5 - El Átomo de Hidrógeno
5 - El Átomo de Hidrógeno
5 - El Átomo de Hidrógeno
El átomo de hidrógeno
Apéndices
5.A El Laplaciano y los operadores de momento angular
en coordenadas esféricas 173
5.B Reglas de conmutación de los operadores momento
angular 176
5.C Funciones propias para átomos hidrogenoides 178
143
144
5.1 La ecuación de Schrödinger en tres dimensiones
Hasta ahora, sólo hemos resuelto la ecuación de Schrödinger para una serie de
problemas unidimensionales. En este capítulo, generalizaremos el tratamiento para
poder analizar el problema del movimiento en tres dimensiones de una partícula no-
relativista sometida a un potencial V ( r ) independiente del tiempo. Ya vimos que la
ecuación de Schrödinger dependiente del tiempo en tres dimensiones se escribía en la
forma
ℏ2 2 ∂
− ∇ ψ ( r , t ) + V ( r , t )ψ ( r , t ) = i ℏ ψ ( r , t ) .
2m ∂t
Como estamos interesados en encontrar soluciones estacionarias, en problemas para los
que el potencial V ( r ) no depende del tiempo, nos interesa resolver la ecuación de
Schrödinger independiente del tiempo:
ℏ2 2
− ∇ ψ ( r ) + V ( r ) ψ ( r ) = Eψ ( r ) .
2m
Ésta es una ecuación diferencial de segundo orden en derivadas parciales, en contraste
con el caso unidimensional, para el cual la ecuación de Schrödinger independiente del
tiempo es una ecuación diferencial ordinaria de segundo grado. Como consecuencia, la
ecuación de Schrödinger aplicada a problemas tridimensionales sólo se puede resolver
en unos pocos casos sencillos. En particular, la energía potencial ha de ser de tal forma
que se pueda emplear la técnica de la separación de variables. De esta manera, el
problema que originalmente era en tres dimensiones, se reduce a problemas más simples
en dimensiones más bajas.
En este capítulo, vamos a resolver la ecuación de Schrödinger independiente del
tiempo para el átomo de hidrógeno, para el cual se puede suponer con muy buena
aproximación un potencial central. Es decir, V ( r ) sólo depende del módulo del vector
r . En este caso, la ecuación de Schrödinger puede separarse en coordenadas esféricas, y
como en el caso de la Mecánica Clásica, el momento angular juega un papel muy
importante en la resolución del problema.
Una vez hayamos encontrado la parte espacial, ψ n ( r ) , de los estados estacionarios,
las soluciones dependientes del tiempo serán, como en el caso unidimensional, de la
forma
E
ψ n ( r , t ) = ψ n ( r ) exp −i n t .
ℏ
145
z
r
θ x = r sin θ cos ϕ
y = r sin θ sin ϕ
y z = r cos θ
ϕ
x
Figura 5.1. Coordenadas esféricas expresadas en función de las coordenadas
cartesianas.
146
∂ ∂
Lx = −i ℏ − sin ϕ − cot θ cos ϕ
∂θ ∂ϕ
∂ ∂
Ly = −i ℏ cos ϕ − cot θ sin ϕ
∂θ ∂ϕ
∂
Lz = −i ℏ
∂ϕ
y después de un poco de álgebra se llega a que
L2 = L2x + L2y + L2z
1 ∂ ∂ 1 ∂2
= −ℏ sin θ +
2
sin θ ∂ θ ∂ θ sin 2 θ ∂ ϕ 2
Por lo tanto, L2 no depende de r , y además ∇ 2 puede expresarse en función de L2
como
1 ∂ 2 ∂ L2
∇2 = 2 r − 2 2 .
r ∂ r ∂ r ℏ r
Y ( θ ,ϕ ) R(r) ∂ r ∂r
Como el primer miembro depende sólo de las variables angulares y el segundo de la
variable radial, ambos deben ser iguales a una constante de separación, que por
conveniencia supondremos igual a l ( l + 1) ℏ2 (este valor se justificará más adelante).
L2 Y ( θ , ϕ ) = l ( l + 1) ℏ 2 Y ( θ , ϕ )
ℏ 2 ∂ 2 ∂R ( r )
+ 2mr E − V ( r ) = l ( l + 1) ℏ
2 2
r
R (r) ∂ r ∂r
La segunda de estas dos ecuaciones (parte radial) se suele escribir en la forma
147
ℏ2 d 2 d l ( l + 1) ℏ 2
− 2 r + V ( r ) + R (r) = E R (r) .
2m r d r d r 2mr 2
De esta manera, ambas ecuaciones están escritas en la forma de ecuaciones de valores
propios.
