1-5 Ortega y La Revolución Conservadora
1-5 Ortega y La Revolución Conservadora
1-5 Ortega y La Revolución Conservadora
EN LA ESPAÑA CONTEMPORÁNEA
Ortega y la «Revolución conservadora»1
SABINE RIBKA
LA REVOLUCIÓN CONSERVADORA
1
Este trabajo fue presentado en el seminario del Instituto universitario Or-
tega y Gasset, el 8 de marzo de 2001. Agradezco a los asistentes sus comenta-
rios y críticas.
2
Thomas Mann, Politische Reden und Schñften, tomo II, Francfort, Fischer,
1968, pág. 190.
1 68 SABINE RIBKA
3
Thomas Mann, Schriften und Reden zur Literatur, Kunst una Philosophie,
tomo I, Francfort, Fischer, 1968, pág. 375.
4
Panajotis Kondylis, Konseruativismus. Geschichtlicher Gehalt und Unter-
gang, Stuttgart, Klett-Cotta, 1986, págs. 469-493.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 169
dos los vestigios del siglo xix y liberará la historia del siglo xx»5,
que Moeller van den Bruck acariciara la idea de un futuro Tercer
Reich, superador de las divisiones entre la izquierda y la derecha
y que proliferaran revistas y antologías con títulos tan significati-
vos como Die neue Front (Frente Nuevo), Die Kommenden (Los
venideros), Deutschlands Erneuerung (Renovación Alemana) o
Aufbruch (Partida).
Si las constantes miradas hacia el porvenir constituían la di-
mensión revolucionaria de ese conservadurismo de nuevo cuño,
los valores propugnados por aquella «legión de buscadores» de la
que hablaba Hugo von Hoffmannsthal en su discurso La literatura
como espacio espiritual de la nación, eran radicalmente opuestos
a las ideas de 1789. Frente a la igualdad ensalzaron la jeraquía,
abogaron por una nueva política, cuyo carácter esencialmente na-
cional tendía a privar de legitimidad a cualquier signo de oposi-
ción, y defendían una concepción de la libertad que requería la in-
tegración voluntaria en el orden colectivo y orgánico. «No es la
libertad lo que están buscando —decía el poeta y dramaturgo aus-
tríaco en la citada alocución— sino la vinculación»6. Encaminán-
dose a crear una realidad susceptible de aunar y amalgamar a
toda la comunidad nacional, los conservadores revolucionarios
vieron su misión en hacer surgir valores, símbolos y tradiciones,
elevando a figuras como Federico el Grande o Goethe a una es-
fera casi mitológica o celebrando a Hólderlin como máximo de-
fensor de la integración de un mundo completamente fragmen-
tado. Entre tales elaboraciones hay que destacar el recurso a la
noción del Reich que se convertía a la sazón en un auténtico mito
político. Thomas Mann veía en la promesa de un Tercer Reich la
razón del enorme entusiasmo despertado por el estallido de la
guerra, Friedrich Hielscher esbozó un confuso y abstruso cuadro
del Reich, espacio en el que se disiparan todas las manifestacio-
nes espirituales occidentales, que incluso encontró los elogios de
un Ernst Robert Curtius, tan alerta ante las amenazas que se cer-
nían sobre el espíritu alemán, y Martin Heidegger consideró el
Reich como el único lugar donde «el hombre históricamente acon-
tecido puede permanecer extáticamente en una apertura, en la
que depone todo lo usado y utilizable, deviniendo por ello capaz
de soberanía en un sentido esencial»7. Huelga decir que la tan po-
pular obra de Moeller van den Bruck ejercía un efecto propagan-
5
Hans Freyer, Reuolution von rechts, Jena, Eugen Diederich, 1931, pág. 5.
6
Hugo von Hoffmannsthal, Ausgewáhlte Werke in zwei Bánde, tomo II,
Francfort, Fischer, 1957, pág. 736.
7
Martin Heidegger, Concepto fundamentales, Barcelona, Altaya, 1994, pág. 31.
