Currículum para La Emancipación
Currículum para La Emancipación
Currículum para La Emancipación
Categoras de diseo y
racionalidad crtica
Por: Juan Carlos Escobar Baos
Resumen
Emancipacin es un trmino alojado en el seno de la esclavitud, para provocar rebelin y desarrollar la identidad. Del
latn emancipato, emancipatnis, y este, a su vez, emancipo, emancipare, la palabra hace alusin a declarar libre al
hijo de la patria potestad, enfatizar en que este hijo ya no tiene potestad y, por tanto, ya no da cuenta a su seor de
sus actos. Currculum para la emancipacin se ancla en el triunfo de la resistencia, en la generacin de la voluntad, en
extender el conocimiento hacia las grandes mayoras y abordar los contenidos de enseanza-aprendizaje a partir del
contexto social, donde se producen la realidad de las personas.
Pero la pregunta es cmo concebir un currculum para la emancipacin? Desde esta ptica, vale la pena hacer un
anlisis sobre sus categoras y principios fundamentales, a fin de diferenciarlos de otros conceptos que pueden confundir
su desarrollo gnoseolgico y epistemolgico. Si bien la tesis fundamental es la de plantear un modelo crtico sobre
currculum, la nica va para lograrlo es el de colocar la emancipacin bajo constructos tericos amparados en los
principios de autodeterminacin, codeterminacin y solidaridad; constructos que son vitales para la capacidad de ver
el funcionamiento concreto del currculum, para ayudar a otros (Grundy 1998, 217).
Palabras clave: emancipacin, independencia, currculum, programas de estudio, resistencia, pedagoga crtica.
Desde este ngulo, vale la pena situar que se trata de un proceso mental que se adhiere a lo
que Habermas (1972, citado por Grundy 1998, 27) denomin como inters tcnico. Segn l, los
procesos tcnicos se basan en la necesidad de sobrevivir y reproducirse que tiene la especie,
tanto ella misma como aquellos aspectos de la sociedad humana que se consideran de mayor
importancia. El ratio Studiorum es proceso tcnico; implica un teorizar sobre el hacer, una
connotacin derivada del producto hacia el proceso. Dicho de otra forma, el proceso didctico
est sujeto a la programacin educativa, a lo que constituye el currculum oficial. La estructura
curricular queda expresada mediante el siguiente planteamiento: el inters tcnico constituye un
inters fundamental por el control del ambiente mediante la accin de acuerdo con reglas basadas
en leyes con fundamento emprico (Grundy 1998, 29). Se evidencia, desde esta posicin, que el
proceso tcnico engloba objetivos, mtodos y evaluacin, en el que las reglas se convierten en
prescripciones, de modo que al final del proceso de enseanza, el producto se ajustar al eidos
(es decir, las intenciones o ideas) expresados en los objetivos originales (Grundy 1998, 30).
Ese eidos significa la idea expresada en objetivos tcnicos que enmarcan la formacin
profesional, que, a fin de cuentas, es la base que sustenta la enseanza universitaria casi en toda
Amrica Latina. Hacia el siglo XVII y con las revoluciones industriales y sociales, el currculum
implicaba colecciones de tratados principales que se enseaban en una facultad de las
universidades y que recogan los adelantos cientficos de la poca (Pez, y otros 2013). Esos
tratados eran los eidos, dado que englobaba contenidos, objetivos y diversos temarios que se
haban recabado a lo largo de la experiencia docente y que serva de base para la formacin de
nuevos profesionales.
Aqu hay dos cosas que se deben tomar en cuenta. En primer lugar, hay que sealar que los
objetivos son vinculados a las habilidades tcnicas que el estudiante universitario debe dominar y
desarrollar, si es que quiere ser tomado en cuenta en el mundo laboral. En segundo lugar, se
debe situar el control como clave para examinar y verificar si las habilidades tcnicas han sido
desarrolladas. En este sentido, el currculum adquiere la forma de cursos de estudios o estructura
de conocimientos organizada de modo que d respuesta efectiva a las necesidades de los procesos
industriales (Tyler 1949, citado en Pez, y otros 2013, 4).
