sus labios, besndole tiernamente.
?"oy bueno arreglando cosas? le asegur&, con el sabor de sus frescos labios entre los suyos.
(e vio sonrer? +dems, yo tambin lo estoy...
"inti& los dedos fros del vampiro, subir hasta tocar con ambas manos sus orejas y
acariciarlas.
?'o... puedo or por ti? le vio decir? ' t)... puedes hablar por m? "onri& contento.
?"? y reclam& otra ve sus labios, sintiendo como el vampiro le besaba otra ve con ganas.
"e acariciaron sobre el sof entre besos, y >o# le tom& entre sus braos para subir las
escaleras con l y llevarle a la cama. "e desnudaron, hambrientos por la piel del otro, por su
calor, dndose mordiscos salvajes entre besos y gemidos h)medos. >o# se tumb& en la
cama, atrayendo el cuerpo de Claus sobre s, para jugar con sus dedos dentro de su abertura
y estirarle, notando que no haba ninguna resistencia en l.
?Has hecho esto antes? afirm& ms que preguntar y el vampiro asinti& con la cabea? $e
ahora en adelante, solo lo hars conmigo? e#igi&, y para dejar clara su demanda le dio un
fero mordisco en la yugular, oyndole lanar un gemido, que no fue precisamente de dolor.
?' t)... Con?.i?@o? le vio deletrear con mucha claridad, descubriendo sus colmillos y
abriendo con ellos sus labios para morder su lengua sin piedad. "inti& el dolor punante de
su mordida y el placer que le trajo el movimiento de succi&n del cuello del vampiro
mientras beba de l. Como antes, cuando le haba alimentado en sue,os, puso la mano
sobre la cicatri en su piel y la acarici& con ganas, sintiendo el tir&n en sus testculos. =io
sus ojos de hermoso rosa muy cerca de los suyos, brillantes y h)medos de deseo, y jade&
cuando el vampiro solt& su lengua, sus labios hinchados y el rostro sonrojado, vindole
bajar entre besos hasta su vientre, para capturar su pene entre sus labios y tragarle,
llevndole al interior de su garganta. Crey& que le mordera all, pero en ese momento no le
import&, pues el placer de sentirse atrapado en la humedad de su boca y la succi&n de la que
era presa le llevaron al lmite. !yacul& sin control dentro de l, lanando un gemido
ahogado de placer, jadeando ante la hambrienta posesi&n de su boca que no le solt&,
e#igiendo todo de l, sacudiendo las caderas mientras le succionaba la cordura, solloando
entre temblores de placer cuando un poco ms sali& de l. "u vampiro por fin le liber&,
buscando sus labios, mientras acariciaba sus muslos y miraba sus ojos, pidiendo su permiso.
>o# sonri&, a)n tembloroso como estaba por el reciente orgasmo, y se abri& para l. + pesar
de lo fro de su piel, Claus le llen& con su calor, agitndose en su interior con el mismo
apetito con el que le haba consumido, hasta lanar un gemido profundo, como el de un
animal en celo y llenarle con su esperma. "inti& el peso de su cuerpo caer sobre el suyo, su
aroma a mar envolverle todos los sentidos, su cora&n galopante retumbar en su propio
pecho y la respiraci&n rasposa cerca de su odo. Cuando Claus le mir&, vio los sentimientos
en sus ojos, y no necesit& de palabras, alimentado por su beso cansado y satisfecho.
$urmieron hasta que cay& la tarde, abraados el uno al otro, despertando para prometerse
amor sin palabras, solo con el lenguaje de los besos y las caricias.
!sa tarde, el bar estaba a rebosar de lobos. .ir& inquieto su telfono, la se,al perdida cada
ve que intentaba contactarle.
?+)n no hay noticias de tu sirviente4? le pregunt& su mejor amigo. +git& la cabea.
?*o. ' no me atrevo a decirle a mi padre, que puede que 5abbit haya sido secuestrado por
un lobo. .e temo que no se lo tome muy bien.
?Claro. "e supone que uno no va por ah perdiendo a sus sirvientes? le molest& y al& una
ceja enojada en su direcci&n. Haba ganado el >errari, pero si no apareca, su padre le hara
devolverlo. +dems, no quera admitirlo, pero 5abbit le caa bien, y el que no pudiese
hablar era una ventaja para l. 0ueno, eso y su magnfica velocidad. Haba ganado muy
buenas apuestas gracias a l? Bye... no es ese tu sirviente4? le oy& decir de pronto, y volvi&
la vista al ver aparecer a un vampiro en el bar. 0ueno, se pareca a l, pero... !sa mirada en
sus ojos...
!l peque,o vampiro de ojos color rosa se acerc& a su mesa y se detuvo frente a ella. (a ropa
que vesta era sencilla y colorida, en comparaci&n a los negros atuendos que siempre vesta
y no le sentaban mal, daban un aire ms refrescante a su figura. Pero lo que en verdad llam&
su atenci&n, fue el aspecto sereno y confiado de su mirada. *unca le haba visto as. !l
5abbit que conoca era inquieto y sombro, no un mal tipo, pero no alguien que tendra en su
listado de 9amigos de las fiestas:. "iempre crey& que prefera estar solo. Pero ahora, la
figura de un alto e intimidante lobo, se pegaba a su espalda como una sombra de ojos verdes
e intensa mirada, y vio con sorpresa que iban de la mano, de un modo evidentemente
afectuoso. +l& la vista y se encontr& con las rosadas pupilas, que le miraron llenas de un
algo que no supo definir.
?0ueno, veo que no ests en problemas como imaginaba? dijo por decir, y porque no saba
como abordar el asunto. 5abbit mir& por sobre su hombro la figura del lobo, y asinti& con la
cabea? ;) eres quin contest& a mi llamada, no es as4? afirm& mirando al lobo, quin no
movi& ni un solo m)sculo, lo que le puso los nervios de punta. .ierda, Por qu todos tenan
que tener ese aspecto de 9*o me cabreesC: escrito por todo el rostro4 Casi no lo soportaba.
=io que 5abbit pona una nota en la mesa cerca de su mano. (a mir&, acercndola para
leerla.
?!stoy agradecido a ti y a tu padre por cuidar de m, y tenerme al servicio de los (e 0lanc.
He cumplido con mi contrato y ahora que he encontrado mi pareja, debo irme a su lado. ;e
deseo felicidad? al& la mirada y fij& los ojos en los suyos, que le miraban serenos. "aba
cual era el contrato firmado con los suyos, la )nica clusula por la cual se le permita
romperlo. (as rosas pupilas destellaron, como sabiendo lo que pensaba. (e vio alar la
mano libre y acariciar la mejilla del lobo suavemente, mientras le miraba y los ojos del lobo
se clavaban en los suyos, con lo que era evidentemente una mirada enamorada.
?>o#? le oy& decir con una vo rota y chirriante que nunca haba odo. (e mir& asombrado.
*o saba que l pudiese hablar, pero la palabra a)n con un e#tra,o sonido, era clara? >o#.
?Cuidar bien de l. Puedes asegurrselo a tu padre? le dijo el lobo, pasando el brao por
sobre su pecho y atrayndole contra s, para apoyar la barbilla en su blanco pelo. *o pudo
creer cuando vio a 5abbit sonrer.
?$e... de acuerdo? balbuce& algo aturdido. !l vampiro le mir& con ojos llenos de una
inmensa calide. !so le dej& a)n ms sin aliento. 3u haba pasado4 3u demonios haba
pasado4 Crey& que estaba en peligro o algo as, pero el tipo pareca ms feli que otra cosa.
?=amos a casa, Claus? oy& que le dijo el lobo con tono afectuoso y el vampiro asinti&
contento.
?Claus4 ;e llamas Claus4? consult& at&nito. (a sonrisa que le dio y la lu en su mirada casi
le cegaron. .ierda, nunca pens& que tena un nombre... !n realidad, nunca se molest& en
saberlo. Haba muchas cosas que no saba, y eso le hio sentir un repentino enojo.
(e vio alejarse hacia la puerta del bar junto a la figura del alto lobo.
?' le vas a dejar irse as4? molest& su amigo. +pret& las mandbulas con fastidio ante sus
palabras.
?!l contrato est roto. Cuando 5abbit dijera el nombre de su pareja, se rompera? contest&.
5abbit no, Claus... "onaba tan e#tra,o.
?0ueno, supongo que eso deja las apuestas fuera? (e mir& alando la ceja.
?*i hablar. ' no sue,es con que te devuelva el >errari...? =io la sonrisa de Claus volverse a
l, y le vio alar los dedos en una despedida antes de salir por la puerta. .ierda, el tipo
pareca tan feli... "e alegraba, y a la ve le pona triste... !ra todo tan e#tra,o...
?3u va a decir tu padre4
?"obre qu4? y le vio apuntar a la puerta que se balanceaba. +rrisc& los hombros? "upongo
que estar feli. 5ab... Claus, le caa bien.
?0ueno, supongo que nadie puede decirle que no a un lobo como ese. (a verdad es que dan
un poco de miedo? le oy& confesar a media vo. "onri&, mirndole malvadamente.
?3u hay de una nueva apuesta4... !l primero que encuentre a su pareja loba, gana.
>o# le vio sonrer mientras salan y se alegr&, apretndole contra s. "us ojos se alaron a l
y brillaron con cari,o, sonrojndose levemente.
?;e amo, lindo conejito? susurr& bajando hasta su odo, y sinti& el estremecimiento de su
cuerpo contra el suyo. Claus agarr& su camiseta y lo retuvo abajo mientras lo besaba. +l
soltarlo, se apunt& a s mismo y cru& los dedos.
?'o ms? agreg&, por s quedaba alguna duda.
?Bh, no. 'o, el doble? le asegur& y le vio poner morros? =ale, t) ganas. ;) ms? y su sonrisa
feli le ba,& los sentidos.
Claus sinti& que por fin haba encontrado su sitio, un verdadero hogar entre los braos de
>o#. +maba al lobo y saba que ya no podra amar ning)n otro aroma, ms que el suyo. !l
olor a madera y flor de trbol le envolvan en cada rinc&n y en cada parte de su cuerpo,
recordndole que le perteneca. ' no quera otra cosa. (as noches de luna llena sala a correr
junto a l, disfrutando como nunca antes de su compa,a. (as pesadillas de su pasado a)n
regresaron algunas veces, pero >o# siempre estaba junto a l, para abraarle y soportar el
peso del dolor, que con el tiempo fue poco a poco disminuyendo, trayendo la calma y la
alegra que nunca crey& que podra conocer. ' el amor, que perteneca desde ahora y
siempre solo a su lobo.
>o# era feli a su lado, y aunque tambin disminuy& su audici&n, Claus y l lograron
conectar sin palabras, atados por los laos de su mutuo afecto e inters por el bienestar del
otro. ' por el amor a la talla en madera, que Claus aprendi& de su mano, prestndole una
gran ayuda. =arios meses despus de su encuentro, los lobos de la comunidad no podan
dejar de alabar su trabajo en conjunto, lo que era un motivo ms de orgullo para l, viendo a
su hermoso vampiro lograr un lugar entre los suyos. +unque haba tenido un sitio seguro en
su cora&n desde el primer momento, y ya lo tendra para siempre.
Pasteleros y bicochos
+drian se qued& sentado en el alfeiar de la ventana, mirando divertido al grupo de lobos y
vampiros interactuar en la fiesta de la tregua. (e gustaba que hubiesen sido invitados a
entrar, a pesar de su condici&n de sirvientes y vampiros de baja clase. 8l se senta muy bien
en la mansi&n donde trabajaba, ya que le trataban con respeto y poda dedicarse a lo que
ms amaba, a)n cuando se daba cuenta de las diferencias sociales entre los de su especie.
Pero la cocina era su reino y el de *atty, la vampira que le haba despertado. Haba cuidado
bien de l desde su nacimiento vamprico y le haba ense,ado todas sus recetas. "in
embargo, desde haca alg)n tiempo senta el deseo en su cora&n y la necesidad en su lado
aventurero, de encontrar nuevos sabores. Haba ido all con esperana puesta en captar
alguna nueva especia, o un creativo sabor que diera a sus platos un aire innovador. Hasta el
momento no haba encontrado nada fuera de lo que ya conoca, aunque el sa&n de la cocina
de los lobos era un poco ms fuerte que el de los de su raa, la cocina ms rustica y menos
elaborada que las suntuosas de los vampiros, lo que le gust&, pues era bueno volver a las
races de ve en cuando. 0alanceaba las piernas al ritmo de la m)sica y la charla, mirando
alrededor, cuando de pronto lleg& a su nari un intenso aroma dul&n, que despert& al
cocinero vido de aventuras en l. "e baj& de su sitio en la ventana y sigui& a sus sentidos,
que le guiaron a travs de la multitud api,ada, hacindole entrar por un pasillo hasta una
especie de habitaci&n no muy grande, donde haban arreglado mesas y artculos para hacer
una improvisada cocina, que proveyera de viandas a los participantes de la fiesta. !ra poco
espacio y estaba a rebosar de bandejas con canaps, bicochos, fruta cortada, carne
empanada, pinchos de verduras, en fin, lo necesario para tener contentos a lobos y vampiros
por igual. =io que el aroma que haba percibido, provena de una bandeja de peque,os
pastelillos, que le cost& localiar por entre la multitud de comida. Por fin alcan& uno y lo
prob&. !l sabor de las especias e#plot& en ese momento en su lengua, una mecla de dulce y
salado al mismo tiempo, con un toque de picor que no supo identificar. +bri& los ojos
sorprendido, e#tasiado. "... K+ll estaba lo que haba venido a buscarC Bh, *ctar para sus
colmillosC 3uin lo haba hecho4 + quin perteneca4 "e dio vueltas por la habitaci&n,
desesperado mirando las bandejas, sin nadie a quin preguntar. Casi se abalan& sobre el
lobo que entr& en ese momento por la puerta, e#igiendo saber la autora de esa delicia. 8ste
le indic& una casa a las afueras del poblado, donde viva el pastelero que se haba encargado
de los dulces esa noche, y nada ms terminar de hablar, +drian volaba ya por la puerta,
rumbo a su destino.
0astian boste& cansado, terminando de ponerse el piyama y yendo al ba,o para cepillarse
los dientes. Por fin podra dormir toda la noche. "e haba pasado horas interminables en la
pastelera, terminando los pedidos para la fiesta. Por fortuna haba logrado acabar a tiempo,
a pesar del error que haba cometido. "e mordi& una protesta, apretando las mandbulas con
fuera, sin querer imaginar quin sera el desafortunado al que le tocara probarlo K*o era su
culpaC !staba tan cansado, que se haba confundido al preparar la masa de los pasteles de
miel, usando pimienta en ve de canela. Haba sido un error tonto, pero l era lo
suficientemente bueno en su labor como para arreglar las cosas. Como no poda desechar los
pasteles, ya que no haba tiempo, disminuy& el picor de la masa meclando licor de
bergamota con la miel de la cubierta. +dems, estaba seguro de que nadie se fijara en su
sabor, llenos como estaban todos de hormonas esa noche de luna llena y de fiesta. 8l haba
cumplido con su parte, y eso bastaba. "e daba cuenta de que llevaba un tiempo aferrado a la
rutina, escondindose en el santuario de lo cotidiano, sin querer crear cosas nuevas, pero
francamente haba perdido la inspiraci&n desde que su to se haba mudado del pueblo para
seguir a su pareja, dejando el negocio a su cargo. 0ueno, se alegraba por l, y ya que era un
lobo adulto eso le permita ms independencia, pero la pastelera, antes tan divertida para l,
se haba convertido en una mera forma de hacer dinero. (e faltaba iniciativa, pero no saba
donde buscarla. +dems, Para qu4 'a no tena la curiosidad inquieta de sus primeros a,os
en la cocina, cuando se enamor& de los sabores, olores y te#turas de los dulces. !so estaba
en el pasado. *o pudo evitar mirar su imagen en el espejo, notando las bolsas bajo los ojos,
la piel mustia y el gesto desnimado de su cara. +bri& la boca con horror, al creer ver un par
de mechones blancos revueltos entre su pelo, revisndolos con apuro y suspirando aliviado
al ver que solo eran reflejo de la lu K!so era lo )nico que le faltabaC !mpear a verse tan
viejo como se senta.
"e cepill& a conciencia, repasando bien sus caninos. !ra bueno poder al menos aferrarse a la
rutina diaria. !so le mantena cuerdo cuando, como esa noche, su mente pareca divagar. Fba
por la seda dental, cuando oy& un golpe en la ventana de la habitaci&n y sinti& una rfaga de
aire pasar sobre su espalda, estremecindolo. "ali& con el hilo a)n en la mano, viendo la
ventana abierta. 3u e#tra,oC !staba seguro de haberla dejado cerrada... !n ese momento, el
aire le trajo el aroma cercano de algo vivo, y sinti& una pesada respiraci&n a su espalda. "e
gir& sobresaltado, y vio la figura de un vampiro mirarle por entre la difusa lu de la lmpara,
el aliento rasposo, el pelo eriado en puntas electrificadas sobre su cabea, una cara donde
unos ojos brillaban malficos... $io un paso atrs con miedo y el vampiro se abalan& sobre
l, con tal velocidad que apenas le vio, siendo tirado al suelo y aprisionado por el peso de la
oscura y malvada bestia. *o pudo gritar, ni moverse, presa de un pnico repentino,
paraliado e indefenso, viendo la garra del vampiro apro#imarse a sus ojos con tal rapide,
que solo fue una mancha en el aire. "olo pudo cerrarlos con fuera, a la espera del golpe
mortal.
?;) has hecho esta delicia4? oy& tan cerca de su rostro, que su aliento le rasp& sobre la piel.
+bri& los ojos at&nito, notando el pastelillo a medio comer que agitaba en su mano. $elicia4
"us sentidos volvieron a l, recuperando la movilidad. Fntent& quitarse al vampiro de
encima, pero ste no se movi& ni un pice, sus ojos de intenso brillo clavados a los suyos.
?", eran parte del men) de la fiesta... K+hora, quieres quitarte de encimaC? logr& decir
molesto antes de que el vampiro lo agarrara por la camisa de su piyama y empeara a
sacudirlo una y otra ve, haciendo rebotar su cabea en el aire.
?$ame la recetaC $mela, por favorC $mela yaC
?K"u... "ultameC KK=ampiro loco... y desatadoCC? protest& mareado, luchando por quitrselo
de encima, pero no hubo manera. "enta como si su cabea estuviese dentro de una
licuadora? K!st... est bienC Pero... K"ultame yaC
!l vampiro le solt& tan de repente, que se golpe& con fuera en el suelo. "e sent& adolorido,
frotndose la cabea y le vio revolverse por la habitaci&n desesperadamente. (lamara al
sheriff.. ;ena que llamarle de inmediatoC
?+ ver... lpi, papel... papel, lpi? le oy& mascullar, y vio con horror como empeaba a
atacar sus bien ordenados cajones, lanando cosas a diestra y siniestra sin piedad. Corri&
hacia l para detenerle.
?Para yaC $eja de destruir mi casa, engendro demonacoC? grit& a todo pulm&n, intentando
atraparle, pero la condenada sanguijuela se escurra de sus manos velomente? B paras, o no
te doy la receta, vampiro invasorC? amena&, y le vio parar en seco. "e sac& el pelo de los
ojos, que se le haba revuelto de tanta persecuci&n, arreglndose el piyama con enojo? +s
est mejor. .s respeto, que no ests en tu casa. +unque sea la semana de la tregua, eso no
te da derecho a entrar en una casa ajena, as por las buenas y atacar a sus habitantes de esa
manera? le rega,&. =io que sus ojos le miraban, pero not& que su mirada era distante y su
boca se mova como s mascullara. >runci& el ce,o? Has odo algo de lo que te he dicho,
vampiro loco4
?Canela, a)car. Mn toque de vainilla. .iel para la cubierta. ;oronja o bergamota. '... y...
A3u has usado4 K$ime que ingrediente secreto lleva el pastelilloC Por favorC? pidi& con ojos
tan encendidos de locura, que le hicieron retroceder contra su voluntad al verle acercarse?
A3u era4 A+lg)n tipo de e#&tica combinaci&n de especias de medio oriente4 A+lguna
hierba que solo cultivan los hombres lobo4 *ecesito saberloC .i vida depende de elloCC?
chill& con angustia. 0astian frunci& el ce,o. !n serio4
?' crees que eso te da derecho a invadir mi casa4? protest& crundose de braos. Por
primera ve, el vampiro mir& a su alrededor y pareci& consciente de lo que haba hecho. !l
brillo salvaje en sus ojos se apag&, y su corto pelo antes eriado como pelaje de gato
asustado, baj& de golpe. 0astian solo vio a un plido y peque,o vampiro de ojos grandes y
marrones mirarle con culpa.
?(o siento... 'o... yo no quera causar da,os en tus bienes. 5ecoger todo ahora mismo? dijo
agachndose para coger del suelo un par de sus caloncillos favoritos, con dibujos de lobitos
y coraones, que haban volado de su caj&n mientras sacaba las cosas. "e qued& mirndolos
un instante sorprendido. 0astian se abalan& sobre l y se los quit& de las manos,
ruboriado.
?K;e agradecera que salieras de mi casaC Por s no te has dado cuenta, K!s tarde y me iba a
dormirC? e#igi&, apuntando a la puerta para que se marchara. !l vampiro le dio una mirada
triste.
?Pero, A' la receta4
?K>ueraC B llamar al sheriff, para que te lleve por invasi&n de propiedad ajena K' me
importa un pimiento que sea la semana de la treguaC? grit& ya enfurecido, al verle abrir la
boca para replicar. !l vampiro baj& la vista apesadumbrado y camin& hacia la ventana.
?(o siento. =eo que ahora no es buen momento. (o intentar en otra ocasi&n...
?K*i lo sue,esC? grit& a la nada, porque el vampiro ya se haba lanado por la ventana. "e
acerc& a ella con premura, mirando la oscura noche? KK' no pienses en aparecerte por aqu
de nuevoCC? rugi& enfadado, su vo retumbando en ecos y despertando a los vecinos ms
cercanos.
$ientes de ajo en sala&nC (o haba estropeado todo. .ir& hacia la casa del lobo, donde su
vida se jugaba una partida con el destino. ;ena que conseguir esa receta. "e sent& en la
hierba del sendero que pasaba frente a la casa, mirando su ventana hasta que la lu se apag&.
Haba hecho enfadar al lobo. (stima, porque tena unos bonitos ojos aul gris, que le
recordaban estanques de agua en el verano y truchas nadando en ellos. 0ueno, podra haber
perdido una batalla, pero no la guerra. !l cocinero en l nunca se rendira.
