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Determinación Del CB de Chicharritas

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ESCUELA POLITECNICA DEL EJÉRCITO

DEPARTAMENTOS DE CIENCIAS DE LA VIDA


CARRERA DE INGENIERÍA EN CIENCIAS AGROPECUARIAS
SANTO DOMINGO

TEMA:

DETERMINACIÓN DEL CICLO BIOLÓGICO, DISTRIBUCIÓN Y


DAÑOS OCASIONADOS POR CHICHARRITAS (HEMÍPTERA:
CICADELLIDAE Y DELPHACIDAE), EN MAIZALES DE LA
PROVINCIA DE LOS RÍOS

AUTOR:

MARCO EDISON CEDEÑO CELORIO

INFORME TECNICO DEL PROYECTO DE INVESTIGACIÓN

2011
ESCUELA POLITECNICA DEL EJÉRCITO
DEPARTAMENTOS DE CIENCIAS DE LA VIDA
CARRERA DE INGENIERÍA EN CIENCIAS AGROPECUARIAS
SANTO DOMINGO

TEMA

DETERMINACIÓN DEL CICLO BIOLÓGICO, DISTRIBUCIÓN Y


DAÑOS OCASIONADOS POR CHICHARRITAS (HEMÍPTERA:
CICADELLIDAE Y DELPHACIDAE), EN MAIZALES DE LA
PROVINCIA DE LOS RÍOS

AUTOR

MARCO EDISON CEDEÑO CELORIO

INFORME DEL PROYECTO DE INVESTIGACIÓN PRESENTADO


COMO REQUISITO PARCIAL PARA OPTAR AL TÍTULO DE
INGENIERO AGROPECUARIO

SANTO DOMINGO - ECUADOR

2011
TEMA

DETERMINACIÓN DEL CICLO BIOLÓGICO, DISTRIBUCIÓN Y DAÑOS


OCASIONADOS POR CHICHARRITAS (HEMÍPTERA: CICADELLIDAE Y
DELPHACIDAE), EN MAIZALES DE LA PROVINCIA DE LOS RÍOS

MARCO EDISON CEDEÑO CELORIO

REVISADO Y APROBADO

…………………………………..
Mayo. Ing. René González V.
DIRECTOR DE CARRERA
INGENIERIA EN CIENCIAS AGROPECUARIAS

...................................... ......................................
Ing. Marcelo Patiño Ing. Roberto Flores
DIRECTOR CODIRECTOR

......................................
Ing. Vinicio Uday
BIOMETRISTA

…………………………………..
SECRETARÍA ACADÉMICA
TEMA
DETERMINACIÓN DEL CICLO BIOLÓGICO,
DISTRIBUCIÓN Y DAÑOS OCASIONADOS POR
CHICHARRITAS (HEMÍPTERA: CICADELLIDAE Y
DELPHACIDAE), EN MAIZALES DE LA PROVINCIA DE
LOS RÍOS

MARCO EDISON CEDEÑO CELORIO

APROBADO POR LOS SEÑORES MIEMBROS DEL


TRIBUNAL DE CALIFICACION DEL INFORME TECNICO

CALIFICACION FECHA

Ing. Marcelo Patiño _____________ ______________


DIRECTOR

Ing. Roberto Flores _____________ ______________


CODIRECTOR

CERTIFICO QUE ESTAS CALIFICACIONES FUERON


PRESENTADAS EN ESTA SECRETARIA

…………………………………..
SECRETARÍA ACADÉMICA
DEDICATORIA

A mis queridos padres

A mis hermanos

A mis amigos
AGRADECIMIENTO

A mis amados padres, Marcos Augusto y Santa Margarita, por haberme dado todo el
apoyo y el cariño necesarios para salir adelante en mis estudios.

A la ESPE, su carrera de Ingeniería en Ciencias Agropecuarias y su personal docente por


todos los conocimientos adquiridos y la guía que me dieron.

Al Director y Codirector del proyecto de tesis, por sus acertadas recomendaciones y guía
para la elaboración del proyecto de tesis.

A la Estación Experimental Tropical Pichilingue del INIAP por toda la ayuda que me
brindaron para llevar a cabo mi trabajo de investigación.

Al Ing. Raúl Quijije por su gran ayuda y apoyo, y por ser una de las personas que con
sus conocimientos, aportó para que la investigación sea llevada de una mejor manera.

A mis queridos hermanos, Joffre, Jairo, Edgar y Carolina ya que estuvieron en los
momentos precisos para incentivarme con palabras de apoyo.

A mis queridos compañeros de clases en especial para Fidel, Edinson, Jorge, Antonio,
Diego y Nataly, que de una u otra forma me supieron apoyar y dar ánimo durante todo
mi trayectoria como estudiante.

A mis estimados amigos tesistas del INIAP, que con su compañía y ayuda hicieron más
llevadero el trabajo de campo.

A todas esas personas que me supieron dar ese apoyo moral, que es tan importante para
llevar de una mejor manera todos los problemas que se presentan durante la vida
estudiantil.
AUTORÍA

Las ideas expuestas en el presente trabajo de investigación, así como los resultados,
discusión y conclusiones son de exclusiva responsabilidad del autor.

______________________
FIRMA
ÍNDICE DE CONTENIDO

CONTENIDO Página

I. INTRODUCCION………………………………………………………................1

II. REVISION DE LITERATURA…………………………………………………..4

2.1. ASPECTOS GENERALES DEL CULTIVO DE MAIZ…………………..4

2.2. PRINCIPALES PROBLEMAS FITOSANITARIOS DEL MAIZ………...4

2.2.1 Insectos Vectores De Patógenos…………….…………………....4

2.3. DISTRIBUCION Y BIOLOGIA DE Dalbulus maidis…………………….5

2.4. DISTRIBUCION Y BIOLOGIA DE Hortensia similis…………………...8

2.5. DISTRIBUCION Y BIOLOGIA DE Peregrinus maidis ………………….8

2.6. PATOGENOS IMPORTANTES DEL MAÍZ…………….…………...…10

III. MATERIALES Y METODOS…………………………………………………..12

3.1. CARACTERIZACION AGROMORFOLOGICA……………………….12

3.1.1 Lugar de Investigación…………………………………………..12


3.1.1.1. Ubicación política………………………………..12
3.1.1.2 Ubicación geográfica…………………………….12
3.1.1.3. Características climáticas………………………..13
3.1.2. Materiales………………………………………………………..13
3.1.3. Análisis Estadístico de Datos……………………...…………….13
3.1.3.1. Experimento1: Determinación del ciclo
biológico de las chicharritas dominantes del cultivo de maíz ………………................13

3.1.3.2. Experimento 2: Distribución espacial

de las chicharritas y su dinámica poblacional en el maíz……………………………….14

3.1.3.3. Experimento 3: Estimación del grado de


detrimento causado por las chicharritas en el cultivo de maíz………………………….14

3.1.3.4. Experimento 4: Encuesta a varios agricultores

de las zonas maiceras del Litoral ecuatoriano...………………………………………...14

3.1.4. Registro de Datos………………………………………………..15

3.1.4.1. Experimento 1…………………………………...15

3.1.4.2. Experimento 2………………………………...…15

3.1.4.3. Experimento 3………………………………...…15

3.1.4.4. Experimento 4………………………………...…16

3.1.5. Manejo del Experimento………………………………………...16

3.1.5.1. Experimento 1: Determinación del ciclo

biológico de las chicharritas dominantes del cultivo de maíz…………………………..16

3.1.5.2. Experimento 2: Distribución espacial de

las chicharritas y su dinámica poblacional en el maíz………………………………….17

3.1.5.3. Experimento 3: Estimación del grado de

detrimento causado por las chicharritas en el cultivo de maíz………………………….17

3.1.5.4. Experimento 4: Encuesta a varios agricultores

de las zonas maiceras del litoral ecuatoriano………………………………………...…17


IV. RESULTADOS……………………………………………………………….…..18

4.1. CICLO BIOLÓGICO……………………………………………………..18

4.1.1. Experimento 1: Ciclo Biológico de Dalbulus maidis………..….18


4.1.2. Experimento 2: Distribución espacial de las chicharritas
y su dinámica poblacional en el maíz………………………………………………..…22

4.1.3. Experimento 3: Grado de daño causado por las


chicharritas………………………………………………………………………….…..26

4.1.4. Experimento 4: Encuesta a varios agricultores de las zonas


maiceras del litoral ecuatoriano sobre el manejo agronómico en el cultivo…..……….28

V. DISCUSION…….………………………………………………………………..32

5.1. EXPERIMENTO 1: CICLO BIOLÓGICO DE D. maidis Y P. maidis…. 32

5.2. EXPERIMENTO 2: DISTRIBUCIÓN ESPACIAL DE LAS


CHICHARRITAS Y SU DINÁMICA POBLACIONAL EN EL MAÍZ....……………33

5.3. EXPERIMENTO 3: GRADO DE DAÑO CAUSADO POR LAS


CHICHARRITAS………….……………………………………………………………33

5.4. EXPERIMENTO 4: ENCUESTA A VARIOS AGRICULTORES DE


LAS ZONAS MAICERAS DEL LITORAL ECUATORIANO SOBRE EL
MANEJO AGRONÓMICO EN EL CULTIVO………………………………………...34

VI. CONCLUSIONES………………………………………………………………..35

VII. RECOMENDACIONES……………………………………………………….…36

VIII. RESUMEN………………………………………………………………….…….37

IX. SUMARIO………………………………………………………………………..37

X. BIBLIOGRAFIA………………………………………………………...……….38

XI. ANEXOS……………………………………………………………...………….42
INDICE DE CUADROS

Cuadros Página

Cuadro 1. Ciclo biológico de D. maidis en condiciones confinadas


(24,5°C). EET-Pichilingue, 2009………………………………………………………18

Cuadro 2. Cantidad de huevos ovipositados por D. maidis en plántulas


de maíz, utilizando 20 adultos hembra por jaula. EET-Pichilingue, 2009…………..….19

Cuadro 3. Ciclo biológico de P. maidis en condiciones confinadas


(24,5°C). EET-Pichilingue, 2009………………………………………………………20

Cuadro 4. Cantidad de huevos ovipositados por P. maidis en plántulas


de maíz, utilizando 20 adultos hembra por jaulas6/. EET-Pichilingue, 2009…………..20

