TERCER PASO de AA Cmo hacerlo?

Posted on 26 noviembre 2009

SALUDOS, ya que no pude asistir al Foro de Servicio, me dedique a estudiar nuestro Texto
Bsico, con un librito que compre por ah, (clandestinamente, je, je, je), pero me pareci
interesante, les envi lo que transcrib del libro referente a cmo hacer el tercer paso, si les
gusta les mando el capitulo siguiente sin problemas, menos mal que esto es democrtico.
COMO TRABAJA: ENTENDIENDO EL TERCER PASO.
OBSTINACION
Los doce pasos son ms que una lista de ideas o sugerencias: son un diseo para vivir.
Pensamos que son la mejor muestra de cmo poder vivir una forma de vida completamente
espiritual.
DECIDIENDOSE A ACTUAR.
Ahora que has admitido que eres impotente ante el alcohol u otra accin y que has llegado a
creer que un poder superior a ti mismo puede devolverte el sano juicio, te encuentras listo
para el tercer paso, que implica decidir poner tu voluntad y tu vida al cuidado de ese poder
superior.
Examinemos el tercer paso ms de cerca con la palabra decidimos esta es una de las
palabras claves de los doce pasos y de todo el libro grande, ya que representa el eslabn
entre la comprensin y la accin. Para encontrar la solucin a cualquier problema primero
debemos comprender cul es el problema; pero, entender no basta. Tambin tienes que
actuar, despus de haber comprendido. Y, para poder actuar, tienes que decidirte a actuar.
Es imposible tomar accin sin que de algn modo, te digas a ti mismo: Esto es lo que har
Si una decisin no es seguida por una accin, en esencia esa decisin no vale nada. Si
tienes hambre y decides comer, pero en realidad no comes algo, no te alimentaras, y aun
tendrs hambre. Tu decisin de comer fue intil, porque no actuaste. Si no hubieras tomado
la decisin el resultado habra sido el mismo. De hecho, dara lo mismo que hubiese
decidido hacer lo opuesto y seguir hambriento.
Hace algunos aos decidimos ir a los ngeles, pero no hicimos nada al respecto no
reservamos habitaciones en el hotel, no compramos boletos de avin, y ni siquiera
organizamos nuestro tiempo para la visita, por supuesto, no fuimos a los ngeles. Al final de
cuentas la decisin de ir fue insignificante, porque no actuamos sobre ella.
Sin embargo aproximadamente un ao despus, decidimos ir a los ngeles otra vez, en esta
ocasin pusimos las maletas en el automvil, lo llenamos de gasolina y llegamos a los
ngeles- no porque simplemente decidimos ir , sino porque tomamos la accin necesaria
para llevar a cabo esa decisin.
El tercer paso implica tomar una decisin clave, poner tu voluntad y tu vida al cuidado de tu
poder superior. Las acciones necesarias para llevar a cabo esta decisin se encuentran
incluidas desde el cuarto paso hasta el noveno pasos.
PONIENDO TU VOLUNTAD Y TU VIDA AL CUIDADO DE DIOS.
Ahora que hemos comprendido el significado de la palabra decisin, examinemos otro par de
palabras contenidas en el tercer paso. Se supone que debes poner tu voluntad y tu vida al
cuidado de tu poder superior. Pero, Qu es tu voluntad exactamente? Si reflexionas un

momento, te dars cuenta de que no es nada ms que tu mente y tu manera de pensar. Tu

voluntad es algo en tu cabeza que te dice que hacer.
Y Qu hay con tu vida? Tus acciones son tu vida- la suma total de todas las acciones que
has tomado a lo largo de tu vida. Todas estas acciones han hecho lo que t eres y te han
puesto dnde ests en este momento.
Te diremos de una buena vez que el tercer paso puede atemorizar a algunas personas, por
lo menos al principio. Cuando nosotros llegamos por primera vez a AA nos asusto
muchsimo. El tercer paso nos peda que pusiramos nuestras voluntades y nuestras vidas al
cuidado de un poder superior, pero no sabamos que es lo que ese poder quera que
hiciramos. Qu tal si nuestro poder superior se le ocurra que nos convirtiramos en
misioneros en algn lugar lejano, al cual definitivamente no queramos ir?
Uno de nosotros le admiti este temor a su padrino de AA esta persona simplemente se ri.
Dijo: Revisa tu vida. A lo largo de ella, has sido un ser humano egosta, concentrado en ti
mismo. Siempre has pensado lo que quieres pensar, has tomado las decisiones que queras
tomar y has actuado como queras actuar. Mira adonde te ha llevado eso. El resultado de
pensar, decidir, y hacer lo que queras es que casi has destruido tu vida, as como las vidas
de todos los que te rodean. te atemoriza deshacerte de esto? Quizs si un poder superior
pudiese dirigir lo que piensas, tus pensamientos mejoraran. Y si tu pensamiento mejora,
entonces tal vez tus acciones mejoraran y entonces tu vida, al igual que las vidas de los
que te rodean mejoraran tambin.
Asimismo, dijo: ya te has dado cuenta de que no tienes salida, utilizando tus propios
recursos. Tan solo seguirs pensando como siempre lo has hecho, y seguirs actuando
como siempre lo has hecho. Seguirs obteniendo los mismos resultados, y tu vida seguir
siendo un infierno. Tu poder superior de ninguna manera har que tu vida sea peor de lo que
es ahora- por lo tanto, es posible que tu poder superior har que tu vida sea mejor.
Por supuesto tena razn.
Poner tu voluntad y tu vida al cuidado de un poder superior generalmente no es rpido ni
sencillo. No lo puedes hacer de un momento para otro. Implica una decisin y muchas
acciones y trabajo para cambiar tu vida. As fue para nosotros y para muchos otros
alcohlicos en recuperacin que conocemos. Si has estado viviendo una vida llena de
voluntad propia durante aos, es muy difcil decir: Esta bien, esto parece un callejn sin
salida, as es que de aqu en adelante me pondr al cuidado de mi poder superior. No es tan
fcil como cambiar tu marca de caf o pasta dental. Para la mayora de nosotros, no es tan
fcil, y lleva tiempo poder hacerlo.
LA NATURALEZA DE LA VOLUNTAD PROPIA.
Necesitamos hablar un poco sobre la obstinacin, ya que muchos malinterpretan lo que
significa y como funciona. Primero, la voluntad propia es parte de la vida de todas las
personas. No estamos diciendo que la voluntad propia sea mala, y el libro grande tampoco
dice eso. De hecho la voluntad propia es algo que nos ha dado Dios, y forma parte de
quienes somos. No seriamos seres humanos completos si careciramos de ella. Es
necesario y vital tener un sentido del yo en la vidaTodos nuestros instintos son formas de voluntad propia. Tenemos instintos de supervivencia,
de comer, de alojamiento, de buscar compaa, sexuales y hasta de autoestima y orgullo.
Sin embargo cuando nuestros instintos crecen demasiado y estn fuera de control, se