"e qued& mirando la ventana toda la noche, bosteando de cuando en cuando, hasta que
sinti& el amanecer llegar. "us odos le dijeron que el lobo ya estaba despierto y se puso de
pie, acercndose a la puerta principal. (e dio su mejor y ms brillante sonrisa cuando le vio
abrir la puerta, para ver sus ojos enrojecidos por la falta de sue,o, abiertos como si hubiese
visto un fantasma.
?K0uenos di...? pero no alcan& a terminar la frase, ya que el lobo cerr& la puerta en su nari.
"e qued& mirando la entrada, dando un profundo suspiro? K"olo vena a disculparmeC? grit&.
' a buscar la receta. "uspir& otra ve. !sto no estaba funcionando. "e alej& y recogi& flores
por el bosque, juntando un buen ramillete. !so siempre funcionaba con *atty. Cuando
regres& a la casa, vio al lobo saliendo calladamente por una ventana, oteando el e#terior con
cuidado. "e acerc& por detrs de l, con el viento a favor y e#tendi& las flores por su
hombro. !l lobo se dio la vuelta sobresaltado, cayendo su nari en medio del ramillete,
estornudando con violencia.
?3ui... K3uita... eso de...a... aquC? logr& decir, antes de que otro un estruendoso estornudo le
atacara? K"oy a... a... alrgicoC? y otro? "oy... alrgicoC? y otro.
?(o sientoC *o saba que los lobos fueran alrgicosC? se disculp&, tirando las flores lo ms
lejos que pudo y acercndose a l? KPens que todos erais fuertes y magnficos, sin defecto
algunoC? sus palabras hicieron que el lobo le diera una mirada asesina, antes de volver a
salpicarle con su saliva en un estornudo ms.
K!stacas rebosadasC "u gran bocota le estaba poniendo en aprietos. Pero el lobo no pudo
hacer ni decir nada, prisionero de sus estornudos como estaba. +drian le gui& de regreso a la
ventana abierta, metindole al interior y entrando con l. 0usc& un pa,o para mojarlo en
agua y acercarlo a su nari. !l lobo estornud& contra el pa,o h)medo.
?=ayaC *o tienes algo para la alergia4? consult& solcito, y le vio mirarle como s fuera una
alima,a infecta.
?>u... fuu...? oy& decirle entre estornudos y frunci& el ce,o.
?!s alg)n tipo de medicamento4
?K>uu... >ueraC? grit& otra ve, apuntndole a la puerta. +drian rod& los ojos.
?!so significa que no vas a darme la receta4
?Po... po...
?Po4 3u dices4
?PolicaC... =ete o... llamo... a la po...
?=ale, lo he pillado...? concedi&, lanando un suspiro prolongado. "ali& por la ventana? 3u
sepas que lo siento. !n verdad, yo...? pero el lobo se haba levantado tras l, cerrando la
ventana con un estornudo, y alcan& a ver su roja nari antes de que bajara la persiana de un
solo golpe? ...lo lamento. =ayaC *o tena idea de que los lobos eran alrgicos? dijo para s
mismo, mirando la ventana cerrada, sin atisbar rastro de sus estornudos. Pobre lobo. ' pobre
de l. 8sto le dejaba sin opciones. ;endra que tomar medidas desesperadas.
Cuando su nari por fin se calm&, 0astian estaba demasiado e#hausto como para moverse o
pensar. ' adems, apenas haba conseguido pegar ojo durante toda la noche, preocupado por
volver a ser asaltado por ese vampiro invasor otra ve. Pero A3u se haba credo ese gran
hijo de colmilludos4 K' atreverse a acosarle en su propia casaC +l& la mano, decidido a
coger el telfono y denunciarle a la polica, pero el dolor de cabea producto de tanto
estornudo le dej& sin fueras, ni siquiera las suficientes como para alcanar el aparato. $ej&
caer la mano agotado y mir& el techo. Por entre las vetas de la pintura, los recuerdos
vinieron a l, recuerdos que siempre se despertaban con las flores. 5ecuerdos de perdidas y
muerte. *o es que fuera alrgico al p&len... "olo era alrgico al pasado...
?.ejor no seguir por ah? se rega,&, frotndose la cara con ambas manos. ", mejor dejar el
polvo y las telara,as encerrados en el armario.
Cuando se sinti& con nimos suficientes para comer algo y salir, ya era el medio da. "aba
por los rumores que haba odo, que los vampiros dorman a esa hora. !so le alegr&, ya que
le librara de la plaga que aotaba su e#istencia. Camin& por el sendero en el bosque, hasta
su pastelera en el pueblo. Cocinar le relajaba, y ahora ms que nunca necesitaba una buena
dosis de calma en sus sentidos.
Cuando entr& por la puerta principal, en la ona donde haca las ventas, sinti& el aroma de
algo dulce en el aire, como el aroma de un bicocho recin horneado. Pero, 3u demoniosC
"e haba dejado el horno encendido4
"e acerc& con prisa a la parte trasera, donde estaba el horno y la cocina, y entonces le vio.
"u nmesis, su plaga... K!n su propia cocinaC
?K3u demonios haces aqu, vampiro del infiernoC? rugi&, llenando de ecos estruendosos el
local. !l vampiro se cubri& los odos con las manos llenas de harina K$e todas las ofensasC?
K"alC *o quiero volver a verte en mi vidaCC >ueraaaCCC
?K!speraC K"olo un momentoC... "olo.... KPrueba estoC? le pidi&, acercndose lo
suficientemente rpido para dejar frente a l un plato con troos de bicocho caliente, y
alejarse de inmediato al otro lado del muro. 0astian se qued& con el grito furioso detenido
en la boca, mirando los bicochos humear y su rico aroma empear a llenar su nari.
?"i lo pruebo, A;e irs4? mascull& enfadado, deseando perderlo de vista para siempre. !l
vampiro le mir& con un gesto de tristea, pero finalmente asinti&? "i te atreves a asomar la
punta de la nari por aqu, KOuro que no respondoC? amena&.
?.e ir, lo prometo. "olo dame tu opini&n. Por favor? suplic& con su vo y su mirada.
0astian lan& un gru,ido e#asperado, cogiendo con rabia un troo del bicocho y
echndoselo de golpe a la boca. "e qued& inm&vil. !speraba que fuera dulce pero no lo era,
tampoco era salado... !ra... de esencia fuerte y sabor algo cimo, como pan de la tierra, pero
con un trasfondo de dulor, que...
?3u has usado4 *oto harina de cebada, sal, a)car y levadura dulce, pero hay un algo que...
A3u es4? consult& interesado y le vio sonrer con ganas, notando la trampa que le haba
tendido. !l pastelero en l que crea perdido, se encendi& en ese momento, ansioso por
nuevos descubrimientos? =ale, ya lo pillo. 3uieres intercambiar tu ingrediente secreto, por
el mo, no es as4? dijo cruando los braos sobre el pecho. !l vampiro se quit& el delantal y
lo colg& cuidadosamente en su lugar, llevando los cacharros sucios a la pila de fregado? '
bien4? dijo impaciente al verle moverse con tanta parsimonia, despus de que haba
prcticamente asaltado y revuelto su casa. ' su tranquila rutina.
?(a verdad es que he usado un ingrediente muy sencillo. *o es ning)n secreto? le oy& decir,
y rod& los ojos e#asperado al verle hacerse de rogar K=ampirosC? Pero, me temo que tendrss
que esperrar. "i no duerrmo ahora, entrarr en nossferatu... ', no crreo que quierras verr
destrossada tu cossina? le dijo con una e#presi&n de pronto plida, su vo ms rasposa.
?!s esa una amenaa4? consult& alando una ceja.
?*o. ;)... alerrgico a las flores. 'o al sool... Puedo aguantarr... un poco mss... peroo...? y le
vio transformarse del todo, los ojos encenderse otra ve en su rostro y el pelo eriarse en su
cabea. >runci& en ce,o agitado.
?=ale, vale, lo entiendo. =ete ya a dormir.
?"ool... Peligrrosoo? dijo de la misma forma y sus ojos le miraron con tal brillo malfico,
que sinti& un escalofro bajar por su nuca, tragando saliva a su pesar. 8l poda defenderse de
un ataque, pero su pobre cocina no.
?$e... de acuerdo. ;indete por all.
?@rr... graciasss? +l menos el bicho ese era educado, a)n cuando pareca un gato eriado. (e
vio tenderse en el suelo, cerca del muro y lejos de la ona de cocinar, agradeciendo su
consideraci&n. "e qued& tan inm&vil, que tuvo que acercarse a mirarle, vindole volver a
tener la imagen del vampiro acosador que conoca, lanando un suspiro aliviado. "u cocina
estaba a salvo. ' pareca que estaba con vida, pero fuera de la conciencia. 0ueno, eso le
dejaba va libre para e#plorar el bicocho y tratar de desentra,ar su secreto. Con suerte,
cuando el bicho chupasangre despertase, podra echarlo a patadas de su local.
+drian sinti& el aroma que le envolva en sue,os, trayndole la imagen de *atty. $espert&
de golpe y lan& un rugido enfurecido KPeligroC $io un salto en el aire y corri& con todas sus
fueras, el nosferatu en l rugiendo enardecido. PeligroC PeligrooC
!l bosque pas& a su alrededor como manchas sin forma y se trep& a la copa de los rboles,
ciego por la lu en su desesperada carrera. !l sol le quem& furiosamente, lgrimas de dolor
arrancadas junto con la piel que se desprenda de su cuerpo, dejando su carne en llagas
vivas. Pero el peor dolor vena de su cora&n. Pudo sentir como la energa se vaciaba de su
cuerpo, unindose a aquella que desapareca para hacerse parte del universo. "u lao estaba
roto.
Cuando regres& a la mansi&n, era demasiado tarde. *atty haba muerto en el incendio, y l
estaba gravemente herido. !stuvo una semana en coma, su nosferatu luchando por agarrarse
a la vida, su vampiro deseando seguir a quin le haba creado. (os laos de creaci&n eran tan
fuertes, que a veces podan conducir a la locura o la muerte. Pero *atty siempre haba
apreciado la vida, dando siempre una parte de la suya a los dems, a travs de su cocina.
!l vampiro desapareci& sin dejar ning)n rastro tras de s. !l lobo pens& que regresara a
molestarle como aquella noche, a estar de pie en su puerta con su mirada de disculpa como
aquella ma,ana, a acosarle con sus flores para obligarle a hacer el ridculo. !ncontr& las
flores ya secas, unas ma,anas despus en el sendero del bosque y no supo porqu, pero
sinti& a,orana. (e haba sacado de su mundo perfecto y ordenado por unas horas, y
contrario a lo que haba esperado, haba sido divertido. +dems, tena talento en la cocina.
+)n no haba podido desentra,ar el misterio de su bicocho. Hio indagaciones en el
pueblo, esperando que alguien le conociera, que le dijera donde estaba o de donde haba
venido. 3uera la receta, pero nadie le conoca. "olo pudo encontrar al lobo, a quin haba
asaltado esa noche por la informaci&n de su casa, con una desesperaci&n que sinti& era
similar a la que l senta ahora. Fntent& coger rastros de l en el aroma que haba quedado
por los lugares donde haba pasado, pero su lobo interno no pudo captar nada.
' pas& un a,o.
+drian se haba recuperado de sus heridas e#ternas, recuperando por fortuna la vista, pero el
dolor del lao roto segua all. Cocinaba de memoria, con el libro de recetas nuevas cerrado,
como haba cerrado el captulo de su historia. 'a no tena inspiraci&n para crear. "e limitaba
a imitar los pasos de *atty, hallndose preso de la tristea cuando le recordaba. !ra
doloroso, porque haba perdido a la )nica que senta tan parte de s, que trs su perdida ya
nada ms le importaba en el mundo.
(a semana de la tregua lleg&, y era la primera ve que la mansi&n del oeste abrira sus
puertas a los lobos, pero francamente, +drian no estaba ilusionado. =ampiros cocineros de
otras casas, vinieron a la suya para prestar ayuda y servicio. 3ueran dejar en alto el nombre
de sus se,ores. 8l solo se limitara a cumplir su labor, 3u otra cosa poda hacer4
0astian no perda la esperana. 3uis esa noche le hallara. Haba buscado saones en
muchos lugares, el mismo sabor que haba dejado en su boca su bicocho, pero nada se
asemejaba a su receta. Cuando lleg& a la mansi&n esa noche, busc& el camino a las cocinas.
=arios vampiros le miraron curiosos, pero no le detuvieron. !ntonces le vio.
?"e,or, A$esea que le lleve de regreso al sal&n de la gala4? consult& un vampiro, cuando
hojeaba el libro de recetas que haba encontrado medio escondido en una esquina.
?.mh4 *o, gracias? dijo apenas sin mirarle. !l vampiro no volvi& a insistir. "e qued&
leyendo las recetas, mudo de asombro. Fncrebles meclas, sabores y te#turas que no se
haba imaginado, ni so,ado con crear A3uin haba creado aquellas maravillosas
combinaciones4 +l& la vista, y vio a una anciana sonrerle. !se brillo en sus ojos, lo haba
visto en alguna parte... !lla le se,al& con un gesto de cabea hacia una puerta cerrada.
0astian frunci& el ce,o, mirando al sitio indicado. Cuando volvi& la vista, ya no estaba. "e
acerc& dudoso a la puerta, y al fin vencido por la curiosidad, al& la mano al pomo y
comen& a girarlo muy despacio.
+drian suspir& cansado, apoyando la cabea entre sus braos sobre la mesa, ocultando su
dolor y pesar del mundo. Porqu no haba muerto tambin con ella4 (as cicatrices se haban
quedado en su piel, formando un mapa de dolorosos recuerdos. Pero l no quera recuerdos,
no quera estar all. "uspir&, cerrando los ojos. Mn olor a especias y sal llen& su nari, y casi
salt& al sentir una mano posarse en su hombro. =olvi& la vista asustado, y sus ojos se
encontraron con una mirada aul, salpicada de gris, cristalina, como el color del agua de un
riachuelo lleno de peces. (os conoca.
?K;)C? se puso en pie de un salto, mirndole consternado. !l lobo le sonri& de una manera
que no le crea capa, ya que solo haba podido verle enojado cada ve que se encontraban.
Claro que era por su culpa, pero...
?!sa es mi lnea... =ampiro.
?A3u... qu haces aqu4
?He venido a la fiesta... A3u4 ;) puedes ir por ah acosando a la gente, pero los dems no
pueden acosarte4? protest&, cruando los braos sobre el pecho con mirada divertida. Como
si todo regresara a l, como un viento vuelve en el verano a refrescarlo todo, sonri& tambin.
?K(a recetaC *unca me dijiste tu ingrediente secreto? protest& de igual manera.
?0ueno, te marchaste antes de poder decirte nada. +dems, K;) me debes la tuya, primeroC?
e#igi& apuntndole con dedo acusador. +drian baj& la mirada.
?(o siento. Perd a alguien importante para m ese da? admiti&, y sinti& el dolor apretarse en
su cora&n. "inti& el peso de la mano del lobo en su hombro y e#tra,amente le pareci&
confortador.
?A3u ocurri&4? consult& su vo, y cuando al& la mirada vio la preocupaci&n en sus ojos.
(e cont& sobre el incendio y la muerte de su creadora? $esde entonces, no he tenido ganas
de nada. *i de crear, ni de vivir...? termin& por admitir, sintiendo que de alg)n modo e#tra,o
no poda mentirle. =io que el lobo asenta comprensivo.
?", es duro perder a alguien que te importa. .ira, quis esto pueda ayudarte? dijo
alargndole algo y vio que era el libro de recetas de *atty, que haba dejado en alg)n lugar
que no recordaba sumido en el dolor de la nostalgia, dndole por perdido. Pero era lo mejor,
no soportaba verlo y sentir su presencia entre sus hojas. (o tom& de sus manos y le mir& a
los ojos.
?$&nde lo has encontrado4? "u cora&n se apret& al ver la e#presi&n en los ojos del vampiro,
mecla de dolor y a,orana. $ese& desesperadamente liberar la carga de la tristea que vea
en l.
?+cabo de encontrarlo en la cocina, en un rinc&n. >ue una casualidad? le vio repasar con
mano cari,osa la cubierta y sus ojos llenarse de repentinas lgrimas.
?!ra... el libro de las recetas de *atty. Cre que lo haba perdido? y su vo se cort& en un
solloo, apretando el libro contra s. 0astian no pudo soportarlo ms y se acerc&,
abrandole con cuidado.
?!st bien, est bien? dijo acariciando su espalda confortadoramente? !stoy seguro de que
ella quera que lo volvieses a tener. 3u volvieras a cocinar, como en los viejos tiempos.
?$uele... duele demasiado a)n? oy& su vo h)meda y le apret& fuerte contra s.
?", pero el dolor pasa, y cada da duele un poco menos. 'a lo vers. +dems, la cocina es
algo que dura para siempre? le asegur& y vio su rostro lleno de lgrimas alarse hacia l, la
nari roja como un pimiento, as como sus ojos marrones y h)medos. "onri& sin querer al
verle, recordndole a aquella lejana noche.
?;)... t) tambin has perdido a alguien4
?.i familia. $urante una lucha con vampiros? decidi& ser sincero. 8l haba sido peque,o
cuando aquello ocurri& y no tom& parte en ella, yendo al poblado a vivir con su to cuando
se qued& hurfano. 8l le haba ense,ado todo lo que saba. (e sinti& apretar su cabea contra
su pecho con fuera y abraarse a l.
?(o siento. "iento que hayas perdido a tu familia. (o siento mucho? se disculp& y sus
palabras le dolieron en el cora&n. Por mucho tiempo haba sentido dolor e ira, pero su to le
haba ense,ado que e#istan cosas superiores en el mundo que regan sus destinos, y que a
veces las cosas que ocurran tenan una ra&n para hacerlo. Fncluso la muerte y el dolor
traan vida y esperana, de maneras que a veces nos costaba comprender.
?*o fue culpa tuya. Pero si te sirve de algo, gracias. ' tambin, siento que hayas perdido a
*atty? le dijo con toda sinceridad, sintiendo que en su interior se cerraba poco a poco una
peque,a herida abierta a)n. *o haba olvidado, pero porque no haba podido perdonarse a s
mismo por ser tan frgil y peque,o, por no poder defender a quienes amaba, o al menos
morir junto a ellos. !se vampiro que lloraba entre sus braos senta el mismo dolor, la
misma pena y desolaci&n. !ran de raas diferentes, pero en esencia eran iguales. !l dolor
traa esperana y uni&n, igualaba a quienes eran diferentes. +hora lo comprenda. "e sent&
en la banca frente a la mesa junto a l y le dej& llorar apretado contra su pecho, sintiendo
como si una parte en su interior sanara a la ve con sus lgrimas.
Cuando se calm&, pudo mirar otra ve el libro. "egua estando igual de viejo y manchado,
que la primera ve que le vio cuando era un vampiro recin despertado en la gran cocina de
la mansi&n, y volvieron a l los momentos felices al lado de *atty, las noches
e#perimentando sabores, rindose a su lado, oyendo sus palabras, sus consejos, degustando
el sa&n de su compa,a y afecto. !l lao haba sido fuerte entre ellos, pero se dio cuenta de
que no se haba roto con su muerte, solo haba evolucionado, ya que la muerte era un paso
ms en la vida, y traa consigo la carga de recuerdos y e#periencias acumuladas, para que
fuesen revividas por aquellos que quedaban, para que as la memoria no se perdiera, como el
amor, que e#tiende sus semillas por donde pasa y crece imperecedero en los coraones
donde ha echado races. ' el amor de *atty tena races muy profundas en l, que haban
florecido y le haban convertido en lo que era. "u perdida le haba hecho revivirla en la
cocina, porque all estaba, siempre haba estado.
.ir& al lobo sentado junto a l y le sonri&.
?@racias.
0astian vio la lu en su mirada, la calma, la pa, y la sinti& resonar en su cora&n. $e pronto
su e#presi&n cambi& y a pesar de las cicatrices, pudo ver claro al vampiro de aquella noche,
su acosador particular.
?*o s tu nombreC? dijo mirndole con sus enormes ojos marrones. 0astian ri& divertido.
?*i yo el tuyo. +unque, bien podra bautiarte como vampiro acosador y asaltador nocturno
de hogares? brome&. !l vampiro sonri&.
?' yo podra nombrarte lobo grit&n y mal humorado, alrgico a las inocentes florecillas del
bosque? contraatac& y le arranc& una carcajada? .e llamo +drian.
?' yo 0astian? se present& tambin. .ir& el brillo tembloroso de sentimientos en sus ojos.
?@racias, 0astian. Por esto y... por todo.
?$e nada, +drian. .e alegra haber sido de ayuda? dijo ponindose de pie, pero no lleg& a
alarse demasiado, pues la mano del vampiro se agarr& a su camisa, tirando de l con
desesperaci&n.
?(a recetaC *o te vayas sin darme tu recetaC? e#clam& y no pudo evitar la alegra que le
inund& al revivir todo de nuevo. "u vampiro cocinero estaba all...
?*o me iba a ning)n lado. 0ueno, solo fuera de aqu, porque estoy helndome? dijo
volviendo a sentarse, con su mano a)n agarrndole fuertemente, mirando las paredes de
piedra.
?(uego. Primero dime como hiciste el pastel de esa noche.
?!s increble que a)n lo recuerdes...
?*o intentes distraerme. ;) tambin cocinas y sabes como yo, que nosotros nunca
olvidamos un sabor inolvidable? dijo mirndole muy serio y le hio sonrer.
?0ueno, t) ganas. Pero que sepas que todo fue un accidente. !sa ma,ana mientras haca los
pasteles, me confund de especia y ech pimienta en ve de canela. !so es todo? le vio
mirarle por un instante at&nito, para echarse a rer de pronto? *o es tan gracioso...? se quej&
al orle, intentando molestarse, pero se contagi& de su risa, estremeciendo la mesa donde
estaban apoyados.
?=aya, todo un a,o desperdiciado? brome&, mirando la sonrisa dulce del lobo.
?$e eso nada. Mn cocinero nunca desperdicia su tiempo? sus palabras le hicieron rer. "e
senta bien, libre al fin de un gran peso en su cora&n. +carici& la cubierta del libro.
?+,adir tu receta al libro. Con una peque,a clusula de 9Precauci&n, si es usted un lobo
dormido:
?.uy gracioso? se quej&, estrechando los ojos en finas rendijas para mirarle y +drian se
sinti& completa y est)pidamente feli? ' bueno, si el se,or cocinero de colmillos afilados
tiene a bien cumplir su promesa, me gustara saber el ingrediente por el que he recorrido
media ciudad y venido esta noche? sus palabras le dejaron at&nito.
?A.e buscabas4? su cora&n comen& a latir con fuera cuando le vio asentir? A' has venido
esta noche solo por la receta4
?0ueno, es parte de mi esencia como cocinero. *osotros nunca olvidamos un sabor, t)
mismo lo dijiste? y volvi& la vista algo sonrojado. "u gesto le pareci& encantador. *o pudo
evitarlo y se al& hasta su rostro para darle un beso en los labios.
