Gallez Pablo - El Informe de Schapenham (Yamanas)
Gallez Pablo - El Informe de Schapenham (Yamanas)
Gallez Pablo - El Informe de Schapenham (Yamanas)
Pablo J. Gallez
1. El informe de Schapenham
Los Ymana (vulgo Yaghanes) vivan en los canales situados entre la isla
Grande de Tierra del Fuego y el Cabo de Hornos. Eran los indgenas ms australes
del mundo. La mayora de los antroplogos que los conocieron antes de su
extincin (1), y de los arquelogos e historiadores que los estudiaron despus,
coinciden en afirmar que la primera descripcin de esta etnia y de sus costumbres,
es la de Robert Fitz-Roy, en 1830. Estos cientficos no han tenido conocimiento del
informe que presentamos aqu, debido al vicealmirante holands Geen Huygen
Schapenham, y anterior en 206 aos al relato de Fitz-Roy. El informe Schapenham
ha pasado casi desapercibido, quizs porque no ha sido publicado
independientemente, sino como parte del diario de a bordo de la Amsterdam, nave
capitana de la Flota Nasvica, editado en 1626 en Amsterdam. (2) Dos versiones
francesas del siglo XVIII tampoco parecen haber merecido la atencin de los
etnlogos. (3) El nico autor moderno que se acord del informe de Schapenham
es Martn Gusinde. En la introduccin histrica de su obra maestra Die Yamana,
copia sin comentarios (4) la traduccin alemana publicada en el libro atribuido
errneamente a Adolph Decker. (5) En el presente trabajo, nos guiamos por el
texto original en holands arcaico, reeditado por el historiador Voorbeijtel
Cannenburg en su excelente estudio sobre la Flota Nasvica. (6)
oscuro y bronce". (8) Gusinde dice que la piel de los Ymana es "blanca tirando a
pardo o amarillo". (9)
4. Pintura corporal
"Se embadurnan el cuerpo y lo pintan de muchas maneras: unos se adornan
con pintura roja la cara, las piernas, los brazos, las manos otros llevan una mitad
del cuerpo en rojo y la otra en blanco, de manera que cada uno est pintado de una
manera particular." La descripcin de Fitz-Roy es ms sencilla: "Los individuos de
ambos sexos se enaceitan o embadurnan con grasas y se estucan cara y cuerpo de
rojo, negro o blanco." En opinin de Joseph Emperaire, que ha pasado varios aos
con los fueguinos (10), "la pintura corporal... era ms ritual que ornamental. Pero
la significacin de los colores, la disposicin de los motivos, lneas y puntos, negros,
blancos o rojos, las circunstancias en las cuales se pintaban el cuerpo, sern para
siempre desconocidas." Gusinde dice que cada manera de pintarse la cara y el
cuerpo tiene un significado particular y se utiliza con fines determinados.
Ejemplifica e ilustra con dibujos estos usos en mltiples circunstancias. (11) Mircille
Guyot expone tambin el sentido de la pintura corporal de los Ymana. (12)
5. Figura y estatura
"Su figura es apuesta, sus miembros bien proporcionados, y su altura parecida
a la de los europeos."
Tampoco est de acuerdo Fitz-Roy sobre su figura, pues dice que los Ymana
"son bajos de estatura, de aspecto desagradable y mal proporcionados... Su talla
vara de 1m65 a 1m45, pero sus torsos corresponden a hombres de 1m80... El
pasar tanto tiempo en wigwams bajos, o acurrucados en canoas pequeas,
perjudica el desarrollo de sus piernas y les hace moverse agachados, con las
rodillas muy dobladas. Con todo, son giles y ms bien robustos". Gusinde escribe
que "su figura es irregular y su aspecto miserable causa lstima". (13) En el mismo
sentido opinan otros observadores. Ricardo Latcham escribe (14) que la talla media
de los varones era de 1m58 y la de las mujeres 1m47; Rau los ve ms pequeos
an: 1m4O y 1m2O respectivamente, y "con piernas torcidas"; (15) Lucas Bridges
les asigna 1m62 y 1m4O. (16) Estas estaturas son netamente inferiores a lo que un
holands poda considerar como una "altura parecida a la de los europeos".
