Reproducci - N de Microorganismos Eficientes (EM y Cepas) de Manera - Artesanal para Uso Agropecuario.
Reproducci - N de Microorganismos Eficientes (EM y Cepas) de Manera - Artesanal para Uso Agropecuario.
Reproducci - N de Microorganismos Eficientes (EM y Cepas) de Manera - Artesanal para Uso Agropecuario.
INTRODUCCIÓN
El actual modelo de producción agrícola ha promovido el uso masivo de productos
de síntesis química como la única y mejor alternativa para el control de plagas y
enfermedades, así como para nutrición en los cultivos, como consecuencia nos ha
llevado a tener diferentes problemas ambientales y humanos.
Sin embargo, dentro de las alternativas en el manejo de plagas y enfermedades se
presentan diferentes métodos, uno de ellos es el control biológico y uso de EM. El
control biológico intenta restablecer el perturbado equilibrio ecológico, mediante la
utilización de organismos vivos o sus metabolitos, para eliminar o reducir los daños
causados por organismos perjudiciales, por otro lado los EM, están compuestos por
organismos benéficos y altamente eficientes. Estos microorganismos no son
nocivos, ni patógenos, ni genéticamente modificados, ni químicamente sintetizados.
Estos microorganismos no son nocivos, ni patógenos, ni genéticamente
modificados, ni químicamente sintetizados., intervienen en los ciclos de los
nutrientes, regulan la dinámica de la materia orgánica, secuestran carbono y regulan
la emisión de gases invernadero, modifican la estructura física del suelo, actúan
sobre el régimen del agua y la erosión, y en consecuencia mejoran la eficiencia en
la adquisición de nutrientes por parte de los cultivos. El uso de microorganismos
eficientes fue desarrollado por el profesor Higa de Japón en los años 80 y está
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mostrando resultados que se comparan con una nueva revolución en la agricultura
(Mau, 2011).
REVISIÓN DE LITERATURA
Se denomina de forma generalizada la “mezcla de microorganismos efectivos”,
término acuñado por Teruo Higa, quien ha desarrollado en más de veinte años de
investigación, esta mezcla de microorganismos efectivos, que resultó ser un recurso
polifacético en innumerables campos de la vida cotidiana: en la agricultura, la
economía del agua, la construcción, la energía, la industria, la hostelería, el hogar y
la medicina (Mau, 2011).
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que reciben tratamientos EM favorecerá el desarrollo de los antiparasitarios,
mientras que tiende a ahuyentar los parásitos (Mau, 2011).
Las bacterias son los organismos más abundantes en el suelo y en el dosel vegetal.
La mayoría de los organismos usados como benéficos en la agricultura, han sido
aislados del suelo, por lo que el número de bacterias que interactúan con los cultivos
agrícolas, están en función de: la estación del año, tipo de suelo, fuentes de oxígeno
en el suelo, grado de labranza y fertilización, así como de la presencia de plantas
con raíces de dichos suelos (Lynch, 1983)
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Existe un grupo de microorganismos, que incluye a los hongos entomopatógenos,
los cuales han demostrado tener potencial para infectar o matar a cualquier
insecto en algunas de sus fases de ciclo biológico; no produce efecto inmediato
como los productos químicos, pero una vez que están en su ambiente dado, pueden
sobrevivir, incrementarse e infectar a los insectos (Alatorre, 1998).
Mecanismo de infección
Los hongos son microorganismos unicelulares (levaduras) o multicelulares
(especies filamentosas), que constan de células alargadas provistas de una pared
que contiene celulosa y quitina, además de otros carbohidratos y proteínas. Estas
estructuras vegetativas son llamadas hifas. Después de la infección exitosa de un
hospedante, se producen asexualmente estructuras reproductivas conocidas como
esporas o conidias que ayudan a la diseminación del patógeno. Los hongos poseen
una gran variabilidad genética y un amplio rango de hospedantes (Alcides, 2012).
