La Mano

y
La Gallina
o las alegres tragedias de la calle Cipreses
 Fernando Josseau

La Mano
y
La Gallina
o las alegres tragedias de la calle Cipreses

Fernando Josseau, 2009

Pehun Editores, 2009
Mara Luisa Santander 537 - Providencia - Santiago
Telfonos: (56-2) 795 71 30 - 31 - 32 - 33 / Fax: (56-2) 204 93 99
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Inscripcin N 177.020
ISBN 978-956-16-0463-6

Primera edicin en Pehun Editores, enero de 2009

Produccin Editorial
Pehun Editores

Diseo y diagramacin
Olaya Fernndez A.

Impresin
Salesianos Impresores S.A.

IMPRESO EN CHILE / PRINTED IN CHILE

 UNA APUESTA POR EL ABSURDO Y LA DISTORSIN

JUAN ANDRS PIA

En una dramaturgia nacional ms bien habituada al realismo en cualquiera de sus

expresiones, el nombre de Fernando Josseau resulta algo extrao y disonante. Su
xito nacional y su proyeccin internacional los consigui con la obra El prestamista,
que recorri diversos escenarios del continente. En 1962, el actor chileno Ral
Montenegro obtuvo el primer premio en la temporada de Teatro de las Naciones en
Pars por su interpretacin de esta obra, que, aunque posee tres personajes, se presta
como en el caso de Montenegro para una actuacin unipersonal.
El prestamista (estrenada en 1956) es el primer y ms slido paso dramatrgico
dado por Josseau, despus de algunos intentos teatrales fallidos. En la obra, un
inspector del que slo escuchamos la voz, interroga sucesivamente a tres personajes
absolutamente distintos entre s, aunque todos igualmente sospechosos del reciente
asesinato de un usurero. Ellos son un panadero, un marqus y un nanciero. Al ser
de naturaleza y origen variados, los personajes se prestan hbilmente no slo para
recrear un friso humano y social, sino para potenciar al mximo las dotes histrinicas
de un actor capaz de desdoblarse.
A travs de un interrogatorio inteligentemente conducido, Josseau utiliza el
recurso del vaivn verbal, de la frase rpida, del conicto chispeante, para entrar
en una de las preocupaciones caractersticas de la dramaturgia chilena de su tiempo
(Vodanovic, Wolff, Daz): la revelacin de un mundo real, lo que se oculta debajo de
la apariencia. Y el resultado aqu es evidente: el panadero resulta ser una vctima que
acta del mismo modo que sus explotadores; debajo de su renamiento, el marqus
esconde decadencia, y el nanciero no es slo un hombre ecaz, sino sin escrpulos.
En n, con esta obra Josseau estaba embarcado en una corriente de teatro psicolgico
con caractersticas de denuncia social. A travs del recurso de la verbalidad y del
conicto manejado en forma impecable, consigui una adhesin ms all de las
fronteras.
Pero a partir de creaciones posteriores, sobre todo de La mano y La gallina,
su verbalidad ms o menos expositiva se quiebra y los conictos psicolgicos
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relativamente delineados y realistas sufren una sura por donde se cuelan buenas una poca de desaparecidos, torturados y mutilados sin autor posible. Consciente o
dosis de teatro del absurdo. Ello se conrma con sus estrenos posteriores: El estafador inconscientemente, el autor dise una situacin sin salida ni coherencia, provocando
Renato Kauman, Su Excelencia, el Embajador, Demencial Party y Alicia en el pas de las desconcierto e inquietud en el espectador, seguramente la misma que se senta en la
zancadillas. La mayora de estas obras parten de una ancdota simple y sin estridencias, calle. Posteriormente, aunque ya de manera programada, Josseau estren Demencial
pero poco a poco van transformndose en situaciones extraas, en las que aoran los Party, una obra parablica sobre la tortura que se practicaba en Chile en aquella
desajustes individuales y la paranoia social. poca.
En El estafador Renato Kauman, un apacible relojero trabaja lejos del mundanal Como en otras creaciones suyas, lo que aqu predomina es una atmsfera cercana
ruido, hasta que aparece un joven terrorista que lo obliga a instalar un mecanismo al humor negro y al terror. Todo est baado por un ambiente extrao, enrarecido,
de relojera para una bomba que pondr horas despus en la casa de un detestado en el que no deja de haber referencias metaliterarias a la novela negra y al gnero
personaje, un estafador que le ha usurpado su vida y sus bienes. A partir de esta policial en general. En ese sentido. La mano es una propuesta dramtica sin resolucin