6. Cabellos y dientes
"Tienen el cabello negro; lo llevan largo y tieso para parecer ms terribles;
sus dientes son filosos como cuchillos." Fitz - Roy da mayores detalles: "El pajizo
recubrimiento de sus feas cabezas es ralo y mugriento y les cuelga por las orejas y
por casi todo el semblante. Por encima mismo de los ojos lo recortan con una
concha quebrada... Las mujeres tienen un cabello ms largo, menos spero y por
cierto ms limpio que los hombres. Se lo peinan con una quijada de tonina, pero no
se lo atan ni trenzan; tampoco se lo cortan, salvo por encima de los ojos." Los
dientes bien filosos son una caracterstica comn a todos los pueblos que comen
carne cruda, como lo hacan los Ymana con la carne de ballena. (17)
7. Vestimenta
"Los hombres andan completamente desnudos, sin cubrir sus vergenzas,
pero las mujeres se tapan con un pedacito de cuero, se pintan como los hombres, y
se adornan el cuello con un collar de conchas. Algunos indgenas, pero pocos, se
cubren los hombros con una piel de foca, que les da poca proteccin contra el fro,
tan extremo en esta regin, que es maravilla que puedan aguantar el invierno." Fitz
- Roy coincide con esta descripcin: "A veces estos remedos de seres humanos
llevan una piel de guanaco o de lobo marino echada a la espalda, y acaso cuelga al
frente una de pingino o un trozo de cuero; pero con frecuencia nada llevan para
conservar el calor ni ocultar su desnudez, excepto un parche de cuero alrededor de
la cintura, atado al costado y por atrs... Las mujeres van algo ms vestidas; se
envuelven en una piel casi entera de guanaco o de foca y llevan generalmente un
diminuto delantal." Es original la interpretacin de Gusinde: "No llevan ropa
ninguna para que el fuego pueda calentar directamente sus cuerpos." (18) En
cuanto al fro, los holandeses estn ms de acuerdo con los espaoles que con los
exploradores ingleses del siglo XIX, que dijeron repetidas veces que el clima del
archipilago sud-fueguino es similar al de Escocia. (19) La mnima absoluta
registrada es de 12 C bajo cero, a nivel del mar.
8. Chozas cnicas
"Construyen sus chozas o casitas con troncos de rboles; redondas abajo,
terminan en forma de punta, a manera de las tiendas de campaa, con una
apertura en la parte ms alta para dejar escapar el humo." Fitz - Roy coincide con
esta descripcin: "El wigwam tekeenica (es decir la choza ymana) es de forma
cnica, hecho de una cantidad de lar,,os postes, rboles jvenes colocados uno
junto a otro, formando crculo, y unidos por la extremidad delgada." Altieri agrega
"un grueso palo plantado en el medio"; (20) la foto de la choza Ymana publicada
en Argentina Austral XV N 155, p. 16, muestra una vivienda netamente cnica.
Annette Laming Emperaire ve las chozas "generalmente cnicas en vez de tener la
forma de cpula" porque las compara con las chozas ms o menos hemisfricas de
los Alak'aluf. (21) Gusinde hace la distincin entre los Ymana orientales que usan
la choza cnica, y los occidentales que construyen la misma choza en cpula que
los Alak'aluf. (22) Los de Navarino pertenecen, por supuesto, a los orientales.
Hyades describe la choza ymana como "ramas clavadas en tierra y unidades en su
parte superior". (23) El grabado adjunto, que adorn la edicin del diario de a
bordo, da a las chozas la forma troncnica en la parte inferior y cnica en la
superior. Es la interpretacin, por el dibujante (que no particip del viaje), de la
expresin "a manera de las tiendas de campaa". En Europa occidental, las tiendas
ms simples tenan la forma cnica, mientras las ms lujosas correspondan a las
del grabado.