Los hongos entomopatógenos se conocen desde hace dos milenios, cuando los
Chinos identificaron especies de Cordyceps e Isaria de especímenes del gusano de
seda y una especie de cicada (Chicharra o cigarra). Agostino Bassi en 1836 relata
un tratado sobre la enfermedad del gusano de seda, la muscardina, cuyo agente
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causal era Bauveria bassiana. Este hecho marca el inicio de la Patología de
Insectos. El desarrollo y aplicabilidad de la patología de insectos, se inicia en 1879
con Hagen quien estudia el posible uso de hongos para el control de insectos
(Vergara, 2004).
Una vez dentro del insecto, el hongo prolifera formando cuerpos hifales secundarios,
que se ramifican en la procutícula conformada principalmente de fibrillas lameladas
de quitina embebidas en una matriz proteínica que actúa como cubierta física
protectora ante las secreciones extracelulares del patógeno. Posteriormente, los
cuerpos hifales se encuentran con la capa epidérmica y con su respectiva
membrana basal y se disemina a través del hemocele. Así, invaden diversas
estructuras como tejidos musculares, cuerpos grasos, tubos de Malpighi,
mitocondrias, hemocitos, retículo endoplásmico y membrana nuclear. Se ha
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sugerido que iones divalentes como el Ca +2 y el Mg+2 reducen las fuerzas de
repulsión electrostática de la superficie de la del insecto, por lo que pueden afectar
su hidrofobicidad y promover la adhesión pared celular fúngica-cutícula, creando
condiciones favorables para el establecimiento de la espora y la subsecuente
invasión del hospedero (Pucheta, 2006).
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grey. Las plantas de todos los tratamientos, a excepción del testigo negativo, fueron
inoculadas de forma mecánica con CMV a los 16 días después de la siembre y a
los 36 días después de la inoculación de evalúo la concentración viral relativa
mediante la técnica de DAS-ELISA, el peso de biomasa fresca del follaje y de raíz.
Las plantas de calabacita tratadas con SC, BS + AH y M tuvieron el mayor peso de
biomasa fresca de follaje y de raíz. Los tratamientos SC, TN y M fueron negativos
al CMV en la prueba de DAS-ELISA tanto en la parte aérea como en la raíz, mientras
que TP, BS + AH y ASA fueron positivos siendo el tratamiento TP el que tuvo
mayores valores de absorbancia (Ruvalcaba, 2008).
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Módulo de reproducción artesanal de microorganismos
1. Reproducción de cepas de microorganismos benéficos
La reproducción artesanal de cepas de microrganismos es un método sencillo y
barato. Lo primero que se debe de hacer es conseguir la cepa del microorganismo
con un laboratorio certificado como orgánico, para después reproducirlos de manera
artesanal de la siguiente manera:
Materiales:
Cuarto o lugar de reproducción oscuro.
Garrafas de 50 lts.
25 litros de agua sin cloro
1 litro de microrganismos de la cepa a reproducir
1 kg de Melaza
1 kg de Almidón (maíz molido, maseca, arroz).
1 litro de Leche o suero
Procedimiento: Cabe de mencionar que se tiene que tener en una garrafa un solo
microorganismo. En las garrafas se depositan 25 litros de agua sin cloro, después
se agrega la cepa del microrganismo, posteriormente se le agrega un litro de leche
o suero, un kg de melaza, un kg de maíz molido o maseca y un litro de
microorganismos del rumen (los cuales se reproducen de la misma manera).
En 21 días estos microorganismos están listos para ser utilizados, pero en el módulo
se implementando el uso de reactores para acelerar su reproducción y en vez de 21
días se reproducen en 5 días (Noriega, 2012).
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microorganismos son llamados comúnmente “Microorganismos de Montaña” o MM
(Paniagua, 2009).
Preocupados por utilizar los recursos que se tienen disponibles, se empezó también
a reproducir Microorganismos de Montaña (MM), nativos del lugar a los que
denominamos “Consorcio”. Los microorganismos de montaña son: hongos,
bacterias, micorrizas, levaduras y otros organismos benéficos. Los cuales viven y
se encuentran en el suelo de montañas, bosques, lugares sombreados y sitios
donde en los últimos 3 años no se han utilizado agroquímicos (Paniagua, 2009).
