Hermeneutica - Capitulo 7 Autor Henry A. Virkler
Hermeneutica - Capitulo 7 Autor Henry A. Virkler
Hermeneutica - Capitulo 7 Autor Henry A. Virkler
La primera es que los smbolos sirven como seales de algo que ellos representan, sin
ser necesariamente similares en algn aspecto, mientras que los tipos son semejantes
en uno o ms de las cosas que prefiguran. Por ejemplo, el pan y el vino son smbolos del
cuerpo y de la sangre de Cristo; los siete candelabros de oro (Apocalipsis 2: 1) son
smbolos de las iglesias en Asia. No hay una semejanza necesaria entre los smbolos y
las cosas que simbolizan, como la hay entre el tipo y el antitipo.
La segunda es que los tipos sealan hacia adelante en el tiempo mientras que los
smbolos no necesariamente lo hacen. Un tipo siempre precede histricamente a su
antitipo mientras que un smbolo puede precederlo, existir concurrentemente con l o
llegar despus que la cosa que simboliza.
La tipologa se distingue tambin del alegorismo. La tipologa es la bsqueda de enlaces
entre los acontecimientos histricos, las personas o las cosas dentro de la historia de la
salvacin; el alegorismo es la bsqueda de significados secundarios y ocultos de un
relato histrico. La tipologa radica en una interpretacin objetiva del relato histrico,
mientras que la alegorizacin importa significados subjetivos a ella.
Por ejemplo, en la alusin tipolgica hallada en Juan 3: 14,15 reconocemos la existencia
de una serpiente real y un Cristo verdadero; una es el tipo, el otro es el antitipo. Las
circunstancias histricas que rodean a ambos presentan la clave para entender la
relacin entre ellos. En contraste, en el alegorismo el intrprete atribuye significados a
una historia que por lo general no seran deducidos de una estricta interpretacin de
ella. Por ejemplo, una alegorizacin de la historia de la matanza de Herodes de los nios
de Beln declara que "el hecho de que nicamente los nios de menos de dos aos
fueran asesinados mientras que los de tres presumiblemente escaparon tiene el
propsito de ensearnos que quienes sostienen la fe trinitaria sern salvos mientras que
lo binitarios y los unitarios indudablemente perecern."
Caractersticas de un tipo
Se pueden identificar tres caractersticas principales de un tipo.2 La primera de stas es
que "debe haber algn punto notable de semejanza o analoga" entre el tipo y su
antitipo. Eso no implica que haya muchas diferencias tambin: Adn es un tipo de Cristo,
aunque las Escrituras hablan de ms puntos de diferencias que de semejanzas (vase
Romanos 5:14-19).
La segunda es que "debe haber evidencia de que el tipo fue sealado por Dios para
representar la cosa tipificada". Hay cierto desacuerdo entre los eruditos de cmo deben
ser tales declaraciones explcitas de Dios. La famosa sentencia del obispo Marsh
respecto a los tipos afirma que no se puede declarar como tal ningn tipo a menos que
se declare explcitamente as en las Escrituras. Al otro lado del espectro estn los que
clasifican como tipo cualquier cosa que presente alguna semejanza con cualquier cosa
posterior. Un punto de vista moderado, y sostenido por la mayora de los eruditos (por
ejemplo, Terry, Berkhof, Mickelsen, Eichrodt, Ramm, et al.), es que para que una
semejanza sea un tipo debe haber alguna evidencia de la afirmacin divina de la
representa ese grupo, y era una forma hebraica de pensamiento. Por ejemplo, Mateo 2:
15 ("De Egipto llam a mi hijo") se refiere a Oseas 11:1, en el cual el hijo es identificado
con la nacin de Israel. En Mateo era Cristo mismo (como un representante de Israel)
quien fue llamado de Egipto, de modo que las palabras originales se aplican a l.
Algunos de los salmos ven tambin a Cristo como el representante de toda la
humanidad.
