El Teatro Expo
El Teatro Expo
El Teatro Expo
1.- CONCEPTO:
El término teatro procede del griego theatrón, que puede traducirse como el espacio o
el sitio para la contemplación.
El teatro forma parte del grupo de las artes escénicas. Su desarrollo está vinculado
con actores que representan una historia ante una audiencia. Este arte, por lo tanto,
combina diversos elementos, como la gestualidad, el discurso, la música, los sonidos y
la escenografía.
Por otra parte, el concepto de teatro se utiliza para nombrar al género de la literatura
que abarca aquellos textos pensados para su representación en escena, y también al
edificio donde se representan las piezas teatrales.
2.-ORIGEN:
Casi todos los estudios coinciden en que los primeros indicios del origen del teatro, o
algo parecido, se encuentran en las primitivas ceremonias y rituales relacionados con
la caza. Del mismo modo, tras la recolecta de la cosecha, se realizaban ritos de
agradecimiento con música, cantos y danza.
Gran parte de estos rituales, se convirtieron en verdaderos espectáculos en los que se
expresaban espiritualidad y se rendía devoción y culto a los dioses. Este tipo de
manifestaciones litúrgicas o sagradas son un elemento fundamental para el nacimiento
del teatro en todas las civilizaciones.
Hace miles de años, en Mesopotamia y en África, existían poblados y tribus que tenían
un gran sentido de la mímica, los sonidos y el ritmo. Contaban con gran facilidad para
imitar a los animales y contar grandes historias sobre sus cacerías.
Por tanto, si bien no se puede considerar estas prácticas como teatro, si se puede
considerar que son los primeros indicios del origen del teatro.
Una vez dicho esto, a las preguntas ¿dónde nació el teatro? y ¿quién inventó el
teatro? La respuesta es que el teatro nació en la antigua Grecia entre los siglos V y VI
a.C. Concretamente en su capital, Atenas.
Los ciudadanos atenienses realizaban ceremonias en honor al dios de la vegetación y
del vino Dionisio. Estos ritos evolucionaron poco a poco hasta convertirse en teatro.
Siendo así en uno de los mayores avances culturales de la civilización griega. Tanto
que en cada nueva ciudad o colonia, era imperativo la construcción de un edificio para
el teatro.
TEATRO GRIEGO:
Durante el transcurso del siglo V a. C., en plena Grecia clásica, aparecieron dos
modelos de teatro: la comedia y la tragedia. Sófocles y Esquilo, dos dramaturgos de la
época, incluyeron como novedad un segundo y tercer actor. Esto supuso un aumento
en la complejidad de la ejecución de las obras teatrales, por lo que fue necesario
disponer de mayores escenarios.
Por este motivo, se comenzaron a construir teatros cada vez más grandes.
Actualmente todavía se conserva en bastante buen estado el teatro de Epidauro, del
siglo V a. C. Este recinto tenía una capacidad de 12.000 personas, todo un logro en
aquella época.
También se conserva las ruinas del teatro de Dionisos, en la capital griega (Atenas),
del siglo IV A.C. De esta edificación, llama la atención que para su construcción se
aprovechó la inclinación de la ladera de una montaña. Las gradas para los
espectadores tenían una forma semicircular rodeando a los músicos y el escenario.
Este teatro dispone de una acústica que muy pocos teatros modernos pueden igualar.
Justo detrás de los músicos existía un edificio llamo skené, que era el espacio donde
los actores se cambiaban de vestuario. Delante se erigía un muro con columnas (el
proscenio), dónde se colocaban pinturas que evocaban la acción representadas a
modo de decorados.
1. El drama satírico
2. La tragedia
3. EL mimo
4. La comedia
Los actores del teatro, que eran todos hombres, vestían con un vestuario al uso pero
utilizaban unas máscaras para poder caracterizarse del personaje en cuestión que
tuviera que interpretar.
LA TRAGEDIA GRIEGA:
Dentro del teatro griego, la tragedia es una obra dramática capaz de
causar pena y conmover al público y tiene un final fatídico. En este tipo de
género teatral despuntaron dramaturgos griegos como Sófocles, Eurípides o
Esquilo.
Las principales características de la tragedia griega son:
LA COMEDIA GRIEGA:
La comedia Griega se popularizó a mediados del siglo V a.C. Las comedias más
añejas que se tiene constancia y que han llegado hasta nuestros días son las del autor
Aristófanes. Cuentan con unas cuidadas estructuras inspiradas en los ritos
ancestrales.
