Tras El Huevo de La Serpiente
Tras El Huevo de La Serpiente
Tras El Huevo de La Serpiente
DE LA PUALADA POR LA ESPALDA AL CRACK DE LA BOLSA DE VALORES NEOYORQUINA. UNA ESPERANZA FALLIDA: LA REPBLICA DE WEIMAR (1918 1929)
El Tratado de Paz celebrado entre Alemania y las potencias vencedoras impuso a aquella unas condiciones draconianas basadas en el supuesto (desde la ptica de los vencedores) que ese rigor impedira que en el futuro el militarismo alemn pudiera dar lugar a una situacin anloga a la de agosto de 1914. Alemania fue declarada nica responsable de la guerra, y en consecuencia, debi sufrir las duras condiciones de una paz vengativa.1 Perdi su imperio colonial de ultramar, al tiempo que tras la lgica devolucin de Alsacia Lorena a Francia, le fueron arrebatados territorios indudablemente alemanes, tales como los Sudetes y el corredor del Dantzig, (ambos estos, detonantes de la crisis que llev a la 2 Guerra Mundial)2. Debi entregar su flota (hundida en Scapa Flow) y el ejrcito de tierra quedo reducido a una mera guardia territorial de cien mil hombres. Desde el punto de vista econmico, el carcter de las reparaciones que deba pagar (durante 25 aos) a los pases vencedores, como la ocupacin de estos de la cuenca del Ruhr3, no auguraban otra cosa que serias dificultades. Pases como Francia luchaban directamente por debilitar en su totalidad a Alemania y as poder presionarla. Finalmente se le impuso una deuda de 132.000 millones de marcos de oro, cifra que era sabido por todos imposible de pagar en
El otro gran perdedor fue el Imperio Austro-Hngaro. Sucesivos Tratados (Saint Germain, Saint Simon, etc.) formalizaron los hechos que entre 1918 y 1919, acabaron con el sueo supranacional regido desde Viena. A su vez la cada de los Romanov en 1917 y la Paz de Brest Litovsk que el gobierno bolchevique firm con Alemania a principios de 1918, permiti el surgimiento o resurgimiento de nuevos estados. A principios de 1920 sobre el fantasma territorial de las tres grandes monarquas desaparecidas en la vorgine de la guerra, la cartografa europea incorporaba a Finlandia, Letonia, Estonia, Lituania, Checoslovaquia, Hungra, el Reino de Servios y Croatas, y Polonia. 2 Tanto los Sudetes como el llamado Corredor Polaco estaban poblados mayoritariamente por alemanes. La reivindicacin de estos territorios por el rgimen nacionalsocialista, a finales de los aos 30, desemboc respectivamente en la desmembracin de Checoslovaquia, la invasin a Polonia y la Guerra Mundial. 3 El territorio renano del Sarre, rico en hierro y carbn, fue dejado en dudosa situacin de fideicomiso de la flamante Liga de las Naciones, hasta que en 1935 un plebiscito decidi por abrumadora mayora (no podra haber sido de otra forma dado que sus habitantes eran alemanes) su reincorporacin al Reich. Tras el fin de la 2da Guerra Mundial, los vencedores tomaron al pi de la letra la opinin de Karl Marx que la historia se repite como comedia, y nuevamente separaron el Sarre. En 1957 se puso fin a esta fantochada, y el Sarre pas a ser un Lander ms de la R.F.A.