?", es verdad. Mn sabor inigualable? dijo lamindose con ganas tras probarle. !l lobo le
miraba at&nito, sus ojos enormes como la primera noche que le vio en su habitaci&n.
?Pero... qu...
?;e dir mi ingrediente secreto. +unque deseara que no te marcharas tan pronto? sinti& que
no quera perderle, ya que haban vuelto a encontrarse despus de tanto tiempo, a pesar de lo
accidentado de sus encuentros, mayormente por su culpa, lo saba. =io que sus claros ojos
de agua cristalina se volvan oscuros de pronto, y el temblor en su mirada le dej& un
momento sin aliento, el deseo e#tendindose por su cuerpo ante su bellea.
?"oy todo odos? le dijo con vo profunda y aterciopelada, que le dio un pu,etao de placer
en el vientre.
?>ue... fue tambin un accidente? dijo tragando sus ganas encendidas con esfuero? (a
verdad, es que pretenda cocer el bicocho al horno de le,a, para darle una mayor te#tura,
pero cuando iba a meter la masa, se me cay& sobre las cenias. ' el a)car de la cubierta se
mecl& a ellas? confes& mirando sus ojos y vindoles recuperar su color original.
?!so es todo4? consult& mirndole incrdulo, y el vampiro asinti& con una sonrisa de
disculpa. Btro accidente, pero que les haba llevado a ambos a crear sabores nuevos,
divertidos y lo ms curioso, haban podido conocerse. ;odo por accidente, por casualidad.
Pero la casualidad no e#ista, solo lo inevitable. "e acarici& los labios. +)n senta la
sensaci&n de su beso. (e haba sorprendido y gustado a partes iguales.
?A*o te irs ahora, verdad4 +)n... a)n hay cosas que ver en la mansi&n... !st la fiesta, y
podra llevarte a conocer las cocinas? le oy& decir con vo y mirada desesperada. !so le hio
sonrer.
?0ueno, ya que estoy aqu, podra aprovechar de dar una vuelta y mirar? "u cora&n dio
saltos de alegra, cuando le vio sonrer de forma tan brillante que le ceg&.
?!so es genialC? dijo y se puso de pie en un salto. =io al vampiro que haba buscado desde
aquel da volver a brillar en su mirada, su mano e#tendida hacia l? =amosC ;e llevar a
conocer los rincones de la mansi&n.
?K!speraC? dijo tomando su mano y tironeando de l hacia la banca, pero esta ve para
hacerle caer entre sus braos. !l vampiro se sostuvo de l sorprendido.
?0astianC? e#clam& mirando sus ojos. !l lobo sonri& malvadamente.
?3uiero compensaciones por los da,os causados.
?$a,os4 3u da,os4 *unca toqu tu cocinaC?protest& con sus ojos chispeando de enojo, tan
cerca de su rostro que sinti& quemarles con su furia. Pero era un fuego que le alent&.
?!ntraste en mi casa sin permiso, me acosaste contra el suelo sacudindome sin piedad,
desordenaste mis cajones, me asustaste frente a la puerta principal, me aturdiste con las
flores en la nari y volviste a entrar en mi cocina sin permiso. "e me queda algo4? dijo
repasando mentalmente sus infracciones.
?3u memoria tienes, para tanto tiempo que ha pasado? le oy& refunfu,ar y vio que pona
morros. !so le pareci& encantador.
?Como ves, me debes una buena cantidad, en compensaci&n por da,os y perjuicios? insisti&,
y le vio rodar los ojos e#asperado.
?=aale. "i has venido solo por eso... sultame y te har un cheque... (obo materialista?
volvi& a protestar y vio sus ojos bajar con tristea. (e cogi& de la barbilla, alando su mirada
otra ve hacia l.
?*ada de cheques. ;endrs que compensarme de por vida. !mpeando por hoy? e#plic& y
por si las dudas, le dio un beso aclaratorio. +drian se qued& mirndole at&nito por un
momento, sonriendo luego con ganas.
?Creo que tendrs que aclararme ms tus condiciones. .e he perdido por un momento? y
por respuesta recibi& otro beso, al que se uni& tambin, sentndose en su regao y
abrandose a su cuello.
?.s claro ahora4? pregunt& 0astian entre sus labios.
?*o. +claraciones de por vida? respondi& sin soltarle, acariciando su melena con gusto.
0astian sonri& entre el beso.
?!ncantado.
!l viento del pasillo entr& en la habitaci&n y agit& las paginas del libro, detenindose en la
hoja donde estaba escrita la )ltima receta. !n ella, con la peque,a y prolija caligrafa de
*atty, se lea claramente el ingrediente ms importante, que nunca haba faltado en ninguna
de sus recetas, con el cual haba saonado siempre su vida, su comida y el cora&n de todos
los que pasaban por su lado% .ucho amor.
Tor'e(a 'oes)a
.ientras el coche recorra la carretera camino a su destino, Price estaba emocionado, casi
volando entre las nubes. Haba esperado todo un a,o por ese momento. !sa era su noche,
seguro que lo era. Por fin haba llegado la semana de la tregua y l junto a otros de sus
amigos iran a la gran mansi&n del oeste, que abrira sus puertas para que lobos y vampiros
se encontraran en la fiesta anual. $esde que su hermano =ince haba encontrado a su pareja
en un lindo vampiro de nombre +lbert, Price so,aba con la noche en que podra encontrar al
suyo, abraarlo y tenerlo junto a l para siempre. Haca varios meses haba empeado a
trabajar en la herrera del pueblo, un trabajo duro, pero l era fuerte y la paga era buena, lo
que le permitira empear a cimentar un futuro junto a su vampiro. 3uin sera4 Como
sera4 *o tena ninguna duda de que esa noche le encontrara, !ra su destinoC +lbert era una
preciosidad de vampiro, amable y nunca se rea de sus torpeas. 8l quera encontrar pronto
al suyo. "u hermano ahora era ms tolerante que antes cuando le vea acercarse a su pareja,
pero Price entenda que no quisiera compartir. 8l tampoco dejara que nadie ms mimara a
su vampiro cuando le hallara, sera suyo y solo suyo para siempre. ", esa era su noche. (o
senta en el aire... o quis, lo que ola era el pesado olor del gel que su hermana le haba
echado en el pelo, aduciendo que tena que estar guapo y a la moda para 9ser un matador:
esa noche. 8l no quera matar a nadie, solo hallar a su lindo vampiro. .ir& en el reflejo de la
ventana el peinado que ;racy le haba hecho. .s que un lobo pareca un le&n. !speraba no
espantar a su pareja.
8than volvi& a mirarse en el espejo de la entrada. Chaqueta, bien. Corbata, bien. Rapatos,
bien. ;odo impecable. !ra una noche especial y se le presentaba la ocasi&n )nica de llevar a
cabo un estudio sociol&gico. "e haba presentado voluntario de inmediato, cuando en la
mansi&n de su se,or preguntaron quin deseaba servir en la gran gala de la tregua. *o es
que sus grandes conocimientos bibliogrficos y lingEsticos le fueran a servir de mucho para
atender, pero esperaba poder conocer un poco ms la vida fuera de los muros de su mundo y
echar un ojo a aquella curiosa poblaci&n lobuna, que pareca hacerse espacio cada ve ms
en el cerrado crculo de su sociedad. !sa noche tendra una oportunidad de primera mano
para aprender de ellos y sus costumbres. !staba un poco nervioso, quera hacerlo todo bien.
+ cada vampiro voluntario se le haba asignado una tarea diferente. (a de su equipo era
atender durante la noche a los lobos que llegasen en grupo% tenan el deber de esperarlos en
las puertas, guiarlos hacia el par/ing, guiarlos de regreso a la gran mansi&n, recoger
chaquetas y otros artculos personales, guiarles al sal&n comedor, y en fin, estar atentos a
cualquier necesidad que les surgiera a lo largo de la velada. "enta que era una medida un
poco paternalista, ya que tanto control sobre sus movimientos podra molestar a los lobos,
pero la tregua era algo importante, que no poda ser puesto en entredicho por ning)n
descuido. ' adems, era la primera ve que la mansi&n del oeste abrira sus puertas a la gala
tras el terrible incendio del a,o anterior. ' era la primera ve que l asistira, as que quera
que todo fuera perfecto. "e sent& en la sala de espera, aguardando su turno. ;res vampiros
ms, y sera su momento de salir.
Cuando vieron la mansi&n, todos se quedaron boquiabiertos. !l enorme edificio destacaba
contra la oscuridad de los bosques, hermosamente iluminado, como si fuese un arco lleno de
peque,as y brillantes luces.
?!s increble? e#clam& uno de los lobos, y Price solo pudo asentir sin dejar de mirar la gran
casa hecha de piedra labrada, los hermosos marcos de hierro forjado en intrincados
laberintos de flores, las ventanas de grueso y multicolor cristal, por las que se adivinaban
lmparas de largos braos llenos de gotas brillantes. ' el interior deba ser igual de lujoso.
Cuando llegaron a la entrada, un vampiro les esperaba, inclinndose ante ellos con gentil
elegancia.
?0uenas noches, se,ores. ' bienvenidos a la mansi&n @ottie? les salud&.
?Bh... hola, hombre? atin& a saludar =itto, que era quin conduca. Price se qued& mirando
al vampiro con la boca abierta. 3u bellos eran todosC ;an elegantes, tan grciles... Con una
floritura de la mano, ste les indic& el camino al par/ing, y cuando aparcaron ya estaba all
para abrirles la puerta a todos. (es gui& al interior, que como bien haban imaginado era tan
bello como la fachada. "uaves alfombras en los suelos, pilares de mrmol, butacas tapiadas
en satn. Price se qued& mirando el enorme chandelier que colgaba sobre ellos, todo lu y
colores, que dejaba sombras que casi parecan hechas de encaje, por el fino trabajo con el
que estaban cortadas las pieas de cristal.
?;u chaqueta, hombre? oy& que le deca =itto, viendo al vampiro que les haba acompa,ado,
sonrer cargado de sus cosas.
?$e acuerdo? dijo intentando quitarse la suya, pero la rebelde cremallera no baj& cuando sus
dedos se lo pidieron. Fntent& con in)til esfuero y se acerc& ms a la lu de la lmpara,
viendo un troo de tela enganchada a ella. (o quit& y consigui& bajarla de un golpe. !nojado
con la mala calidad de la cremallera, lan& un bufido y estir& con fuera el brao a un lado
para quitarse la chaqueta, pero entonces sinti& que su mano tocaba algo blando y este algo
lanaba un gemido, saliendo de pronto disparado en direcci&n a la otra punta de la
habitaci&n. "e qued& at&nito, viendo el cuerpo que volaba chocar contra el muro y caer
despatarrado al suelo.
?PriceC 3u has hecho4? oy& el grito de uno de sus amigos, volviendo la vista a l inm&vil
por la sorpresa, echndose a correr de pronto presa de la preocupaci&n, en direcci&n a donde
quin quiera que fuese haba volado. !speraba que siguiera con vida...
3u haba sido eso4 Mn tren4 Mn avi&n4 Cuando sala para cumplir su deber, algo lo haba
golpeado, una masa musculosa de carne y lo haba enviado a la estratosfera. Porqu4 3u le
haba hecho4 +bri& los ojos a medias y solo pudo ver oscuridad, A"e haba quedado ciego4
?!sts vivo4 Bh, por favor, no te mueras. (o siento mucho... lo siento? oy& un lloriqueo y
vio que no se haba quedado ciego, que la sombra provena de un enorme cuerpo encima de
l, y vio el rostro claro y compungido de un hombre grande, y la gran mano que le palpaba.
(obo...
Fntent& gritar un 9"ocorro, que me comeC: pero no pudo decir nada, ya que el aliento escap&
de sus pulmones cuando el lobo le agarr& con fuera al verle despierto, apretndole contra s
como s se le fuera la vida en ello.
?!sts vivoC !sts vivoC *o te he matadoC? e#clam& contento, quitndole ms aire por
minutos. !mpe& a darle golpes, medio ahogado por su mpetu.
?PriceC "ultalo yaC *o ves que le quitas el aire al pobre4? le rega,& alguien, y ese alguien le
salv& la vida. !l tal Price solt& su agarre. Pero lo hio tan de repente que volvi& a caer al
suelo y se golpe& la cabea, lanando un quejido ahogado.
?Bh, lo sientoC (o siento tantoC... $jame ayudar...? intent& con gesto culpable, acomodando
torpemente su cabea, pero le pis& la mano con la rodilla y le arranc& un grito dolor? (o
sientoCC? llorique& desesperado. 8than manote&, apartndose de su lado.
?+lejate de mC? le grit&, su mano aplastada, sus pulmones faltos de o#geno, toda su ropa
hecha un desastre por la cada, y un dolor de cabea por el golpe que se haba dado, que
pulsaba torturando sus sienes? +prtate, engendro del demonioCC? le grit& ya preso del dolor
y del enojo, y le vio mirarle con ojos de perro castigado. "e levant& como pudo, cojeando
lejos de l. Pero no pudo andar demasiado. $e pronto la fra oscuridad se cerni& sobre l y
no supo nada ms.
Price estaba estupefacto. 3u haba hecho4 Casi mata de un manotao a ese pobre vampiro.
;onto, torpe Price... y ahora, en ve de ayudar, haba empeorado las cosas. !l pobre le tena
miedo. 8l no quera que le tuviese miedo, solo quera disculparse... (e vio trastabillar, y a)n
cuando lo haba estropeado todo con su torpea, no poda permitir que el vampiro sufriera
ms da,o. (e cogi& justo antes de que cayera al suelo. +comod& su cuerpo desmayado
contra su pecho, cuidadosamente, intentando no cometer los mismos errores de antes, pero
es que cuando se pona nervioso, su torpea se haca a)n ms evidente. .ir& al vampiro que
tena ms cerca, que le miraba mudo y asombrado.
?$&nde puedo llevarlo para descansar4 Creo que est mal herido? e#plic&. =io que otro se
acercaba, uno algo ms viejo.
?*osotros nos encargaremos? dijo estirando los braos como para liberarle de su carga, pero
Price sacudi& la cabea con firmea.
?!s mi responsabilidad? y lo era. Mno no iba por all golpeando a la gente, a)n sin querer,
para dejarla luego tirada por el camino. "u padre siempre haba sido muy claro en ello,
aunque su madre deca siempre que haba que usar el dilogo antes que los pu,os. Pero en
este caso, cuando haba intentado dialogar, sus pu,os se haban metido en el camino, a)n
cuando l no quera. Por fin, el vampiro le se,al& una escalera por la que subi&, cuidando su
carga y en compa,a del vampiro ms joven. "e encontr& subiendo varias escaleras, hasta un
pasillo donde haban muchas puertas. !l alto vampiro de negra melena le gui&, y pronto se
encontr& en una habitaci&n amplia y algo oscura, con dos camas y muy pocos muebles.
?5ecustelo aqu? le pidi& el vampiro y as lo hio, con cuidado de no pisar y aplastar nada.
Cuando puso su cabea en la almohada acarici& sus cabellos, acomodndolos
cuidadosamente.
?(o siento? le dijo, a)n cuando saba que no poda orle. ' es que lo senta de verdad. =io al
otro vampiro acercar una jarra de agua y un vaso a la mesa al lado de la cama.
?!star bien. Porqu no regresa a la fiesta, se,or4? le pidi& y Price sacudi& la cabea con
energa.
?*o soy ning)n se,or. ' me quedar aqu hasta que est bien. (o estar verdad4 *o se va a
morir... verdad4? vio al vampiro sonrer de forma amigable. !ra agradable.
?*o, estar bien. (os vampiros nos curamos pronto. Por eso est dormido. !l sue,o le ayuda
a repararse? Price asinti&.
?3uiero saber como se llama. ;) sabes su nombre4? pregunt& y el vampiro hio memoria un
momento.
?Creo que se llama 8than. 0ueno, quis ser mejor s se lo pregunta cuando despierte.
?". ' podr presentarme. ' disculparme. *o quera pegarle? e#plic& apesadumbrado. !l
vampiro le dio una suave palmadita en el brao.
?*o se preocupe. 'o tengo que regresar abajo. !s mi trabajo.
?$e acuerdo. 'o cuidar de 8than. .is amigos estarn all, pero tendrn que esperar. Puedo
quedarme, verdad4
?Claro que s.
?@racias? le vio inclinar la cabea con esa grcil gentilea tan propia de los vampiros, antes
de salir por la puerta. "e volvi& a mirar al vampiro dormido? 8than? le llam&, y el lobo en l
repiti& su nombre, grabndolo en su memoria.
+hh, el dolorC Cuando la conciencia lo empuj& de regreso hacia el poo de los vivos,
record& su fracaso en las arenas del conocimiento. ' l, que quera que esa fuera su noche
de estudio perfectoC Haba llevado una libreta especialmente para recabar datos, para tomar
notas y compararlas con los estudios previos y ya publicados del comportamiento lobuno.
*o era justo.
(an& un quejido al abrir los ojos y se not& en su habitaci&n, en su cama...
?8than... 8thanC? escuch& su nombre, y la vo le trajo un recuerdo que le supo a peligro. =io
al enorme lobo de pie al lado de su cama, la enorme sonrisa en su rostro? 8than, ests
despiertoC
?*o... no te acerques a mC +u#ilioC 3u alguien me quite a este lobo de encimaC? grit&,
mirando preocupado la figura del lobo, pero su vo muri& al ver la cabea gacha y el cuerpo
quieto y en postura derrotada.
?(o siento... *o te har da,o, 8than. *o me mover de aqu, lo prometo. Pero no te asustes
de m. Por favor? le suplic& sin mirarle, apenas en un murmullo dolido, que le hio sentir
como un vampiro malvado y miserable. (an& un suspiro.
?3u haces aqu4 ' c&mo sabes mi nombre4? consult&, ponindose de pronto nervioso.
?!staba preocupado. 'o no quera herirte, lo juroC? dijo con vehemencia, mirndole
fijamente y como recordando, volvi& a bajar la cabea arrepentido. 8than no pudo evitar que
se le escapara una sonrisa. (obo e#tra,o...? 3uera asegurarme de que estabas bien y no
habas muerto.
?0ueno, toma ms de un par de malos golpes matar a un vampiro? protest&, ms sin enojo.
?Pero, K!res tan peque,o y frgilC? respondi& el lobo, e 8than al& una ceja molesto. @racias
por recordrselo...
?' c&mo te has enterado de mi nombre4
?.e lo dijo tu amigo.
?3u amigo4
?!l vampiro que me acompa,&... Bh, no le pregunt el suyo. 3u maleducadoC? se rega,&,
apretando el pu,o con fuera y mascullando algo que son& a 9torpe, torpe, Price: 5ecord&
que as lo haba llamado el otro lobo, cuando le estaba ahogando con su abrao.
?+s que te llamas Price? afirm& ms que preguntar y le vio mirarle con ojos enormes de
sorpresa.
?C&mo lo sabes4 !s tu poder de vampiro4? consult& ilusionado. "u gesto le hio sonrer sin
saber porqu.
?"oy un vampiro de baja clase, se supone que nosotros no tenemos poderes...
?Bh, +lbert s. 8l puede hablar con el lobo de mi hermano? empe& a contar interesado,
sentndose en la cama, olvidado del todo de su arrepentimiento, pero francamente a 8than
no le import&.
?+lbert es un vampiro4
?". !s la pareja de mi hermano. (e encontr& el a,o pasado en casa. .i hermano antes no
poda transformarse, pero cuando conoci& a +lbert, su lobo sali& de l.
?!so es muy interesante? dijo pensativo y le vio mirarle con ojos de cachorro ilusionado?
(amento decir que yo no tengo ning)n poder.
?Pero has adivinado mi nombre? protest& compungido. 8than sonri&.
?B a uno de tus amigos llamarte... cuando me estabas ahogando? de inmediato el lobo se
puso de pie y retom& su pose de perro contrito al lado de su cama.
?(o siento. >ue sin querer. *o volver a pasar.
?$e acuerdo. ;e perdono si me das un poco de agua? dijo aunque en realidad no tena sed y
le vio casi saltar de alegra, cogiendo la jarra con mpetu, tanto que parte del agua sali&
volando, por suerte en direcci&n contraria a la suya? ;en cuidadoC? le advirti&.
?". (o siento? dijo apretndola con cuidado en sus grandes manos, para acercarla casi paso
a paso al vaso y echar el agua muy despacio. 8than rod& los ojos. .enos mal que no estaba
sediento. Con el mismo cuidado acerc& el vaso a l, sin soltarle mientras beba.
?@racias.
?;e sientes mejor4? le pregunt&, dejando el vaso con todo cuidado en la mesa otra ve y
volvindose a mirarlo con aprensi&n. "in saber porque, 8than disfrut& el afecto y la
preocupaci&n que parecan sinceras en su rostro.
?", ya estoy bien, Price. Porqu no bajas a cenar4 $eben estar comiendo a esta hora? le vio
negar con energa.
?3uiero estar contigo. !sts herido y tengo que cuidar de ti.
?Pero s ya estoy mejor? insisti& y le vio mirarle con profundidad, tanta que le puso un poco
nervioso. ;ena unos hermosos ojos color caramelo, pero su mirada pareca querer
traspasarle el alma.
?+)n me tienes miedo, 8than4? pregunt& y not& la tristea en su vo. Hubiera querido decir
que no, pero senta como si no pudiera mentirle a aquella mirada.
?Mn poquito? admiti& sin alar sus ojos. "inti& el peso cuando l se sent& otra ve a su lado,
y al alar el rostro, sus ojos se encontraron con los suyos muy cercanos.
?"iento haberte hecho da,o. (o siento de verdad. *o tengas miedo? le pidi& y su gran mano
se acerc& a su rostro. 8than apret& los ojos, esperando alg)n golpe, pero solo sinti& la caricia
clida de sus dedos en la mejilla. !ra suave y e#tra,amente confortadora. +bri& los ojos y le
mir&, los suyos temblorosos a la suave lu de la habitaci&n. "e perdi& en ellos y en el afecto
que le mostraban. Haca muchos a,os que no se haba permitido esa cercana con nadie, ese
contacto. (e vio sonrer y not& que sus propios dedos se haban alado para tocarle de igual
forma, su mano movindose por propia voluntad hacia el calor de su piel? ;ienes los dedos
muy helados. ;ienes fro, 8than4? pregunt& y sus palabras resonaron en su cora&n. 5ecord&
las calles que haba recorrido en su forma nueva de vampiro, llenas de gente pero vacas de
comprensi&n, los helados callejones para dormir, el alcantarillado para ocultarse de sus
perseguidores. 3uien le mordi& y le transform& le dej& a su suerte, y el nosferatu en l luch&
con u,as y dientes para sobrevivir. $e eso haca mucho, pero el dolor segua all, el fro de
la soledad y el miedo presentes en su cuerpo. =olvi& de la marea de sus recuerdos, viendo
los braos del lobo estirados en su direcci&n, ofreciendo una promesa de calor. Fntent&
negarse, huir, pero se hall& entregando su dolor, pena, miedo y fro al calor de ese pecho, al
latido fuerte e intenso de otro cora&n. ' Price lo envolvi& entre ellos, apretndole suave y
confortadoramente contra s, como s no hubiese nada ms precioso en el mundo para ser
protegido que l.