vuelven destructivos para nosotros, as como para los dems. Si nuestro sentido del yo no
est controlado, se convierte en la cosa ms destructiva de nuestras vidas.
Cada uno de nosotros se parece a una casa. Para lograr que esta casa sea habitable y
completa necesita utilidades, agua-electricidad y quizs gas natural. La mayor parte del
tiempo, estas utilidades hacen que tu casa sea ms cmoda y tu vida sea ms placentera.
Pero si una de ellas pierde el control, acabas con un incendio o inundacin, y tu casa puede
ser destruida.
Nuestra voluntad y nuestros instintos son como las utilidades en una casa. Cuando son
utilizados apropiadamente, de acuerdo a sus propsitos originales, pueden hacer que tu vida
sea ms tranquila y plena. Pero si son incontrolables, pueden ocasionar daos terribles para
ti y para los dems. De hecho, la fuerza ms destructiva de este mundo es la voluntad propia
incontrolada de los seres humanos.
Nos podemos meter en graves problemas cuando nos proponemos metas basadas en las
razones equivocadas. A la mayora de nosotros, durante nuestra infancia, se nos ensea a
proponernos metas y, luego, a trabajar arduamente para alcanzarlas. Asimismo, se nos
ensea que a menudo es necesario hacer sacrificios para alcanzar esas metas. Pero cuando
alcanzamos una meta, repentinamente somos recompensados con dinero, con seguridad,
con sexo, con una posicin social, o con el respeto y aprobacin de los dems. Tambin
somos recompensados con una sensacin de xito y logro. Todo eso se siente maravilloso.
No hay nada malo con proponernos metas. Pero veamos que puede ocurrir una vez que
alcanzamos esa meta propuesta, cualesquiera que esta sea. Al principio se siente fantstico;
nos sentimos en la cima del mundo. Pero desafortunadamente, por lo general esta sensacin
no es muy duradera. Al poco tiempo de haber obtenido lo que queramos y por lo que
trabajamos tanto, nos podramos encontrar mirando a nuestro alrededor, diciendo: Y esto
era todo?
Por lo tanto, nos proponemos nuevas metas, y trabajamos arduamente para alcanzarlas.
Eventualmente alcanzamos esa meta, y nos sentimos bien por un rato pero, al igual que
antes, comienza todo el proceso de nuevo se ha convertido en una noria.
Lo curioso es que no nos encontramos satisfechos por alcanzar nuestras metas. Por el
contrario, todo este proceso de proponernos metas, de esforzarnos y de obtener logros
parece crear dentro de nosotros un deseo insaciable por tener aun ms poder, ms
reconocimiento, ms prestigio, ms sexo o lo que sea. Entonces comenzamos a sentirnos
como que no estamos llegando ah con suficiente rapidez; que los dems no nos estn
dando la recompensa con la velocidad que deseamos o en la forma que creamos
merecerlas.
Al poco tiempo, podramos empezar a tomar algunos atajos. Quizs digamos unas cuantas
mentiras o manipulemos un poco. Claro, cada vez que lo hacemos lastimamos a otros, los
cuales a su vez buscan venganza y esto nos ocasiona dolor y sufrimiento. As acabamos en
un profundo conflicto con otras personas.
Este ciclo puede ocurrir con cualquiera de nuestros instintos, trtese de nuestros instintos de
aceptacin social, seguridad econmica, sexo o lo que sea.
Quizs has estado buscando prestigio o el respeto de los dems. Es posible que hayas
logrado el puesto de jefe o presidente. Adems, ests al mando de los voluntarios del
departamento de bomberos y eres miembro de la sociedad de padres de familia. Todo eso es