Kemmis (1998) seala que el inters tcnico centra los esfuerzos de los planificadores sobre
las cuestiones tcnicas y, en ese sentido, oscurece los principios educativos que guan la prctica
del currculum desde los mismos educadores, dejando su desarrollo al trabajo cientfico de los
tericos fuera de las escuelas (62). Esto significa que el currculum tcnico como curso de estudio
hace una distincin entre teora (que es el producto), acuada por los cientficos, y prctica (que
es el proceso) desarrollada por los docentes. La tendencia de esta forma de concebirlo es
condicionar la educacin al eidos de los expertos acadmicos (psiclogos, socilogos, filsofos) y
a su manera de entender epistemolgicamente la ciencia, la tcnica y la cultura.
El pensamiento curricular desde esta perspectiva tiene dos grandes derivaciones laterales:
una concepcin cientfica modelada por los tericos y la tendencia a condicionar el trabajo de los
docentes a lo que enmarca esa accin consultora. Bsicamente, currculum tcnico es una visin
de seleccin de conocimientos por parte de los tericos, los cuales prescriben lo que se debe
modelar dentro de la prctica educativa. Y esa prescripcin ocurre dentro de los programas de
estudios, que sirve como un marco orientativo de las prcticas didcticas.
Stenhouse (1998) manifest que el currculum tcnico est basado en las polticas
administrativas, las cuales en su prctica, renuncian a hacer del currculum una palanca de
transformacin de la enseanza y de formacin del profesorado (13). Este planteamiento se
explica de la siguiente manera:
Cuando en el propio modelo de currculum y en cada uno de los pasos de su desarrollo, desde las
macrodecisiones poltico administrativas hasta las tcnico-docentes, no se contempla la iniciativa y
participacin del profesor, es ms difcil que el currculum permita despus al profesorado su propia
iniciativa. (Stenhouse 1998, 13)
M. Apple, Curricular form and the logic of technical control. En M. Apple (ed), Ideology and practice in schooling.
Philadelphia. Temple University Press, 1983, pg. 148.
1
El sentido del ratio Studiorum, tal y como se indica en sus orgenes (Compaa de Jess), ha
cambiado, dado que para 1989 (en el caso de El Salvador) la visin de educacin buscaba la
solidaridad, el bien comn y la justicia, como valores bsicos para encontrar la verdad, la cual
deba ser buscada y proclamada por todos los medios posibles (Gonzlez 2014, 17).
Y es precisamente en la justicia, donde adquiere valor el currculum crtico, que desde una
nocin gnoseolgica proclama la verdad de la pobreza y marginacin, de la violencia, de la
corrupcin y la impunidad. Lo crtico, que del latn critcus y este a su vez, del griego antiguo
, derivado de (krits, juez), consiste en un proceso de emisin de juicios sobre una
determinada realidad, a partir de constructos informados.
Lo visin crtica del currculum consiste en una actividad participativa, democrtica y
comunitaria, a fin de que los programas de estudios surjan de los actos docentes, como
productores curriculares, adoptando una pedagoga crtica para promulgar la transformacin.
Kemmis asegura que:
Para poner en prctica una visin crtica del currculum () es preciso estar al tanto de que somos, en
cuanto tericos y en cuanto a profesores, productos y productores de ideologa y, esto a su vez, exige
que nos organicemos con otros para hacer nuestras propias crticas, histrica y polticamente sensibles,
de nuestros valores e ideas educativos sobre el currculum, sobre nuestras propias prcticas educativas,
y sobre nuestras situaciones de trabajo. (1998, 136)
Grundy seala que el currculum crtico slo puede desarrollarse en prcticas educativas
emancipatorias; prcticas asociadas a construcciones tericas y autnticas en cuanto a ambientes
de aprendizaje igualmente emancipadores (1998). De aqu surge, entonces, el dilema sobre cmo
considerar tericamente el currculum emancipador y todas las cuestiones que enmarca los
procesos de construccin del conocimiento. Se sabe que el diseo orienta a la prctica y, por
tanto, los procesos de aprendizaje quedan supeditados a las especificaciones prescriptivas, o sea,
a lo sealado por los objetivos operativos. Esto es, en realidad, la connotacin bsica de
currculum, que, sin dejarnos llevar por ello, tiene sus implicaciones en la direccin del docente
sobre los procesos de construccin de conocimientos de los alumnos.