situacin, cierta locura contempornea comienza a aduearse de la tranquila nal, el planteo de un mundo que el espectador deber completar de acuerdo a sus
relojera, porque son precisamente la violencia de la ciudad y las injusticias de las propias urgencias y sensibilidades.
instituciones las que dominarn todo. Varios personajes entran y salen del local, y En La gallina, en cambio, el absurdo y la distorsin operan de manera ms
cada uno muestra un dolor, un fracaso o un conicto que lo han llevado a renegar de realista y su lgica s tiene solucin de continuidad. La obra es la historia de un
la vida actual, oscilando entre la caricatura y el patetismo. tranquilo y parlanchn intelectual, cuya esposa es magreada por el vecino, tambin
Dentro de sus recursos teatrales, Josseau utiliza el lenguaje como un mecanismo intelectual, aunque de renombre: pacista connotado, mantiene relacin ntima con
de paroxismo y delirio. Partiendo de un dilogo normal y corriente, los personajes los intelectuales de su tiempo y es considerado como un faro de luz y humanismo en
caen progresivamente en una vorgine verbal que alcanza las alturas del absurdo y el tormentoso mundo contemporneo. Pero precisamente el horror contemporneo
el desconcierto. En El estafador Renato Kauman, por ejemplo, un polica neuyorkino segn la obra es doblemente perverso, ya que el no intelectual no slo ataca
maniesta su agrado por la altura de los edicios, llegando ms tarde a confesar que en la calle a la mujer de su vecino, sino que la viola en su propio domicilio y termina
si no se hacen edicios ms grandes, se suicidar. En la misma obra, un tranquilo incluso hacindolo con el marido de la ultrajada.
cliente de la relojera se queja de su dolor de pies y termina postulando que todos Al menos dos aspectos sobresalen en la obra. Primero, esa crtica satrica a la
los problemas del norteamericano contemporneo radican all. En suma, una pasividad intelectual la del esposo, que recuerda a Retorno al hogar, de Pinter,
acumulacin de situaciones fuera de la lgica sostienen el andamiaje de las obras de en donde un marido contempla pasivamente el proceso de prostitucin a que es
Josseau, e introducen aspectos nuevos y hasta el momento poco tocados por nuestra sometida su mujer por parte de la familia. Aqu, la gallina es un ser intil, sustentado
dramaturgia. en su retrica y palabrera hueca, y no tiene la fuerza ni el coraje para defender ni
defenderse. Se trata de alguien anquilosado, incapaz de reaccionar con efectividad
ante los terribles acontecimientos cotidianos que golpean a su puerta.
La cara oculta de la realidad En segundo lugar, la obra juega con un elemento de inversin caracterstico de las
obras de Josseau, y de ah la clasicacin de absurdo que han recibido sus creaciones:
Aunque el ttulo parezca lo contrario. La mano y La gallina est compuesta por dos es precisamente un pacista, alguien visto como la tabla de salvacin de la violencia
obras breves. A pesar de que Fernando Josseau se ha alejado de los aspectos regionales actual, quien comete un crimen donde justamente estn implicadas la violencia
y contingentes latinoamericanos para situar sus obras, una oscura y extraa relacin y la deshonra. Y tambin situacin de inversin no es a travs de hermosas
con la realidad chilena guarda la primera de ellas, aspecto que en el momento de su palabras de amor como su esposa conoce el placer, sino ante el descerrajamiento de
estreno (1974) no fue tomado en cuenta. su intimidad del presunto intelectual.
En efecto, en La mano, un tranquilo hombre jubilado sufre el extrao cercenamiento En n, el conjunto de las creaciones de este dramaturgo chileno echa mano a
de su mano derecha cuando la saca por la ventana para averiguar si llueve. La accin recursos expresivos de distorsin, quiebra y disociacin del lenguaje cotidiano y
se repite al poco tiempo con su mano izquierda, y nalmente con su cabeza. Ms de las situaciones llamadas realistas, a la par de proponer una reexin metafrica
all de la estructura policial tpica de casi todas las obras de Josseau que existe sobre la sociedad contempornea donde no escapan las preocupaciones del resto
aqu, y de los ingredientes absurdos, enigmticos e inexplicables de la ancdota, de su generacin: la revelacin de aquello oculto que ota en el interior de la vida
es posible una lectura metafrica relacionada con los acontecimientos chilenos, en cotidiana.
LA GALLINA 11