muy impresionante. Pero tan pronto te encuentras donde queras estar, deseas alcanzar un
puesto ms alto, quieres parecer ms importante ante los ojos de los dems.
O quizs ests tratando de alcanzar seguridad econmica. Despus de trabajar arduamente
durante veinte aos, tienes casa propia, automvil y dinero en el banco. Te sientes bien
durante algn tiempo pero no puedes dejar de notar que tu vecino est manejando un
cadillac nuevo, mientras que t tienes un chevrolet desde hace tres aos, al poco tiempo
empiezas a desear un Cadillac nuevo tambin.
O quizs tengas un inters particular en el sexo. Cada vez que tienes relaciones sexuales te
sientes maravillosamente. Lo nico malo es que duran poco. Al poco tiempo de tenerlas,
comienzas a pensar en tenerlas otra vez. Luego empiezas a pensar en tener relaciones
sexuales con diferentes personas otra vez, en diferentes lugares y en diferentes formas.
Luego te encuentras tenindolas en momento equivocado, en el lugar equivocado, y con las
personas equivocadas. Lo curioso es que, en vez de que te satisfagan, te crean un deseo
insaciable de tener ms. De pronto te encuentras lastimando a otros, debido a tu bsqueda
por satisfacer tus propios deseos; y ellos a su vez, se desquitan y esto te ocasiona
sufrimiento.
No importa que andes buscando prestigio y respeto, seguridad econmica o sexo; eventual
mente te veras tentado a lastimar a otros, o a entrometerte en sus caminos, con tal de
perseguir tus propias metas. Si te rindes ante esta tentacin, la mayora de las personas se
desquitaran, pronto te encontrars en medio de mucho dolor y sufrimiento.
Algo de esto te suena familiar?
Nos es muy claro que una vida basada en voluntad propia casi nunca ser exitosa ni feliz. Si
se nos deja a nuestros propios recursos, nos daremos cuenta que satisfacer nuestros
instintos bsicos puede ser placentero, pero es tan temporal y veloz que nos vemos
envueltos en tratar de satisfacerlos una y otra vez. Casi invariablemente nos excedemos, y
satisfacer nuestros instintos se convierte en una obsesin. Y cuando nos excedemos
entramos en conflictos con otras personas y les ocasionamos dolor y dificultades. Eso nos
roba la posibilidad de tener paz mental. En lugar de ganar algo, acabamos perdiendo y por si
fuera poco, lastimando a otros.
Esto es lo que dice el Doctor Silkworth en La Opinin del Medico en las lneas 27-30 de la
pagina xxii del libro grande: Cuando estamos sobrios, estamos inquietos, irritables y
descontentos. A menudo, tambin estamos llenos de vergenza, temor, culpa y
remordimiento. Y esto es lo peor de todo. Si se nos deja a nuestros propios recursos,
siempre permaneceremos as, debido a nuestros instintos y voluntad propia.
Pero si podemos que nuestro poder superior controle nuestra voluntad e instintos, para que
estos puedan operar al nivel apropiado, entonces quizs no nos sintamos tan inquietos,
irritables y descontentos y podamos vivir sin tanto conflicto y sin ocasionar tanto dao a los
dems, entonces no tendramos que sentir la vergenza, el temor, la culpa y el
remordimiento que resultan de lastimar a otros.
ENCONTRANDO LA LIBERACIN DEL EGOISMO.
Como seres humanos, cada uno de nosotros tiene voluntad propia. El punto principal del
tercer paso no consiste en eliminar esa voluntad, ni en tratar de dejar de ser humanos eso
sera otra obsesin, otra forma de locura, en lugar de esto, la tarea consiste en que cada uno
de nosotros deje que nuestro poder superior sea el director de nuestra voluntad. Si un poder

superior dirige tu voluntad, entonces tambin dirigir tus acciones. Y si ese poder dirige tus
acciones, entonces dirige tu vida y por fin podrs vivir con cierta paz mental y serenidad.
Como dice el libro grande en la pgina 58 lneas 2-3. El egosmo y la concentracin en
nosotros mismos son la raz de nuestras dificultades. Bsicamente, nosotros mismos hemos
creado nuestras dificultades. Sin embargo no podemos solucionarlas nosotros mismos.
Nuestro problema es que dejamos que nuestra voluntad propia dirija lo que hacemos; la
solucin est en darle a nuestro poder superior el control de nuestra voluntad.
Por un momento revisa la historia de Bill W., en las lneas 4-7 de la pagina 13. Aqu, Bill W.
finalmente llego a la inevitable conclusin de que tena que deshacerse de su egocentrismo.
Su voluntad propia lo haba destruido, tena que poner todo al cuidado de su poder superior,
refirindose a l como El Padre de la Luz. Tuvo que deshacerse de dos cosas que se
encontraban muy cerca de su corazn las mismas dos cosas que todos los nosotros, los
Alcohlicos, tenemos cerca de nuestros corazones: el alcohol y el egocentrismo.
La mayora de los problemas emocionales de las personas resultan de una obstinacin
desbocada. Como alcohlicos, tenemos muchos problemas relacionados con ella.
Ante todo, para tu recuperacin es esencial que te encuentres libre de egocentrismo. Si no
puedes hacerlo tu egocentrismo te matar.
Tu poder superior es el nico que puede liberarte de ese egocentrismo. Durante los
siguientes captulos, te mostraremos lo que puedes hacer para encontrar esa liberacin.