Para que el currculum crtico pueda desarrollarse plenamente, hay que comprender su
dinmica social, no sujeta a la prescripcin, o sea, configurada en torno a la realidad que se
pretende transformar, ya que el encuentro de las prcticas educativas gira sobre la base de la
resistencia, trmino utilizado por Giroux (1998) para replantear que la comunidad educativa debe
promulgar colectivamente la solidaridad y la preocupacin mutua.
El trmino inculturacion fue utilizado por la Compaa de Jess como un proceso nico para armonizar el cristianismo
con las culturas de los pueblos. Juan Pablo II vincul el trabajo misionero en frica como una forma de inculturacin, en
el que dicho proceso es un camino lento que acompaa toda la vida misionera y requiere la aportacin de los diversos
colaboradores de la misin de gentes, la de las comunidades cristianas a medida que se desarrollan, la de los Pastores
que tienen la responsabilidad de discernir y fomentar su actuacin. (Juan Pablo II, 1990, 263).
Para 1633, en la Universidad de Glasgow (Escocia), se utiliz por vez primera el trmino
currculum; y fue aqu donde adquiri preponderancia la formacin de pastores evanglicos, a
partir de la nocin de la carrera en crculo como una concrecin racional, terica y teolgica.
Y es que esa formacin deba ser diseada conforme a unos principios hermenuticos3, que
vinculaban la teologa con la vida de los seres humanos en unos contextos especficos. Cabe
sealar, desde este ngulo, que el currculum fue visto como planificacin didctica, ligada a la
dinmica de la vida y a la forma en que los seres humanos interpretaban su realidad; lo que
permiti que los pedagogos y didcticos repensaran la orientacin hermenutica mediante el
principio de sistematizacin.
La pista circular de carros sustituy el ratio studiorium de los Jesuitas, dado que la
formacin no deba ser concebida como longitudinal, sino transversal; por eso, la estructura del
currculum implica progreso en una carrera de atletismo; por lo que la prdica tena que basarse
en lo cclico, a fin de comprender la palabra de Dios cada vez ms profunda.
Los predicadores en formacin quedan mejor articulados con la Reforma Calvinista, que inclua
transformacin de la enseanza en toda Escocia, incluyendo historia y filosofa para explicar el orden
de las cosas y la revisin constante de esa formacin a la luz de las circunstancias sociales, econmicas,
polticas e histricas. (Escobar 2003, 13)
El significado de hermenutica evoca a la interpretacin Bblica, en el que los contextos sociales y la vida de los feligreses
constituyen elementos fundamentales de interpretacin a la luz del Evangelio. Hermenutica que del griego
es interpretacin, implica un anlisis textual y que busca establecer el significado original de un texto para su
autor o para la comunidad en que se produjo (Reese 1980, 221). La formacin de pastores evanglicos demuestra la
configuracin de la hermenutica como una manera de predicar la palabra de Dios en torno a la comprensin humana;
comprensin que era necesaria aprender en los estudios de Teologa, Filosofa y Literatura.
4 Lungrend utiliza el trmino texto en sentido amplio, incluyendo materiales escritos, instrucciones y consejos de los
docentes, programas de estudios, guas de laboratorios o de experimentacin, normativa institucional, obras cientficas,
etc. (citado por Kemmis, 1998).