Sobre el Autor
y la Obra
 Fernando Josseau

Profesor de arte dramtico, empresario y crtico, Fernando Josseau tiene la particula-

ridad de haber dirigido casi todas sus obras. En Mxico ha sido guionista cinemato-
grco en colaboracin con Ral Zenteno para Mara Flix, Silvana Pampanini,
Gloria Marn, Anglica Mara, Julio Alemn, el actor espaol Enrique Rambal, entre
muchos otros.
En 1980 se publica su libro Chez Pavez que causa el asombro de la crtica. Su
Excelencia el Embajador, La Muela del Juicio Final y Los Pianistas Mancos son
adaptaciones teatrales de cuentos de este libro.
En el ao 1995 presenta su segundo libro de relatos, La Posada de la calle
Lancaster, con gran xito de crtica. Obtiene el Premio Municipal de Literatura 1995
y el Premio del Libro y la Lectura 1995.
Crnicas del Absurdo es publicado en 2003, tercer libro de cuentos.
En octubre de 2005 se reedita El Prestamista, su obra cumbre.
En el 2006 se publica Cuentos Selectos, volumen I, y en abril de 2008 es entregado
al pblico Cuentos Selectos, volumen II.
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El estreno de La Mano y La Gallina o las Midtown International Theater Festival, Woken Glacier Theater Company,
alegres tragedias de la calle Cipreses se realiz Consulado General de Chile en New York, EE.UU., julio-agosto de 2007. The
en Santiago el jueves 31 de enero del ao Hand and The Hen. La Mano y La Gallina. Director: Oscar A. Mendoza.
1974, en la Sala de Actos del Instituto Chileno
Francs de Cultura. Caf Liberty, Len, Mxico, septiembre de 2007. La Mano y La Gallina. Grupo Teatral
El teatro, cedido por el departamento Sptima Especie. Director: Guillermo Figueroa.
cultural a Fernando Josseau en homenaje
a sus triunfos en Pars, fue completamente Compaa Nacional de Teatro (ex Teatro de Bellas Artes), Repblica Dominicana,
remozado para la ocasin. 2006. La Mano. Directora: Mara Castillo.
Fueron sus intrpretes Tennyson Ferrada,
Mara Elena Duvauchelle y Julio Jung. Teatro Ateneo de Caracas, Carcacas, Venezuela, 1995. La Mano. Director: scar
Entre las muchas representaciones que se Mendoza. El mismo actor-director estren posteriormente en Bogot, Manizales,
han realizado de ambas obras que suman Cali y Medelln, Colombia.
ms de 300, tanto a nivel nacional como
Compaa Chilena de Teatro, Madrid, Espaa, 1978. La Mano y La Gallina.
internacional, podemos mencionar:
Teatro del ngel, Santiago, Chile, 1978. La Mano y La Gallina. Director: Fernando
Teatro Circus OK, VIII Festival de Teatro Josseau.
Teln Abierto, Juventud Providencia, I.
Municipalidad de Providencia. Bolsillo Grupo Teatral Los Comediantes, sala Rajatabla, Carcas, Venezuela, 1997-1978.
Perro Ca. Teatral, 29 de noviembre de 2008. La Mano y La Gallina. Director: Julio Jung. Intrpretes: Lientur Carranza, Mara
La Mano. Direccin: Claudia Valenzuela. Elena Duvauchelle y Luis Pardi.
Gracias a su papel en La Gallina, Mara Elena Duvauchelle se consagr como
El Observatorio de Lastarria. Ciclo Teatro mejor actriz.
y Lectura, Universidad del Desarrollo,
Santiago, Chile, 18 de noviembre de 2008.
La Mano. Intrpretes: Roberto Poblete y Otras obras de teatro estrenadas:
Pedro Vicua.
Csar y Esperaron el amanecer. (1 representacin)
Sala de Teatro Independiente de Chipre
(TICH), Colombia, 27 de junio de 2008. El Prestamista. (10.000 representaciones)
La Mano. Direccin: Rodrigo Carreo.
La Torre de Marl. (280 representaciones)
Teatro x la Identidad, Compaa La
Regadera, Catalunya, Espaa, 2007. La El Estafador Renato Kauman. (140 representaciones)
Mano. Intrpretes: Jose Sbado, Yago
Morera. Direccin: Rafa Cruz. Su Excelencia el Embajador. (150 representaciones)