Se puede afirmar que el teatro romano emergió fuertemente en siglo III a.C. Pese a
que en principio las obras teatrales tenían un fuerte vínculo con los festivales
religiosos, no pasó mucho tiempo para que esta espiritualidad teatral se desvaneciera.
Esto fue así debido al incremento de festejos y festivales, por lo que el teatro se fue
convirtiendo cada vez más en un entretenimiento del pueblo.
Una vez dicho esto, es lógico que la forma teatral más demandada y que más gustaba
al público popular era la comedia. Los grandes escritores Plauto y Terencio (siglo II
a.C.), marcaron una gran época dentro de las obras teatrales romanas. Por norma
general, eran adaptaciones de obras de la nueva comedia griega.
A este primer periodo se le denomina teatro romano clásico, ya que incluye el teatro
realizado en Roma y Grecia, es decir, las civilizaciones clásicas. Del mismo modo, las
obras de teatro se
escribían en las lenguas
clásicas, latín y griego.
En el 476 d.C. coincidiendo con la definitiva caída del Imperio romano, el teatro clásico
prácticamente desapareció en Occidente. Tuvieron que pasar 450 años para que el
teatro surgiera de nuevo de la mano de algunos artistas populares, denominados
trovadores y juglares.
Hablando de los edificios, los teatros romanos tenían muchas características similares
a la de los teatros griegos, aunque bien es cierto que contaban con algunas
diferencias. Inicialmente fueros construidos con madera y posteriormente en piedra.
Pompeyo construyó en Roma, en el 55 a.C., un teatro de piedra y lujoso mármol que
llevaba su nombre. Sus dimensiones eran descomunales, ya que no solo era un teatro,
era todo un complejo destinado a estas representaciones.
TEATRO ORIENTAL:
Teatro Chino
Se puede afirmar que el teatro chino tradicional tal y como lo conoceos hoy, comenzó
su singladura durante el siglo XIV. En sus inicios contaba con protocolos muy
escrupulosas y era excesivamente literario.
Pero desde inicios del siglo XIX, ha ido evolucionando constantemente. Ha sido muy
influenciado por la ópera de Pekín, que es como se denomina al arte escénico que
integra la recitación, el canto, las artes marciales y la actuación teatral
Por este motivo, en todas las representaciones que se realizaban a lo largo de todo el
territorio chino, se otorgaba más importancia al canto, la danza, las acrobacias y la
interpretación que al texto propiamente dicho.
Teatro Indio
El teatro indio emergió durante los siglos IV y V a.C. Las obras, que eran épicas y
complejas, se estructuraban sobre la base de nueve conceptos o rasas. El nudo
principal de las obras trataba sobre cuestiones espirituales.
Los escenarios contaban con una decoración muy cuidadosa, pero en cambio no se
aplicaban técnicas representacionales. Existían estrictos códigos para las canciones,
la recitación y todos los movimientos de los actores. El teatro Kathakali (teatro bailado)
y el teatro de marionetas han sido siempre muy valorados a lo largo de la historia en
este país.
Es posible que el arte teatral más complejo de Asia sea el teatro japonés. Como
hemos comentado con anterioridad, los dos tipos o géneros más populares son
el Nō y el teatro kabuki.
Como resumen, cabe destacar que estas formas de expresión teatral niponas son
tremendamente bellas, elegantes y refinadas. Como ejemplo basta con ver los
decorados y el vestuario muy bien elaborados, incluyendo los populares abanicos
japoneses. Quizá quieras conocer la historia del abanico.
Estos dos tipos de teatro que hemos descrito, se basan sobre todo en la tradición,
la danza y los rituales, valores que no se tienen en tanta consideración en el teatro
occidental.
Teatro Prehispánico
Del mismo modo, el teatro Maya estaba también estrechamente relacionado con los
ciclos agrícolas y a la grandiosidad de sus hitos históricos.
TEATRO POSTCOLONIAL
Hay que esperar hasta bien entrado el siglo XX para que el teatro latinoamericano
consiga su propia personalidad. Es en este periodo cuando comienza a tratar temas
nativos y prioriza los intereses del público al que va dirigido.
Otro movimiento destacable fue el llamado teatro campesino, impulsado en 1965 por
Luis Valdés tras una importante huelga laboral.
TEATRO MEDIEVAL:
Tras siglos desde el declive del teatro romano, el resurgimiento del teatro en
Occidente debe dar las gracias al clero, que lo utilizaba como una herramienta para la
enseñanza de la doctrina cristiana.
De este modo, en el siglo XI, era habitual ver en las iglesias representaciones que
trataban los mensajes bíblicos y moralistas con el objetivo de adoctrinar de una
manera muy sencilla y entendible para el pueblo llano.
