La Ruta Nazi de Madrid
La Ruta Nazi de Madrid
La Ruta Nazi de Madrid
Ich bin
Madrid
Durante la Segunda Guerra Mundial, Madrid se convirti en
la retaguardia del nazismo. La ciudad fue nido de espas, sede
de la Gestapo, destino de fugados y capital de la diplomacia de
Hitler. Un tramo de la Castellana concentraba la mayora de
los edificios germanos, aunque su influencia se extenda a
todos los centros de poder y abarcaba todas las actividades.
La esvstica jalonaba la ruta por el Madrid nacionalsocialista.
JAVIER JUREZ
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Nazismo a la carta
EL PARASO NAZI en que Madrid se haba convertido inclua algunos
restaurantes de clara iliacin ideolgica. Horcher, un emblema de la cocina
berlinesa que se convirti en cenculo de los dirigentes alemanes, abri frente
al parque del Retiro otro local despus de que los bombardeos sobre Berln
amenazaran su supervivencia. El restaurante Horcher de Madrid fue iel a
la misma vocacin: el lujo gastronmico al servicio de paladares de bolsillo
solvente y sintona ideolgica. An sigue siendo un lugar privilegiado por la
buena comida, los altos precios y la clientela escogida.
Algo parecido sucedi con el restaurante Edelweiss, situado en la calle
Jovellanos, frente al Congreso de los Diputados. Aunque sus inicios no estaban
ligados al nazismo, las circunstancias lo convirtieron en centro de reunin de
funcionarios y agentes alemanes.
Algunos bares prximos a la Cibeles como el Caf Lyon o la cafetera
Correos, en el inicio de la calla Alcal, servan como lugar habitual de cita para
espas y agentes de la Gestapo. En el primero de ellos, por ejemplo, estableci
sus primeros contactos con la Embajada alemana Juan Pujol Garca, alias
Garbo, quien sera un agente doble decisivo para el xito del desembarco de
Normanda en 1944.
Ni siquiera el turismo, incluso en tiempo de guerra, estaba ausente de las
inquietudes alemanas. En el nmero 42 de la calle Alcal permaneci abierta al
pblico durante toda la guerra la Oicina de Turismo, que serva tambin como
delegacin de la compaa de ferrocarriles. El servicio areo de Lufthansa tena
su propia sede en la calle Antonio Maura, 6.
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Historia contempornea
El emporio germano
en Espaa se
derrumb con la
misma facilidad que el
poder nazi en Berln
Intrigas en Madrid
TODOS LOS SERVICIOS de espionaje alemanes, militares o polticos, tenan en
Espaa su principal centro de actividad en el exterior. El ms importante era el
Abwehr, el servicio de informacin militar, que diriga desde Berln el almirante
Canaris, un profundo conocedor de Espaa, amigo personal de Franco y un militar
plenamente consciente de la importancia estrategia de la pennsula.
Al frente del Abwehr en Espaa haba nombrado a un hombre de su mxima
conianza, Wilhelm Leissner, como l marino profesional, militar competente y un
funcionario profesional que trataba de servir a su pas sin incurrir en el servilismo
al partido nazi, al que ntimamente detestaba.
Leissner se haca llamar Gustav Lenz. Con cualquiera de sus nombres
cultiv un merecido crdito como agente discreto y casi invisible, del que
apenas se conoca nada y cuya relacin personal limitaba a un reducido crculo
de funcionarios, incluyendo al embajador.
Su anonimato tiene an ms mrito si
se considera que el Abwehr manejaba
una maquinaria de casi 2.000 agentes y
colaboradores repartidos por toda Espaa, y
centralizaba informaciones desde el estrecho
de Gibraltar hasta el Golfo de Vizcaya.
Junto al Abwehr, el SD, el servicio de
informacin del partido nazi, tambin tena una
delegacin en la sede de la Embajada, adems
de la mencionada Gestapo, que operaba desde
el Consulado, y el servicio de inteligencia,
centrado en informacin diplomtica, que
coordinaba Gardemann, al que se conoci
como Dienstelle Gardemann o red Gardemann.
Wilhelm Canaris.
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Diversas estampas del Reichsfhrer-SS Himmler durante su periplo por Espaa, que
incluy una visita al Museo Arqueolgico de Madrid y a la plaza de toros de Las Ventas.
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