TODO O NADA

NO PUEDES HACER APUESTAS

En el capitulo anterior, dijimos que poner tu voluntad y tu vida al cuidado de un poder
superior probablemente no ser fcil y rpido. Lo que no explicamos es por qu no. La razn
de esto es que la voluntad propia rara vez se rinde sin una buena pelea.
Para cuando hemos llegado al tercer paso, la mayora de nosotros le ha dicho a Dios
bsicamente: Nos gustara que nos quites la bebida, pero no te metas con el resto de
nuestras vidas. Mantente fuera de cosas como el dinero y el sexo; nosotros mismos nos
ocuparemos de eso. Tu solamente ocpate de la bebida.
Sin embargo, un poder superior no trabaja de esa manera. Tu voluntad y tu vida abarcan
mucho ms que tu problema con la bebida; se te pide que pongas todo al cuidado de l. Tu
poder superior lo quiere todo. Si le pides a tu poder superior: Quiero que dirijas mi forma de
pensar en lo que se refiere al alcohol, pero en otros temas djame en paz, te encontrars
igual de miserable que antes. Tienes que deshacerte de todo. Es todo o nada. Te guste o no,
as es como funciona esto.
A nosotros nos llevo mucho tiempo para realmente llegar a comprender esto pero ahora
nos parece la cosa ms normal, natural y razonable, y podemos ver que as es como debe
ser. No puedes apostar con tu poder superior.
Pinsalo un momento. En el captulo 5, el libro grande nos dijo que la raz de nuestro
problema es el egocentrismo y la voluntad propia no solamente en lo referente al alcohol,
sino en todo en nuestras vidas. Esto significa que un poder superior nos re-dirija nuestra
manera de pensar, no solamente los pensamientos que tenemos acerca del alcohol. Y si ese
poder superior va a estar re-dirigiendo nuestra manera de pensar, entonces es muy claro
que estaremos poniendo al cuidado de l mucho ms que el alcohol.

LA DIFERENCIA ENTRE LA ENFERMEDAD Y EL SINTOMA.

Supn que tienes una especie de infeccin en todo tu cuerpo. Est provocando que te
sientas miserable por todos lados, pero ante todo tienes una bola grande y dolorosa en tu
cuello. Podras ir al doctor dicindole: Doctor, tengo esta bola en el cuello. Tome su cuchillo
y crtelo, por favor. Eso acabara con la bola, pero no tendra mucho sentido. Sera mucho
ms inteligente decir: Doctor, Me podra recetar un antibitico para curarme de esta
infeccin y sentirme mejor? Es mucho mejor librarse de toda la enfermedad, en vez de tan
solo su peor sntoma.
Por supuesto que ningn Doctor decente te cortara la bola y te mandara a la calle; el doctor
buscara la mejor manera de que recuperaras tu salud. De esa misma forma, necesitas a un
poder superior- no para curar unos de tus sntomas, sino para que trabaje en toda la
enfermedad.
Entonces, al final de cuentas, tienes que poner todo- tu voluntad y tu vida- al cuidado de tu
poder superior.
Ahora bien, no tienes que comenzar de ese modo- de hecho, llegar a este punto
normalmente lleva algn tiempo y un poco de fe- pero eventualmente, acabaras ah.
Creemos que tu xito con el resto de los doce pasos, depende de cuanta voluntad y vida
ests dispuesto a poner al cuidado de tu poder superior. Cuanto ms puedas poner al
cuidado de l , mas funcionaran los pasos para ti y ms xito alcanzaras.
Hace ms de veinte aos, cuando ambos estbamos bebiendo aun, entregamos todas
nuestras voluntades y nuestras vidas al alcohol. El alcohol determinaba a dnde bamos, lo
que hacamos, con quien nos asocibamos, con quien tenamos relaciones sexuales, y como
gastbamos nuestro dinero. Diriga prcticamente todo pensamiento que habamos tenido
durante aos. Al alcohol le entregamos todo lo que tenamos. Esto nos pareca natural.
Sin embargo, cuando se nos pidi entregar nuestras voluntades y nuestras vidas a un poder
realmente superior a nosotros mismos, nos dio temor. Tenamos miedo de entregar nuestras
voluntades y nuestras vidas- pero al tener esta enfermedad, ya se las habamos entregado
al alcohol! Si hubisemos hecho la mitad del esfuerzo, en entregar todo lo que tenamos al
cuidado y la direccin de un poder superior, que el que hicimos en entregarnos al alcohol,
hace unos aos, nos hubiramos evitado mucho dolor y sufrimiento.
Estamos muy agradecidos de final mente haber podido entregar todo a este poder, y de que
se nos haya devuelto el sano juicio.
LA ELECCION ES TUYA
Te guste o no, ahora te encuentras en la misma posicin. Tienes que elegir entre el alcohol u
otra adiccin y un poder superior a ti. No existen pactos, ni medidas parciales. Para poder
estar completamente liberados de la obsesin por beber o por usar otras drogas, la cual es
parte de tu enfermedad, necesitas decidir, tarde o temprano, que dejaras que tu poder
superior se encargue de todo.
El libro grande es muy explicito sobre esto. Lee las lneas 9-16 de la pagina 24. Dice que
para los verdaderos alcohlicos, no existen soluciones a medias. Solamente hay dos
alternativas: rendirte ante el alcohol, o aceptar ayuda espiritual.
Sin embargo, esta entrega no tiene que ser repentina ni inmediata. De hecho, a la mayora
les lleva algn tiempo. Pero cuando un poder superior a ti este dirigiendo tu voluntad y tu

vida, tu vida entera mejorar. Y de esto, ms que de cualquier otra cosa, se trata el libro
grande.
Se encontr este documento en internet y por considerarlo importante para quienes conocen
algo de Alcohlicos Annimos y para los que no, les coloco una pildora de lo interesante de la
literatura y sus interpretaciones de lo puede ayudar la literatura de AA que es irremplazable
les sugiero que si un familiar, amigo o algun conocido tiene problemas con el alcohol. AA
es la solucin que esta buscando. ..Busque un grupo de AA en tu ciudad. .AA da
resultados.