Cuadro 5. Distribución espacial y dinámica poblacional de las chicharritas


Dalbulus maidis, Peregrinus maidis y Hortensia similis registrados en un
lote experimental de la EET-Pichilingue, 2009…………………………………………23

Cuadro 6. Distribución espacial y dinámica poblacional de las chicharritas


Dalbulus maidis, Peregrinus maidis y Hortensia similis registrados en un
lote experimental de la EET-Pichilingue, 2009…………………………………………24

Cuadro 7. Distribución espacial y dinámica poblacional de las chicharritas


Dalbulus maidis, Peregrinus maidis y Hortensia similis registrados en un
lote experimental de la EET-Pichilingue, 2009…………………………………………25

Cuadro 8. Relación entre población de D. maidis y ”Cinta Roja” en plantas


de maíz. EET-Pichilingue, 2009………………………………………………………..27

Cuadro 9. Incidencia de “Cinta Roja” en plantas de maíz………………………….27

Cuadro 10 Número de aplicaciones de agroquímicos realizadas por agricultores


de diferentes zonas de la provincia de Los Ríos, 2009…………………………………...31
INDICE DE ANEXOS
Anexos Página

Anexo 1. Fotos del estudio biológico de las chicharritas …..……………………..42

Anexo 2. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector Mocache, 2009. ……………………………………………...……43

Anexo 3. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector Mocache, 2009…………………………………………………....44

Anexo 4. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector Mocache, 2009……………………………………………………45

Anexo 5. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector Mocache, 2009. …………………………………………………...46

Anexo 6. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector PATRICIA PILAR, 2009…………………………………………47

Anexo 7. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector PATRICIA PILAR, 2009…………………………………………48

Anexo 8. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector PATRICIA PILAR, 2009…………………………………………49

Anexo 9. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector VINCES, 2009……………………………………………………50

Anexo 10. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector VINCES, 2009 …………………………………………………...51

Anexo 11. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector VINCES, 2009……………………………………………………52

Anexo 12. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector VALENCIA, 2009………………………………………………..53

Anexo 13. Registro Agronómico de las actividades desarrolladas por el agricultor


en un lote del sector VALENCIA, 2009………………………………………………..54
I. INTRODUCCION

El maíz es uno de los tres cereales de mayor consumo en el mundo. Más de


cuatrocientos millones de personas en América Central, México, África y Asia
dependen de ese cultivo para su subsistencia. En países tropicales su productividad es
baja debido en gran parte a problemas de enfermedades virales (FAO y CIMMYT,
citado por Valdez et al. 2004).

Nielson y Remes Lenicov, citado por Virla et al. (2003), sostienen que de los
insectos diseminadores de enfermedades a las plantas, una alta proporción están
incluidos en el Suborden Homoptera y mayormente en la familia Cicadellidae. A más
del problema que causan estos insectos debido a la transmisión de virus y otros
patógenos, los homópteros ocasionan otro tipo de daños que pueden variar desde
necrosis a severas alteraciones fisiológicas producidas por sus hábitos de alimentación
y/u oviposición (Nielson; Nault y Ammar; Remes Lenicov y Virla, citado por Virla et
al. 2003).

Una limitante en los rendimientos del maíz es la enfermedad conocida como


"Cinta Roja" que se presenta con un enrojecimiento de las hojas, y achaparramiento que
fue reportado por primera vez en el año de 1945 en Texas por Aislat, manifestando que
era producida por un virus y su vector es el insecto Dalbulus maidis (Osler, citado por
Delgado, 2006).

Osler, citado por Arichabala (2006) manifiesta que el achaparramiento es una de


las enfermedades más importantes que limitan la productividad de maíz en América
Latina, especialmente en América Central y otras áreas tropicales del continente. Puede
llegar a ocasionar pérdidas de rendimiento que han sido estimadas entre el 25 y el 100%.

Mediante su distribución geográfica los agentes causales han sido encontrados en


EEUU, México, Centro América, El Caribe y Sudamérica (Leonardo et al., citado por
Arichabala, 2006).

Nault y Ammar, citados por Virla et al. (2003), manifiestan que las relaciones
"vector-patógeno" en los cicadélidos varían desde la simple transmisión mecánica o

1
"foregut borne", a los tipos "circulativo" o "propagativo" en los cuales el vector es un
eslabón fundamental en el ciclo vital de las enfermedades. Desde el punto de vista
epidemiológico, el estudio de los cicadélidos es relevante por afectar a numerosos
cultivos, particularmente al maíz (Zea mays L.), cuya producción se ve restringida por
enfermedades de diversa etiología.

Cedeño (2008), determinó que en el cultivo de maíz se presentan alrededor de 31


especies de chicharritas; de las cuales 27 (=87,09%) pertenecen a la familia
Cicadellidae, tres (=9,67%) a la familia Delphacidae y una (=3,23%) a la familia
Cercopidae, destacándose las especies: D. maidis, P. maidis, Tylozygus fasciatus,
Hortensia similis, entre otros.

Las chicharritas al succionar savia en las plantas de maíz per se no causan daño
importante al cultivo, pero el daño principal es causado cuando transmiten
enfermedades como el achaparramiento y el rayado fino. El achaparramiento puede
totalmente inhibir la formación de mazorcas; los ataques tempranos muestran síntomas
con poco desarrollo de raíces, tallo corto, ahijamiento, hojas amarillentas y rojizas,
escasa producción de polen, proliferación de las mazorcas que no llegan a la formación
de grano. Mientras que, en ataques tardíos en plantaciones de maíz, la pérdida en los
rendimientos es baja. La mayoría de las plantas que son infestadas en la etapa de
verticilio tardío madurarán sin manifestar ninguno de los síntomas antes mencionados.
Sin embargo, algunas pueden presentarse con el achaparramiento y hojas superiores de
color morado rojizo (Cuadra y Maes, 1990).

El achaparramiento del maíz es la enfermedad de mayor importancia en


Mesoamérica. Los países más afectados por el achaparramiento son: Nicaragua, El
Salvador, República Dominicana y México. Desde Costa Rica y Honduras se
reportaron recientemente mayores intensidades y mermas económicas por esta
enfermedad, pues se reporta que estos países tienen pocos recursos económicos, para
manejar el problema (Cuadra y Maes, 1990).

Las chicharritas de las familias Cicadellidae (subfamilia Deltocephalinae) y


Delphacidae, son muy abundantes en poáceas (= gramíneas), constituyen el principal

2
grupo de vectores en las Américas, transmitiendo seis virus y dos molicutes, conocidos
como el Spiroplasma kunkelii y el fitoplasma del maíz. En América Latina, siete de las
enfermedades de maíz asociadas a vectores son importantes: la enfermedad pálida y la
enfermedad roja, causada por S. kunkelii y por el fitoplasma del maíz, respectivamente;
y la virosis conocida con los nombres de rayado del maíz, rayado fino, mosaico del
maíz, mosaico común, mal de Río Cuarto y el moteado clorótico del maíz (López et al,
2004).

De Long y Wolcott, citados por Virla et al. (2003), sostienen que a pesar de la
importancia económica de la chicharrita del maíz, el comportamiento de D. maidis en
América, es poco conocido; y sus recomendaciones mayormente están basadas en
observaciones realizadas en el hemisferio norte.

El objetivo general de la presente Investigación fue desarrollar información


básica para el diseño de sistemas de manejo de la “Cinta roja” del maíz, en la zona
central del Litoral ecuatoriano, lo cual podemos afirmar que se ha realizado con mucha
satisfacción, como se lo va a demostrar en los capítulos posteriores.

Como objetivos específicos se planteó lo siguiente:

• Determinar el ciclo biológico de especies de chicharritas (Dalbulus maidis y


Peregrinus maidis) dominantes en plantaciones de maíz en la zona central
del Litoral ecuatoriano, en condiciones de laboratorio.

• Conocer la distribución espacial de las chicharritas en el cultivo de maíz,


durante la época seca y lluviosa.

• Estimar el grado de daño causado por las principales chicharritas en


diversos agrosistemas maiceros de la provincia de Los Ríos.

3
II. REVISIÓN DE LITERATURA

2.1. ASPECTOS GENERALES DEL CULTIVO DE MAÍZ

El maíz (Zea mays L) es un cultivo de mucha importancia tanto para la


alimentación humana como para la animal, y su propagación está generalizada por todo
el planeta, tanto en regiones templadas como en regiones tropicales y subtropicales.
Actualmente se lo cultiva en la mayoría de los países del mundo y es el tercer producto
de importancia comercial, después del trigo y el arroz. Los países que lo cultivan en
mayores proporciones son Estados Unidos, República Popular de China y Brasil, y la
suma de la producción de estos países juntos abarcan aproximadamente el 73% de lo
producido mundialmente en el año (INSA, 1996).

