La Alimentacion
La Alimentacion
La Alimentacion
brinden los nutrientes que necesitas para mantenerte sana, sentirte bien y tener
energía. Estos nutrientes incluyen las proteínas, los carbohidratos, las grasas, el
agua, las vitaminas y los minerales.
Ningún alimento o dieta puede impedir la aparición del cáncer de mama. Si bien los
investigadores aún están estudiando los efectos de comer alimentos no
saludables (en inglés) en el riesgo de tener cáncer de mama y su recurrencia, lo
que sí sabemos es que el sobrepeso (en inglés) es un factor de riesgo, tanto de la
primera aparición del cáncer de mama como de su recurrencia. En esta sección
puedes aprender a comer de una forma que mantenga tu cuerpo lo más sano posible.
Lee la información sobre los grupos de alimentos, los nutrientes, cómo crear un plan
de alimentación saludable, cómo calcular las porciones y cómo disfrutar de los
alimentos sin comer de más.
Grupos de alimentos
Una buena nutrición y una dieta balanceada ayudan a que los niños crezcan saludables. No
importa si su hijo es un niño pequeño o un adolescente, usted puede tomar las medidas
necesarias para mejorar su nutrición y formar buenos hábitos alimenticios. Las cinco mejores
estrategias son éstas:
1. Establecer un horario regular para las comidas en familia.
2. Servir una variedad de alimentos y refrigerios saludables.
3. Darle un buen ejemplo siguiendo una dieta nutritiva.
4. Evitar las peleas por la comida.
5. Involucrar a los niños en el proceso.
Sin embargo, no es fácil tomar estas medidas. Nuestros días están colmados de
responsabilidades, y las comidas de preparación rápida están siempre a mano.
Comidas en familia
Comer en familia es una costumbre agradable tanto para los padres como para los hijos. A los
niños les agrada la previsibilidad de las comidas en familia, y los padres tienen la oportunidad
de ponerse al día con sus hijos. Los niños que participan en comidas en familia con
regularidad presentan estas características:
Por otra parte, las comidas en familia ofrecen la oportunidad de presentarle al niño nuevos
alimentos y de que usted dé el ejemplo llevando una dieta saludable.
¿Qué se considera una comida en familia? Cualquier momento en que la familia se reúna para
comer; ya sean alimentos traídos de un restaurante o una cena completa preparada en casa.
Esfuércese por servir alimentos nutritivos y por establecer un horario en el cual todos estén
presentes. Quizá tengan que comer un poco más tarde porque uno de los niños está en una
práctica deportiva. Tal vez tengan que fijar una hora especial los fines de semana, como un
brunch los domingos, cuando todos pueden reunirse en familia.
Los niños, en especial los más pequeños, comen sobre todo lo que está disponible en la casa.
Por eso, es importante controlar las provisiones: los alimentos que sirve en las comidas y los
que tiene a mano para refrigerios.
La mejor manera de estimular al niño a comer de manera saludable es dando el ejemplo. Los
niños imitan a los adultos que ven a diario. Si usted come frutas y verduras, y consume menos
alimentos poco nutritivos, estará enviándole el mensaje correcto.
Otra manera de dar un buen ejemplo es limitando el tamaño de las porciones y evitando
comer de más. Hable sobre el estar satisfecho, en especial con los niños pequeños. Diga algo
como “esto está delicioso, pero estoy satisfecho y no voy a comer más”. De igual modo, los
padres que siempre están a dieta o quejándose de sus cuerpos pueden fomentar estos
mismos sentimientos negativos en los niños. Trate de mantener una actitud positiva en lo que
se refiere a la comida.
Es fácil convertir la comida en una fuente de conflicto. Los padres bien intencionados pueden
encontrarse en una situación en la que negocian con los niños o los sobornan para que coman
alimentos saludables. Una mejor estrategia es permitir que los niños tengan cierto control,
pero también limitar los tipos de alimentos que tienen en la casa.
Los niños deben decidir si tienen hambre, qué desean comer de los alimentos que les sirven y
cuándo se sienten satisfechos. Los padres controlan los alimentos disponibles para los niños,
tanto a la hora de la comida como entre las comidas. A continuación, algunas pautas que
puede seguir:
A la mayoría de los niños les agrada participar en la selección de los alimentos que se sirven
en las comidas. Converse con ellos sobre las diferentes opciones y la planificación de una
comida equilibrada. Algunos niños quizá deseen ayudar en la compra y en la preparación de
los alimentos. En el supermercado, enseñe a los niños a leer las etiquetas para que
comiencen a aprender sobre los valores nutritivos.
En la cocina, asígnele a su hijo tareas apropiadas para su edad de modo de evitar que se
lastime o se sienta abrumado. Al final de la cena, no se olvide de elogiar al cocinero.
Los almuerzos escolares también pueden servir de aprendizaje para los niños. Es más, si
puede lograr que ellos comiencen a pensar en lo que van a almorzar, es probable que pueda
ayudarlos a hacer cambios positivos. Sugiérales que digan qué tipos de alimentos les gustaría
comer en el almuerzo o vayan juntos al supermercado para comprar alimentos saludables que
puedan llevarse a la escuela.
Otra buena razón para involucrar a los niños es prepararlos de modo que tomen buenas
decisiones en lo que respecta a los alimentos que comen. Eso no quiere decir que
repentinamente su niño preferirá una ensalada a las papas fritas, pero los hábitos alimenticios
que usted le ayude a formar en el presente pueden encaminarlo hacia decisiones más
saludables por el resto de su vida.
Para incorporar una alimentación saludable, es fundamental planificar el consumo diario de los
distintos nutrientes. Para ello, te proponemos que observes laPirámide Nutricional, en la que
podes encontrar una guía para una nutrición conveniente.
Es muy importante comenzar el día con un buen desayuno: cereales integrales, lácteos descremados
y frutas lo que evitará el picoteo durante la mañana y nos permitirá llegar con mayor control al
almuerzo.
Asimismo es fundamental planificar el almuerzo. Es decir, si tomamos un café con leche con
galletitas, o bien una sopa y un yogurt, no obtendremos todo los nutrientes necesarios y no debemos
olvidar que el almuerzo debe contener el 30% de los nutrientes del día.
Para el almuerzo podemos combinar una ración de fibras con una porción de proteína: verduras al
vapor, crudas en ensalada, grilladas combinadas con una porción de carne o pollo o pescado (aporte
proteico) a la plancha o a la parrilla ya que nos garantizan una menor ingesta de grasa con una
adecuada calidad nutricional y mayor saciedad.
Normalmente, al seleccionar un alimento, lo que evaluamos es la cantidad de calorías que posee.
Pero es importante tener en cuenta otros conceptos para elegir mejor los nutrientes.