D IAGRAMA 1. D ISEO
INSTRUCCIONAL SEGN
PROPIA )
Los objetivos operativos dan pauta para la seleccin de actividades, las cuales debern
organizarse de acuerdo a la lgica del principio de sistematizacin. Dicha organizacin se realiza
de manera jerrquica a fin de posibilitar el desarrollo del aprendizaje y garantizar la formacin del
estudiante, la cual slo es posible suscitarla cuando se cumple con las caractersticas de los
objetivos operativos: conducta observable, contenidos de enseanza, condiciones de ejecucin y
criterios de aceptacin. Las actividades evidenciarn los recursos y medios que se utilizarn para
su desarrollo. Y precisamente, en esta dinmica, el diseo instruccional de Tyler (1954) adquiere
el criterio normativo, porque somete el proceso de enseanza-aprendizaje al cumplimiento de los
objetivos operativos. Toda esta estructuracin se basa en el diseo de una evaluacin, capaz de
revelar la medida en que los objetivos han sido logrados. Esto significa, que la evaluacin es, ante
todo, proceso para verificar solo aquellos conocimientos que se encuentran dentro de la
formulacin de objetivos.
Para Posner (2001), currculum tcnico o como producto es el conjunto de estrategias de
enseanza que los profesores planean utilizar (5); lo que se deriva indudablemente la concepcin
8
Lo tcnico se fundamenta en el supuesto de que las decisiones son tcnicas, con elementos
bsicos sobre cmo hacer las cosas; dicho de otra forma, las decisiones son consideradas tcnicas
si aparecen libres de valores, apropiadas para que un experto con conocimiento especializado las
adopte de manera objetiva (Posner 2001, 16). En este sentido, Tyler considera que esas
decisiones sobre las prcticas curriculares deben ser asumidas por los especialistas, quienes estn
a la vanguardia de la ciencia y el desarrollo de la tecnologa; lo que equivale ademas- que ni los
docentes son los que seleccionan, mucho menos formulan, los objetivos que guan la accin de la
educacin.
Escudero (1999), quien cita a Tyler (1973), enfatiza que a partir de 1990 se reconceptualiza
el significado de currculum mediante un fuerte movimiento de gestin cientfica de las
organizaciones empresariales, guiado por la eficacia, control y racionalidad cientfica, se aplica a
los centros escolares (36). Y esto se hace evidente en las prcticas educativas que desarrollan
los docente, concibiendo en la acto de ensear como una razn de ser de la normativa establecida
en el mundo empresarial, quien impone a la vez, el control para regular el desarrollo curricular.
Sinnimos de currculum como producto son: conductismo curricular, pedagoga por
objetivos, modelo tcnico, modelo gerencial curricular, modelo por competencias, ciencias
aplicadas y currculum academicista. Estos trminos, que si bien no ocupa un lugar importante en
este anlisis, enfatiza que la educacin se entiende como cuestiones instrumentales, dando mayor
valor a lo que determinan los expertos que a lo que sucede en el interior de las instituciones
9
Escuela se vio en la necesidad de profundizar en la vida social, de las nuevas avenencias que
surgieron especialmente despus de la segunda guerra mundial; una nueva dominacin que se
arraigaba en la mente de las personas como algo inevitable.
No es sorprendente entonces, que el enfoque de la investigacin de la Escuela de Frankfurt quitara
importancia al rea de la economa poltica para, en vez de esto, analizar cmo la subjetividad era
constituida y de qu manera las esferas de la cultura y de la vida cotidiana representaban un nuevo
terreno de dominacin. (Giroux 2004, 30)
crtico suele ser contrahegemnico, es decir, alternativo a las formas dominantes establecidas.
(Escudero, y otros 1999, 148)
El currculum al ser una prctica construida socialmente, plantea que la ideologa se disfraza
como organizacin de contenidos de enseanza; por lo que es necesario examinar histricamente
cmo los estudiantes de estratos bajos y medios han sido marginados por el desarrollo
hegemnico y por las instituciones que muestran un modo de vida, tal y como lo configura la clase
social alta. Y es que esta clase, no solo domina la economa, sino que, buscando perpetuarse,
introduce la ideologa en los programas de estudios, a fin de que la utopa5 sea la que oriente
los proyectos de vida de los marginados, y geste, desde ptica, una institucin educativa pblica,
que transforme las condiciones actuales de vida, que luche en contra de la exclusin y
discriminacin, asumiendo el conocimiento como comprensin del mundo de la vida, dando lugar
a propuestas asociados al currculum multicultural.