En Ecuador, la explotación de maíz seco se realiza solo o asociado, y está


concentrado principalmente en las provincias de Los Ríos, Manabí y Guayas, con
60.517; 47.880 y 44.307 hectáreas, respectivamente (MAG y SICA, 2003).

2.2. PRINCIPALES PROBLEMAS FITOSANITARIOS DEL MAÍZ

2.2.1. Insectos Vectores de Patógenos

Los estudios demuestran que el maíz es una especie vegetal nativa de


América, con centro de diversidades en el sur de México (Doebley, citado por López y
De Oliveira, 2004), y éste es atacado por muchos virus transmitidos por insectos
vectores que afectan significativamente el cultivo.

Las Investigaciones orientadas al conocimiento de la capacidad vectora de


los insectos transmisores de enfermedades datan desde hace 30 años, y provienen
principalmente del Japón, Italia, Israel y EEUU (De Coll et al. s/f). Actualmente, se
conocen alrededor de 165 especies de Hemípteros (Homoptera), pertenecientes a los
auquenorrincos, que demuestran la capacidad de transmitir virus, mollicutes y bacterias
a las plantas cultivadas. De estas 165 especies, 25 son fulgoroideos de las familias:

4
Delphacidae, Cixiidae y Flatidae, de las 140 especies restantes, 128 pertenecen a la
familia Cicadellidae (De Coll et al. s/f). La subfamilia Deltocephalinae (con
aproximadamente 66 especies) es la que reúne el mayor número de especies
transmisoras de patógenos (Liria, 2003).

Dentro de los insectos se encuentra el 99% de los artrópodos que transmiten


patógenos, dentro de los cuales, es considerado como el más importante el Orden
Hemíptera (= Homóptera), debido a que posee un gran número de especies que
producen afecciones, particularmente los insectos del grupo Auchenorrhyncha (=
Auquenorrincos). Son exclusivamente fitófagos y por lo general causan daños a la
agricultura, los mismos que pueden ser necrosis en distintos grados de severidad, hasta
intensas infecciones producidas por su gran habilidad de transmitir virus u otros agentes
patológicos (De Coll et al. s/f )

2.3. DISTRIBUCIÓN Y BIOLOGÍA DE Dalbulus maidis

Delong y Wolcott, citados por Cuadra y Maes (1990), manifiestan que Dalbulus
maidis pertenece al orden Homóptera, suborden Auchenorrhyncha, familia Cicadellidae.
Los Cicadellidae forman una familia numerosa de pequeños homópteros, de coloración
muchas veces verde, café, gris o negro. Muchas especies son de importancia
económica, entre ellas se cuenta D. maidis como principal plaga del maíz.

King y Saunders (1984), Cuadra y Maes (1990), sostienen que D. maidis se


encuentra distribuido desde el sur de los Estados Unidos, México, América Central,
América del Sur y El Caribe, hasta alturas de 2.000 metros sobre el nivel del mar.

Por otra parte, Omán; Triplehorn y Nault, citados por López y De Oliveira
(2004), argumentan que D. maidis se encuentra distribuido en todas las regiones
tropicales y subtropicales del continente americano, y su presencia va desde el sur de los
EEUU hasta el norte de Argentina. Su intervención en la agricultura está desde el nivel
del mar hasta alturas como las sierras Mexicanas o los Andes Peruanos (Nault, citado
por López y De Oliveira, 2004).

5
Nault y De Long, citados por Virla (2003), sostienen que en el Sudoeste de
México, considerado el centro de origen de los Dalbulus, suceden veranos muy
lluviosos con inviernos secos, caracterizados por muy bajas precipitaciones, bajas
temperaturas y días cortos. El maíz, hábitat natural del vector, desaparece al final de la
estación lluviosa y reaparece recién con el comienzo de la misma, cuando se reimplanta
el cultivo.

King y Saunders (1984) y Cuadra y Maes (1990), indican que D. maidis es una
chicharrita de la subfamilia Deltocephalinae (Homóptera: Cicadellidae). El adulto
macho mide 3,5 a 4,0 mm de longitud, y la hembra mide de 4,0 a 4,1 mm de longitud.
La hembra se distingue del macho por tener ovipositor bajo el abdomen, visible a
simple vista, por estar algo más oscuro que el resto del cuerpo. Los adultos son de color
amarillo paja con dos manchas redondas negras sobre el vértice de la cabeza. Las alas
traseras son translúcidas, se extienden más allá de la punta del abdomen. Las ninfas son
de color amarillo translúcido y carecen de las manchas. Del primer al tercer estadío
ninfal presentan manchas negras bien definidas pero en el octavo terguito abdominal.

Por otra parte, López y De Oliveira, (2004), señalan que D. maidis posee una
longitud cerca de 3,7 a 4,3 mm de longitud, y las hembras son más grandes que los
machos; y como las anteriores referencias, el color es amarrillo paja pero la coloración
en algunas regiones puede variar, de acuerdo al clima, siendo más claros o más oscuros.
Los machos por lo general presentan el abdomen con coloración amarilla viva,
diferenciándose del tórax y la cabeza, que son más opacos. Las hembras presentan una
coloración prácticamente homogénea en todo el cuerpo.

Los mismos autores señalan que los insectos adultos presentan dos pares de alas
transparentes, con nervaduras distribuidas longitudinalmente. Su aparato bucal es del
tipo chupador labial, con tres segmentos. Las antenas son cetáceas con filamento apical.
Los individuos de esta especie presentan dos filas de pequeñas espinas en las tibias de
las patas posteriores, característica de los cicadélidos, y dos manchas circulares negras
bien marcadas en la cabeza.

6
Cuadra y Maes (1990), manifiestan que D. maidis se puede encontrar
principalmente en el envés de las hojas, al lado de la nervadura central. La chicharrita
prefiere plantas de tres semanas o un mes. En promedio la hembra pone 132 huevos
durante su vida y deposita de 4 hasta 19 uno a uno, pero a menudo en hileras de 8. El
huevo es muy pequeño y de forma ovalada, recién puesto es incoloro y de coloración
blanca una semana después. El período de preoviposición tiene un rango de 1 a 7 días.
El período de oviposición tarda entre 10 y 50 días, en promedio 33 días, el estadío de
huevo tarda 23 días.

Después de la eclosión las ninfas de D. maidis pasan por cinco estadíos antes de
convertirse en adultos. El estadío ninfal dura de 10 a 14 días con temperaturas de 26,7
grados centígrados. Las chicharritas se alimentan en la base de las hojas dentro del
cogollo, en las axilas y en la parte inferior de la planta. Frecuentemente viven en
colonias que comprenden todos los estadíos. Las colonias pueden ser atendidas por
hormigas que buscan la melaza secretada. La chicharrita prefiere principalmente al
maíz; pero tiene otros hospederos, como Lauraceae: Persea (aguacate); Malvaceae:
Gossypium (algodón); Poaceae: Paspalum, Euchlaena; Solanaceae: Solanum (papa,
berenjena), aunque parecen ser hospederos accidentales, ya que D. maidis no se
reproduce sobre estas plantas.

En El Salvador se determinó que el ciclo biológico de D. maidis es de 20 a 25


días. En Centro América la chicharrita necesita cinco o seis semanas para completar
una generación con la posibilidad de cumplir seis a ocho generaciones por año en la
zona del pacífico, es aquí donde existen por las temperaturas altas y el clima seco
condiciones para el desarrollo del insecto y los patógenos. D. maidis es un insecto
vector que propaga los agentes patogénicos causantes de la enfermedad del
achaparramiento de maíz, la cual fue observada por primera vez en Nicaragua en 1956
en Sta. Rosa, Managua. Estos patógenos no se pueden transmitir mecánicamente, ni por
semillas; pero son transmitidos por el vector de manera persistente, multiplicándose en
el mismo.

López y De Oliveira,. (2004), a diferencia de las anteriores referencias manifiesta


que el ciclo de vida de D. maidis dura de 25 a 30 días a temperaturas que van de 25 a

7
26°C, y la postura es endofítica y lo hacen preferiblemente en la nervadura central. Las
hembras tienen la capacidad de ovipositar de 400 a 600 huevos durante el transcurso de
su vida. El periodo embrionario de D. maidis dura ocho a nueve días y en temperaturas
inferiores a 20°C no existe eclosión. La chicharrita completa su estadio ninfal en 17
días, y la media de supervivencia de un adulto es de siete a ocho semanas en
condiciones de temperatura de 26 grados centígrados.

Triplehorn y Nault, citados por Virla (2003), indican que D. maidis es monófago
y solo se alimenta sobre representantes del género Zea (maíz y teosintes), aunque se lo
puede encontrar en otras malezas como hospederos eventuales.

2.4. DISTRIBUCIÓN Y BIOLOGÍA DE Hortensia similis

King y Saunders (1984), manifiestan que Hortensia similis se encuentra


distribuida desde el sur de los Estados Unidos a América del Sur y el Caribe. Además
señalan que el ciclo de vida de H. similis comprende de cuatro a siete días en su estado
de huevo, y que ovipositan generalmente en las venas de las hojas en grupos de cuatro a
siete. El estado de ninfa dura de 14 a 20 días y su color es amarillo pálido, luego
marcadas con café y se alimentan de tejidos tiernos en el envés de las hojas jóvenes. En
la fase adulta tienen de cinco a siete milímetros de largo, de color verde; la cabeza, la
parte frontal del pronoto, las patas y el abdomen amarillos, con marcas negras sobre la
cabeza y el pronoto.

