El Bautismo-Monografía
El Bautismo-Monografía
El Bautismo-Monografía
FACULTAD DE INGENIERÍA
Ciclo: II-D
Integrantes:
PUCALLPA-2018
ii
Dedicatoria
Contenido
INTRODUCCIÓN: .................................................................................................................... 1
5. Resumen..........................................................................................................................10º
6. Cibergrafía ....................................................................................................................... 11
1
INTRODUCCIÓN:
Eucaristía, se ponen los fundamentos de toda vida cristiana. "La participación en la naturaleza
divina, que los hombres reciben como don mediante la gracia de Cristo, tiene cierta analogía
con el origen, el crecimiento y el sustento de la vida natural. En efecto, los fieles renacidos en
en la Eucaristía con el manjar de la vida eterna, y, así por medio de estos sacramentos de la
iniciación cristiana, reciben cada vez con más abundancia los tesoros de la vida divina y
avanzan hacia la perfección de la caridad" (Pablo VI, Const. apost. Divinae consortium
La palabra Bautismo proviene del griego y significa sumergir, significado que sigue teniendo
hasta la actualidad. El Bautismo es el sacramento por el cual el hombre nace hacia la vida
espiritual, por medio del agua y la invocación a la Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu
Santo.
Al ser sumergido bajo el agua, el cristiano da testimonio de que era pecador y al salir del agua
manifiesta que ya no es más así: "Ya no vivo yo, más vive Cristo en mí, y lo que ahora vivo en
la carne, lo vivo en la fé del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí”.
(Gálatas 2:20).
En el Antiguo Testamento, los profetas anunciaron que el Espíritu del Señor reposaría sobre el
Mesías esperado (cf. Is 11,2) para realizar su misión salvífica (cf Lc 4,16-22; Is61, 1). El
descenso del Espíritu Santo sobre Jesús en su Bautismo por Juan fue el signo de que Él era el
que debía venir, el Mesías, el Hijo de Dios (Mt 3,13-17; Jn 1,33- 34). Habiendo sido concedido
por obra del Espíritu Santo, toda su vida y toda su misión se realizan en una comunión total
Ahora bien, esta plenitud del Espíritu no debía permanecer únicamente en el Mesías, sino que
debía ser comunicada a todo el pueblo mesiánico (cf Ez 36,25-27; Jl 3,1-2). En repetidas
ocasiones Cristo prometió esta efusión del Espíritu (cf Lc 12,12; Jn 3,5-8; 7,37-39; 16,7-3
15; Hch 1,8), promesa que realizó primero el día de Pascua (Jn 20,22) y luego, de manera más
manifiesta el día de Pentecostés (cf Hch 2,1-4). Llenos del Espíritu Santo, los Apóstoles
comienzan a proclamar "las maravillas de Dios" (Hch 2,11) y Pedro declara que esta efusión
del Espíritu es el signo de los tiempos mesiánicos (cf Hch 2, 17-18). Los que creyeron en la
predicación apostólica y se hicieron bautizar, recibieron a su vez el don del Espíritu Santo
comunicaban a los neófitos, mediante la imposición de las manos, el don del Espíritu Santo,
destinado a completar la gracia del Bautismo (cf Hch 8,15-17; 19,5-6). Esto explica por qué en
la carta a los Hebreos se recuerda, entre los primeros elementos de la formación cristiana, la
doctrina del Bautismo y de la la imposición de las manos (cf Hb 6,2). Es esta imposición de las
manos la que ha sido con toda razón considerada por la tradición católica como el primitivo
Muy pronto, para mejor significar el don del Espíritu Santo, se añadió a la imposición de las
manos una unción con óleo perfumado (crisma). Esta unción ilustra el nombre de "cristiano"
que significa "ungido" y que tiene su origen en el nombre de Cristo, al que "Dios ungió con el
Espíritu Santo" (Hch 10,38). Y este rito de la unción existe hasta nuestros días tanto en Oriente
como en Occidente. Por eso, en Oriente se llama a este sacramento crismación, unción con el
crisma, o myron, que significa "crisma". En Occidente el nombre de Confirmación sugiere que
En los primeros siglos el bautismo constituye generalmente una única celebración con la
confirmacion, y forma con éste, según la expresión de san Cipriano (cf Epistula 73, 21), un
"sacramento doble". Entre otras razones, la multiplicación de los bautismos de niños, durante
todo el tiempo del año, y la multiplicación de las parroquias (rurales), que agrandaron las
dos sacramentos, de modo que la Confirmación es dada por el presbítero que bautiza. Este, sin
embargo, sólo puede hacerlo con el "myron" consagrado por un obispo (cf CCEO, can. 695,1;
696,1).
