Santa María Goretti
Santa María Goretti
Santa María Goretti
TERESA GORETTI
Vrgen y mrtir
(1890-1902)
Corinaldo, provincia de Ancona, Italia
Lugar de nacimiento de Santa Mara Goretti
Mara naci el 16 de
octubre de 1890, en
Corinaldo, provincia de
Ancona, Italia. Hija de
Luigi Goretti y Assunta
Carlini, tercera de siete
hijos de una familia
pobre de bienes
terrenales pero rica en
fe y virtudes, cultivadas
por medio de la oracin
en comn, rosario
todos los das y los
domingos Misa y
sagrada Comunin.
Al da siguiente de su
nacimiento fue bautizada
y consagrada a la
Virgen. A los seis aos
recibir el sacramento de
la Confirmacin. Mara
muestra claramente una
inteligencia y una
madurez precoces,
donde no exista ninguna
pizca de capricho, ni de
desobediencia, ni de
mentira. Es realmente el
ngel de la familia.
Luigi contrajo
paludismo, que lo llev a
la muerte despus de
padecer diez das. Por
dicha causa , Assunta
tuvo que trabajar
dejando la casa a cargo
de los hermanos
mayores. Mara lloraba
a menudo la muerte de
su padre, y aprovecha
cualquier ocasin para
arrodillarse delante de
su tumba,
As como la contemplacin
del crucifijo, que fue para
Mara una fuente donde se
nutra de un intenso amor a
Dios y de un profundo
horror por el pecado.
. Amor intenso al Seor.
Mara desde muy chica
anhelaba recibir la
Eucarista, pero deba
esperar hasta los once
aos, pero un da le
pregunt a su madre:
-Mam, cundo tomar la
Comunin?. Quiero a
Jess.
Despus de la muerte de
Luigi, Assunta y sus hijos
haban cado bajo el
yugo desptico de los
Serenelli, Mara, que ha
comprendido la
situacin, se esfuerza
por apoyar a su madre:
-nimo, mam, no
tengas miedo, que ya
nos hacemos mayores.
Basta con que el Seor
nos conceda salud. La
Providencia nos
ayudar. Lucharemos y
seguiremos luchando!
sta lo considera un
capricho y no concede
ninguna importancia a
aquella reiterada splica.
El 5 de julio, a unos
cuarenta metros de la
casa, estn trillando las
habas en la tierra.
Alessandro lleva un
carro arrastrado por
bueyes. Hacia las tres de
la tarde, en el momento
en que Mara se
encuentra sola en casa,
Alessandro dice:
-"Assunta, quiere
hacer el favor de llevar
un momento los bueyes
por m?"
Sin sospechar nada, la
mujer lo hace. Mara,
sentada en el umbral de
la cocina, remienda una
camisa que Alessandro
le ha entregado
despus de comer,
mientras vigila a su
hermanita Teresina, que
duerme a su lado.
-"Mara!, grita
Alessandro. -Qu
quieres? -Quiero que me
sigas. -Para qu? sgueme! -Si no me
dices lo que quieres, no
te sigo". Ante semejante
resistencia, el muchacho
la agarra violentamente
del brazo y la arrastra
hasta la cocina,
atrancando la puerta.
La nia grita, pero el
ruido no llega hasta el
exterior.
Al no conseguir que la
vctima se someta,
Alessandro la amordaza
y esgrime un pual.
Mara se pone a
temblar pero no
sucumbe. Furioso, el
joven intenta con
violencia arrancarle la
ropa, pero Mara se
deshace de la mordaza
y grita: -No hagas eso,
que es pecado... Irs al
infierno.
Mario Cimarelli, un
jornalero de la granja,
trepa por la escalera a
toda prisa. La madre
llega tambin:
-Mam!, gime Mara. Es Alessandro, que
quera hacerme dao!
Llaman al mdico ya los
guardias, que llegan a
tiempo para impedir que
los vecinos, muy
excitados, den muerte a
Alessandro en el acto.
