Alternativa Ovni Revista #7
Alternativa Ovni Revista #7
Alternativa Ovni Revista #7
ENTREVISTA A
JACQUES VALLE
POSIBLE
AVISTAMIENTO OVNI
EN SAN JUAN
OVNIS Y MILITARES,
UNA FBRICA DE
LEYENDAS
UN ANLISIS SOBRE EL
CASO RUBEN MENESES
(1981)
INFORME:
RESOLUSIN
DE CASOS DEL
CEFAE
HISTORIAS CURIOSAS:
LA OTRA FILMACIN
DEL ALUNIZAJE
CONTENIDO:
Editorial // pg 3
Noticias de inters // pg 4
Posible avistamiento de
aeroforma no
identificada en
Pampa del Leoncito, San Juan // pg 6
Entrevista con Jacques Valle // pg 12
Resolucin de casos del CEFAE // pg 18
Elementos para el estudio comparado de la morfologa del humanoide del caso Ruben Meneses (1981)
con criaturas del fondo mitolgico de la cultura criolla del Litoral Argentino // pg 29
Ovnis y militares, una fbrica de leyendas // pg 38
Las otras fotos del alunizaje // pg 57
Ufotrash el lado bizarro // pg 60
Director y editor:
Carlos Sainz
Editorial:
Ao IV N 7
Julio 2016, Buenos Aires Argentina
Las opiniones expresadas en
los artculos de esta revista son
de exclusiva responsabilidad
de sus autores y no
necesariamente representan la
opinin del editor director.
Se autoriza la reproduccin
parcial o total y la difusin del
contenido de esta
revista sin fines de
lucro y sujeta a que se cite la
fuente.
Zona de observacin general correspondiente a distintos puntos situados a lo largo de la ruta nacional
149 y 152.
Imgenes obtenidas al azar por Ral Daz al costado de la ruta 149, en Pampa del Leoncito, previas a la
salida de la Luna.
Imgenes obtenidas al azar por Ral Daz en el interior de la Pampa del Leoncito, que cubren la salida
de la Luna.
En plena Pampa del Leoncito y con bastante fro, (de izq. a der.): Luis Emilio Annino, Ral Daz, Ariel
Godoy, Alejandro Asalgado, Mariano y Ricardo Pasquale. (Fotografa gentileza Esteban Pieroni)
Sencilla representacin grfica de la aeroforma observada durante el viaje desde la ruta 149 hacia la
152.
Tpicos petroglifos que se pueden contemplar en el cerro Tunduqueral. (Fotografa gentileza Esteban
Pieroni)
Vase http://www.astrocantabria.org/astrocantabria.org/documentacion/leonidas.html
Se trata del sector conocido como Barreal Blanco de la Pampa del Leoncito. En
https://es.wikipedia.org/wiki/Barreal_Blanco
2
En
El Cerro Tunduqueral, tambin reconocido como Apus Tundunqueral, est emplazado a 7 Km.
del paraje de Uspallata, y fue para los pueblo incaicos un lugar sagrado, elegido por las mujeres
durante las noches de luna llena para celebrar rituales femeninos. Vase
http://www.uspallata.com.ar/cerro_tunduqueral_1.html
7
http://www.diariodecuyo.com.ar/home/new_noticia.php?noticia_id=647525
----------------------------------------------------------------
Luis Emilio Annino: es autor del blog Orbita Cero Mendoza (orbitaceromendoza.blogspot.com/),
miembro de CEFORA (Comisin de Estudios del Fenmeno OVNI de la Repblica Argentina), de
CEFAI-UAPSG (Centro de Estudios de Fenmenos Areos Inusuales), colaborador en carcter de
corresponsal investigador del Captulo Argentina de MUFON (Mutual UFO Network) y
coordinador del Caf Ufolgico de Mendoza (integrante de la Red Argentina de Cafs Ufolgicos).
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Y la segunda razn?
La otra razn es que la religin necesita ser
actualizada. No es que no se pueda creer en los
ngeles, pero, por ejemplo, el Papa, hace unos
meses, dijo que iba a bautizar a un extraterrestre.
Esto es increble! Hay un libro escrito por dos
jesuitas del observatorio astronmico del Vaticano
que titularon "Bautizar a un extraterrestre?".
Esto significa que incluso el clero catlico es
consciente de que necesitan actualizarse con un
poco de ciencia y que necesitan actualizar las
creencias de la gente.
As que tienes estas dos corrientes convergentes.
En los EE.UU. converge en el sentido opuesto
porque los ministros Baptistas dicen que
cualquiera que cree en ovnis debe ser lapidado
hasta la muerte. Un predicador dijo en la
televisin de los EE.UU., que eran cosas del
diablo, por supuesto, debido a la capacidad del
demonio para manipular nuestras percepciones y
hacernos caer en la tentacin. De todos modos, la
creencia en los ovnis est tomando una forma
nueva. Es muy interesante que Papa Francisco
dijera que iba a bautizar a un alien. Usted
ahora puede citar al Papa!
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Curiosidades de la
astronoma
El observatorio astronmico ms
antiguo que an se conserva
El observatorio de Cheomseongdae, en
Kyongju, Corea del Sur, fue construido entre
632-647 y se utiliz para observar las estrellas
y predecir el tiempo. Mide 9,17 m de altura X
5,35 m en la base.
Cuntas estrellas hay en el cielo
El nmero de estrellas que se pueden observar
a simple vista desde la Tierra es de algo ms
de 8.000, la mitad para cada hemisferio.
La montaa ms alta del Sistema
Solar
El monte Olimpus, en Marte, alcanza los 24
km de alto. La segunda son los montes
Maxwell, en Venus, que se elevan 11 km sobre
el nivel medio de la superficie del planeta. El
pico oficialmente ms alto de la Tierra es el
monte Everest, que llega hasta los 8,8 km por
encima del nivel medio del mar. Sin embargo,
el Mauna Kea de Hawaii tambin puede
reclamar ser el ms alto, ya que se eleva 9 km
sobre el fondo del ocano sobre el que se
asienta.
17
Las fotos y videos recibidos, aun habiendo sido resueltos como clsicos "OVIs",
tienen un gran valor didctico para los estudiosos, sirviendo tambin como
ejemplos de ufologa comparada a nivel internacional.
Los casos estn agrupados por orden cronolgico. La mayora han sido titulados
con el nombre del testigo (quien previamente diera su consentimiento). Algunos
casos han sido caratulados slo con localidad y fecha por no contarse con el
consentimiento del testigo para que su nombre sea publicado.
A efectos de mantener un mximo nivel de transparencia, si eventualmente
surgieran discrepancias con las conclusiones aqu expuestas, se invita a que las
mismas sean presentadas personalmente por quien aduzca oposicin, en nuestra
Oficina, trayendo consigo pruebas contundentes que demuestren lo contrario. Si
bien todo el mundo tiene el derecho de expresarse libremente, cualquier
discrepancia vertida en redes sociales o foros de Internet sin haber confrontado
personalmente con nuestros resultados, no ser considerada una oposicin
cientfica vlida.
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28
En este trabajo aportamos algunos elementos para el estudio comparado de la morfologa del
humanoide que habra sido observado por el Sr. Rubn Meneses en cercanas de San Luis del
Palmar (Corrientes - Argentina) en diciembre de 1981, en el curso de lo que los investigadores del
fenmeno OVNI llaman encuentro cercano del tercer tipo (Hynek, 1979: 37-38, en adelante: EC3),
con criaturas del fondo mitolgico de la cultura criolla del litoral argentino.
Hechos del Caso Rubn Meneses (1981). En la exposicin de los hechos del Caso Rubn Meneses
(1981) nos servimos del artculo de Francisco Villagrn publicado originalmente en el diario El
Litoral de Corrientes, el lunes 28 de diciembre de 1981 en pgina 18 1.
1. Localizacin y circunstancias. Los hechos habran ocurrido en cercanas de la ciudad de San
Luis del Palmar (Corrientes Argentina) el martes 15 de diciembre de 1981
aproximadamente a las 15:30, cuando el Sr. Rubn Meneses, entonces de 40 aos de
edad, que se desempeaba como chofer de un camin volcador [dumper truck] de la
Direccin Provincial de Vialidad, patente W 013976, se diriga en el mismo: desde Paso de
la Patria a San Luis a buscar a un grupo de compaeros que estaban trabajando all
(Villagrn, 1981: 18).