+hh, 3u bien se sentaC !l cora&n de su vampiro se agitaba como un pjaro contra su piel.
", ahora estaba seguro. !ra suyo, su vampiro, aunque le haba conocido de una forma un
poco accidentada. 0ueno, =ince tambin haba encontrado a +lbert escondindose en su
casa, as que no importaba. .ir& el rostro escondido en su pecho y vio que tena los ojos
cerrados. 3uis tena un poco de sue,o. (e sostuvo con cuidado, mecindole suavemente,
cantndole la canci&n que su madre sola cantarle cuando era peque,o. 0ueno, a veces,
cuando haba estado enfermo con mucha fiebre, le haba pedido que se la cantara, pero bajo
la promesa absoluta de no contrselo a nadie. 'a era un lobo adulto, no un cachorrito. Pero
era distinto cantrsela a alguien ms, sobre todo si era a su vampiro. (e meci& all, acunando
su sue,o, hasta que al volver a bajar la mirada para verle, not& que sonrea.
?Pens que estabas dormido? dijo mirando los ojos que se alaron desde su pecho. 3u color
era4 +h, s, un gris brillante como la luna llena.
?!staba oyendo la canci&n. *adie haba cantado para m antes? oy& decirle. *o poda
creerlo.
?Por qu4 ;u madre nunca te cant& para dormir4? le vio bajar la mirada, pero haba podido
ver el dolor en sus ojos. +lbert le haba contado que algunos vampiros no tenan padre ni
madre, que nacan porque enfermaban del mordisco de otro vampiro y se transformaban.
8than le haba dicho que era de baja clase, eso significaba que no tena familia? (o siento.
;endra que haberlo recordado? se disculp&. !l vampiro lo mir& frunciendo el ce,o
confundido? Pero yo puedo cantar para ti siempre que no puedas dormir? ofreci&. +s al
menos sabra que poda hacer algo por l. (e vio sonrer.
?*o hace falta, gracias.
?(o har, lo prometo, 8than. 'o no te voy a abandonar? dijo apenado, pensando si sera
como +lbert, vendido por quin lo convirti&. (e apret& contra s otra ve, con cuidado de no
ahogarle. !ra una cosita peque,a y tendra que tener mucho cuidado de all en adelante. (e
sinti& empujarle con la misma fuera que el ala de un pjaro, y soltarse de su abrao.
?Por qu dices eso4 3u sabes t)4? reclam& con vo enojada, pero sus ojos eran muy tristes.
+cun& su mejilla fra con la mano.
?3u pasa, 8than4 *o llores? le pidi& apenado.
?3uin... quin est llorando4? protest&, mientras las lgrimas se escurran de sus ojos.
3uin se crea que era ese lobo torpe, enorme, est)pido e idiota4 3uin se pensaba que era
para meterse en su vida, su mente, su cora&n4 Por qu su calor, sus gestos y palabras
despertaban un dolor tan profundo en l, una a,orana que crey& tan perdida que ya no
e#ista4 Pero all estaba, el dolor, las lgrimas, recordndole lo dbil que era. "ollo& sin
fueras para detener los sentimientos, los dedos clidos acaricindole, incitndole a caer en
la trampa de su confort, de su abrao, de su compa,a. ' l, como el idiota perdido que era,
cay& de cabea. "e apret& solloante al pecho del lobo, dejando la pena escapar por sus ojos.
Porqu ahora, de entre todos los momentos4 3uis porque el dolor fsico en sus heridas
haba desatado el recuerdo de las otras ms profundas que nunca haban sanadoL la soledad,
la miseria, el hambre de afecto, la llamada de au#ilio nunca atendida. ' ahora llegaba,
muchos a,os tarde... demasiados.
?;e odio... te odioC? se quej& por entre su llanto, golpendole con sus pu,os enfadados,
adoloridos por la espera interminable, por las eternas noches en que clam& su grito al cielo
oscuro, y el viento fro le devolvi& el eco de su soledad? (legas tarde... ;e odioC
?(o siento? oy& su vo apesadumbrada y eso solo hio aumentar su llanto. Porque esas
simples palabras, su simple disculpa le hio perdonarle de inmediato, borraron la sombra
oscura de su alma y dejaron entrar la lu que tanto tiempo haba esperado para atravesar sus
ventanas. 0risa fresca que le traa olores de primavera, de cosas nuevas por vivir.
Promesas... pero KHaba esperado tanto para orlasC "e abra& con ms fuera y el lobo le
cobij& en su calor, cunto, quis horas, quis a,os, quis solo minutos.
?9.i dulce vampiro
con ojos de luna llena,
cierra tus prpados y sue,a
con nubes de afiro.
!ntre mil flores de colores,
con lluvia de besos
y rayos de soles,
cuando te duermas, so,ars.
' si despiertas
con miedo o fro,
entre mis braos
tu abrigo hallars.
Como la alondra
que vuelve a su nido
caliente y seguro,
tendrs siempre en m tu hogar.:
By& su vo cantarle en una dulce tonada que hio ecos en su cora&n, como la brisa hace
ondas sobre el agua. "upo que eran para l, su vo, su canto, sus palabras, regalos de amor
que le hicieron sentirse de pronto vivo y agradecido.
(os versos salieron de l, como brota el agua a veces de una vertiente escondida. !ran para
su vampiro, para curar el dolor de sus heridas. *o saba qu o quin le haba lastimado, pero
l tena que curarle. Para eso haba ido all esa noche, para hallarle y entregarse a l. "i
estaba herido le curara, si no poda caminar, cargara con l. !ran uno y eran todo. 'a no se
separaran nunca ms. (e abra& largamente, acariciando su pelo, acunando su cuerpo fro
contra s. Por fin 8than pareci& calmarse, quedndose apretado a l en silencio, alando de
pronto la mirada, sus grises ojos de luna h)medos pero ms claros, ms brillantes, como
brillan las piedras cuando la lluvia les moja. + Price le pareci& la cosa ms bella que haba
visto nunca.
?;ienes unos ojos muy bonitos? no pudo evitar e#clamar y le vio hacer un gesto algo
avergonado? "on hermosos como la luna llena.
?3u cosas dices.
?!n serio. 'o amo la luna. Pero a ti te amo ms? asegur&, cogiendo su rostro con ambas
manos para alarlo hacia el suyo. !l vampiro le mir& con sorpresa.
"u cora&n comen& a latir desbocado. Pero qu pasaba con ese lobo loco4 *o le conoca de
nadaC *unca se haban vistoC Pero su cora&n no haca ms que martillear en su pecho,
inundndole de ilusi&n, 3u pasaba con l4
?;) me amas, 8than4? pregunt& con esos enormes ojos color caramelo, que derretan su
cora&n. !ran bellos y sinceros, y se encontr& perdido ante el afecto que se desprenda de
ellos, anhelndole todo para s. Cunto tiempo haba esperado por algo as4? *o llores. ;)
me amas, verdad4? le oy& decir y se dio cuenta de que lloraba y asenta en silencio? *o
llores? susurr&, dejando peque,os besos en sus labios, suaves como alas de mariposas que
calmaron su inquietud y borraron sus dudas. "e al& por entre su pecho y se aferr& a l con
mpetu, buscando profundiar el beso. Pero calcul& mal la fuera, y si bien consigui&
apresar sus labios, el lobo se tambale&, ya que a)n estaba sentado a la orilla de la cama y se
cay& de espaldas al suelo con su cuerpo sobre el suyo. 8than pudo or claro el golpe de su
cabea chocar contra el suelo, y sinti& dolor como s hubiera sido un golpe en la suya.
?PriceC !sts bien4 (o siento muchoC? se disculp&, bajndose de l y sentndose a su lado
con premura para mirar su cabea.
?+uchC? le oy& e#clamar y not& que su rodilla le haba apresado parte de su melena de le&n
y se la tiraba con cada movimiento. !so le record& algo, y no pudo evitar echarse a rer.
?(o siento, lo siento? deca mientras se carcajeaba.
?3u torpe eres, 8than? le rega,& el lobo, mirndole con seriedad, pero luego se ech& a rer
tambin. 8than se dej& caer en el suelo a su lado, apoyando la cabea en su pecho con una
sonrisa, mientras escuchaba la risa grave y profunda estremecer su piel. !ra la gloria. "inti&
la gran mano del lobo apretar su cabea contra l. (a mitad de su cuerpo a)n permaneca en
la cama, mientras la mitad cada reposaba en el suelo, pero no se movi& para levantarse.
?!sts c&modo, Price4? pregunt&, alando la cabea y apoyando la barbilla en la mano del
lobo para mirarle. (e vio sonrer ampliamente.
?"i t) lo ests, yo lo estoy.
?!res muy torpe, lo sabas4? le molest& y le vio sonrer a)n ms. "u lobo travieso...
?Pero no soy el )nico? 8than se acerc& y le dio un beso en los labios, solo uno, volviendo a
apoyarse contra su mano para mirarle. (e vio saborerselos con ganas? APuedes darme ms,
8than4
?Cuntos quieres4
?;odos? su respuesta le hio sonrer. "e acerc& a sus labios y sopl& su aliento sobre ellos.
Price intent& atraparle.
?;endrs que darme los tuyos tambin. "olo a m.
?"on solo para ti? le asegur& con mucha firmea. 8than envolvi& su cabea antes golpeada,
entre sus braos con cuidado, acunndola para besarle con ganas, enroscando su lengua
contra la suya, que le busc& tibia y ansiosa. "inti& el aliento caliente y la saliva espesa que
compartan y la hall& deliciosa. "u delicioso lobo...
?;odo mo... !res solo mo? y le dio un beso con cada palabra.
?"... s. "oy tuyo? dijo Price y al& los braos para apresar su cabea y sus labios contra los
suyos. 8than se dej& atrapar. *o quera nada ms en el mundo.
Cuando el beso se hio intenso de necesidad, subieron a la cama y se buscaron entre
caricias. 8than hundi& su mano bajo la ropa de Price, hallando la carne de su miembro
afiebrada y palpitante de deseo, h)meda, escuchando el jadeo ansioso del lobo. (e liber& de
su prisi&n de tela y le lami& con su lengua, buscando la hinchada vena y clavndole all sus
colmillos. !l gemido de Price llen& sus odos y sus sentidos se llenaron de placer al sentir el
sabor de la sangre y el semen meclados en su boca. (e tom& unas pocas succiones llevarle
al orgasmo y el caliente lquido e#plot& en su lengua. (e bebi& con ganas y le solt& solo
cuando el pene sali& flccido de su boca. (os ojos de Price le miraron h)medos y brillantes
del reciente placer, los colores en su rostro encendidos sensualmente.
?!res un lobo tan hermoso? no pudo evitar decirle, enamorado de su bellea y su sabor en
los labios. Price al& una mano y acarici& su rostro.
?;) tambin? le dijo con vo cansada y satisfecha. "inti& sus dedos bajar de su rostro al
cuello, por su pecho y detenerse en el bulto endurecido entre sus piernas. (an& un gemido
hambriento al sentir su calor a)n tras la tela. Price se sent& y le acerc& a s. 8than sinti& la
caliente piel palpitar contra la suya.
?*o quiero herirte, pero necesito marcarte. ;engo que morder tu cuello? le susurr&,
besndole all sin que su mano dejara de tocar su erecci&n, e 8than lan& un gru,ido de
deseo.
?Halo.
?;e doler? oy& su vo preocupada y al mirar sus ojos vio amor en ellos. !so le hio sentir
muy especial, amado y protegido.
?Halo, Price. Confo en ti. Hame tuyo? le pidi& y vio sus pupilas oscurecerse de deseo.
(os dedos del lobo aferraron su miembro y le apretaron con suavidad, acariciando la
h)meda cabea. 8than se mordi& los labios y no pudo evitar el gemido que sali& de l? .s
rpido? pidi&, y de inmediato la mano del lobo empe& a moverse, agitndole a un ritmo que
pronto se aceler&, acercndole al borde del orgasmo. "e sujet& de l, presa del placer,
gimiendo mientras se sacuda en su mano y en el momento que tocaba el borde, sinti& los
caninos de Price clavarse en su piel y morderle con fuera. @rit& y en ese mismo instante se
derram& en su mano.
*o solt& su cuello hasta que los caninos se retrajeron, cerrando la herida con suaves
lametaos. !ra suyo, su vampiro estaba marcado como suyo. +part& la mano mojada con su
semen, para lamerla con ganas. (e gustaba el sabor de 8than, fuerte, intenso, suyo. "u
vampiro, por fin. "e dej& caer de espaldas sobre la almohada, atrayndole contra s, y le
sinti& reposar cansado contra su pecho. "onri&. $e ahora en adelante tendra que aprender
nuevas formas para complacerle y hacerle feli, tanto en la cama como fuera de ella. ;ena
algunas ideas que incluan flores, coraones de papel con poemas y paseos por el bosque
con una cesta de pasteles. Para las cosas en la cama tambin tena ideas, pero esas las quera
compartir con l antes, ya que no quera hacer nada que le pusiera en peligro. !ra su
vampiro y nunca le hara da,o, si poda evitarlo. (e abra& contra s con fuera y se alegr&
cuando sus braos tambin le rodearon.
?;e amo? le oy& decir muy bajito, casi como para que no le oyera. "onri&.
?'a lo saba? le dijo de igual forma. "us ojos se alaron y le miraron.
?!ngredo? dijo alando una ceja como si estuviera molesto, pero su sonrisa le delat&. Price
acarici& su pelo.
?*o soy engredo. "olo saba que te encontrara esta noche. He estado esperndote todo un
a,o? aclar&. =io los ojos de luna de su vampiro temblar llenos de emociones.
?'o te he esperado mucho ms? oy& su vo con un dejo de tristea, pero cuando se acerc& y
le bes&, supo que ya no lo estaba? ' por fin ests aqu.
?"iento haber tardado. *o volver a marcharme? se disculp&. (e oy& rer y disfrut& su beso
h)medo, cansado y satisfecho? ;e amo, 8than.
?'o a ti ms, Price? bueno, le dejara ceder por esta ve. Pero se lo demostrara todos los
das, lo mucho que le amaba.
Cuando regresaron a casa, la familia le dio la bienvenida al nuevo miembro. Price estaba
feli de ver que su lindo vampiro se adaptaba bien, y se rea y sonrea mucho ms. !so
llenaba su cora&n. ;ambin apretarlo siempre contra s, sentarle en su regao para darle de
comer alguna ve cuando estaban solos o cantarle sus canciones para dormir, ayudarle a
ponerse el piyama o limpiarle despus de que hacan el amor. Cada peque,a cosa encenda
una nueva lu en los ojos de su vampiro y eso lo llenaba de felicidad. +hora por las tardes,
8than siempre estaba a la salida de la herrera, esperando por l para volver juntos a casa.
!l padre de Price le haba conseguido un empleo de medio tiempo en la tienda de libros y
revistas del pueblo, as que por lo menos ahora poda ayudar con algo de dinero en casa. "u
nueva familia era encantadora y se senta muy bien de tener a otro vampiro bajo el mismo
techo, con quin poder hablar de sus asuntos. ' sobre todo tener a su lobo, a quin amaba
cada da ms. + veces por las noche, se despertaba en medio de la oscuridad solo para
quedarse observndole largamente, agradecido de haberle conocido, mordindose de callada
risa al recordar como se haban conocido, la torpea y la dulura de su amado que se haban
ganado tan rpidamente su cora&n. ' le acariciaba cuando le oa llamarle en sue,os,
besndole con suavidad, para abraarse a su pecho y cerrar los ojos, acunado por su
confortable latido y su calor.
(os das de soledad y fro haban pasado. +hora ya no caminaba solo por la vida. ' con
suerte, no volvera a estarlo nunca ms.
El Cac*orro la Bestia
$arnel baj& las escaleras en direcci&n al sal&n mayor. Haba estado nervioso al comieno de
la jornada de la gala, sin saber que esperar de la concurrencia lobuna. "e oan tantas cosas
sobre ellos, que crey& al principio que su vida estara en peligro, y eso no ayudaba mucho a
controlar a su nosferatu. !ra su segundo a,o vamprico, y la verdad es que a)n le costaba no
ceder al miedo y entrar en nosferatu, aunque si consegua calmarse, finalmente la
transformaci&n ceda. (a mayora de los vampiros al alcanar su edad, dejaban de entrar en
la fase ms desatada y primitiva de su naturalea, pero para l a)n estaba demasiado
presente.
+unque ver al enorme y rubio lobo acunar con tanto cuidado a 8than, y desear quedarse a su
lado, calm& en algo su ansiedad. Pareca que no todos los lobos eran una raa violenta y
peligrosa. By& los sonidos de la cena cuando llegaba al pie de las escaleras. 5espir& hondo
un par de veces para calmar a su demonio interior.
?!st bien, lo tienes dominado. =e por ello y deja en alto el nombre de tu casa? se anim&
apretando el pu,o con fuera, para bajar el )ltimo escal&n y pisar el suelo que lo llevara a
su destino? ;) puedes...
?"iento interrumpir tu charla, pero d&nde est el meadero4? oy& una vo a su espalda. *o
pudo evitar dar un salto asustado, y el nosferatu dentro de s chill& aterroriado.
?PeligroC PeligroC? gritaba. =olvi& la vista, sus ojos activados para captar las posibles rutas
de escape, su cuerpo listo para la pelea, cuando vio a un lobo de escaso porte que le miraba
alando la ceja.
?3u4 *o tenis donde echar una meada, entre tanto lujo4? oy& que le deca. !l nosferatu en
l calcul& que no era una amenaa primordial y desactiv& el equipo de lucha, pero dej&
grabado el mapa de rutas de salida, solo por si acaso? 3u te pasa en los ojos4? consult&
dando un paso hacia l. $arnel retrocedi&.
?+ljate? le advirti&, consciente de la ansiedad nerviosa del nosferatu, capa de activarse de
nuevo ante cualquier estmulo. !l peque,o lobo rod& los ojos.
?=aale. Pero sintate un rato, o t&mate una pastilla. !sts tan eriado, que parece que hayas
salido de ver una peli de terror en una casa llena de fantasmas? sus palabras le hicieron
sonrer de pronto. "us ojos se desactivaron y pudo notar la figura del lobo. +l parecer era
muy joven, ya que su piel a)n tena la tersura de la adolescencia, aunque no saba si los
lobos vivan tanto como ellos y su aspecto cambiaba muy lentamente. "us grandes ojos de
color verde gris, le parecieron traviesos. ;ena el pelo rojio y revuelto, como un mar de
llamas encendidas. ' a diferencia del lobo que haba dejado en las habitaciones junto a
8than, ste era mucho ms peque,o y menos fuerte. !n una palabra% +menaa 7. "onri& con
ganas, la bestia dentro de s calmada por completo, quis solo algo curiosa. (e vio mirarle
con la misma curiosidad.
"hasty mir& al alto y elegante vampiro frente a l, los ojos antes de un intenso carmes
furioso, ahora de negro terciopelo. !ran bonitos 1los de rojo fuego tambin2 y aunque era un
poco plido, le pareci& atractivo. *o pareca tan pomposo como los que haba visto al llegar,
por los que su ta y su hermana aullaban y babeaban nada ms entrar al sal&n principal. 8l se
haba escapado, harto de servir de acompa,ante a las fminas de la familia. Por qu su padre
haba tenido que enviarle para cuidar a las hormonas andantes de su parentela4 ;ena cosas
mejores que hacer, como jugar a
1H2
<arcraff <olf o echar un partido de baloncesto con sus
amigos. !s que no poda uno ser un lobo adolescente normal e irresponsable, como
cualquier otro4 Pero bueno, ahora mismo no lamentaba mucho la decisi&n de su padre. .ir&
la oscura chaqueta del vampiro, tan igual a muchos de los que haba visto por all siguiendo
a grupos de lobos, que se ajustaba muy bien a las estiliadas formas de su cuerpo. ", le
gustaba. "iempre haba sabido que le gustaban ms los machos que las hembras, y a)n
cuando no haba alcanado su forma madura de lobo 1la tonta de su hermana le molestaba
cuando se transformaba, llamndole 9cachorrito de leche:2 que se prepararan, pues estaba
decidido a ser el ms grande, masculino y rompe coraones lobuno del siglo. ' all tena
donde empear a probar sus dotes de casanova.
$arnel le vio sonrer con pcara maldad, y al& una ceja A3u pretenda ese mini lobo4
?!ntonces? dijo dando un paso ms hacia l y $arnel no se movi&, vindole a pocos
centmetros de su cuerpo? !stabas por aqu de charla... ', ests solo esta noche4
?"oy un sirviente. !stoy trabajando? aclar&. "e qued& at&nito cuando el lobo al& una mano
y cogi& uno de los botones de su chaqueta, acaricindole entre sus dedos.
?"uena aburrido. $e seguro preferiras otro tipo de 9actividades:? dijo mirndole con esa
sonrisa invitadora? "i quieres, puedo hacer un tiempo en mi agenda y jugar contigo...
?*o gracias. ' le agradecera mantener sus arpas fuera de m? respondi&, dndole un
manotao a la mano que haba abierto el bot&n de su chaqueta, e iba por el de su camisa. !l
mini lobo le mir& con gesto de sorpresa, retirando la mano.
?=amos, reljate un poco... Hey, c&mo te llamas4
?"i lo desea, le guiar de regreso al sal&n de la fiesta. B tal ve, prefiera hacer una visita a
los servicios de caballeros. Pens que tena cierta incomodidad que requera de inmediato
alivio? dijo con toda intensi&n y le vio abrir la boca para repetir sus palabras confundido por
un momento, para echarse de pronto a rer.
?=aya, que forma ms cursi de decir que necesito echar una meada... +h, pues es verdad. .e
haba olvidado? acept& cuando dej& de rer. !#tra,amente, en ve de sentirse molesto,
$arnel se senta divertido. !ra agradable la risa franca y abierta del peque,o lobo, a)n
cuando su lenguaje estuviera lejos de ser educado.
?"game por aqu? se,al& un pasillo a su iquierda.
?Bye, no me trates de usted. $e seguro eres ms viejo que yo, as que...? le mir&, como
sopesando su reacci&n ante sus palabras. $arnel le mir& sin gesto? =aya, mi hermana me
hubiese arrancado la cabea por decir eso...
?"i le place acompa,arme, se,or? pidi&, volviendo a se,alar el pasillo, dando saltos de
victoria en su interior al orle lanar un bufido molesto y rodar los ojos.
