Rosario de Cuaresma
Rosario de Cuaresma
Rosario de Cuaresma
Indicaciones: Seleccionar los coros y los cantos antes del inicio del rosario.
Todos: Por la Seal
Se inicia con la oraciones tradicionales.
Cuaresma es un tiempo de especial gracia, es tiempo favorable para convertirnos. Recordemos al Pueblo de
Israel caminando durante cuarenta aos por el desierto para poder ingresar a la tierra prometida. As tambin,
nosotros como Iglesia, Nuevo Pueblo de Dios, nos preparamos para vivir y celebrar el Misterio de la
Reconciliacin, cada vez con un corazn ms convertido. Este es el sentido: convertir nuestro corazn al Seor.
Meditemos en este rosario en algunos medios que la Iglesia nos propone para poder prepararnos
adecuadamente para la celebracin de los misterios centrales de nuestra fe.
PRIMERA
MEDITACIN
MEDITACIN
MEDITACIN
EL AYUNO Y LA ABSTINENCIA
Dos medios que nos ayudan a ir preparando mejor nuestro corazn. Debemos tomar conciencia de la bendicin
que nos da el Seor. Muchos no se percatan de la importancia de esto. Cuntos de nosotros sabemos del ayuno
y abstinencia de todos los viernes de Cuaresma, como preparacin. Y cuntos de nosotros realmente lo
vivimos?
Muy importante es tambin la mortificacin y la renuncia en algunas circunstancias ordinarias de nuestra vida,
ocasiones para acercarnos a la luz del Seor y conformarnos con l, purificando nuestros corazones.
En esta meditacin vamos a cantar el primer Ave Mara.
Padre nuestro...
CUARTA
MEDITACION
LLAMADO A LA CONVERSION
El Seor nos invita a convertirnos a l. Debemos llegar hasta el fondo de nosotros mismos, pues se trata de
morir a todo lo que es muerte para resucitar a una vida nueva en el Seor.
Confiemos en la misericordia de Dios. Escuhemos lo que l mismo nos dice en la Escritura: (hacer una pausa)
Y os dar un corazn nuevo, infundir en vosotros un espritu nuevo, quitar de vuestra carne el corazn de
piedra y os dar un corazn de carne
Padre nuestro...
QUINTA
MEDITACION
EN COMPAIA DE MARIA
Y todo este camino que hemos emprendido, lo hacemos en la compaa tierna y amorosa de nuestra Santa
Madre. Ella es gua segura en nuestro peregrinar hacia la plena configuracin con su Hijo, el Seor Jess. Es
Ella quien con su intercesin nos ayuda a cambiar nuestro corazn de piedra en un corazn de carne.
Acojmonos a su intercesin y confimosle nuestros esfuerzos para vivir inatensamente este tiempo de
conversin.
Padre nuestro...
Convirtamos nuestro corazn, trabajemos por nuestra propia reconciliacin personal, siempre guiados de la
mano amorosa de nuestra Madre.
Terminemos nuestra oracin cantando LA SALVE.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espritu Santo. Amn.