Una costumbre de la Iglesia de Roma facilitó el desarrollo de la práctica occidental; había una
doble unción con el santo crisma después del Bautismo: realizada ya una por el presbítero al
neófito al salir del baño bautismal, es completada por una segunda unción hecha por el obispo
en la frente de cada uno de los recién bautizados (cf San Hipólito Romano, Traditio apostolica,
21). La primera unción con el santo crisma, la que daba el sacerdote, quedó unida al rito
bautismal; significa la participación del bautizado en las funciones profética, sacerdotal y real
Confirmación.
Iglesia latina expresa más netamente la comunión del nuevo cristiano con su obispo, garante y
Los signos;
• La unción: el bautizado es ungido durante dos veces en el ritual: una vez con óleo y otra
con el crisma.
• La vela bautismal: el padre o el padrino enciende la vela en el cirio Pascual. Esta vela
signo de abundancia (cf Dt 11,14, etc.) y de alegría (cf Sal 23,5; 104,15); purifica (unción antes
y después del baño) y da agilidad (la unción de los atletas y de los luchadores); es signo de
curación, pues suaviza las contusiones y las heridas (cf Is 1,6; Lc 10,34) y el ungido irradia
Todas estas significaciones de la unción con aceite o agua se encuentran en la vida sacramental.
La unción antes del Bautismo con el óleo de los catecúmenos significa purificación y fortaleza;
la unción de los enfermos expresa curación y consuelo. La unción del santo crisma después del
Bautismo, en la Confirmación y en la Ordenación, es el signo de una consagración. Por la 6
Confirmación, los cristianos, es decir, los que son ungidos, participan más plenamente en la
misión de Jesucristo y en la plenitud del Espíritu Santo que éste posee, a fin de que toda su vida
Por medio de esta unción, el confirmando recibe "la marca", el sello del Espíritu Santo. El sello
propiedad sobre un objeto (cf. Dt 32,34) —por eso se marcaba a los soldados con el sello de su
jefe y a los esclavos con el de su señor—; autentifica un acto jurídico (cf 1 R 21,8) o un
Cristo mismo se declara marcado con el sello de su Padre (cf Jn 6,27). El cristiano también está
marcado con un sello: "Y es Dios el que nos conforta juntamente con vosotros en Cristo y el
que nos ungió, y el que nos marcó con su sello y nos dio en arras el Espíritu en nuestros
corazones" (2 Co 1,22; cf Ef 1,13; 4,30). Este sello del Espíritu Santo, marca la pertenencia
total a Cristo, la puesta a su servicio para siempre, pero indica también la promesa de la
Previo al comienzo de la ceremonia se establece un diálogo entre el Sacerdote y los padres del
que será bautizado en donde estos últimos le piden el sacramento para su hijo a la iglesia. Los
padrinos también participan de este diálogo comprometiéndose a ayudar al niño en esta misión.
El primer momento comienza la invitación del sacerdote a los presentes a escuchar la palabra
del exorcismo. En ésta se pide que los pecados del niño sean lavados y que el Espíritu Santo
habite en él.
La unción pre bautismal es el cuarto momento en donde el bebé es ungido con el óleo. Este
momento es continuado por la bendición del agua, las renuncias y profesión de fé hasta que se
llega al Bautismo.
