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Currículum para La Emancipación

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Currculum para la emancipacin.

Categoras de diseo y
racionalidad crtica
Por: Juan Carlos Escobar Baos

Resumen
Emancipacin es un trmino alojado en el seno de la esclavitud, para provocar rebelin y desarrollar la identidad. Del
latn emancipato, emancipatnis, y este, a su vez, emancipo, emancipare, la palabra hace alusin a declarar libre al
hijo de la patria potestad, enfatizar en que este hijo ya no tiene potestad y, por tanto, ya no da cuenta a su seor de
sus actos. Currculum para la emancipacin se ancla en el triunfo de la resistencia, en la generacin de la voluntad, en
extender el conocimiento hacia las grandes mayoras y abordar los contenidos de enseanza-aprendizaje a partir del
contexto social, donde se producen la realidad de las personas.
Pero la pregunta es cmo concebir un currculum para la emancipacin? Desde esta ptica, vale la pena hacer un
anlisis sobre sus categoras y principios fundamentales, a fin de diferenciarlos de otros conceptos que pueden confundir
su desarrollo gnoseolgico y epistemolgico. Si bien la tesis fundamental es la de plantear un modelo crtico sobre
currculum, la nica va para lograrlo es el de colocar la emancipacin bajo constructos tericos amparados en los
principios de autodeterminacin, codeterminacin y solidaridad; constructos que son vitales para la capacidad de ver
el funcionamiento concreto del currculum, para ayudar a otros (Grundy 1998, 217).
Palabras clave: emancipacin, independencia, currculum, programas de estudio, resistencia, pedagoga crtica.

El currculum: de lo tcnico a lo crtico


La dinmica del currculum no slo se refiere como una manera bsica de entender los
programas de estudios; los cambios educativos estn adheridos a procesos sociales, no a diseos
o planificaciones estructuradas. La base de asumir las transformaciones educativas se encuentra
en el conocimiento y en la voluntad, que son dos trminos que afincan la idea de que el verdadero
aprendizaje significativo se encuentra en la independencia de la persona o en su autonoma.
Este desciframiento es vital para enfatizar en ciertas ideas que me detendr en su anlisis, a
fin de clarificar los diversos significados de currculum emancipador y sus principios fundamentales
y colocar en primera instancia el origen y desarrollo del ratio y, posteriormente, el Studiorum. Dos
trminos clave para situar al currculum dentro de la prctica curricular. El ratio, que fue creado
por los Jesuitas (Compaa de Jess) significa clculo o diseo de algo, que posteriormente ser
desarrollado por un proceso. El ratio para los Jesuitas- era el programa de estudio, un proceso
tcnico que determinaba las lecciones, los contenidos y los mtodos que tenan que ser
planificados. El ratio represent el fundamento doctrinal de la enseanza; un fundamento sobre
el cual se construa la filosofa y principios fundamentales que daban vida al sistema pedaggico
y a la formacin que se pretenda. En otras palabras, ratio Studiorum es el plan de estudios, que
fundamentalmente se gesta sobre una filosofa firme, cuyo devenir se encuentra en la asimilacin
de conocimientos, en la comprensin del mundo de la vida y en el desarrollo de la identidad
jesuita.
1

Desde este ngulo, vale la pena situar que se trata de un proceso mental que se adhiere a lo
que Habermas (1972, citado por Grundy 1998, 27) denomin como inters tcnico. Segn l, los
procesos tcnicos se basan en la necesidad de sobrevivir y reproducirse que tiene la especie,
tanto ella misma como aquellos aspectos de la sociedad humana que se consideran de mayor
importancia. El ratio Studiorum es proceso tcnico; implica un teorizar sobre el hacer, una
connotacin derivada del producto hacia el proceso. Dicho de otra forma, el proceso didctico
est sujeto a la programacin educativa, a lo que constituye el currculum oficial. La estructura
curricular queda expresada mediante el siguiente planteamiento: el inters tcnico constituye un
inters fundamental por el control del ambiente mediante la accin de acuerdo con reglas basadas
en leyes con fundamento emprico (Grundy 1998, 29). Se evidencia, desde esta posicin, que el
proceso tcnico engloba objetivos, mtodos y evaluacin, en el que las reglas se convierten en
prescripciones, de modo que al final del proceso de enseanza, el producto se ajustar al eidos
(es decir, las intenciones o ideas) expresados en los objetivos originales (Grundy 1998, 30).
Ese eidos significa la idea expresada en objetivos tcnicos que enmarcan la formacin
profesional, que, a fin de cuentas, es la base que sustenta la enseanza universitaria casi en toda
Amrica Latina. Hacia el siglo XVII y con las revoluciones industriales y sociales, el currculum
implicaba colecciones de tratados principales que se enseaban en una facultad de las
universidades y que recogan los adelantos cientficos de la poca (Pez, y otros 2013). Esos
tratados eran los eidos, dado que englobaba contenidos, objetivos y diversos temarios que se
haban recabado a lo largo de la experiencia docente y que serva de base para la formacin de
nuevos profesionales.
Aqu hay dos cosas que se deben tomar en cuenta. En primer lugar, hay que sealar que los
objetivos son vinculados a las habilidades tcnicas que el estudiante universitario debe dominar y
desarrollar, si es que quiere ser tomado en cuenta en el mundo laboral. En segundo lugar, se
debe situar el control como clave para examinar y verificar si las habilidades tcnicas han sido
desarrolladas. En este sentido, el currculum adquiere la forma de cursos de estudios o estructura
de conocimientos organizada de modo que d respuesta efectiva a las necesidades de los procesos
industriales (Tyler 1949, citado en Pez, y otros 2013, 4).
Kemmis (1998) seala que el inters tcnico centra los esfuerzos de los planificadores sobre
las cuestiones tcnicas y, en ese sentido, oscurece los principios educativos que guan la prctica
del currculum desde los mismos educadores, dejando su desarrollo al trabajo cientfico de los
tericos fuera de las escuelas (62). Esto significa que el currculum tcnico como curso de estudio
hace una distincin entre teora (que es el producto), acuada por los cientficos, y prctica (que
es el proceso) desarrollada por los docentes. La tendencia de esta forma de concebirlo es
condicionar la educacin al eidos de los expertos acadmicos (psiclogos, socilogos, filsofos) y
a su manera de entender epistemolgicamente la ciencia, la tcnica y la cultura.