1
aquel momento4. Como John Maynard Keynes argument en su crtica a los alegatos contra Alemania ("Las consecuencias econmicas de la paz" de 1920), solo la reconstruccin de una Alemania prspera poda garantizar el mantenimiento de la economa liberal como tal, y adverta que la poltica de seguridad francesa de debilitar a Alemania sera contraproducente a la larga. Si haba algo en lo que acordaba todo el arco poltico alemn era que las reparaciones impuestas en Versalles eran injustas para su pas y que haba que revertirlas. Fuera de Alemania (an en el misma Conferencia de Paz) se alzaban voces discordantes, que vean con lucidez el peligro que entraaba esta situacin y pronosticaban una era de profundas turbulencias si no se lograba reinsertar a los vencidos dentro de la lgica capitalista- liberal que guiaba Europa desde el siglo anterior. Uno de los exponentes de esas voces discordantes era el ya mencionado Keynes, quien vaticin que slo una incorporacin total de las economas destruidas por la guerra podra mantener a una Europa estable, liberal y burguesa. Obviamente que el economista, un gran conocedor de su poca, vea con preocupacin el avance de la 'amenaza roja' desde la Rusia bolchevique hacia el occidente "civilizado". Keynes saba de la necesidad de Rusia de expandir la Revolucin de octubre hacia otros pases ms all de sus fronteras; y Alemania, tanto por una cuestin geogrfica como econmica, era un ptimo foco para absorber todas las ideas revolucionarias que estaban ya dando la vuelta al mundo. La experiencia de la Revolucin Rusa era muy atpica y se contradeca con la teora marxista, que vea a la revolucin socialista derrocando a la burguesa y no a la nobleza zarista5, pero era una oportunidad inmejorable de extender la revolucin a la Europa industrializada en donde la lucha de clases habra prendido con mayor fuerza que en cualquier otro lado. La proclamacin de la Repblica Socialista en Baviera en 1918, la Repblica Sovitica de Munich en 1919, sumado a la abdicacin del emperador y la cada del viejo orden, fueron intentos que, aunque muy pequeos y de resultados efmeros, demostraron que la llama de la Revolucin prenda muy fuerte en una Alemania derrotada y humillada por la guerra. Ejemplo de esto es que los propios bolcheviques recin abandonaron la idea de una revolucin en Alemania hacia 19236. Es decir que la situacin de inestabilidad que abri 1917 para Alemania y el agravamiento de esta situacin por la ceguera de las polticas tomadas en 1919, dejaron planteadas en este pas, ms que en cualquier otro, una solucin que tena tan solo dos caras,
Hobsbawm Eric: Historia del siglo XX. Ed. Planeta/Crtica, Buenos Aires, 1994. pp. 105-106 Esto de nobleza zarista debe ser relativizado en grado sumo. En el cuarto de siglo que precedi al disparo que Gabrilo Princip efectu en Sarajevo, el Imperio Romanov tendi a incorporar cada vez mas sectores (medios y burgueses) y superar la autocracia. Especialmente despus de los sucesos de 1905, con la amplia convocatoria de la Duma, y las reformas de Stopolyn (1906-11), que ampliaron enormemente las clases de pequeos propietarios agrcolas. Rusia entraba en el siglo XX a marcha forzada, y la figura de su Emperador, Nicols II, encuadraba cada vez ms en la de un monarca constitucional, semejante a su primo ingls (con quien tena un gran parecido fsico, aadimos nosotros, concientes de la futilidad del comentario). Qu hubiera pasado si la guerra no interrumpe este proceso? Es una pregunta que amerita un juego para historiadores de lo contrafactual, o para amantes de la ucrona. Ms all de estas conjeturas, lo cierto es que en una calurosa noche de 1918, en los stanos de la Casa Ipatiev en Ekaterimburgo, no solamente se fusil al ltimo Zar junto a su familia, sino que los fusileros bolcheviques con los ltimos disparos, cimentaron la estereotipada imagen de Nicols el Sanguinario: esto es la creacin de un enemigo que legitimara en su desmesurada crueldad, las acciones que contra l emprendieron sus adversarios. Vease. Reed, J. Diez das que conmovieron al mundo. 6 Hobsbawm, E: Op. Cit. pp. 74-76.
5 4
opuestas radicalmente, pero que queran cambiar de raz la situacin: una Repblica Socialista o un Estado Fascista. Era la revolucin y sus seguidores o los soldados de la contrarrevolucin, pintada como una revolucin distinta a todas las conocidas hasta el momento. Una contrarrevolucin que en el caso de Alemania haba adoptado los simbolismos y las usanzas de la revolucin original: crearon un Partido Obrero Nacional Socialista, una bandera roja (aunque reformada y con el agregado de la esvstica) y hasta tomaron la fecha del 1 de mayo como fiesta oficial de los nazis.7 Una exteriorizacin supuestamente proletaria, que una vez llegada al poder mantuvo esa fachada populista8 a travs de distintas estructuras tales como el Frente del Trabajo o la organizacin Fuerza por La Alegra.9 La efmera Repblica de Weimar fue un intento de evitar ambos extremos. Historiando brevemente su estructura, origen y conformacin digamos que la citada Repblica de Weimar fue quizs el experimento poltico ms democrtico que se realiz en Alemania durante el siglo XX. Naci en medio del caos de la derrota militar y la revolucin social; y concluy con el ascenso de la ms feroz de las dictaduras que vivieron los alemanes. Las fuerzas polticas que la hicieron posible fueron el Partido Social Demcrata (SPD), el Partido Democrtico Alemn ("descendiente" del antiguo Partido Progresista) y el Partido del Centro. Estas tres agrupaciones constituyeron posteriormente la "Coalicin de Weimar", luego de haber conformado la Asamblea Constituyente de la nueva repblica alemana, en esa pequea ciudad. Luego de la firma del Tratado de Versalles, la Asamblea Constituyente termin la redaccin de una Constitucin para la nueva repblica. 