Emociones
Emociones
Emociones
Las Emociones.
Profesora:
Alumnas:
Migdalia Mora de Ortiz. Blanco
Ruth.
Gamero
Jessica.
Tovar
Deniuska.
Introducción
1. Emoción.
2. Componentes de las emociones.
3. Complejidad de las emociones.
4. Tipos de emociones.
4.1 Felicidad.
4.2 Ira.
4.3 Miedo.
4.4 Asco.
4.5 Tristeza.
5. Funciones.
6. Variables implicadas en la emoción (teorías sobre la emoción).
6.1 Posiciones evolucionistas.
6.2 Variables psicofisiológicas.
6.3 Aspectos conductuales.
6.4 Variables cognitivas.
7. La importancia de las emociones.
8. Teorías de las emociones.
9. ¿Por qué nos emocionamos?
10. Inteligencia Emocional.
10.1 Campos de la inteligencia emocional.
10.2 Características de una persona emocionalmente inteligente.
11. Conclusiones.
12. Referencias bibliográficas.
Introducción
En la siguiente monografía se hablarà sobre las emociones, su función, variables,
importancia, teorias, porque de las emociones e inteligencia emocional.
Son reacciones autónomas que nuestro cuerpo experimenta ante un determinado
estímulo. Sin embargo, todas ellas luego derivan en sentimientos más
prolongados en el tiempo.
Tanto las emociones como los sentimientos nos señalan algo que tenemos que
saber o tener en cuenta.
Segun lo han demostrado diversos estudios, las emociones juegan un papel
fundamental en los procesos de salud de una persona lo cual le permite
establecer su posición respecto al entorno que lo rodea, siendo impulsada
hacia otras personas, objetos, acciones o ideas.
Las emociones funcionan también como una especie de depósito de influencias
innatas y aprendidas.
En un primer tiempo se presentan los puntos fundamentales que expone dicha
teoría.
Tanto las emociones como los sentimientos nos señalan algo que tenemos que
saber o tener en cuenta.
Segun lo han demostrado diversos estudios, las emociones juegan un papel
fundamental en los procesos de salud de una persona lo cual le permite
establecer su posición respecto al entorno que lo rodea, siendo impulsada
hacia otras personas, objetos, acciones o ideas.
Las emociones funcionan también como una especie de depósito de influencias
innatas y aprendidas
1. Emoción.
● Expresiones faciales.
● Acciones y gestos.
● Temblor.
● Sonrojarse
● Sudoración
● Respiración agitada
● Dilatación pupilar
Estos componentes son los que están en la base del polígrafo o del “detector
de mentiras”. Se supone que cuando una persona miente siente o no puede
controlar sus cambios fisiológicos, aunque hay personas que con entrenamiento sí
pueden llegar a controlarlo.
Las emociones sentidas por el sujeto nunca deben ser consideradas como
simples respuestas mecánicas o fisiológicas a las variaciones producidas en el
entorno. Tal y como han puesto de relieve diversas teorías, la experiencia
emocional de un sujeto dependerá de muchos factores: de cómo valore consciente
y/o inconscientemente los hechos; de a qué/quién atribuya la
causa/responsabilidad de esos hechos; de sus expectativas ante la situación; de la
identidad social activa en cada momento; o de la identificación del sujeto con otras
personas, grupos o colectivos.
Según la teoría de las expectativas (Turner and Stets, 2006: 36), la valoración
de un mismo objeto, hecho o persona dependerá de las expectativas previas que
tenga el sujeto, lo que puede modificar la experiencia emocional resultante. En el
ámbito de la interacción social, un factor clave es si los individuos están a la altura
de las expectativas que despiertan en los otros según cual sea su posición de
poder o estatus.
5. Funciones.
5.1 Nos motivan a tomar medidas
Ante situaciones estresantes, nos ayudan a tomar una decisión que nos
permita superar el estrés para hacer algo para mejorar la situación.