Aunque contrarios a nuestros conceptos contemporneos, estos usos de conceptos de
cumplimiento y de identidad representativa poseen los requisitos previos de legitimidad
y validez hermenutica. Es decir, que ellos tuvieron la intencin, fueron usados y
entendidos en esa cultura en ciertas maneras culturalmente aceptadas. El hecho de que
esos conceptos son algo diferentes de nosotros slo confirma las diferencias entre las
culturas y no dice nada de su validez o invalidez. Los acontecimientos tpicos poseen una
relacin analgica con algn suceso posterior. Pablo emplea el juicio sobre la
incredulidad de Israel como una advertencia tipolgica para los cristianos para que no
participen en la inmoralidad (1 Corintios 10:1-11). Mateo 2: 17-18 (Raquel que llora a sus
hijos asesinados) se menciona como analoga tipolgica de la situacin en los tiempos de
Jeremas (Jeremas 31:15). En la poca de Jeremas el suceso implic una tragedia
nacional; en los das de Mateo el acontecimiento signific una tragedia local. El punto de
correspondencia era la angustia mostrada ante la prdida personal.
Las instituciones tipolgicas son prcticas que prefiguran algn acontecimiento posterior
en el plan de salvacin. Un ejemplo de eso es la expiacin mediante el derramamiento
de sangre de cordero y ms tarde por Cristo (Levtico 17:11; cf. 1Pedro 1:19). Otro es el
sbado como un tipo del descanso eterno del creyente.
Los oficios tpicos incluyen a Moiss, quien en su oficio como profeta (Deuteronomio
18:15) era un tipo de Cristo; Melquisedec (Hebreos 5:6) como un tipo del continuo
sacerdocio de Cristo; y David como rey.
Las acciones tpicas se ejemplifican por el andar de Isaas descalzo durante tres aos
como una seal a Egipto y Etiopa de que Asiria pronto los llevara a ellos desnudos y
descalzos (Isaas 20:2-4). Otro ejemplo de una accin tpica fue el matrimonio de Oseas
con una prostituta y la posterior redencin de ella despus de su infidelidad,
simbolizando el pacto de amor de Dios y la infidelidad de Israel.
Principios para la interpretacin de tipos
Anlisis histrico y contextual.
El lugar ms importante para comenzar la investigacin de dos sucesos cualesquiera en
la historia de la salvacin es la situacin histrico-cultural en la cual ocurrieron. La
identificacin de los nombres propios, las referencias geogrficas, las costumbres
contemporneas, y los detalles histricos y el trasfondo son todos necesarios para
entender cmo un tipo y un antitipo armonizan con el modelo de la historia de la
salvacin. El contexto inmediato a veces proporciona indicios en este respecto; en otras
ocasiones el estudio de un contexto ms amplio (tal como el propsito del libro)
ejemplo, Apocalipsis 1:3; 22:7,10; Juan 11:51); (2) revelar hechos ocultos respecto al
presente (Lucas 1:67-79; Hechos 13:6-12), y (3) ministrar instruccin, consuelo y
exhortacin en un lenguaje poderosamente apasionado (por ejemplo, Ams; Hechos
15:32; 1 Corintios 14:3,4,31).
Si aceptamos las fechas de los diversos libros de la Biblia que dan comnmente los
eruditos, parece que gran parte de la Biblia es profeca predictiva (denotacin 1). Payne
calcula que de los 31,124 versculos de la Biblia, 8,352 (veintisiete por ciento) era
material predictivo al tiempo de ser hablados o escritos. 2 En las Escrituras, la prediccin
estaba al servicio de la proclamacin (denotacin 3). El modelo con frecuencia era: "A la
luz de lo que el Seor va a hacer (prediccin), debemos vivir piadosamente
(proclamacin)."
La profeca predictiva puede desempear un buen nmero de funciones. Ella da gloria a
Dios al testificar de su sabidura y soberana sobre el futuro. Puede conceder gran
seguridad y consuelo al creyente oprimido. Puede motivar a sus oyentes a una fe ms
firme y una santidad ms 3 profunda (Juan 14:29; 2 Pedro 3:11).
Profeca y literatura apocalptica
En el siglo veinte, los estudiantes de la profeca bblica han dedicado considerable
tiempo a investigar un gnero particular llamado "apocalptica". El trmino se deriva de
la palabra griega apokalupsis (se halla en Apocalipsis 1:1), que significa "descubrir" o
"revelar". El principal enfoque de la literatura apocalptica es la revelacin de lo que
haba estado oculto, en particular con respecto a los tiempos del fin. Los escritos
apocalpticos no cannicos se hallan desde la poca de Daniel hasta el final del primer
siglo d. C., Y tienen varias caractersticas en comn. Lean Morris describe estas
caractersticas:
1. El escritor tiende a escoger algn gran personaje del pasado (por ejemplo, Enoc o
Moiss) y lo hace el hroe del libro.