2. Inicio del EC3: eran las 15,30 ms o menos, cuando estaba cerca de San Luis del Palmar,
veo una luz muy fuerte al costado de la ruta, pienso que es el sol, pero no puede estar tan
1
Este artculo es el segundo de una serie de dos notas firmadas por Villagrn tituladas de forma genrica
Corrientes en la senda de los OVNIS, la primera de las cuales Un sugestivo fenmeno ocurrido en Derqui
fue publicada en El Litoral, Corrientes, domingo 27 de diciembre de 1981, p. 18.
29
bajo a esa hora, entonces mir atrs y vi el sol. La luz se me vino encima y cuando quise
acordar la tena sobre m me encegueci, sent como el camin volcador de Vialidad se
mova y vea pasar a autos y camiones a mucha velocidad en la ruta. Sent en todo el
cuerpo como un hormigueo y vi la cabina y todo el camin envueltos en una luz blanca
muy potente, que atravesaba todo. Despus me semidesvanec, y aunque en ningn
momento perd totalmente el conocimiento, me pareca que vea las cosas como con
somnolencia (Villagrn, 1981: 18).
3. Desarrollo del EC3: Durante el tiempo que dur esto, me v en un lugar todo espejado,
como si fuera de acero inoxidable, yo estaba boca abajo, como suspendido en el aire, y
haba un ser de no ms de un metro de estatura, parado en una semipenumbra, y yo sent
que me haca preguntas y yo le contestaba, pero mentalmente (telepata) es decir yo vea
como imgenes mentales. Tena la frente con muchas arrugas y me llam la atencin el
brazo ms largo de lo comn (Villagrn, 1981: 18).
4. Desenlace del EC3: Cuando me di cuenta estaba a 6 km. de Bern de Astrada2. Tuve
mucho miedo, manej como pude y llegu a Bern de Astrada y fui a la polica, de all
avisaron a Vialidad en General Paz y me vinieron a buscar en un auto de la polica de all
(Villagrn, 1981: 18).
5. Hechos posteriores al EC3: Segn el Dr. Alberto Vidal, mdico que atendi primero al Sr.
Meneses este hombre tuvo una tremenda experiencia, porque cuando me avisaron para
que lo vaya a ver a su casa, estaba con un ataque de nervios total, tena mucho miedo por
lo que le haba pasado y lloraba como un chico. Realmente yo nunca vi un hombre en ese
estado. Tiene que haber tenido una experiencia terrible que lo afect profundamente, de
otra manera, la cosa no tiene explicacin. Yo lo atend unos das y luego le aconsej que
fuera a Corrientes para que lo viera un especialista, pero al parecer no le fue muy bien. A
pesar de todo, ahora por lo menos habla algo y puede ver la luz, cosa que antes no
ocurra. Est tomando constantemente medicamentos, porque desde esa fecha casi ni
duerme ni come () Lo nico que le qued como marca es una franja rojiza en los ojos,
que ahora se le est disipando, y que prcticamente no lo dej ver la luz durante varios
das. Todava hoy anda con anteojos oscuros hasta dentro de la casa, porque le molesta
mucho la luz (Villagrn, 1981: 18) el propio Meneses seal respecto de su experiencia
que En fin, no quiero acordarme de esto, cuando quiero dormir, se me presenta todo lo
que me pas y tengo mucho miedo, no puedo dormir ni comer (Villagrn, 1981: 18) y que
habra experimentado estreimiento (Villagrn, 1981: 18). Sealemos que segn el
entonces Jefe de Vialidad Provincial en General Paz, Sr. Ramn Maldonado () [a]
Meneses () lo hicieron llamar de Gendarmera de Corrientes, para declarar (Villagrn,
1981: 18).
2
Esto supone que Meneses habra sido teletransportado por un Objeto Volador No Identificado, desde las
inmediaciones de San Luis del Palmar, hasta cerca de Bern de Astrada, casi 110 km (Villagrn, 1981: 18)
en menos de 40 minutos (F. A.V., 1995).
30
Isomorfismo de la entidad del Caso Rubn Meneses (1981) con figuras mticas de la cultura
criolla del litoral Argentino. Examinamos aqu los elementos comunes que la morfologa del
humanoide del Caso Rubn Meneses (1981) [en adelante: CRM] presente con criaturas del fondo
mitolgico de la cultura criolla del litoral argentino con arreglo a una de las tricotomas del signo
propuestas por Charles S. Pierce (Blache,1982: 44):
1. Nivel Icnico = como se percibe sensorialmente a la figura mtica: En el CRM se describe
"un ser de no ms de un metro de estatura (Villagrn, 1981: 18) lo que nos remite a la
figura del Pombero del que dicen que es pequeo (Blache, 1982: 51), del Yas Yater,
que se presenta como un ser pequeo (Blache, 1982: 64), o el Curup un enano moreno
y fornido (Morales, 1960: 75).
En tanto en el CRM el testigo afirma que le llam la atencin el brazo ms largo de lo
comn (Villagrn, 1981: 18) de la entidad, Girala Yampey escribe que el Pombro es de
estatura baja, brazos largos, y piernas cortas (Yampey, 2006: 80).
En el CRM la entidad Tena la frente con muchas arrugas (Villagrn, 1981: 18) detalle
este de las arrugas que encontramos en el Kurup sobre el que Franklin Rveda dice:
Su cuerpo es rugoso
Y sin coyunturas
Y al rbol aoso
Su piel se parece
(Rveda, 1971: 29)3
La entidad del CRM estaba parado en una semipenumbra (Villagrn, 1981: 18) lo que
tiene inters en tanto (1) la nota de indefinicin se ha sealado en relacin al Pombero
(Blache, 1982: 59): Escurridizo como es, no se deja ver () Lo mencionan como invisible,
aunque muchos afirman haberlo visto (Yampey, 2006: 80), lleva un sombrero de paja
grande, el que le cubre el rostro (Lopz Brard, 2004: 283); (2) la dificultad que tienen
los informantes para distinguir () [la] fisonoma del Yas Yater (Blache, 1982: 65) cuyo:
rostro (es) irreconocible (Lopz Brard, 2004: 157); y del Kurupi se dice que su: andar
se siente y se oye pero es muy difcil verlo (Yampey, 2006: 73).
La pobreza de datos con referencia a lo icnico que Martha Blache observa en las
narraciones sobre la figura del Pombero (Blache, 1982: 59) se advierta en el relato del
CRM que examinamos.
La capacidad del Kurupi de tomar la apariencia de un rbol de piel rugosa o de corporeizarse como un
indgena () de piel rugosa es indicada por Yampey, 2006: 73.
31
2. Nivel indicial = como expresa su actuar: El CRM se produce a las 15,30 ms o menos
[=siesta] de un mes de diciembre [=verano] (Villagrn, 1981: 18) lo que se corresponde
con actantes coadyuvantes del Yasy Yater (Blache,1982: 65-66) que es rubio, de tanto
andar bajo los implacables rayos solares de las ardientes siestas (Yampey, 2006: 76);
escribe Blache: la siesta y el verano, con su connotacin de sol y calor. La siesta en un
clima tropical representa un riesgo. Es el momento del da en que se suspende la
actividad, se acallan los ruidos, la luz reverbera y enceguece, un calor sofocante y
agobiante emana de la bruma. Se asocia al Yasy Yater con el verano, el momento
radiante del sol (Blache, 1982: 66).
El sol tiene en el CRM un papel significativo: veo una luz muy fuerte al costado de la ruta,
pienso que es el sol, pero no puede estar tan bajo a esa hora, entonces mir atrs y vi el
sol (Villagrn, 1981: 18) 4. El testigo agrega que: La luz se me vino encima y cuando quise
acordar la tena sobre m me encegueci () vi la cabina y todo el camin envueltos en
una luz blanca muy potente, que atravesaba todo (Villagrn, 1981: 18), en tanto el
Pombero sostiene un bastoncito de oro que: refulge al sol, atrayendo y encandilando
(Lopz Brard, 2004: 283).