10 Mantuvo el cargo de Presidente elegido popularmente (por siete aos y reelegible), con amplios poderes en materia de poltica exterior y fuerzas armadas. Tambin le daba la capacidad de promulgar decretos de emergencia para proteger a la repblica de las amenazas de detractores tanto de derecha, como de izquierda. El Presidente nombraba al Canciller, cuyo gobierno requera la confianza del la cmara baja del Parlamento (Reichstag), que a su vez era elegido por sufragio universal y mediante un sistema de representacin proporcional. La cmara alta (Reichsrat) estaba compuesta por los delegados nombrados por los estados federales o lnders. Las caractersticas ms modernas e innovadoras de esta Constitucin eran las herramientas para la participacin popular y el referndum, que permitan al electorado introducir -por la va de la peticin- sus propias iniciativas de ley en el Reichstag y forzarlo a discutir la propuesta. Si la iniciativa era rechazada, un referndum nacional podra permitir al electorado aprobar una ley sin el
J. Goebbels, uno de las principales figuras del nazismo hasta el final (de hecho se suicid con su mujer, tras envenenar a sus ocho pequeos hijos en los stanos de la Cancillera, unas horas despus que Hitler), Goebbels, decamos, provena del comunismo berlins, y su esposa, Magda, presentada por el rgimen como ejemplo de fecundidad maternal nacionalsocialista, haba sido la amante de un dirigente estudiantil judo y espartaquista. 8 Cierto paralelismo se puede trazar entre la impronta populista del nazismo y el de otros regmenes mucho ms cercanos a nosotros en tiempo y espacio. Veamos al respecto lo expresado por una historiadora argentina: las notas distintivas del populismo latinoamericano fueron el nacionalismo como componente ideolgico fundamental, la fuerte presencia estatal en lo econmico y social en un sentido redistribucionista, un modelo de desarrollo industrial orientado al mercado interno, la organizacin de un sindicalismo de masas estrechamente vinculado al Estado, fuertes liderazgos personales y en algunos casos componentes autoritarios.Aguila, Gabriela. El terrorismo de Estado sobre Rosario (1976-83) En Rosario en la Historia (de 1930 a nuestros das) Tomo 2. UNR Editora, Rosario, 2000. p. 214 9 Fuerza Por la Alegra, fue una copia ampliada (y ciertamente mejorada) del Dopo Lavoro del rgimen mussoliniano. 10 El gran socilogo Max Weber fue convocado para colaborar en su redaccin.
7
consentimiento del Reichstag. De esta manera, nunca ms un gobierno alemn podra (en teora) ignorar los deseos de los votantes. La Constitucin de Weimar fue promulgada oficialmente el 11 de agosto de 1919, finalizando el perodo de gobierno provisional que haba comenzado en noviembre de 1918 con la proclamacin de la Repblica. Las elecciones para el Reichstag se realizaron en junio de 1920. El apoyo popular al nuevo modelo poltico alcanz el 76,2 por ciento, mientras que las fuerzas antirrepublicanas (Partido Nacional Popular Alemn y Partido Popular, ambos de derecha) obtuvieron un escaso 10,3 por ciento en conjunto; Con este escenario poltico, la Asamblea eligi al socialdemcrata Friedrich Ebert como el primer Presidente de la Repblica. VIEJAS RECETAS PARA TIEMPOS NUEVOS En Versalles se impuso tambin una tendencia que era la que haba dirigido los rumbos de la economa mundial desde mediados del siglo XIX: era la ortodoxia liberal clsica que, adems de no haber podido evitar caer en la primera Guerra Mundial, al parecer no haba aprendido sus consecuencias y mantuvo los mismos postulados econmicos que antes del conflicto. Bsicamente se mantuvo la primaca del patrn oro, que impona a los pases deficitarios una salida deflacionaria y constrictiva de sus economas interiores para poder as mantener una paridad estable de sus monedas nacionales con el oro. Esta poltica tuvo un relativo xito en los pases vencedores, en los neutrales y en Japn, pero no en pases derrotados como Alemania en donde el sistema monetario se hundi y en 1923 la moneda perdi su valor y cayo a una millonsima parte.11 Esto produjo una escasez total del capital circulante e intensific la dependencia de la economa alemana hacia los crditos y emprstitos extranjeros. As la economa alemana qued vulnerable y expectante de lo que ocurra en la economa mundial durante toda la dcada del veinte y fue lo que la arrastr a la crisis de la gran depresin en 1930.12 Segn el historiador Eric Hobsbawm "esto preparo a las capas medias y medias bajas para el fascismo"13. Pero, cules fueron las causas de la Gran Depresin que arrasaron en todo el globo y que condujeron a algunos pases europeos al fascismo? Segn Peter Temin la causa principal de la depresin fue el mantenimiento de una poltica monetaria restrictiva que caracteriz a los finales de la dcada del '20. Es decir el mantenimiento de una poltica que en vez de ser expansiva, mantena a las