2. Este hroe a menudo hace un viaje, acompaado de un gua celestial quien le
muestra visiones interesantes y las comenta con l.
3. A menudo la informacin se comunica mediante visiones.
4. Las visiones a menudo hacen uso de simbolismos extraos y enigmticos.
5. Las visiones con frecuencia son pesimistas con respecto a la posibilidad de que la
intervencin humana mejore la situacin actual.
6. Las visiones por lo general terminan con la intervencin divina llevando el presente
estado de cosas a un cataclismo y al establecimiento de una situacin mejor.
7. El escritor apocalptico a menudo usa un seudnimo, afirmando escribir en el
nombre de su hroe elegido.
8. El escritor con frecuencia toma partes de la historia y las vuelve a escribir como si
fueran profeca.
9. El enfoque de la literatura apocalptica es confortar y sostener al "remanente fiel".
George Ladd mira el desarrollo de la apocalptica como el resultado de tres factores
principales. El primero es "el surgimiento de 'remanente justo' ", un grupo minoritario,
casi siempre sin gran poder poltico, que se ve a s mismo como un remanente fiel a
Dios aunque estn rodeados por infieles. Un segundo factor es "el problema del mal".
Ya en un libro tan antiguo como el de Job se haba registrado la concepcin de que
Dios recompensa al justo y castiga al malvado. Cmo entonces pudiera el remanente
justo reconciliar el hecho de que ellos estaban siendo oprimidos por quienes eran ms
malvados que ellos? El tercero es que "la cesacin de la profeca" (registrada en el
libro no cannico de 2 Baruc 85:3) cre un vaco espiritual: el remanente justo
anhelaba una palabra de parte de Dios pero no vena. La literatura apocalptica
intentaba dar una palabra de consuelo y seguridad de parte de Dios a los hombres de
su tiempo.
La literatura apocalptica tiene varios puntos en comn con la profeca bblica. Ambas
estn interesadas en el futuro. Ambas emplean con frecuencia lenguaje figurado y
simblico. Las dos dan nfasis al mundo invisible que subyace bajo la accin del
mundo visible. Las dos dan nfasis a la futura redencin del creyente fiel. Tambin
hay muchas diferencias. Entre ellas estn:
1. La presentacin inicial de la profeca por lo general fue en forma hablada y fue
puesta por escrito tiempo despus. La presentacin inicial de la apocalptica por lo
general fue escrita.
2. Las expresiones profticas con ms frecuencia eran separadas, orculos breves. La
apocalptica casi siempre es ms larga y continua; tienen ciclos de material repetido
una segunda o tercera vez en forma paralela.
3. La apocalptica tiende a contener ms simbolismo, en especial animales y otras
formas vivientes.
4. La apocalptica acenta ms el dualismo (ngeles y el Mesas versus Satans y el
anticristo) que lo que hace la profeca.
5. La apocalptica principalmente conforta y alienta al remanente justo. La profeca a
menudo castiga a los religiosos nominales.
6. La apocalptica generalmente es pesimista acerca de la eficacia de la intervencin
humana en el cambio del presente. La profeca se concentra en la importancia del
cambio humano.
7. La apocalptica se escribi por lo general con el empleo de un seudnimo. La
profeca era generalmente escrita o hablada en el nombre de su autor.
Las distinciones anteriores son asunto de grado y nfasis, en vez de ser diferencias
absolutas. Se pueden citar excepciones en cada una de ellas; sin embargo, los
eruditos bblicos ms conservadores estaran de acuerdo con tales distinciones.
Las secciones apocalpticas ocurren dentro de los libros cannicos, principalmente en
Daniel (captulos 7-12) Y en Apocalipsis. Hay tambin pasajes apocalpticos en Joel,
Ams y Zacaras. En el Nuevo Testamento, el discurso de Jess en el Monte de los
Olivos (Mateo 24-25 y paralelos) contiene elementos apocalpticos.
quera dar pero que no fue entendido con claridad por el autor humano? Se pueden
ilustrar las dos opiniones sobre ese asunto mediante el caso de Caifs el sumo
sacerdote, quien profetiz que era "mejor que un hombre muera por el pueblo y no
que toda la nacin perezca" (Juan 11: 15). Los defensores del sensus plenior
sugeriran que Caifs obviamente no tena idea de la muerte expiatoria de Cristo y
por tanto que estaba profetizando cosas que l no entenda. Los opositores a ese
punto de vista alegaran que Caifs entendi lo que haba profetizado (era mejor que
un hombre muriera en vez de toda la nacin), y slo que l no entendi las
implicaciones totales de lo que dijo.
