Metodología en Catequesis
Metodología en Catequesis
Metodología en Catequesis
Metodologa en catequesis
Propuestas
Pistas para la preparacin de un encuentro
por Marcelo A. Mura
Preparar un encuentro no es o mismo que dar una clase. Para transmitir la experiencia
de fe, y ayudar a que la misma crezca en otras personas es vital el marco de una
comunidad.
El primer paso, por consiguiente, para desarrollar un proceso de catequesis, es crear
un ambiente comunitario entre las personas que van a compartir el espacio. Esto no es
tarea que se consigue de un da para otro. Ms an, la comunidad es una realidad
viva, que se alimenta del encuentro entre las personas que la integran, por lo cual
puede crecer o decrecer, segn sea la experiencia de las personas que la integran.
Cmo crear comunidad en el marco de la catequesis?
Promoviendo el conocimiento personal de los participantes: catequizandos y
catequista.
Ayudando a que cada persona se sienta valorada, respetada e integrada al grupo.
Que nadie quede al margen.
Preocupndonos e interesndonos por la presencia o ausencia de todos.
Cmo conseguir esto?
Inciando los encuentros con algunas preguntas para compartir, que permitan que
todos hablen, cuenten algo de su vida, muestren algo de sus intereses, expectativas,
deseos, anhelos.
Generando espacios de comunicacin extra-reuniones. Por ejemplo, a travs de la
visita o el llamado por telfono de las personas que no asistieron a una reunin.
A travs del reconocimiento explcito del trabajo, la participacin, los aportes
personales en la reunin, la produccin personal en la carpeta o cuaderno.
El festejo de los cumpleaos, los nacimientos, la celebracin de fechas especiales...
Estas simples propuestas, sencillas de implementar ayudan a generar una trama
humana slida e importante para que la Palabra de Dios y el proceso de fe pueda
echar races slidas en un grupo humano que vaya creciendo en la conciencia de
pequea comunidad.
Cmo preparar un encuentro de catequesis?
Planificar con tiempo, preparar las reuniones con anticipacin es el primer paso para
generar encuentro. Esto no quiere decir estar atado a un esquema rgido, inviolable,
detallado hasta en sus mnimos momentos. Muchas veces la "ficha" del encuentro se
constituye en un cerco a la creatividad, pues termina ahogando la iniciativa personal
de los catequistas. Pero no se trata de caer en la improvisacin total. Un buen
esquema de lo que se va a realizar ayuda a establecer tiempos, recursos, preguntas a
utilizar, y colabora para que el catequista tenga claro el objetivo del encuentro, y gue
al grupo para alcanzarlo. Muchos encuentros sin planificacin terminan a la deriva,
pues se carece de un buen "plano" que anticipe a donde se quiere llegar.
Incluir en los encuentros espacios para el dilogo, la reflexin conjunta, el compartir
grupal, es decir, favorecer la comunicacin dentro del grupo. Esto se logra con
actividades o preguntas para que el grupo trabaje en conjunto o en pequeos grupitos.
La catequesis abre un espacio para comunicar y encontrarse con la Palabra de Dios.
El ejercicio del dilogo, de escuchar al otro, de respetar los turnos, de aprender de lo
que el otro dice es un aporte valiossimo para aprender a escuchar la Palabra de Dios.
Cmo escuchar a Dios en un grupo humano que no aprende a escucharse entre s?
La catequesis no es un monlogo del catequista, sino una bsqueda compartida, que
implica:
- aprender a escuchar;
- aprender a participar;
- aprender a decir lo que uno piensa, lo que se descubre y tiene en el corazn.
Dar a la Palabra de Dios un lugar central en el encuentro. La lectura de la Palabra de
Dios en el encuentro de catequesis debe significar la presencia de Jess, que se
acerca, que comparte nuestra vida, que nos escucha, y que nos habla. Para ir
transmitiendo estas vivencias, profundas y complejas, es muy til ayudarse con
signos. Especialmente para los nios el lenguaje simblico puede ser una excelente
puerta de entrada al encuentro con el Seor. En el cuadro de la pgina siguiente
encontramos varias sugerencias para el trabajo con la Palabra en el encuentro.
Crear un espacio de oracin. Esto implica generar un clima, ayudar a distenderse,
motivar a hablar en voz alta. Las canciones son una excelente herramienta para
introducir los espacios de oracin. Es importante ensear a rezar. Una ayuda para
aprender a rezar puede ser escribir las oraciones en tarjetas o papeles. Luego de
escritas cada uno puede leer la que escribi o si se colocan todas juntas (y se ofrecen)
luego cada integrante puede extraer una al azar y leerla. Esto ltimo tiene dos ventajas
para grupos o personas que se inician:
- favorece el aprendizaje porque permite a las personas ms tmidas compartir una
oracin, que al no ser la propia brinda ms libertad para decirla.
- y, por otra parte, como todos van a leer y compartir una oracin, se asegura que se
leern todas las oraciones escritas.
Pensar y proponer actividades que tengan en cuenta la situacin de los
catequizandos. Es decir su edad, sus conocimientos, su cultura, su forma de ser, de
sentir, de expresarse. Para evangelizar la vida debemos partir de las situaciones que
las personas viven, y esto incluye tener en cuenta sus alegras, sus tristezas, sus
anhelos y esperanzas, sus frustraciones. Partir de la vida e iluminarla con la Palabra
son los primeros pasos de la metodologa catequstica (ver La pedagoga de la fe artculo publicado en Catequesis / Metodologa)