11
En enero de 1923 se produjo una gran crisis para la Repblica: tropas belgas y francesas ocuparon la zona industrial del Ruhr, porque Alemania dej de pagar las reparaciones de guerra y de esta manera buscaban la compensacin por las prdidas ocasionadas a Francia y Blgica. El gobierno alemn respondi llamando a la poblacin de la regin a parar todas las actividades industriales. Para pagar a estos trabajadores que estaban en paro, el gobierno alemn comenz a imprimir dinero a un volumen tan descabellado que pronto perdera virtualmente su valor. Para graficar el volumen de la inflacin, habra que decir que en 1914 un dlar estadounidense era equivalente a cuatro marcos alemanes; para mediados de 1920 vala 40 marcos, a principios de 1922 costaba 200 marcos, un ao despus su valor era de 18 mil marcos y en noviembre de 1923 un dlar era equivalente a cuatro mil doscientos millones de marcos alemanes. La hiperinflacin aliment el radicalismo tanto de la derecha, como de la izquierda. Hobsbawm E.: Op. Cit. pp. 96-97. Hobsbawm E.: Op. Cit. p. 97.
12 13
economas en bajos niveles de crecimiento exterior (contractivas) y se basaba en los mandatos que difunda la escuela liberal siendo su mayor smbolo el mantenimiento de la ideologa del patrn oro.14 Como vimos antes, el mecanismo de ajuste para la economa no era la devaluacin sino la deflacin, o sea una variacin en los precios nacionales en vez de una variacin en el tipo de cambio. El hecho de haber aplicado una poltica de devaluacin hubiera significado directamente abandonar los parmetros del patrn oro. El auge crediticio a lo largo de toda la dcada del veinte demor la llegada de la depresin, pero no la evito15. El espritu de la concepcin liberal clsica estableca que los gobiernos no se "entrometan" en los asuntos financieros y econmicos, y que la economa se regulaba a s misma basndose en la ley principal del Laissezfaire: la Ley de Say (que postula que cualquier fenmeno de superproduccin se corregir por s solo). Siguiendo el caso alemn destacamos que el aferramiento al patrn oro fue tenaz y que la economa no tendi a ser expansiva sino que fue cada vez se contrajo ms. En medio del caos de la hiperinflacin el Presidente Ebert llam a Gustav Stresemann (lder del DVP) a formar un nuevo gobierno para resolver la crisis. Canciller solamente de agosto a noviembre de 1923, Stresemann lider la llamada "Gran Coalicin", una alianza que inclua a los socialdemcrata, el partido del Centro, el DDP y el DVP. En este corto perodo, Stresemann puso fin a la resistencia pasiva en la zona del Ruhr e introdujo medidas para controlar la situacin monetaria. Debido al fracaso de varios intentos de golpes de Estado y a la atmsfera de estabilidad que su sofocacin provoc, la Repblica de Weimar disfrut de un perodo de relativa tranquilidad hasta finales de la dcada. Despus de su renuncia como Canciller debido a las presiones de la oposicin de derechas e izquierdas, Stresemann sirvi como ministro de Relaciones Exteriores hasta su muerte en 1929. Negociador brillante y hbil diplomtico, logr un acercamiento con los aliados, pues crea firmemente que Alemania poda lograr un ablandamiento de las duras condiciones del Tratado de Versalles intentando cumplir sus trminos, en lugar de seguir obstinadamente resistindose a ello. Sus esfuerzos introdujeron a Alemania en lo que se ha llamado "la era del cumplimiento". Como consecuencia del Plan Young y el Plan Daves, a mediados de la dcada del '20, las ayudas de Estados Unidos estimularon la economa alemana, provocando un perodo de crecimiento que durara hasta 1930.16El Tratado de Locarno, el Tratado de Berln y el ingreso de Alemania a la Liga de las Naciones, fueron xitos de Stresemann que tempranamente la comunidad internacional reconoci. Sin embargo, en Alemania
14
Temin Peter: La Gran Depresin en Europa En Europa en crisis, 1919 1939. Mercedes Cabrera, Santos Juli, Pablo Acea (Comps). Ed. Pablo Iglesias. pp. 77-78. 15 Hobsbawm afirma ... es necesario tener en cuenta que la expansin econmica fue alimentada en gran medida por las grandes corrientes de capital internacional que circularon por el mundo industrializado, y en especial hacia Alemania... eso haca muy vulnerable a la economa alemana, como qued demostrado cuando se retiraron los capitales norteamericanos despus de 1929... Op. Cit. pp. 97-98 16 Berln se convierte en una meta intelectual de primer orden. Una mezcla de vanguardia artstica, osada intelectual y relajacin de costumbres, dan a la ciudad una atmsfera irrepetible. Tal vez el urea de Lola Lola, esa prostituta y cantante de cabaret que manipula a un circunspecto profesor universitario en El ngel azul, filme de 1929 protagonizado por Marlene Dietrich y Emil Janning, ilustre adecuada y simblicamente sobre el clima cosmopolita y osado de la capital alemana en esos aos. Aos que son tambin los del expresionismo o los de la Escuela de Frankfurt, de Walter Benjamn. Los nazis acabaran con todo eso, englobando todas las tendencias bajo el rtulo de arte degenerado.