148
Para encontrar soluciones aceptables de la ecuación diferencial que depende de la
variable angular θ , en el rango 0 ≤ θ ≤ π , se deben hacer los siguientes cambios de
variables:
d 1 d
w = cos θ → =−
dw sin θ d θ
Pl m ( w ) = Θl m ( θ )
A partir de las nuevas variables, la ecuación diferencial en θ se escribe en la forma
m2
( ) d w2
d2 d
1 − w 2
− 2 w + l ( l + 1) − Pl m ( w ) = 0 ,
dw 1 − w2
que es la ecuación diferencial asociada de Legendre. Esta ecuación es invariante bajo la
transformación w → − w , por lo tanto, las soluciones tienen paridad definida (son pares
o impares) en el intervalo −1 ≤ w ≤ 1 .
l (
w2 − 1)
−1 d
Pl 0 ( w ) = 2− l ( l !)
l
dw
P3 ( w ) = ( 5w3 − 3w )
1
P0 ( w ) = 1
2
P4 ( w ) = ( 35w4 − 30 w2 + 3)
1
P1 ( w ) = w
8
P2 ( w ) = ( 3w2 − 1) P5 ( w ) = ( 63w5 − 70 w3 + 15w )
1 1
2 8
149
( −1)
m
d l +m
Pl m ( w ) (1 − w2 ) l +m (
w2 − 1)
m/2 l
= ; m≥0
2l l ! dw
P00 = 1 P20 =
1
2
( 3w2 − 1)
P21 = −3w (1 − w2 )
1/ 2
P10 = w
P11 = − (1 − w2 ) P22 = 3 (1 − w2 )
1/ 2
Yl m ( θ , ϕ ) = Pl m ( cos θ ) ei m ϕ ; m≥0
4 π ( l + m )!
Yl − m ( θ , ϕ ) = ( −1) Yl ∗m ( θ , ϕ )
m
= δ l l ′ δ m m′
donde hemos escrito d Ω = sin θ d θ d ϕ y el símbolo ∫ d Ω significa la integral sobre
todo el rango de valores de las variables angulares θ y ϕ . También puede demostrarse
que los armónicos esféricos forman un conjunto completo, de forma que cualquier
150
función f ( θ , ϕ ) de cuadrado integrable puede desarrollarse en términos de los
armónicos esféricos
∞ m =l
f ( θ , ϕ ) = ∑ ∑ al m Yl m ( θ , ϕ ) .
l = 0 m =− l
A partir de la relación de ortonormalidad se puede demostrar que los coeficientes de la
expansión vienen dados por
al m = ∫ Yl ∗m ( θ , ϕ ) f ( θ , ϕ ) d Ω .
El comportamiento de los armónicos esféricos bajo la operación de paridad r → − r es
de especial interés. Bajo esta operación de simetría, las coordenadas esféricas ( r , θ , ϕ )
cambian de la siguiente forma:
( r , θ , ϕ )
→ ( r, π − θ , ϕ + π ) ,
y si tenemos en cuenta que:
Pl m cos (π − θ ) = Pl m ( − cos θ ) = ( −1) Pl m ( cos θ )
l −m
φm ( ϕ + π ) = ( −1) φm ( ϕ )
m
entonces
Yl m ( π − θ , ϕ + π ) = ( −1) Yl m ( θ , ϕ )
l
Y00 =
1
4π
Y20 =
5
16 π
( 3 cos2 θ − 1)
3 15
Y10 = cos θ Y2±1 = ∓ sin θ cos θ e ± i ϕ
4π 8π
3 15
Y1±1 = ∓ sin θ e ± i ϕ Y2± 2 = sin 2 θ e ±2 i ϕ
8π 32 π
151
radial R ( r ) . Podemos entender este resultado si tenemos en cuenta que un potencial
central V ( r ) sólo depende de la variable radial r , por lo tanto
V ( r ) , L2 = V ( r ) , Lz = 0 .
l =1
m = 0 m =1
θ
l=2
m = 0 m =1 m=2
l =0 m=0
l =3
m = 0 m =1 m=2 m=3
Por otro lado, es fácil demostrar que L2 y Lz conmutan con el operador energía
cinética, en consecuencia
H , L2 = [ H , Lz ] = 0 ,
además L2 , Lz = 0 , por lo tanto, H , L2 y Lz forman un conjunto de operadores que
conmutan y en consecuencia, existe un conjunto de funciones propias
ψ ( r , θ , ϕ ) = R ( r ) Yl m ( θ , ϕ ) , que lo son simultáneamente de los tres operadores.
Los espectros de valores propios de los operadores L2 y Lz son discretos, lo que
implica que estas magnitudes están cuantizadas. Las condiciones de cuantización de L2
y Lz se pueden visualizar en términos del modelo vectorial que se muestra en la Fig.
5.3. De acuerdo con este modelo, el vector momento angular L , de longitud l ( l + 1) ℏ
precesiona alrededor del eje z , con 2l + 1 posibles orientaciones. La proyección del
vector L sobre el eje z , para cada una de estas orientaciones, es m ℏ , con
m = −l , −l + 1,… , l − 1, l . De esta forma, puede imaginarse que el vector L está sobre la
superficie de un cono de altura m ℏ , con el eje z como eje de simetría. Todas las
orientaciones del vector L sobre la superficie del cono son igualmente probables. En
cualquier caso, hay que tener en cuenta que éste es sólo un modelo vectorial construido
para visualizar las condiciones de cuantización de L2 y Lz , y no tiene porqué
representar ninguna situación real en el sistema cuántico.
152
Figura 5.3. Modelo vectorial para visualizar las condiciones de cuantización de
L2 y Lz .
