Bautismo D Else or
Bautismo D Else or
Bautismo D Else or
Moniciones de entrada:
(A)
Hace muy pocos das celebrbamos el nacimiento del Seor.
Aquel nio del portal de Beln significaba la presencia salvadora
de Dios en el mundo.
Dios, en la debilidad de aquel nio, se ofreca a los pastores y a
los magos (a todos los hombres en ellos representados) como
Salvador y Redentor. Jess = Dios-salvador.
Hoy celebramos el bautismo del Seor. Jess se nos presenta
como persona adulta, dispuesto a comenzar la misin iniciada en
Beln. Si el nacimiento de Jess fue "una gran noticia" para todo
el pueblo, el bautismo del Seor resulta una "noticia admirable"
para los creyentes: el cielo se abre y el Espritu de Dios desciende
sobre los hombres.
La voz de Dios-Padre nos invita a dar acogida a Jess y a
escuchar su mensaje.
Al recordar y celebrar el bautismo del Seor, tambin recordamos
el nuestro.
Un bautismo que, aunque lejano, sigue hablndonos de alegras y
de responsabilidades.
(B)
Con la fiesta del Bautismo de Jess cerramos los das de la
Navidad. Dios se ha hecho hombre en Jesucristo. La historia y la
humanidad son desde ahora la casa de Dios. Y hoy vemos a Jess
en la fila de aquellas personas que quieren dar un cambio a su
vida. El bautismo en el Jordn era el signo de la apertura a la
novedad de Dios, signo de querer cambiar todo lo negativo y
acoger al Dios de la Vida en la propia vida.
Oracin:
T sabes, Seor, que vamos a sentir
como todos,
las tentaciones de un mundo seductor
y vamos a tener que luchar
Liturgia de la palabra
Monicin a la primera lectura
Preparad el camino al Seor. Os suenan estas palabras? Por
supuesto! Nos sirvieron para preparar la Navidad. Pues hoy la
misma lectura del libro de Isaas nos sirve para cerrar la Navidad,
para insistir en que seamos capaces de recibir al Seor que ya est
caminando entre nosotros, dispuesto a revelar su gloria a todos los
hombres.
Lectura del profeta Isaas
Esto dice el Seor: Mirad a mi siervo, a quien sostengo; mi
elegido a quien prefiero. Sobre l he puesto mi espritu, para que
traiga el derecho a las naciones.
No gritar, no clamar, no vocear por las calles. La caa
cascada no la quebrar, el pabilo vacilante no lo apagar.
Promover fielmente el derecho, no vacilar ni se quebrar hasta
implantar el derecho en la tierra y sus leyes, que esperan las
islas. Yo, el Seor, te he llamado con justicia, te he tomado de la
mano, te he formado y te he hecho alianza de un pueblo, luz de
las naciones. Para que abras los ojos de los ciegos, saques a los
cautivos de la prisin, y de la mazmorra a los que habitan en las
tinieblas.
Palabra de Dios
Salmo 103: Bendice, alma ma, al Seor. El que sabe reconocer
la gloria del Seor que pasa a su lado en las mil maravillas de la
Homilas:
(A)
Hay una historieta muy linda. Ignoro donde la le, pero que se me
qued grabada por lo significativa. En unas Navidades, una nia
quiso regalar algo a su padre. Pero, como era muy pobre, no tena
nada que regalarle. En la Nochebuena, la nia puso junto al
Aunque hay personas que solicitan que se les borre del libro de
bautismos, no creo que la cifra sea alarmante. Otros, como el exprimer ministro britnico, Tony Blair, se incorporan. Ms
preocupante me parece ese enfriamiento general de la fe que se
palpa en personas y ambientes, que algunos llaman
descristianizacin silenciosa y de la que participan
principalmente los que se autocalifican como creyentes, pero no
practicantes.
Hoy celebramos la fiesta del bautismo del Seor, cuya escena la
describe el evangelio. Por tanto, es una invitacin para acercarnos
a este importante sacramento. Son muchos, una mayora
aplastante, los padres que lo piden para sus hijos. Pero dudo de la
preparacin y de la coherencia de un porcentaje que lo reclama.