esos acontecimientos fueron reprobados por la mayora de los alemanes de derecha17. Para ellos, la diplomacia de Stresemann era equivalente a la alevosa, porque colocaba lmites al "derecho" de Alemania para tomar por la fuerza aquello que los derechistas consideraban como propio. Por estas posturas y por la continua insatisfaccin de la derecha con el sistema poltico establecido por la Constitucin de Weimar, el Partido del Centro y los partidos alineados a su derecha, comenzaron a adoptar polticas ms reaccionarias hacia finales de la dcada. Una reconciliacin a nivel poltico se consigui en 1925 con la eleccin del hroe de Tanneberg, general Paul Hinderburg de 77 aos de edad como sucesor del recin fallecido Presidente Friedrich Ebert. A pesar de no ser un demcrata, el anciano militar18 se tom muy en serio su deber de apoyar la Constitucin y la Repblica. La estabilizacin econmica y poltica de la repblica de Alemania pareci verse reflejado en las elecciones de mayo de 1928 para el Reichstag. Los partidos antirrepublicanos de derecha e izquierda recibieron en conjunto solamente el 13 por ciento del total de los votos, con un 10,6 por ciento para los comunistas y un 2,6 por ciento para los nazis. Todo este creciente fortalecimiento del sistema democrtico alemn, tuvo un punto de inflexin: el Viernes Negro de la Bolsa de New York de octubre de 1929. A partir de all, Weimar comenz una etapa descendente que se profundiz juntamente con la crisis econmica. El canciller alemn Heinrich Brning (marzo de 1930 a mayo de 1932) tom medidas fuertemente deflacionarias, aument los impuestos y redujo los gastos sociales, los salarios, los precios y el tipo de inters; todas stas tendan a mantener un patrn oro ya deficiente en sus soluciones. Pero por esas ironas de la historia, Gran Bretaa que haba sido el paladn del patrn oro y de la economa liberal, abandono dicho patrn el 20 de septiembre de 1931, con lo cual sent un precedente extraordinario para escapar a los efectos de la depresin y para cambiar radicalmente la poltica monetaria vigente.19 El gobierno alemn contempl la devaluacin para seguir el camino ingls, debido a que las acusaciones de haber violado el Plan Young ya no surtan efecto una vez que una potencia como Gran Bretaa ya las haba violado, pero a fin de cuentas se mantuvo la tendencia deflacionista. El nico camino para acabar con la depresin econmica era un abandono de las polticas deflacionarias vigentes y plantear una nueva concepcin del rol del Estado en la economa. Estos fueron los caminos que tomaron en dos pases muy distintos en 1933: los Estados Unidos de F.D. Roosevelt y la Alemania Nazi de A. Hitler.20 En mayo de 1932 Brning es sustituido por el canciller F. Von Papen, quien intent una profunda expansin econmica en Alemania. Los nazis tuvieron su primer traspi en las elecciones de noviembre de 1932 y consiguieron la suma del 33% de los votos (en 1930 haban obtenido 107 escaos, en 1932 230 escaos,
17
Los hombres del Este, segn la particular definicin del periodista Paul Johnson. Este autor ubica en clave geogrfica a los partidarios de la reaccin, trazando una analoga con el espacio ocupado por los junker en el mapa alemn. Prusia sera el baluarte del antiliberalismo, en contraposicin a Occidente. Johnson, Paul. Tiempos Modernos. Javier Vergara Ed. Bs. As. 1988. pp. 120-121 18 Como joven oficial, haba participado de la guerra franco prusiana de 1870, y haba asistido a la ceremonia en que el saln de los Espejos de Versalles, Bismarck proclam el Imperio Alemn. 19 Temin P.: Op. Cit. pp. 83-85. 20 Interesante coincidencia cronolgica,:ambos asumen en el mismo mes y ao enero de 1933 y mueren en el mismo mes y ao abril de 1945-, aunque Don Franklin Delano parti pa los pagos de ande no se vuelve, quince das antes que el Adolfo.