Los contenidos curriculares son objeto de anlisis y de crtica. Son modificados en su diseopor la realidad circundante, por la ciencia que cambia constantemente y por los contextos
ideolgicos, histricos y ticos en que tiene lugar los significados de las prcticas sociales
concretas. En otras palabras, los contenidos son sometidos a juicios de valor, a partir de su
conversin a estilos de vida e identidad personal y comunitaria, que permite a los estudiantes la
realizacin personal y la autenticidad. Por eso es importante determinar, dentro de los contenidos
curriculares, el rol del docente, dado que es l, quien orienta el proceso didctico y lo convierte
en una actividad poltica, cientfica y pedaggica, que revele que la sociedad est condicionada
ideolgicamente, y que necesita de una dimensin comunitaria de vida.
La teora crtica promulga por un humanismo cientfico, solidario y liberador, es decir, un
desarrollo humano, donde el hombre valga ms que los ejrcitos y los fusiles, los misiles y las
conquistas blicas, y donde, sin desperdiciar los adelantos cientficos y tecnolgicos, sepamos
instrumentalizar esa ciencia y esta tecnologa en pro del gozo y de la felicidad (Rodrguez 2000,
16). Este humanismo debe admitir como principio social la unin de hombres y mujeres en su
vida histrica, que adquiere sentido cuando la participacin se basa en la igualdad y la libertad
como signos evidentes de una autntica democracia.
Este posicionamiento, al que hace alusin Rodrguez, implica que los valores comunitarios
son, ante todo, los que se deben contribuir en cada prctica educativa; son los que le dan sentido
a la poltica de reconocimiento de la diferencia, de modo que el currculum sea desarrollado
diferenciadamente, acorde a la realidad de cada grupo cultural. La poblacin, a partir de un
determinado momento se siente saturada de bienes tcnicos, donde no encuentra sentido a la
vida; choque entre la esfera moral y tcnica, entre los valores de la comunicacin y lo puramente
economicista y consumista (2000, 13). La docencia debe concientizar al estudiante y provocar
5
Utopa del griego antiguo ou (no) y el griego topos (lugar)hace alusin a una idea o proyecto inalcanzable. Toms Moro
en su novela, Utopa habl de un mundo perfecto, ideal en el que la sociedad est regida por los pueblos.
12
Y es que estos criterios morales, polticos y culturales, hacen que el currculum crtico adquiera
una racionalidad basada en la accin comunicativa, la cual, ante todo, est orientada
obligadamente a generar un trabajo en comn, de modo que conduzca a la formacin polticapedaggica de estudiantes y docentes, con un compromiso ineludible frente a la ciencia, la
enseanza y a nuestras necesidades. Y es que, en esta formacin, la praxis sustituye la nocin
tradicional de diseo, dado que la participacin activa de la comunidad universitaria para el casodeber tener como referencia la conciencia colectiva como propsito fundamental de que el
cambio es posible.
Giroux en su obra Teora y Resistencia en Educacin (2004) plantea sobre la importancia de
la conciencia histrica6, en el pensamiento crtico otorgndole valor a modos de crtica que
iluminan la interaccin de lo social y lo personal as como la historia y la experiencias vividas (59).
Se trata de un pensamiento dialctico, que revela su definicin en torno a las relaciones entre
accin y reflexin, como elementos constitutivos de la problematizacin pedaggica, la cual no
solo es un proceso comunitario; tambin un escenario en el que cada individuo construye su
propia significacin en torno a las significaciones de los dems, codifica y decodifica el
conocimiento, el cual no solo ha sido cientfico, sino tambin cultural.
Esa postura no slo une el anlisis histrico con las nociones de crtica y emancipacin, tambin politiza
la nocin de conocimiento, o sea, insiste en ver al conocimiento crticamente, dentro de constelaciones
de ideas suprimidas (imgenes dialcticas) que sealan las formas en que las culturas y las luchas
histricamente reprimidas podran ser usadas para aclarar potencialidades radicales en el presente.