Resuelta la parte angular de la función de onda, sólo falta encontrar la parte radial
R ( r ) para cada expresión particular del potencial central V ( r ) , con la restricción
adicional de que l ha de ser un entero positivo o cero. Antes de hacer eso, es
interesante hacer alguna consideración sobre la paridad de la función de onda completa
ψ ( r , θ , ϕ ) = R ( r ) Yl m ( θ , ϕ ) . Dado que V ( r ) es un potencial central que sólo depende
de r , la operación paridad, P , que cambia r por − r , no modifica el Hamiltoniano y
en consecuencia P y H conmutan. Como resultado existe un conjunto de funciones
propias que lo son a la vez de P y de H . Si aplicamos el operador paridad a la función
de onda ψ ( r , θ , ϕ ) , tenemos que
153
P ψ ( r , θ , ϕ ) = R ( r ) ( −1) Yl m ( θ , ϕ ) = ( −1) ψ ( r , θ , ϕ ) ,
l l
por lo tanto, los estados ψ ( r , θ , ϕ ) tienen paridad definida que coincide con la del
número cuántico l .
r = ,
r2 d r d r r d r2
podemos escribir la ecuación para la parte radial en la siguiente forma
154
ℏ2 d ( r R ) l ( l + 1) ℏ 2
2
− + V ( r ) + r R = E r R.
2 µ d r2 2 µ r2
Esta última ecuación es idéntica a la ecuación de Schrödinger independiente del tiempo
en una dimensión para una función de onda
uE l ( r ) = r RE l ( r ) ; r ≥ 0
y un potencial efectivo
l ( l + 1) ℏ 2
Vef ( r ) = V ( r ) + ,
2 µ r2
que contiene el potencial central V ( r ) más la barrera de potencial repulsiva centrífuga
l ( l + 1) ℏ 2 / 2mr 2 .
El potencial efectivo
l ( l + 1) ℏ 2
Ze 2
Vef ( r ) = − +
(4 π ε0 ) r 2 µ r2
se representa en la Fig. 5.4 para algunos valores de l . Para l ≠ 0 aparece una barrera de
potencial en torno al origen, que se conoce con el nombre de barrera centrifuga. Es
decir, el potencial efectivo tiene un carácter repulsivo para distancias muy cortas,
mientras que para l = 0 , el potencial diverge hacia valores negativos al aproximarnos al
origen. Este resultado anómalo para l = 0 se debe a que al haber supuesto que el átomo
está formado por cargas puntuales, éstas pueden estar, en teoría, tan cerca como se
quiera. En realidad, el núcleo, aunque es pequeño, tiene un cierto diámetro finito, que es
suficiente para evitar esta singularidad en el origen.
1
Vef ( r )
0.5
l =2
l =1
0 1 2 4 5 6
3 7
m a0
r
µ
-0.5
l =0
-1
Figura 5.4. Potencial efectivo para Z = 1 y para los valores l = 0,1, 2 , donde a0 es el
radio de Bohr. La energía está dada en unidades de e2 / ( 4 π ε 0 aµ ) , donde
aµ = ( m / µ ) a0 .
Dado que Vef ( r ) tiende a cero para valores grandes de r , la solución uE l ( r ) para
E > 0 tiene un carácter oscilatorio en el infinito, y por lo tanto, será una función propia
físicamente aceptable para cualquier valor de E > 0 . En consecuencia, para E > 0 el
espectro es continuo y no hay cuantización de la energía. Los correspondientes estados
155
no ligados juegan un papel muy importante en el análisis de los fenómenos de
dispersión entre electrones e iones. Sin embargo, en lo que sigue a continuación, vamos
a preocuparnos únicamente de los estados ligados con E < 0 .
Por otro lado, es importante remarcar que sólo buscamos soluciones de la ecuación
radial para 0 ≤ r < ∞ . En particular, debe cumplirse, por razones de regularidad, que
RE l ( r ) sea finita en el origen; por lo tanto, uE l ( r = 0 ) = 0 , ya que
RE l ( r ) = r −1 uE l ( r ) .
Para resolver la ecuación diferencial de la parte radial es conveniente introducir las
siguientes variables adimensionales:
8µE
ρ= − r
ℏ2
;E<0
Ze 2 µ
λ= −
(4 π ε0 ) ℏ 2E
En términos de las variables ρ y λ , la ecuación diferencial para la parte radial se
transforma en
d2 l ( l + 1) λ 1
− + − uE l ( ρ ) = 0 .
d ρ ρ2 ρ 4
2
156
2. Comportamiento asintótico en el infinito. La ecuación diferencia para ρ → ∞ se
reduce a
d2 1
d ρ 2 − 4 uE l ( ρ ) = 0 .