9. Chozas semienterradas
10. Cestera
"No se encuentran en ellas sino unas pocas canastillas de junco..."
Hasta su extincin en nuestro siglo, los Ymana no tuvieron otros "muebles" que
las canastillas de junco trenzado que fabricaban las mujeres durante las largas
jornadas de inaccin, es decir cuando el mal tiempo no permita pescar. Ellas
usaban unas canastillas para guardar sus aperos de pesca, otras para sus objetos
personales. Entre los Alak'aluf, (27) que doblaban los juncos acercndolos al fuego;
los Ymana deben haber utilizado una tcnica parecida; segn Altieri, ablandaban
los juncos por masticacin. (28) Gusinde presenta hermosos dibujos de estas
canastas hechas preferentemente con el junco Marsippospermum grandiflorum.
(29)
12. Armas
"Tienen varios tipos de armas. Unos llevan arcos y flechas con punta de piedra
en forma de arpn, hechas con mucho arte. Otros se arman de largas lanzas cuya
punta es un hueso filoso provisto de dientes para clavarse mejor en las carnes.
Utilizan tambin garrotes y hondas que manejan con mucha eficacia, as como
cuchillos de piedra bien afilados." La lanza y el arpn son elementos comunes a los
Ymana y a los Alak'aluf. Se cree generalmente que el arco y las flechas fueron
tomados de los Selk'nam, si bien el arco ymana era ms pequeo. El informe de
Schapenham prueba que este prstamo es anterior al siglo XVII. Varios autores
modernos consideran que la lanza y el arpn se usaban para matar peces, nutrias y
focas, el arco y las hondas para cazar pjaros (33) y los garrotes para las peleas
individuales o intertribales. Segn Weddell, la honda era el arma, de tiro ms
utilizada. (34) Fitz-Roy escribe que "el hombre, donde vaya, lleva siempre la honda
suspendida del cuello o de la cintura". Agrega que un hondanazo tiene mayor
alcance que un tiro de mosquete. En febrero de 1624. los Ymana mataron a 17
holandeses "con palos, hondas y picas", (35) y Allen Gardiner, en 1851, fue
amenazado por Ymana armados de hondas, (36) lo que indica que las hondas y
lanzas eran tambin armas de guerra.
14. Canoas
"Sus canoas son dignas de admiracin. Para construirlas, toman la corteza
entera de un rbol grueso; la modelan, recortando ciertas partes y volviendo a
coserlas, de manera que adquiera la forma de una gndola de Venecia. La trabajan
con mucho arte, colocando la corteza sobre maderos, como se hace con los barcos
en los astilleros de Holanda. Una vez obtenida la forma de gndola, refuerzan la
canoa cubriendo el fondo de punta a punta con palos transversales, que recubren a
su vez de corteza; luego cosen el conjunto. En estas canoas, que miden 10, 12, 14
16. Antropofagia
"Aparte
de
que
se
alimentan
de
carne
humana
cruda..."
Juan Hilarin Lenzi (50) atribuye el origen de la fama de antropofagia de los
Ymana a Jemmy Button, (51) quien habra hecho "tragar un grueso anzuelo" a
Carlos Darwin, que acompaaba la segunda expedicin de Fitz - Roy. "Bast eso
para que la inexactitud, la calumnia, el absurdo, dieran entonces la vuelta al mundo
con su libro y otros que recogieron la falsa noticia". E. Lucas Bridges, que se ha
criado con los Ymana, en la misin de su padre, asegura que an en casos de
hambruna, ningn Ymana hubiese jams comido carne humana, ni siquiera carne
de animales, como el zorro o el buitre, que podan haber comido carne humana.