Por fin, sealemos que tambin a la siesta actan el Kuaraj Yara (Morales Segovia, 2005a:
9), el Kurup (Morales Segovia, 2005a: 10), el Pombero (Morales Segovia, 2005a: 15) y el
Pomberito:
ese duende misterioso,
muy glotn y petisito,
que vive en los bananales
de la siesta campesina
(Rveda, 1971: 36)
En el CRM el testigo es abducido [Morey Ripoll (Coord.), 1997: 14-25] y el Kuara yara
suele llevarse a los nios recin nacidos (Gonzlez, 1966: 73-74) mientras que el Jasy
Jater persigu(e) a los nios traviesos, a quienes rapta para lamerlos y dejarlos luego
abandonados a su suerte (Lopz Brard, 2013: 20) y el Curup suele vagar a la hora de la
siesta para raptar nios (Morales, 1960: 75); escribe Enesto Morales: El Curup forma,
con el Yas Yater y el Pombero, una trinidad cuyo solo nombre lleva terror al corazn de
las madres indias (Morales, 1960: 83).
El testigo es regresado pero no sin consecuencias que el Dr. Alberto Vidal describe en
estos trminos: este hombre tuvo una tremenda experiencia, () estaba con un ataque
de nervios total, tena mucho miedo por lo que le haba pasado y lloraba como un chico.
4
Sobre la asociacin del Pombero con un mito solar ver Lopz Brard, 2004: 283 284 y tambin Lopz
Brard, 2013: 25.
32
Realmente yo nunca vi un hombre en ese estado (Villagrn, 1981: 18); tambin quien
retorna tras haber sido llevado por el Pombero experimenta consecuencias: se queda
tonto (Blache, 1982: 50) o con problemas mentales que lo llevaron a la locura (Fabro et
al., 2001: 63).
En el CRM el testigo habra sido teletransportado () casi 110 km (Villagrn, 1981: 18)
en menos de 40 minutos (F.A.V., 1995) y el Pombero: puede trasladarse de un lugar a
otro con increble rapidez (Yampey, 2006: 79).
El testigo del CRM dice sent que me haca preguntas y yo le contestaba, pero
mentalmente (telepata) es decir yo vea como imgenes mentales (Villagrn, 1981: 18).
Tanto el Pombero (Morales Segovia, 2005b: 19-20) como el Curup (Morales, 1960: 76-77)
hablan y se comunican con los humanos.
3. Nivel simblico = como la valoriza el informante: No se registran en el relato del CRM
elementos sobre la valoracin hecha por el testigo al momento del EC3 solo se indica que
al ser entrevistado afirma: no quiero acordarme de esto, cuando quiero dormir, se me
presenta todo lo que me pas y tengo mucho miedo, no puedo dormir ni comer
(Villagrn, 1981: 18).
El CRM, la mitologa OVNI y la experiencia religiosa. El CRM presenta elementos propios de la
mitologa OVNI5 que aqu no examinamos pero indicamos con beneficio de inventario como la:
1. Abduccin [Morey Ripoll (Coord.), 1997: 14-25]: Durante el tiempo que dur esto, me v en
un lugar todo espejado, como si fuera de acero inoxidable, yo estaba boca abajo, como
suspendido en el aire (Villagrn, 1981: 18).
2. Teleportacin [Morey Ripoll (Coord.), 1997: 359] 6: cuando estaba cerca de San Luis del
Palmar () sent como el camin volcador de Vialidad se mova () Cuando me di cuenta
estaba a 6 km. de Bern de Astrada (Villagrn, 1981: 18).
Para el testigo su experiencia se presenta como una historia verdadera (Eliade, 1994: 13): tena mucho
miedo por lo que le haba pasado (Villagrn, 1981: 18), por ello en el estudio de la mitologa OVNI es
atendible la observacin hecha por Mircea Eliade cuando afirma que: Para tener xito en su tarea, el
historiador de las religiones no est obligado a pronunciarse sobre la autenticidad de tal o cual caso preciso
de levitacin ni a limitar su examen al estudio de las condiciones en las cuales un tal caso puede realizarse;
toda creencia en el vuelo mgico, todo rito de ascensin, todo mito que comporta el motivo de una
comunicacin posible entre la Tierra y el Cielo son igualmente preciosos para el historiador de las religiones;
cada uno representa un documento espiritual de gran valor, por cuanto esos mitos, esos ritos, esas
creencias expresan a la vez situaciones existenciales del hombre en el Cosmos y traicionan sus deseos
oscuros y sus nostalgias. En cierto sentido, todos esos hechos son reales, por cuanto cada uno de ellos
representa una experiencia espiritual autntica donde el alma humana se ha encontrado profundamente
comprometida (Eliade, 1961: 111).
33
3. Tiempo perdido [Morey Ripoll (Coord.), 1997: 362]: Despus me semidesvanec, y aunque en
ningn momento perd totalmente el conocimiento, me pareca que vea las cosas como con
somnolencia (Villagrn, 1981: 18).
Tambin se registran elementos de la experiencia religiosa como:
1. El vuelo mgico (Eliade, 1961: 123-136): el camin volcador de Vialidad se mova y vea pasar
a autos y camiones a mucha velocidad en la ruta (Villagrn, 1981: 18).
2. La luz mstica (Eliade, 1984: 21-97): veo una luz muy fuerte al costado de la ruta, pienso que
es el sol, pero no puede estar tan bajo a esa hora, entonces mir atrs y vi el sol. La luz se me
vino encima y cuando quise acordar la tena sobre m me encegueci () y vi la cabina y todo
el camin envueltos en una luz blanca muy potente (Villagrn, 1981: 18)
El CRM y las creencias folklricas vivas. Los elementos comunes de la morfologa del humanoide
del CRM con criaturas del fondo mitolgico de la cultura criolla del litoral argentino pueden
entenderse atendiendo al hecho, sealado por Susana Chertudi 7 (siguiendo a Linda Dgh 8), que la
leyenda de creencia (belief-legend) presente en la sociedad industrial moderna en los relatos en
torno de los objetos voladores no identificados (OVNI) (AAVV, 1978: 173) est entretejida con
otras manifestaciones de creencias folklricas vivas (AAVV, 1978: 172) 9, y si ello se puede afirmar
de una sociedad industrial moderna con mayor razn de una sociedad como la de Corrientes que
presenta al momento del hecho rasgos propios de sociedades tradicionales (Espinola-Acosta
Rivellini, 1993: 190).
Papel de los peridicos en el entretejido de la mitologa OVNI con creencias folklricas vivas.
Seala Villagrn refirindose a la exposicin que hace de los hechos del Caso Rubn Meneses
(1981) que: El que sigue es el relato casi textual de lo que l nos cont (Villagrn, 1981: 18),
expresin que visibiliza la funcin: 1) de intermediacin del periodista entre el fenmeno y su
evaluacin final (Banchs, 1994: 39)10, 2) de los peridicos en el entretejido de la mitologa OVNI
con creencias folklricas vivas, en este punto es orientadora la observacin de Blache referida al
6
En la entrada se hace referencia a la teleportacin del matrimonio Vidal y su automvil desde Chascoms
(Argentina) hasta Mxico, en lo que result ser un montaje publicitario detenidamente examinado por
Alejandro Agostinelli, 2009: Entre la neblina, pp. 131-167.
7
En su trabajo: La leyenda folklrica en la Argentina en AAVV, 1978: 165-173.
8
Chertudi remite a: Dgh, Linda: The Belief Legend in Modern Society: Form, Function, and Relationship to
Other Genres. (En: American Folk Legend. A Symposium, ed. Wayland D. Hand. University of California Press,
Berkeley-Los Angeles-London, 1971, p. 55-68) (AAVV, 1978: 173).
9
Sobre el carcter vivo de las creencias folklricas de la cultura criolla del litoral argentino recomendamos el
artculo de Buenaventura R. D. Tern, Vigencia de la narrativa guaran-jesuitizada en el folklore del litoral
fluvial: Aporte al conocimiento de la literatura oral de la regin baada por el rio Paran, en Suplemento
Antropolgico - Universidad Catlica (Asuncin - Paraguay), Vol. XVII, n 1, junio 1982, pp.213-230, tambin
del mayor inters es el texto de Fabro et al., 2001.
10
Sobre esto vase Banchs, 1994: La informacin periodstica, pp. 23-42.