pero a finales de ese ao disminuyeron hasta los 196)21. Pero como afirma Temin la inestabilidad de la poltica reflejaba la inestabilidad de la economa y la recuperacin de Papen no se mantuvo, no atrevindose a dar el salto de la devaluacin que habra sido en ese caso verdaderamente revolucionario22. Ante esta impotencia, a fines de 1932 se consum lo que Ian Kershaw define como el derrumbe (de la Repblica de Weimar) en una situacin de crisis realmente extraordinaria que coordin una serie de tendencias destructivas separables, quizs superables de una en una, pero fatales en conjunto. La crisis de legitimidad fue al mismo tiempo una crisis de la poltica popular en un sistema pluralista y de la poltica de las lites... La creciente incapacidad de la lite del poder tradicional para controlar la organizacin de la poltica en defensa de sus intereses tambin quebrantados por la crisis econmica - se reflej en una serie de intentos frustrados de establecer un nuevo marco autoritario de gobierno23 En enero de 1933 Hitler fue elegido canciller (en el marco de haberse constituido en la solucin aceptada con reticencia por las lites alemanas). Dos meses despus se realizaron las ltimas elecciones libres de Alemania: el Nacionalsocialismo fue ratificado en las urnas, bsicamente porque como afirma Kershaw, la clase obrera organizada, nica fuerza poltica que tena posibilidad de hacerle frente, llevaba aos penosamente dividida y haca mucho que haba dejado de desempear un papel significativo en la determinacin de la lucha por el poder.24 Se instaur as un rgimen nuevo en todos los sentidos del trmino. Una vez ubicados en el poder los nazis no tuvieron pudor en eliminar todos los mecanismos democrticos que los haban situado all y menos an lo tuvieron para romper con la ortodoxia econmica internacional. Desconocieron los compromisos de emprstitos internacionales y las pesadas cargas (no tanto econmicas sino ms bien polticas y morales) de las reparaciones sobre Alemania. Como era de esperarse todas estas medidas contaron con un amplio apoyo entre las vapuleadas masas del pueblo alemn. Su principal objetivo era la eliminacin del desempleo masivo, que en ese momento alcanzaba a un tercio de la poblacin. Sus concepciones se basaban en un anti liberalismo que les permiti no comprometerse a priori con los ideales del libre mercado. Hitler supo aprovechar con amplia lucidez y visin poltica, las errneas actitudes que se tomaron para con Alemania en la "Paz de Versalles". Una visin complementaria para entender la depresin es la planteada por John Holloway, quien analiza el crack de 1929 como un evento econmico que no es externo al desarrollo de las relaciones de clase en la contienda entre el capital y el trabajo. Por lo que dice que la crisis de 1929 fue la otra cara de la revolucin de 1917. "La revolucin de 1917 haba sido la declaracin de la clase trabajadora de que la vieja relacin con el capital deba llegar a su fin y el crac de 1929 remarc
21 22
Temin P.: Op. Cit. p. 88 Por conformacin mental y poltica, F. Von Papen, lder del Centro Catlico, no poda dar ningn salto revolucionario. En Enero de 1933 este representante de la vieja poltica, crey poder controlar a Hitler, elevndolo al cargo de canciller, y manejndolo desde la sombra. Von Papen termin su carrera poltica como inocuo representante diplomtico en Viena y Roma. Los acontecimientos (y el cabo austriaco lo haban devorado polticamente). 23 Kershaw Ian: El Estado Nazi: Un Estado Excepcional? En Revista Zona Abierta N 53. Madrid, Oct/Nov, 1989. pp. 134-135 24 Kershaw I: Op. Cit. p. 135
para el capital que de veras era as..."25. 1929 marco la cada final del viejo orden mundial y de su modo de dominacin. La crisis era la expresin del poder del trabajo en- y- contra el capital y estaba produciendo unos efectos desastrosos.