(52) Su padre afirma que "el canibalismo es absolutamente imposible entre los
Ymana". (53) Sin embargo, Emperaire ha descubierto, en unos kikken mdding,
seales que considera inconfundibles de antropofagia entre los antiguos Alak'aluf,
primos hermanos de los Ymana. (54) Bien antes de Darwin, los fueguinos y
patagones estn acusados de antropofagia por casi todos los viajeros de los siglos
XVI y XVII, incluso por el P. Snchez Labrador (55) en el siglo XVIII. Esta creencia
proviene originariamente de la muerte de Sols, devorado por los Charra segn
afirman que se trataba de una antropofagia ritual, destinada a adquirir la fuerza y
la habilidad de la vctima, y que, salvo en esta ceremonia, no era costumbre de los
Charra comer carne humana. Los Charra entraban en el grupo "Patagones" lato
sensu, y su fama se extendi incluso a los fueguinos. Cuando, en 1600, dos
holandeses de la flota de Van Noort fueron asesinados por los Alak'aluf en el
Estrecho de Magallanes, los indgenas se llevaron sus cuerpos, v Van Noort no dud
que los iban a comer. (56) Joseph Emperaire opina que "los dos marineros de Van
Noort fueron probablemente comidos". (57)
Para colmo, mientras Schapenham exploraba con el patache la Baha Nassau,
17 marineros del barco Arend de la Flota Nasvica fueron asesinados en la
Pennsula Hardy por los Ymana que se llevaron doce de los cadveres. Los
holandeses quedaron convencidos que los indgenas los haban comido. (58) Tal fue
el relato que oy Schapenham a su vuelta de la exploracin por la baha, y estos
acontecimientos no podan dejar de influir en la apreciacin que da de los Ymana
en su informe. Fitz - Roy, a quien los Ymana no comieron ningn marinero, ha
sido mucho ms severo en su apreciacin de los indgenas.
17. Religin
"... y de que no hemos notado en ellos el menor rasgo de religin..." En
realidad, los Ymana tenan una vida espiritual rica y variada, pero no todos los
autores la califican de la misma manera. Thomas Bridges afirma que "no reconocen
un creador". (59) Para su hijo Lucas, "los Yaganes tenan gran respeto por la magia
y la brujera y esas criaturas salvajes de los bosques llamadas Hanush y Cushpij los
'aterrorizaban". (60) Segn Paulotti, "la vida mental de los Ymana se
caracterizaba por el sorprendente desarrollo y complejidad de sus concepciones
religiosas, tanto ms inesperado cuando se pone en parangn con la simpleza
ejemplar de su cultura material". (61) Martn Gusinde, apstol de los Ymana,
define su religin como monotesta. Su dios Hidabuan es la fuente primera de todas
las cosas y de todas las normas ticas que rigen la vida diaria de las familias. (62)
21. Xenofobia
"... Mostrando al principio mucha amistad para con el extranjero, con la
intencin de atacarlo y asesinarle cuando se le presentar la oportunidad, como
ocurri con los 17 hombres de la nave Arend." Esta apreciacin se basa
evidentemente en la trgica experiencia de los das anteriores. Por supuesto, es
imposible saber si alguno de los marineros asesinados haba tenido con los Ymana
una actitud que stos han podido interpretar como lesiva o amenazadora, o si los
indgenas actuaron por el simple y quizs natural afn de robar o matar al
extranjero, por pacfico que ste pareciera. En este mundo de conjeturas,
recordemos que los marineros no iban armados, (71) lo que hace improbable una
provocacin deliberada de su parte. Pero un malentendido es siempre posible. Por
otra parte, el asesinato de los misioneros de Wulaia en 1859 da toda la razn a
Schapenham, y Thomas Bridges, que siempre toma la defensa de los Ymana,
reconoce que "eran pendencieros, mostrndose a la vez de carcter artero y
traidor". (72)
22. Conclusin
Es una suerte para la ciencia que el primer observador de los Ymana, en
1624, sin ser un etnlogo, haya sido una persona muy culta y meticulosa, capaz de
hacer de su breve visita un informe conciso y meduloso. La gira de Schapenham
por la Baha Nassau dur solamente cinco das, del 21 al 25 de febrero de 1624. Vio
a los Ymana en la costa sur de Navarino. Su relato trae un panorama de casi todos
los aspectos de la vida de los indgenas. Hubo que esperar -dos siglos, hasta la
vigila de Filtz - Roy en 1830, para tener confirmacin de una parte de estos datos,
y otro siglo ms, hasta Gusinde, para,disponer de informaciones detalladas sobre la
vida y las costumbres de este pueblo. (*)
Notas
(1) Los pocos sobrevivientes de Mejillones (Isla Navarino) no son considerados
como de sangre pura.
