Decoloración
Decoloración
Decoloración
Fundamentos de la Decoloración
La mayor parte de los adsorbentes son materiales altamente porosos, teniendo lugar la
adsorción fundamentalmente en el interior de las partículas sobre las paredes de los poros
en puntos específicos.
Análisis de Alternativas
Una opción, aplicable, consiste en el tratamiento que implica el uso de ácido fosfórico
concentrado y un secado a vacío, lo cual produce la precipitación de impurezas,
especialmente de componentes clorofílicos, que serían eliminadas por filtración o
centrifugación. Otra opción consiste en precipitar los pigmentos clorofílicos por contacto
con un álcali (este fenómeno ocurriría en la etapa de Neutralización), pero sólo con este
proceso no suele ser suficiente.
Diagrama de Flujo
Parámetros de Diseño
Las variables a tener en cuenta en el diseño en esta etapa, y que serán analizadas a
continuación, son la temperatura de operación, la presión de operación, el tiempo de
contacto y el tipo y dosis de tierra adsorbente, además de otros factores influyentes como
la humedad y la velocidad de agitación.
▪Temperatura de operación
▪Presión de operación
▪Tiempo de contacto
Con respecto al tiempo de contacto existen muchas opiniones. Sin embargo, en general se
puede decir que, para la mayoría de los aceites y dentro del rango de temperaturas que se
ha indicado anteriormente, el tiempo de operación suele estar comprendido entre 20 y 30
minutos, siendo este periodo más que suficiente para alcanzar el equilibrio entre las tierras
decolorantes y los componentes que han de ser adsorbidos. Tiempos de residencia mayores
no son recomendables porque pueden producir una fijación del color indeseable.
Existen otros parámetros a tener en cuenta. Uno de ellos es la humedad; es muy importante
realizar la operación de secado del aceite hasta los niveles recomendados (menor al 0,1%)
antes de decolorarlo, ya que se evitarán procesos de oxidación de este. Por otra parte,
también es fundamental controlar la agitación, la cual debe ser suficientemente vigorosa
para conseguir el rápido e íntimo contacto entre las arcillas y los pigmentos coloreados,
pero de forma controlada, ya que una agitación violenta puede promover fenómenos de
oxidación (especialmente, en presencia de aire).
Como el dosificador de sólidos no está a vacío, a diferencia del depósito mezclador donde
evacua las tierras decolorantes, es necesario instalar un sistema de válvulas de apertura y
cierre automáticos. Este sistema funcionaría siguiendo cuatro pasos consecutivos,
representados en el siguiente esquema:
Inicialmente, en el paso 1, tanto la válvula 1 como la 2 están cerradas, suponiendo, así, que
acaba de producirse una descarga de tierras. Tras producirse la descarga, la válvula 1 se
abre para dejar caer la masa de adsorbente requerida, estando la válvula 2 cerrada (paso
2). En el paso 3, la válvula 1 vuelve a cerrarse, quedando el contenido de arcillas entre las
dos válvulas. Cuando pasan los cinco minutos desde la inyección de tierras anterior, la
válvula 2 se abre para dejar paso al sólido hacia el depósito mezclador (paso 4); aquí el
sólido no sólo cae por gravedad, sino que también es “succionado” por el vacío existente
en el interior de este tanque. El siguiente paso volvería a ser el 1. De esta manera, se
consigue evitar la pérdida del vacío del sistema.
En los procesos de filtración del aceite para la eliminación del adsorbente, es necesario
tener en cuenta una cuestión importante: al tratarse de sólidos muy finos, las arcillas
adsorbentes pueden formar una torta muy densa e impermeable, produciendo como
consecuencia la obstrucción rápida de cualquier medio filtrante que sea suficientemente
fino como para retenerlos y un aumento enorme de la caída de presión. La filtración práctica
de estos sólidos exige que la porosidad de la torta aumente de forma que permita el paso
del líquido con una velocidad razonable, para lo cual pueden añadirse coadyuvantes de
filtración, tales como tierras diatomeas (las más utilizadas en este tipo de procesos), perlita,
celulosa u otros materiales inertes a la suspensión. Estos coadyuvantes pueden ser
suministrados antes de que comience el propio proceso de filtración o bien de manera
continuada.
Aunque, obviamente, la mayor parte de la adsorción de pigmentos por parte de las tierras
adsorbentes se produce en el depósito de decoloración, se ha observado que una parte
significativa ocurre durante el proceso de filtración. A medida que el adsorbente se va
acumulando formando la torta, se puede decir que el aceite va atravesando dicha
estructura como si de un lecho fijo se tratase. Como el adsorbente posee todavía puntos
activos de adsorción no ocupados durante el tiempo de residencia en el depósito de
decoloración, cuando el aceite atraviesa la torta y se pone en íntimo contacto con esta alta
concentración de adsorbente, se produce una adsorción adicional. En cuanto a los equipos
empleados para la filtración del aceite, la mayoría trabajan en discontinuo, por lo que, al
tratarse de un proceso continuo, la planta deberá contar con, al menos, dos filtros que
operen alternativamente, de manera que, mientras uno realiza el proceso de filtrado, el
otro sufrirá un proceso de limpieza y se preparará para una nueva operación.