2.5. DISTRIBUCIÓN Y BIOLOGÍA DE Peregrinus maidis

King y Saunders (1984), afirman que Peregrinus maidis se encuentra distribuido


desde Estados Unidos hasta América del Sur y El Caribe. López y De Oliveira, (2004),
aseveran que P. maidis es una chicharrita que se encuentra distribuida en todas las
regiones tropicales y subtropicales del planeta, y que principalmente se encuentran en
áreas bajas y húmedas, pero aún no ha sido registrada en Europa. Las plantas
hospederas de P. maidis está restringida a algunas poáceas como Rottboelia exaltata L.,

8
y algunas plantas del género Sorghum y Zea; sin embargo, hay algunas otras especies
donde estas chicharritas pueden sobrevivir por periodos variables de tiempo.

Marín y Sarmiento; Tsai y Wilson; Fernández-Badillo y Clavijo, citados por


López y De Oliveira, (2004), manifiestan que en maíz el ciclo de vida de un adulto de P.
maidis es de 24 días aproximadamente a una temperatura de 25 a 27 °C. Las hembras
pueden ovipositar de 100 a 600 huevos durante toda su vida, poseen un periodo
embrionario de ocho días. La fase ninfal es completada en aproximadamente 17 días y
la longevidad de los adultos es variable y está dentro del rango de los 20 a 40 días.

King y Saunders (1984), encontraron que P. maidis en su estado de huevo dura de


nueve a 12 días, su forma es cilíndrica y curva, miden 0,8 mm de longitud; depositado
en hileras longitudinales en grupos de hasta siete sobre las venas centrales de las hojas,
en el haz. En su etapa de ninfa dura de 14 a 20 días, de color blanco; pero se vuelve café
– gris con el desarrollo; pasa por cinco mudas. Al eclosionar se mueven hacia abajo del
cogollo donde se alimentan de los tejidos jóvenes tiernos. En su fase de adulto son
pálidos, café – arenosos, con una raya mediana dorsal pálida de tres milímetros de
longitud, con una envergadura de 6,5 mm; las alas transparentes excepto por un
moteado café o negro cerca del ápice de las alas delanteras.

Los adultos de P. maidis tienen espinas tibiales articuladas en las patas traseras
(característica de los Delphacidos). Ocurren formas macrópteras y braquípteras en la
misma colonia. Los adultos y las ninfas se alimentan entre las fases de las hojas, y en la
parte baja del tallo en plantas más grandes; las colonias casi siempre están atendidas por
hormigas (usualmente Selenopsis geminata) que se alimentan de la melaza producida;
pueden construir un refugio de tierra sobre la base de la planta.

López y De Oliveira, (2004), afirman que los adultos de P. maidis presentan dos
formas: braquípteros y macrópteras. Las formas macrópteras o aladas son las que
presentan alas completamente grandes y miden cerca de 2,7 mm, siendo las hembras de
mayor tamaño que los machos. Tienen una coloración generalmente marrón – oscura,
siendo la cabeza y el tórax amarillo, con tiras longitudinales de color marrón – claro.
Poseen dos pares de alas traslucidas, las cuales contienen diversas manchas oscuras y

9
nervadura prominente. Las formas braquípteras o de alas cortas, miden cerca de 3,4
mm, en el caso de las hembras; en machos, miden 2,4 mm.

Los mismos autores manifiestan que la coloración de los braquípteros es similar a


los macrópteros, pero los segmentos abdominales son bien oscuros, con bordes blancos
amarillos. Las alas son cortas y alcanzan apenas el quinto segmento abdominal,
presentando coloración marrón homogénea. Las dos formas presentan un aparato bucal
trisegmentado y del tipo chupador labial. Las antenas son setáceas, con filamento
apical, poseen un pedicelo extremadamente desarrollado, situándose lateralmente,
debajo de los ojos compuestos.

2.6. PATÓGENOS IMPORTANTES DEL MAÍZ

Dentro de los patógenos que se consideran de importancia en el cultivo del maíz,


se encuentra el Spiroplasma kunkelii, conocido como Spiroplasma del achaparramiento,
que es un microorganismo tipo bacteria sin pared celular. Los espiroplasmas son
procariotes (organismos sin núcleo organizado), pertenecen a la clase Mollicutes, orden
Spiroplasmatales, familia Spiroplasmataceae. Las células de este organismo son
móviles y de forma helicoidal, miden de 5 a 10 µm de longitud y posee una triple
membrana. Se trata de organismos más pequeños que las bacterias, e incluso pasan a
través de filtros como los virus; y su desarrollo lo realiza en el floema de la planta
(Henríquez y Jeffers, 1996; Giménez et al. 1997; Magid, 2004).

Las plantas afectadas por este microorganismo generalmente presentan,


acortamiento de los entrenudos y síntomas foliares que típicamente incluyen tiras
blanquecinas o amarillentas, extendiéndose de la base en dirección al ápice de las hojas
y, frecuentemente enrojecimiento de algunas hojas, y esto depende exclusivamente del
cultivar y la edad en que las plantas fueron infectadas. En cuanto a las espigas
presentan reducción en su crecimiento y en el llenado de granos (López y De Oliveira,
2004).

10
Los ¨Phytoplasmas¨ son organismos procariotes pleomórficos que no contienen
pared celular, y pertenecen a la clase Mollicutes, estos organismos por mucho tiempo
fueron conocidos como ¨parecidos a mycoplasmas¨, debido a su semejanza morfológica
con los mycoplasmas que causan enfermedades en animales. Los fitoplasmas son
transmitidos por insectos de la familia Cicadellidae y habitan en el floema de la planta,
en donde se multiplican (Henríquez y Jeffers, 1996; Magid, 2004).

La enfermedad del enanismo arbustivo del maíz está asociada a un fitoplasma.


Los síntomas de esta enfermedad difieren de los del achaparramiento causado por
Spiroplasma, por incluir intenso enrojecimiento foliar y frecuentemente acentuada
proliferación de espigas. Los efectos perjudiciales de esta enfermedad sobre la
producción del maíz son similares a los causados por el Spiroplasma del
achaparramiento (López y De Oliveira, 2004).

El Spiroplasma del achaparramiento también puede causar proliferación de


espigas en algunos cultivares, y cuando están infectados por fitoplasma no presentan
enrojecimiento, pero si amarillamiento foliar. Los síntomas de los irritamientos se
presentan generalmente en época de llenado de granos (Massola-Junior, 1998; Nault,
1980; Oliveira et al. 2002; citado por López y De Oliveira, 2004).

El “Virus del Rayado Fino” (MRFV) está formado por una sola cadena de ARN
(Acido Ribonucleico) y los viriones son isométricos, de 22 a 30 nm de diámetro. Las
partículas se sedimentan en dos componentes, uno de ellos conteniendo cápsidos vacíos
de proteína; y el otro, contiene la nucleoproteína infectiva. Este virus es transmitido por
Dalbulus maidis en forma persistente, pero no se ha demostrado transmisión mecánica.
El patógeno se multiplica dentro del vector, pero no se transmite transovarialmente
(Rivera et al; Gingery et al. citado por Henríquez y Jeffers, 1996).

Los síntomas de esta enfermedad viral en el maíz se caracterizan por la presencia


de puntos cloróticos paralelos a las nervaduras secundarias. Estos puntos pueden unirse
asemejándose a finas rayas, siempre paralelas a las nervaduras. Algunas veces, la
observación de la hoja contra la luz solar, facilita la identificación de los síntomas
(López y De Oliveira, 2004).

11
III. MATERIALES Y METODOS

3.1. CARACTERIZACIÓN AGROMORFOLÓGICA

3.1.1. Lugar de Investigación

3.1.1.1. Ubicación política

El estudio de la biología de las chicharritas estuvo situado en la Estación


Experimental Tropical Pichilingue del INIAP, en el cantón Quevedo de la provincia de
Los Ríos (Figura 1). En cuanto al trabajo de distribución poblacional se lo realizó en las
plantaciones de maíz ubicadas en dicha estación.

3.1.1.2. Ubicación geográfica

La Estación se encuentra a una altura de 120 msnm en las siguientes coordenadas:

• UTM x 0667738
• UTM y 9881206

Figura 1. Ubicación de la Estación Experimental Tropical Pichilingue del INIAP

12
3.1.1.3. Características climáticas1

Los lugares de trabajo presentan en promedio las siguientes características:

 2000 mm de precipitación al año, de los cuales el 90% cae en época


lluviosa y el resto en lluvias esporádicas durante la época seca (mayo a
diciembre).
 Humedad relativa de 83%
 Luminosidad 900 horas al año
 Temperatura promedio diaria de 24,5°C

3.1.2. Materiales

Los materiales utilizados fueron los siguientes: estereoscopio; aspirador bucal;


detergente; frascos de vidrio; agua; pincel; jaulas de cría; cajas petri; alcohol; GPS;
bandejas de plástico; macetas; plantas de maíz; maceteros plásticos; micrómetro;
esferográfico; hojas de papel, cámara fotográfica.

3.1.3. Análisis Estadístico de Datos

3.1.3.1. Experimento 1: Determinación del ciclo biológico de las


chicharritas dominantes del cultivo de maíz

Los datos que generó este experimento (promedio, rangos, varianza, moda,
desviación estándar), están representados en cuadros, tal como lo establece la estadística
descriptiva.

1
Datos meteorológicos obtenidos en la Estación Experimental Tropical Pichilingue del INIAP

13
3.1.3.2. Experimento 2: Distribución espacial de las
chicharritas y su dinámica poblacional en el maíz

La distribución poblacional de las chicharritas en estudio, fueron analizadas


relacionando la varianza (s2) y el promedio (∑µ) de la población de los insectos
registrados.