?=ampiro estirado? le oy& mascullar mientras le segua y fingi& no haberle escuchado,
sonriendo a su pesar.
Cuando sali& del ba,o, temi& que el vampiro se hubiese marchado, pero a)n le esperaba en
el pasillo. "e acerc& a l contento.
?=aya, eso me ha sentado de maravilla. *o veas como llenan esos refrescos dobles? dijo,
cubrindose la boca antes de eructar. "u hermana siempre deca que no tena modales, pero
los tena, solo que eran una perdida de tiempo. !l vampiro mir& hacia otro lado? Mps, lo
siento...
?(e guiar de regreso al sal&n? volvi& a decir.
?Porqu no me llevas a un lugar donde podamos conocernos mejor4? intent&, recordando la
frase que le haba odo decir a !ton la otra ve, cuando se encontr& con $alila en el parque.
0ueno, la loba le dio una buena bofetada, pero esperaba tener ms suerte. =io que el
vampiro le miraba con gesto de piedra y empe& a temer por su mejilla? '... tu nombre era4?
intent& a la desesperada para salvarse, pero vio que no estaba funcionando. !n cualquier
momento el vampiro se lanara sobre l y comenara a darle aotes en el culo... 0ueno,
eso no sonaba tan mal? 'o soy "hastian. .e llaman "hasty, ya sabes para ahorrar saliva?
intent& bromear, pero el rostro del vampiro pareca tallado en granito. +l& la mano
ofreciendo un saludo? .ucho gusto...? le oy& dar un suspiro profundo y rodar los ojos
e#asperado.
?$arnel? respondi& sin coger su mano, y la baj&.
?Parece nombre de chica? no pudo evitar decir y vio el enojo chispear en sus ojos. .ierda,
ya la haba fastidiado de nuevo? Pero es muy bonito. +lgo femenino, pero no parece de
perro, ni nada de eso...
?+l contrario que "hasty? le oy& mascullar y le mir& at&nito. Como dndose cuenta de sus
palabras, el vampiro apart& la mirada avergonado. !l lobo se parti& de la risa.
?=aya, $arnel. ' yo que pensaba que eras de piedra. ;ienes un carcter del demonio? dijo
mientras se rea. !l vampiro le mir& primero con asombro y luego vio una sonrisa aparecer
en su rostro.
?.ejor eso, a ser un cro maleducado.
?Hey, mejor eso, a ser un viejo cascarrabias...
?Peque,o lobo grosero...
?=ampiro ms estirado que porta ligas de elefanta pre,ada? contraatac& y logr& su victoria al
verle lanar una sonora carcajada. !so le anim&.
?;u creatividad lingEstica me deja sin palabras? admiti&, y aunque no entendi& ni la mitad
de lo que dijo, comprendi& que haba vencido.
?Bsea que yo gano? tradujo y le vio sonrer, una blanca y hermosa sonrisa donde vio sus
colmillos. (e parecieron muy se#ys.
?Por esta ve.
?' mi premio4? consult& acercndose un paso a l, pero el vampiro le se,al& el pasillo por
donde haban venido.
?Mn billete de retorno directo a la gran gala? ofreci&. "hasty puso morros.
?3u aburridoC 'o esperaba algo ms... personal? sonri&, moviendo las cejas con intensi&n.
!l vampiro al& la suya y le mir& como su madre haca cuando le peda dinero? =aale. Pero
no pienso regresar a ese lugar A;ienes idea de lo mucho que cuesta evitar que mi hermana y
mi ta se lancen sobre una presa desprevenida4 $eberan haber puesto un cartel en la puerta
de 9*o se admiten locas de amor: !stamos hablando aqu de un terrible peligro p)blicoC?
protest& enfadado. (o haba dicho muy en serio, pero el vampiro empe& a rerse con ganas?
Hey, no tiene gracia, $arnel... *o sabes lo estresante que esC Cada minuto que pasa, pierdo
ms mi juventudC? pero eso empeor& la risa del vampiro. *o pudo evitar contagiarse de ella.
"e senta bien. !l chico era muy divertido. (e mir& mientras rea, su elstico cuerpo, su
juvenil frescura... Mn algo se despert& en l, que no haba sentido antes. Crey& que era el
nosferatu, pero le hall& totalmente aplacado por la presencia del joven lobo. "e toc& con
disimulo los colmillos y not& que palpitaban, pero no tena hambre. !ra un apetito distinto,
una urgencia diferente. 3uiso regresar a casa y hablar con 0eto, su creador, quin le haba
despertado con su mordisco, pero el viejo vampiro siempre le deca que aprendiera por s
mismo, que se dejara guiar por sus instintos, que ellos le ense,aran las cosas que necesitaba
aprender. Como controlar a su nosferatu, por ejemplo. (as encas le dolieron, viendo la
figura cercana del lobo, notando el calor que irradiaba su cuerpo, el aroma tan igual a como
olan los rboles del jardn cuando ayudaba a 0eto a podarles, hojas, hierba, tierra calentada
por el sol. "in saber como, descubri& que se haba acercado de improviso, atrapndole en
sus braos y rugiendo hacia l, mostrndole sus colmillos.
?Hey, 3u te pasa4 3uieres jugar ahora4? oy& que le preguntaba y no vio miedo en sus ojos.
!l nosferatu en su interior le urgi& al mordisco, hambriento por probar su sangre. $arnel le
solt& y se apart& con prontitud? 3u pasa4
?+... aljateC? dijo cubrindose la cara y respirando agitadamente para intentar controlarse.
"u nosferatu le quera, y su imperiosa necesidad gritaba en todos sus sentidos... necesitaba
recuperar la cordura.
?$arnel4? oy& su vo, y para su horror vio que el lobo se haba acercado, tanto que su olor le
inund& la nari.
?*o...? intent& alejarse, sintiendo los colmillos bajar punantes y gotear de saliva espesa.
?+limentoC? grit& el nosferatu con vo imperiosa y $arnel no supo como acallarle. "e vio
atrapando de nuevo al lobo, su grito de sorpresa y el leve forcejeo entre sus braos. +bri& la
boca y le mostr& sus colmillos, lanando su bufido hambriento.
"hasty se asust& al verse inmoviliado por el cuerpo del vampiro, sus ojos haban vuelto a
ponerse carmess, su oscura melena eriada y aquellos gru,idos guturales que salan por su
garganta le dijeron que le quera como su cena. *unca haba pensado en la posibilidad de
ser drenado por un vampiro al venir a la fiesta, y no le estaba gustando nada la idea. +s que
hio lo )nico que poda hacer. ;ransformarse. (a forma ms peque,a del peludo lobo pudo
escurrirse con facilidad del agarre mortal del hambriento vampiro, saltando al suelo y
mostrndole sus propios colmillo con rugido de amenaa. !l vampiro se qued& un momento
at&nito tras perder a su presa, por lo que "hasty aprovech& de dejar clara su intensi&n de que
no era la cena de nadie, saltando hacia l y dndole un buen mordisco de advertencia en su
pierna. !l vampiro grit&, un chillido estridente que le desgarr& los tmpanos y le hio sacudir
la cabea. Cuando mir&, le vio empear a transformarse. (os largos dedos en sus manos se
transformaron en afiladas garras y su rostro se contorsion& en una mueca e#tra,a, los
colmillos blancos y enormes, e#puestos en su totalidad, los ojos grandes y enrojecidos ms
a)n, que le miraron llenos de miedo, la pupila dilatndose y contrayndose enloquecida.
;ena todo el aspecto de un animal salvaje y aterroriado, atrapado por un grupo de
caadores. Casi pudo ver las venas aules engrosarse y palpitar en su rostro y manos. =io su
pecho subir y bajar con la frentica respiraci&n, la melena eriada y desordenada. "e puso
casi a cuatro patas y dio ese chillido estridente en su direcci&n otra ve, como
amenandole. "hasty agit& las orejas.
?PeligroC .iedo, miedo... !scaparC? oy& claramente, a)n cuando no supo de donde vena la
vo. =io que el vampiro enloquecido se trepaba al muro, agarrndose a l para subir rpido
como una ara,a hasta el techo y dar vueltas enloquecidas all? !scaparC !scapaaaarCC
(e vio saltar al suelo lejos de l y lanarse desesperado contra una ventana. !l cristal estall&
en mil fragmentos y vio salir despedida la figura del vampiro al e#terior. "e acerc&
presuroso en su forma de lobo al lugar y vio los rastros de sangre que haban quedado en el
marco y los vidrios astillados. $io un quejido apenado y salt& por la ventana hacia la
oscuridad, siguiendo el rastro de su sangre.
Corri& tras l, viendo claro los charcos de sangre oscura que iba dejando el vampiro a su
paso. *o saba que haba pasado a)n muy claramente, pero entendi& que le haba asustado
de alguna manera que le haba hecho sentir en peligro y cambiar de forma. "e vea que
estaba mal herido y quera encontrarle para que no se hiciera ms da,o. Corri& con todas sus
fueras cuando su nari le dijo que el olor del vampiro estaba cerca. !ntr& en una especie de
laberinto de setos altos, detenindose aqu y all para olfatear la sangre. $e pronto oy& el
movimiento cercano. ;rot& con cuidado de no hacer demasiado ruido y vio al vampiro
enganchado entre las ramas de un seto abierto, desesperado por intentar liberarse,
clavndose las ramas y hacindose ms da,o en su intento de huir. "e acerc& con lentitud,
detenindose cuando el vampiro not& su presencia, revolvindose a)n ms frentico.
?*o... no... PeligroooC? le oy& dar ese chillido estridente y aterroriado? HuirC HuirrrrC
(an& unos suaves quejidos lobunos, al ver la sangre en las abiertas heridas brotar y
empapar las ramas. "e acerc& al frentico vampiro que no dejaba de moverse y chillar, y
lami& el troo de piel herido que hall& ms cerca, con lengua suave. +nte su toque, los
chillidos del vampiro bajaron de volumen y sus orejas dejaron de pulsar. "igui& lamindole
y poco a poco el vampiro enloquecido dej& de moverse, aunque a)n le miraba asustado,
gru,endo por lo bajo, casi como en advertencia. "hasty us& su hocico para desenganchar las
ramas ms pr&#imas y liberarle. !l vampiro cay& sobre la hierba agotado y herido, e hio un
intento por escapar de l, pero "hasty se ech& en el suelo inm&vil, mirndole con ojos de
cachorro bueno y obediente, y consigui& que se calmara. Cuando pens& que estaba algo ms
tranquilo, volvi& a ponerse de pie, para lentamente acercar su hocico a una de sus garras y
lamerla con suavidad, volviendo a echarse en el suelo, esta ve ms cerca de l. !l vampiro
le mir&, dando una especie de ronquido profundo, casi como un ronroneo y lo tom& como
una se,al para volver a acercarse y lamerle. (as heridas en su cuerpo poco a poco
comenaron a cerrarse y quit& las astillas y troos de ramas que pudo hallar. !l vampiro se
ech& en el suelo inm&vil y se dej& atender.
?$olor... miedo? oy& decir cuando se acerc& a su rostro. (an& un suave llantito lobuno y le
lami& el rostro con calmante suavidad. !l ronroneo del vampiro pronto se convirti& en un
sonido placentero. "e acost& a su lado, sin dejar de acariciarle con su lengua y cuando le
not& del todo calmado, volvi& a su forma humana. !l vampiro tena los ojos cerrados y no se
movi&.
?$arnel? susurr&, tocando su rostro fro e inm&vil? $arnel...
By& su nombre por entre la oscuridad de sus sentidos. 3uin le llamaba4 !l nosferatu se
retorci& dentro de l, a)n un poco asustado. !l mundo era un lugar enorme, oscuro, fro,
lleno de peligros. +l menos all estaba a salvo. Pero la vo que le llamaba le urga a salir, a
volver.
?.iedo... oscuridad...? se quej&, temblando asustado. Haba dolor all afuera, haba cosas
grandes y peligrosas? .iedoo...
?;ranquilo, estoy aqu, $arnel. *o dejar que nada te haga da,o? esa vo otra ve. "u tono
clido le hablaba de protecci&n, de seguridad. !l nosferatu estaba vido de ello, pero tena
miedo. !l mundo al que haba despertado le asustaba, tan lleno de ruidos que le ensordecan,
olores que no entenda, luces que cegaban sus ojos. "inti& que un calor cercano le envolva,
apagando poco a poco el miedo en su cuerpo? !stoy aqu. =uelve a m? le pidi& y el
nosferatu dese& regresar a su protecci&n.
"hastian vio como las garras se retraan en sus manos y su rostro volver a tener el aspecto
del vampiro que haba visto al pie de la escalera. "u ropa estaba enteramente desgarrada,
cubierta de sangre, polvo y ramas, pero ya no pareca el animal salvaje y asustado de antes.
+carici& su pelo revuelto con suavidad, apretando la cabea escondida en su pecho contra
s. !l vampiro se abra& a l y le sinti& temblar levemente.
?;ranquilo, ya pas& todo. !sts bien4? le pregunt& cuando al& los ojos hacia los suyos y vio
que haban recuperado su negra y aterciopelada te#tura. (as heridas en su rostro empearon
a cerrarse y ya no haba rastro de los largos colmillos.
?(o siento? dijo en un ronco murmullo. "hasty sonri&.
?0ueno, todos tenemos das malos. B noches. Puedes decirme lo que pas&4? pidi&, vindole
incorporarse con esfuero para sentarse a su lado, pasndose una mano por el rostro.
?!ntr en fase de nosferatu. !s una fase primitiva de nuestros primeros a,os vampricos.
+parece cuando nos sentimos amenaados por algo. !s... difcil de controlar? admiti& con
vo y gesto avergonado? (o siento... yo... .e ha sido muy difcil controlarlo, hasta ahora.
?*o pasa nada. (o entiendo, en serio. 'o tambin me pongo de los nervios algunas veces?
intent& animarle y le vio sonrer a medias.
?!sts desnudoC? protest& dndose cuenta por primera ve. "hasty arrisc& los hombros.
?0ueno, cambi a mi forma de lobo y eso no incluye la ropa? el vampiro se quit& la
desgarrada chaqueta y se la alarg&. (os hombres lobo por lo general no tenan problemas
con su desnude, pero uno no iba por ah ventilndose las carnes desvergonadamente en
p)blico, como su hermana sola gritarle cuando olvidaba ponerse ropa interior tras volver de
correr con sus amigos en su forma animal. +cept& la chaqueta y se cubri& como pudo. =io
que el vampiro le estaba mirando, al parecer muy interesado por su cuerpo, pero apart& los
ojos cuando le pill& contemplndole. "hasty ahog& una risita. "u vampiro pareca un poco
hambriento. "e acerc& a l con toda intensi&n y lo atrap& a medias contra el seto, dejndole
sin salida. $arnel le mir& con los ojos muy abiertos y la respiraci&n algo agitada, y el lobo
pudo sentir el aroma de su e#citaci&n.
?0ueno, ahora que ests ms tranquilo, supongo que podremos conocernos mejor. ' ya que
he podido controlar a tu nosferatu, creo que podramos intentar hacer un par de cosas
peligrosas? dijo lamindose los labios, mientras miraba los suyos. (e vio tragar saliva con
fuera.
?*o creo que sea buena idea, "hastian...? intent& decir, pero los colmillos que empearon a
crecer y a e#ponerse le traicionaron. !l lobo les ro& con un dedo y sonri& al orle lanar un
gemido involuntario.
?"e me ocurren un par de cosas? dijo bajando hasta la altura de su rostro y soplando su
aliento sobre sus labios. (e oy& volver a lanar otro gemido, esta ve ms ansioso. (ami&
con toda intensi&n sus colmillos, probando el sabor de la espesa saliva que goteaba por
ellos. !l vampiro volvi& a darle uno de esos bufidos suyos, pero ya no de miedo sino de
hambre. !l lobo introdujo la lengua en su boca y busc& la suya, que se enrosc& ansiosa y
posesiva en la suya. "e apret& contra l, besndole con ganas. !l vampiro rugi& dentro del
beso y "hasty sinti& claro el colmillo que penetr& su lengua. !ra doloroso, pero le sinti&
succionar de l, el dolor se transform& en placer y el movimiento de su cuello mientras
beba de su sangre y saliva le lleg& directamente al bajo vientre, alimentando su erecci&n.
+pret& el bulto caliente y goteante contra el cuerpo del vampiro, restregndose contra l,
prisionero de su boca, gimiendo entre sus labios mientras senta las manos que apresaban su
piel tan fras que casi le quemaban, recorrindole con desesperaci&n para detenerse en su
trasero y apretar su carne con fuera. Mn dedo largo y fro acarici& la entrada entre sus
nalgas, y le sinti& tentar los m)sculos, entrando levemente. Fntent& huir de l, pero el placer
que se construa en su cuerpo por el roce y la e#citaci&n de ser mordido y succionado le
llev& de pronto al borde, y ese dedo que empe& a entrar y a salir de l cada ve ms
profundo, terminaron por llevarle a la locura. @imi& profundo dentro de la boca que le
aprisionaba, apretando los m)sculos en su cuerpo mientras el semen sala despedido en un
fuerte chorro, manchando la camisa del vampiro. "igui& gimiendo all como un cachorrito al
sentir el dedo penetrarle ahora profunda y rtmicamente sin piedad, volviendo el deseo a
hacer presa de l, jadeando cuando la boca del vampiro le solt& y le mordi& el cuello,
bebiendo de l, mientras su mano coga su pene y le masturbaba al mismo ritmo que su
dedo. "e movi& presa del deseo, agitndose al mismo ritmo frentico, doloroso y placentero,
gimiendo con fuera al sentir el orgasmo llegar y derramarse una ve ms, esta ve gritando
el nombre del vampiro y escuchando en su odo su propio nombre en un rugido ronco y
satisfecho, mientras senta que el cuerpo del vampiro convulsionaba contra el suyo. "e
apoy& cansado contra l, mientras recuperaba el aliento y a su nari lleg& el olor del semen
de $arnel, un aroma oscuro y dulce como el de una flor entre canela y vino. 0aj& la mano y
toc& la humedad que se e#tenda sobre la tela entre sus piernas.
?Creo que lo has disfrutado tanto como yo? no pudo evitar comentar. +l& la mirada y se
encontr& con los ojos del vampiro, oscuros y hermosos, su rostro con un brillo radiante y
vivo, que le hio recordar que se haba alimentado de su sangre. !ra e#tra,o, no se senta
debilitado por haberle servido de cena. ;oc& con su mano la cara del vampiro,
inspeccionando sus formas y le vio sonrer? !res muy guapo, lo sabas4 Mn poco estirado,
pero no ests mal. ;odo tiene arreglo.
?' t) eres un mocoso grosero, maleducado, engredo y pedante? dijo dndole un beso con
cada palabra.
?Hey, no te pases. Con lo de mocoso ya vale? dijo devolviendo el beso con ganas y sinti& sus
braos envolverle contra s. "onri& entre sus labios? +dems, mocoso o no, sigo siendo un
dios del se#o? dijo moviendo las cejas pcaramente. $arnel dio una sonora carcajada,
apretndole contra s.
3u iba a hacer ahora4 !l mocoso ste era divertido, adems de valiente. *adie que lo
supiera hubiese ido tras un nosferatu enloquecido. ;odo el mundo saba que un nosferatu
desatado solo poda ser calmado con la muerte. Pero el lobo haba conseguido devolverle la
cordura. !scondi& la cabea en su pecho peque,o, y aspir& su aroma a hierba y tierra clida,
sabiendo que ya no podra vivir sin l. 3u iba a hacer4
?Bye, no te escondas. $jame ver tus lindos ojos? le pidi& y not& el afecto en su vo. +l& la
mirada y contempl& los suyos que poda ver a)n en la penumbra del jardn, verdes y grises,
como el color de las hojas entre la niebla del amanecer. Bh, tan hermosos...? 3u pasa4
;ienes una e#presi&n, como si te arrepintieras de haber hecho una travesura? le dijo con una
sonrisa pcara. $arnel no pudo evitar sonrer.
?He hecho una cosa mala. Pero no estoy arrepentido? solo asustado, quiso decirle, pero era
mejor callar. (e solt& con suavidad y el joven lobo se le qued& mirando con el ce,o
fruncido. Bh, claro, joven era la palabra... 3u derecho tena l a reclamar la juventud de un
bello lobo, y llenarle con la inquietud de su bestia descontrolada4 *o era tan egosta.
?$arnel4? le pregunt& confuso al verle ponerse de pie. !stir& una mano en su direcci&n.
?!s mejor que regresemos a la mansi&n. ;e dar algo de ropa y te llevar de vuelta al sal&n
de la fiesta. ;u ta y hermana deben estar preocupadas por tu ausencia.
(e vio ponerse de pie a su lado para orle lanar un bufido e#asperado.
?'a ests con eso otra ve... ' qu hay de ti4 !sts ya curado del todo4 ;e recuerdo que has
luchado a muerte contra una ventana y prcticamente ensartado entre las ramas de un seto
asesino? le record& y sus palabras le encendieron la sonrisa. *o poda evitarlo.
?!stoy bien. Por e#tra,o que pareca, el nosferatu tiene una tasa de recuperaci&n a)n ms
velo que la del vampiro normal...
?'a, pero estabas tan asustado mientras huas. Cre que te desangraras por el camino? not&
la preocupaci&n en su vo y la vio en sus ojos cuando le mir&. "u cuerpo se movi& por s
solo y se encontr& abrandole contra s con fuera.
?"iento haberte asustado, "hasty.
?"olo quera encontrarte y tranquiliarte. "iento haberte mordido y asustar a tu nosferatu.
?*o es tu culpa. Hasta la cada de un alfiler me ha puesto muy nervioso estos das? confes&.
(e vio alar el rostro y sonrer.
?!ntonces, supongo que nada de fiestas sorpresa, ni de esas cajas que cuando las abres te
salta una serpiente de juguete? sus palabras le hicieron rer, apretando su cabea contra su
pecho, para acariciar su rojo pelo, hundiendo la nari all para aspirar su aroma a tierra.
?"upongo que no.
?.e alegra que ya ests bien. Pero para el registro, creo tus ojos de nosferatu son muy
se#ys. ' esos largos colmillos tambin? se sorprendi& al orle, mirndole algo
desconcertado. !l lobo se restreg& contra su cuerpo y sinti& la humedad que haba quedado
entre sus piernas? "i te pillo otra ve en tu forma salvaje, no creo que te deje ir tan
fcilmente...
?"hasty...? intent&, pero le vio ponerse de puntas y reclamar un beso. C&mo resistirse a su
invitaci&n4 0aj& el rostro y se besaron con ganas. "inti& al lobo pegar un salto y treparse a
su cuerpo, para envolverle la cintura con sus piernas. "ostuvo su peso contra su cuerpo, sin
dejar de besarle, e#tra,amente complacido. !l nosferatu ronrone& dentro de l.
