Pedagogia de Jesús
Pedagogia de Jesús
Pedagogia de Jesús
PEDAGOGA DE JESS
Jess utiliz una pedagoga muy especial con sus discpulos en orden a
que ellos tambin la aplicaran a su vez. No slo les ense, sino que les
ense a ensear. Veamos algunos de los elementos del mtodo
pedaggico de Jess:
Parte de la realidad
Jess siempre parta de la realidad. Observaba cuidadosamente la
naturaleza y los acontecimientos ms ordinarios de la vida diaria. Un da
se sent con sus discpulos frente al Tesoro del templo. En eso, lleg una
mujer pobre que ofrend dos moneditas. Jess la observ e hizo notar el
hecho a los suyos. Finalmente, sac una conclusin para ellos: Dio ms
que los dems (Mc 12, 47-44). Jess extraa un mensaje de cualquier
cosa:
Fenmenos naturales: el relmpago que aparece inesperadamente
en el cielo, le sirve para hablar de su sorpresiva venida.
Las realidades rurales son sus preferidas para revelar el misterio
del reino: el grano de mostaza, la vid, la higuera, el campo, etc.
Las caractersticas propias de cada animal le sirven como vehculo
de su mensaje: el camello, el zorro, la paloma, la serpiente, etc. Se
habla dems de20 animales en el evangelio.
Acontecimientos: una boda, un banquete, un asalto en
despoblado.
Jess parta de lo concreto para llegar a formular algn principio o valor.
Su camino siempre iba de lo sensible a lo abstracto. Por eso insisti a
sus discpulos: "Miren lo que oyen (Mc 4,24). No se trataba simplemente
de ver (horao), sino de observar (blepo): los lirios del campo, los pjaros
del cielo y hasta ver a los mudos hablar (Mt 15, 31). Su misin fue
precisamente abrir los ojos a la gente, para que pudiera descubrir el
mensaje inscrito en las realidades temporales. A veces contaba una
historia para sacar una conclusin:
Dilogo de preguntas
Preguntas del Maestro a los discpulos
Su pedagoga no alimentaba la pasividad de sus discpulos, sino que los
hacia pensar, sacando conclusiones del interior de ellos.
No era un aula de clases donde el profesor impusiera sus criterios, sino
que los hacia aprender por ellos mismos. Tampoco impuso dogmas, sino
que a travs de preguntas, buscaba que cada uno llegara al objetivo
propuesto. Cuestionaba a sus discpulos, para que aprendieran a entrar
en s mismos y encontraran las respuestas.
Su metodologa parta de un principio antropolgico y teolgico: Dios no
est lejos de nosotros; en l vivimos, nos movemos y existimos, ya que
El mismo ha hecho su morada en nuestro corazn y est no slo con
nosotros, sino en nosotros.
Vamos a seleccionar una pequea lista de las muchas preguntas
planteadas a lo largo del evangelio:
Qu buscan? Jn 1,38).
Quin dicen que soy yo? Mt 16,15
No he dicho que si crees vers la gloria de Dios Jn 11, 40
Quien es mayor, el que est en la mesa o el que sirve. Lc 22,27
No vale ms la vida que el alimento, y el cuerpo ms que el
vestido Mt 6,25
Porqu traspasan el mandamiento de Dios, por su tradicin? Mt
15,3
Por qu se preocupan de lo dems? (Lc 12,26).
Por qu piensan mal en sus corazones? (Mt 9,4).
Cmo pueden ustedes hablar cosas buenas, siendo malos? (Mt
12, 34).
Por qu dudaste? (Mt 14, 31).
Qu puede dar el hombre a cambio de su vida? (Mt 16, 26).
Qu quieres que te haga? (Lc 18,41).
Tambin ustedes quieren marcharse? (Jn 6,67).
"Nadie te ha condenado? (Jn 8,10).
Por qu no me creen? (Jn 8,46).
Me amas ms que stos? (/n21, 15).
Qu te importa? (Jn 21,22).
Es asombroso el nmero de preguntas que Jess plantea a lo largo de
todo el evangelio.
Son ms de doscientas. Simplemente, en el texto de Marcos 8,16-21
encontramos nueve preguntas seguidas.
El no pretenda dar recetas o frmulas, sino que saliera del corazn del
discpulo la respuesta adecuada.
Los dos deudores: uno que deba diez mil talentos, y el otro
simplemente cien denarios (Mt 18, 23-35).
La astilla en el ojo del hermano y la viga en el propio (Lc6,41-42),
El rico que todos los das banqueteaba y el pobre Lzaro a la
puerta del palacio (Lc 16, 19-31).
Una casa cimentada sobre arena y otra sobre la roca (Mt 7,26-27).
Cafarnam y Sodoma (Mt 11,23-24).
Un sepulcro blanqueado (Mt 23, 27).
Por otro lado, al igual que algunos profetas, realizo acciones simblicas,
donde lo ms Importante no era el hecho en s, sino su profundo
significado:
Anunciar el evangelio a los pobres (Lc 3,18)
Perdonar los pecados (Mc 2,1-12).
Curar en sbado (Mc 3,1-5).
Lavar los pies a los suyos (Jn13, 1-17).
Morir el da de Pascua (Jn 19, 31).
Todos estos signos llevaban una densa carga de mensaje. Eran semillas
que contenan grandes verdades dentro de si.
El modelo: un nio
El modelo por excelencia para mostrar el reino, era un nio. Si no se
adquiran sus actitudes, no se poda ser discpulo. Quien mejor poda
mostrar el reino no era un diplomado en la escuela rabnica de Jerusaln,
sino un nio que confiaba y dependa de su pap (Mc 10, 15).
Haciendo las cosas
La gente reconoca que Jess era un Maestro diferente a los dems, por
la simple razn de que l cumpla todo lo que predicaba. Ms que con
palabras, Jess ense con su propio ejemplo. Su estilo de vida era la
enseanza ms grande: Bastaba con observar su conducta, para
deducir la forma en que deba conducirse un hijo de Dios en este
mundo!