El pensamiento curricular desde esta perspectiva tiene dos grandes derivaciones laterales:
una concepcin cientfica modelada por los tericos y la tendencia a condicionar el trabajo de los
docentes a lo que enmarca esa accin consultora. Bsicamente, currculum tcnico es una visin
de seleccin de conocimientos por parte de los tericos, los cuales prescriben lo que se debe
modelar dentro de la prctica educativa. Y esa prescripcin ocurre dentro de los programas de
estudios, que sirve como un marco orientativo de las prcticas didcticas.
Stenhouse (1998) manifest que el currculum tcnico est basado en las polticas
administrativas, las cuales en su prctica, renuncian a hacer del currculum una palanca de
transformacin de la enseanza y de formacin del profesorado (13). Este planteamiento se
explica de la siguiente manera:
Cuando en el propio modelo de currculum y en cada uno de los pasos de su desarrollo, desde las
macrodecisiones poltico administrativas hasta las tcnico-docentes, no se contempla la iniciativa y
participacin del profesor, es ms difcil que el currculum permita despus al profesorado su propia
iniciativa. (Stenhouse 1998, 13)

La dependencia terica de los docentes universitarios evidencia un problema curricular de


primer orden: dificultades para el desarrollo de hbitos de lectura, tendencia a la aplicacin de la
tcnica del dictado, poca innovacin en la aplicacin de las nuevas tecnologas, problemas de
comprensin lectora, educar con compasin, problemas de creatividad docente, discurso
coherente, entre otros. Cuando la dependencia terica se encuentra en docentes poco dados para
hacer las cosas distintas, entonces se apodera el deletreo y la reproduccin de teoras creadas
y experimentadas en otros contextos educativos. Y es que esa dependencia implica que los
cientficos y tecnlogos definen el porvenir del currculum oficial, en el que se modela conductas,
tal y como estn especificadas en los programas de estudios.
Tambin el control tcnico de la enseanza queda adscrito en manos del cientfico y del que
produce los materiales didcticos y curriculares. En ese sentido, se resta las oportunidades de
ensayar tcnicas y estrategias propias del profesorado. El resultado, como afirma Apple1, es un
progresivo taylorismo donde los actores educativos dominan cada vez menos sus funciones
(Stenhouse 1998, 14).
En contraposicin de esta forma de concebir el currculum, Stenhouse propone que:
Un currculum (), si es valioso, a travs de materiales y criterios para llevar a cabo la enseanza,
expresa toda una visin de los que el conocimiento y una concepcin del proceso de la educacin.
Proporciona un marco donde el profesor puede desarrollar nuevas habilidades y relacionndolas con
las concepciones del conocimiento y del aprendizaje. (1998, 14)

M. Apple, Curricular form and the logic of technical control. En M. Apple (ed), Ideology and practice in schooling.
Philadelphia. Temple University Press, 1983, pg. 148.
1

El referente bsico de Stenhouse es el de una visin educativa del conocimiento, en el que


se establece la meditacin como base para el perfeccionamiento del docente en su prctica. Se
trata de comprender que la estructura del conocimiento no est centrada en los contenidos
disciplinares, sino, en la adecuacin de estos a la realidad que se estudia, permitiendo que el
docente incorpore experiencias de aprendizaje, de modo que el alumno interprete su realidad y
desarrolle, al mismo tiempo, su compasin por la gente. Y aqu se encuentra los verdaderos
vnculos entre instruccin y educacin, ya que la perspectiva de conocimiento invita a tener una
opcin por los desamparados, que, a fin de cuentas, no se le puede negar el conocimiento
profundo.
Esta implicacin por los desamparados es, a la vez, un compromiso por cambiar la realidad,
un saber y pensar para la creacin de una sociedad ms humana, justa y solidaria; no se admite
un conocimiento desconectado de la dimensin estructural; para los Jesuitas, los especialistas
deben liberarse de la dependencia de lo tcnico y establecer una academia con rigurosidad y
desarrollo social. Gonzlez (2014) expresaba que la Compaa de Jess posea un saber amplio y
fundamentado para comprender que la realidad est constituida por procesos y dinamismos
estructurales, no por hechos aislados y desconectados (15).
Los Jesuitas asesinados no han sido superados, ni en su capacidad analtica ni en su contribucin a la
comprensin de la realidad salvadorea, por los especialistas que, aunque sepan ms que nadie de su
campo de estudio () han perdido, por el endiosamiento de su especialidad y, no pocas veces, de s
mismos, la visin de conjunto, la mirada de los procesos de ms largo plazo. (Gonzlez 2014, 15-16)

El sentido del ratio Studiorum, tal y como se indica en sus orgenes (Compaa de Jess), ha
cambiado, dado que para 1989 (en el caso de El Salvador) la visin de educacin buscaba la
solidaridad, el bien comn y la justicia, como valores bsicos para encontrar la verdad, la cual
deba ser buscada y proclamada por todos los medios posibles (Gonzlez 2014, 17).
Y es precisamente en la justicia, donde adquiere valor el currculum crtico, que desde una
nocin gnoseolgica proclama la verdad de la pobreza y marginacin, de la violencia, de la
corrupcin y la impunidad. Lo crtico, que del latn critcus y este a su vez, del griego antiguo
, derivado de (krits, juez), consiste en un proceso de emisin de juicios sobre una
determinada realidad, a partir de constructos informados.
Lo visin crtica del currculum consiste en una actividad participativa, democrtica y
comunitaria, a fin de que los programas de estudios surjan de los actos docentes, como
productores curriculares, adoptando una pedagoga crtica para promulgar la transformacin.
Kemmis asegura que:
Para poner en prctica una visin crtica del currculum () es preciso estar al tanto de que somos, en
cuanto tericos y en cuanto a profesores, productos y productores de ideologa y, esto a su vez, exige
que nos organicemos con otros para hacer nuestras propias crticas, histrica y polticamente sensibles,

de nuestros valores e ideas educativos sobre el currculum, sobre nuestras propias prcticas educativas,
y sobre nuestras situaciones de trabajo. (1998, 136)

Grundy seala que el currculum crtico slo puede desarrollarse en prcticas educativas
emancipatorias; prcticas asociadas a construcciones tericas y autnticas en cuanto a ambientes
de aprendizaje igualmente emancipadores (1998). De aqu surge, entonces, el dilema sobre cmo
considerar tericamente el currculum emancipador y todas las cuestiones que enmarca los
procesos de construccin del conocimiento. Se sabe que el diseo orienta a la prctica y, por
tanto, los procesos de aprendizaje quedan supeditados a las especificaciones prescriptivas, o sea,
a lo sealado por los objetivos operativos. Esto es, en realidad, la connotacin bsica de
currculum, que, sin dejarnos llevar por ello, tiene sus implicaciones en la direccin del docente
sobre los procesos de construccin de conocimientos de los alumnos.
Para que el currculum crtico pueda desarrollarse plenamente, hay que comprender su
dinmica social, no sujeta a la prescripcin, o sea, configurada en torno a la realidad que se
pretende transformar, ya que el encuentro de las prcticas educativas gira sobre la base de la
resistencia, trmino utilizado por Giroux (1998) para replantear que la comunidad educativa debe
promulgar colectivamente la solidaridad y la preocupacin mutua.