Esto, afirman ellos, es un fenmeno natural y frecuente en la comunicacin: los
hombres a menudo entienden el significado de lo que dicen sin entender todas sus
implicaciones. Los escritores bblicos, de la misma manera, entendieron lo que
profetizaron, pero es probable que no entendieran todas las implicaciones de sus
profecas. El apndice C enumera lecturas adicionales sobre este asunto.
Literal versus simblico.
Un tercero y muy prctico asunto en la interpretacin de la profeca se refiere a
cunto de la profeca debe interpretarse literalmente, y cunto simblica o
analgicamente. Por ejemplo, un enfoque literal a laprofeca a menudo concibe la
"bestia" de Apocalipsis como una persona (note que el acontecimiento no es
totalmente literal); un enfoque simblico la ve como una personificacin de la lujuria
y el poder. Un enfoque literal considera a Babilonia como una ciudad verdadera (a
menudo considerada como Roma), mientras que un enfoque simblico ve a Babilonia
como el deseo del lucro econmico. Los literalistas a menudo ven la ltima batalla
como una batalla fsica verdadera; los simbolistas la ven como la representacin de la
victoria del bien sobre el mal.
La cuestin no es entre un enfoque literal estricto y uno simblico estricto; aun los
ms estrictos literalistas toman algunas cosas como simblicas. Por ejemplo, el
entendimiento literal del pasaje respecto a la mujer que se sienta sobre siete montes
(Apocalipsis 17:9) sugerira que esos eran montes muy pequeos o que ella tena una
figura bastante extraa. En el sentido inverso, aun los ms recalcitrantes simbolistas
interpretan algunas cosas literalmente. As que las diferencias entre literalistas y
simbolistas son relativas y no absolutas, e incluyen asuntos como "qu tanto" o "cul
parte" de la profeca debiera interpretarse simblica y no literalmente.
En ciertas partes de la profeca algunos intrpretes prefieren el enfoque analgico,
una clase de va media entre el literalismo y el simbolismo estrictos. En este enfoque,
se interpretan literalmente las declaraciones, pero luego se traducen a su
equivalencia moderna de nuestra poca. La batalla de Armagedn, por ejemplo, no se
pelea con caballos y lanzas sino con analogas modernas (tal vez tanques y artillera).
El fundamento lgico subyacente a esta interpretacin es que si Dios le hubiera dado
a Juan una visin de los medios de transporte y equipos modernos, el apstol no
arrepentir del mal que haba pensado hacerles, y en un instante hablar de la gente
y del reino, para edificar y para plantar. Pero si hiciere 10 malo delante de mis ojos,
no oyendo mi voz, me arrepentir del bien que haba determinado hacerle.
Esos versculos ayudan a calificar el concepto de la inmutabilidad de Dios con ms
claridad. A veces Dios cambia sus acciones predichas para seguir siendo consecuente
con su carcter. Puesto que a veces los hombres cambian su conducta y su relacin
con Dios, Dios cambia sus acciones predichas hacia ellos de manera correspondiente,
para seguir siendo consecuente con su propio carcter de amor y justicia. La misma
disposicin de condicionar las profecas nacionales basndose en la respuesta del
hombre se halla en las acciones de Dios hacia las personas que se arrepienten (por
ejemplo, 1Reyes 21:1-29). De modo que tal vez sea sabio reconocer que las profecas
pueden llevar implcitas una condicin aun si la condicin se declara explcitamente.
Un slo significado versus significados mltiples.
Un asunto final, y uno respecto al que hay considerable controversia entre los
evanglicos contemporneos, es si los pasajes profticos tienen uno o varios
significados. Quienes abogan por mltiples significados usan una variedad de
trminos para describir su posicin, tales como "doble significado", "doble referencia",
"mltiples cumplimientos" o "sentidos mltiples".