El celebrante invita a la familia para que se acerque a la fuente bautismal, y pregunta a los
papás y a los padrinos. A continuación el el celebrante bautiza al niño, diciendo: “Yo te bautizo
en el nombre del Padre” y derrama agua sobre la cabeza del bebé o lo sumerge; “Y del Hijo”,
vuelve a repetir la anterior acción; “Y del Espíritu Santo” y por tercera y última vez derrama
Luego de este momento viene la unción con el Santo Crisma y la imposición de la vestidura
blanca (no se acepta otro color). Posteriormente, se entrega la vela encendida que simboliza
que este niño es enviado a iluminar a todo hombre como lo hace la presencia del Señor. Por
3. LOS PADRINOS
padrino y una madrina en caso de los niños. En el caso de un adulto debe de ser uno solo, que
debe de vigilar que lleve una vida cristiana después de ser bautizado. Ser padrinos no implica
Ser bautizado y tener la intención de asumir las responsabilidades, tener uso de razón, haber
cumplido 16 años, estar confirmado, haber hecho su Primera Comunión y llevar una vida de
fe. Los padrinos han de ser solteros o casados por la Iglesia. No pueden vivir en unión libre, ya
Cualquier persona. Puesto que Bautismo, Confirmación y Eucaristía forman una unidad, de ahí
se sigue que "los fieles tienen la obligación de recibir este sacramento en tiempo oportuno"
(CIC, can. 890), porque sin el bautismo, el sacramento de la confirmación es ciertamente válido
La costumbre latina, desde hace siglos, indica "la edad de pensar", como punto de referencia
para recibir el bautizo. Sin embargo, en peligro de muerte, se debe bautizar a los niños. (cf CIC
«La edad del cuerpo no prejuzga la del alma. Así, incluso en la infancia, el hombre puede
recibir la perfección de la edad espiritual de que habla la Sabiduría (4,8): "La vejez honorable
no es la que dan los muchos días, no se mide por el número de los años". Así numerosos niños,
gracias a la fuerza del Espíritu Santo que habían recibido, lucharon valientemente y hasta la
La preparación para el bautizo debe tener como meta conducir al cristiano a una unión más
íntima con Cristo, a una familiaridad más viva con el Espíritu Santo, su acción, sus dones y sus
llamadas, a fin de poder asumir mejor las responsabilidades apostólicas de la vida cristiana.9
Por ello, la catequesis del bautizo se esforzará por suscitar el sentido de la pertenencia a la
Iglesia de Jesucristo, tanto a la Iglesia universal como a la comunidad parroquial. Esta última
Para el bautizo, como para la confirmacion, conviene que los candidatos busquen la ayuda
espiritual de un padrino o de una madrina. Conviene que sea el mismo que para el Bautismo a
fin de subrayar la unidad entre los dos sacramentos (cf Ritual de la Confirmación, Praenotandos
"Al enterarse los Apóstoles que estaban en Jerusalén de que Samaría había aceptado la
Palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Estos bajaron y oraron por ellos para que
recibieran el Espíritu Santo; pues todavía no había descendido sobre ninguno de ellos;
únicamente habían sido bautizados en el nombre del Señor Jesús. Entonces les imponían las
carácter indeleble; por eso este sacramento sólo se puede recibir una vez en la vida.
El candidato al bautizoque ya ha alcanzado el uso de razón debe profesar la fe, estar en estado
de gracia, tener la intención de recibir el sacramento y estar preparado para asumir su papel
El rito esencial del bautizo es la unción con el Santo Crisma en la frente del bautizado (y en
Oriente, también en los otros órganos de los sentidos), con la imposición de la mano del
ministro y las palabras: Accipe signaculum doni Spiritus Sancti ("Recibe por esta señal el don
del Espíritu Santo"), en el rito romano; Signaculum doni Spiritus Sancti ("Sello del don del
6. Cibergrafía
http://www.mercaba.org/TEOLOGIA/OTT/536-549_confirmacion.htm
http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p2s2c1a2_sp.html