Ideas bsicas sobre el currculum como producto


Las ideas planteadas hasta aqu solo representan datos asociados a la transicin de un tipo
de currculum hacia otro. No cabe duda, que el ratio studiorium es un programa de estudios
acadmicos orientados hacia una determinada formacin y que, desde este ngulo, surge la visin
de comportamiento de aprendizaje, con lo cual se evidencia el significado del currculum como
producto.
La lgica de desarrollo del ratio studiorium no fue posible concebirla como proceso didctico
hasta cuando la Compaa de Jess afinc la idea de inculturacin2, replanteando el sentido
de abordar los problemas sociales, a partir del Evangelio de Jess. Slo entendiendo esa realidad
concreta, se puede evangelizar, se puede llevar la palabra a la gente, de forma que la aplique y,
sobre todo, que demuestre sus actitudes ante ellos mismos y ante su prjimo. El programa de
estudio, desde esta experiencia, implicaba una preparacin previa, una consulta cientfica y
pastoral sobre la formacin del futuro ciudadano, una bsqueda de fuentes bibliogrficas y, sobre
todo, una diagnosis de la realidad, entre otros, para encontrar los contenidos de enseanzaaprendizaje que hagan posible el desarrollo del currculum.

El trmino inculturacion fue utilizado por la Compaa de Jess como un proceso nico para armonizar el cristianismo
con las culturas de los pueblos. Juan Pablo II vincul el trabajo misionero en frica como una forma de inculturacin, en
el que dicho proceso es un camino lento que acompaa toda la vida misionera y requiere la aportacin de los diversos
colaboradores de la misin de gentes, la de las comunidades cristianas a medida que se desarrollan, la de los Pastores
que tienen la responsabilidad de discernir y fomentar su actuacin. (Juan Pablo II, 1990, 263).

Para 1633, en la Universidad de Glasgow (Escocia), se utiliz por vez primera el trmino
currculum; y fue aqu donde adquiri preponderancia la formacin de pastores evanglicos, a
partir de la nocin de la carrera en crculo como una concrecin racional, terica y teolgica.
Y es que esa formacin deba ser diseada conforme a unos principios hermenuticos3, que
vinculaban la teologa con la vida de los seres humanos en unos contextos especficos. Cabe
sealar, desde este ngulo, que el currculum fue visto como planificacin didctica, ligada a la
dinmica de la vida y a la forma en que los seres humanos interpretaban su realidad; lo que
permiti que los pedagogos y didcticos repensaran la orientacin hermenutica mediante el
principio de sistematizacin.
La pista circular de carros sustituy el ratio studiorium de los Jesuitas, dado que la
formacin no deba ser concebida como longitudinal, sino transversal; por eso, la estructura del
currculum implica progreso en una carrera de atletismo; por lo que la prdica tena que basarse
en lo cclico, a fin de comprender la palabra de Dios cada vez ms profunda.
Los predicadores en formacin quedan mejor articulados con la Reforma Calvinista, que inclua
transformacin de la enseanza en toda Escocia, incluyendo historia y filosofa para explicar el orden
de las cosas y la revisin constante de esa formacin a la luz de las circunstancias sociales, econmicas,
polticas e histricas. (Escobar 2003, 13)

La prctica educativa solamente poda adquirir legitimidad si se adhera a la planificacin de


la pista circular, a la normativa que surga del pensamiento de los planificadores, de los pedagogos,
quienes realizaban consultas con los dueos de la universidad, a fin de no alejarse de los
propsitos o pretensiones, muchas de las cuales, se orientaban a conformar una oposicin de la
formacin catlica, en especial la de la Compaa de Jess.
Pero, aun as, y con el advenimiento de la sociedad industrial (Siglo XVII y XVIII) la
comprensin de currculum no cambi en sustancia, dado que la programacin educativa se
converta en el componente principal para la formacin. Es ms, cuando se examinan los mtodos
de enseanza, Lungrend (1983) los analiza a partir de los textos4 para la reproduccin social;
textos que, segn ella, estn centrados en la divisin social del trabajo, en el que docentes y
estudiantes representen ideas, tal y como han sido pensadas en los programas de estudio.
El problema de la reproduccin social est representado en un tipo de sociedad que se
organiza segn conocimientos peculiares, que le garantiza su estabilidad econmica. Una va para

El significado de hermenutica evoca a la interpretacin Bblica, en el que los contextos sociales y la vida de los feligreses
constituyen elementos fundamentales de interpretacin a la luz del Evangelio. Hermenutica que del griego
es interpretacin, implica un anlisis textual y que busca establecer el significado original de un texto para su
autor o para la comunidad en que se produjo (Reese 1980, 221). La formacin de pastores evanglicos demuestra la
configuracin de la hermenutica como una manera de predicar la palabra de Dios en torno a la comprensin humana;
comprensin que era necesaria aprender en los estudios de Teologa, Filosofa y Literatura.
4 Lungrend utiliza el trmino texto en sentido amplio, incluyendo materiales escritos, instrucciones y consejos de los
docentes, programas de estudios, guas de laboratorios o de experimentacin, normativa institucional, obras cientficas,
etc. (citado por Kemmis, 1998).

asegurarla (la estabilidad econmica) es la especializacin, la cual vena a dinamizar la formacin


de profesionales, mediante el saber tcnico y el perfeccionamiento de habilidades que garanticen
la especializacin. Esto es, una forma de instruccin de valor tcnico, que no fue analizada en su
poca, ni por la Compaa de Jess ni por la Universidad de Glasgow, dado su nivel de aprehensin
curricular en el medioevo. El valor tcnico del currculum coloc en primer plano los objetivos de
aprendizaje, que, planteados de forma anticipada, deban ser desarrollados en la prctica
educativa y evaluados como actividades de verificacin o comprobacin de conocimientos tcnicos.
Tyler (citado por Kemmis, 1998) indic que el currculum debe modificar los patrones de
conducta de las personas (60), en el que los objetivos constituyen la idea tcnica que deba ser
materializada en las prcticas educativas. Para l, la elaboracin de objetivos se categorizan en
tres dominios (cognoscitivo, afectivo y psicomotor), sobre los cuales giran las estrategias de
aprendizaje y principios de evaluacin que garanticen el desarrollo de la persona (Escobar 2003,
15).
Para 1949, Tyler plante que los problemas curriculares deban buscarse en el planeamiento
y programacin escolar, en el que los objetivos constituan los cimientos para la formacin de
estudiantes. Objetivos, que basados en la psicologa conductista, determinaban lo que sucedera
en el proceso de enseanza-aprendizaje, tanto a nivel de actos cognoscitivos como psicomotrices.
Desde esta ptica, la nocin de currculum aparece ligado al mbito de la administracin educativa
en el que la vida en las aulas debe seguir las normas establecidas por las empresas. Por lo tanto,
hay que educar segn unos patrones definidos con antelacin y estructurados con base a los
conceptos de eficacia y eficiencia, tal y como ocurre en los sistemas de los centros de produccin.
Hilgard (1964) en Theories of learning, indic que los objetivos de aprendizaje apuntan hacia
las ciencias aplicadas, en el que prevalece la especializacin del trabajo, otorgando especial
atencin a la autoridad de la tecnologa de la enseanza y a la evaluacin como verificacin de
objetivos. En virtud de ello, Tyler (citado por Kemmis 1998, 62-63) caracteriz el mtodo de hacer
currculum como tecnolgico, en el que el diseo deba dominar el desarrollo de la prctica
educativa. Cualquier aprendizaje que se site bajo la formulacin de objetivos, deba ser
considerado como la aplicacin pura del modelo acadmico y conductista, ya que el papel de los
tecnlogos se convertan en profesores tcnicos operarios- que a su vez, dependan de los
tecnlogos (Kemmis 1998, 62).
Si el diseo es hegemnico sobre el desarrollo, no cabe duda, entonces, que el producto del
currculum como documentos tangibles, guas de laboratorio, libros de textos, obras cientficas,
entre otros, determinan el contenido de enseanza que ser desarrollado en el proceso didctico.
El currculum, desde esta concepcin, apela a una forma de reglas tcnicas, que orientan el
desarrollo de la actividad docente y regulan las experiencias de aprendizaje que se suscitan dentro
de la configuracin de los objetivos operativos. En este sentido, el diseo del currculum implica
comprender la dinmica de los siguientes componentes: El anlisis de propsitos y objetivos, la
7