3.1.3.3. Experimento 3: Estimación del grado de detrimento


causado por las chicharritas en el cultivo de maíz

En esta parte de la investigación para determinar el porcentaje de incidencia y


severidad de la cinta roja, se usaron las siguientes fórmulas:

N° plantas atacadas
% I = ------------------------------- x 100 (incidencia)
Total de plantas

∑ ab
% S = --------- x 100 (severidad)
NK

Donde: a = Valor de la escala; b = Número de hojas atacadas; N = Total de


hojas de la muestra; K = Grado máximo de la escala.

3.1.3.4. Experimento 4: Encuesta a varios agricultores de las


zonas maiceras del litoral ecuatoriano.

En esta parte de la investigación se realizó una encuesta a varios agricultores en la


cual se determinó las prácticas realizadas durante la siembra y cosecha del maíz. Los
datos obtenidos se analizaron de acuerdo con la estadística descriptiva.

14
3.1.4. Registro de Datos

3.1.4.1. Experimento 1

Los datos que se registraron en este experimento fueron los siguientes:

• Duración de la etapa de huevo: Se procedió a verificar el día de la oviposición


y el día de la eclosión de los huevos con la ayuda de una lupa.
• Duración de la etapa de ninfa y sus diferentes estadios: Para determinar esto
se procedió a evaluar diariamente las ninfas para verificar si hubo el paso de
un estado ninfal a otro.
• Duración de la etapa de adulto hasta su senescencia: Para el efecto se
procedió a establecer cuantos días dura el insecto desde que empieza su vida
como adulto hasta el día de su muerte con evaluaciones diarias.
• Tamaño de los huevos, ninfas y adultos: Este dato fue tomado con la ayuda de
un micrómetro, y se procedió a extraer varios insectos y huevos para su
medición.
• Tasa reproductiva: Este parámetro fue establecido contando el número de
posturas por insecto.

3.1.4.2. Experimento 2

Durante el experimento se registraron los siguientes datos:

• Población total de chicharritas (ninfas y adultos) por planta


• Edad del cultivo
• Cultivar de maíz utilizado

3.1.4.3. Experimento 3

Entre los principales datos registrados en este experimento, se encuentran los


siguientes:

• Población de chicharritas por planta (se tomaron los datos anteriores)

15
• Porcentaje de incidencia y severidad de la cinta roja
• Manejo agronómico del cultivo
• Rendimientos de cosecha

3.1.4.4. Experimento 4

Los datos principales registrados durante la encuesta fueron los siguientes:

• Fecha de siembra
• Hibrido de maíz utilizado
• Preparación de terreno
• Químicos utilizados y fecha de aplicación
• Producción

3.1.5. Manejo del Experimento

3.1.5.1. Experimento 1: Determinación del ciclo biológico de las


chicharritas dominantes del cultivo de maíz

Previo al trabajo de laboratorio, se realizaron recolecciones de 50 individuos por


cada una de las especies de chicharritas a estudiarse (D. maidis, P. maidis),
capturándolas con un aspirador bucal. Luego fueron depositadas en recipientes plásticos
con aberturas laterales cubiertas de malla, para proveerle oxígeno a los insectos;
conteniendo en su interior hojas de maíz tierno y humedecido para evitar la
deshidratación de los insectos, hasta su traslado al laboratorio.

Una vez ingresados al laboratorio, se procedió a clasificar hembras y machos para


posteriormente depositar 20 hembras adultas de cada especie en una jaula de cría en
cuyo interior contenía cinco macetas con plantas de maíz a fin de poder realizar su
respectivo estudio.

En este experimento se realizó separaciones de macetas en los días 1, 2, 3, 4 y 5


después de la infestación, colocándolas independientemente en otras jaulas de cría, con

16
lo que se pudo establecer la existencia de posturas y el ciclo de vida entre las especies a
estudiarse, haciendo observaciones diarias de los cambios de estadios.

3.1.5.2. Experimento 2: Distribución espacial de las


chicharritas y su dinámica poblacional en el maíz

Para conocer los patrones de dispersión (al azar, uniforme, agrupacional) y/o
distribución espacial de las chicharritas en estudio, se procedió a registrar las fechas de
siembra de cada una de las plantaciones de maíz establecidas en la EET-Pichilingue, y
posteriormente se contabilizó el numero de chicharritas presentes por planta tomando un
numero de 100 plantas por cada una.

3.1.5.3. Experimento 3: Estimación del grado de detrimento


causado por las chicharritas en el cultivo de maíz

Se procedió a contabilizar el número de chicharritas presentes en el cultivo en los


primeros días de su desarrollo y se marcó las plantas que estaban infestadas por más de
cinco insectos para posteriormente al momento de la floración verificar si existió o no la
presencia de la cinta roja.

3.1.5.4. Experimento 4: Encuesta a varios agricultores de las


zonas maiceras del litoral ecuatoriano.

Para realizar la encuesta, primero se seleccionaron las fincas , para posteriormente


proceder a realizar las preguntas respectivas al dueño de la propiedad, realizándose
varias visitas al productor, en diferentes fases del cultivo para evitar la pérdida de
información. Los datos obtenidos fueron procesados y debidamente tabulados para su
mejor comprensión.

17
IV. RESULTADOS

4.1. CICLO BIOLÓGICO

4.1.1. Experimento 1: Ciclo biológico de D. maidis y P. maidis

En el Cuadro 1, se presentan los resultados de la biología de D. maidis, obtenidos


en condiciones confinadas en la EET-Pichilingue del INIAP, estableciéndose que el
promedio en días de la duración de la etapa de huevo es de 7,4. Las ninfas I, II, III, IV y
V tuvieron una duración de 2,9 - 3,6 - 3,1 - 3,0 y 3,0, respectivamente; es decir, la
durabilidad total de las ninfas del referido insecto fue de 15,6 días, fluctuando su estadio
entre 13 y 19 días con una temperatura de 24,5°C. El adulto de esta especie, en estas
mismas condiciones tuvo una longevidad de 24,5 y 34,3 días macho y hembra,
respectivamente.

Cuadro 1. Ciclo biológico de D. maidis en condiciones confinadas (24,5°C). EET-


Pichilingue, 2009.

Valores en días
Periodo de incubación Promedio3/
Mínimo Máximo
Huevo 5 9 7,4
Ninfa I 2 4 2,9
Ninfa II 5 3 3,6
Ninfa III 2 4 3,1
Ninfa IV 2 4 3,0
Ninfa V 2 4 3,0
Total del ciclo ninfal 13 19 15,6
Duración huevo-adulto 18 28 23,0
Longevidad adulto (macho) 21 28 24,5
Longevidad adulto (hembra) 31 39 35,0
3/
Promedios de los 25 datos por parámetro, obtenidos en condiciones confinadas

18
En el Cuadro 2, se exhiben las posturas de huevos de D. maidis, usando cinco
jaulas de madera conteniendo cinco plantas cada una, lo cual permitió determinar un
promedio de posturas por hembra del insecto en cuestión de 82,1 huevos, encontrados
en su mayor parte en la nervadura central del envés de la hoja de maíz.

Cuadro 2. Cantidad de huevos ovipositados por D. maidis en plántulas de maíz,


utilizando 20 adultos hembra por jaulas4/. EET-Pichilingue, 2009.

Numero de huevos por planta


Jaulas Promedio
Mínimo Máximo
I 56 90 73
II 71 85 78
III 87 103 95
IV 67 81 74
V 83 98 90,5
Promedio total 72,8 91,4 82,1
4/
Cada jaula (repetición) contenía 5 plantas de maíz del hibrido INIAP H-552.

El Cuadro 3 contiene los resultados biológicos logrados en el estudio, usando la


especie Peregrinus maidis en la zona de Quevedo - Los Ríos, estableciéndose que el
promedio en días de la duración de la etapa de huevo es de 8,5; el estadio ninfal I tuvo
una duración de 3,7; ninfa II 4,2; ninfa III 2,8; ninfa IV 3,7; ninfa V 4,2; teniendo como
totalidad del ciclo 27 días. El adulto macho tuvo una longevidad de 28,3 días y el adulto
hembra de 36,2 días

19
Cuadro 3. Ciclo biológico de P. maidis en condiciones confinadas (24,5°C). EET-
Pichilingue, 2009.

Valores
Periodo de incubación Promedio5
Mínimo Máximo
Huevo 7 10 8,5
Ninfa I 3 5 3,7
Ninfa II 3 5 4,2
Ninfa III 2 4 2,8
Ninfa IV 3 5 3,7
Ninfa V 3 5 4,2
Total del ciclo ninfal 21 34 27
Duración huevo-adulto 28 44 35,5
Longevidad adulto (macho) 26 31 28,3
Longevidad adulto (hembra) 35 38 36,2
5/
Promedios de los 25 datos por parámetro, obtenidos en condiciones confinadas

En el Cuadro 4, se observan las posturas de huevos por hembra adulta de


P. maidis durante los meses de julio a noviembre del 2009, en donde se obtuvo que el
promedio de posturas por hembra adulta es de 63,0 huevos, de los cuales la mayor parte
se ubican en la nervadura central, en el envés de la hoja de maíz, y muy próximos a la
base de la misma.

Cuadro 4. Cantidad de huevos ovipositados por P. maidis en plántulas de maíz,


utilizando 20 adultos hembra por jaulas6/. EET-Pichilingue, 2009.

Valores
Jaulas Mínimo Máximo Promedio
I 45,0 64,0 54,5
II 56,0 67,0 61,5
III 69,0 77,0 73,0
PROMEDIO TOTAL 56,7 69,3 63,0
6/
Cada jaula (repetición) contenía 5 plantas de maíz del hibrido INIAP H-552.