(Giroux 2004, 61)
La teora crtica del currculum considera que la conciencia histrica permite que las comunidades educativas se
conviertan en autorreflexivas, dinmicas y de autoprofesionalizacin. Dilthey consider la conciencia histrica como una
forma de hacer autoconciencia, asumiendo un rol de totalidad, frente a la desconexin de la vida. En otras palabras, la
conciencia crtica es un proceso de autodisciplina y autorreflexin orientada hacia la consecucin de que los estudiantes
sean personas histricas, a fin de comprender la vida, desde un ngulo crtico y problemtico.
13
afincaba la idea Stenhouse, poda ser garanta de desenmascarar la represin expresada en forma
de ddivas o sistemas filantrpicos (1988), y que, a fin de cuentas, es lo que mueve los intereses
de las mayoras empobrecidas. La prctica educativa est sustentada entonces- como posibilidad
para el encuentro con el discurso crtico, un dispositivo pedaggico que encuentra la explicacin
en la dinmica problemtica del contenido de la cultura, dado que se relaciona con los grupos
dominantes, y con la legitimidad que estos imponen a las relaciones de dominacin. Para descubrir
la ideologa dominante dentro de los programas de estudio, lenguajes pedaggicos (discurso del
docente, habla del alumno, libros de textos, entre otros), planificaciones didcticas, estrategias
de enseanza y evaluacin de los aprendizajes, entre otros, el docente debe comprender que la
cultura est vinculada al poder, al mismo tiempo que este poder se disfraza en lenguajes de
empoderamiento de las grandes corporaciones, que determinan en forma de normativa, la vida
que tendr que asumir la sociedad en todas sus dimensiones.
La Escuela de Frankfurt considera que en las universidades el conocimiento tcnico invade a
la mayora de las carreras. El estudiante aprende conocimientos basados en el aprender a hacer,
en el que la posibilidad del pensar se diluye lentamente hasta convertirse en un pensar de las
grandes empresas. El estudiante aprende el capital cognitivo que las mismas carreras ofrecen en
torno al mundo laboral; un estudiante con esta capacidad est en condiciones aptas para
insertarse a la produccin de diverso tipo; es ms, es el mundo laboral el que determina los tipos
de carreras existentes, as como tambin la dinmica de la enseanza que se desarrolla en el
mbito del aula. La Escuela de Frankfurt vincula esta situacin con el currculum oculto, ya que
las grandes corporaciones expanden la ideologa con los hiperdiscursos7 hasta insertarse en
los programas de estudio. Quien no aprende situaciones de aprendizaje suscitada de este proceso
tcnico, no logra triunfar en el mundo de la vida, ya que este mundo, es el que se presenta en
los medios de comunicacin, redes digitales, publicidad en Internet, consejos de los padres y
madres de familia, trabajos de los docentes, actitudes manifiestas de diversos tipos, entre otros.
Por eso, es importante prepararse en el saber pensar; lo que debe iniciar con los docentes
universitarios, quienes, a su vez, son los modelos ms representativos de que los estudiantes
tambin aprendan a pensar.
En la actualidad, muchas de las universidades latinoamericanas y de Estados Unidos, someten
los procesos de enseanza-aprendizaje al saber a hacer, en el que los mtodos de proyectos se
fundamentan en acciones empresariales y en la necesidad de fundar sus propias empresas. Tan
ilgico resulta, que en Centro Amrica y Amrica del Sur se vea como necesario esta posibilidad,
El hiperdiscurso es una lengua utilizada legtimamente para invadir los gustos de las personas a fin de lograr el
consumo. Los empresarios no solo determinan lo que las personas necesitan, sino que, adems, controlan las
acciones que puedan alterar su buen funcionamiento y el del Estado. El hiperdiscurso se disemina en forma de
publicidad, en el que la psicologa de la industria adquiere preponderancia cuando examina los gustos de los
clientes, as como tambin el producto que pueda ser vendido. En otras palabras, el hiperdiscurso se convierte en
el discurso del poder; discurso que las universidades no pueden alterar, porque son producto de esta legitimacin
ideolgica.