seleccin y organizacin del contenido y experiencias de aprendizaje, y la evaluacin de los


alumnos y del currculum (Escudero, y otros 1999, 37).
Tyler fundament el currculum de Estados Unidos a partir de las siguientes preguntas: a)
Qu aprendizaje se quiere que los alumnos logren? b) Mediante qu situaciones de aprendizaje
podr lograrse dichos aprendizajes? c) Qu recursos se utilizar para ello? d) Cmo evaluar si
efectivamente los alumnos han aprendido dichos objetivos? (Escudero, y otros 1999, 56).
En torno a los aprendizajes, Tyler busc comprender los dominios fundamentales que
garantizaran la eficacia y eficiencia, dado que, segn l, los objetivos no slo significaban lo que
se pretendan lograr, sino que, al mismo tiempo, orientaran la planificacin de las experiencias
de aprendizaje. Las preguntas que Tyler planteaba especificaron la normativa que cada docente
deba desarrollar dentro del aula y, que, una vez llevada a cabo, tal y como se sealaba en los
programas de estudio, se tendra que evaluar los objetivos de aprendizaje. El diseo instruccional
entonces- queda estructurado as:

D IAGRAMA 1. D ISEO

INSTRUCCIONAL SEGN

R ALPH TYLER (A UTORA

PROPIA )

Los objetivos operativos dan pauta para la seleccin de actividades, las cuales debern
organizarse de acuerdo a la lgica del principio de sistematizacin. Dicha organizacin se realiza
de manera jerrquica a fin de posibilitar el desarrollo del aprendizaje y garantizar la formacin del
estudiante, la cual slo es posible suscitarla cuando se cumple con las caractersticas de los
objetivos operativos: conducta observable, contenidos de enseanza, condiciones de ejecucin y
criterios de aceptacin. Las actividades evidenciarn los recursos y medios que se utilizarn para
su desarrollo. Y precisamente, en esta dinmica, el diseo instruccional de Tyler (1954) adquiere
el criterio normativo, porque somete el proceso de enseanza-aprendizaje al cumplimiento de los
objetivos operativos. Toda esta estructuracin se basa en el diseo de una evaluacin, capaz de
revelar la medida en que los objetivos han sido logrados. Esto significa, que la evaluacin es, ante
todo, proceso para verificar solo aquellos conocimientos que se encuentran dentro de la
formulacin de objetivos.
Para Posner (2001), currculum tcnico o como producto es el conjunto de estrategias de
enseanza que los profesores planean utilizar (5); lo que se deriva indudablemente la concepcin
8

de currculum como resultados de aprendizaje (objetivos operativos) y medios para ensear. En


otras palabras, se trata de los planes de enseanza, que Tyler los plante para organizar el
desarrollo de habilidades y destrezas, prestando atencin a la secuencia de experiencias dentro
de cada campo (por ejemplo, matemticas) y a la integracin de conocimientos entre campos
(Posner 2001, 15). Este punto clave del currculum tcnico invita a los docentes a orientar su
trabajo de enseantes a partir de los objetivos educacionales establecidos en los programas de
estudio y que garantiza, a la vez, la determinacin y organizacin de las experiencias y las
disposiciones para la evaluacin. A esto, Tyler le denomin planificacin curricular, ya que
implica estructuracin del diseo de la educacin, bajo la concepcin de la normativa
procedimental de las secuencias de enseanza-aprendizaje y su congruencia con los cambios de
conducta pretendidos.
Desde esta ptica, la planificacin curricular es:
Una empresa en la cual el planificador en forma objetiva y, de ser posible cientfica, desarrolla los
medios necesarios para producir los resultados de aprendizaje deseados. No hay lugar para sesgos y
valores personales al seleccionar los medios; la efectividad y la eficiencia en lograr los fines son
primordiales. Este proceso de razonamiento medios-fines funciona como la lgica en la cual se basa
todo proceso racional de toma de decisiones. Las experiencias educacionales son justificadas por los
objetivos que ellas sirven. (Posner 2001, 16)

Lo tcnico se fundamenta en el supuesto de que las decisiones son tcnicas, con elementos
bsicos sobre cmo hacer las cosas; dicho de otra forma, las decisiones son consideradas tcnicas
si aparecen libres de valores, apropiadas para que un experto con conocimiento especializado las
adopte de manera objetiva (Posner 2001, 16). En este sentido, Tyler considera que esas
decisiones sobre las prcticas curriculares deben ser asumidas por los especialistas, quienes estn
a la vanguardia de la ciencia y el desarrollo de la tecnologa; lo que equivale ademas- que ni los
docentes son los que seleccionan, mucho menos formulan, los objetivos que guan la accin de la
educacin.
Escudero (1999), quien cita a Tyler (1973), enfatiza que a partir de 1990 se reconceptualiza
el significado de currculum mediante un fuerte movimiento de gestin cientfica de las
organizaciones empresariales, guiado por la eficacia, control y racionalidad cientfica, se aplica a
los centros escolares (36). Y esto se hace evidente en las prcticas educativas que desarrollan
los docente, concibiendo en la acto de ensear como una razn de ser de la normativa establecida
en el mundo empresarial, quien impone a la vez, el control para regular el desarrollo curricular.
Sinnimos de currculum como producto son: conductismo curricular, pedagoga por
objetivos, modelo tcnico, modelo gerencial curricular, modelo por competencias, ciencias
aplicadas y currculum academicista. Estos trminos, que si bien no ocupa un lugar importante en
este anlisis, enfatiza que la educacin se entiende como cuestiones instrumentales, dando mayor
valor a lo que determinan los expertos que a lo que sucede en el interior de las instituciones
9

educativas. Las universidades, bsicamente, se sujetan a esta manera de concebir la enseanza,


ya que el campo de la actualizacin del currculum se vincula a la capacitacin docente, los crditos
que pueden lllegar a lograr (mediante carreras postgraduadas) y la recoleccin de libros, textos y
computadoras que puedan viabilizar el desarrollo del proceso didctico.