20
En cuanto a la descripción morfológica de los insectos en estudio, a continuación
se detallan las características de cada uno de sus estadios, que fue realizado en el
laboratorio de Entomología de la Estación Experimental Tropical Pichilingue.

• Morfología de huevos de D. maidis.- Las posturas de esta especie se observan


con la ayuda de una lupa, ya que a simple vista es muy difícil verlos, tienen forma
ovalada y es incoloro al inicio, pero se torna blanco con el paso de los días. La parte
donde prefieren ovipositar las hembras se encuentra en la nervadura central de la hoja,
específicamente en el haz y colocados en hileras de 4 a 16 huevos. Los huevos
eclosionan de 7 a 10 días.

• Morfología de ninfas de D. maidis.- Las ninfas pasan por cinco estadíos en los
cuales su principal cambio es el tamaño, aunque se observan también diferencias en la
coloración.

En el estadío ninfal I el insecto tiene una forma alargada-aplanada y su tamaño es


de 1,6 a 1,8 mm aproximadamente, su color es blanco y no poseen alas. El estadío ninfal
II presenta el cuerpo alargado pero un poco mas cilíndrico que el anterior, su tamaño
está entre 1,9 a 2,1 mm aproximadamente y su color es blanquecino amarilloso, además
tampoco poseen alas. La ninfa III tiene el cuerpo cilíndrico-aplanado como el anterior,
su tamaño oscila entre los 2,5 a 2,7 mm y su coloración es un poco mas amarilla,
comienza a formarse el paquete alar. El estadío ninfal IV presenta el cuerpo cilíndrico-
aplanado, su tamaño oscila entre los 2,9 a 3,0 mm y su coloración es igual al estadío
anterior, además el paquete alar es visible. La ninfa V presenta el cuerpo como la IV y
su tamaño oscila entre los 3,0 a 3,1 mm, su coloración no varía con respecto a la
anterior, en este estadío el paquete alar es más pronunciado.

• Morfología de huevos de P. maidis.- Los huevos son insertados alrededor de la


nervadura central de las hojas y en sus cercanías, tanto en el haz como en el envés. Se
observó grupos de hasta ocho huevos en hileras, los cuales quedan insertados
oblicuamente y cubiertos por una sustancia blanquecina secretada por la hembra, que
posteriormente se endurece, dejando manchas blancas en la epidermis del tejido vegetal,
fácilmente visible al ojo humano. Los huevos recién insertados son transparentes,

21
después se evidencian los ojos compuestos, pasando de color blanquecino a naranja,
este periodo hasta la eclosión tiene una duración de 7 a 10 días.

• Morfología de ninfas de P. maidis.- Las ninfas de esta especie como en el caso


de la anterior también pasan por cinco Instares, en los cuales se dan algunos cambios
tanto en su tamaño como en su coloración.

En el Instar I la ninfa tiene una forma plana y un poco alargada y su tamaño es de


1,4 a 1,6 mm aproximadamente, su color es blanco y no poseen alas, ni manchas en el
cuerpo. En el Instar II la ninfa presenta el cuerpo no tan alargado y un poco mas
cilíndrico que el anterior su tamaño varía entre 1,7 a 1,9 mm aproximadamente y su
color es blanquecino aunque tiende a verse un poco amarillo, no poseen alas. En el
Instar III la ninfa tiene el cuerpo cilíndrico y ligeramente aplanado, su tamaño oscila
entre los 2,0 a 2,2 mm y su color se torna un poco mas amarilla que la anterior,
tampoco posee alas, pero se observa el aparecimiento de los paquetes alares. El Instar
IV presenta el cuerpo cilíndrico, su tamaño oscila entre los 2,3 a 2,5 mm y su coloración
es igual al estadío anterior, además el paquete alar es visible. El instar V presenta el
cuerpo cilíndrico como la anterior y su tamaño oscila entre los 2,5 a 2,7 mm, su
coloración se torna café oscura con rayas negras transversales asemejándose a la
coloración de los insectos adultos, en este estadío el paquete alar es más pronunciado.

4.1.2. Experimento 2: Distribución espacial de las chicharritas y su


dinámica poblacional en el maíz.

En los Cuadros 5, 6 y 7 se exhiben los datos de la distribución espacial y dinámica


poblacional de las chicharritas en estudio, dando como resultado que tanto Dalbulus
maidis, Peregrinus maidis y Hortensia similis tienen una distribución uniforme dentro
del cultivo de maíz.

22
Cuadro 5. Distribución espacial y dinámica poblacional de las chicharritas Dalbulus maidis, Peregrinus maidis y
Hortensia similis registrados en un lote experimental de maíz de la EET-Pichilingue, 2009
Parámetros evaluados DÍAS DESPUÉS DE LA SIEMBRA
20 21 22 23 26 27 28 29 34 42
Población D. maidis/planta 3,91 3,92 4,00 3,47 3,89 4,01 3,82 3,29 2,93 0,75

Dalbulus maidis
%plantas atacadas (Incidencia) 75 86 92 87 89 98 95 96 96 96
Rango poblacional D. maidis 0-24 0-19 0-13 0-10 0-16 0-20 0-16 0-12 0-9 0-3
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 2,33 2,54 2,96 1,77 3,4 1,33 1,49 1,14 0,81 0,16
7/
Distribución D. maidis U U U U U U U U U U
Población P. maidis/pt 1,63 2,48 1,76 1,70 1,40 1,30 2,26 1,80 1,38 1,78
Peregrinus maidis
LOTE 1

7/
%plantas atacadas 30 27 25 30 20 20 31 30 32 32
Rango poblacional P. maidis 0-8 0-8 0–5 0-3 0-3 0-3 0-8 0-5 0-3 0 - 11
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 0,2 0,48 0,2 0,33 0,06 0,06 0,44 0,34 0,13 1,66
Distribución P. maidis U U U U U U U U U U
Población H. similis/pt 1,00 1,00 1,33 1,00 1,00 1,00 1,00 0,00 1,00 0,00
Hortensia similis

%plantas atacadas 4 1 3 4 3 1 1 0 1 0
Rango poblacional H. similis 0-1 0-1 0-2 0-1 0-1 0-1 0-1 0 0-1 0
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 0,02 0,002 0,01 0,01 0,01 0,002 0,002 0.00 0,002 0,00
Distribución H. similis U U U U U U U U U U
7/:
U = indica una distribución uniforme del insecto (relación estadística entre promedio de la población del insecto y la varianza)

23
Cuadro 6. Distribución espacial y dinámica poblacional de las chicharritas Dalbulus maidis, Peregrinus maidis y Hortensia
similis registrados en un lote experimental de maíz de la EET-Pichilingue, 2009
Parámetros evaluados DÍAS DESPUÉS DE LA SIEMBRA
8 12 14 16 19 20 22 23 26 28 29 33
Población D. maidis/pt 2,34 2,42 1,90 1,78 1,77 1,55 1,71 1,69 1,80 1,58 1,56 2,95

Dalbulus maidis
%plantas atacadas 64 62 62 45 47 64 56 51 64 36 55 84
Rango poblacional D. maidis 0-11 0-8 0-5 0-5 0-4 0-4 0-6 0-4 0-5 0-6 0-5 0-10
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 1,10 0,61 0,45 0,27 0,18 0,23 0,38 0,42 0,29 0,41 0,25 1,62
8/
Distribución D. maidis U U U U U U U U U U U U
Población P. maidis/pt 1,00 1,00 1,29 1,00 1,33 1,00 1,29 1,45 1,19 1,53 1,00 1,09
Peregrinus maidis
LOTE 2

%plantas atacadas 1 4 7 9 6 7 21 29 16 19 2 11
Rango poblacional P. maidis 0-1 0-1 0-3 0-1 0-2 0-1 0-3 0-4 0-2 0-4 0-1 0-2
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 0,002 0,007 0,027 0,015 0,027 0,018 0,081 0,164 0,048 0,099 0,004 0,048
Distribución P. maidis U U U U U U U U U U U U
Población H. similis/pt 0,00 0,00 0,00 0,00 1,00 1,00 1,00 1,00 1,25 0,00 0,00 1,00
Hortensia similis

%plantas atacadas 0 0 0 0 3 1 2 3 4 0 0 1
Rango poblacional H. similis 0 0 0 0 0-1 0-1 0-1 0-1 0-2 0 0 0-1
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 0,00 0,00 0,00 0,00 0,005 0,002 0,004 0,005 0,016 0,00 0,00 0,002
Distribución H. similis U U U U U U U U U U U U
8/
U = indica una distribución uniforme del insecto (relación estadística entre promedio de la población del insecto y la varianza)

24
Cuadro 7. Distribución espacial y dinámica poblacional de las chicharritas Dalbulus maidis, Peregrinus maidis y
Hortensia similis registrados en un lote experimental de maíz de la EET-Pichilingue, 2009
Parámetros evaluados DÍAS DESPUÉS DE LA SIEMBRA
12 16 18 20 23 24 26 27 30 32 33 37
Población D. maidis/pt 1,47 1,77 1,57 1,55 1,53 1,77 1,37 1,43 1,53 1,53 1,42 2,02

Dalbulus maidis
%plantas atacadas 38 48 42 52 53 49 49 40 51 47 50 81
Rango poblacional D. maidis 0-3 0-5 0-4 0-7 0-5 0-5 0-3 0-3 0-5 0-4 0-3 0-6
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 0,11 0,34 0,22 0,28 0,17 0,42 0,14 0,24 0,21 0,34 0,14 0,39
9/
Distribución D. maidis U U U U U U U U U U U U
Población P. maidis/pt 1 1,31 1,14 1,33 1,25 1,07 1,13 1,33 1,54 1,37 1 1,125
Peregrinus maidis
LOTE 3

%plantas atacadas 1 13 21 15 8 14 15 30 26 27 5 8
Rango poblacional P. maidis 0-1 0-2 0-2 0-4 0-3 0-2 0-2 0-3 0-4 0-4 0-1 0-2
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 0,002 0,039 0,057 0,076 0,061 0,016 0,043 0,143 0,126 0,123 0,012 0,023
Distribución P. maidis U U U U U U U U U U U U
Población H. similis/pt 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 1 1
Hortensia similis

%plantas atacadas 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 2 2
Rango poblacional H. similis 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0-1 0-1
N° de sitios muestreados 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Varianza 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0,004 0,008
Distribución H. similis U U
9/
U=indica una distribución uniforme del insecto (relación estadística entre promedio de la población del insecto y la varianza)

25
En el Cuadro 5, se aprecian los datos obtenidos en el lote 1 de la EET-Pichilingue,
en una muestra de 20 sitios, tomando cinco plantas por sitio de muestreo, lo cual refleja
que la población de D. maidis es similar desde los 20 hasta los 30 días, encontrándose
hasta 24 insectos por planta. A partir de esta etapa la población empieza a decrecer, no
así con Peregrinus maidis que tuvo una población más o menos constante desde los 20
hasta los 42 días de edad del cultivo, y cuya distribución espacial es uniforme para las
dos especies.