34
Yas Yater: Tambin funcionan como elementos coadyuvantes las publicaciones en los
peridicos, que ocasionalmente, segn algunos informantes, narran casos del Yas Yater. La
comunidad asigna calidad de cierto a lo expresado por la palabra escrita (Blache,1982: 69).
Bibliografa
AAVV 1978:
Introduccin al Folklore.
Buenos Aires, ed. Centro Editor de Amrica Latina, 1978.
Agostinelli, Alejandro 2009:
Invasores - Historias reales de extraterrestres en la Argentina.
Buenos Aires, ed. Sudamericana, 2009.
Banchs, Roberto E. 1994:
Fenmenos areos inusuales.
Buenos Aires, ed. LEUKA - Librera Editorial Universitaria Kennedy Argentina, 1994.
Blache, Martha 1982:
Estructuras del miedo.
Buenos Aires, ed. Plus Ultra, 1982.
Eliade, Mircea 1994:
Mito y realidad.
[Colombia], ed. Labor, trad. cast. de Luis Gil, 1994.
Eliade, Mircea 1984:
Mefistfeles y el Andrgino.
Barcelona, ed. Labor, trad. cast. de Fabin Garca-Prieto, 1961.
Eliade, Mircea 1961:
Mitos, sueos y misterios.
Buenos Aires, ed. Compaa General Fabril, trad. cast. de Lysandro Z. D. Galtier, 1961.
Espinola, J. Cesar y Acosta Rivellini, Luis G. 1993:
Percepciones sobre la realidad poltica y social de Corrientes.
en Revista de Estudios Regionales, Segunda poca, N 2, Octubre 1993, pp. 189-205.
Fabro, Maria Teresa et al. 2001:
Costumbres, mitos y creencias de Corrientes.
Corrientes, ed. del autor, 2001.
35
F. A.V. 1995:
Antecedentes en Corrientes.
en El Litoral, Corrientes, mircoles 1 de noviembre de 1995, p. 2.
Gonzlez, Miguel H. 1966:
Creencias populares correntinas.
en Selecciones Folklricas Codex, Ao 1 N 11, Julio de 1966, pp. 73-75.
Hynek, J. Allen 1979:
El informe Hynek.
Buenos Aires, ed. Javier Vergara, trad. cast. de Ariel Bignami, 1979.
Lopz Brard, Miguel Ral 2013:
Mitos de la Regin Guaran.
Corrientes, ed. Moglia, 2013.
OVNIS, UN DESAFO A LA
CIENCIA ACCESIBLE ONLINE
La legendaria revista argentina Ovnis, un
desafo a la ciencia dirigida y editada por
el Dr. Oscar Galindez fue recientemente
digitalizada y subida a internet. Desde el
enlace compartido abajo pueden acceder a
sus diez nmeros editados.
http://alternativaovni.blogspot.com.ar/20
16/03/revista-ovnis-un-desafio-laciencia.html
NOVEDADES EDITORIALES:
Dbora
Goldstern
debuta
editorialmente con
Secretos
Subterrneos de los
Mundo Olvidados
Un anlisis a fondo
de de historias y
leyendas sobre la
mtica Cueva de los
Tayos.
El
joven
investigador
paraguayo, Ronald Maidana
Torres nos trae su primer
trabajo Ovnis en el Paraguay
primer libro sobre
este
fenmeno escrito en dicho
pas. Ms de 400 pginas en el
cual
hay
variedad
de
documentos y fotografas y un
largo recorrido investigativo
del autor para luego volcar en
las pginas de su obra.
37
INTRODUCCIN
Los autores llevamos dcadas investigando el fenmeno ovni, esto es, el conjunto de informes de avistamientos de
objetos volantes no identificados. Nuestros estudios y las muchas encuestas e indagaciones de casos que hemos
realizado nos llevan a la conclusin de que no existe tal fenmeno, al menos no como una manifestacin de tecnologa
extraterrestre.
La investigacin de informes ovni es polidrica y tan diversa en enfoque, mtodo y herramientas como los variados tipos
de estmulos, efectos, sucesos y episodios (naturales y artificiales, pero siempre convencionales) que los generan.
Pero este estudio est trufado de inconvenientes y dificultades. Unas son intrnsecas y otras extrnsecas a la naturaleza
del fenmeno u objeto observado. Las primeras tienen que ver con nuestra habilidad a la hora de hallar la causa de la
confusin o mala interpretacin visual. Pero las segundas son ms traicioneras porque tienen que ver con la
tergiversacin de la informacin, la exageracin o deformacin de los datos, o incluso con la total invencin de las
historias, desde la fuente original hasta que llega al investigador.
El presente ensayo cubre una muestra de informes en donde se dan dichas circunstancias. Y versa sobre un tipo
especfico de observacin ovni: aqulla en la que personal militar habra estado pretendidamente implicado en unos
sucesos que se han ocultado del conocimiento pblico. Los ltimos aos noventa fueron un periodo muy prolfico de
informacin y desinformacin ovni en Espaa. Aunque no se vivi ninguna oleada como las de los cincuenta, sesenta o
setenta, esta dcada trajo consigo el histrico proceso de la desclasificacin de archivos ovni del Ejrcito del Aire (1-5).
Pero, adems, supuso la aparicin de muchos relatos sobre avistamientos y sucesos extraordinarios con el denominador
comn de haberse desarrollado en un entorno castrense y haberse silenciado.
DISPAROS EN LA PLAYA
Una de las ms esperpnticas historietas que circularon en el mundillo nacional de los ovnis en los aos noventa tuvo
como protagonistas a un grupo de soldados de reemplazo en Gran Canaria. Los hechos ocurrieron en el mes de abril
de 1991 y se localizaron en la playa del Diablito, en el municipio de Mogn. El primero en cuchichear en la prensa sobre
el caso fue el periodista cataln Josep Guijarro, en una entrevista que public en noviembre de 1992 Karma-7, un
fanzine de lo misterioso.
Pero fue el novelista navarro Juan Jos Bentez quien lanz al respecto dos trileres de una pelcula que nunca lleg a
estrenar. En septiembre de 1993 declara a la revista Ms All, dedicada a lo paranormal: Uno de los incidentes ms
impresionantes ha sido el de una alerta militar en Canarias, con deteccin en radar de un objeto, y que lleva a una
patrulla hasta la costa. Estoy tras la confirmacin de la salida de varios helicpteros Puma que emprendieron un violento
tiroteo contra unos seres que, segn los testigos, parecan transparentes. Esta historia, desde luego, no creo que la
veamos desclasificada en la vida.
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El 3 de octubre siguiente, en una entrevista del articulista y contactado canario Francisco Padrn, publicada en el
Diario de Avisos de Santa Cruz de Tenerife, el novelista citado ofrece el segundo triler, ahora con ms detalles:
Hubo una alerta porque se haba detectado la presencia de un OVNI. Acudi al lugar una patrulla de polica militar con
perros y participaron que yo sepa- dos helicpteros. Se produjo un tiroteo disparndose sobre unos seres que, segn los
testimonios de los soldados all presentes con los que he podido hablar, eran como transparentes. Las balas no les
afectaron. Lo que ms le llam la atencin a estos muchachos, componentes de la patrulla, aparte del gran susto de ver
aquellos seres, fue la presencia de un oficial, concretamente un capitn, al que nunca haban visto y que, pistola en
mano, dirigi el tiroteo con una increble frialdad, dndoles la impresin de que estaba especialmente adiestrado para
este tipo de acciones. Lgicamente, el suceso no transcendi. Los soldados fueron amenazados, seriamente, hasta el
punto que, transcurrido el tiempo, despus de licenciarse, nos est costando muchsimo trabajo arrancarles las palabras
porque, an, continan aterrorizados. Les metieron, de manera brutal, el miedo en el cuerpo.
Tres aos despus, fue el periodista Bruo Cardeosa quien resucit el caso en la edicin de febrero de la revista
esotrica Ao Cero: una noche de abril de 1991, sobre la 1,30 o las 2 de la madrugada, un grupo de soldados de la Base
Area de Gando que estaban viendo la televisin fueron alertados por un capitn y un sargento que les ordenaron
levantarse a fin de cumplir una misin. Los radares del Escuadrn de Vigilancia Area n 21 (estacin ubicada en el Pico
de las Nieves, de nombre clave Papayo) haban detectado ecos no identificado al suroeste de la isla. Se trataba de una
accin rpida, embarcando en un helicptero Super-Puma del SAR (Servicio Areo de Rescate) que les llev a una playa
del sur de la isla. All, alertados por la presencia de ecos no identificados sobre ese mismo lugar, comenzaron a ver
sombras por todos los lados, de dos metros de altura y completamente negras, saliendo de la orilla. A la orden del
capitn abrieron fuego, pero las balas no les hacan nada y las sombras, unas diez o quince, desaparecan y volvan a
aparecer en otro lado. As durante 45 minutos. Segn el artculo, basado en un informador llamado Jos Andrs M.S.,
los hechos se repitieron dos semanas despus.