Origen de la escuela crtica


La conceptualizacin de currculum crtico slo es posible visualizarlo si se pondera el origen
de la escuela emancipatoria, la cual ha introducido al mbito de la educacin trminos y prcticas
filosficas, en el que la connotacin neomarxista y del psicoanlisis adquieren nuevos significados
en la construccin de marcos tericos acordes a la dinmica de los sistemas educativos, en
especial, la de la educacin superior.
La escuela crtica naci en Frankfurt, Alemania, en febrero de 1923 (Giroux 2004, 29), y
con ello se apertura al anlisis de la infraestructura econmica de la sociedad, en especial, la
superestructura cultural (Giroux 2004). La escuela de Frankfurt, se caracteriz por ser sociopoltica,
dado que la educacin no slo es tcnica; es ms, los verdaderos cambios hay que encontrarlos
cuando en los contextos sociales e histricos, donde la filosofa adquiere preponderancia, as como
la revisin epistemolgica de las ciencias sociales.
El Instituto para la Investigacin Social (Escuela Crtica) inicia el trabajo socio-filosfico bajo
la direccin de Max Horkheimer en 1930. Bajo esta direccin se integraron al instituto la mayora
de los miembros que posteriormente se hicieron famosos. Entre ellos encontramos a Erich Fromm,
Herbert Marcuse y Theodor Adorno (Giroux 2004, 30). La Escuela Crtica en clara oposicin a la
ciencia positivista propuso un pensamiento crtico sobre la relacin entre ciencia e ideologa,
especificando que la dinmica de la investigacin educativa ocurre siguen unos patrones definidos,
de tal manera que la ciencia legitima la accin de la objetividad en contraste con las hiptesis.
Para la teora crtica, la ciencia se vea en peligro de considerar las formas de la vida social
como algo ya dado, para reflexionar nicamente sobre cuestiones tcnicas (Kemmis y Carr 1988,
145). En torno a ello, se consider que la educacin tambin estaba imbuida de patrones
normativos que determinaban la existencia de la relacin entre el que ensea y el que aprende;
al igual que la investigacin cientfica, no se le da la autonoma necesaria al docente para generar
el cambio educativo y, por tanto, el desarrollo del aprendizaje se fundamenta en esas normativas
definidas en otro escenario.
Como reaccin al surgimiento del fascismo y del nazismo, por un lado, y al fracaso del
marxismo ortodoxo, por el otro, la Escuela de Frankfurt tuvo que reformar y repensar el significado
de la dominacin y de la emancipacin (Giroux 2004, 29). Pero esto, fue clave para vincular la
ciencia social con los procesos de desarrollo y transformacin que se visualizaban en esta poca;
con el stalinismo y con el poder del capitalismo para reconstruir ideolgicamente a la sociedad, la
10

Escuela se vio en la necesidad de profundizar en la vida social, de las nuevas avenencias que
surgieron especialmente despus de la segunda guerra mundial; una nueva dominacin que se
arraigaba en la mente de las personas como algo inevitable.
No es sorprendente entonces, que el enfoque de la investigacin de la Escuela de Frankfurt quitara
importancia al rea de la economa poltica para, en vez de esto, analizar cmo la subjetividad era
constituida y de qu manera las esferas de la cultura y de la vida cotidiana representaban un nuevo
terreno de dominacin. (Giroux 2004, 30)

Para 1970, el significado de teora pas a formar parte de la concepcin dominante de la


investigacin y, superpuso que la ciencia deba estar basada en un conjunto de generalizaciones
que, a manera de leyes, podan servir para realizar generalizaciones y, siempre que fuese posible
manipular variables adecuadas, suscitar un estado de cosas que se considere oportuno (Kemmis
y Carr 1988, 145). Y es que ese poder del capitalismo ms su adelanto cientfico, absorbi a la
educacin hacia su configuracin tcnica; determin la investigacin como una plataforma de la
rigurosidad del conocimiento objetivo en el estudio de la vida humana y social (Kemmis y Carr
1988), de modo que los especialistas se convirtieran en la tecnocracia de saber cientfico, que
estaba lejos del saber sobre la prctica educativa.
Kemmis y Carr plantearon que en la actualidad la escuela crtica se sita en los vnculos entre
filosofa y ciencia, dado que para Habermas (citado en Kemmis y Carr 1988) era necesario evaluar
todo saber segn las reglas del saber cientfico-naturalista, ya que la educacin, donde hay
conocimiento, estaba minada de reproduccin cultural, cognitiva y de valores. El currculum, en
este sentido, es ideolgico, pues rechaza el conocimiento como produccin, convirtiendo a
docentes y alumnos en reproductores de informacin y no agentes apasionados por la produccin
de conocimientos y la transformacin social y desarrollo integral.

El currculum crtico: racionalidad y diseo emancipador


La teora crtica del currculum se afinca en la idea de la Escuela de Frankfurt de que la
educacin no puede desarrollarse como algo ya dado, sino que necesita una fuerte dosis de
nuevos lenguajes que hagan posible la construccin de nuevos procesos didcticos, en el que la
realidad se analiza socialmente, determinada por opciones de valor. Lather (1992, citado por
Escudero y otros 1992, 149) manifiesta que esas opciones de valor, le dan al currculum crtico un
proyecto emancipador, implicando desde un espacio social amplio; esto significa reconceptualizar
lo que han sido los ideales de los desamparados y de aquellas personas que luchan por la creacin
y desarrollo de una sociedad sensible.
La perspectiva crtica, ms que organizar los contenidos curriculares, se plantea qu cultura debe
ensearse en las escuelas pblicas, de modo que posibilitar un acceso igualitario a la escolarizacin y
una ciudadana activa. En este sentido, aspira, ms ampliamente, a ser una propuesta de poltica
cultural. Por eso mismo, en lugar de las formas hegemnicas de escolarizacin, un modelo de corte
11

crtico suele ser contrahegemnico, es decir, alternativo a las formas dominantes establecidas.
(Escudero, y otros 1999, 148)