AA da resultados - Busquelo en su Ciudad

Texto trascrito por un AA Annimo D.

SALUDOS, ya que no pude asistir al Foro de Servicio, me dedique a estudiar nuestro Texto
Bsico, con un librito que compre por ah, (clandestinamente, je, je, je), pero me pareci
interesante, les envi lo que transcrib del libro referente a cmo hacer el tercer paso, si les
gusta les mando el capitulo siguiente sin problemas, menos mal que esto es democrtico.
COMO TRABAJA: ENTENDIENDO EL TERCER PASO.
OBSTINACION
Los doce pasos son ms que una lista de ideas o sugerencias: son un diseo para vivir.
Pensamos que son la mejor muestra de cmo poder vivir una forma de vida completamente
espiritual.
DECIDIENDOSE A ACTUAR.
Ahora que has admitido que eres impotente ante el alcohol u otra accin y que has llegado a
creer que un poder superior a ti mismo puede devolverte el sano juicio, te encuentras listo
para el tercer paso, que implica decidir poner tu voluntad y tu vida al cuidado de ese poder
superior.
Examinemos el tercer paso ms de cerca con la palabra decidimos esta es una de las
palabras claves de los doce pasos y de todo el libro grande, ya que representa el eslabn
entre la comprensin y la accin. Para encontrar la solucin a cualquier problema primero
debemos comprender cul es el problema; pero, entender no basta. Tambin tienes que
actuar, despus de haber comprendido. Y, para poder actuar, tienes que decidirte a actuar.
Es imposible tomar accin sin que de algn modo, te digas a ti mismo: Esto es lo que har
Si una decisin no es seguida por una accin, en esencia esa decisin no vale nada. Si
tienes hambre y decides comer, pero en realidad no comes algo, no te alimentaras, y aun
tendrs hambre. Tu decisin de comer fue intil, porque no actuaste. Si no hubieras tomado
la decisin el resultado habra sido el mismo. De hecho, dara lo mismo que hubiese
decidido hacer lo opuesto y seguir hambriento.
Hace algunos aos decidimos ir a los ngeles, pero no hicimos nada al respecto no
reservamos habitaciones en el hotel, no compramos boletos de avin, y ni siquiera
organizamos nuestro tiempo para la visita, por supuesto, no fuimos a los ngeles. Al final de
cuentas la decisin de ir fue insignificante, porque no actuamos sobre ella.
Sin embargo aproximadamente un ao despus, decidimos ir a los ngeles otra vez, en esta
ocasin pusimos las maletas en el automvil, lo llenamos de gasolina y llegamos a los
ngeles- no porque simplemente decidimos ir , sino porque tomamos la accin necesaria
para llevar a cabo esa decisin.
El tercer paso implica tomar una decisin clave, poner tu voluntad y tu vida al cuidado de tu
poder superior. Las acciones necesarias para llevar a cabo esta decisin se encuentran
incluidas desde el cuarto paso hasta el noveno pasos.
PONIENDO TU VOLUNTAD Y TU VIDA AL CUIDADO DE DIOS.
Ahora que hemos comprendido el significado de la palabra decisin, examinemos otro par de
palabras contenidas en el tercer paso. Se supone que debes poner tu voluntad y tu vida al
cuidado de tu poder superior. Pero, Qu es tu voluntad exactamente? Si reflexionas un
momento, te dars cuenta de que no es nada ms que tu mente y tu manera de pensar. Tu
voluntad es algo en tu cabeza que te dice que hacer.