Las soluciones de esta ecuación diferencial son de la forma
uE l ( ρ ) ∼ e± ρ / 2
ρ →∞
La exponencial creciente diverge en el infinito, y en consecuencia, es una
“mala” solución. La solución físicamente aceptable es de la forma
uE l ( ρ ) ∼ e− ρ / 2
ρ →∞
157
De cualquiera de las dos expresiones anteriores se obtiene
L β0 ( ρ ) = 1
L 1β ( ρ ) = − ρ + β + 1
L2 ( ρ ) =
β ρ2
− ( β + 2) ρ +
( β + 2 )( β + 1)
2 2
Son útiles las relaciones de recurrencia
( n + 1) Lkn +1 ( x ) = ( 2n + k + 1 − x ) Lkn ( x ) − ( n + k ) Lkn −1 ( x )
xLkn′ ( x ) = nLkn ( x ) − ( n + k ) Lkn −1 ( x )
Lkn ( x ) = Lkn+1 ( x ) − Lkn+−11 ( x )
xLkn+1 ( x ) = ( n + k + 1) Lkn ( x ) − ( n + 1) Lkn +1 ( x )
Teniendo en cuenta que las soluciones con sentido físico son los polinomios
asociados de Laguerre con β y ν enteros positivos, entonces
λ =ν + l +1 ≡ n
de donde n ≥ 1 y n > l , ya que ν y l son enteros no negativos. n es el llamado número
cuántico principal. Sustituyendo en la ecuación anterior la expresión para λ , se obtiene
la condición de cuantización de la energía
2
µ Ze2 1
En = − 2 ; n ≥1
2ℏ 4 π ε 0 n 2
que es exactamente igual a la que ya obtuvimos utilizando el modelo de Bohr. Es de
destacar que la energía sólo depende del número cuántico principal, por lo tanto, cada
valor de la energía tendrá una degeneración que depende del número de estados
diferentes que pueden construirse a partir de diferentes valores de los números cuánticos
m y l compatibles con un cierto valor de n . Como para cada valor de n , l puede
adoptar alguno de los valores l = 0, 1,… , n − 1 , y para cada valor de l , existen 2l + 1
valores distintos de m , la degeneración total de un nivel de energía En es
n −1
n ( n − 1)
l =0
∑ ( 2l + 1) = 2 2
+ n = n2 .
En la Fig. 5.5 se muestra un esquema energético con los primeros niveles del átomo de
hidrógeno.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, las soluciones físicamente aceptables de la
ecuación radial son de la forma
u E l ( ρ ) = unl ( ρ ) = e− ρ / 2 ρ l +1 L2nl−+(1l +1) ( ρ )
de donde
unl ( ρ )
Rn l ( ρ ) = = e − ρ / 2 ρ l L2nl−+(1l +1) ( ρ ) .
ρ
Teniendo en cuenta que
8µ E 2 µ Ze2 1 2r
ρ= − 2 r= 2 r=
ℏ ℏ (4 π ε0 ) n na
ℏ2 ( 4 π ε 0 )
a= ≡ radio de Bohr
µ Ze 2
158
E ( eV ) l =0 1 2 3 4
n
0 ∞
-0.85 4
-1.51 3
3s 3p 3d
-3.4 2
2s 2p
-13.6 1
1s
Figura 5.5. Esquema energético para los primeros niveles del átomo de hidrógeno.
na na
donde N es la constante de normalización. La función de onda completa ψ n l m ( r ) se
escribe
l
2r 2l +1 2r
ψ n l m ( r ) = Rn l ( r ) Yl m (θ , ϕ ) = N e Ln −(l +1) Yl m (θ , ϕ ) .
− r/n a
na na
Las funciones de onda ψ n l m ( r ) forman una base ortonormal de espectro discreto de los
estados posibles del átomo de hidrógeno y por lo tanto,
∞ 2π π
ψ n l m ψ n′ l′ m′ = ∫ r dr ∫ d ϕ ∫ sin θ d θ N n l Rn lYl∗m N n′ l′ Rn′ l′Yl′ m′
2
0 0 0
= δ n n ′ δ l l ′ δ m m′
Como los armónicos esféricos ya están normalizados sobre la esfera unidad, solamente
es necesario imponer la condición de normalización sobre la parte radial Rn l ( r )
∞
2
N nl2 ∫ Rnl r 2 dr = 1
0
por lo tanto
2l 2
∞
2r 2l +1 2r 2
∫e
− 2r / n a
1= N 2
nl Ln −( l +1) r dr
0 na n a
3∞
na
ρ 2(l +1) L2nl−+(1l +1) ( ρ ) d ρ
2
−ρ
=N ∫e
2
nl
2 0
na 2n ( n + l ) !
3
= N nl2
2 ( n − l − 1) !
Para hacer esta integral hemos rebajado en una unidad el exponente de ρ 2l + 2 utilizando
la primera relación de recurrencia reordenada
159
xLkn ( x ) = ( 2n + k + 1) Lkn ( x ) − ( n + k ) Lkn −1 − ( n + 1) Lkn +1 ( x )
y la relación de ortogonalidad de los polinomios asociados de Laguerre nos permite
calcular la integral.
∞
( n + k )!
∫0 e x Ln ( x ) Lm ( x ) dx = n ! δ m n .
−x k k k
que coincide exactamente con el resultado de Bohr. Como En sólo depende del número
cuántico principal n , todos los estados con el mismo n y diferentes valores de l y m ,
tendrán la misma energía, es decir, estarán degenerados formando un multiplete. Como
ya vimos, la degeneración de cada uno de estos niveles es
n −1
∑ ( 2l + 1) = n
l =0
2
∑ ( 2l + 1) = n
l =1
2
+ 2n .