El currculum al ser una prctica construida socialmente, plantea que la ideologa se disfraza
como organizacin de contenidos de enseanza; por lo que es necesario examinar histricamente
cmo los estudiantes de estratos bajos y medios han sido marginados por el desarrollo
hegemnico y por las instituciones que muestran un modo de vida, tal y como lo configura la clase
social alta. Y es que esta clase, no solo domina la economa, sino que, buscando perpetuarse,
introduce la ideologa en los programas de estudios, a fin de que la utopa5 sea la que oriente
los proyectos de vida de los marginados, y geste, desde ptica, una institucin educativa pblica,
que transforme las condiciones actuales de vida, que luche en contra de la exclusin y
discriminacin, asumiendo el conocimiento como comprensin del mundo de la vida, dando lugar
a propuestas asociados al currculum multicultural.
Los contenidos curriculares son objeto de anlisis y de crtica. Son modificados en su diseopor la realidad circundante, por la ciencia que cambia constantemente y por los contextos
ideolgicos, histricos y ticos en que tiene lugar los significados de las prcticas sociales
concretas. En otras palabras, los contenidos son sometidos a juicios de valor, a partir de su
conversin a estilos de vida e identidad personal y comunitaria, que permite a los estudiantes la
realizacin personal y la autenticidad. Por eso es importante determinar, dentro de los contenidos
curriculares, el rol del docente, dado que es l, quien orienta el proceso didctico y lo convierte
en una actividad poltica, cientfica y pedaggica, que revele que la sociedad est condicionada
ideolgicamente, y que necesita de una dimensin comunitaria de vida.
La teora crtica promulga por un humanismo cientfico, solidario y liberador, es decir, un
desarrollo humano, donde el hombre valga ms que los ejrcitos y los fusiles, los misiles y las
conquistas blicas, y donde, sin desperdiciar los adelantos cientficos y tecnolgicos, sepamos
instrumentalizar esa ciencia y esta tecnologa en pro del gozo y de la felicidad (Rodrguez 2000,
16). Este humanismo debe admitir como principio social la unin de hombres y mujeres en su
vida histrica, que adquiere sentido cuando la participacin se basa en la igualdad y la libertad
como signos evidentes de una autntica democracia.
Este posicionamiento, al que hace alusin Rodrguez, implica que los valores comunitarios
son, ante todo, los que se deben contribuir en cada prctica educativa; son los que le dan sentido
a la poltica de reconocimiento de la diferencia, de modo que el currculum sea desarrollado
diferenciadamente, acorde a la realidad de cada grupo cultural. La poblacin, a partir de un
determinado momento se siente saturada de bienes tcnicos, donde no encuentra sentido a la
vida; choque entre la esfera moral y tcnica, entre los valores de la comunicacin y lo puramente
economicista y consumista (2000, 13). La docencia debe concientizar al estudiante y provocar
5

Utopa del griego antiguo ou (no) y el griego topos (lugar)hace alusin a una idea o proyecto inalcanzable. Toms Moro
en su novela, Utopa habl de un mundo perfecto, ideal en el que la sociedad est regida por los pueblos.

12

contradiccin en la esfera tcnica y moral, poniendo en peligro el carcter obvio de la cultura, ya


que deber apuntar al desarrollo de contenidos de enseanza vinculados con la realidad.
Escudero, y otros (1999) plantean que:
No se planifica para lograr una mayor efectividad o calidad de la educacin. Un diseo crtico tiene un
componente moral ineludible: igualdad o equidad, solidaridad y democracia. De este modo, las
cuestiones sobre qu conocimientos es preferible, o qu experiencias de aprendizaje seran prioritarias,
no son tcnicas, sino asuntos a los que slo se debe responder a la luz de los criterios morales, polticos
y culturales. (152)

Y es que estos criterios morales, polticos y culturales, hacen que el currculum crtico adquiera
una racionalidad basada en la accin comunicativa, la cual, ante todo, est orientada
obligadamente a generar un trabajo en comn, de modo que conduzca a la formacin polticapedaggica de estudiantes y docentes, con un compromiso ineludible frente a la ciencia, la
enseanza y a nuestras necesidades. Y es que, en esta formacin, la praxis sustituye la nocin
tradicional de diseo, dado que la participacin activa de la comunidad universitaria para el casodeber tener como referencia la conciencia colectiva como propsito fundamental de que el
cambio es posible.
Giroux en su obra Teora y Resistencia en Educacin (2004) plantea sobre la importancia de
la conciencia histrica6, en el pensamiento crtico otorgndole valor a modos de crtica que
iluminan la interaccin de lo social y lo personal as como la historia y la experiencias vividas (59).
Se trata de un pensamiento dialctico, que revela su definicin en torno a las relaciones entre
accin y reflexin, como elementos constitutivos de la problematizacin pedaggica, la cual no
solo es un proceso comunitario; tambin un escenario en el que cada individuo construye su
propia significacin en torno a las significaciones de los dems, codifica y decodifica el
conocimiento, el cual no solo ha sido cientfico, sino tambin cultural.
Esa postura no slo une el anlisis histrico con las nociones de crtica y emancipacin, tambin politiza
la nocin de conocimiento, o sea, insiste en ver al conocimiento crticamente, dentro de constelaciones
de ideas suprimidas (imgenes dialcticas) que sealan las formas en que las culturas y las luchas
histricamente reprimidas podran ser usadas para aclarar potencialidades radicales en el presente.
(Giroux 2004, 61)

La interpretacin del currculum oculto queda adscrita a esta postura de pensamiento


dialctico. Kemmis asocia el currculum oculto a formas de control social y a relaciones de poder
que se dan dentro del saln de clase, a parte de una fuerte carga ideolgica manifiesta en los
programas de estudio. Para l, slo preparando al docente en el conocimiento pblico, tal y como

La teora crtica del currculum considera que la conciencia histrica permite que las comunidades educativas se
conviertan en autorreflexivas, dinmicas y de autoprofesionalizacin. Dilthey consider la conciencia histrica como una
forma de hacer autoconciencia, asumiendo un rol de totalidad, frente a la desconexin de la vida. En otras palabras, la
conciencia crtica es un proceso de autodisciplina y autorreflexin orientada hacia la consecucin de que los estudiantes
sean personas histricas, a fin de comprender la vida, desde un ngulo crtico y problemtico.