Charles Darwin creía que las emociones son adaptaciones que permiten a los
seres humanos y animales sobrevivir y reproducirse. Cuando estamos enojados,
estamos propensos a enfrentar la fuente de nuestra irritación. Cuando
experimentamos miedo, somos más propensos a huir de la amenaza. Cuando
sentimos amor, podríamos buscar a un compañero y reproducirnos.
Cuando interactuamos con otras personas, las emociones nos permiten enviar
señales de cómo nos sentimos para que los demás lo entiendan. Estas señales,
pueden incluir la expresión emocional a través del lenguaje corporal o la
manifestación verbal explícita, que aclare lo que sentimos.
culturas.
de las emociones:
observando?
A nivel metodológico, los trabajos desde esta perspectiva han utilizado como
paradigma experimental los procesos de condicionamiento, especialmente el
condicionamiento clásico. Digamos que hasta la aparición de las técnicas de
biofeedback (Miller, 1969) uno de los axiomas fundamentales era que el operante y
el respondiente diferían incluso en los procesos implicados. Uno de los ejemplos
paradigmáticos era la suposición de que las respuestas viscerales y glandulares,
reguladas por el sistema nervioso autónomo no son susceptibles de ser
condicionadas de forma operante (Skinner, 1938; Mowrer, 1947). Dada la relación
entre la actividad de dichas respuestas y las reacciones afectivas, así como el
hecho de la incomodidad del concepto de emoción en el análisis experimental de la
conducta (Skinner, 1953), durante décadas el condicionamiento clásico, y no el
operante, ha sido el procedimiento de elección en la investigación sobre emoción y
condicionamiento.
Así pues, desde Marañón a Mandler, los autores que defienden posiciones
cognitivas han ido otorgando progresivamente un papel de mayor relevancia a los
procesos cognitivos que el simple etiquetado de una reacción fisiológica, e incluso
han destacado que lo verdaderamente necesario para que se produzca una
emoción son los procesos cognoscitivos implicados.
De entre todos los procesos cognitivos, los más destacables son los siguientes:
Según Weiner (1980, 1985, 1986; 1992, 1993) la reacción emocional puede
Esfuerzo Relajación
Suerte Sorpresa
Habilidad Incompetencia
Suerte Sorpresa
Según Scherer (Scherer, 1984, 1988, 1992; Pittam y Scherer, 1993) los
estímulos internos o externos se evalúan jerárquica y organizadamente en una
serie de pasos, o fases. Como consecuencia de dicho proceso de evaluación
emergen las emociones correspondientes. Dado el valor adaptativo de las
emociones y el papel que ejercen en la supervivencia, se entiende que dicho
control se ejecute de forma jerárquica y ordenada.
puede analizarse en función de esta secuencia de evaluación. Las que han sido
estudiadas con mayor profundidad de acuerdo con este esquema son: alegría,
tristeza, vergüenza, ira, asco y miedo.
ang (1977, 1979, 1990) postula que las imágenes mentales pueden entenderse
como una estructura proposicional que incluye componentes perceptivos y
semánticos.
Semejante estructura proposicional de la imagen es la que induce las
reacciones fisiológicas que acompañan a las emociones, de forma que puede
utilizarse el entrenamiento en imaginación para el control de diferentes procesos o
alteraciones emocionales (Lang, 1979), dado que las respuestas fisiológicas
inducidas están directamente relacionadas con el tipo de imagen entrenada.
Estamos en el siglo XIX y William James junto al científico danés Carl Lange
nos explicaron que las emociones dependen de dos factores: los cambios físicos
que suceden en nuestro organismo ante un estímulo y la posterior interpretación
que hagamos de ellos después.
Nos vamos ahora a los años 60, a la prestigiosa Universidad de Yale, para
conocer a dos científicos: Stanley Schacter y Jerome Singer. Ambos afinaron un
poco más las teorías existentes hasta ese momento sobre qué son las emociones
y dieron forma a su conocido e interesante modelo.