Aula Mxima, Universidad de Manizales, La Muela del Juicio Final. (100 representaciones)
Colombia, octubre 31 de 2007. La Mano.
Director: Rodrigo Carreo B. Demencial Party. (60 representaciones)
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Alicia en el Pas de las Zancadillas. (300 representaciones) LA CRTICA

Los Pianistas Mancos.

Al diablo con todo. (550 representaciones)

No vote por m. (550 representaciones)

T te lamentas, de qu te lamentas. (400 representaciones)

Con la camiseta puesta. (500 representaciones)

Las ltimas cuatro producciones teatrales nombradas, con Coco Legrand como Obras bien construidas. Calan en el pblico para hacerlo rer primero y pensar despus.
actor principal, fueron vistas por ms de 2.000.000 de espectadores, cifra que revela Fernando Kri. La Tercera.
el fenomenal xito que tuvieron dichas obras, constituyndose en todo un hito Una pequea joya de humor negro... Su comicidad negra es irresistible...
para el mbito teatral chileno. Critilo. El Mercurio.

Fernado Josseau consigue una vez ms impactar con un enfoque y temtica altamente perso-
nal, desarrollada y ofrecida de modo inquietante y de una originalidad indiscutible.
Yolanda Montecinos. Las ltimas Noticias.

En abierto tono de comedia, con dilogos ingeniosos que hacen rer mucho, la obra se valoriza
doblemente por la actuacin, que llega a gran altura.
Revista Qu Pasa.

Es un estreno de lujo. Josseau es un maestro en smbolos.

Mara Eugenia di Domenico. La Segunda.

Muy bien interpretada... Josseau vuelve a realizar su hazaa de El Prestamista. Calidad y

originalidad como para triunfar en cualquier pas.
Marina de Navasal. La Tercera.

La obra ha sido creada con el ms alto sentido crtico social.

Rene Vergara. Revista del Domingo. El Mercurio.

Gran parte del xito descansa en la excelente actuacin de Jung-Ferrada-Duvauchelle.

Revista Paula.

Tennyson Ferrada se luce por partida doble.

Elga Prez Laborde. Revista Eva.

Las obras livianas tambin hacen pensar.