"hasty protest& cuando el vampiro interrumpi& la sesi&n de besos que empeaban a volverse
ms intensos, para bajarle al suelo y tomando su mano le gui& de regreso a la mansi&n. (e
sigui& d&cilmente, llevando sus manos unidas a sus labios para mordisquearlas y lamer sus
dedos tentndole por el camino, sonriendo con ganas al verle mirarle con ojos llenos de
deseo, a)n cuando apart& la mirada ruboriado sin dejar de andar. "u tmido y bello
vampiro. !ntraron por un sitio diferente a donde haban salido, y $arnel le llev& escaleras
arriba a una habitaci&n. Por el aroma, "hasty supo que era donde dorma y se ech& sin pudor
sobre la cama del vampiro, cuando ste se volvi& para buscar ropa y una palangana con agua
para limpiar la sangre y el semen que le cubran. Casi dio un salto de sorpresa al verle
echado en su cama en pose invitadora, intentando lanarle una rplica, pero el lobo oli& su
e#citaci&n y salt& sobre l para empujarle a la cama. !l vampiro se resisti& un poco al
principio, pero terminaron acaricindose entre besos y tras quitarse la ropa hicieron el amor.
"hasty perdi& la cuenta de los ataques a su vampiro y de los suyos a l esa noche, pero en
medio de una pausa que hicieron para dormir agotados bajo la colcha, decidi& que no se lo
cedera a nadie ms.
$arnel se despert& e#tra,amente calmado, incluso alegre. (a mayora de sus despertares
eran inquietos y llenos de ansiedad, e#plorando sus alrededores con miedo en busca de
posibles peligros. "u nosferatu siempre estaba al acecho, con las alarmas encendidas a cada
instante. !ra un alivio ya no sentirse as. =olvi& la vista al notar el calor en su espalda y no
se sorprendi& de ver la forma del lobo recostada contra l, sonriendo con ganas. Pas& una
mano por su rojo pelo y disfrut& el aroma de su cuerpo que inundaba su nari. 3u hacer4
3uera que se quedara a su lado, pero no era una opci&n. !ra un lobo joven, tena toda su
vida lobuna por delante. (e vio abrir de pronto los ojos.
?Hola? le dijo con una sonrisa y una se#y vo enronquecida por el sue,o. $arnel sonri&
tambin.
?0uenos das? dijo sin dejar de acariciar su pelo. !l lobo se al& de la almohada y atrap& sus
labios con un beso.
?+hora s lo son? asegur&, lamindoselos con ganas. $arnel sonri& ante su gesto. Cada cosa
que haca era tan refrescante y natural? 3u hora es4? consult& mirando alrededor. !l
vampiro mir& la ventana, por donde se filtraba un rayo de lu tras la cortina cerrada.
?'a es de da.
?.ierda. "upongo que es una hora peligrosa para ti. (os vampiros se derriten a la lu del
sol, no es as4
?=es demasiadas pelculas? le rega,& y el lobo le mir& con curiosidad? !s cierto que el sol
nos quema la piel y no podemos ver bien en l, pero si nos cubrimos y usamos gafas de sol,
podemos salir al e#terior. Claro que es inc&modo, pero no nos derretimos.
?@enialC Podemos dar un paseo entonces4? consult& con ojos de cachorro ilusionado. By& el
gru,ido de su est&mago? 0ueno, despus de desayunar...
?3u hay de tu familia4? pregunt& preocupado y le vio arriscar los hombros.
?!starn bien. $e seguro habrn capturado alguna presa por ah? y movi& las cejas de esa
pcara forma suya. $arnel sonri&? 0ueno, yo tambin atrap la ma? se inclin& contra l y
bes& sus labios. "inti& en su cuerpo la onda elctrica que llamaba a su deseo cuando sus
formas se acoplaban a las suyas. Fntent& resistirse pero no pudo. "e besaron y acariciaron un
largo rato, empeando a gemir. !l vampiro pens& que ms le vala disfrutarlo, ya que podra
ser la )ltima ve...
?3u pasa4? oy& que le preguntaba el lobo, mirndole encima de su cuerpo, su rostro tan
cerca del suyo que sus ojos parecan uno solo.
?"olo estaba pensando.
?+hora4 !n qu4? pregunt& atrapando su rostro y mirndole fijamente? "ultalo...
$arnel dio un suspiro profundo.
?!n que cuando la tregua termine no volver a verte. !s ms, es posible que hoy mismo
decidas irte con tu familia, o ella decida llevarte lejos y... 'a no te ver ms? consigui&
confesar antes de que el dolor que se apretaba en su pecho le cortara las palabras. .ir&
avergonado hacia otro lado, pero las manos que apresaban su rostro le obligaron a volver la
vista a l. =io la preocupaci&n en los ojos del joven lobo.
?Crees que me voy a ir as como as, y dejarte aqu solo4
?0ueno, eres joven, y un lobo... y...
?' qu4
?*o tengo nada que ofrecerte? confes& con vo ms herida de lo que le hubiera gustado que
se oyera. "hasty le mir& confundido.
?*o te he pedido nada.
?'a lo s. Pero...
?Pero qu4 $eja de poner e#cusas. .ira, aqu el que no tiene nada soy yo. +)n soy menor,
vivo en casa con mis padres, hermana y ta, ambas locas, a)n estoy estudiando y me gustan
los juegos de video. Bsea, el que tendra que estar poniendo e#cusas soy yo? replic& y
$arnel no pudo evitar sonrer? *o te ras. Hablo en serio.
?(o s, lo siento? se disculp& y el chico se acerc& a l, mirndole fijamente, tan cerca que
sinti& el calor de su cuerpo envolverle.
?.e gustas. .e gustas un mont&n. .e gustara que vinieras conmigo, o bueno quedarme
contigo, aunque las mansiones me dan escalofros? sonri& al or sus palabras? *o s. !n ve
de pensar en tontas e#cusas, Por qu no pensamos mejor en un plan para quedarnos juntos4
?!sts seguro4 3uiero decir, a)n estoy en fase nosferatu y es un poco inestable... 'a lo has
visto anoche? concedi&. "inti& el peso de su cuerpo en el suyo y el beso que calm& su
ansiedad.
?Con mayor ra&n. .e necesitas a tu lado para controlarle. ' yo quiero estar contigo para
que no te hieras. *o lo ves4 *os necesitamos el uno al otro? la seguridad en sus palabras
despertaron en $arnel una enorme felicidad. Poda ser una locura, pero quera a ese lobo
para l. (e abra& con fuera contra s, sentndose contra la almohada para acunar su cuerpo
contra el suyo y besarle con ganas.
?Creo que yo me llevo la mejor parte del trato? admiti&, mirndole con profundidad. "hasty
sonri& con ganas y movi& las cejas pcaramente.
?*o por nada se me conoce como el dios del se#o? sus palabras le arrancaron una carcajada.
"u lobo, su peque,o y dulce lobo.
Cuando bajaron a desayunar, feli de llevar ropas que olan a su amado vampiro, busc& de
inmediato la figura de su ta y hermana, ponindoles al corriente del hallago de su pareja.
Como entre los lobos ese lao era indisoluble y absoluto, y ambas estuvieron de acuerdo en
llevrselo a casa para ser presentado formalmente a la familia, sobre todo despus de verle,
encantadas de su pose elegante y gentil, arrobadas por el amor que vieron en sus ojos al
mirar a su joven hermano y sobrino. !se cachorro afortunado...
?!sts nervioso4? le pregunt& sosteniendo su mano con fuera, los dedos entrelaados a los
suyos con calide y firmea, mientras iban en el coche. $arnel le mir& con una sonrisa que
intent& fuera valiente.
?"olo un poco? no poda mentirle a su lobo. "hasty le dio un beso confortador.
?;ranquilo, todo saldr bien. Pase lo que pase, estar contigo.
?@racias? dijo apoyando la cabea en su hombro, que aunque ms delgado que el suyo, le
sostuvo con firmea. "inti& sus dedos tibios acariciar su pelo.
?*o seas bobo. !res mo y no te voy a dejar marchar. !res mi se#y vampiro para siempre,
que lo sepas? asegur& y $arnel sonri& con ganas, sintindose a salvo. !l nosferatu en su
interior ronrone& de placer.
?' t) sers siempre mi mini lobo? brome&. "inti& la risa vibrar en su pecho y transmitir la
alegra a su cuerpo.
?3u no voy a ser peque,o para siempreC 'a lo vers, cuando sea ms alto que t)? amena&,
mirando sus ojos cercanos con los suyos verdi grises llenos de diversi&n. $arnel puso
morros.
?*oo, yo quiero tener siempre mi lobo de bolsillo...
?Hey, no me tientes con esos gestos tuyosC $&nde se qued& mi vampiro todo estirado y
serio4? protest& con una sonrisa, bajando hasta l para besarle.
?Chicos... $ejad de comer filetes frente a los hambrientos? protest& la joven loba hermana
de "hasty. !lla conduca, pues su ta se haba quedado con su vampiro en la mansi&n.
?Pues no mires por el espejo retrovisor, bruja entrometidaC? contraatac& el lobo. $arnel le
dio un suave golpecito en la nuca y ste le mir& con sorpresa.
?*o le faltes el respeto a tu hermana mayor...
?Pero...
?*ada de peros.
?$e acuerdo? refunfu,&, sentndose enfadado, mirando por la ventana. $arnel vio a la loba
gui,arle un ojo por el espejo. =olvi& la vista hacia su lobo enfurru,ado. Pas& una mano bajo
su brao y busc& sus dedos. "hasty los entrela& con los suyos, pero no le mir&.
?"hasty? le llam& con suavidad y sus ojos volvieron a l a medias. "e acerc& a su odo,
soplando su aliento en l? *o te enfades. Pero la familia es importante. (os necesitamos
ahora, t) y yo.
?'a lo s? admiti& en vo baja, mirando sus manos unidas y apretndolas con fuera. $arnel
sonri&, abrandole contra s.
?Pero alg)n da, te prometo que podr cuidar de ti, cuando pueda controlar mejor mis
impulsos y conocer ms mi naturalea de vampiro. .e ayudars a hacerlo4
?(o har. "iempre lo har.
?.e dejars cuidar de ti hasta entonces4
?$e acuerdo...? admiti&, esta ve con una sonrisa. "e besaron otra ve, pero la loba no dijo
nada. "e quedaron abraados el resto del camino.
=arios a,os despus, "hasty segua recordndole la noche en que se haban conocido. !l
terror del nosferatu haba sido mpliamente aplacado desde entonces y su fuera de vampiro
haba crecido en l. $escubri& que tena el mismo don de 0eto con las plantas, hacindolas
crecer hermosas y robustas. ;rabaj& para la comunidad de lobos ayudando a cuidar de
bosques y plantaciones, con la ayuda de su hermoso y amado lobo de fuego, con quin viaj&
tambin a las tierras cedidas por el concilio de vampiros, para transformarse en tierras donde
las parejas mi#tas pudiesen convivir a gusto. !se mismo a,o, se fundaron un par de
academias de artes lobo?vampricas, y una universidad. (os esfueros de unir ambas raas
daban sus frutos, no solo en la creaci&n de los establecimientos, sino en los laos creados a
partir del amor, que seran eternos e imperecederos en la memoria de las siguientes
generaciones.
+n,eles -uardianes
@abriel saba que algo malo estaba ocurriendo en la mansi&n. *o saba desde cuando, pero
not& que las cosas empeaban a torcerse cuando su to 5atto ech& a Snia, al confesar que
estaba enamorada de uno de los sirvientes. @abriel y su hermano menor vivan con el
hermano de su padre en la gran mansi&n de $e +rquett, desde la muerte de sus progenitores
haca varios a,os. !l to 5atto siempre haba sido un poco e#cntrico, pero trat& bien a sus
sobrinos hurfanos y les dio un lugar donde morar mientras crecan. (a prima Snia era
agradable, muy distinta del primognito +nt&n, quin da a da se asemejaba ms a la figura
misteriosa y un tanto inestable de su to. Cuando Snia escap& aquella noche junto a Philip el
ch&fer, @abriel temi& que la furia contenida del se,or $e +rquett se desatara sobre todos los
que estaban a su alrededor. Fntent& que tanto l como su hermano, pasaran desapercibidos de
los peligrosos arrebatos de su to y primo, y lo consigui& con mucho esfuero. 0ueno, con el
esfuero de los sirvientes de la casa, que se haban convertido para ellos en una segunda
familia, en especial >anny la vieja cocinera, a quien su hermano adoraba, y con quien
pasaba la mayor parte del tiempo. @abriel divida su tiempo en estudiar farmacologa
vamprica en la gran biblioteca de la familia, con ayuda del viejo +ugus, el sirviente ms
anciano y antiguo mayordomo, a quien 5atto haba dejado de lado cuando perdi& la vista
por una tontera de +nt&n, quien sali& de peque,o al sol tras una rabieta y +ugus le protegi&.
(e haba relegado a sus habitaciones, pero el viejo y sabio vampiro decidi& ocupar su
tiempo y aprovechar su ceguera para perfeccionar sus otros sentidos. Como resultado de
ello, sin que 5atto lo supiera, haba iniciado un profundo estudio de farmacologa y
herbologa, con el fin de ayudar a los vampiros que sufran de dolencias. ' haba encontrado
el perfecto discpulo en @abriel.
Pero esa noche sin luna, algo se senta en el aire. +ugus se lo haba advertido, dicindole
que a pesar de no verla, la luna sangrara esa noche. Haba un e#tra,o rumor de que la
familia $e +rquett en general, estaba conectada por laos con las fueras oscuras de su
naturalea, las que eran atradas en rituales macabros y sangrientos. ;odo mentiras, seg)n
pensaba @abriel, pues sus padres a pesar de su noble ascendencia, jams haban demostrado
otra cosa que ser buenos vampiros, viviendo siempre acorde a las leyes del concilio. "in
embargo, no poda decir lo mismo de su to. ' aquella noche tuvo la prueba que esperaba.
"e levant& de la cama en medio de la oscuridad, cuando una serie de gritos aterradores
llegaron hasta sus odos dormidos. Con el cora&n desatado de latidos corri& a la habitaci&n
de su hermano, para hallarle dormido. 5espir& con alivio, pensando que solo sera el viento,
cuando volvi& a orlos. *o haba duda de que provenan de los s&tanos. Cuando lleg& hasta
all, ocultndose entre las sombras, vio lo que ocurra y sus ojos se abrieron enormes ante el
horror que presenci&. =ctimas humanas, semidesnudas y atadas cruelmente, con heridas
abiertas de las que manaba abundante sangre, que tanto 5atto como +nt&n usaban para
llenar copas de oro, mientras se sentaban a charlar frente a un fuego encendido entre risas, al
tiempo que las vctimas perdan la vida. @abriel apret& los labios y los pu,os con fuera.
Cunto tiempo haba estado ocurriendo esto4 CuntoC ' l sin saber nada... Pero antes haba
sido un ni,o, ahora era un joven fuerte y no se quedara en silencio. +unque tena miedo de
su to y primo, decidi& hacer lo que pudiera. 5egres& al cuarto de +ngelo y le despert&. "u
hermano le mir& confuso y adormilado, pero no replic& cuando le llev& hasta las
habitaciones de los sirvientes con >anny, contndole lo que haba visto. (a vampira se
horrori& ante sus palabras.
?!l se,or antes no era un hombre cruel... Cuando muri& lady Rita, su mente se rompi& y su
cora&n se llen& de sombras...
?!so no es e#cusa para hacer lo que hace, >anny. "iempre nos han ense,ado que los
donantes humanos deben ser tratados con respeto. ' aquellos eran tan j&venesC +penas un
par de a,os ms que +ngelo? dijo mirando a su hermano, quin era a)n un adolescente. 8l
haba alcanado la mayora de edad la pasada primavera. !l chico apret& su mano con
fuera, sus ojos llenos de angustia.
?+ d&nde irs, @aby4 (lvame contigo...
?*o puedo, +ngi. $ebes ser fuerte. +hora te quedars con >anny, pero cuando regrese nos
iremos de esta mansi&n? dijo mirando a la vampira. !lla asinti&.
?;en cuidado, @abriel.
?(o tendr. Fntentar detener a mi to como sea. Protgelo, por favor? pidi& antes de
marcharse? ' t), cuida de >anny.
?(o har. !star esperndote, hermanoC? fue lo )ltimo que oy& antes de correr a su
habitaci&n y vestirse. >ue hasta la biblioteca y cogi& la )ltima botella del eli#ir, que +ugus y
l haban destilado. $evolva la fuera a un cuerpo mal herido. Fba a marcharse, cuando vio
la figura del viejo en la esquina.
?+ugusC
?=en aqu, hijo mo? le pidi& e#tendiendo sus manos. !l chico se acerc& y sinti& como si los
ojos del viejo vampiro pudieran verle, a pesar de su ceguera. (as manos se apretaron a las
suyas con fuera? " lo que pretendes. *o te detendr. "olo te dar un consejo. !l )ltimo.
*o puedes luchar esta batalla solo. ;oma? dijo sacando el medall&n que siempre llevaba en
su cuello? 0usca ayuda. +qu puede que la encuentres. !sto te guiar? dijo ponindolo en su
mano. !ra un medall&n en el que estaba tallada la forma inusual de un lobo con alas de
murcilago. @abriel siempre se pregunt& lo que significaba. ;odo lo que saba de los lobos
es que eran criaturas horrendas y malficas, que destruan todo a su alrededor? $ebes
confiar en la fuera que hay en ti. *o creas solo en lo que ven tus ojos? dijo alargando sus
dedos para tocar su cara. @abriel apret& su mano callosa y fra contra su mejilla? =ete, y has
lo que tengas que hacer.
?=olveremos a vernos, +ugus.
?". !n la eternidad, muchacho. !n la eternidad? su cora&n se apret& ante sus palabras, pero
no poda perder ms tiempo. Colg& el medall&n en su cuello, y dndo una )ltima y triste
mirada al anciano, sali& por la puerta.
Poco antes del amanecer, 5atto y +nt&n dejaron el s&tano. @abriel esper& hasta que los ecos
de su pasos se perdieron y baj& las escaleras de piedra, asqueado por el olor a muerte y
miedo que se desprendan de las paredes. $e los humanos que haba visto la noche anterior,
solo quedaba uno con vida. "e sinti& horroriado al ver la carnicera que haban causado su
to y primo. "e acerc& a la figura inm&vil de la mujer y le levant& la cabea con cuidado,
dejando caer parte del eli#ir en su boca. Cuando consigui& que tragara y abriera los ojos, le
mir& con terror en ellos, temblando entre sus braos.
?;ranquila, no te har da,o. 3uiero sacarte de aqu. @uardars silencio4? ella asinti& sin
dejar de temblar, plida y conmocionada. @abriel la tom& en sus braos y sali& del s&tano,
sus sentidos captando hasta el ms mnimo ruido a su alrededor. Por fortuna, nadie se
percat& de su presencia y pudo salir a los amplios jardines con su carga. !l sol le ceg& por
completo, pero gracias a +ugus haba aprendido a confiar en sus otros sentidos. Camin& casi
sin ver, por ms de medio /il&metro bajo el sol del ya da, el cuerpo de la chica apretado en
sus braos, debilitado por la perdida de sangre, pero senta el latido de su cora&n ind&mito
en su pecho. !l olor de la sangre atraa a sus sentidos de vampiro, pero su conciencia le
dictaba hacer lo correcto. + medio da, ya haba salido de las tierras del se,or $e +rquett y
vag& por los bosques, hasta que el sue,o vamprico se volvi& urgente y tuvo que parar. $io a
la humana el resto del eli#ir, para que se mantuviera con vida hasta que l regresara de su
coma, y tendindose en la hierba a su lado se entreg& al sue,o.
Cuando despert&, sus ojos pudieron ver ya el camino y comprob& que la humana segua con
vida, aunque plida y dbil. (as heridas en su cuerpo haban cerrado gracias al eli#ir, pero si
no consegua ayuda, morira por la falta de sangre en su cuerpo. .ientras sopesaba sus
opciones desesperado, not& el calor del medall&n en su pecho. Cuando le mir& vio que
brillaba, su lu aumentando cuando le diriga hacia el este. (as palabras de +ugus vinieron a
su mente y dej& que le guiara. Con suerte, podra salvar a la chica y encontrar ayuda para
detener a su to.
!dDard se pas& la mano por la cara, dando un profundo suspiro mientras patrullaba. "u alfa
estaba enfurecido, nada raro dadas las )ltimas noticias sobre emboscadas de vampiros. +rtus
nunca haba credo en la tregua, negndose de pleno a participar en la fiesta anual que se
llevaba a cabo en nombre de ella, a pesar de que muchos otros pueblos de lobos abran sus
puertas a los colmilludos de la ona. 8l personalmente, nunca haba visto uno de cerca y
agradeca al cielo por ello, por que si eran ciertos los rumores, lo que menos quera era
e#ponerse a la furia salvaje y rabiosa de una de aquellas sanguijuelas. Por eso estaba tan
nervioso esa tarde, ya que estaba solo patrullando. Caleb se haba tenido que quedar en la
pastelera para acabar con el men) de la boda de Sramo, el mano derecha del alfa, quin se
casara en un par de das. "u mejor amigo era muy talentoso en la cocina y haba heredado
de su padre el peque,o negocio que haca las delicias del pueblo, literalmente. 8l
prcticamente coma de su mano, ya que era una total nulidad en la cocina. Haba nacido
para ser un guerrero, un guardin y por eso estaba all solo mientras el sol caa por el
horionte, para defender a los suyos de la peligrosa presencia vamprica. .ientras l tuviera
fueras ninguna de esas horribles, espantosas y cruelmente salvajes sanguijuelas
chupasangres se acercaran a su gente, y... $e pronto, por entre las sombras que lanaban los
rboles, vio una figura avanar. "e tambaleaba, quis por el peso de algo que llevaba entre
sus braos. !dDard sinti& el inconfundible olor de la sangre y la vio por entre el bulto que
cargaba. "us sentidos le advirtieron que tuviese cuidado, pero el lobo guardin en l le dijo
que haba algo all que proteger y no deba perder tiempo. +van& entre los rboles a su
encuentro y se qued& at&nito, al ver la frgil figura de ropa desgarrada que cargaba otra
contra s, mirarle con ojos agotados antes de caer de rodillas sobre la hierba, pero sin soltar
su carga. "e acerc&, ya seguro de que algo muy grave pasaba.
?(a chica... sal... vala...? pidi&, dejndola con todo cuidado sobre la oscurecida hierba, antes
de caer a un lado inerte. !dDard se qued& at&nito, mirando el cuerpo de la hembra humana,
con evidentes heridas pero viva, y el maltrecho de quin la haba cargado al parecer por todo
el bosque. !ra un macho de vampiro.