Unos y otros han repetido esa informacin en distintos medios y no es nuestro propsito dar la retahla de sitios
donde la han colocado de relleno en artculos alimenticios, excepto cuando se aporten nuevos antecedentes. Tampoco
nos haremos eco de las elucubraciones, conjeturas y especulaciones de unos y otros, que carecen de base como se ver
luego.
Otra revista del ramo, con el acertado ttulo de Enigmas, vuelve a abordar la historieta de la mano de ngel Briongos y
Bruno Cardeosa, en un especial publicado en julio de 1997. La versin es prcticamente la misma de la nota de 1996,
con los aadidos y cambios siguientes:
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Separadamente, tambin nos comunicamos con la jefatura del Escuadrn de Vigilancia Area n 21, estacin de radar
que habra registrado la presencia ovni, cuya respuesta no dejaba lugar a dudas: en esta Unidad no figuran
antecedentes sobre los sucesos que en la citada carta relataba. (Ver facsmil).
(Ver facsmil).
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Navegando a zona asignada encuentro con NAVOCFORMED (fuerza naval de la OTAN en el Mediterrneo). Sin ms
novedad.
(Ver facsmil).
En un sorprendente artculo (Enigmas, enero de 1997), Manuel Carballal asegura que el informe incluye cdigos
confidenciales de identificacin militar para el lanzamiento de misiles. Son cosas del mal asesoramiento, pues nada en
las siglas del encabezamiento del (supuestamente verdadero) tlex tiene que ver con cdigos relacionados con misiles
sino con el remitente y los (tambin supuestos) destinatarios. En el mismo artculo, Carballal relaciona al buque
directamente con la Guerra del Golfo. Lamentable error: la misin del buque fue escuetamente participar en la
operacin Southern Guard de control y vigilancia del trfico martimo en el Mediterrneo Oriental, del 21 de enero al 25
de marzo de 1991, para regresar a Espaa das despus (6).
Inmediatamente despus de conocer el primero de estos artculos, y lejos de aceptar ciegamente lo que leamos,
iniciamos las indagaciones pertinentes. Comunicamos el artculo al Mando Operativo Areo (MOA), ya que entonces
estaba precisamente ocupado por mandato del Jefe del Estado Mayor del Aire (JEMA) en la desclasificacin de los
archivos ovni del Ejrcito del Aire, proceso en el que uno de los autores tuvo un papel activo en su inicio y desarrollo (7).
La seccin de Inteligencia del MOA cuenta con un miembro del ejrcito de Tierra y otro de la Marina, por lo que se hizo
cargo del tema el capitn de fragata Solinis. El 5 de julio de 1994 un telefax del MOA remitiendo fotocopia del artculo
citado es dirigido a la Extremadura, buque desde donde presuntamente se vio y detect el ovni.
(Ver facsmil).
La respuesta verbal de los responsables del navo no dejaba lugar a dudas: negativo. Tales hechos, que tericamente
apenas haban sucedido dos aos antes, eran desconocidos por sus mandos y por su tripulacin, no haba ninguna
anotacin ni de lejos semejante en el cuaderno de bitcora, ni exista parte alguno del presunto incidente. O como nos
dijo en romn paladino un oficial del MOA, eso se lo han inventado (8).
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Deseando profundizar todava ms, a las pocas semanas Plana llam por telfono al capitn de navo jefe del gabinete
del almirante, quien le coment, en abierta conversacin, que en el mensaje fraudulento haban hallado no menos de
diez errores, entre otros, cifras falsas que tienen que ver con la forma de expresin de la fecha y del ao en curso,
trigramas equivocados (instrucciones para la transmisin de mensajes), trminos marinos en desuso como viga, en
lugar del actual serviola, sin olvidar que dos de los destinatarios del mensaje eran incorrectos (el COMANDES-41,
comandante del Mando de Escoltas/Escuadrilla 41 no es un mando orgnico de la fragata y el AJAL, almirante jefe de
Apoyo Logstico no tiene relacin alguna con el tipo de asunto tratado).
Es de suponer que el autor de la falsificacin estara familiarizado con la redaccin de mensajes de la Armada, ya que su
estructura era similar. Bastara que fuese alguien que haba hecho el servicio militar en ese buque, por ejemplo, que en
aquellas fechas se hallara aproximadamente en la zona indicada. Se trata, en resumidas cuentas, de un documento
rotundamente falso y el episodio que narra es del todo irreal.
Es pattico que se d pbulo a mensajes de ignorada procedencia sin una contrastacin seria de los datos. Si se hubieran
hecho las comprobaciones que todo estudioso o periodista est obligado a hacer, se habra cado en la cuenta de la
falsedad del documento. Creemos que la ufologa espaola est muy necesitada de control de calidad.
F-18 EN PERSECUCIN DE UNA QUIMERA
En mayo de 1997 la revista Ao Cero sorprenda desde los quioscos al desprevenido lector con estos gruesos titulares:
Un OVNI gigantesco pone en jaque a la defensa area espaola. El Ejrcito exige silencio a los testigos. Si entonces
hubiera existido La Sexta y Twitter esto hubiera ascendido a trending topic. Resumiremos lo que se contaba en un
artculo firmado por Bruno Cardeosa, aunque desde el principio la informacin puede ponerse en cuarentena porque,
en palabras del autor, nos vemos obligados a modificar algunos datos para que nuestras fuentes no sean identificadas y
evitar posibles represalias (sic). Precaucin superflua, por cierto, puesto que en el artculo se ofrecen los suficientes
datos como para que los protagonistas fueran rpidamente identificados por la autoridad militar... si sta tuviese el
menor inters en meter un paquete al originador de la patraa, perdn, de la narracin. Por otro lado, los testigos
estaban ya identificados, puesto que, supuestamente, se les haba exigido silencio. Cmo les
gusta a algunos recrear situaciones dramticas, propias de novela negra, para realzar lo infumable! A pesar de tan burda
contradiccin, el responsable de propagar la historia opta por el escenario de unos testigos que siguen amenazados.
Siempre segn el articulista, a las 2,30 de la madrugada del 30 de noviembre de 1996, los emplazamientos de radar
militar EVA-1 y EVA-2 (Escuadrones de Vigilancia Area) de Inogs (Zaragoza) y Villatobas (Toledo) detectaron tres ecos
anmalos de color rojizo que, unidos por una tenue lnea amarilla, formaban un tringulo equiltero. Su posicin
coincida con la vertical de la poblacin de Jaca (Huesca) y el tamao del conjunto era cercano a los 4 kilmetros. En
Pegaso, el centro de operaciones del Ala de Alerta y Control que centraliza la informacin de todos los EVAS, ubicado en
la base area de Torrejn, se recibe la seal de los dos radares.
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justamente en su cola. Tras la maniobra, el triple eco se sita sobre Bilbao, recorriendo los 180 km que separan Jaca de
Bilbao en dos o tres minutos.
Los pilotos, segn el relato suscrito por Cardeosa, recibieron rdenes de perseguir las esferas de luz, que continuaban
haciendo maniobras inverosmiles. Al llegar a la zona donde se encontraban, stas volvieron a abalanzarse sobre los
aviones de combate para desaparecer en direccin a Jaca y quedar nuevamente estticas sobre la localidad oscense.
Despus de dos horas de vuelo, los cazas se replegaron a su base, desvanecindose entonces los ecos de las pantallas
del radar. Hasta aqu la historia que, portada aparte, se despleg en cuatro pginas enteras de la citada revista.
El articulista revela que en marzo haba escrito a la Oficina de Relaciones Pblicas del Ejrcito del Aire. En efecto, en un
fax fechado el da 13 de marzo de 1997 Cardeosa citaba un suceso ocurrido en noviembre de 1996 y preguntaba si se
desclasificaran los informes cuando la investigacin concluya, asumiendo, naturalmente, la veracidad de los hechos.