13

afincaba la idea Stenhouse, poda ser garanta de desenmascarar la represin expresada en forma
de ddivas o sistemas filantrpicos (1988), y que, a fin de cuentas, es lo que mueve los intereses
de las mayoras empobrecidas. La prctica educativa est sustentada entonces- como posibilidad
para el encuentro con el discurso crtico, un dispositivo pedaggico que encuentra la explicacin
en la dinmica problemtica del contenido de la cultura, dado que se relaciona con los grupos
dominantes, y con la legitimidad que estos imponen a las relaciones de dominacin. Para descubrir
la ideologa dominante dentro de los programas de estudio, lenguajes pedaggicos (discurso del
docente, habla del alumno, libros de textos, entre otros), planificaciones didcticas, estrategias
de enseanza y evaluacin de los aprendizajes, entre otros, el docente debe comprender que la
cultura est vinculada al poder, al mismo tiempo que este poder se disfraza en lenguajes de
empoderamiento de las grandes corporaciones, que determinan en forma de normativa, la vida
que tendr que asumir la sociedad en todas sus dimensiones.
La Escuela de Frankfurt considera que en las universidades el conocimiento tcnico invade a
la mayora de las carreras. El estudiante aprende conocimientos basados en el aprender a hacer,
en el que la posibilidad del pensar se diluye lentamente hasta convertirse en un pensar de las
grandes empresas. El estudiante aprende el capital cognitivo que las mismas carreras ofrecen en
torno al mundo laboral; un estudiante con esta capacidad est en condiciones aptas para
insertarse a la produccin de diverso tipo; es ms, es el mundo laboral el que determina los tipos
de carreras existentes, as como tambin la dinmica de la enseanza que se desarrolla en el
mbito del aula. La Escuela de Frankfurt vincula esta situacin con el currculum oculto, ya que
las grandes corporaciones expanden la ideologa con los hiperdiscursos7 hasta insertarse en
los programas de estudio. Quien no aprende situaciones de aprendizaje suscitada de este proceso
tcnico, no logra triunfar en el mundo de la vida, ya que este mundo, es el que se presenta en
los medios de comunicacin, redes digitales, publicidad en Internet, consejos de los padres y
madres de familia, trabajos de los docentes, actitudes manifiestas de diversos tipos, entre otros.
Por eso, es importante prepararse en el saber pensar; lo que debe iniciar con los docentes
universitarios, quienes, a su vez, son los modelos ms representativos de que los estudiantes
tambin aprendan a pensar.
En la actualidad, muchas de las universidades latinoamericanas y de Estados Unidos, someten
los procesos de enseanza-aprendizaje al saber a hacer, en el que los mtodos de proyectos se
fundamentan en acciones empresariales y en la necesidad de fundar sus propias empresas. Tan
ilgico resulta, que en Centro Amrica y Amrica del Sur se vea como necesario esta posibilidad,

El hiperdiscurso es una lengua utilizada legtimamente para invadir los gustos de las personas a fin de lograr el
consumo. Los empresarios no solo determinan lo que las personas necesitan, sino que, adems, controlan las
acciones que puedan alterar su buen funcionamiento y el del Estado. El hiperdiscurso se disemina en forma de
publicidad, en el que la psicologa de la industria adquiere preponderancia cuando examina los gustos de los
clientes, as como tambin el producto que pueda ser vendido. En otras palabras, el hiperdiscurso se convierte en
el discurso del poder; discurso que las universidades no pueden alterar, porque son producto de esta legitimacin
ideolgica.

14

ya que se ve en una carrera universitaria como un medio para ascender econmicamente y triunfar
en el mundo laboral.
El hiperdiscurso es el discurso de la falsa libertad, un discurso que se constituye en el eje
vertebrador de la enseanza y de la creencia de que el rol docente debe aprender a dominar lo
que las empresas determinan. La enseanza es vista como dependencia, como una articulacin
de la velocidad en que se mueve las corporaciones, en cuanto a la tecnologa, los productos y lo
que marca la oferta y la demanda (publicidad). Los jefes de Estado ms los gobernantes de un
pas mueven la dinmica del empleo en torno a los productos que se consumen (sin necesidad de
que sean necesarios), procurando legislar en torno a los intereses propios y de mantener el
supervit. Y precisamente aqu es la clave para la comprensin, segn ellos, del desarrollo,
enfatizando en materias como mrquetin, publicidad, mercadotecnia, administracin de empresas,
estudio del derecho desde los cdigos, matemtica financiera, estadstica aplicada a la empresa,
fsica, qumica, entre otras. No se trata de aislar su importancia, lo que sucede que su tendencia
es desarrollar un conocimiento sin amor, un conocimiento que se asla del pensamiento que se
debe gestar en los estudiantes; un conocimiento que niega la importancia de las humanidades,
aun cuando la nacin est harta de problemas sociales; un conocimiento que niega la importancia
de la filosofa y desecha cmo enfrentar ideolgicamente los problemas que se manifiesta en
forma de poltica empresarial. O al menos, el amor, est incrustado en el consumo y en el
aislamiento; una poltica empresarial que se basa en:
La divisin, sujeto transformador-objeto transformado; sujeto-profesor que culturiza, a objetosalumnos, sujeto-partido que conciencia a objetos trabajadores o sujeto sociedad que explota el objetonaturaleza. La crisis actual de la modernidad desautoriza a esos sujetos y las verdades absolutas
(cultura, emancipacin, verdad, progreso) en que se basan. (Castells, y otros 1994, 65)

El docente tiene como misin generar cultura de las empresas dentro del aula; las
universidades ofrecen servicios educativos que legitiman esa poltica e incluso proporcionan ideas
sobre cmo acrecentar las capacidades de los estudiantes a travs de festivales orientados al
consumo. Amrica Latina, representa la mejor opcin para ideologizar, que, en trminos de
currculum oculto, se apodera de las prcticas sociales, que niegan la autora de los sujetos que
aprenden. Es ms, la violencia social es producto de esta diseminacin, de unos modos operandi
que se ha convertido en cultura de aoranza, de unos sujetos que asumen valores de dependencia
(Las pandillas de Estados Unidos) y tratan de conquistar el mundo a travs del miedo. La ideologa
tambin genera prcticas difusas, que tienen que ver con la crisis socioeconmica, cultural y de
esperanza en la vida.
La falta de una formacin del profesorado, segn Flecha (1994) es una causa del descenso
del nivel de los estudiantes y una perspectiva de dependencia del saber tcnico. La nueva derecha
cultural norteamericana se ha destacado en la vanguardia de esta corriente. Autores como Bloom
(1987) y Hirsch (1987) han visto la solucin a la actual crisis educativa en que las escuelas menos
15