(2) Iovrnael Vande Nassausche Vloot Ofte Beschriivingh vande Voyagie om
den gantschen Aerdt-Cloot ghedaen met elf Schepen: Onder 't beleydt vanden
Admirael Iaques L'Hermite ende Vice-Admirael Geen Huygen Schapenham inde
Iaeren 1623, 1624, 1625 en 1626. Amsterdam, Gerritsz & Wachter, 1626.
(3) Ren Augustin de RENNEVILLE: Recueil des voyages qui ont servi
l'tablissement et aux progrs de la Compagnie des Indes Orientales forme dans
les Provinces Unies des Pays-Bas. Amsterdam, J. P. Bernard 1702-1706, Tomo IV.
La misma versin est reproducida en gran parte en la obra del Abb PREVOST:
Histoire gnrale des voyages, 25 tomos, La Haya, 1747-1780.
(4) Martn GUSINDE: Die Feuerland Indianer, 3 tomos in-49; Vol. 11: "Die
Ymana: von Leben und Denken der Wassernomaden am Kap Hoorn", WienMdling 1937 (1.500 pginas), pp. 52-53.
(19) Opinin referida por Rae Natalie P. de Goodall: Tierra del Fuego, Buenos
Aires 1970, p. 11.
(20) Andrs R. ALTIERI: "Los indios Ymana de la Tierra del Fuego" in Revista
de Geografa Americana, Ao V n 55 (abril 1938), p. 234.
(21) Annette LAMING EMPERAIRE: "Pcheurs des archipels et chasseurs des
pampas" in Objets et mondes, Revue du Muse de I'Homme, Tome XII N? 2, Paris
1972, p. 173.
(22) Martn GUSINDE, o. c., pp. 367 - 378.
(23) Paul Daniel HYADES: Mission scientifique du Cap Horn 1882-1883, tomo
VII "Anthropologie et ethnographie", p. 342. Paris, Gauthier-Villars 1887.
(24) Junius BIRD: "The Archaeology of Patagonia" in Handbook of South
American Indians, Washington, Smithsonian Institution 1946, Vol. 1, pp. 17-24.
(25) E. Lucas BRIDGES, o. c., p. 67.
(26) Annette LAMING - EMPERAIRE: "Sites prhistoriques en Patagonie
chilienne" in Objets et Mondes, XII N9 2 (o. c.), pp. 207 y 210.
(27) Joseph EMPERAIRE, o. c., p. 156.
(28) Andrs R. ALTIERI, o. c., p. 235.
(29) Martn GUSINDE, o. c., pp. 502-507.
(30) Thomas BRIDGES: "Datos sobre Tierra del Fuego" in Revista del Museo
de La Plata, tomo III (1892), p. 314.
(31) E. Lucas BRIDGES, o. c., p. 95.
(32) Andrs R. ALTIERI, o. c., p. 234, y dibujos pp. 236 y 237.
(33) Flix F. OUTES, o. c., p. 53.
(34) James WEDDELL: A Voyage towards the South Pole, performed in the
years 1822-1884. London, Longmans & Green 1825.
(35) Linschoten LXV, o. c,, p. 47.
(36) Cf. E. Lucas BRIDGES, o. c., p. 31.
(37) Idem, p. 71.
(38) Armando BRAUN MENENDEZ: Pequea historia fueguina, Buenos Aires,
Emec 1959, p. 38.
(39) Martn GUSINDE, o. c. p., 439-448.
93.
(50) Juan Hilarin LENZI: Tierra del Fuego, Buenos Aires, Progreso 1967, p.