Y Qu hay con tu vida? Tus acciones son tu vida- la suma total de todas las acciones que
has tomado a lo largo de tu vida. Todas estas acciones han hecho lo que t eres y te han
puesto dnde ests en este momento.
Te diremos de una buena vez que el tercer paso puede atemorizar a algunas personas, por
lo menos al principio. Cuando nosotros llegamos por primera vez a AA nos asusto
muchsimo. El tercer paso nos peda que pusiramos nuestras voluntades y nuestras vidas al
cuidado de un poder superior, pero no sabamos que es lo que ese poder quera que
hiciramos. Qu tal si nuestro poder superior se le ocurra que nos convirtiramos en
misioneros en algn lugar lejano, al cual definitivamente no queramos ir?
Uno de nosotros le admiti este temor a su padrino de AA esta persona simplemente se ri.
Dijo: Revisa tu vida. A lo largo de ella, has sido un ser humano egosta, concentrado en ti
mismo. Siempre has pensado lo que quieres pensar, has tomado las decisiones que queras
tomar y has actuado como queras actuar. Mira adonde te ha llevado eso. El resultado de
pensar, decidir, y hacer lo que queras es que casi has destruido tu vida, as como las vidas
de todos los que te rodean. te atemoriza deshacerte de esto? Quizs si un poder superior
pudiese dirigir lo que piensas, tus pensamientos mejoraran. Y si tu pensamiento mejora,
entonces tal vez tus acciones mejoraran y entonces tu vida, al igual que las vidas de los
que te rodean mejoraran tambin.
Asimismo, dijo: ya te has dado cuenta de que no tienes salida, utilizando tus propios
recursos. Tan solo seguirs pensando como siempre lo has hecho, y seguirs actuando
como siempre lo has hecho. Seguirs obteniendo los mismos resultados, y tu vida seguir
siendo un infierno. Tu poder superior de ninguna manera har que tu vida sea peor de lo que
es ahora- por lo tanto, es posible que tu poder superior har que tu vida sea mejor.
Por supuesto tena razn.
Poner tu voluntad y tu vida al cuidado de un poder superior generalmente no es rpido ni
sencillo. No lo puedes hacer de un momento para otro. Implica una decisin y muchas
acciones y trabajo para cambiar tu vida. As fue para nosotros y para muchos otros
alcohlicos en recuperacin que conocemos. Si has estado viviendo una vida llena de
voluntad propia durante aos, es muy difcil decir: Esta bien, esto parece un callejn sin
salida, as es que de aqu en adelante me pondr al cuidado de mi poder superior. No es tan
fcil como cambiar tu marca de caf o pasta dental. Para la mayora de nosotros, no es tan
fcil, y lleva tiempo poder hacerlo.
LA NATURALEZA DE LA VOLUNTAD PROPIA.
Necesitamos hablar un poco sobre la obstinacin, ya que muchos malinterpretan lo que
significa y como funciona. Primero, la voluntad propia es parte de la vida de todas las
personas. No estamos diciendo que la voluntad propia sea mala, y el libro grande tampoco
dice eso. De hecho la voluntad propia es algo que nos ha dado Dios, y forma parte de
quienes somos. No seriamos seres humanos completos si careciramos de de ella. Es
necesario y vital tener un sentido del yo en la vidaTodos nuestros instintos son formas de voluntad propia. Tenemos instintos de supervivencia,
de comer, de alojamiento, de buscar compaa, sexuales y hasta de autoestima y orgullo.
Sin embargo cuando nuestros instintos crecen demasiado y estn fuera de control, se
vuelven destructivos para nosotros, as como para los dems. Si nuestro sentido del yo no
est controlado, se convierte en la cosa ms destructiva de nuestras vidas.

Cada uno de nosotros se parece a una casa. Para lograr que esta casa sea habitable y
completa necesita utilidades, agua-electricidad y quizs gas natural. La mayor parte del
tiempo, estas utilidades hacen que tu casa sea ms cmoda y tu vida sea ms placentera.
Pero si una de ellas pierde el control, acabas con un incendio o inundacin, y tu casa puede
ser destruida.
Nuestra voluntad y nuestros instintos son como las utilidades en una casa. Cuando son
utilizados apropiadamente, de acuerdo a sus propsitos originales, pueden hacer que tu vida
sea ms tranquila y plena. Pero si son incontrolables, pueden ocasionar daos terribles para
ti y para los dems. De hecho, la fuerza ms destructiva de este mundo es la voluntad propia
incontrolada de los seres humanos.
Nos podemos meter en graves problemas cuando nos proponemos metas basadas en las
razones equivocadas. A la mayora de nosotros, durante nuestra infancia, se nos ensea a
proponernos metas y, luego, a trabajar arduamente para alcanzarlas. Asimismo, se nos
ensea que a menudo es necesario hacer sacrificios para alcanzar esas metas. Pero cuando
alcanzamos una meta, repentinamente somos recompensados con dinero, con seguridad,
con sexo, con una posicin social, o con el respeto y aprobacin de los dems. Tambin
somos recompensados con una sensacin de xito y logro. Todo eso se siente maravilloso.
No hay nada malo con proponernos metas. Pero veamos que puede ocurrir una vez que
alcanzamos esa meta propuesta, cualesquiera que esta sea. Al principio se siente fantstico;
nos sentimos en la cima del mundo. Pero desafortunadamente, por lo general esta sensacin
no es muy duradera. Al poco tiempo de haber obtenido lo que queramos y por lo que
trabajamos tanto, nos podramos encontrar mirando a nuestro alrededor, diciendo: Y esto
era todo?
Por lo tanto, nos proponemos nuevas metas, y trabajamos arduamente para alcanzarlas.
Eventualmente alcanzamos esa meta, y nos sentimos bien por un rato pero, al igual que
antes, comienza todo el proceso de nuevo se ha convertido en una noria.
Lo curioso es que no nos encontramos satisfechos por alcanzar nuestras metas. Por el
contrario, todo este proceso de proponernos metas, de esforzarnos y de obtener logros
parece crear dentro de nosotros un deseo insaciable por tener aun ms poder, ms
reconocimiento, ms prestigio, ms sexo o lo que sea. Entonces comenzamos a sentirnos
como que no estamos llegando ah con suficiente rapidez; que los dems no nos estn
dando la recompensa con la velocidad que deseamos o en la forma que creamos
merecerlas.
Al poco tiempo, podramos empezar a tomar algunos atajos. Quizs digamos unas cuantas
mentiras o manipulemos un poco. Claro, cada vez que lo hacemos lastimamos a otros, los
cuales a su vez buscan venganza y esto nos ocasiona dolor y sufrimiento. As acabamos en
un profundo conflicto con otras personas.
Este ciclo puede ocurrir con cualquiera de nuestros instintos, trtese de nuestros instintos de
aceptacin social, seguridad econmica, sexo o lo que sea.
Quizs has estado buscando prestigio o el respeto de los dems. Es posible que hayas
logrado el puesto de jefe o presidente. Adems, ests al mando de los voluntarios del
departamento de bomberos y eres miembro de la sociedad de padres de familia. Todo eso es
muy impresionante. Pero tan pronto te encuentras donde queras estar, deseas alcanzar un
puesto ms alto, quieres parecer ms importante ante los ojos de los dems.