170 SABINER1BKA
dístico que fue aprovechado con suma facilidad por los nacional-
socialistas. Aunque fueran muy diversas las concepciones acerca
de la esencia del Reich, tal como se desprende de la antología
¿Qué es el Reich?, en la que colaboraron pensadores como el ca-
tólico Mirgeler o los poetas Rudolf Borchardt o Hans Grimm, au-
tor de la influyente obra Pueblo sin espacio, ningún otro concepto
fue tan apropiado para enlazar en sí la dimensión del pasado, el
antiguo sacrum imperium de la nación alemana derrumbado en
1806, con la del porvenir, alimentándose, en medio de los senti-
mientos de crisis, la fe en El Sacro Reich de los alemanes (Ziegler),
cuya instauración suponía la destrucción del presente, es decir, del
Reich fundado a través de una guerra en 1871 y degenerado,
como resultado de otra guerra, en república en 1918.
8
Othmar Spann, Der wahre Staat, Leipzig, Quelle und Meyer, 1921, pág. 118.
9
M. H. Boehm, Kórperschaft und Gemeinwesen, cit. en Kurt Sontheimer, An-
tiedmokratisches Denken in der Weimarer Republik, Munich, DTV, 1994, pág. 166.
172 SABÍNE R1BKA
10
Cari Schmitt, Das Zeitalter der Neutralisierungen und Entpoliüsierungen, en
Cari Schmitt, Der Begriff des Politischen, Berlín, Duncker y Humblot, 1996,
pág. 94. En la versión que publicó la Revista de Occidente, el concepto de «polí-
tica» es sustituido por el término de «cultura».
1 74 SABINE RIBKA
11
Stefan Breuer, Anatomie der Konseruatiuen Reuolution, Darmstadt, Wis-
senschaftliche Buchgesellschaft, 1995, pág. 78.
12
Kornhardt Tagebuch, 21-IV-32, Bayrische Staats-und Landesbibliothek
München, Spengleriana, Ana, 533.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 175
13
J o s é Ortega y Gasset, Misión de la Universidad, 1930, en OC, IV, pág. 347.
14
J o s é Ortega y Gasset, carta a sus padres (14-VIII-1902), en J o s é Ortega
y Gasset, Cartas de un joven español (ed. Soledad Ortega), Madrid, Ediciones El
Arquero, 1991, pág. 94).
176 SABJMERIBKA
15
José Castillejo Duarte, Un curso de Stammler (1904), BILE 536, pági-
nas 321-329, BILE 537, págs. 372-379; Sobre la enseñanza en la Universidad de
Berlín (1904), BILE 534, págs. 267-271; Un curso de pedagogía del profesor Paul-
sen (1905), BILE 548, págs. 326-330; Notas sobre la enseñanza del derecho en la
Universidad de Berlín (1908), BILE 576, págs. 65-69; BILE 577, págs. 97-102; En-
señanza extranjeraicartas a un estudiante (1906), BILE 551, págs. 46-50; BILE
553, págs. 296-302; 1907, BILE 572, págs. 321-325; BILE 573, págs. 358-362
y 1910, BILE 599, págs. 44-47.
16
José Ortega y Gasset, La Universidad española y la Universidad alemana
(1906), en Cartas de un joven español, ob. cit., pág. 746.
17
José Ortega y Gasset, carta a Franscisco Navarro Ledesma, 8/9-VIII-1905,
en Cartas de un joven español, ob. cit., pág. 652.
18
José Ortega y Gasset, carta a Francisco Navarro Ledesma (28-V-1905),
en Cartas de un joven español, ob. cit., Pág,613
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 177
19
José Ortega y Gasset, La universidad española y la universidad alemana,
ob. cit, pág. 739.
20
José Ortega y Gasset, Prólogo para alemanes (1934), en OC, VIH, pág. 24.
21
José Ortega y Gasset, carta a rosa Spottomo (28-V-1906), en Cartas de
un joven español, ob. cit., pág. 461.
22
Thomas E. Willey, Back to Kant. The Revival of Kantianism in Germán So-
cial and Historical Thought; 1860-1914, Detroit, Wayne State üniversity Press,
1978, pág. 110.
23
En el semestre de invierno de 1906-1907 se hallaban matriculados: José
178 SABINE RIBKA
Ortega y Gasset, Erich Cassirer, Adolf Jacobus, Paul Scheffer, Maier Spielvogel,
Boris Vogt, Otto Kóhler, Fjidor Liechtenstein, Wilhhelm Seemann, Arthur Vogler y
Hermann Schnetze, Verzeichnis des Personáis und der Studierenden an der Kó-
nigl.PreuBischen üniversitát Marburg, CJniversitátsbibliothek Marburg.