Gonzalo Orrego. La Patria.
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CRTICA DE YOLANDA MONTECINOS al seor EZE resultan algo forzados y la intencin de rubricar lo inslito del texto
resulta demasiado evidente.
La Gallina muestra como motor central el sexo conictivo en una pareja exte-
riormente realizada, cuyo ritmo de vida se ve perturbado por un factor extrao: un
sabio tambin fuera de serie, premio Nobel en su especialidad y adems, vctima en
El cuadro algo pobre de la dramaturgia chilena que escarmena e incide en el humor ciertos perodos de un frenes ertico. Nuevamente aqu es Tennyson Ferrada quien
frvolo y sosticado, sin mayor profundidad, se enriquece de manera evidente con sita la obra y la intencin profunda y seria del autor en su justo plano, entregando
este aporte que provoca en el espectador reacciones bastante curiosas. Es la persona- de paso, una cantidad considerable de elementos que sugieren y provocan diversas
lidad del autor, en el que reconocemos toques de un pesimismo sarcstico emparen- reacciones en el espectador. l es quien logra mostrar fsica y espiritualmente un pro-
tado con la mejor forma de lo macabro. Alejandro Jodorowsky lleva esta tendencia ceso de desintegracin, de desmoronamiento que le convierte de un oreciente bur-
hasta lo demencial y ha conseguido con ella un sitio no precisamente envidiable, pero gus en un aniquilado individuo que terminar en crisis fatal. El actor consigue este
s importante en el campo de la creacin de nuestros das, en su caso, en el cine. proceso breve y agotador con una entrega absoluta y en un instante nal, cuando se
Fernando Josseau, autor de este xito mundial llamado El Prestamista, ha desa- siente metamorfoseado en una gallina, ya no hay espectadores que ran desemboza-
rrollado aquella aguda y en cierta medida amarga visin del mundo que Ral Mon- damente en la sala.
tenegro, verdadero malabarista de la escena, le llevara y difundiera en gloria y fama Mara Elena Duvauchelle no logra el mismo xito en el mismo plano, esto es,
merecidas por diversos pases. La misma carcajada algo siniestra, el franco espritu mostrar su condicin de mujer no realizada como tal y tras la extraa relacin con
de crtica y la audacia formal, estn presentes de estas dos alegres tragedias de las el profesor Lamertier, un orecimiento tambin progresivo como una libertad y un
calle Cipreses, La Mano y La Gallina. mundo conquistado y revelado. La actriz se mantiene mejor en el plano cmico so-
El autor ofrece en la primera una fbula macabra de la desinteligencia, ninguna sticado y en algunos matices menos exigentes, proporcionando de todas formas un
comunicacin y estudiada inutilidad de organismos, entidades e instituciones que se trabajo serio e inteligente, dentro de sus lmites ya sealados.
supone han surgido para proteger, defender y servir al hombre. El seor EZE, con su Julio Yung, como el extravagante profesor Lamertier resulta irresistible, brutal
disminucin fsica involuntaria, expone y expresa esta situacin frente al Inspector y profundamente cmico. Proporciona tambin un personaje de matices ms bien
Prestley. En cierta medida, este dilogo con elementos expresionistas, maestro en romos, pero adems, aporta en esta obra su vigor personal, su irrefrenable condicin
cuanto a rplica y efectos bien graduados, despierta ecos de todo tipo en el especta- de histrin vigoroso y de tonos mayores, gruesos, pero de reaccin segura entre el
dor, incluso en aqul que sale convencido de haber asistido a una comedia reidera pblico. Una produccin cuidada, consonante con el espritu de ambas obras y una
algo extravagante, pero de todas maneras escrita para su solaz simple y digestivo. sala con ambiente que se suma a la escena local, ponen el marco justo, sin olvidar
Josseau lleva su capacidad de sntesis y su afn casi manaco por o depurado, a desde luego, una platea con apreciable cantidad de espectadores. Todo ello comple-
emplear en esta parbola de La Mano slo a dos actores, y en una segunda obra a menta los innegables atractivos de esta obra cuyo punto mximo, insistimos, es el
tres. Unidad de lugar, escenarios muy simples, para que el teatro sea esto: un juego autor.
inteligente, sugerente y distinto de actores y texto. La forma de trabajar el dilogo
tiene bastante lo mejor en realidad de los buenos teleteatros y de algunos lmes
Las ltimas Noticias, viernes 8 de marzo de 1974.
jvenes que son ms arte que industria y por fortuna encuentra en la sensibilidad
y las herramientas expresivas de un actor sobrio, natural y de positiva inteligencia
como Tennyson Ferrada, su mejor instrumento. Cmo de otra forma, podra resultar
espantosamente normal el que un hombre sufra la amputacin de su mano derecha
cuando ha querido probar con ella si llueve o no? Ferrada, inmvil en su silla sr-
dida, impotente y en progresiva aniquilacin, previsible ya desde la partida para el
pblico, es un smbolo aterrador o audaz, frente a la inutilidad del Inspector Prestley.
Este ltimo, tiene en Julio Yung, el interprete exteriormente perfecto, estableciendo
el pibot preciso y graduando sus peroratas con efecto de irresistible comicidad sobre
su cliente fuera de serie. De alguna forma, sus movimientos y sus actitudes frente
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CRTICA DE EDUARDO GUERRERO carse la inoperancia del sistema policial y, ms que nada, la burocratizacin de un
DOS ANIQUILAMIENTOS INCONCEBIBLES: UNA SOTERRADA CRTICA sistema que debiera organizarse de una forma muy diferente a la que se vislumbra
en escena. A pesar de que toda la polica del mundo ha estado preocupada de su