Caleb sac& la )ltima hornada, mirando inquieto el reloj. *o le haba gustado tener que dejar
todo el trabajo a !dDard, pero no tena opci&n. !staba solo para atender el negocio, desde
que su padre haba muerto haca medio a,o. !dDard le haba apoyado, pero no le serva
como ayudante, quera sus arpas fuera de su cocina. .ir& los bollos recin salidos y el
bicocho que a)n faltaba rellenar para la tarta nupcial. Sramo era muy e#igente y haba
cambiado el men) por lo menos G veces ese mes. "i no fuera el mano derecha de +rtus, le
hubiera dado un buen mordisco en el cuello. =olvi& a mirar el reloj. ;ena tiempo mientras
todo se enfriaba, para dar una vuelta y ver como le iba a !dDard con la patrulla. ;ena un
mal presentimiento. 0aj& los bollos al s&tano, que usaba de almacn para mantener las cosas
fras y frescas, y tras cerrar la puerta de la pastelera sali& al e#terior. *o haba luna en el
cielo esa noche, pero el aire estaba lleno de mensajes de alerta, que llenaban su pecho de
estremecidos latidos.
!dDard comprob& los signos vitales de la chica y respir& aliviado. +l cogerla en braos,
not& el dbil estado de su cuerpo. Haba que llevarla con el mdico del pueblo de
inmediato. !ra un lobo que haba tenido estudios de medicina humana tambin, as que
sabra que hacer. .ir& por sobre su hombro la forma inerte del vampiro y sinti& un ramalao
de culpa por tener que dejarle all. Pero no tena opci&n. +dems era un enemigo, Porqu se
senta de esa manera4 +unque no poda decir que su aspecto fuera fero, salvaje y horrible.
.s bien pareca frgil y de alguna manera vaporoso, como los espritus del bosque que le
haba contado siempre su madre, ngeles que cuidaban del bosque y sus habitantes. 0ueno,
no poda descuidarse a pesar de su etreo aspecto. Corri& con su dbil carga hasta la casa del
mdico, dejndola a su cuidado y pens& en informar a su alfa, pero la inquietud en su
cora&n le dijo que regresara con el vampiro.
@abriel abri& los ojos aturdido. "inti& los olores del bosque y los sonidos nocturnos.
*ecesitaba sangre. (a inusual e#pedici&n por el bosque y el peso e#tra de la chica le haban
dejado agotado. "e sent& de golpe y mir& alrededor, $&nde estaba ella4 "u cora&n lati&
desbocado, +caso su to lo haba encontrado4 +caso la haba perdido en el camino4 Mna
forma que se movi& por entre la oscuridad, acercndose, llen& de miedo y aprensi&n su
pecho. Fntent& ponerse de pie torpemente, solo para caer al suelo y golpearse con fuera.
!staba demasiado dbil, incluso para defenderse. +pret& los ojos, viendo como la enorme
figura se abalanaba sobre l, y su )ltimo pensamiento fue un adi&s para su hermano.
?!sts bien4? consult& preocupado al verle caer al suelo, agachndose a su lado. !l vampiro
le mir& con ojos enormes en los que se reflejaba el miedo, y de una manera e#tra,a le
hicieron sentirse mal. *o pareca un terrorfico vampiro como decan los rumores, sino una
cosita peque,a e indefensa y el lobo dentro de l le urgi& a protegerle. !stir& las manos para
para ayudarle a incorporarse y oy& el peque,o grito angustiado cuando le toc&.
?*o me matesC Por lo que ms quierasC? rog& su vo aterrada, logrando cubrirse la cabea y
temblando visiblemente. !so parti& su cora&n. 0ueno, era su enemigo, pero no era lo
mismo ser atacado por un enemigo a la misma altura de su fuera, que por un vampiro
peque,o y dbil, aterrado por un leve roce. 0aj& las manos y suspir&.
?*o voy a hacerte nada. Pero no puedo dejarte aqu. !sts en territorio de mi gente.
?@ente4 3u gente4 *o eres humano4? pregunt& confuso, y olfateando un poco abri& los
ojos a)n ms si caba? !res... Mn loboC
?' t) un vampiro? estableci& lo obvio. !l vampiro mir& confuso de un lado al otro,
centrndose de pronto en sus ojos.
?Pero... y la chica... $&nde est4 ;e prohbo que le hagas da,oC? dijo ponindose de pie en
un salto y mirndole con enojo, todo rastro de debilidad perdido. !dDard sonri& al verle.
?;ranquilo, tu compa,era humana est a salvo. +unque debo decir que te has pasado un
poco ms de la cuenta, drenndola de esa manera.
?'o no la he drenadoC? aclar& con enojo, bajando luego la mirada en un gesto asqueado? Han
sido mi to y mi primo... *o s como han podido hacer algo tan cruel...
>runci& el ce,o confuso al or su vo contrita, cuando de pronto sinti& el aroma de Caleb
acercndose. "e puso en pie de un salto y cubri& por instinto la figura del vampiro. 8ste le
mir& desconcertado, percibiendo entonces con horror la forma que se acercaba a ellos.
Caleb haba sentido aquel olor en el aire, del que se hablaba cuando haban vampiros cerca.
;emi& por su amigo, corriendo todo lo aprisa que pudo.
?!dDardC? grit& al verle y vio a una figura peque,a escondida tras l. !l lobo dentro de s
gru,&. "i le estaban atacando, se las veran con l.
@abriel no poda creerlo. Haba salido de un infierno para caer en otro. (os lobos le
despedaaran, estaba seguro de ello. "olo lamentaba no poder despedirse de su hermano.
Cerr& los ojos, conjurando una oraci&n a sus padres para que le ayudaran a soportar el dolor
cuando llegara la terrible muerte, cuando sinti& como el cuerpo que corra hacia ellos se le
echaba encima con toda su fuera.
Caleb lan& un gru,ido de protesta, al ver la sombra que se escurri& frente a l tras saltar
sobre su hombro. 3u haba sido eso4 (e vio sortear con tal velocidad las sombras del
paraje ya nocturno, que pareca una mancha borrosa. Pero el olor segua all inconfundible.
(e vio saltar sobre la figura que estaba a espaldas de !dDard y un destello de oro llen& su
mirada, detenindole en seco.
?@abyC? oy& el llanto en su odo, y abri& los ojos para ver los rios dorados de su hermano
sobre su pecho. !staba tirado sobre la hierba y el vampiro le abraaba con fuera, casi
dejndole sin aliento.
?+ngi, 3u haces aqu4? consult& inquieto, con la preocupaci&n llenando sus poros. +ngelo
sollo& contra su pecho? C&mo has... c&mo me has encontrado4
?"egu tu rastro por el bosque? dijo alando su mirada llorosa? Cre que no te encontraraC
;o 5atto quiso que le dijera donde estabas, pero yo... escap cuando el primo +nt&n intent&
encerrarme en el s&tano...
?;e han echo da,o, ests bien4 Bh, +ngi, dime que no te han lastimado? pidi& angustiado,
sentndose sobre la hierba para apretarle contra s y acariciar sus revueltos rios. !l latido
de su cora&n estaba igual de agitado que el suyo. (a misma sangre, los mismos laos. !ra
todo lo que le quedaba en el mundo. "us ojos se llenaron de lgrimas.
?!stoy bien... (ogr escapar antes de que me encerrara. Pero >anny est a)n en la mansi&n...
*o s s... querrn desquitarse con ella? dijo con vo cortada por el miedo, escondiendo la
cabea en su pecho. @abriel apret& las mandbulas con furia y un gru,ido se escap& de su
pecho. ;ena que hacer algo para detenerlo.
!dDard mir& at&nito al par de vampiros abraados sobre la hierba. 3u suceda all4
"iempre crey& que eran criaturas despiadadas y solitarias, pero lo que vea ahora
contradeca todas sus creencias. =io a Caleb acercarse a l y mirarles de igual manera.
?3u est sucediendo aqu4? consult& alando una ceja intrigada en su direcci&n. +bri& la
boca sin saber que decir, cuando una e#clamaci&n de sorpresa y miedo llen& sus odos.
?(obosC? grit& el peque,o recin llegado, mirndoles con ojos que igualaron a los de su
hermano, soltndose de l para ponerse de pie y enfrentarlos? Corre, @aby. 'o les detendr,
KHuye al bosqueC? le pidi&, mirando sobre su hombro con aprensi&n y volvindose a verles,
para mostrarles unos blancos colmillos.
"us colmillos de cachorro hicieron sonrer a Caleb.
?*o te ras loboC Puedo parecer peque,o, pero soy un vampiro malvado y poderosoC? le
amena&, mirndole directamente a los ojos. ", su peque,o porte y frgil musculatura tena
mucho de terrorfico, y seguro que esa mordida poda hacer un rasgu,o muy doloroso en su
piel, como la picadura de un mosquito. Cru& los braos sobre el pecho mirando a !dDard,
quin sonrea tambin.
?3u, nos los comemos de un bocado4? pregunt& ste y casi oy& el gritito de pnico del
rubio vampiro. (e mir& y sopes&.
?*aa, tengo en mente algo ms suculento para cenar.
?=osotros, dejad de burlaos de mi hermano y de m. (obos maleducadosC? les rega,&,
apuntndoles con dedo acusador. Para ser un vampiro invasor, era muy adorable cuando se
enfadaba. Caleb dio un paso hacia l y +ngelo dio un paso hacia atrs asustado, pero no se
apart& de la figura de su hermano en el suelo.
@abriel se puso de pie y protegi& a su hermano.
?*o queremos pelea. Hemos venido solo porque nos dijeron que aqu podramos encontrar
ayuda? sac& el medall&n de su pecho y lo mostr&. !l lobo que le haba hallado, se acerc& lo
suficiente para mirarlo y le vio fruncir el ce,o. +ngelo protest& a su espalda, intentando salir
a defenderle al ver la cercana del lobo.
?$e d&nde has sacado esto4? consult& mirando sus ojos con gesto serio. @abriel decidi& no
mentir.
?Mn viejo sirviente en la mansi&n me lo dio. $ijo que me guiara a donde pudiesen
ayudarme. (a chica que traje conmigo, fue la )nica vctima que sobrevivi& de la matana de
mi to. *o s cuntos humanos han muerto a sus manos y las de mi primo, pero temo que no
ser la )ltima. ;enemos que detenerleC? le pidi& mirando sus ojos, con pu,os apretados.
+ngelo se abra& a su espalda y su calor le sostuvo. "e sinti& dbil de pronto y no pudo
evitar que sus piernas se doblaran.
?@abyC? grit& la vo de su hermano, pero ya no pudo or nada ms, sumido de nuevo en el
silencio y la oscuridad.
?;enemos que llevarlo a un sitio seguro? dijo !dDard acercndose al cuerpo desmayado del
vampiro, que su hermano sostena sobre la hierba solloando su nombre afligido.
?$&nde piensas meterlo4 Crees que +rtus no va a enterarse4? pregunt& Caleb, mirndole
at&nito.
?' qu quieres que haga4 "i lo llevo con el consejo, le mataran y no sabremos la verdad de
lo que dice. +dems, tiene el medall&n...
?*o, no le toquesC +ljateC? amena& el peque,o vampiro, intentando arrastrar con poco
#ito el cuerpo desmayado de su toque? "ultaleC
?Caleb, ay)dame? le pidi&, mirando al lobo que estaba a)n at&nito. 8ste se acerc& y cogi&
sin esfuero al rubio y peque,o vampiro que luch& contra su agarre, lanando mordiscos a
sus manos.
?*ooo... @abyCC @aabyCCC? sollo&, intentando llegar hasta su hermano en una tormenta de
furia, hasta que Caleb apret& su cuello en un punto que le hio perder la conciencia. (e
cogi&, ponindole sobre su hombro inerte, sacudindose la mano.
?=aya con los mordiscos del cachorro? se quej& y !dDard sonri&.
?;e lo mereces por tardar tanto en decidirte.
?!sts seguro de esto4 Cuando +rtus lo sepa...
?Primero quiero or la historia completa. (uego llevaremos el medall&n al consejo? dijo
tomando al otro vampiro entre sus braos y observando la joya en su pecho. Haban
leyendas que contaban que al principio de los tiempos, lobos y vampiros vivan en armona.
*o era necesaria la tregua, pues ambos pueblos eran uno solo. ' el smbolo de su aliana
eran medallones nupciales, que se iluminaban para llamarse el uno al otro cuando estaban
separados. 8l haba visto uno haca mucho tiempo, en la tumba que estaba junto a la colina
donde su padre y l solan correr las noches de luna llena. Mna tumba antigua, en la que la
cabea de un lobo con alas de murcilago brillaba incorrupto por entre las sombras del
nocturno.
Caleb dio unos leves golpecitos confortadores al cuerpo que cargaba sobre su hombro. +)n
le dola la mano que sus colmillos haban mordisqueado, pero lamentaba haber tenido que
adormecerle. !l vampiro era valiente y adorable, con esa cabea llena de rios rubios y los
ojos brillantes en la oscuridad. $e camino, !dDard le haba puesto al corriente de lo de la
chica y el medall&n, y se pregunt& que pasara cuando su alfa les descubriera, pero en
secreto apoyaba la decisi&n de esperar a que ambos volvieran en s antes de enfrentarse al
consejo, pues no le gustaba la idea de que el peque,o vampiro fuese echado tan pronto o
algo peor, antes de tener la oportunidad de conocerle mejor. *o pens& que el consejo tomara
acciones violentas, a pesar de su naturalea y de que haban entrado en su territorio sin
permiso, pero no poda estar seguro. !l peque,o le agradaba. "i poda, tratara de hablar en
su favor frente a +rtus. ' tampoco estaba dispuesto a dejar a su amigo solo. $ecidieron
dejarles en el s&tano de la pastelera, donde estaban a salvo de ser descubiertos, al menos de
momento, cubiertos por el olor de las hornadas. ' no sera sospechoso que estuviera la lu
encendida hasta tarde, debido a que todos saban que estaba ocupado con las cosas de la
boda. .ir& el rostro dormido del rubio vampiro y dese& saber el color de sus ojos. "u lobo
interno le dijo que le gustaba su olor y quera salir a jugar con l, pero Caleb estaba seguro
de que el cachorro de vampiro querra cualquier cosa menos ser su amigo. "e quedaron
mirndoles por un momento, y oy& de pronto el suspiro cansado de !dDard.
?Creo que es mejor que subas y te laves un poco. ' ponte una de mis camisas. !l olor a
vampiro en ti es evidente? le advirti&. !dDard se mir& y asinti& en silencio.
?;ienes ra&n, pero, *o quieres ayuda con tus pastelillos4? brome& ste con una sonrisa y
Caleb sonri& tambin, sintiendo que algo de la tensi&n se alaba de sus hombros.
?"ube. 'o me encargar de los 9peque,os: asuntillos? dijo apuntando a los dos vampiros
dormidos. !dDard subi& a las habitaciones superiores donde estaba su casa, que visitaba a
menudo. (e sonri& desde la escalera.
?"uerte pastelero. ' tendrs que hacer una tarta bonita, o Sramo te destripar? volvi& a
bromear. Caleb le vio subir y agit& la cabea con una sonrisa. =olvi& a la mesa de bicochos
y decidi& que mientras tanto, poda terminar el relleno de su tarta.
+ngelo sinti& en su nari el aroma dulce de la canela y la vainilla. "u boca se hio agua.
3u estara haciendo >anny ahora4 *o era justo que le dejase fuera del asunto. "e despert&
de golpe, decidido a pillarla y e#igir su parte en la elaboraci&n. Haba aprendido una a una
sus recetas y las tena todas memoriadas. Pero la vieja cocinera siempre le sorprenda.
+lg)n da, sera l quin le sorprendiera con uno de sus platos. *ada ms fijar la mirada, vio
las bandejas de bollos y el delicioso aroma que desprendan. .ir& a su alrededor. $&nde
estaba4 Haba muerto y estaba en el paraso4 !speraba ver a sus padres all. *ot& el cuerpo
de su hermano a su lado y puso una mano en su mejilla preocupado. *o era el cielo, aunque
ola bien, porque su hermano estara con l y sonreira. (a imagen de lo que haba pasado
lleg& a su memoria. !l terror en la mansi&n, la huida por el bosque, los lobos... !staba sin
duda en la mamorra de los lobos. Pero, Por qu le haban dejado comida4 ' adems, su
favorita. (e encantaban los bicochos. "e puso de pie, decidido a recuperar fueras para
sacar a su hermano de la prisi&n y protegerle de los lobos y de su to, y del mundo entero si
haca falta. Mn bollo o dos le ayudaran en su misi&n. Cuando mordi& el primero, sinti&
coros de ngeles cantar en sus odos. (a te#tura perfecta, la suavidad, el aroma y el dulor...
(a gloriaC "e comi& un par ms de ellos, disfrutndoles con los ojos cerrados, y cuando iba a
echarse el cuarto a la boca, oy& una tosecilla a su espalda. =olvi& la vista con la boca llena
de bicocho, y vio al lobo de pie en la puerta con una ceja alada.
?!so es para una boda pasado ma,ana. ;e agradecera tenerlo en cuenta, antes de amparte
la bandeja entera.
?$i effefas danto tienfo se fondan dufos? dijo con la boca llena, tragando para aclarar? "i
esperas tanto tiempo, se pondrn duros...
?Bh, no. *o con mi receta. Por eso estn aqu, al fro. (a masa se mantendr perfecta para
ese da. "i alguien no se los come antes, claro? dijo acercndose un paso. +ngelo le mir& con
sorpresa.
?;) los has hecho4
?". !s una antigua receta familiar? vio la admiraci&n en su mirada y eso hio que se
ruboriara de placer, como cada ve que su padre o alguien felicitaba su cocina. +part& la
mirada de los radiantes ojos aules del vampiro. !ran preciosos y hacan e#tra,amente a su
cora&n agitar su latido.
?=aya. *unca pens que lo lobos hornerais tan bien. "iempre pens que os lo comais todo
crudo y sangriento? dijo con gesto de asco repentino. Caleb al& una ceja.
?.ira quin lo dice.
?*osotros tomamos sangre directamente de los donantes. !s sangre viva...
?Pues eso no parece saberlo la chica que trajo tu hermano? protest& y le vio bajar la mirada
con tristea. !so le hio sentir de pronto mal consigo mismo.
?.i to est equivocado. Ha hecho algo terrible, pero ni @aby ni yo lo sabamos. !stoy
seguro de que Snia tampoco. *o somos vampiros malosC? aclar& con firmea y Caleb sonri&
recordando su afirmaci&n de antes, de que era malvado y poderoso.
?3uin es Snia4
?(a hija de mi to. (a e#puls& de la mansi&n porque se emparej& con Phil. !ra nuestro
ch&fer? e#plic& y le hio fruncir el ce,o? "e supone que los vampiros de la noblea y los
sirvientes no pueden amarse, pero esa es una tontera. !l amor no conoce barreras? dijo muy
seguro de sus palabras y le hio sonrer otra ve.
?!res un vampiro muy curioso. ' un poco glot&n? dijo apuntando al bollo que a)n sostena
en su mano a medio comer. +ngelo lo mir& y le dio una sonrisa que ilumin& su rostro.
?*o he podido resistirlo, est delicioso. Casi tanto como... los de >anny? Caleb sinti& que su
cora&n se hunda al ver la tristea empa,ar sus ojos de pronto? !spero que ella est bien.
*o quiero que mi to le haga da,o? dijo en un susurro afligido. *o pudo evitar acercarse y
roar con su dedo uno de sus rios, haciendo que la mirada aul volviera a alarse a l,
h)meda y temblorosa.
?!star bien? dijo aunque inseguro, pero le vio sonrer con afecto.
?!s vieja, pero ha sido muy buena conmigo y con @aby. *uestros padres murieron, sabes4
'o no les recuerdo mucho, pero @aby s. $ice que las manos de >anny son como las de
mam? susurr&, y cuando cerr& los ojos, una lgrima se desli& por su mejilla. (a sec& con
su dedo en una suave caricia.
?*o saba que los vampiros pudiesen llorar? se le escap& decir mientras tocaba la humedad
en sus dedos y senta la frialdad de la mejilla del vampiro. +ngelo sonri& con disculpa.
?Bh, yo soy muy llor&n. (lor un mont&n cuando
1T2
<olverine se qued& solo al final de la
peli. *o me gustaba mucho
1I2
Oane, pero l la quera de verdad, as que comprendo que
sufriera al perderla? dijo mirndole con toda seriedad.
?;e gustan los
1J2
U men4? consult& asombrado.
?Claro. *osotros somos algo as como mutantes, no4 .e encantara tener esas garras de
adamantium? dijo dando unos golpes al aire y quedndose un momento en la pose de su
hroe favorito? (as mas a)n no son del todo fuertes? se quej& mirando sus dedos. Caleb
lan& una carcajada? =aale, soy un fri/i. $ilo ya y acabemos con la tortura? pidi& alando
una ceja enfadado. Caleb le mir& con una sonrisa enorme, sintiendo un clido aleteo en su
cora&n. +trap& uno de sus rios y lo tirone& con ganas, oyndole lanar una suave protesta.
"u vampiro fri/i...
?C&mete tu bollo antes de que me arrepienta y llame a
1G2
.ystique, para que se transforme en
tu peor pesadilla.
?*o puede ser... !res de los malosC? protest&, pero sonrea encantado. Caleb cogi& otro
pastel y lo puso en su mano.
?!l bien y el mal son algo relativo? dijo mientras se acercaba a la puerta y sinti& que esas
palabras nunca haban tenido tanto sentido como ahora? "intate por all, mientras te traigo
un vaso de leche. ;omis leche no4
?"emi desnatada, por favor? Caleb sonri&, volviendo a la cocina.
@abriel volvi& poco a poco en s, notando el fro y la oscuridad a su alrededor, y un aroma
dulce como a confituras. "onri&. +ngelo haba vuelto a estar ayudando a >anny en la cocina
a preparar algo. $e seguro se lo traera para que lo degustase y tendra que alabar sus dotes
culinarias. (a verdad era que su hermano cocinaba muy bien, tan contrario a l que solo
saba hacer p&cimas. Pero al abrir los ojos no se hall& en su cama, ni en la biblioteca de la
mansi&n, sino en un cuarto desconocido y lo primero que vio fue a +ngelo sentado junto a
una bandeja de bollos, bebiendo leche y hablando entre susurros con alguien sentado a su
lado.
?
1-2
5ogue es quien lo tiene ms difcil. Fmginate no poder tocar a nadie, ni siquiera a la
persona ms importante de tu vida. 3u injustoC? protestaba su hermano con la boca llena.
!l lobo a su lado, le limpiaba la barbilla con todo cuidado con un troo de papel.
?0ueno, me e#tra,a que no hayan inventado a)n alg)n material que le permita hacerlo, sin
tener que matar al hacer contacto. "e supone que hay intelectos superiores en esa poca.