En los primeros captulos ya se han considerado los problemas tericos y prcticos
inherentes a cualquier sistema de exgesis que afirme que un pasaje puede tener una
variedad de significados. Payne presenta una excelente crtica de la posicin de
mltiples significados, y tambin examina los principios de interpretacin de profeca
que son consecuentes con el concepto de un slo significado intencional en cada
pasaje. Su anlisis es la base de los prrafos siguientes.
Afirmar que los textos bblicos tienen un slo significado de ningn modo niega el
hecho de que el significado puede tener una variedad de aplicaciones en diferentes
situaciones. Igual principio se aplica a pasajes profticos y su cumplimiento, como
Payne ilustra:
Las epstolas del Nuevo Testamento, por tanto, repetidamente citan profecas del
Antiguo Testamento, aunque no en referencia a su verdadero cumplimiento; por
ejemplo, 2 Corintios 6: 16 cita Levtico 26: 11 (sobre la presencia de Dios con su
pueblo en el todava futuro testamento de paz), 6: 17 cita Isaas 52:11 (sobre la
partida de la impura Babilonia), y 6:18 vierte libremente Oseas 1:10 (sobre la
inclusin de los gentiles en la familia de Dios), todo para ilustrar el presente gozo de
los cristianos de la presencia de Dios y nuestra necesidad de mantenernos separados
de la impureza del mundo, aunque slo el ltimo, Oseas 1:10, tiene este significado
original en mente. Por eso Terry [M. S. Terry, Hermenutica bblica, p. 383] aclara:
"Podemos admitir que las Escrituras son susceptibles de aplicaciones prcticas
multiformes; de otra manera no seran tan tiles para la doctrina, la correccin y la
instruccin en justicia (2 Timoteo 3:16)." Aunque l permanece firme en su insistencia
en un slo cumplimiento de la profeca bblica.
3. Satisfacer una peticin o deseo (Ester5:8; Salmo 145: 19; Proverbios 13:19);
4. Llevar a cabo lo prometido (Levtico 22:21);
5. Conformarse o obedecer una exigencia (Glatas 5: 14; Santiago 2:8; Mateo 3: 15);
6. Correspondencia de frases, ilustraciones o acontecimientos entre un perodo
histrico y otro (Mateo 2:23, cf. Isaas 11:1; Jeremas 31: 15, d. Mateo 2:17-18; Isaas
9:1-2, d. Mateo 4:13-16).
Evidentemente, aplicar las denotaciones del espaol de la palabra cumplir a sus
ocurrencias en el texto bblico algunas veces resultar en una interpretacin que el
autor no tena en mente.
Anlisis teolgico.
Para los estudiantes interesados en la profeca, hay muchos pasajes paralelos que
pueden consultarse. A veces tales pasajes ocurren dentro del mismo libro, como en
los casos cuando la profeca es dada en ciclos. Con frecuencia otros profetas hablaron
del mismo tema, agregando detalles adicionales no contenido en el pasaje en estudio.
El ndice de la Enciclopedia de profeca bblica de Payne contiene una lista alfabtica
de temas en la profeca, junto con las referencias de pasajes bblicos pertinentes y el
estudio de tales pasajes.
Anlisis literario.
Una vez que se ha determinado que el pasaje es proftico o literatura apocalptica,
aumenta la probabilidad de alusiones simblicas o analgicas. Los conceptos de
prediccin progresiva, cumplimiento gradual y contraccin proftica pueden aplicarse
para entender el texto como corresponde. En la interpretacin de la profeca como en
otros tipos de literatura bblica, es importante la comparacin del trabajo de uno con
el de otros. La complejidad de los temas, la amplia gama de pasajes paralelos, y la
multitud de alusiones poco usuales hacen imperativo valerse de la riqueza de
conocimiento de los eruditos que han estudiado ese aspecto a profundidad.
Resumen
Se han analizado los siguientes pasos para interpretar los tipos y la profeca:
Tipos
1. Anlisis histrico-cultural y contextual: Determinar la importancia dentro del
tiempo y cultura del tipo y del antitipo.
2. Anlisis lxico-sintctico: Seguir los mismos principios que con otras formas
literarias.
3. Anlisis teolgico: Buscaren el texto los puntos de correspondencia entre el tipo y
su antitipo en la medida que se relacionan con la historia de la salvacin.
4. Anlisis literario:
a. Descubrir alguna semejanza o analoga notable entre el tipo y su antitipo.
b. Descubrir alguna evidencia de que el tipo fue sealado por Dios para representar la
cosa tipificada.