24
José Ortega y Gasset, La cuestión moral (1908), en OC, X, pág. 73.
25
Peter Gay, Le suicide dfun République. Weimar 1918-1933, París, Calmann-
Lévy, 1993, pág. 11
26
José Ortega y Gasset, carta a ünamuno 827-1-1907; en Epistolario com-
pleto Ortega-Unamuno (ed. Laureano Robles), Madrid, Ediciones El Arquero,
1987, pág. 67.
27
José Ortega y Gasset, Una respuesta a una pregunta (1911), en OC, I, pá-
gina 211.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 179
28
José Ortega y Gasset, Dislocación y restauración de España (1916), en OC,
XI, pág. 94.
29
Robert Wohl, The Generation of 1914, Londres, Weidenfeld and Nicolson,
1980, pág. 5.
30
José Ortega y Gasset, ün rasgo de vida alemana (1935), en OC, V, pá-
gina 185.
180 SABINE RIBKA
31
Carta de Ernst Robert Curtius a Max Scheler (16-V-1924), en Scheleriana,
Bayrische Staatsbibliothek München, ANA 315, E II 1.
32
Carta de Hermann Keyserling a José Ortega y Gasset (24-111-1929), Her-
mann Keyserling Archiv, Technische CJniversitát Darmstadt, 0-1-090.
33
Cartas de Martin Heidegger a José Ortega y Gasset (29-V-1933; 25-X-1943
y 19-X-1934), Instituto Universitario Ortega y Gasset, rollo 3, tomo 1, JK 13.
34
«Europáische Review», Heft 8, febrero de 1931, pág. 622.
35
Oswald Spengler, carta a José Ortega y Gasset (21-VI-1922), Instituto Uni-
versitario Ortega y Gasset, rollo 5, tomo 2, JK 48.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 1 8 1
36
Thomas Mann, Schñften und Reden zur Literatur, Kunst und Philosophie,
tomo I, Francfort, Fischer, 1968, pág. 116.
1 82 SABiNE RIBKA
37
J o s é Ortega y Gasset, El sobrehombre (1908), en OC, I, pág. 9 1 .
38
Cartas de Nicolai Hartmann a Heinz Heimsoeth (3-1-1912, 21-VII-1912) en
Nicolai Hartmann und Heinz Heimsoeth im Briefwechset, Bonn, Bouvier Verlag,
1978, págs. 81 y 121. Carta de Paul Natorp a Górland (5-II-1911), en Helmut
Holzhey, Cohén und Natorp, tomo II, Basel, Schwabe, 1986, pág. 3 9 3 .
39
J o s é Ortega y Gasset, Teoría del clasicismo (1907), en OC, I, pág. 75.
40
J o s é Ortega y Gasset, La pedagogía social como programa político (1910),
en OC, I, pág. 519.
41
Alois Riehl, Friedrich Nietzsche: Der Künstler und der Denker, Stuttgart,
Frommann, s.a.; Georg Simmel, Schopenhauer und Nietzsche, Leipzig, Duncker
y Humblot, 1907.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 1 83
José Ortega y Gasset, Vieja y nueva política (1914), en OC, I, pág. 273.
José Ortega y Gasset, Vieja y nueva política (1914), en OC, I, pág. 270.
José Ortega y Gasset, El «Quijote» en la escuela (1920), en OC, II, pág. 295.
José Ortega y Gasset, Meditaciones del Quijote (1914), en OC, I, pág. 398.
184 SABÍNE RIBKA
46
José Ortega y Gasset, El germano Breno, como ejemplo, ESPAÑA, núm. 4,
19 de febrero de 1915.
47
José Ortega y Gasset, Anotaciones sobre la guerra en forma de diario
(1914), en OC, X, pág. 253.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 185
48
José Ortega y Gasset, Anotaciones sobre la guerra en forma de diario
(1914), en OC, X, pág. 251.
49
José Ortega y Gasset, En la fiesta de armisticio de 1918 (1918), en OC, VI,
pág. 224.
50
Hermann Keyserling, Weg zur Vollendung, núm. 12, 1926, pág. 36.
51
José Ortega y Gasset, Introducción a «Don Juan» (1921), en OC VI, pá-
gina 134.
1 86 SABJNE RÍBKA
54
José Ortega y Gasset, Ideas políticas ( 1 9 2 2 ) ; en OC, X I , p á g . 15.