mano, no se descu bre el paradero de ella (el inspector insina que pudo ser llevada
al extranjero, con el n de cometer un crimen en una ciudad lejana) ni menos del cau-
sante del hecho; ms aun, veinte das despus le cortan la otra mano, y dos semanas
Una forma de paliar la escasez dramatrgica en nuestro pas es, por un lado, volver ms tarde, la cabeza. La situacin en s es algo ms que macabra y tenebrosa; alcanza
continuamente a reestrenar obras que en su momento, por determinadas circuns- incluso un tono delirante. Estos calicativos que nos merece el planteamiento de la
tancias, tuvieron una aceptacin mayoritaria del pblico. Esto, adems, plantea un situacin dramtica, vienen reforzados por la actitud del inspector de polica, pues
desao en la concepcin del montaje suponiendo que, para bien o para mal, han constantemente resaltan en l acciones muy bien acompaadas por sus nerviosos
existido cambios en la valoracin global del mismo por el eterno problema de la desplazamientos en torno al victimario que dan a entender la presencia de una
vigencia del producto artstico y su aceptabilidad en un medio que, en estos ltimos serie de desequilibrios squicos. De alguna forma, este hecho puntual no es ms que
aos, ha experimentado notables transformaciones. A partir de esto, obras como La una posibilidad como tantas otras que tiene el inspector para explayarse, en una
mano y la gallina (Fernando Josseau), reestrenada en la sala El ngel, pueden valo- dialctica conformada por un concentrado barroquismo, y dar rienda suelta a sus
rarse en una signicacin que va ms all de la obra en s; en este caso especico, la habituales sarcasmos, haciendo de por medio gala de un extrao humor negro como
obra de Jousseau se constituy en una de las obras teatrales de mayor permanencia cuando, por ejemplo, le pregunta a Benigno si conoce el concierto para la mano iz-
en el ao 1974, a pesar de que su humor y su concepcin dramtica llegan al lmite, quierda, de Ravel, pues en ese momento an conserva dicha mano.
con una sutileza demostrativa de un buen manejo de la escritura, de un absurdo que En la segunda historia, tambin asistimos a un aniquilamiento, aunque ahora con
puede degenerar en la incomprensin ms radical de lo que se proyecta en el esce- un ms marcado tono pattico, por las circunstancias y la forma del planteamiento
nario. escnico: la supuesta estabilidad de un matrimonio de clase media, con quince aos
La mano y la gallina est conformada por dos breves piezas teatrales, las cuales de casados, queda un da a mal parar cuando ella, en primer lugar, es atacada en la
tienen un subttulo comn: calle por un vecino, el profesor Lamertier, y, posteriormente, cuando el marido ha ido
O las alegres tragedias de la calle Cipreses. Independiente de que ambas histo- a la casa del profesor a pedirle explicaciones, es violada en su propio living (muy al
rias ocurran en la misma calle Cipreses, lo que es un hecho secundario, es necesario estilo giorgiano) por Lamertier. Sin dejar a un lado lo sintomtico que es ahondar en
constatar lo paradoja] del subtitulo, alegres tragedias, en consonancia con la forma las razones que pueda tener una eminencia, como lo es el profesor Lamertier, incluso
en que las dos historias son resucitas. De alguna manera, esto viene a conrmar una Premio Nobel en su especialidad, para realizar tales exabruptos manuales, en el
lnea temtica afn en Josseau, una lnea muy cercana a un teatro del absurdo cuya fondo dicho personaje est al servicio de un cuestionamiento an mayor, un cues-
principal caracterstica sera, en este caso, apropiarse de situaciones dramticas en tionamiento, en lo general, del matrimonio como institucin y, en lo particular, de la
un contexto social determinado para auscultar en profundidad, a travs de relaciones poca capacidad que tiene el marido para asumir en una forma conveniente la pro-
aparentemente ilgicas y desprovistas de sentido, las motivaciones que dan cuenta blemtica planteada, ya que no da fe a lo que su esposa le cuenta aterrorizado por el
de las conductas de los diversos personajes. temor a enfrentarse con la verdad. El nal es grotesco: el marido se ha transformado
En la primera historia, asistimos al progresivo aniquilamiento fsico, hasta su pos- en gallina y muere al disparrsele el arma con la cual iba a vengarse; ella, a su vez,
terior asesinato, de un viejo solitario (viudo hace cinco aos): en efecto, un da cual- al comunicarse con la polica es bastante explcita: Comunqueme con el inspector
quiera, Benigno Zeta Valdivia decide ir al teatro a ver una adaptacin de El proceso Priestley por favor (...) han asesinado a una gallina.
de Kafka, ante lo cual saca una mano por la ventana con el objeto de saber si llueve Jorge lvarez tiene a su cargo el papel del inspector y del profesor Lamertier, res-
o no; sorpresivamente, alguien le corta la mano. La accin dramtica comienza pectivamente. Por la conformacin de las historias, resalta mucho ms en el primer
cuando el inspector de polica interroga al infortunado hombre para interiorizarse personaje, dndole a cada accin y a cada gesto el tono adecuado para proyectar sus
de los mviles que pudieron motivar tal hecho criminal. A partir de ese momento manas y sus desbordes impulsivos y frenticos: llena el espacio con sus movimien-
y durante todo el transcurso de la pieza el papel protagnico ser asumido con tos portadores de precisos signicados, en un estado casi de tensin que le permite
plenitud por el inspector, aduciendo razones y sinrazones para justicar y justi- matizar diversos comportamientos. Por su parte, Tennyson Ferrada es Benigno Zeta
24 FERNANDO JOSSEAU