Sufrimiento redentor
Al llegar al hospital, los
mdicos se
sorprendieron de que
la nia todava no haya
sucumbido a sus
heridas, pues ha sido
alcanzado el
pericardio, el corazn,
el pulmn izquierdo, el
diafragma y el
intestino. Al
diagnosticar que no
tiene cura, llamaron al
capelln. dormirla.
-Cmo es posible
que no pueda beber
ni una gota de agua?
Luego, dirige la
mirada sobre Jess
crucificado, que
tambin haba dicho
Tengo sed!, y
entendi, el porqu no
le daban agua. El
sacerdote tambin
est a su lado,
asistindola
paternalmente
En el momento de darle
la Sagrada Comunin,
le pregunt: -Mara,
perdonas de todo
corazn a tu asesino?
Ella le respondi:
-S, lo perdono por el
amor de Jess, y quiero
que l tambin venga
conmigo al paraso.
Quiero que est a mi
lado... Que Dios lo
perdone, porque yo ya
lo he perdonado.
Pasando por
momentos anlogos
por los que pas el
Seor Jess en la
Cruz, Mara recibi la
Eucarista y la
Extremauncin,
serena, tranquila,
humilde en el
herosmo de su
victoria.
Despus de breves
momentos, se le
escucha decir:
"Pap".
Finalmente,
Mara entra en la
gloria inmensa
de la Comunin
con Dios Amor.
Es el da 6 de
julio de 1902, a
las tres de la
tarde.
La conversin de Alessandro
En el juicio, Alessandro, aconsejado por su abogado,
confes:
-"Me gustaba. La provoqu dos veces al mal, pero no
pude conseguir nada. Despechado, prepar el pual
que deba utilizar".
Por ello, fue condenado a 30 aos de trabajos
forzados.
Aparentaba no sentir
ningn remordimiento
del crimen tanto as
que a veces se le
escuchaba gritar:
-"Anmate, Serenelli,
dentro de veintinueve
aos y seis meses
sers un burgus!".
Sin embargo, unos
aos ms tarde, Mons.
Blandini, Obispo de la
dicesis donde est la
prisin,
Despus de salir el
Prelado, llora en la
soledad de la celda,
ante la
estupefaccin de los
carceleros.
Despus de tener un
sueo donde se le
apareci Mara,
vestida de blanco en
los jardines del
paraso, Alessandro,
muy cuestionado,
escribi a Mons.
Blandino:
mostrando una
conducta ejemplar, y
ser admitido en la
orden tercera de san
Francisco.
Gracias a su buena
disposicin,
Alessandro fue
llamado como testigo
en el proceso de
beatificacin de Mara.
Result algo muy
delicado y penoso para
l, pero confes:
"Debo reparacin, y
debo hacer todo lo
que est en mi mano
para su glorificacin.
Toda la culpa es ma.
Me dej llevar por la
brutal pasin. Ella es
una santa, una
verdadera mrtir. Es
una de las primeras
en el paraso,
despus de lo que
tuvo que sufrir por mi
causa".
En la Navidad de 1937,
Alessandro se dirigi a
Corinaldo, lugar donde
Assunta Goretti se
haba retirado con sus
hijos. Lo hace
simplemente para
hacer reparacin y
pedir perdn a la
madre de su vctima.
Nada ms llegar ante
ella, le pregunta
llorando.
-"Assunta, puede
perdonarme?
-Si Mara te perdon
-balbucea-, cmo no
voy a perdonarte yo?"
El mismo da de
Navidad, los habitantes
de Corinaldo se ven
sorprendidos y
emocionados al ver
aproximarse a la mesa
de la Eucarista, uno
junto a otro, a
Alessandro y Assunta.
El caso de Mara
Goretti se extendi por
todo el mundo. En
1947, el Papa Po XII la
beatific y en 1950 la
canoniz. En la
ceremonia estuvieron
presentes su madre, de
82 aos, dos hermanas
y un hermano. Y,
aunque parezca
increble, tambin
asisti Alejandro, el
arrepentido asesino de
la santa.