55
José Ortega y Gasset, El tema de nuestro tiempo ( 1 9 2 3 ) , en OC, III, pá-
gina 2 0 3 .
56
José Ortega y Gasset, En un homenaje en su honor en «Pombo» ( 1 9 2 2 ) ,
en OC, VI, págs. 2 2 6 - 2 2 9 .
1 88 SABINE RIBKA
57
Cari Schmitt, Politische Romantik, Berlín, Duncker y Humblot, 1998; Leo
Frobenius, Schicksalskun.de im Sinne des Kulturwerdens, Leipzig, Vogtlánder,
1932; Ernst Jünger, Der Kampfals inneres Erlebnis, en Sámtliche Werke, tomo 7,
Stuttgart, Klett-Cotta, 1980.
58
José Ortega y Gasset, Epílogo al libro «De Francesca a Beatrice» (1924), en
OC, III, pág. 327.
59
José Ortega y Gasset, El origen deportivo del Estado (1924), en OC, II, pá-
gina 619.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 189
60
José Ortega y Gasset, Epílogo al libro «De Francesca a Beatrices (1924), en
OC, III, pág. 327.
61
José Ortega y Gasset, Mirabeau o el político (1927), en OC, III, pág. 630.
62
José Ortega y Gasset, Entreacto polémico (1925), en OC, XI, pág. 65.
63
José Ortega y Gasset, Lerroux, o la eficacia (1910), en OC, X, páginas 154-155.
190 SABIME R1BKA
64
José Ortega y Gasset, Maura o la política (1925-1926), en OC, XI, pág. 73.
65
José Ortega y Gasset, Mirabeau o el político (1927), en OC, III, págs. 625
y 634.
66
José Ortega y Gasset, Ideas políticas (1924), en OC, XI, pág. 35.
67
José Ortega y Gasset, España invertebrada (1921), en OC, III, pág. 117.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 191
ÜN DIPUTADO REVOLUCIONARIO-CONSERVADOR
68
José Ortega y Gasset, Discurso sobre el Estatuto de Cataluña (1932), en
OC, XI, pág. 464.
69
José Ortega y Gasset, Sensaciones parlamentarias (1932), en OC, XI, pá-
gina 498.
70
José Ortega y Gasset, Discurso en León (1931), en OC, XI, pág. 311.
192 SABINE RIBKA
71
José Ortega y Gasset,Proyecto de Constitución (1931), en OC, XI, pá-
gina 381.
72
José Ortega y Gasset, Sensaciones parlamentarias (1932), en OC, XI, pá-
gina 497.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 1 93
73
José Ortega y Gasset, Circular de la Agrupación al Servicio de la Repú-
blica (1932), en OC, XI, pág. 426.
74
José Ortega y Gasset, Un proyecto (1930), en OC, XI, pág. 288.
75
José Ortega y Gasset, Las provincias deben rebelarse ("1931), en OC, XI,
pág. 344.
76
José Ortega y Gasset, De Europa meditatio quaedam (1949), en OC, IX,
págs. 301-302.
194 SABINE R1BKA
77
José Ortega y Gasset, Un rasgo de la vida alemana (1935), en OC, V, pá-
gina 190.
78
José Ortega y Gasset, De Europa medidatio quaedam (1949), en OC, IX,
pág. 302.
79
José Ortega y Gasset, Un rasgo de la vida alemana (1935), en OC, V, pá-
gina 186.
80
José Ortega y Gasset, Un rasgo de la vida alemana (1935), en OC, V, pá-
gina 204.
81
José Ortega y Gasset,Un rasgo de la vida alemana; (1935), en OC, V, pá-
gina 190.
ORTEGA Y LA «REVOLUCIÓN CONSERVADORA» 195
82
Carta de José Ortega y Gasset a H. Kornhardt, 3-V-1949; en Bayerische
Staatsbibliothek München, Spengleriana, Ana 533, Sen. 133. «El error de Spen-
gler» porcede de una anotación de Ortega en el libro Jahre der Entscheidung, Mu-
nich, C. H. Beck, 1933.
83
José Ortega y Gasset, De Europa meditado quaedam (1949), en OC, IX,
pág. 301.
84
José Ortega y Gasset, De Europa meditado quaedam (1949), en OC, IX,
pág. 291.
1 96 SAB1NE RIBKA
RESUMEN
ABSTRACT