14
ya que se ve en una carrera universitaria como un medio para ascender econmicamente y triunfar
en el mundo laboral.
El hiperdiscurso es el discurso de la falsa libertad, un discurso que se constituye en el eje
vertebrador de la enseanza y de la creencia de que el rol docente debe aprender a dominar lo
que las empresas determinan. La enseanza es vista como dependencia, como una articulacin
de la velocidad en que se mueve las corporaciones, en cuanto a la tecnologa, los productos y lo
que marca la oferta y la demanda (publicidad). Los jefes de Estado ms los gobernantes de un
pas mueven la dinmica del empleo en torno a los productos que se consumen (sin necesidad de
que sean necesarios), procurando legislar en torno a los intereses propios y de mantener el
supervit. Y precisamente aqu es la clave para la comprensin, segn ellos, del desarrollo,
enfatizando en materias como mrquetin, publicidad, mercadotecnia, administracin de empresas,
estudio del derecho desde los cdigos, matemtica financiera, estadstica aplicada a la empresa,
fsica, qumica, entre otras. No se trata de aislar su importancia, lo que sucede que su tendencia
es desarrollar un conocimiento sin amor, un conocimiento que se asla del pensamiento que se
debe gestar en los estudiantes; un conocimiento que niega la importancia de las humanidades,
aun cuando la nacin est harta de problemas sociales; un conocimiento que niega la importancia
de la filosofa y desecha cmo enfrentar ideolgicamente los problemas que se manifiesta en
forma de poltica empresarial. O al menos, el amor, est incrustado en el consumo y en el
aislamiento; una poltica empresarial que se basa en:
La divisin, sujeto transformador-objeto transformado; sujeto-profesor que culturiza, a objetosalumnos, sujeto-partido que conciencia a objetos trabajadores o sujeto sociedad que explota el objetonaturaleza. La crisis actual de la modernidad desautoriza a esos sujetos y las verdades absolutas
(cultura, emancipacin, verdad, progreso) en que se basan. (Castells, y otros 1994, 65)
El docente tiene como misin generar cultura de las empresas dentro del aula; las
universidades ofrecen servicios educativos que legitiman esa poltica e incluso proporcionan ideas
sobre cmo acrecentar las capacidades de los estudiantes a travs de festivales orientados al
consumo. Amrica Latina, representa la mejor opcin para ideologizar, que, en trminos de
currculum oculto, se apodera de las prcticas sociales, que niegan la autora de los sujetos que
aprenden. Es ms, la violencia social es producto de esta diseminacin, de unos modos operandi
que se ha convertido en cultura de aoranza, de unos sujetos que asumen valores de dependencia
(Las pandillas de Estados Unidos) y tratan de conquistar el mundo a travs del miedo. La ideologa
tambin genera prcticas difusas, que tienen que ver con la crisis socioeconmica, cultural y de
esperanza en la vida.
La falta de una formacin del profesorado, segn Flecha (1994) es una causa del descenso
del nivel de los estudiantes y una perspectiva de dependencia del saber tcnico. La nueva derecha
cultural norteamericana se ha destacado en la vanguardia de esta corriente. Autores como Bloom
(1987) y Hirsch (1987) han visto la solucin a la actual crisis educativa en que las escuelas menos
15
de la libertad y ms de transmitir la verdad (Castells, y otros 1994, 66). Bajo esta concepcin,
la paz es vista como desigualdad de derechos de los marginados y las mujeres, en el que el
silencio representa la garanta para una sociedad ms prspera y justa. La convivencia social y la
concepcin de paz implica asumir una determinada democracia tal y como lo imaginan las grandes
corporaciones. El mensaje de paz no puede venir de una persona pobre, sino de los ricos, de los
que asumen el poder e incrementan sus excedentes econmicos mensual y anualmente, de los
que evaden los impuestos, de los que planifican la economa, la educacin y la salud; de los
modernos, de aquellos que piensan que el manejo de la tecnologa (robtica, redes sociales,
computadoras y otros) implica intelectualidad y desarrollo cognitivo de alta dimensin; de los que
controlan la mente de los sujetos a travs de los medios de comunicacin y los mensajes
subliminales que generan cultura de consumo.