Adems solicitaba autorizacin para entrevistarse con el jefe del EVA-1. Se le respondi seis das despus lo que es bien
sabido acerca de la responsabilidad de las Fuerzas Areas en esta materia, a saber, que el Ejrcito del Aire no formula
declaraciones ni realiza valoraciones sobre los fenmenos OVNI. No se estim oportuno la pretendida entrevista al jefe
del Escuadrn de Vigilancia Area N 1, por ser una unidad que tiene asignadas funciones estrictamente tcnicas y
siendo la ORP la encargada de las relaciones con la prensa.
Como ya es notorio, entre 1992 y 1999 toda la informacin ovni archivada en el Ejrcito del Aire dej de estar clasificada
y pas a estar en el dominio pblico. En la actualidad, la nica responsabilidad del Ejrcito del Aire consiste en abrir una
investigacin cuando se denuncie por vas reglamentarias un avistamiento y proceder a la desclasificacin de la
informacin una vez finalizada sta. Aunque la normativa oficial al respecto (IG-40-5) contempla la posibilidad de que la
informacin pueda no desclasificarse por razones de seguridad nacional, por ejemplo, cuantas veces se ha activado esta
Instruccin General desde su emisin en 1992 la encuesta oficial ha visto seguidamente la luz, desclasificndose
ntegramente.
El 10 de abril de 1997, la Oficina de Relaciones Pblicas recibe un segundo fax, ahora del redactor jefe de Ao Cero,
detallando los datos conocidos del suceso del 30 de noviembre de 1996. Dando su realidad por supuesta, solicita la
versin oficial, adelantando ya que la premura de tiempo me obliga a publicar nuestro reportaje en muy pocos das. La
ORP del EA s hizo las averiguaciones oportunas antes de responder. La contestacin fue explcita y no se anduvo por las
ramas. Esto fue lo que se replic a la revista, bajo el compromiso que supone un membrete oficial:
Le comunico que el Ejrcito del Aire ha realizado un estudio para comprobar los hechos ya mencionados, con los
siguientes resultados: En esa fecha no se orden ninguna salida de aviones en scramble desde la Base Area de
Zaragoza. No consta en los libros de control de ningn Escuadrn de Vigilancia Area anotacin alguna sobre fenmenos
extraos.
Por otra parte, aprovecho la ocasin para comunicarle que la informacin publicada en el ltimo nmero de su revista,
no se corresponde con ningn dato que obre en poder del Ejrcito del Aire. (nfasis de los autores).
Ms claro, agua. Todo lo publicado era un embuste, de principio a fin. Una ficcin contada a personas y medios con
grandes tragaderas. La revista pas de puntillas sobre la respuesta oficial. Primero, no le dio una cobertura proporcional
a la ficticia narracin original (grandes titulares, a todo color). Segundo, apostill que la respuesta no era original y le
pareca una frmula manida. Es digno de estudio el tipo de lgica que algunos usan cuando recurren a un organismo del
Estado.
Si ste no responde, es que oculta algn secreto. Pero si contesta y endereza las cosas, o sea, no les dice lo que les
interesa or, entonces es que faltan a la verdad.
El fax de ORP/EA hace mencin a un estudio. No es habitual que se use la palabra estudio a la hora de verificar si hay o
no conocimiento de un fenmeno ovni. Seal inequvoca de que en esta ocasin se investig el tema a fondo. Por vez
primera vamos a mostrar completa la secuencia de consultas internas que llevaron a la tajante respuesta oficial.
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16 de abril: el gabinete del Jefe del Estado Mayor del Aire (JEMA) manda un oficio al Mando Areo de Combate
(MACOM), sucesor del MOA y, por lo tanto, encargado tambin de los asuntos sobre ovnis, solicitando un informe al
respecto del fax de la revista.
21 de abril: el jefe de la 1 Seccin del MACOM, coronel Miguel Lens Astray, solicita al Grupo Central de Mando y Control
(GRUCEMAC) que informe.
28 de abril: respuesta del coronel jefe del GRUCEMAC (responsable de Pegaso) al MACOM: Se comunica a V.E. que el
pasado da 30 de noviembre de 1996 no se orden por parte de esta Unidad ningn SCRAMBLE desde la B.A. de
Zaragoza. Por otra parte, tampoco consta en los libros de Control ninguna anotacin sobre fenmenos extraos
observados por ningn EVA del Sistema de Defensa Area.
8 de mayo: oficio del teniente general Jernimo Domnguez Palacn, jefe del Mando Areo de Combate dirigido al Jefe
del Estado Mayor del Aire. De cuatro pginas de extensin, despus de sealar las averiguaciones (negativas) del
GRUCEMAC, califica el artculo como un cmulo de imaginacin novelesca que ataca directamente la imagen del
Ejrcito del Aire. En el escrito se manifiesta difana una indignacin no contenida. Nunca antes, que recordemos, un
escrito interno del Ejrcito del Aire aborda la posibilidad de plantear algn tipo de querella para evitar que las revistas
que escriben sobre estos temas continen vertiendo falsedades impunemente, provocando en el lector la sensacin de
ocultismo que atenta contra los intereses de nuestro Ejrcito, provocando el divorcio entre Sociedad y Ejrcito. (Ver
facsmiles).
Como es habitual, con el No obstante, V.E. resolver finaliza el escrito del general jefe del MACOM. El JEMA resolvi
con el criterio general que impera en la Administracin militar espaola, no entrar en situaciones que alimentan
polmicas estriles y que slo engordan a quienes las provocan.
No pensamos los autores que la revista o sus reporteros hayan inventado nada pero s que aceptaran, sin mediar filtro
crtico alguno, febriles narraciones que no se han verificado. Con el respeto que tenemos a los medios de comunicacin,
stos no pueden convertirse en dispensadores de basura informativa. Eso es propio de la prensa amarilla. Y no sirve
como excusa que fueron engatusados de buena fe. Las historias increbles merecen pruebas sobresalientes y no se
puede publicar cualquier cosa que le cuentan a uno, especialmente si pone en entredicho a terceros (9).
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Viendo esto se empez a especular de lo que podra ser y lo que ms convenca era que quizs fuese un dirigible
deshinchado, de algn concurso, pero cuando estbamos diciendo esto, el objeto vir sobre nosotros, causando la
alarma y armando el barco para la defensa antiarea, pero sus movimientos eran suaves y no mostraban ninguna
amenaza para nosotros en un principio. El objeto, una vez virado, se empez a elevar suavemente y cuando estaba a
unos 200 metros de nuestras cabezas desapareci, simplemente se dej de ver, cosa tambin muy extraa, ya que
tenamos muy buena visibilidad, pero desapareci. Sacamos evidentemente fotografas e incluso se film material que en
el momento de llegar a Turqua se requis para enviarlo a Espaa para su estudio y que por lo que se ve an lo estn
estudiando porque no se ha devuelto nada.
Tal como se lea, daba la impresin que el tal Joseba haba sido el testigo ocular. O que alguien le suministr el caso y
ste lo circul por el torrente de internet sin encomendarse ni a Dios ni al diablo. Se quisiera o no, lo cierto es que sirvi
como gancho para dar a conocer el grupo local.
Algunos detalles, como decimos, levantaban sospechas. Por ejemplo, la falta de datos espacio-temporales precisos y el
pretencioso toque literario que se apreciaba en la declaracin. Otros, sin embargo, indicaban que el redactor, al menos,
haba servido en la Marina. Calculamos enseguida que hubo luna llena el da 25 del mes del incidente, para contrastarlo
con la fecha exacta que nos diera el testigo, si llegbamos a saberla.
La verdad es que, como se ver, de no haber sido proactivos, este episodio se guardara errneamente en los archivos
de los estudiosos espaoles como un ejemplo ms del encubrimiento de los informes ovni por parte de los ejrcitos de
nuestro pas, uno de los mitos ms falaces e injustamente cultivados por la prensa amarilla.