Debes saber que la gran parte de los fieles eran personas analfabetas y sin cultura;
artesanos y campesinos sin ninguna cultura ni formación. Además las misas se
realizaban en latín. Pero poco a
poco a partir de los siglos XIII y
XIV se fue reemplazando por la
lengua autóctona.
En estas representaciones
recibían el nombre de tropos. Se
podía explicar, por ejemplo, la
muerte y resurrección de Jesús,
las buenaventuras o cualquier
otro pasaje de la Bíbilia.
Tenían lugar en el interior de las iglesias, en la parte central o en la parte del coro:
Cada vez eran más elaboradas y espectaculares y de mayor duración. Por lo que
acabaron dando lugar a cierto tipo de teatro religioso cristiano y, por ende, en el teatro
medieval.
Llegado el siglo XIV, el teatro se independizó del estilo litúrgico y eclesiástico para
realizarse en otros lugares fuera de las iglesias. Evolucionó en una especie de ciclos
que contaban con muchos dramas. Algunos historiadores expertos creen que eran
parecidos a los dramas litúrgicos, estos ciclos
nacieron de una forma totalmente independiente.
TEATRO ITALIANO:
No es hasta el siglo XV que se tiene constancia del teatro renacentista en Italia. Pese
a que las primeras obras estaban escritas en latín, pronto se fueron escribiendo en el
idioma materno y, por lo general, trataban sobre temas clásicos.
TEATRO ISABELINO:
A finales del siglo XVI y en el periodo de reinado de Isabel I, fue cuando el teatro
renacentista inglés evolucionó. En aquellos años, lo habitual era crear obras que eran
tragedias de marcado carácter neoclásico y que se interpretaban mayoritariamente en
las universidades. No obstante, gran parte de los poetas de la época isabelina
ignoraban el neoclasicismo o lo empleaban solo en casos puntuales a conveniencia.
Al contrario que el teatro que se realizaba en el resto del continente europeo, escrito
con la intención de representarse ante las clases altas, el teatro renacentista inglés se
cimentaba en fórmulas populares, en el antiguo teatro medieval, y en los gustos y
reivindicaciones del gran público en general.
Los teatros construidos en Inglaterra durante el periodo de Isabel I eran muy distintos
al resto de Europa. Teniendo en cuenta que las obras de teatro se representaban
principalmente en los meses con mejor climatología, los teatros eran al aire libre y de
forma circular. Por tanto, si estar provistos de techo y construidos básicamente con
madera, su rasgo diferencial más importante era la ubicación del escenario. Era de
forma rectangular y en una posición elevada. En torno a él, los espectadores lo
rodeaban por tres de los cuatro lados y los puestos elevados estaban reservados para
las clases altas o la nobleza. Entre todos los teatros de esta época destaca The Globe,
teatro londinense en el que Shakespeare representaba sus obras.
TEATRO ESPAÑOL:
En España, el denominado Siglo de Oro del teatro fue el siglo XVII. Sin duda, uno de
los periodos más prolíferos del teatro universal. Aunque bien es cierto que esta
denominación creó cierta controversia en algunos países europeos. Grandes autores
del denominado Siglo de Oro español son Miguel de Cervantes, Lope de Vega,
Calderón de la Barca y Tirso de Molina.
TEATRO FRANCÉS:
En Francia, una especie de comedia parecida a la farsa era muy popular a finales del
siglo XVI. Tan aclamado era, que opuso gran resistencia al establecimiento definitivo
del drama renacentista.
Durante los siglos XVII (teatro barroco) y sobre todo del XVIII (teatro neoclásico), se
priorizaba un tipo de teatro a medida para los actores. Es decir, los dramaturgos
escribían obras ajustándose al estilo o las preferencias de los intérpretes. Tanto era
así, que incluso se rescribieron grandes clásicos para satisfacer los gustos o caprichos
de los más famosos actores.
TEATRO MODERNO:
Durante buena parte del siglo XIX los conceptos escenográficos y arquitectónicos del
teatro no sufrieron prácticamente cambio alguno. Pero arribando a finales del siglo las
reclamaciones de poder tener
libertad creativa promovidas por
los grandes autores románticos
derivaron a realizar un
replanteamiento del este arte
dramático en todos aspectos.
TEATRO ROMÁNTICO
A finales del siglo XVIII algunas ideas y conceptos filosóficos fueron adquiriendo
bastante notoriedad y finalmente terminaron por cuajar y fusionarse a comienzos del
siglo XIX, dando nacimiento a un movimiento denominado romanticismo.