Schachter y Singer nos enseñaron que las emociones pueden aparecer,
efectivamente, al interpretar las respuestas fisiológicas periféricas de nuestro
cuerpo, tal y como nos explicaron William James y Carl Lange. Sin embargo, y aquí
llega la novedad, también pueden darse a raíz de una evaluación cognitiva. Es
decir, nuestros pensamientos y cogniciones pueden desencadenar también una
respuesta orgánica y la posterior liberación de una serie de neurotransmisores que
activarán una emoción determinada y una respuesta asociada.
Si deseamos saber qué son las emociones tenemos que pasar casi de forma
obligada por la obra de Paul Ekman. Cuando este psicólogo de la Universidad de
San Francisco empezó a estudiar este tema, creía como la mayor parte de la
comunidad científica que las emociones tenían un origen cultural.
Más tarde, y a finales de los años 90 amplio esta lista al estudiar más
profundamente las expresiones faciales:
-Sorpresa. -Vergüenza.
La teoría de Robert Plutchik nos explica qué son las emociones desde un punto
de vista más evolucionista. Este médico y psicólogo nos facilitó un interesante
modelo en el que quedan bien identificadas y diferenciadas 8 emociones básicas.
Todas ellas habrían garantizado nuestra supervivencia a lo largo de nuestra
evolución. A ellas habría que sumar otras emociones secundarias e incluso
terciarias, que habríamos ido desarrollando con el tiempo para adaptarnos mucho
mejor a nuestros entornos.
Esta teoría mantiene que las emociones son debidas a la evaluación cognitiva
de un acontecimiento, pero también a las respuestas corporales. La persona nota
los cambios fisiológicos, advierte lo que ocurre a su alrededor y denomina sus
emociones de acuerdo a ambos tipos de observaciones.
Esta teorìa explica que nuestras emociones pueden ser más rápidas que
nuestras interpretaciones de una situación, lo cual implica que:
“sentimos algunas emociones antes de pensarlas y quealgunas vías nerviosas
implicadas en la emoción no pasan por las áreas corticales vinculadas al
pensamiento.”
Algunas de las teorías que se pueden englobar dentro de estas categorías son
la teoría de Schachter-Singer o teoría de los dos factores de la emoción (1962) y la
teoría de Antonio Damasio descrita en su libro El error de Descartes (1994).
Damasio, por su parte, intenta establecer una relación entre las emociones y la
razón. Ya que, según su teoría del marcador somático, las emociones pueden
ayudarnos a tomar decisiones, incluso pueden sustituir a la razón en algunas
situaciones en las que hay que dar una respuesta rápida o no se conocen bien
todas las variables.
Por ejemplo, si alguien se encuentra en una situación peligrosa lo normal no es
ponerse a pensar y razonar qué hacer, si no expresar una emoción, el miedo, y
actuar en consecuencia (huyendo, atacando o quedándose paralizado).
Las emociones cumplen una finalidad muy concreta: permitir que nos
adaptemos a lo que nos rodea para garantizar nuestra supervivencia. Esto mismo
ya nos lo indicó Charles Darwin en su momento al demostrarnos que también los
animales tenían y expresaban emociones, y que semejante don, les facilitaba a
ellos y también a nosotros avanzar como especie y colaborar entre nosotros para
lograr dicho propósito.
Darwin fue posiblemente una de las figuras que más acertó a la hora de
explicarnos qué son las emociones y para qué sirven. Sin embargo, a lo largo de la
historia nos encontramos con más nombres, más enfoques y más teorías
orientadas a darnos más respuestas sobre este tema.
Para Citar: Título: Emociones. Sitio: Definición ABC. Fecha: 14/04/2009. Autor: Gabriel D..
LISTO URL: https://www.definicionabc.com/ciencia/emociones.php