160
5.3.1 Función de distribución radial
Dn l ( r ) = ∫ d θ d ϕ ψ n l m ( r , θ , ϕ ) r 2 sin θ = r 2 Rn l ( r )
2 2
0
∫
0
proporciona la probabilidad por unidad de longitud de que el electrón se encuentre a una
distancia r del núcleo. Consecuentemente, Dnl ( r ) dr representa la probabilidad de
encontrar el electrón en el interior de una capa esférica de radio r y espesor dr .
Podemos obtener una serie de conclusiones interesantes estudiando la parte radial
Rnl ( r ) y las distribuciones radiales de probabilidad Dnl ( r ) .
4π πa n
Sólo los estados s tienen una probabilidad de presencia distinta de cero en el
origen. Esta probabilidad de presencia en el origen disminuye rápidamente como
n −3 al aumentar el número cuántico principal n . Por otro lado, la parte radial
Rn 0 de los estados s tiene la propiedad peculiar de que
161
dRn 0
≠0
dr r =0
como consecuencia de que la energía potencial diverge hacia menos infinito en
el origen. Por otro lado, sabemos que
Rnl ∼ r l
r →0
por lo tanto, para l ≠ 0 , la función de onda radial es muy pequeña en una región
alrededor del origen cuya extensión aumenta con l (en particular Rnl ( 0 ) = 0
para l ≠ 0 ). Este comportamiento se debe a la presencia de la barrera centrífuga
l ( l + 1) ℏ 2
2 µ r2
alrededor del origen, que está contenida en el potencial efectivo Vef ( r ) . Para un
n dado, la función de onda radial Rnl con la amplitud mayor en las vecindades
del núcleo es aquella que tiene l menor.
r nl m
= ∫ dr ∫ d θ ∫ d ϕ ψ n∗l m ( r , θ , ϕ ) r ψ n l m ( r , θ , ϕ ) r 2 sin θ
0 0 0
∞
= ∫ Rn2l r 3dr
0
ya que la parte angular de la función de onda está normalizada. Para evaluar la
integral vamos a hacer el cambio
2r
ρ= ,
an
de forma que
( n − l − 1)! 4 ∞ ρ 2l e− ρ L2l +1 ρ 2 a n ρ 3 a n d ρ
r nl m =
( n + l ) ! n 4 a3 ∫0 n −( l +1) ( ) (
2 2
)
( n − l − 1) ! a ∞ 2 l +3 − ρ 2l +1
( ( ) )
2
ρ ρ dρ
( n + l ) ! 4 ∫0
= e Ln − ( l +1)
r nl m
puede escribirse como
162
( n − l − 1)! a ∞ ρ 2l +1e− ρ ρ L2l +1 ρ 2 d ρ
r nl m
=
( n + l ) ! 4 ∫0
( n−(l +1) ( ))
( n − l − 1)! a 2 n − l − 1 + 2l + 2 2 ( n − l − 1 + 2l + 1)!
= ( ( ) )
( n + l )! 4 ( n − l − 1)!
2 ( n − l − 1 − 1 + 2l + 1) !
+ ( n − l − 1 + 2l + 1)
( n − l − 1 − 1)!
2 ( n − l − 1 + 1 + 2l + 1) !
+ ( n − l − 1 + 1)
( n − l − 1 + 1)!
( n − l − 1)! a 4n 2 ( n + l )! + n + l 2 ( n + l − 1)! + n − l 2 ( n + l + 1)!
= ( ) ( )
( n + l ) ! 4 ( n − l − 1)! ( n − l − 2 )! ( n − l )!
Sacando factor común ( n + l ) !/ ( n − l + 1) ! obtenemos:
a
r nl m
= 4n 2 + ( n + l )( n − l + 1) + ( n − l )( n + l + 1)
4
= a n 2 + ( 2n 2 − 2l ( l + 1) )
1
4
1 l ( l + 1)
= n 2 a 1 + 1 −
2 n 2
Se puede observar que r n l m varía como n 2 , pero también presenta una
dependencia en l . Para l = 0 (estados s de simetría esférica)
3
r n 0 0 = n2a .
2
En cambio, si l adopta el valor máximo posible l = n − 1 , el valor esperado de
r es:
1 n ( n − 1)
r n , n −1, m = n 2 a 1 + 1 −
2 n 2
1
= n 2 a 1 + n ≫1
→ n2a
2n
En el modelo de Bohr, el radio de las sucesivas órbitas circulares viene dado por
n2 ℏ 2 ( 4 π ε 0 )
rn = = n2a .