Las tesis de la Escuela de Frankfurt respecto al currculum oculto se encuentran en saber
pensar dialcticamente, en la unificacin de la actividad docente con el contexto social. Se trata
de comprender el rol del enseante en la va dialctica, que supone el reconocimiento de las
situaciones sociales desde el marco objetivo y subjetivo, en el que el entendimiento debe tener
estas caractersticas primordiales. Se examinan los objetivos de aprendizaje desde las conductas
observacionales y las subjetividades que se manifiestan en los espacios ulicos. Se debe ensear
ciencia, pero tambin hay que situarla dentro de los contextos sociales y culturales, dado que el
estudiante debe aprender la epistemologa derivada de la disciplina y, a la vez, pensar en su
cotidianidad y realidad circundante, a fin de que el estudiante sea un agente de cambio.
El enfoque dialctico de la racionalidad reconoce la contribucin parcial y unilateral de las posturas
objetivista y subjetivista, rechazando el determinismo y el cientificismo de la primera lo mismo
que el relativismo y la teora racionalista de la accin que caracterizan a la segunda. No obstante, el
enfoque dialctico admite que existen en lo social limitaciones objetivas al pensamiento y la accin,
por cuanto no pueden ser controladas por individuos o por grupos particulares. Asimismo, admite que
hay limitaciones subjetivas que podran ser cambiadas por las personas, slo con que supieran
ms o entendieran el mundo, pero que limitan efectivamente sus posibilidades para cambiar el
pensamiento y la accin. (Kemmis y Carr 1988, 195)
Esta relacin implica un enfoque dialctico entre teora y prctica, entre individuo y sociedad,
sociedad y cultura, lo singular y lo plural, lo concreto y lo abstracto, lo inductivo y lo deductivo, lo
analtico y lo sinttico, entre otros; en el que su fundamento se encuentra en la contradiccin8,
entendida como la unidad de opuesto, donde el docente deber asumir la condicin de
investigador activo y estratgico.
La unidad de opuestos es la categora con la que se explica la contradiccin. Aunque es una palabra latina
(contradicto)que significa estar en contra, o de enfrentamiento. Contradiccin desde el puno de vista del
enfoque dialectico es la unidad de opuesto, dado que es importante aprender a pensar y actuar de manera
ideolgica y de transformacin.
16
Estas consideraciones sirven de pauta para comprender la racionalidad crtica del currculum,
pues su funcin dentro del mundo de la vida en el aula, sea convertido en la pedagoga en
oposicin, en los ciclos de que la investigacin es el fundamento de la prctica eductiva. Es
probable que cueste mucho la asuncin de una creencia que se puede investigar de distinta
manera; pero la pedagoga que se piensa gestar en las aulas universitarias a partir de la escuela
crtica, implica que los estudiantes tambin debern ser ciudadanos activos y crticos (Giroux 1988,
379), asumiendo autonoma en su trabajo y reflexin crtica sobre s mismos.
Ensearemos mejor nicamente si, con inteligencia, aprenderemos de la experiencia de fracaso, tanto
en nuestra comprensin del conocimiento que ofrecemos como en nuestro saber de cmo ofrecerlo.
Esa es la razn ara la investigacin como base para la enseanza. (Stenhouse 1998, 193)
Referencias
Castells, Manuel, Ramn Flecha, Paulo Freire, Henry Giroux, Donaldo Macedo, y Paulo Willis. Nuevas
perspectiva crticas en educacin. En Las nuevas desigualdades educativas, de Ramn Fecha,
57-81. Barcelona: Paids Educador, 1994.
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Escudero, Juan, y otros. Diseo, desarrollo e innovacin del currculum. Madrid: SNTESIS, S. A, 1999.
Giroux, Henry. Los profesores como intelectuales. Hacia una pedagoga crtica del aprendizaje. Barcelona:
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