de la libertad y ms de transmitir la verdad (Castells, y otros 1994, 66). Bajo esta concepcin,
la paz es vista como desigualdad de derechos de los marginados y las mujeres, en el que el
silencio representa la garanta para una sociedad ms prspera y justa. La convivencia social y la
concepcin de paz implica asumir una determinada democracia tal y como lo imaginan las grandes
corporaciones. El mensaje de paz no puede venir de una persona pobre, sino de los ricos, de los
que asumen el poder e incrementan sus excedentes econmicos mensual y anualmente, de los
que evaden los impuestos, de los que planifican la economa, la educacin y la salud; de los
modernos, de aquellos que piensan que el manejo de la tecnologa (robtica, redes sociales,
computadoras y otros) implica intelectualidad y desarrollo cognitivo de alta dimensin; de los que
controlan la mente de los sujetos a travs de los medios de comunicacin y los mensajes
subliminales que generan cultura de consumo.
Las tesis de la Escuela de Frankfurt respecto al currculum oculto se encuentran en saber
pensar dialcticamente, en la unificacin de la actividad docente con el contexto social. Se trata
de comprender el rol del enseante en la va dialctica, que supone el reconocimiento de las
situaciones sociales desde el marco objetivo y subjetivo, en el que el entendimiento debe tener
estas caractersticas primordiales. Se examinan los objetivos de aprendizaje desde las conductas
observacionales y las subjetividades que se manifiestan en los espacios ulicos. Se debe ensear
ciencia, pero tambin hay que situarla dentro de los contextos sociales y culturales, dado que el
estudiante debe aprender la epistemologa derivada de la disciplina y, a la vez, pensar en su
cotidianidad y realidad circundante, a fin de que el estudiante sea un agente de cambio.
El enfoque dialctico de la racionalidad reconoce la contribucin parcial y unilateral de las posturas
objetivista y subjetivista, rechazando el determinismo y el cientificismo de la primera lo mismo
que el relativismo y la teora racionalista de la accin que caracterizan a la segunda. No obstante, el
enfoque dialctico admite que existen en lo social limitaciones objetivas al pensamiento y la accin,
por cuanto no pueden ser controladas por individuos o por grupos particulares. Asimismo, admite que
hay limitaciones subjetivas que podran ser cambiadas por las personas, slo con que supieran
ms o entendieran el mundo, pero que limitan efectivamente sus posibilidades para cambiar el
pensamiento y la accin. (Kemmis y Carr 1988, 195)

Esta relacin implica un enfoque dialctico entre teora y prctica, entre individuo y sociedad,
sociedad y cultura, lo singular y lo plural, lo concreto y lo abstracto, lo inductivo y lo deductivo, lo
analtico y lo sinttico, entre otros; en el que su fundamento se encuentra en la contradiccin8,
entendida como la unidad de opuesto, donde el docente deber asumir la condicin de
investigador activo y estratgico.

La unidad de opuestos es la categora con la que se explica la contradiccin. Aunque es una palabra latina
(contradicto)que significa estar en contra, o de enfrentamiento. Contradiccin desde el puno de vista del
enfoque dialectico es la unidad de opuesto, dado que es importante aprender a pensar y actuar de manera
ideolgica y de transformacin.

16

En su sentido ms general, el investigador activo concibe la investigacin cientfica como un


proceso y un estudio para el cambio social, que adopta una relacin estrecha entre planificacin,
accin, observacin y reflexin, a fin de contribuir concretamente al entendimiento y a la postura
de la transformacin social y pedaggica. En concreto, el investigador activo es un docente que
est en beneficio de la pedagoga crtica y que intenta democrticamente ser reflexivo, tener
autoridad emancipatoria y desarrollar procesos de investigacin-accin.
El proceso de investigacin-accin comienza con actos de reflexividad, que se gestan en el
seno de la misma prctica educativa. Actos de reflexin que indican que el docente debe ser capaz
para la autoevaluacin y la mejora de s mismo, dado que la importancia de convertirse en un
intelectual transformador comienza con la imagen del profesor reflexivo (McKernan 2001). Lo
crucial en los actos de reflexin es que los profesores tienen que saber ms sobre los efectos de
su trabajo y ayudar a otros a saber ms y a ejercer mejor como profesores y como profesoresinvestigadores (McKernan 2001, 67). Es un proceso dialctico que tiene sus implicaciones en la
formacin permanente del docente y en su capacidad para cambiar su ejercicio profesional y las
prcticas educativas.
Giroux (citado en Gore 1996) plantea que la reflexin es una forma de autoridad
emancipatoria que concibe el poder como aperturado a la democracia. El concepto de autoridad
emancipatoria indica que los profesores poseen un saber crtico, reglas y valores por medio de los
cuales articulan y cuestionan conscientemente sus relaciones con los dems, con los estudiantes,
con la asignatura y con la comunidad en general (Gore 1996, 122). Ante esto, Giroux sostiene
que la autoridad emancipatoria rompe con los esquemas tradicionales de autoridad, que se fundan
en la opresin y la dependencia, en el que la humillacin adquiere un papel trascendental para
ensear y aprender. La autoridad emancipatoria dignifica el trabajo de los profesores,
considerndolo como una forma de prctica intelectual (citado en Gore 1996, 122), que funciona
en la dinmica de su autopreparacin, inventiva y un des-hacer y re-hacer de su prctica de
enseanza. Pero esa autoridad emancipatoria no se vincula al desarrollo de las asignaturas slo a
partir de su componente epistemolgico; tambin representa una conversin del escenario de la
clase en un modelo didctico que habilite a los estudiantes en el conocimiento y destreza
que necesitan para desarrollar una comprensin crtica de s mismo as como lo que significa vivir
en una sociedad democrtica (Giroux 2004, 151).
En este sentido, la autoridad emancipatoria es cuestin directiva, una prctica intelectual y
orientativa de los procesos de transformacin intelectual y de discurso crtico. Ese discurso, que
es clave en la investigacin-accin, representa una posibilidad de proporcionar conocimientos y
formas de autocomprensin que hagan posible que los estudiantes desarrollen capacidades para
la conciencia crtica. Es en los ciclos de la investigacin-accin, donde esa conciencia crtica va
adquiriendo en forma de espiral- transformaciones, ya que el re-hacer debe ser concebido en su
dinmica constante, en la comprensin que los docentes y estudiantes tienen de s mismos.
17

Estas consideraciones sirven de pauta para comprender la racionalidad crtica del currculum,
pues su funcin dentro del mundo de la vida en el aula, sea convertido en la pedagoga en
oposicin, en los ciclos de que la investigacin es el fundamento de la prctica eductiva. Es
probable que cueste mucho la asuncin de una creencia que se puede investigar de distinta
manera; pero la pedagoga que se piensa gestar en las aulas universitarias a partir de la escuela
crtica, implica que los estudiantes tambin debern ser ciudadanos activos y crticos (Giroux 1988,
379), asumiendo autonoma en su trabajo y reflexin crtica sobre s mismos.
Ensearemos mejor nicamente si, con inteligencia, aprenderemos de la experiencia de fracaso, tanto
en nuestra comprensin del conocimiento que ofrecemos como en nuestro saber de cmo ofrecerlo.
Esa es la razn ara la investigacin como base para la enseanza. (Stenhouse 1998, 193)

En esta perspectiva, la investigacin adquiere preponderancia porque viene a suscitar nuevos


saberes que podrn ser configurados dentro de los programas de estudio y que merecen la pena
ser analizados, dado que los problemas curriculares no son tericos, sino prcticos, tal y como
afirmaba Stenhouse. Es preciso plantear ac, que la investigacin-accin es una actividad social
de manera que se pueda comprender y que marque una nueva circunstancia cultural abordadas
por los profesionales en el ejercicio de su profesin. Por eso, tal y como afirmaba Mclaren (1989,
citado por Gore 1996, 130) los maestros deben aprender a utilizar el anlisis crtico y el
pensamiento utpico, dando la oportunidad a los estudiantes de convertirse en ciudadanos del
saber.

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