El ltimo da de agosto de 1998 escribimos dos cartas. Una la dirigimos a Joseba Orraca Cadarso, nombre completo del
lder del Grupo UFO, y la otra al Cuartel General de la Armada. A finales de septiembre, el capitn de navo Juan Carlos
Muoz-Delgado Daz del Ro, a la sazn jefe del gabinete del Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada, tuvo a bien
exponernos que, lejos de encontrarse en el mar entre Espaa y Turqua, todas las navegaciones de la fragata Andaluca
en agosto de 1991 se limitaron a unas salidas a la mar entre los das 27 y 31 de agosto para pruebas de equipos en aguas
prximas a El Ferrol, permaneciendo el resto del mes atracada en el Arsenal de la citada Base Naval. El oficial de la
Armada, que califica el relato de invencin poco imaginativa, acaba su misiva lamentando que informaciones como
esta hayan hecho perder nuestro tiempo y el suyo. Con toda la razn del mundo. (Ver facsmil).
En cuanto a Joseba, ste se comunic con nosotros a la mayor brevedad, a travs del correo electrnico de la
desaparecida Fundacin Anomala, pero por razones que no vienen al caso solo lemos su mensaje a primeros del mes
de octubre. Joseba se apresur a aclararnos, de manera algo confusa, que el suceso no fue real. Es un documento
ficticio que se gener -nos explic- como prueba de que se pueden construir avistamientos y que los miembros del
Grupo UFO investigasen para demostrar si era verdad o mentira. No s cmo ese documento habr llegado a la red,
pero nos pondremos manos a la obra para descubrirlo y desmentirlo. (11)
No sabemos si por fin hubo un desmentido en la red. Pero ello merece una amonestacin. Distribuir va internet
informaciones fantasiosas es una prctica que desaconsejamos, porque stas pueden alcanzar una difusin enorme y es
difcil erradicarlas con posterioridad. Estamos seguros de que, dentro de unos aos, algn catlogo internacional de
casos ovni consignar este asombroso encuentro cercano marino.
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La carta fue trasladada al ministerio de Defensa y de all fue a recalar -como es lgico- en el MACOM, en donde les toc
la moral. Desde 1992, el Mando Operativo Areo (MOA), desde 1996 denominado MACOM, se haba empeado
arduamente en desclasificar en su integridad todos los informes ovni custodiados en el Ejrcito del Aire, a tal fin
centralizados en el MOA. Los gestores del MACOM estaban estupefactos de que, cuatro aos despus de iniciado el
proceso de desclasificacin y tras haber liberado ya unos setenta expedientes, alguien se descolgara con el dichoso mito
del alto secreto.
Fueron seis pginas de texto riguroso que contienen una historia resumida de la involucracin del EA espaol en la
cuestin ovni desde 1968. Seis folios que destilaban indignacin. sta fue la respuesta que el 7 de enero de 1997
devuelve el MACOM al gabinete del Jefe del Estado Mayor del Aire, de donde a finales de noviembre se les haba
solicitado informe que elevar al ministro. Se trataba de algo serio. El oficial responsable de la desclasificacin, autor del
informe que llevara la firma del teniente general Domnguez Palacn, volc all su malestar hacia la ignorancia del
ciudadano que desconoce el proceso oficial y el rigor que el Ejrcito del Aire dedica al tema ovni, lo que le induce a
obtener conclusiones muy distintas de la realidad, e incluso a emitir juicios de valor que no se ajustan a la verdad.
Este informe se inicia con los antecedentes histricos de la normativa oficial que se remontan a 1968, pasando por la
declaracin de materia reservada de la Junta de Jefes de Estado Mayor (JUJEM) en 1979, la nota informativa del 22/5/91
que propici la desclasificacin [y que, a su vez, fue motivada por la actuacin previa de uno de los autores, VJBO], la
notificacin del 15/1/92 de que el MOA pasaba a gestionar los asuntos ovni y la eliminacin de la clasificacin genrica
de la JUJEM del 14/3/92. Es llamativo -sigue diciendo la nota del MACOM-que el seor C----- no conozca la
desclasificacin de los expedientes, teniendo en cuenta que desde esa fecha han sido publicados infinidad de artculos
en prensa diaria, revistas, libros y programas de TV, con una gran polmica establecida entre los partidarios del proceso
de desclasificacin en curso y personas contrarias al mismo.
Tras dejar constancia de que desde septiembre de 1992 los expedientes desclasificados pueden ser consultados por los
ciudadanos en la biblioteca del Cuartel General del Ejrcito del Aire, el escrito puntualiza el incremento de expedientes
habidos desde que se recibi la documentacin de Seguridad de Vuelo en enero de 1992 hasta la actualidad, de 55 a
67" porque hubo necesidad de reestructurar y desdoblar algn expediente en varios o por haberse desde entonces
incoado nuevos expedientes.
El oficio resea las gestiones hechas por el MOA en la bsqueda de informacin a lo largo del proceso [que no nos
resistimos a puntualizar que se debi a la actuacin del equipo de investigadores dirigido por V.J. Ballester Olmos], que
ha dado lugar a la aparicin de documentos que no estaban incluidos en la documentacin inicial y que tambin han
sido desclasificados.
Esta ltima particularidad ha vuelto a aumentar hasta un total de 73 el nmero inicial de expedientes. (13)
Seguidamente, el informe se vuelca sobre la presunta observacin ovni del 26 de marzo de 1996. Y es contundente
cuando establece que: Realizada la oportuna consulta al GRUCEMAC, se informa que el citado da 26 no se efectu
ningn scramble a aviones del Sistema de Defensa Area. Adems, los scrambles son dados al avin que est de alarma
en 5 minutos o en 15 minutos, por lo que no despegan nunca dos cazas. Asimismo, ningn avin sobrevol unos
segundos despus de las 22:55 HL la poblacin de Benazolve (Len). (Ver facsmil).
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supuesto annimo, es familiar de uno de los testigos que estaban realizando el servicio militar y realiz las maniobras
nocturnas en la isla majorera. Este annimo familiar de un locutor annimo compaero de Padrn parece que cont
esto: Era de noche. Los quince hombres se encontraban al aire libre cuando, de repente, vieron aparecer, junto a la
montaa, una luz de color rojo muy fuerte. Todos se quedaron contemplando aquel fenmeno, a la vez que sealaban en
alta voz que era un ovni. El testimonio de todos ellos sealaba que aquel objeto extrao se mantuvo durante ms de
quince minutos y comenz a realizar una serie de movimientos extraos. Incluso hubo un momento en que les pareci
como si la nave se dividiera en dos partes. Unos se quedaron mirando de frente y otros volvieron la cabeza hacia atrs,
hacia donde se haba desplazado la fraccin. Al cuarto de hora ms o menos se volvieron a juntar y sta adquiri la
misma forma. As, lentamente, se fue alejando hasta que desapareci.
Escribe J. G. Gonzlez en El Da (Santa Cruz de Tenerife), el 12 de enero de 1997 que entrevist personalmente a uno de
los testigos. ste le precis que la observacin tuvo lugar la noche del da 5 o del 6 de noviembre del ao anterior. El
testigo, no identificado, relata que: sobre las 10 y mientras efectubamos el ejercicio de tiro nocturno, un objeto
luminoso de color blanquecino apareci por detrs de las montaas. Se mova lentamente, pero en todas direcciones.
Cambiaba de rumbo haciendo maniobras imposibles, mientras se desplazaba delante de nosotros en un arco de 180
grados. El objeto, al menos tres veces mayor que Venus, tras efectuar el desplazamiento se qued esttico en el aire y
disminuy su intensidad hasta alcanzar el tamao de una estrella ms. Para entonces los oficiales y suboficiales ya se
haban percatado de su presencia y ordenaron a la tropa a travs de un megfono que miraran hacia donde se
encontraba el objeto, mientras se repeta la observacin. Cuando la primera luz se detuvo apareci una segunda por el
mismo lugar, detrs de las montaas, comportndose de la misma forma, con movimiento en todas las direcciones y
describiendo la misma trayectoria. Cuando estaba a punto de llegar a la otra luz, retrocedi un poco para despus
avanzar lentamente. Realmente no s si se fundi con la otra o desapareci, ya que en ese momento nos llamaron al
orden y no pude percatarme de ms. Lo extrao es que nadie despus hablara del tema. En los das posteriores los
comentarios fueron escasos y solo entre los soldados.
Imgenes del campo de
maniobras del Ejrcito en Pjara
(Fuerteventura).