Z µe 2
163
3. Función de distribución radial ( Dn l ( r ) ) .
Los polinomios asociados de Laguerre L2nl−+l1−1 ( ρ ) son polinomios de grado
n − l − 1 , que tienen n − l − 1 nodos (ceros). Por lo tanto, la función de
distribución radial Dn l ( r ) = r 2 Rn2 l ( r ) tiene n − l máximos. Hemos de remarcar
que cuando l adopta su valor máximo l = n − 1 , la función de distribución radial
tiene un solo máximo. En ese caso,
1/ 2 n −1
2 3 1 2r
Rn , n −1 ( r ) = e − r / na ,
na 2n ( 2n − 1) ! na
por lo tanto:
Dn , n −1 ( r ) = r 2 Rn2, n −1 ( r )
2 3 2 2 n −2 2 n −2 -2 r / na
= 2 n −2
r e
na 2n ( 2n − 1)! ( na )
Esta función de r tiene un máximo para un valor de r que anule la primera
derivada
d Dn , n −1 2
= 0 → 2nr 2 n −1 − r 2 n e −2 r / na = 0 .
dr na
El valor rM que anula la primera derivada y corresponde al valor máximo de
Dn , n −1 ( r ) es
rM = n 2 a ,
que es precisamente el valor dado por el modelo de Bohr para el radio de las
órbitas circulares. Sin embargo, en el modelo cuántico rM debe interpretarse
como la distancia más probable. De forma general, el valor máximo de Dn l ( r )
se aleja del núcleo al incrementar el número cuántico. En las Fig. 5.6 y 5.7 se
comparan las funciones de onda radiales con las funciones de distribución radial
correspondientes.
= Rn l ( r )( −1) Yl m ( θ , ϕ )
l
= ( −1) ψ n l m ( r , θ , ϕ )
l
164
R10 r 2 R102
2
0.4
1
0.2
R20 0 1 2 3 4 r 0 1 2 3 4 r
r 2 R202
0.6 0.15
0.4
0.2 0.1
2 4 6 8 10
0 0.05
-0.2 r
0 2 4 6 8 10 r
R21 r 2 R212
0.12 0.15
0.08 0.1
0.04 0.05
0 2 4 6 8 10 r 0 2 4 6 8 10 r
R30 r 2 R302
0.4
0.08
0.2
4 0.04
0
8 12 16 r
0 4 8 12 16 r
R31 r 2 R312
0.08
0.08
0.04
0 0.04
4 8 12 16 r
-0.04
0 4 8 12 16 r
R32 r 2 R322
0.04
0.08
0.02 0.04
0 4 8 12 16 r 0 4 8 12 16 r
Figura 5.7. Parte radial de las funciones de onda y distribuciones de probabilidad
radiales para el átomo de hidrógeno.
165
de plata que atraviesan una región del espacio en la que existe un campo magnético
inhomogéneo. Esta deflexión se debe a la interacción del momento magnético intrínseco
de cada átomo de plata con el campo magnético externo. En la Fig. 5.8 se muestra una
representación esquemática del dispositivo experimental.
S
Ag
horno N
rendija pantalla
colimadora detectora
Figura 5.8. Representación esquemática del experimento de Stern-Gerlach.
166
eℏ
µB = = 9.27 × 10 −24 J/Tesla .
2me
Para un átomo cualquiera con un número de electrones arbitrario y momento angular
total J , el momento magnético viene dado por
J
µ = − g µB ,
ℏ
donde g es el llamado factor de Landé, que no estamos en condiciones de justificar
aquí. La energía potencial Em , asociada a la interacción entre el momento magnético µ
de un átomo y un campo magnético externo B , se puede escribir, en primera
aproximación, en la forma
Em = − µ ⋅ B
Consecuentemente, la fuerza que actúa sobre un momento magnético µ viene dada por
(
F = − ∇ Em = ∇ µ ⋅ B )
∂B ∂B ∂B
= ∑ µi i , ∑ µi i , ∑ µi i
i ∂x i ∂y i ∂z
Los polos que crean el campo magnético en el experimento de Stern-Gerlach están
diseñados en la forma que se muestra en la Fig. 5.8 para que sobre el haz de átomos de
plata se cumpla aproximadamente
B = ( 0, 0, B )
∂B ∂B ∂B
= =0 ; ≠0
∂x ∂y ∂z
por lo tanto, la fuerza que actúa sobre cada átomo sólo tiene componente z
∂B J z ∂B
F = 0, 0, µ z = 0, 0, − µ B g .
∂z ℏ ∂z
Esta es la fuerza responsable de la deflexión vertical del haz de átomos cuando estos
atraviesan la región de campo inhomogéneo. Por lo tanto, en el experimento de Stern-
Gerlach, se obtienen un número de manchas en la pantalla igual al de valores posibles
de J z .
El experimento de Stern-Gerlach permitió demostrar que existían átomos con
momento magnético distinto de cero y momento angular nulo (estados s). Además, en
algunos casos, se observó que el haz de átomos, al atravesar la región de campo
magnético inhomogéneo, se dividía en un número par de componentes, lo cual
implicaba un valor del número cuántico l semientero y no era explicable en el marco de
la teoría cuántica antigua. Por ejemplo, en el experimento de Stern-Gerlach realizado
con átomos de Ag se observaba la aparición de dos manchas sobre la pantalla (ver Fig.
5.9). La plata tiene un configuración electrónica de capas completas (momento angular
total igual a cero en cada una de ellas) excepto por un electrón en un estado 4s. Por lo
tanto, el momento magnético de los átomos de Ag procede de este único electrón
desapareado. Teniendo en cuanta que el momento magnético de un electrón que tiene
momento angular L es
e
µ=− L ; ( S.I.)