En el Cuadro 6, se exponen los resultados obtenidos en el lote 2 de la EET-


Pichilingue, cuyo procedimiento fue igual al anterior y los resultados de población de
D. maidis nos refleja que se encontraron poblaciones hasta de 11 insectos por planta y su
distribución fue uniforme. En cuanto a P. maidis se encontraron poblaciones hasta de 4
insectos por planta y su distribución fue uniforme.

En el Cuadro 7, se muestran los datos registrados en el lote 3 de la mencionada


estación, obteniendo como resultado, que la población de D. maidis tuvo un número de
individuos máximo de siete y su distribución fue uniforme. En cuanto a P. maidis
registró una población máxima de cuatro individuos por planta y su distribución también
fue uniforme.

4.1.3. Experimento 3: Grado de daño causado por las chicharritas

En el Cuadro 8, se detallan los resultados obtenidos en el ensayo del Lote 1


denominado “Área de Entomología”, cuyo manejo fue libre de químicos a excepción
del tratamiento de la semilla. La semilla utilizada fue la INIAP H-551 susceptible a la
enfermedad. En plantas marcadas con cintas de colores hubo la presencia de 5-24
D. maidis por planta y se observó a la floración de una muestra de 61 plantas que
apenas el 1,64% estuvo infectada con Cinta Roja, y el 98,36% de plantas libre de la
enfermedad. El rendimiento obtenido fue de 100 qq/ha.

26
Cuadro 8. Relación entre población de D. maidis y ”Cinta Roja” en
plantas de maíz. EET-Pichilingue, 2009

Relación entre D. maidis y ”Cinta Roja”


LOTE 1
Muestra 61
Numero de D. maidis/planta 5 - 24
% de plantas sin Cinta Roja 98,36
% de plantas con Cinta Roja 1,64
Rendimiento en kg/ha de maíz 4545

En el Cuadro 9, se puede observar los resultados obtenidos en el lote del


Departamento de Manejo de suelos y aguas de la Estación Experimental Tropical
Pichilingue, cuyo manejo fue muy estricto con respecto a plagas y enfermedades,
aplicándose todos los químicos recomendados para el maíz. La semilla utilizada fue el
hibrido INIAP H-553 y su rendimiento fue de 140qq/ha

Cuadro 9. Incidencia de “Cinta Roja” en plantas de maíz

Relación entre D. maidis y ”Cinta Roja”


LOTE 2
Muestra 100
Numero de D. maidis/planta 5-10
% de plantas sin Cinta Roja 92
% de plantas con Cinta Roja 8
Rendimiento en kg/ha de maíz 6364

27
4.1.4. Experimento 4: Encuesta a varios agricultores de las zonas
maiceras del litoral ecuatoriano sobre el manejo agronómico en el cultivo.

En los Anexos 1, 2, 3 y 4 se detallan las labores realizadas por agricultores en la


zona de Mocache, lo cual refleja la tendencia a aplicar la mayor cantidad de químicos,
en especial insecticidas, herbicidas y fertilizantes, en las tres primeras semanas del
cultivo. Esto podría estar influyendo para que la enfermedad conocida como “Cinta
Roja” no se presente en forma perjudicial en los últimos años.

En el Anexo 1, se aprecia que el agricultor realizó un total de 13 aplicaciones de


químicos, los que en su mayoría fueron utilizados en los 21 primeros días del cultivo,
observándose que la distribución poblacional de las chicharritas D. maidis y P. maidis
fue uniforme y en la época de floración no se apreciaron síntomas de la “Cinta Roja”.

los agroquímicos mayormente utilizados son Semevin (thiodicarb); Metavin


(metomil); Glifopac (glifosato); Gramoxone (paraquat); Carbenpac (carbendazim), Urea
y Muriato de Potasio.

En el Anexo 2, se estableció que el dueño del cultivo realizó un numero de nueve


aplicaciones de agroquímicos, los cuales fueron llevados a cabo en su mayoría durante
los primeros 21 días del cultivo, observándose que la distribución poblacional de
D. maidis y P. maidis fue uniforme y la ausencia de la enfermedad antes mencionada a
la época de floración.

Los productos utilizados por este agricultor fueron Larvin (thiodicarb);


Cipermetrina (cipermetrina); Semevin; Glifosato (glifosato); Amina (2-4-D Amina);
Atrazina (atrazina); Súper Fosfato Triple y Urea.

Las actividades realizadas por el agricultor en la tercera plantación de maíz están


representadas en el Anexo 3. Se pudo observar que el agricultor realizó un total de 14
aplicaciones de los insumos químicos y en su mayoría en las primeras tres semanas de
establecida la plantación, observándose que la distribución de D. maidis y P. maidis
como en los casos anteriores fue uniforme.

28
En esta plantación se utilizaron los siguientes insumos químicos: Semevin;
Aquiles (metomil); Cipermetrina; Glifosato; Atrazina; Amina; Accent (nicosulfuron);
Gramoxone; Oxithane (mancozeb); Fertilizante Inicial (20-40-15); Mixpac (20-0-16) y
Urea.

En el Anexo 4, están representadas las actividades del agricultor en el lote


siguiente, lo que nos refleja que utilizó 12 veces agroquímicos, y como en las anteriores
ocasiones también realizó la mayor parte de las aplicaciones en los primeros 21 días del
cultivo, observándose que hubo uniformidad en la distribución de D. maidis y P. maidis
y ausencia de “Cinta Roja”.

Los productos químicos utilizados por este agricultor fueron los siguientes:
Larvin; Metavin; Glifosato; Prowl (pendimetalin); Gramoxone, Urea y Puñete
(chlorpyriphos).

En los anexos 5, 6, 7, se presentan las actividades precisadas por los agricultores


de la zona de Patricia Pilar, que al igual que en la anterior zona, tuvieron preferencia de
utilizar la mayor cantidad de agroquímicos en los primeros días del cultivo

Los productos utilizados en la primera finca fueron los siguientes: Gaucho


(faidacloprid); Furadan (carbofuran); Aquiles (metomil); Ranger (glifosato); Prowl
(pendimetalin); Gramoxone (paraquat); Amina (2-4-D Amina); Atrazina (atrazina);
Urea, Muriato de Potasio y Mancozeb (mancozeb).

El segundo agricultor encuestado utilizó los siguientes insumos: Cipermetrina


(cipermetrina); Gramoxone; Glifosato; Amina; Accent (nicosulfuron); Abono Completo
(8-20-40), Urea, Muriato de Potasio y Complefol.

El tercer encuestado se inclinó por utilizar: Semevin (thiodicarb); Aquiles;


Cipermetrina; Glifosato; Atrazina; Amina; Accent; Gramoxone; Fertilizante Inicial (20-
40-15); Mixpac (20-0-15); Urea y Oxithane (mancozeb).

29
Los datos obtenidos en la zona de Vinces se muestran en los anexos 8, 9 y 10, en
los cuales se puede deducir que tienden a ser semejantes a los anteriores en cuanto a
época de uso de químicos y en la distribución uniforme de los insectos en estudio.

En el anexo 8, se muestra los datos proporcionados por el agricultor de la primera


finca y los químicos utilizados fueron: Atrapac; Glifosato; Amina 6 y Urea.

Por otra parte en el anexo 9, se observan que los agroquímicos utilizados fueron:
Cipermetrina; Atrazina 90 (atrazina); Glifosato; Gramoxone; Aminapac (2-4-D Amina)
y Urea.

En el anexo 10, se expone la información prestada por el productor de la tercera


finca y los materiales que utilizó, los cuales fueron: Semevin; Arrasador; Matasemilla
(diuron); Urea; Agrofeed; Kristalon y Metavin (metomil).

La información obtenida en el sector de Valencia se muestra en los anexos 11 y


12, lo que permitió concluir que siguen empleando el mismo patrón de uso de pesticidas
en los primeros días del cultivo.

El anexo 11, muestra los datos proporcionados por el agricultor de la primera


finca y estableciéndose que los productos utilizados fueron los siguientes: Semevin;
Cipermetrina; Glifosato; Prowl; Atrazina; Abono completo (10-30-10); Muriato de
Potasio; Kristalon Inicio y Agrotin (alcohol polivinilo + monilfenol).