y el marido-gallina: en el primer caso, slo sirve su presencia para facilitar el his- ARTCULOS DE PRENSA
trionismo del inspector, en una actitud entre bondadosa (muy a tono con el nombre
del personaje) e incrdula: en el segundo caso, va entregando a un personaje que,
a lo largo de la representacin, va cambiando progresivamente su accionar, a pesar
de lo sinttico de la historia. El papel de esposa es asumido por Muriel Cornejo: por
momentos, su personaje es poco creble, ya que carece de fuerza dramtica su des-
plazamiento arriba del escenario; en todo caso, quizs dicha actitud pueda obedecer
a lo poco creble de la historia en s. La escenografa (muy simple en el primer caso y
de sobria elegancia en el segundo) y la direccin de la obra se ajustan a dar nfasis al
protagonismo de los personajes.
La mano y la gallina condensa en breve tiempo dos historias tremendstas, con
mucho de absurdo, de humor negro y con la necesidad de encontrar a un pblico
dispuesto a aceptar una propuesta de este tipo.

El Mercurio, domingo 1 de febrero de 1987.

34 FERNANDO JOSSEAU

ALGUNOS PROGRAMAS DE
LA MANO Y LA GALLINA
36 FERNANDO JOSSEAU LA MANO Y LA GALLINA 37
 LA MANO
Personajes
Seor Zeta
Inspector

Bob Borowicz
Polica

Julio Jung / Inspector

Tennyson Ferrada / Seor Zeta

 Primera Parte
Bob Borowicz

El escenario est a oscuras. Luego, lentamente, comienza a encenderse

un cenital cuyo haz de luz, circular, ilumina a un hombre sentado en una silla.
No hay mobiliario. Slo la oscuridad de una cmara negra.
El hombre sentado en la silla es un tipo ms bien pequeo, delgado, plido,
cuyo rostro reeja sensibilidad, bondad y timidez: un hombre incapaz de hacer
dao alguno. Su voz es ms bien apagada y, slo a veces, se agita nerviosamente
en su silla. En sus ojos, ms que rencor, hay una sombra de estupor.
Un inspector de polica lo est interrogando.

SEOR ZETA: As es. Seor Inspector.

INSPECTOR: Muy bien, podra usted resumir los hechos, exactamente como
sucedieron?
SEOR ZETA: (Despus de pensarlo un segundo). Bueno, se reere usted a una parte
de los hechos... pues yo realmente no vi nada. Slo puedo hablar de los hechos
que me sucedieron a m... la otra parte, sucedi a travs de la ventana y...
INSPECTOR: (Algo molesto). Bien. Entonces, cunteme los hechos desde su punto de
vista...

El Seor Zeta se agita en su silla. Lleva un brazo en cabestrillo. Es posible advertir que
le falta una mano.

SEOR ZETA: Me haba vestido para ir al teatro... Al teatro. Soy acionado al teatro,
seor.
INSPECTOR: Qu obra pensaba usted ir a ver?
SEOR ZETA: Una adaptacin de El proceso de...