?Para hacer el mal... Como .ystique? atac& con sonrisa malvada y el lobo rod& los ojos.
?*o empecemos... !s un personaje carismtico, y no siempre fue malvada? se defendi&.
@abriel les mir& con curiosidad.
?3u... qu estis haciendo4? pregunt& intrigado, alndose a medias del suelo. +ngelo lo
mir& at&nito por un segundo, saltando luego a su lado.
?@abyC !sts bien4 C&mo ests4 ;e duele algo4? pregunt& tocndole por todos lados.
@abriel vio al lobo acercarse tambin, pero quedarse a distancia prudencial. !ra quin
acompa,aba al otro. (e busc& con la mirada.
?!stoy bien, +ngi A$&nde estamos4
?!n la pastelera de Caleb. !st haciendo el men) para una bodaC? le dijo con tanta ilusi&n,
que pareca como si hablara de la suya propia. @abriel no supo que decir a eso.
?Bs dejaremos aqu, hasta poder hablar con nuestro consejo y decidir lo que hacer? le
e#plic& el lobo. (e mir& frunciendo el ce,o.
?3u hay de los humanos en la mansi&n4 *o estoy seguro de que mi to no tenga a ms
capturados? oy& el sobresalto de su hermano. Puso una mano en su hombro? *o podemos
quedarnos aqu.
?' tenemos que sacar a >anny tambin? apoy& +ngelo, volviendo la vista hacia el lobo. =io
que ste miraba a su hermano con algo muy distinto a la enemistad que se supona los
divida. 0ueno, ya lo haba notado antes, pero ver adoraci&n en los ojos del lobo al mirarle,
le consternaba un poco. !n ese momento vio aparecer al otro, y sinti& su cora&n apretarse
de latidos desbocados.
!dDard vio los aules ojos del vampiro mirarle. !l mismo color de las violetas que florecan
en verano. "e qued& capturado por su mirada un instante. 3u pasaba con l4 !ra un
enemigo de su raa y all estaba, cometiendo locuras y saltndose las reglas por l. Porqu4
3uis, porque haba salvado a una humana. Haba aprovechado para ir a la casa del mdico
a verificar su estado y de paso pedirle discreci&n. Por fortuna el viejo lobo haba sido muy
amigo de su padre y no hio preguntas incomodas, asegurndole su silencio. ;ampoco es
que tuviera respuestas que darle. *o las tena ni para s mismo, sobre todo al sentir el
violento latido del que era presa su cora&n, al mirar al vampiro. (e vio ponerse de pie con
ayuda de su peque,o hermano y acercarse, tanto que el lobo en su interior le ara,&,
deseando tocarle. .aldita sea, Mn poco de autocontrolC
?;enemos que regresar a la mansi&n. .i to puede tener prisionera a ms gente. "i no les
salvamos, morirn? suplic& y sinti& que sus ojos se le clavaban en el alma. *unca haba
visto a un vampiro tan angustiado por la suerte de los humanos. Crea que eran bestias sin
conciencia, sedientas solo de sangre, inmorales y sin remordimientos? "i lo prefieres, ir con
tu lder para e#plicrselo? le oy& decir y el lobo rugi& su protesta.
?*oC? dijo con fuera y el vampiro le mir& at&nito, dando un paso atrs. "e arrepinti& de
haberle amedrentado? *o es buena idea... +hora mismo, no.
?Pero no hay tiempo que perderC Hay vidas en juegoC? insisti&.
?Hay que salvar a >annyC? apoy& al otro vampiro. Caleb se acerc& a l.
?$eberamos hacer algo.
?Podramos perderle... Podran quitrnoslo? rugi& el lobo furioso en su interior y comprendi&
entonces la ra de su miedo. (os ojos aul violeta le miraron con pesar.
?Por favor. *o puedo hacerlo solo? confes& y apret& las mandbulas, apartando la mirada. "u
gesto encendi& al guardin en l.
?$e acuerdo. Fremos ante el consejo. Pero os quedareis cerca de nosotros. Pase lo que pase,
no debis apartaros de nosotros, entendido4? dijo mirando a Caleb, quin asinti&, volviendo
la vista a l para mirarle con profundidad? Bs protegeremos.
?"... @racias? fue todo lo que dijo. !stir& su mano.
?*ecesito el medall&n? el vampiro se lo entreg& sin dudar y sinti& el roce fro de sus dedos
en los suyos. *o estaba seguro de lo que pasara, pero no le perdera. (e hio un gesto y
camin& hacia la puerta? =amos.
"alieron al e#terior y la noche sopl& su aire fro sobre ellos.
+rtus se pas& la mano por la cara mirando al cuarteto frente a l. 0ueno, a los dos lobos que
protegan tras de s la figura de dos peque,os vampiros. "anguijuelas. *o quera ver a
ninguno de aquellos que haban causado la muerte de su familia. (os odiaba. Pero sus lobos,
cachorros rebeldes, insistan en sus buenas intensiones. ' para rematar la noche, $amos el
mdico lobo, haba sido llamado para confirmar el estado de una humana herida y trada al
pueblo por uno de los chupasangres presentes.
?+ ver si lo entiendo. !l to de 9estos:? dijo apuntando a las figuras semi escondidas? Ha
estado manteniendo prisioneros a humanos para desangrarles hasta la muerte, no sabemos
cuantos ni por cuanto tiempo. ' queris ir hasta su mansi&n para acabar con l.
?", alfa. !s necesario, por el bien de los humanos? insisti& !dDard. !ra un buen guerrero,
su padre haba corrido junto al suyo y le tena respeto, pero francamente...
?' proteger a los vampiros inocentes de la mansi&n. ;rabajan como sirvientes. *o tienen
nada que ver con lo que hace su patr&n? apoy& a su ve Caleb, a quin no conoca mucho en
persona, pero s sus buenos productos. (e mir& alando una ceja, al verle contemplar al
peque,o vampiro a su espalda, quin le sonrea. Oa, vampiros inocentes... 0uen chiste...
?!l estado de salud de la hembra ha podido ser restablecido. Pero me temo que sus secuelas
psicol&gicas y las cicatrices en su piel no tengan cura ya? intervino $amos? .i hijo har lo
que pueda? $amis era un joven lobo que haba demostrado increbles dotes de curaci&n
chamnica. +l menos funcionaba con los lobos.
?' est el medall&n. Hace mucho se habl& de una aliana entre lobos y vampiros, votos
irrompibles entre nuestras raas. ;odos pensbamos que eran leyendas, pero los medallones
e#isten. He visto uno en la tumba de la monta,a? agreg& !dDard? Creo que puede ser el
compa,ero de ste? dijo apuntndole al que le haba entregado. "u suave brillo y calor
pareca un llamado de alguna clase, pero +rtus no poda estar seguro. ' AC&mo haba
descubierto el chico la tumba de su bisabuela4
?!sto no prueba nada. ' no podis esperar que ponga en peligro a los nuestros, solo por
rumores infundados.
?*o son rumoresC? protest& el rubio vampiro saliendo detrs de la protecci&n de !dDard.
8ste intent& alejarle, pero su mirada furiosa le detuvo como un golpe a un cachorro A$esde
cundo sus valientes guerreros se volvan sumisos frente al enemigo4 (an& un gru,ido
enfurecido en su direcci&n y el vampiro dio un par de pasos atrs? Creed en nuestras
palabrasC "olo queremos salvar las vidas que podamos, mientras a)n halla tiempoC? insisti&
mirndole.
?K.entirasC ;) y los tuyos, solo sabis inventaros tontas e#cusas para tendernos trampas. *o
creo en tus palabras, nunca las creerC +unque estos tontos cachorros hayan cado de lleno
en tu embrujo, yo te conoco vampiroC + m no puedes enga,armeC? ladr& furioso, echando
espuma por la boca.
@abriel le mir& at&nito. +ugus haba estado equivocado. +ll no encontrara lo que buscaba.
"e dio la vuelta en un intento por salir de ese lugar, para regresar a la mansi&n y encargarse
por s solo de la maldad de su to, si tena que hacerlo.
?$etenedleC *o dejis que esa sanguijuela escapeC +presdlesC? rugi& el alfa, ponindose de
pie de un salto, para apuntar en su direcci&n. =io a !dDard acercarse con premura a l y
sostenerle con fuera, aprisionndole entre sus musculosos braos. (e doli& su traici&n,
porque pens& que l al menos le creera.
?*o te muevas? le susurr& al odo. =io a su hermano ser cogido por Caleb de igual forma, y
los ojos confusos y aturdidos de +ngelo encontrar los suyos. Pero cuando crey& que les iban
a entregar al alfa, sinti& de pronto el aire soplar en su cara y los rboles pasar a su lado como
oscuras manchas. +mbos lobos corran por el bosque, llevndoles consigo y alejndose de
su poblado. By& los aullidos que se elevaron a no poca distancia, y el sonido de la
respiraci&n pesada y profunda del lobo que le sostena contra s, con tanta fuera que poda
sentir en la piel su calor y el latido de su cora&n. "u aroma a flores prensadas, a especias
ocultas, a papel y tinta le envolvieron, y se sinti& a salvo de todo peligro.
!l cora&n de !dDard lata en todos sus sentidos. 3u estaba haciendo4 C&mo se haba
atrevido a desobedecer una orden de su alfa4 Pero eso era lo correcto, todas sus clulas se lo
gritaban, y el lobo en su interior estaba de acuerdo, decidido a ir a la lucha hasta la muerte
por proteger a quin cargaba entre sus braos.
?.oC? le grit& al odo su animal con jubilo, mientras le alejaba de sus captores y le llevaba a
un destino incierto, pero que estaba seguro era suyo en la muerte o en la victoria, para ser
compartido.
+ngelo se apret& al pecho del lobo, escondiendo all su cabea. "inti& los dedos acariciar su
pelo mientras corra y sonri&, pasando los braos por su cuello y sostenindose de l en un
abrao.
(a mansi&n estaba cerca, lo senta en cada fibra de su ser. ' algo ms, una presencia que
conoca bien.
?0jame, !dDard? le pidi& buscando sus ojos y el lobo lo mir& dudoso por un instante.
?0jame, por favorC? se detuvo en seco y le dej& bajar de sus braos, pero no se separ& de su
lado cuando el vampiro camin& decidido hacia un grupo de rboles. Caleb tambin se haba
detenido y vio al otro vampiro seguir a su hermano. .ir& a su amigo y ste arrisc& los
hombros, siguiendo tambin al chico. ;ras pasar los rboles, vio a un par de altos y
desconocidos vampiros.
?SniaC PhilipC? e#clam& @abriel y corri& hacia ellos. (es vio abraarse. +ngelo tambin se
uni& a ellos.
?"on nuestros amigosC? dijo mirando hacia Caleb. +mbos se miraron y decidieron acercarse
a ellos.
?Por qu estis aqu4? consult& @abriel mirando a su prima. (a bella vampira le mir& con
pesadumbre.
?>anny llam& y me cont& lo de mi padre. ;engo que detenerle.
?(o haremos juntos? asegur& Philip, apretando su mano con fuera. @abriel sonri& y puso su
mano sobre las suyas, recibiendo una mirada agradecida de los ojos de la vampira.
?Bh, Caleb y !dDard ayudarn tambin, verdad que s4? pregunt& su hermano y vio a los
lobos acercarse y asentir. .ir& a los ojos de su lobo guardin.
?(o haremos.
?@racias? solo pudo decir, hechiado por la fuera que vea en sus ojos, por su bellea y el
grito de su cora&n que le deseaba con desesperaci&n.
Caleb al& las cejas sorprendido cuando sinti& la mano de +ngelo apretar la suya. "us dedos
eran fros, pero le gust& la forma en que su mano se ajust& su piel, como si siempre le
hubiera pertenecido. "u cora&n cant& de felicidad cuando vio la sonrisa en su rostro y la
valenta en su mirada.
?Por una ve, <olverine y .ystique tendrn que trabajar unidos? ri&, con esa risa tan suya
de cachorrillo travieso que le alegraba el cora&n. !ntrela& sus dedos y los apret& con
ganas, deseando calentar su piel y transmitirle al mismo tiempo todo lo que senta.
?"ern un gran equipo? susurr&, bajando hasta su odo y hacindole rer otra ve.
!ntraron en la mansi&n, lobos y vampiros, dientes, colmillos y garras preparadas,
directamente a donde el se,or $e +rquett estaba.
5atto no se lo esperaba. (a irrupci&n del grupo liderado por la traidora de su hija y el
vampiro bastardo que haba envenenado su mente le llen& de sorpresa y repulsi&n. (e
asqueaba tambin la visi&n de sus sobrinos, a quienes haba esperado someter, pero se
mostraron tan dbiles e in)tiles como su hermano. ' esos perros que traan con ellos...
KC&mo se atrevan a ensuciar el nombre de su casaC (ucharon, y su leal hijo se uni& a la
batalla. Pero los perros traidores eran resistentes, como la plaga que eran. (a sangre de su
hijo pronto manch& el suelo y un aullido de dolor sali& de su cuerpo. (a sangre que es vida,
que es fuente de poder, que las runas oscuras aseguraron les protegeran, les haran
invencibles. .ientras ms inocente, mejor. "angre sin mcula, de cientos de voluntarias
presas... "u sangre, que se derram& para juntarse a la de su hijo cuando su propia carne, los
mismos ojos de aquella que haba amado, le miraron llenos de lgrimas luego de traspasarle
el cora&n... +h, la traici&nC
Snia cerr& los ojos y cort& la cabea del vampiro que haba amado como a su padre. Haca
mucho que haba dejado de serlo, cegado por la violencia, por la locura. +hora descansara
en pa junto a su madre, y procurara mantener intacta la memoria del vampiro a quin
haba conocido en pocas felices. Philip le abra& y quit& la espada de su mano, acunando
su cuerpo en el llanto y el dolor.
!dDard se acerc& a la figura de @abriel, de rodillas en el suelo, sujetndose el brao que el
otro vampiro haba conseguido lastimar. !staba dbil, no haba dejado de estarlo y sinti& el
peso leve de su cuerpo cuando lo tom& en sus braos, alejndolo de la violencia.
?@abriel? susurr& en su odo, y su boca se movi& hacia sus labios para besarle. !l vampiro
respondi& con ganas y sinti& sus colmillos bajar de manera invitadora. (os vio, blancos y
descubiertos, lamindoles para orle lanar un suave gemido y supo de inmediato lo que
necesitaba. +cerc& la mu,eca a su boca y por un instante, el brillo de sus ojos violetas le
ceg&, lleno de preocupaci&n. +sinti& con la cabea. 8l quera esto, su lobo lo quera. !ra el
puente que poda conectarlos para siempre. "inti& el dolor cuando los colmillos del vampiro
penetraron su carne, pero al mismo tiempo el placer cuando le succion& y supo que su
sangre estaba alimentando a su vampiro, hacindole parte de s, llenndole con su esencia
vital.
?.o... eres mo para siempre? rugi& el lobo en su pecho, y supo que @abriel lo haba
escuchado.
Caleb corri& tras la figura de +ngelo. !l vampiro se desat& en una velo carrera por los
pasillos, que le record& cuando le haba visto como una sombra en el bosque. "onri&,
transformndose de pronto en su lobo y alcanndole. (e vio mirarle con sorpresa y luego
con una enorme sonrisa, invitndole a trepar a su lomo. +ngelo salt& sobre l y se ajust& a
su cuerpo a la perfecci&n, guindole en su ruta hacia las amplias cocinas.
>anny estaba bien, solo algo asustada al ver al enorme lobo gris que apareci& de pronto de la
nada y del cual baj& su feli 9+ngelito: como siempre le llamaba, abrandose a ella con
fuera. !l lobo desapareci& y reapareci& convertido en un gran y apuesto hombre, cubierto a
medias por una cortina, ya que estaba desnudo, y a quin el ngel present& como su lobo
Caleb. >anny al& las cejas sorprendida, pero no tuvo dudas en las implicaciones del 9su:
cuando le vio mirar arrobado a su peque,o ngel, quin le tendi& los braos y fue alado
entre ellos, para ser besado sin pudor en los labios. (a risa tintineante de +ngelo llen& la
cocina mientras se abraaba feli a su bello lobo y ste le acunaba amorosamente contra s.
5egresaron al sal&n y vio all el resultado del encuentro. *o poda culpar a su Snia de lo
ocurrido, haba sido lo mejor para la familia. (e abra& con cari,o y le apoy& con su fuera.
$as despus celebraron un funeral por el alma de 5atto y +nt&n. Snia encontr& apoyo en su
familia y la gente de la casa, quienes presentaron sus respetos a la nueva se,ora $e +rquett.
!lla y Philip pudieron celebrar su boda, antes secreta, ahora con la gente que queran.
@abriel se entristeci& al descubrir la muerte de +ugus, ocurrida pocas horas despus de su
partida, pero estaba seguro que de alguna manera el viejo vampiro le haba guiado seguro en
su camino y ahora se hallara en pa, junto a quin haba posedo la otra mitad del medall&n.
.ir& al lobo a su lado, quin desterrado por su gente se haba quedado junto a l,
prometindole amor y fidelidad por siempre. 8l hio el mismo juramento y sinti& que no
necesitaba un medall&n, pues donde quiera que su lobo estuviese, l sera capa de ver y
sentir la lu de su presencia, pues desde el primer instante, su e#istencia y la suya estaban
destinadas a ser una misma.
', Caleb y +ngelo4 !ran igualmente inseparables. Caleb haba perdido el derecho de
regresar a su pueblo al mismo tiempo que !dDard, tras haber desobedecido las &rdenes de
su alfa y mantener escondidos a dos enemigos de su raa, pero francamente, nunca haba
sido ms feli. "u peque,o vampiro era dulce, divertido y un gran cocinero. >anny se
convirti& en maestra, amiga y c&mplice, y entre los tres sorprendan a todos con platos
nuevos y deliciosos. +unque lo que ms disfrutaba era jugar con su peque,o y dulce ngel,
con quien comparta su 9cachorro interior: disfrutando con sus pelculas y juegos de video
favorito, y se finga sorprendido cuando se ocultaba de l, para saltarle encima de pronto
llenndole de besos y e#igiendo su cuota de caricias. >inga, pero porque le senta tan parte
de s, que no importaba la distancia que los separara o el silencio entre ellos, l siempre
estaba con l, en cada parte de su ser, llenando su vida de amor, alegra y pa.
+caso no era eso el amor4
Para el IJ7 aniversario de la muerte de su bisabuela, +rtus recibi& un paquete. !n l se
contenan cartas escritas por ella a un vampiro, llenas de una pasi&n que evidentemente
haba sido mutua. ' por ellas tambin, supo la verdad de su sangre mestia. +rtus quem& las
cartas, pero conserv& el medall&n, subiendo a la monta,a para depositarlo junto a la tumba.
Cuando estuvieron juntas, ambas caras volvieron a unirse, y tras lanar un grito ensordecido
de rabia, el alfa regres& con su manada, quis no ms entero, pero algo ms sabio que
antes. Porque comprendi& que el dolor y la ira descontrolada solo nublan la ra&n. Cuando
se aceptan los fracasos y las debilidades, se pueden mejorar e intentar cambiar. ' eso en s,
es la fuente de la verdadera fuera.
.in
5eferencias 1fuente <i/ipedia2
6? >errari es un fabricante de autom&viles superdeportivos con sede en .aranello 1Ftalia2. >ue fundada en
6QHQ por !no >errari como "cuderia >errari, construyendo autom&viles de competici&n y ms tarde, en
6QI-, tambin pas& a fabricar autos deportivos.
H? <arcraff es desde su aparici&n en 6QQI una de las principales marcas comerciales de 0liard
!ntertainment, junto con "tarCraft y $iablo. !s una popular saga de videojuegos del gnero de estrategia
bajo la temtica de guerras picas fantsticas y se puede jugar online en modalidad de multijugador. Consta
de tres entregas y dos e#pansiones, pero tambin tiene otras modalidades de presentaci&n.
T? Oames HoDlett, alias (ogan y mejor conocido como <olverine, es un superhroe de .arvel Comics,
miembro de los U?.en, +lpha >light y (os =engadores. >ue creado por (en <ein, Herb ;rimpe y Oohn
5omita "r. !l personaje fue desarrollado ms competentemente por el escritor Chris Claremont y el artista
Oohn 0yrne en ;he Mncanny U?.en.
I? Oean @rey es un superherona perteneciente al Mniverso .arvel, creada por por "tan (ee y Oac/ Virby. Ha
sido llamada Chica .aravillosa 1.arvel @irl2 y >ni#, aunque actualmente se la conoca s&lo por su nombre
real. !s miembro fundador de los U?.en. +pareci& por primera ve en Mncanny U?.en *W6 16QGT2.
Oean @rey es una mutante, nacida con los poderes de telepata y telequinesis.
J? U?.en, (os hombres U o (a Patrulla U, es un grupo de superhroes del Mniverso .arvel creado por "tan
(ee y Oac/ Virby, que tuvo su primera aparici&n en septiembre de 6QGT. "us aventuras han sido publicadas
en diversos c&mics de .arvel Comics, llegando a disfrutar de varias colecciones mensuales dedicadas a
ellos. +dems, se han realiado varias adaptaciones en series de animaci&n y pelculas.
G? .ystique es un personaje ficticio del universo de .arvel Comics, perteneciente al mundo de los U?.en.
Creada por Chris Claremont y $ave Coc/rum, tuvo su primera aparici&n en .s. .arvel *W 6- 1mayo de
6Q-X2. *ombre real% 5aven.
.ystique puede manipular y alterar los tomos de su cuerpo para duplicar a cualquier humanoide de
cualquier se#o, llevando cualquier clase de ropa. Puede duplicar con gran precisi&n el modelo de retina de
cualquier persona, las huellas digitales, el modelo de poro de la piel y el tono de las cuerdas vocales. !s
capa de aumentar su volumen, pero no su masa. "u poder le concede retraso de edad, factor de curaci&n
acelerada e inmunidad a medicinas y venenos. .ystique tambin es una combatiente sumamente e#perta,
e#celente actri, mercenaria y terrorista y una hbil estratega militar.
-? 5ogue 1+nna .arie, ;itania en (atinoamrica, Pcara en !spa,a2 es un personaje ficticio, una
superherona de la .arvel Comics, miembro de los U?.en.
Creada por el escritor Chris Claremont y el artista .ichael @olden, apareci& por primera ve en +vengers
+nnual Y67 1agosto de 6QX62.
5ogue es una mutante con la habilidad de absorber los poderes y recuerdos de las personas que toca. "u
poder no es consciente, sino que act)a siempre que entra en contacto con alguien, debido a ello no puede
tocar a nadie con su piel desnuda sin que absorba su psique. (as vctimas de 5ogue quedan inconscientes
mientras ella mantiene sus poderes. !l tiempo que permanece el poder de la persona que toca depende de
durante cuanto tiempo haya estado absorbiendo a sta.