O quizs ests tratando de alcanzar seguridad econmica. Despus de trabajar arduamente

durante veinte aos, tienes casa propia, automvil y dinero en el banco. Te sientes bien
durante algn tiempo pero no puedes dejar de notar que tu vecino est manejando un
cadillac nuevo, mientras que t tienes un chevrolet desde hace tres aos, al poco tiempo
empiezas a desear un Cadillac nuevo tambin.
O quizs tengas un inters particular en el sexo. Cada vez que tienes relaciones sexuales te
sientes maravillosamente. Lo nico malo es que duran poco. Al poco tiempo de tenerlas,
comienzas a pensar en tenerlas otra vez. Luego empiezas a pensar en tener relaciones
sexuales con diferentes personas otra vez, en diferentes lugares y en diferentes formas.
Luego te encuentras tenindolas en momento equivocado, en el lugar equivocado, y con las
personas equivocadas. Lo curioso es que, en vez de que te satisfagan, te crean un deseo
insaciable de tener ms. De pronto te encuentras lastimando a otros, debido a tu bsqueda
por satisfacer tus propios deseos; y ellos a su vez, se desquitan y esto te ocasiona
sufrimiento.
No importa que andes buscando prestigio y respeto, seguridad econmica o sexo; eventual
mente te veras tentado a lastimar a otros, o a entrometerte en sus caminos, con tal de
perseguir tus propias metas. Si te rindes ante esta tentacin, la mayora de las personas se
desquitaran, pronto te encontrars en medio de mucho dolor y sufrimiento.
Algo de esto te suena familiar?
Nos es muy claro que una vida basada en voluntad propia casi nunca ser exitosa ni feliz. Si
se nos deja a nuestros propios recursos, nos daremos cuenta que satisfacer nuestros
instintos bsicos puede ser placentero, pero es tan temporal y veloz que nos vemos
envueltos en tratar de satisfacerlos una y otra vez. Casi invariablemente nos excedemos, y
satisfacer nuestros instintos se convierte en una obsesin. Y cuando nos excedemos
entramos en conflictos con otras personas y les ocasionamos dolor y dificultades. Eso nos
roba la posibilidad de tener paz mental. En lugar de ganar algo, acabamos perdiendo y por si
fuera poco, lastimando a otros.
Esto es lo que dice el Doctor Silkworth en La Opinin del Medico en las lneas 27-30 de la
pagina xxii del libro grande: Cuando estamos sobrios, estamos inquietos, irritables y
descontentos. A menudo, tambin estamos llenos de vergenza, temor, culpa y
remordimiento. Y esto es lo peor de todo. Si se nos deja a nuestros propios recursos,
siempre permaneceremos as, debido a nuestros instintos y voluntad propia.
Pero si podemos que nuestro poder superior controle nuestra voluntad e instintos, para que
estos puedan operar al nivel apropiado, entonces quizs no nos sintamos tan inquietos,
irritables y descontentos y podamos vivir sin tanto conflicto y sin ocasionar tanto dao a los
dems, entonces no tendramos que sentir la vergenza, el temor, la culpa y el
remordimiento que resultan de lastimar a otros.
ENCONTRANDO LA LIBERACIN DEL EGOISMO.
Como seres humanos, cada uno de nosotros tiene voluntad propia. El punto principal del
tercer paso no consiste en eliminar esa voluntad, ni en tratar de dejar de ser humanos eso
sera otra obsesin, otra forma de locura, en lugar de esto, la tarea consiste en que cada uno
de nosotros deje que nuestro poder superior sea el director de nuestra voluntad. Si un poder
superior dirige tu voluntad, entonces tambin dirigir tus acciones. Y si ese poder dirige tus
acciones, entonces dirige tu vida y por fin podrs vivir con cierta paz mental y serenidad.

Como dice el libro grande en la pgina 58 lneas 2-3. El egosmo y la concentracin en

nosotros mismos son la raz de nuestras dificultades. Bsicamente, nosotros mismos hemos
creado nuestras dificultades. Sin embargo no podemos solucionarlas nosotros mismos.
Nuestro problema es que dejamos que nuestra voluntad propia dirija lo que hacemos; la
solucin est en darle a nuestro poder superior el control de nuestra voluntad.
Por un momento revisa la historia de Bill W., en las lneas 4-7 de la pagina 13. Aqu, Bill W.
finalmente llego a la inevitable conclusin de que tena que deshacerse de su egocentrismo.
Su voluntad propia lo haba destruido, tena que poner todo al cuidado de su poder superior,
refirindose a l como El Padre de la Luz. Tuvo que deshacerse de dos cosas que se
encontraban muy cerca de su corazn las mismas dos cosas que todos los nosotros, los
Alcohlicos, tenemos cerca de nuestros corazones: el alcohol y el egocentrismo.
La mayora de los problemas emocionales de las personas resultan de una obstinacin
desbocada. Como alcohlicos, tenemos muchos problemas relacionados con ella.
Ante todo, para tu recuperacin es esencial que te encuentres libre de egocentrismo. Si no
puedes hacerlo tu egocentrismo te matar.
Tu poder superior es el nico que puede liberarte de ese egocentrismo. Durante los
siguientes captulos, te mostraremos lo que puedes hacer para encontrar esa liberacin.