2me
la fuerza que experimenta el electrón al atravesar una región del espacio donde existe un
campo magnético no-uniforme paralelo al eje z es
167
µB ∂B ˆ
Em = − µ ⋅ B = − µ z B → F = −∇ ( − µ z B ) = −
Lz k
ℏ ∂z
B = f ( z ) kˆ
donde
eℏ
µB = ( S.I.)
2me
es el magnetón de Bohr para el electrón. Por lo tanto, el haz debería romperse en tantas
componentes como valores posibles de Lz ( 2l + 1) . Pero el número cuántico l siempre
adopta valores enteros, en consecuencia, ( 2l + 1) debería será un número impar. Para
que en el experimento de Stern-Gerlach con átomos de Ag se observen sólo dos
manchas en la pantalla, l debería ser 1/ 2 , lo que no es compatible con la restricción de
que l deba ser entero.
Figura 5.9. Imagen enviada por Gerlach a Neils Bohr en febrero de 1922. En ella se
comparan los resultados del experimento de Stern-Gerlach con campo (derecha) y sin
campo aplicado (izquierda).
168
introducido originalmente como un momento dipolar magnético del electrón de carácter
intrínseco, cuya proyección a lo largo del eje z sólo podía adoptar dos valores.
Dado que clásicamente un momento magnético siempre está asociado a la
existencia de corrientes eléctricas cerradas, postularemos que el momento magnético
intrínseco del electrón se debe a un momento angular intrínseco del electrón, que
llamaremos espín. Otras partículas, a parte del electrón, también tienen momento
angular intrínseco, o espín, y de hecho, los valores de éste clasifican a las partículas en
dos grupos: las que tienen espín semientero y que llamaremos fermiones (electrón); y
las que tienen espín entero y se conocen con el nombre de bosones (fotones). Por
ejemplo, el electrón, que es un fermión, tiene espín 1/ 2 , tal como se puede deducir del
experimento de Stern-Gerlach con átomos de plata: si se observan dos manchas sobre la
pantalla, entonces
1
2s + 1 = 2 → s = .
2
Teniendo en cuenta que S es un momento angular, los valores propios del operador S z
para el electrón son −ℏ / 2 y ℏ / 2 .
La relación existente entre el momento magnético asociado al espín µ S y el propio
espín S se escribe por analogía con el momento angular orbital en la siguiente forma:
e
µS = γ S,
2me
donde γ es el llamado factor giromagnético, que para el electrón adopta el valor sin
unidades
γ = −2.00232
Muchas veces, se representa el factor giromagnético del electrón como
g S = − γ = 2.00232
z
S = S ( S + 1) ℏ = 3 / 4 ℏ
ℏ 1
mS =
2 2
−e
S = 3/ 4 ℏ
me
ℏ 1
e − mS = −
µS = − g S S 2 2
2me
partícula γ
p 5.5883
n -3.8263
169
Hay que destacar que el neutrón tiene momento magnético a pesar de no tener carga
eléctrica.
Dirac demostró en 1928 que el espín del electrón se obtenía de forma natural en el
marco de la teoría cuántica relativista (la teoría de Schrödinger es no-relativista). De
esta forma derivó el valor g S = 2 , para el factor giromagnético. La pequeña diferencia
que se observa entre el valor deducido teóricamente por Dirac para g S y el valor
experimental sólo puede justificarse a partir de la interacción del electrón con su propio
campo de radiación (Electrodinámica Cuántica).
Finalmente, como el espín es un momento angular, los operadores asociados al
espín deben cumplir las mismas relaciones de conmutación que el momento angular
orbital
Si , S j = i ℏ ε i j k S k
S 2 , Si = 0
170
ψ nl m ( r , θ , ϕ ) χ1/ 2 m
2
s
representa la densidad de probabilidad de encontrar un electrón
de espín s = 1/ 2 en el punto ( r , θ , ϕ ) con tercera componente de espín ms .
Habitualmente, los espinores para el electrón se expresan en notación vectorial en la
forma
1 0
χ1 1 ≡ ; χ1 1 ≡ .
−
22 0 2 2 1
1. σ x2 = σ y2 = σ z2 = I
2. σ i σ j = i ε i j k σ k
3. σ i σ j + σ j σ i = 0
4. tr σ i = 0
5. det σ i = −1
6. Son hermíticas.
171
7. Junto con la identidad forman una base del espacio de matrices cuadradas 2 × 2
de coeficientes complejos.
8. ( A ⋅ σ ) ( B ⋅ σ ) = A ⋅ B + i ( A × B ) ⋅ σ , donde A y B son dos vectores u operadores
vectoriales, cuyas componentes conmutan con las de σ .