Esta obra de teatro posee tanto carisma, encanto y fuerza que desde su
estreno hasta nuestros días, nunca ha dejado de interpretarse. Incluso
actualmente se realizan versiones en teatro musical con una escenografía
espectacular.
TEATRO BURGÉS:
Como hemos podido ver, durante el primer cuarto del siglo XIX, tanto el romanticismo
como el melodrama solían agregar un cierto aire exótico, abarcando hechos
extraordinarios o históricos a la vez que simplificaban o idealizaban la elaboración del
personaje.
No obstante, en Inglaterra alrededor del año 1930, los elementos estilísticos y las
características ambas géneros teatrales antes mencionados iniciaron a plasmar la vida
diaria y las cuestiones cuotidianas del momento: el teatro burgués.
TEATRO DE MELODRAMA:
TEATRO CONTEMPORÁNEO:
Se puede afirmar, sin miedo a equivocarse que a partir del teatro renacentista, éste ha
procurado esforzarse para alcanzar un total realismo. Paradójicamente, una vez que lo
consiguió a finales del siglo XIX, emergió un movimiento antirracista que en este arte
escénico.
La dirección
La actuación
El texto
Recuerda que a las personas que escriben las obras de teatro se le denomina
dramaturgos. Pero también este término se emplea para el escritor de teatro dramático
o de dramas en general.
TEATRO EXPRESIONISTA:
Los primeros 20 años del siglo XX fueron en los que el teatro expresionista tuvo su
mayor apogeo, sobre todo en Alemania. Esta
modalidad pretendía profundizar en los
aspectos más grotescos y violentos de la
psique humana.
El teatro del Absurdo surge justo después de la segunda guerra mundial. Su principal
génesis proviene del absurdo y sinsentido de un mundo desilusionado,
desesperanzado y destruido.
Los musicales aparecieron en la década de los años veinte del siglo XX. Una
amalgama de bailes, canciones, diálogos y pequeñas piezas cómicas versionando
incluso historias que originalmente eran dramáticas.
TEATRO SIMBOLISTA:
Durante el siglo XIX también emergió una corriente simbolista. Los afines a este
movimiento, los simbolistas, pretendían conseguir la “desteatralización” del teatro. Esto
es, eliminar todos los avances escénicos y tecnológicos y substituirlos por una
espiritualidad proveniente de la interpretación y del texto.
En este género de teatro, los textos estaban dotados de una simbología bastante
compleja de interpretar por parte de los actores. Por norma general, el ritmo de estas
obras era bastante lento, buscando el mismo tempo que se puede tener en un sueño.
4.-ELEMENTOS DEL TEATRO:
1.-ACTOR:
Es un artista presente sobre el espacio escénico, cuya misión es actuar y hablar en un
universo ficcional que él construye o contribuye a construir.
Debe haber al menos uno y no necesariamente deben ser personas pues también
pueden usarse marionetas o títeres.
Tal como lo refiere Ricard Salvat “El actor es, de
todos los elementos de la nómina teatral, el que
resulta imprescindible. A la hora de ir
prescindiendo de algunos componentes del
complejo teatral, siempre acabándonos
reduciendo al actor”
El actor o los actores son quienes dan vida a los
personajes, a través de sus acciones, sus
palabras y vestimenta.
Son ellos quienes recitan diálogos imprimiendo tonos vocales, dicción, emociones y
energía que refuerzan la credibilidad de la actuación e influyen en el involucramiento
de los espectadores en la historia.
Visto de otro modo, el cuerpo del actor se presenta como algo vivo, integrado, capaz
de encarnar al personaje con todas las exigencias corporales y físicas que la ficción lo
requiera.
2.- TEXTO:
Se trata del escrito que plantea la historia a ser desarrollada y consta de una
estructura similar a la del cuento (inicio, nudo y desenlace), que en el caso puntual del
teatro se le conoce como Planteamiento, Nudo o Clímax y desenlace.
Las obras dramáticas siempre van
escritas en diálogos en primera
persona y hace uso de los
paréntesis cuando se quiere
precisar la acción que se lleva a
cabo mientras se pronuncia el
fragmento(a esto se le conoce
como lenguaje acotacional).
Cuando la pieza literaria va a ser
llevada al escenario o a cine, se le
denomina “guión”.
Dicho escrito no se divide en capítulos (como normalmente se haría en una novela u
otro tipo de prosa) sino en actos, que a su vez puede dividirse en fragmentos aún más
pequeños conocidos como cuadros.