TODO O NADA

NO PUEDES HACER APUESTAS

En el capitulo anterior, dijimos que poner tu voluntad y tu vida al cuidado de un poder
superior probablemente no ser fcil y rpido. Lo que no explicamos es por qu no. La razn
de esto es que la voluntad propia rara vez se rinde sin una buena pelea.
Para cuando hemos llegado al tercer paso, la mayora de nosotros le ha dicho a Dios
bsicamente: Nos gustara que nos quites la bebida, pero no te metas con el resto de
nuestras vidas. Mantente fuera de cosas como el dinero y el sexo; nosotros mismos nos
ocuparemos de eso. Tu solamente ocpate de la bebida.
Sin embargo, un poder superior no trabaja de esa manera. Tu voluntad y tu vida abarcan
mucho ms que tu problema con la bebida; se te pide que pongas todo al cuidado de l. Tu
poder superior lo quiere todo. Si le pides a tu poder superior: Quiero que dirijas mi forma de
pensar en lo que se refiere al alcohol, pero en otros temas djame en paz, te encontrars
igual de miserable que antes. Tienes que deshacerte de todo. Es todo o nada. Te guste o no,
as es como funciona esto.
A nosotros nos llevo mucho tiempo para realmente llegar a comprender esto pero ahora
nos parece la cosa ms normal, natural y razonable, y podemos ver que as es como debe
ser. No puedes apostar con tu poder superior.
Pinsalo un momento. En el captulo 5, el libro grande nos dijo que la raz de nuestro
problema es el egocentrismo y la voluntad propia no solamente en lo referente al alcohol,
sino en todo en nuestras vidas. Esto significa que un poder superior nos re-dirija nuestra
manera de pensar, no solamente los pensamientos que tenemos acerca del alcohol. Y si ese
poder superior va a estar re-dirigiendo nuestra manera de pensar, entonces es muy claro
que estaremos poniendo al cuidado de l mucho ms que el alcohol.
LA DIFERENCIA ENTRE LA ENFERMEDAD Y EL SINTOMA.

Supn que tienes una especie de infeccin en todo tu cuerpo. Est provocando que te
sientas miserable por todos lados, pero ante todo tienes una bola grande y dolorosa en tu
cuello. Podras ir al doctor dicindole: Doctor, tengo esta bola en el cuello. Tome su cuchillo
y crtelo, por favor. Eso acabara con la bola, pero no tendra mucho sentido. Sera mucho
ms inteligente decir: Doctor, Me podra recetar un antibitico para curarme de esta
infeccin y sentirme mejor? Es mucho mejor librarse de toda la enfermedad, en vez de tan
solo su peor sntoma.
Por supuesto que ningn Doctor decente te cortara la bola y te mandara a la calle; el doctor
buscara la mejor manera de que recuperaras tu salud. De esa misma forma, necesitas a un
poder superior- no para curar unos de tus sntomas, sino para que trabaje en toda la
enfermedad.
Entonces, al final de cuentas, tienes que poner todo- tu voluntad y tu vida- al cuidado de tu
poder superior.
Ahora bien, no tienes que comenzar de ese modo- de hecho, llegar a este punto
normalmente lleva algn tiempo y un poco de fe- pero eventualmente, acabaras ah.
Creemos que tu xito con el resto de los doce pasos, depende de cuanta voluntad y vida
ests dispuesto a poner al cuidado de tu poder superior. Cuanto ms puedas poner al
cuidado de l , mas funcionaran los pasos para ti y ms xito alcanzaras.
Hace ms de veinte aos, cuando ambos estbamos bebiendo aun, entregamos todas
nuestras voluntades y nuestras vidas al alcohol. El alcohol determinaba a dnde bamos, lo
que hacamos, con quien nos asocibamos, con quien tenamos relaciones sexuales, y como
gastbamos nuestro dinero. Diriga prcticamente todo pensamiento que habamos tenido
durante aos. Al alcohol le entregamos todo lo que tenamos. Esto nos pareca natural.
Sin embargo, cuando se nos pidi entregar nuestras voluntades y nuestras vidas a un poder
realmente superior a nosotros mismos, nos dio temor. Tenamos miedo de entregar nuestras
voluntades y nuestras vidas- pero al tener esta enfermedad, ya se las habamos entregado
al alcohol! Si hubisemos hecho la mitad del esfuerzo, en entregar todo lo que tenamos al
cuidado y la direccin de un poder superior, que el que hicimos en entregarnos al alcohol,
hace unos aos, nos hubiramos evitado mucho dolor y sufrimiento.
Estamos muy agradecidos de final mente haber podido entregar todo a este poder, y de que
se nos haya devuelto el sano juicio.
LA ELECCION ES TUYA
Te guste o no, ahora te encuentras en la misma posicin. Tienes que elegir entre el alcohol u
otra adiccin y un poder superior a ti. No existen pactos, ni medidas parciales. Para poder
estar completamente liberados de la obsesin por beber o por usar otras drogas, la cual es
parte de tu enfermedad, necesitas decidir, tarde o temprano, que dejaras que tu poder
superior se encargue de todo.
El libro grande es muy explicito sobre esto. Lee las lneas 9-16 de la pagina 24. Dice que
para los verdaderos alcohlicos, no existen soluciones a medias. Solamente hay dos
alternativas: rendirte ante el alcohol, o aceptar ayuda espiritual.
Sin embargo, esta entrega no tiene que ser repentina ni inmediata. De hecho, a la mayora
les lleva algn tiempo. Pero cuando un poder superior a ti este dirigiendo tu voluntad y tu
vida, tu vida entera mejorar. Y de esto, ms que de cualquier otra cosa, se trata el libro
grande.