EN BUSCA DE UNA SALIDA ALTERNATIVA. En la dcada de 1920 la burguesa capitalista se debata entre dos concepciones que la intentaban mantener, pero basadas en supuestos muy diferentes. Contra la idea liberal clsica se estaban alzando unas voces descontentas pidiendo que se realizaran "reformas" al capital para poder adaptarlo a la coyuntura de la postguerra. Este debate al interior de la burguesa giraba en torno a tres puntos fundamentales: las relaciones internacionales, el rol del Estado y el control del dinero.26 El tratado de Versalles fue la primera expresin de la lucha entre reformistas y ortodoxos. Como vimos anteriormente los que se impusieron en las discusiones fueron los "reaccionarios" y los "progresistas" - como Keynes- se vieron desplazados. Con respecto al papel del Estado en la economa, los progresistas argumentaban que un Estado moderno deba tener un papel activo e intervencionista (un aspecto que la primera guerra haba desarrollado). Y con respecto al dinero advertan sobre la profunda necesidad de abandonar el patrn oro que los tena acorralados y adoptar posturas de expansin en cada pas. Como argumenta Holloway "todas las funciones que usualmente se asocian al Estado 'keynesiano' despus de 1945 eran ya temas de discusin en los aos veinte"27 LA CAIDA DEL LIBERALISMO. UN OCASO WAGNERIANO? La Gran Depresin caus una tremenda desorientacin sobre los supuestos esenciales que apuntalaban al liberalismo. Quedaron demostradas todas las limitaciones y la inexistencia de soluciones polticas para escapar a la crisis. Ante el colapso del sistema liberal quedaban abiertas varias opciones a seguir: una era el comunismo que haba tenido unos resultados impredecibles en la Unin Sovitica28, otra era un capitalismo "reformado" que haba abandonado los supuestos del libre mercado y bregaba por una intervencin y una planificacin por parte del Estado en la economa (en 1936 s pblico la obra de Keynes "Teora
Holloway John: Se abre el abismo. Surgimiento y cada del Keynesianismo. En Holloway J: Marxismo, Estado y Capital. La crisis como expresin del poder del trabajo. Fichas temticas de Cuadernos del Sur, Tierra del Fuego, Buenos Aires, 1994. p. 47 26 Holloway J: Op. Cit.: pp. 39-40. 27 Holloway J: Op. Cit.: p. 41. 28 La economa de la URSS creca a unos pasos agigantados y con un nivel de industrializacin desconocido para la poca, adems la ola de la Gran Depresin ni siquiera se haba aproximado hasta Rusia. Muchos occidentales haban podido viajar all y ver por si mismos lo que era "el milagro ruso" en el marco de la produccin y haban admirado el hecho de que casi no exista el terrible flagelo de la desocupacin que estaba consumiendo a sus pases. Por esto apuntaron la novedad de los planes quinquenales y de polticas de planificacin como los de la NEP. Le asombraba enormemente al mundo capitalista el alto acatamiento a las ordenes en el trabajo y la baja conflictividad social (no haban previsto el rgimen de terror que estaba detrs de toda la maquinaria estalinista).
25
general del empleo, el inters y el dinero" que fue la elaboracin terica ms importante de este capitalismo renovado), y otra alternativa era el fascismo que ya haba ganado terreno en Italia y en Alemania, y tena pretensiones universales. La amenaza ms letal al liberalismo provena de la propia derecha. El fantasma de la revolucin roja se haba calmado luego de la primera oleada revolucionaria hacia 1923, adems con el ascenso de Stalin al poder todas las aspiraciones de internacionalismo se desvanecieron en medio de una poltica de terror que conceba la posibilidad del comunismo en un solo pas. Los intentos de extender la revolucin a China fueron contraproducentes. Por el lado reformista sus supuestos comenzaron a ser aplicados principalmente en Estados Unidos a travs del New Deal de Roosevelt, pero en forma embrionaria y sin conseguir los resultados esperados. La realidad de un Estado Benefactor con intervencin en la economa y en la sociedad lograra su mayor xito recin en los "aos dorados" posteriores a la segunda guerra mundial en 1945. La amenaza provena principalmente de las fuerzas de derecha. "Todas eran contrarias a la idea de la revolucin social y en la raz de todas ellas se hallaba una reaccin contra la subversin del viejo orden social operada en 1917-1920. Todas eran autoritarias y hostiles a las instituciones polticas liberales(...), todas esas fuerzas tendan a ser nacionalistas, por un resentimiento contra estados extranjeros(...) o para adquirir legitimidad y popularidad"29. El ascenso de la derecha fascista fue una respuesta al peligro de la revolucin social mundial y al fortalecimiento de la clase obrera en todos los pases adelantados. Sin estos dos factores el nazismo no habra calado tan profundamente en las capas sociales que se vean desplazadas y amenazadas por el impacto revolucionario. La experiencia en Alemania haba sido muy clara y a la vez muy prxima como para no dejarse impresionar y como para no atender a un llamamiento tan orgnico en contra de aquella amenaza. Pero como aclara Hobsbawm30, hay que hacerle al menos dos matizaciones a esta tesis sobre la contrarrevolucin: 1) subestima el impacto que tuvo la Gran Guerra sobre un segmento de las capas medias y medias bajas que haba entregado todo en la contienda, y que se sentan defraudadas y desodas por las autoridades. Muchos jvenes y soldados haban apostado a conseguir un ascenso social o un reconocimiento como hroes y no lo lograron. En cambio Hitler supo ganarse a esos desengaados y valoriz sus figuras con el mito del 'frontsoldat', factor que sirvi de pilar para la creacin de grupos comando como las S.A.31 o las S.S. que fueron formidables lugares para conseguir los anteriores objetivos personales32.