El texto es el espíritu y la génesis del teatro; sin él no es posible hablar de teatro. Su
grado de necesidad es tal que se puede “atender el sentido común y comprobar que
no conocemos ninguna obra de teatro sin texto, por lo que partimos de la hipótesis de
que el teatro es <<texto más representación>>
3- AUDIENCIA
Se considera espectador a todo aquel que ve una obra de teatro o acude a un
espectáculo. Aparentemente la audiencia no interfiere en el desarrollo de la obra de
teatro, sin embargo, el propósito de ésta es entretener al público. Son los
espectadores la razón de ser del teatro.
A lo largo de una obra teatral se construye
una relación entre la audiencia y los
actores; y gracias a ellos no solo se
completa el ciclo de creación-comunicación
sino también se recibe retroalimentación
inmediata a los actores, pues no hay
audiencia pasiva sino que todos son
observadores críticos que desarrollan una
percepción positiva o negativa del arte
visual que contemplaron.
ELEMENTOS COMPLEMENTARIOS:
Los elementos siguientes no son vitales para llevar a cabo una obra de teatro pero su
contribución aporta gran valor a la hora de hacer la historia más interesante,
organizada, creíble y real.
En palabras de Salvat: “<<los accesorios escénicos>> como los decorados, luces,
utilería, vestuario, maquinaria, etc., los cuales contribuyen a crear la ilusión en la
realidad irreal de la escena”. Estos son:
1- VESTUARIO:
Es el atuendo que llevan puestos los actores. A través de ellos y sin necesidad de
enunciar palabras, el público puede identificar el género, la edad, la ocupación, el
estatus social y las
características de los
personajes, así como la época
en la que se desarrolla la
historia.
Hoy en día existe una persona
dedicada exclusivamente a este
aspecto y trabaja de la mano con
el director y con los maquillistas
para crear armonía en la
construcción de la apariencia del
personaje.
2- MAQUILLAJE:
Se utiliza para arreglar las distorsiones producidas por la
iluminación (como la pérdida de color o exceso de brillo facial).
Adicionalmente, la aplicación de productos cosméticos sirve para
consolidar el personaje mediante su caracterización exterior,
resaltando o disimulando facciones de los actores o agregando
efectos a los personajes: rejuvenecer, envejecer, hacer lunares,
cicatrices o simular heridos, entre otros.
3- ESCENOGRAFÍA:
Corresponde al conjunto de decorados empleados para ambientar la representación
dramática. Esto significa que es el espacio en el que interactúan los actores, decorado
de tal manera que muestra el espacio geográfico, temporal, histórico y social en el que
se desarrolla la historia.
La mayoría de elementos son estáticos y para
producir un efecto más impactante, se apoyan
en la iluminación. Un ejemplo sencillo puede
ser el escenario propuesto “de día” y “de
noche”.
A los utensilios o herramientas utilizados por
los actores durante la actuación se les
denomina objetos de utilería.
4- ILUMINACIÓN:
Tal como ocurre con la escenografía, la iluminación abarca los objetos como la acción
de manejar las luces. Es decir, la iluminación es el conjunto de luces empleadas
durante la
representación artística,
así como la creación y
ejecución de las mismas
para ayudar a transmitir
emociones, resaltar y
esconder actores, y
darle más asertividad a
la escenografía, el
maquillaje y el vestuario.
5- SONIDO:
Constituido por la música y todo efecto auditivo para mejorar los aspectos acústicos de
la pieza teatral a los actores y al público.
Por ejemplo, los micrófonos para que los diálogos de los actores puedan ser
escuchados por la audiencia, reforzar la transmisión de una emoción o de una acción
tales como el sonido de la lluvia o el freno súbito de un carro.
6- DIRECTOR:
Es el artista creativo encargado de la coordinación de todos los elementos que
intervienen en la actuación, desde la escenografía hasta la interpretación. Es el
responsable de la organización material del
espectáculo.
La figura del director es prácticamente nueva
en relación a toda la trayectoria histórica del
teatro: el trabajo del director escasamente
existía antes de 1900 como una función
artística separada y antes del teatro de 1750,
muy rara vez (Balme, 2008).
Lo anterior se prueba en el hecho que en el
teatro griego, en el teatro romano, el medieval
y del Renacimiento esta figura no existía en el sentido estricto de la palabra. Esta
persona no está presente en el escenario, a diferencia de los actores.
5.-SUS GÉNEROS:
MONÓLOGO: Pieza dramática interpretada por un solo actor, aún cuando en ella
intervengan varios personajes; es un parlamento de extensión superior a lo habitual en
los diálogos, pronunciado en solitario o en presencia de otros personajes.