172
Apéndice 5.A. El Laplaciano y los operadores de momento angular en coordenadas
esféricas
∂2 f ∂ x ∂f ∂x 1 ∂f ∂ 1 ∂f
= = + x
∂x 2
∂x r ∂r ∂x r ∂r ∂x r ∂r
1 ∂f ∂r ∂ 1 ∂f
= +x
r ∂r ∂x ∂r r ∂r
1 ∂f x 2 ∂ 1 ∂f
= +
r ∂r r ∂r r ∂r
Procediendo de manera análoga podemos calcular las derivadas parciales respecto a y
y z
∂ 2 f 1 ∂f y 2 ∂ 1 ∂f
= +
∂y 2 r ∂r r ∂r r ∂r
∂ 2 f 1 ∂f z 2 ∂ 1 ∂f
= +
∂z 2 r ∂r r ∂r r ∂r
Sumando las tres expresiones se obtiene
173
3 ∂f ( x + y + z ) ∂ 1 ∂f 3 ∂f
2 2 2
∂ 1 ∂f
∇ f =
2
+ = +r
r ∂r r ∂r r ∂r r ∂r ∂r r ∂r
3 ∂f 1 ∂f 1 ∂ 2 f
= + r− 2 + 2
r ∂r r ∂r r ∂r
2 ∂f ∂ 2 f
= +
r ∂r ∂r 2
1 ∂ ∂f
= 2 r2
r ∂r ∂r
174
∂x
= − r sin θ sin ϕ = − y
∂ϕ
∂y
= r sin θ cos ϕ = x
∂ϕ
∂z
=0
∂ϕ
Entonces,
∂f ∂f ∂f
= −y + x ,
∂ϕ ∂x ∂y
que escrita como relación entre operadores queda en la forma
∂ ∂ ∂
≡ −y + x .
∂ϕ ∂x ∂y
A partir de este resultado es inmediato justificar la expresión de Lz en coordenadas
esféricas. Para Lx y Ly se pueden hacer cálculos similares.
175
Apéndice 5.B. Reglas de conmutación de los operadores momento angular
A partir del álgebra de conmutadores es fácil demostrar las siguientes expresiones útiles
para trabajar con el momento angular
Li , x j = i ℏ ε ijk xk
Li , p j = i ℏ ε ijk pk
Li , L j = i ℏ ε ijk Lk
L2 , Li = 0
donde ε ijk es el tensor totalmente antisimétrico y L2 = L2x + L2y + L2z es el módulo del
momento angular al cuadrado. Por ejemplo, vamos a calcular el conmutador Lx , Ly .
Lx , Ly = ( ypz − zp y ) , ( zpx − xpz )
176
Ly , Lz = iℏLx
[ Lz , Lx ] = iℏLy
De estas tres ecuaciones es obvio que los operadores que representan cualesquiera dos
componentes del momento angular no conmutan, por lo tanto, no se puede hacer una
determinación precisa y simultánea de ambas. Como resultado, es imposible asignar
simultáneamente valores bien definidos de todas las componentes del momento angular.
En consecuencia, si el sistema se encuentra en un estado propio de una de las
componentes (la medida de esa componente producirá un único valor bien definido), no
podrá estar a la vez en un estado propio de cualquiera de las otras dos componentes.
El operador que representa el cuadrado del módulo del momento angular se define
como
L2 = L2x + L2y + L2z .
Usando las reglas de conmutación que acabamos de obtener es fácil demostrar que L2
conmuta con cada una de las tres componentes de L . Por ejemplo, vamos a calcular el
siguiente conmutador:
L2 , Lx = L2x + L2y + L2z , Lx .
Dado que el conmutador de Lx conmuta con L2x , tenemos que
L2 , Lx = L2y + L2z , Lx
= L2y , Lx + L2z , Lx
= Ly Ly , Lx + Ly , Lx Ly + Lz [ Lz , Lx ] + [ Lz , Lx ] Lz
= −iℏ ( Ly Lz + Lz Ly ) + iℏ ( Lz Ly + Ly Lz )
=0
177
Apéndice 5.C. Funciones propias para átomos hidrogenoides
En la tabla siguiente se indican las funciones de onda que representan los estados
estacionarios para las tres primeras capas de un átomo hidrogenoide.
n l m Not. ψ nl m ( r , θ , ϕ )
esp.
1
(Z / a ) exp ( − Zr / aµ )
3/ 2
K 100 1s µ
π
1
( Z / aµ ) (1 − Zr / 2aµ ) exp ( − Zr / 2aµ )
3/ 2
L 200 2s
2 2π
1
( Z / aµ ) ( Zr / aµ ) exp ( − Zr / 2aµ ) cos θ
3/ 2
210 2p0
4 2π
1
( Z / a ) ( Zr / a ) exp ( −Zr / 2a ) sin θ exp ( ±i ϕ )
3/ 2
2 1±1 2p±1 ∓ µ µ µ
8 π
178
es mayor o igual que un cierto valor arbitrario. Las partes azules corresponden a
regiones para las que la función de onda tiene fase positiva, mientras que las partes
anaranjadas corresponden a fase negativa. La orientación es arbitraria.
Orbitales s y p
n=1 n=2 n=3 n=4 n=5
m=0
m=0
m=1
Orbitales d
n=3 n=4 n=5 n=6 n=7
m=0
m=1
m=2
179
Orbitales f
n=4 n=5 n=6 n=7
m=0
m=1
m=2
m=3
Sl − m (θ , ϕ ) =
1
i 2
(Yl m (θ ,ϕ ) − Yl −m (θ ,ϕ ) )
l=0
l=1
l=2
l=3
m = -3 m= -2 m = -1 m= 0 m=1 m=2 m= 3
180