29 30
Hobsbawm: Op. Cit. pp. 119-120. Hobsbawm: Op. Cit. pp. 130-132. 31 La S.A., Guardia de Asalto, dirigida por Rohem, actu casi como un Seguro de Desempleo a principios de los aos 30. Miles de desocupados engrosaron sus filas (del mismo modo que lo hacan en las filas del Partido Comunista) ms por una cuestin pragmtica de sobrevivencia que convencidos ideolgicamente. Por esta razn, las S.A. fueron una fuerza de choque, muy til para ganar las calles en los aos de lucha por la toma del poder, pero con una impronta plebeya en su base, que la tornaba potencialmente peligrosa una vez conseguido este. De all la Purga contra sus principales dirigentes en 1934, conocida como La noche de los cuchillos largos 32 En realidad la S.S. es una guardia personal del Fhurer, que comienza de modo modesto, dirigida por Himler hacia 1929. Su gran desarrollo comenzar tras la cada en desgracia de la cpula de la S.A.. Desde 1934 conocer una dcada de creciente y espectacular influencia, al punto de ser considerada un estado dentro del estado. La S.S. tendr responsabilidad principal (`pero no excluyente) en la perpetracin del Holocausto.
2) el avance de la derecha no fue tan slo en contra del bolchevismo, sino contra todos los movimientos e instituciones de la clase obrera organizada, que de alguna manera u otra amenazaban la estructura social y podan ser acusadas de su desmembramiento. Y tambin contra el sistema liberal democrtico, del que la Repblica de Weimar es un ejemplo. MULTICAUSALIDAD DEL FRACASO DE WEIMAR Tal como hemos detallado precedentemente, el triunfo del totalitarismo alemn no se ciment en una sola causa. Consiguientemente, el fracaso del experimento poltico liberal democrtico conocido como Repblica de Weimar tampoco obedece a un hecho determinante y ubicuo. Ambos acontecimientos, el sistema democrtico de Ebert y Stresemann, y el Tercer Reich de Adolfo Hitler estn forzosamente relacionados no solamente por mera continuidad cronolgica. El fracaso de uno posibilit el triunfo del otro, dentro de un contexto general de crisis que excedi las fronteras alemanas y cuyas consecuencias cimentaron las dcadas siguientes. En definitiva, lo sucedido entre 1918 y 1933 constituye una proceso cuya involucin de la democracia a la dictadura, constituye una problemtica que no encuentra una explicacin nica. No es rol de los historiadores decir que hubiera sucedido si en realidad las ideas de Keynes hubieran sido las vencedoras en Versalles, si se hubiera as evitado la Gran Depresin y la segunda Guerra Mundial; ni tampoco que hubiera pasado en Alemania si Von Papen hubiera devaluado en 1932, quizs no hubiramos conocido los horrores de Hitler33 y el nazismo; pero lo que s se puede saber es que si en vez de haber triunfado ciertas polticas monetarias y sociales y no otras que fueron errneas y desastrosas para la humanidad en el curso del siglo XX, muchas cosas no hubiesen sucedido as y a lo mejor el futuro deparara un horizonte no tan negro en el mundo. Hoy, en el siglo XXI, cuando el edificio del Estado Benefactor se ha desmoronado y las instituciones que an quedan de l estn siendo vaciadas, el Estado no es el mismo, y para peor hemos vuelto a una lgica liberal (neoliberal) en la cual la primaca la tiene nuevamente el mercado. Los conflictos sociales aunque surgen en todos lados, cada vez son ms desodos. Los movimientos de la derecha fascista son revalorizados como una nueva salida posible, los neonazis y la extrema derecha poltica logran altos niveles de adhesin. Por esto y para no volver a caer en la misma trampa es importante recordar la historia y como dice Hobsbawm "hacrsela recordar a los que la quieren olvidar". Carolina Bensabath Fernando Cesaretti Ronen Man Escuela de Historia. Universidad Nacional de Rosario
33
O si en 1907 el joven Adolfo Hitler. no era reprobado en su examen de ingreso a la Academia de Artes de Viena. Ejemplos de este tipo son innumerables, pero tenemos claro que la historia no se construye en base a estos supuestos.
10