Estos microorganismos habitan y se desarrollan en un ambiente natural. En el suelo
se reconocen fácilmente por la formación de micelios blancos debajo de la
hojarasca. Para asegurar mayor efectividad de los microorganismos en el suelo es
recomendable que se tomen de la zona cercana al sitio donde se van a utilizar; ya
que están adaptados al tipo de materia orgánica, temperatura, humedad y otras
condiciones del clima. Para recolectar los microorganismos de montaña de los
lugares seleccionados, se aparta la capa de hojas de la superficie, luego debajo de
esta se toma la hojarasca en descomposición, que contiene los microorganismos, y
luego la colocamos dentro de bolsas o sacos. Luego de haber recolectado los
microorganismos de montaña (MM) se procede a la reproducción, en medio sólido
y posteriormente en medio líquido (Paniagua, 2009).
Reproducción en fase solida: Materiales: tambor de 200 litros, 10 kg de tierra de
montaña, 10 kg de harina de maíz, 10 lts de leche o suero, 10 kg de melaza, agua
suficiente (Paniagua, 2009).
Procedimiento: En un piso limpio de cemento, se mezcla bien la tierra de montaña
con el maíz. Se moja la mezcla con el agua de melaza removiendo constantemente
hasta que la mezcla llegue al punto de la prueba del puño (ni muy aguado ni
tampoco debe desmoronarse). Se coloca la mezcla en el tambor, apisonando bien
hasta llenarlo (Paniagua, 2009).
La finalidad de apisonar la mezcla es sacar todo el aire del recipiente, pues de esa
manera se crean las condiciones para la reproducción de los MM (reproducción
anaeróbica). Cerrar herméticamente y dejar fermentar bajo sombra. Después de 30
a 35 días, se puede activar en fase líquida (Paniagua, 2009).
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Reproducción en fase liquida: Materiales: tambor de 200 litros con tapa hermética,
1 galón de melaza, 4 kg de microorganismos de montaña sólido, un costal limpio
(se usara como colador), 100 litros de agua sin cloro (pozo, manantial o lluvia)
(Paniagua, 2009).
Procedimiento: Se depositan los 100 litros de agua y el galón de melaza al tambor.
Se pone el costal sobre el tambor para que sirva de colador y se agrega los
microorganismos de montaña sólidos. Se debe mantener el recipiente bajo sombra.
A los 4 días se desarrollan hongos, a los 8 días las bacterias y a los 15-25 días las
levaduras. El agua irá tomando un color café y un olor a fermentado (Paniagua,
2009).
El origen de los microorganismos para su aplicación en el naranjal ha cambiado
radicalmente desde su compra comercial hace algunos años de laboratorios
especializados ($100 para 250 ml), a la adquisición en el módulo del CIIDRI de
Chapingo hasta la propia reproducción en un módulo artesanal en el rancho en San
Pablo, Papantla, Veracruz. Esto ha permitido bajar los costos de producción, así
como ha motivado hacer diferentes experimentos para encontrar nuevos y mejores
usos.
Actualmente estamos reproduciendo 23 cepas de microorganismos: Azotobacter
spp, Bacillus subtilis, Bacillus thurigiensis, Paecilomyces fumorosus, Beauveria
bassiana, Lecanicillum lecani, Trichoderma harzianum y viridae, Trichoderma II,
Micorrizas arbusculares, Azospirillum spp, Metarhizium anisopliae, Rhizobium spp,
Bacillus megaterium, Heterhorabditis bacteriophora, dos especies más de
Metarhizium, y microorganismos del Rumen) y 5 tipos de Microorganismos de
Montaña o también llamados “Consorcios” (Montaña de Loxicha, Montaña de Geño,
consorcio San Pablo, consorcio Tabasco cero, consorcio Tabasco 1 y un complejo
de las 22 cepas.
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10. BIBLIOGRAFÍA
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