Por este motivo, muchas parroquias o comunidades cristianas
estn haciendo serios esfuerzos para que este sacramento no se
rebaje. El dato, segn el cual un 90% de nuestra poblacin est
bautizado y despus un 75% se considera catlico y un 10 15%
(C)
Son pocos los cristianos que saben en qu da fueron bautizados,
y menos an los que lo celebran. Basta recordar la fecha del
nacimiento y celebrar el cumpleaos.
Lo importante evidentemente no es recordar un rito, sino
agradecer la fe que ha marcado nuestra vida ya desde nios y
asumir con gozo renovado nuestra condicin de creyentes. La
fiesta del Bautismo del Seor que hoy celebramos puede ser una
invitacin a recordar nuestro propio bautismo y a reafirmarnos de
manera ms responsable en nuestra fe.
Tal vez lo primero que hemos de hacer es preguntarnos si la fe
ocupa un lugar central en nuestra vida, o si todo se reduce a un
Rito de ofrendas:
a) Presentacin de la luz
(Un catequista de la Comunidad puede hacer esta ofrenda)
Seor, en nombre de cuantos estamos reunidos, yo te ofrezco hoy
esta luz, que la queremos unir a las que lucen sobre la mesa del
altar. Ella es el smbolo del efecto del bautismo en nosotros y de
Oracin:
Junto con el pan y el vino, recibe, Seor,
los smbolos de nuestro Bautismo,
por los que un da empezamos a pertenecer
a la Gran Familia de los hijos de Dios.
haz que esta renovacin bautismal
nos mueva a entregar nuestra vida
al servicio de los dems,
como lo hizo tu Hijo Jess,
que vive y reina por los siglos de los siglos. Amn.
Plegaria Eucarstica
Te damos gracias y te bendecimos, Seor,
aunque bien sabemos que no lo necesitas.
Pero s es justo y necesario reconocerte
Padre nuestro
Seguir a Jess todos los das no es una tarea fcil, sino
comprometida. Hay que pasar por pruebas y momentos duros.
Tambin a l le ocurra lo mismo, y con frecuencia, acuda a su
Padre del cielo a pedirle fuerzas para no caer en la tentacin de
seguir el camino fcil y cmodo. Desde entonces, el Padrenuestro,
es la oracin que los hijos de todas las razas y colores elevan al
Padre del cielo en todos los idiomas y desde todos los rincones,
diciendo...
Gesto de paz
Todos deseamos la paz, pero no llega; todos estamos hartos
de violencia, pero hacemos poco para desterrarla. Trabajar para
que reine la paz y la concordia en nuestra comunidad de
bautizados y en el mundo debe ser nuestra principal tarea de todos
Comunin:
No es suficiente con confesar y celebrar la fe. Es necesario
vivirla y expresarla en obras. Como fortaleza para andar ese
camino, el Seor se nos entrega ahora y se hace uno con nosotros.
ste es el Cordero de Dios...
Accin de gracias:
Te damos gracias, Padre bueno, porque en el Bautismo del
Jordn te has manifestado ungiendo a Jess, bandolo en el
Espritu y presentndolo a la historia como el Hijo amado y
cumplidor.
Te damos gracias por nuestro propio bautismo, bao
provocador del Espritu, experiencia de muerte y de resurreccin,
tensin de despojo y de compromiso.
Te damos gracias por los seguidores de Jess, ungidos por el
Espritu, que se gastan en el servicio a los dems y nos acercan
vitalmente al evangelio.
Que caminemos siempre unidos, con la alegra de sentirnos
hijos tuyos y hermanos de todos los hombres y mujeres. Por
JNS...
Envo:
Tenemos que comunicar a los dems que Dios no vive en las
nubes, ni en el cielo, sino en medio de nosotros, como agua limpia
y sol que calienta, smbolos de su gracia y de su fuerza.
Decidlo de puerta en puerta: que el amor como el sol brilla,
que la muerte est vencida, que hemos nacido a una nueva vida.
Decidlo de puerta en puerta: que ha florecido la paz, que nunca
ms habr llanto, que todos seremos hermanos... Id a decir por
las calles y las plazas, por los caminos y sendas, que Jess ha
regresado...
Bendicin:
Hermanos, nuestra celebracin termina y, con ella, el tiempo
de Navidad. Pero las realidades que hemos recordado y celebrado
nos impulsan a vivir en medio del mundo, como verdaderos hijos
de Dios y servidores de los hombres. Y que la bendicin de Dios
todopoderoso, Padre, Hijo y Espritu Santo, descienda sobre
vosotros. Amn.