Fotos extradas de:
https://www.google.es/search?
q=campo+maniobras+pjara+fu
erteventura&biw=1024&bih=67
7&source=lnms&tbm=isch&sa=X
&ei=00aCVP7tG8n3UsuwhPgP&
ved=0CAcQ_AUoAg
Este testimonio, al tratarse de una fuente directa, parece ms fiable que el aparecido en Diario de Las Palmas. Hay, sin
embargo, algunos detalles que los separan: aqu las luces son dos y de color blanco y no una de color rojo; adems, no
hubo divisin de las luces y posterior unin, sino las evoluciones de esas dos luces blancas.
Se trataba de hechos autnticos? Por nuestra parte, pasamos a consultar a la Capitana General de Canarias, en Santa
Cruz de Tenerife, concretamente a su 5 Seccin, donde no se tena conocimiento oficial de los mismos. Desde all nos
remitieron al Acuartelamiento de El Cristo, Regimiento Mixto de Artillera n 93, en La Laguna, Tenerife, donde podan
estar destinados algunos de los supuestos testigos. All, el teniente coronel Lorenzo Hernndez Abad nos inform que
durante las maniobras de tiro nocturno se usan unos proyectiles iluminantes que llevan incorporada una bengala con
paracadas. Se hacen estallar a unos 400 o 500 metros de altura y su luz es blanca brillante. Dependiendo de la
disponibilidad y caractersticas de la prueba, suelen lanzarse de una a cuatro bengalas, formando un tringulo
equiltero, rombos o cuadrados, y su objeto, obviamente, es iluminar el blanco sobre el que van a hacer fuego las piezas
de artillera. Finalmente, el teniente coronel Hernndez Abad nos indic que estos ejercicios de tiro nocturno con ayuda
de bengalas se realizan siempre que salen de maniobras a Fuerteventura, a Las Caadas del Teide (Tenerife), etc.
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En vista de la coincidencia de lugar y descripcin de las luces, creemos que es razonable deducir que estas pruebas
nocturnas fueron la verdadera causa de la observacin del testigo ocular entrevistado por Gonzlez. Lo publicado en
Diario de Las Palmas seran variaciones del mismo tema al pasar por manos fantasiosas.
EPLOGO
Esto es slo un pequeo muestrario de lo que ha terminado siendo en Espaa cierto tipo de ufologa: una suerte de
chorroborro. Evidentemente, inventar unos y publicar otros historias de ovnis acaecidos en el entorno militar tiene
morbo. Y aunque sean falsas, sale gratis. Porque as como la naturaleza aborrece el vaco, el mando militar aborrece la
polmica y la desmedida voracidad pblica, y solo comenta hechos cuando son objetivos. Cul ha sido la actuacin del
Ejrcito del Aire espaol en lo tocante a los informes de observaciones ovni? Bien podemos
establecer un paralelismo con respecto a otros ministerios de Defensa de pases occidentales: 1968-1990 La informacin
es Confidencial o Reservada (se ignora la naturaleza del fenmeno). 1990-1999 La informacin se desclasifica por entero
(se constata que ni afecta a la Seguridad Nacional ni su estudio es de competencia militar).
En suma, una actuacin prudente, seria y profesional. El rumor malintencionado de que se oculta informacin ovni a
propsito es falso, pura mitologa. Los informes ovni que el EA ha guardado desde 1962 fueron desclasificados
completamente. Cierto es que hay cosas que se han perdido porque nunca llegaron al lugar de custodia oficial, pero
cuanto haba registrado ha visto la luz. Y en cuanto a la investigacin civil, alejada de la vertiente comercial: cuando logra
dar una explicacin a un misterio relacionado con los ovnis, se vierten acusaciones de estar a sueldo de la CIA, de ser un
agente desinformador o simplemente de ser un negativista (como el que niega los dogmas de la Iglesia es considerado
un hereje o ateo). O, terror de los terrores, lo que es peor, un escptico, que, aunque parezca increble, ha adquirido una
connotacin peyorativa en la atmsfera de credulidad que se ha creado en algunos mentideros reaccionarios en torno a
las observaciones de objetos volantes no identificados. De forma que lo que podra haber llegado a ser materia para
estudio acadmico se ha reducido, por parte de muchos uflogos, a un mero sostenimiento de creencias. De otro lado,
el enfoque racional hace de contrapeso, mediante el anlisis y la explicacin sistemtica de los sucesos.
Valencia y Tenerife, diciembre de 2014.
NOTAS Y REFERENCIAS
(1), V.J, Ballester Olmos, *Spanish Air Force UFO Files: The Secrets End, en MUFON 1993 International UFO
Symposium Proceedings, W.H. Andrus & I. Scott (editores), Mutual UFO Network, Inc. (Seguin, Texas), 1993, pp. 127168. 1993
(2) V.J. Ballester Olmos, UFO Declassification in Spain, en UFOs: Examining the Evidence, Mike Wooten (editor), British
UFO Research Association Ltd. (Bantley, West Yorkshire), 1995, pp. 51-56.
(3) V.J. Ballester Olmos, Desclasificacin! Archivos OVNI militares al descubierto, 1997,
http://www.ikaros.org.es/desclasificacion.pdf
(4) V.J. Ballester Olmos, Monitoring Air Force Intelligence, en MUFON 1997 International UFO Symposium
Proceedings, W.H. Andrus & I. Scott (editores), Mutual UFO Network, Inc. (Seguin, Texas), 1997, pp. 139-178.
(5) V.J. Ballester Olmos, UFO Secrecy and Disclosure in Spain, en UFOs and Government, M. Swords & R. Powell
(editors), Anomalist Books (San Antonio, Texas), 2012, pp. 423-438 and 513-529.
http://www.anomalistbooks.com/book.cfm?id=64
(6) Joan Plana Crivilln, Caso inexistente: divulgadores ineptos, Papers dOVNIS, septiembre-octubre de 1997, pp. 1214.
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(7) V.J. Ballester Olmos, Expedientes inslitos, Temas de Hoy (Madrid), 1995.
(8) Reunin personal con el teniente coronel Enrique Rocamora Aniorte, Madrid, 6 de julio de 1994.
(9) En 2005 se segua manteniendo la autenticidad del suceso, lo cual fue contestado por el investigador Juan Carlos
Victorio Uranga en su blog: http://misteriosdelaire.blogspot.com.es/2013/02/una-historia-increible-de-ovnigigante.html
(10) El enlace original ya no existe, al haber desaparecido el portal Geocities:
http://www.geocities.com/Area51/Rampart/9780/Relato-Joseba.html
(11) Joseba Orraca a V.J. Ballester Olmos, 5 de septiembre de 1998.
(12) Joseba Orraca a V.J. Ballester Olmos, 4 de diciembre de 2014.
(13) Al final del proceso de desclasificacin, el nmero de expedientes ascendi a 84, con 122 casos distintos y un total
de 1.953 pginas.
AGRADECIMIENTOS
A Joan Plana Crivilln. A Nacho. A Rocky.
LOS AUTORES
Ricardo Campo Prez (Santa Cruz de Tenerife, 1965), es doctor en Filosofa por la Universidad de La Laguna y autor de
los libros Luces en los cielos (Benchomo, 2003) y Los OVNIs vaya timo! (Laetoli, 2006). Mantiene el blog
http://www.mihteriohdelasiensia.blogspot.com.es/ y colabora en la prensa local canaria con artculos sobre
pensamiento crtico y divulgacin cientfica. Direccin electrnica: rcampo@ull.es
Vicente-Juan Ballester Olmos (Valencia, 1948), gerente emrito de Seguros y Pensiones de Ford Espaa (1976-2005),
estudia el fenmeno ovni desde 1968, es autor de 8 libros y 460 trabajos sobre el tema
(http://www.ikaros.org.es/bibliog1.pdf), ha dictado conferencias en Europa y los Estados Unidos y en la actualidad
gestiona FOTOCAT, un proyecto de mbito internacional
(http://fotocat.blogspot.com/). Direccin electrnica: ballesterolmos@yahoo.es
Durante una
reunin de trabajo,
los autores,
Ricardo Campo, a
la derecha, y V.J.
Ballester Olmos.
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Estatua de 3,7 m del Hombre Polilla elaborada por Robert Roach y situada en el centro de Point Pleasant,
Virginia Occidental