Por otra parte, en el anexo 12 se presenta la lista de los insumos utilizados por el
segundo productor los cuales fueron: Semevin; Cipermetrina; Prowl; Glifosato;
Atrazina; Fertilizante (18-46-0) y Kristalon.

30
Cuadro 10 Número de aplicaciones de agroquímicos realizadas por agricultores de diferentes zonas de la provincia de Los
Ríos, 2009

Numero de aplicaciones de agroquímicos por finca


Fincas Insecticidas Herbicidas Fertilizantes Fungicidas y misceláneos Total
Mocache finca 1 3 2 5 2 12
Mocache finca 2 3 3 3 0 9
Mocache finca 3 5 5 3 1 14
Mocache finca 4 2 4 5 1 12
Patricia Pilar finca 1 5 3 4 1 13
Patricia Pilar finca 2 3 4 4 0 11
Patricia Pilar finca 3 5 5 3 1 14
Vinces finca 1 0 1 1 0 2
Vinces finca 2 1 2 2 0 5
Vinces finca 3 1 1 2 1 5
Valencia finca 1 3 4 4 1 12
Valencia finca 2 3 2 2 0 7

31
V. DISCUSION

5.1. EXPERIMENTO 1: CICLO BIOLÓGICO DE D. maidis Y P. maidis

Los resultados de la biología de D. maidis, obtenidos en condiciones confinadas


en la EET-Pichilingue del INIAP, permitieron establecer que el promedio en días de la
duración de la etapa de huevo es de 7,4. Las ninfas I, II, III, IV y V tuvieron una
duración de 2,9 - 3,6 - 3,1 - 3,0 y 3,0, respectivamente; es decir, la durabilidad total de
las ninfas del referido insecto fue de 15,6 días, fluctuando su estadio entre 13 y 19 días
con una temperatura de 24,5°C. El adulto de esta especie, en estas mismas condiciones
tuvo una longevidad de 24,5 y 34,3 días macho y hembra, respectivamente.

Respecto a las posturas de huevos de D. maidis, se determinó un promedio por


hembra del insecto en cuestión de 82,1 huevos, encontrados en su mayor parte en la
nervadura central del envés de la hoja de maíz. Estos datos difieren con las
investigaciones realizadas por Cuadra y Maes (1990), quienes encontraron una mayor
cantidad de huevos por hembra y la biología también fue un poco diferente, lo cual
podría deberse a las condiciones climáticas diferentes de una región a otra.

Los resultados biológicos logrados en el estudio, usando la especie P. maidis en la


zona de Quevedo - Los Ríos, permitió establecer que el promedio en días de la duración
de la etapa de huevo fue de 8,5. El estadio ninfal I tuvo una duración de 3,7; ninfa II
4,2; ninfa III 2,8; ninfa IV 3,7; ninfa V 4,2; teniendo como totalidad del ciclo 27 días. El
adulto macho tuvo una longevidad de 28,3 días y el adulto hembra de 36,2 días. Esto
difiere a lo reportado por King y Saunders (1984), en relación al ciclo de huevo y de
ninfa, pero es muy probable que esto sea debido a las diferentes condiciones
meteorológicas de los lugares donde se han realizado estas investigaciones, lo que lleva
a deducir que los datos presentados en esta investigación se ajustan mas a la realidad del
Ecuador, más específicamente a la provincia de Los Ríos.

En cuanto a las descripciones morfológicas de cada especie, los datos obtenidos se


asemejan a los proporcionados por varios autores, por lo que se puede establecer que

32
básicamente el cambio de ambiente afecta en su ciclo biológico, mas no afecta
demasiado a su morfología externa.

5.2. EXPERIMENTO 2: DISTRIBUCIÓN ESPACIAL DE LAS


CHICHARRITAS Y SU DINÁMICA POBLACIONAL EN EL
MAÍZ.

Los datos obtenidos en la presente investigación dieron como resultado que la


distribución poblacional de las chicharritas en estudio, tanto para D. maidis, P. maidis y
H. similis es uniforme dentro del cultivo de maíz, pero debido a la falta de información
sobre dinámica poblacional en nuestro país no se pueden hacer comparaciones con otras
investigaciones. Al respecto De Long y Wolcott, citados por Virla et al. (2003),
manifiestan que a pesar de la importancia económica de la chicharrita del maíz, el
comportamiento de D. maidis en América, es poco conocido; y sus recomendaciones
mayormente están basadas en observaciones realizadas en el hemisferio norte. Por otro
lado, King y Saunders (1984), Cuadra y Maes (1990), sostienen que D. maidis se
encuentra distribuido desde el sur de los Estados Unidos, México, América Central,
América del Sur y El Caribe, hasta alturas de 2.000 metros sobre el nivel del mar, por lo
cual se espera que se realicen mas investigaciones con respecto a la dinámica
poblacional en el futuro.

5.3. EXPERIMENTO 3: GRADO DE DAÑO CAUSADO POR LAS


CHICHARRITAS

En los resultados de la presente investigación se aprecia que los datos no


concuerdan con lo mencionado por varios autores que señalan como insecto vector de la
cinta roja al D. maidis, ya que existe una alta infestación por parte del insecto, pero la
presencia de la enfermedad fue muy baja, lo que permite cuestionar acerca de si es o no
el vector, aunque esta situación puede deberse a la existencia de algún biotipo especial

33
que no esté presente en la zona o a su vez que las condiciones del país no permiten que
este insecto demuestre su capacidad vectora en todo su potencial. Al respecto De Coll et
al. (s/f), manifiestan que las investigaciones orientadas al conocimiento de la capacidad
vectora de los insectos transmisores de enfermedades datan desde hace 30 años, y
provienen principalmente del Japón, Italia, Israel y EEUU, por lo que se podrían realizar
investigaciones más a fondo para determinar concretamente si el insecto presente en
nuestro entorno está en capacidad de causar los daños que han sido determinados en los
países antes mencionados. Sin embargo en la literatura disponible se manifiesta que una
limitante en los rendimientos del maiz es la enfermedad conocida como "Cinta Roja"
que se presenta con un enrojecimiento de las hojas, y achaparramiento, reportado por
primera vez en el año de 1945 en Texas por Aislat, atribuyéndose a que era producida
por un virus y su vector el insecto D. maidis (Osler, citado por Delgado, 2006).

5.4. EXPERIMENTO 4: ENCUESTA A VARIOS AGRICULTORES DE


LAS ZONAS MAICERAS DEL LITORAL ECUATORIANO SOBRE EL
MANEJO AGRONÓMICO DEL CULTIVO.

En las plantaciones en estudio, las poblaciones de insectos tuvieron una


distribución uniforme y en la época de floración no se presentó la enfermedad conocida
como cinta roja. Los agricultores en su gran mayoría utilizan químicos desde el inicio
del cultivo, lo que puede estar evitando que se presente dicha enfermedad por cuanto se
conoce que el periodo de incubación de la misma es de 40 días, como lo manifiesta
Osler, citado por Delgado, (2006). Esto permite deducir que si los insectos son
controlados en la etapa crítica, la enfermedad no va a tener oportunidad de presentarse
al momento de la floración y por ende no va a causar pérdidas al cultivo. Esto nos daría
la pauta para establecer que el uso de los químicos en la época adecuada permite evitar
problemas de la enfermedad antes mencionada.

34
VI. CONCLUSIONES

• Los insectos D. maidis y P. maidis, en condiciones experimentales, y a una


temperatura de 24,5 °C presentan cinco estados ninfales en su desarrollo.

• El promedio de posturas por hembra adulta de D. maidis es de 82,1 huevos, de los


cuales en su mayor parte se ubican en la nervadura central, en el envés de la hoja
de maíz.

• El promedio en días de la duración de la etapa de huevo es de 7,4. Las ninfas I, II,


III, IV y V tuvieron una duración de 2,9 - 3,6 - 3,1 - 3,0 y 3,0, respectivamente; es
decir la durabilidad total de las ninfas de D. maidis fue de 15,6 días, fluctuando su
estadio entre 13 y 19 días con 24,5 °C. El adulto de esta especie, en estas mismas
condiciones tuvo una longevidad de 24,5 días el macho y 34,3 días la hembra.

• El promedio de duración de la etapa de huevo para P. maidis fue de 8,5 dias; el


estadio ninfal I tuvo una duración de 3,7; ninfa II 4,2; ninfa III 2,8; ninfa IV 3,7;
ninfa V 4,2; teniendo como totalidad del ciclo 27 días. El adulto macho tuvo una
longevidad de 28,3 días y el adulto hembra de 36,2 días.

• El promedio de posturas por hembra adulta de P. maidis fue de 63,0 huevos, que
en su mayor parte se ubican en la nervadura central, en el envés de la hoja de maíz,
y muy próximos a la base de la misma.

• La distribución poblacional tanto del Dalbulus maidis como de Peregrinus maidis


en el campo fue uniforme, o lo que es lo mismo decir que la población estaba
distribuida en toda la plantación de forma pareja.

• Los daños ocasionados por la transmisión de virus por parte de los insectos en
estudio no fueron determinados debido a que en la mayoría de plantaciones no se
presentó la enfermedad conocida como cinta roja

35
VII. RECOMENDACIONES

• Realizar estudios más a fondo acerca de la capacidad vectora del Complejo


de chicharritas asociadas a la población de “Cinta Roja” en maíz, ya que en
el presente estudio no se pudo determinar con precisión su capacidad como
insecto vector.

• Realizar estudios sobre la biología de D. maidis y P. maidis en las diferentes


zonas del Ecuador, ya que como se ha determinado en la investigación las
condiciones climáticas influyen mucho para la variación en cuanto a la
duración de los estadios biológicos.

• Por otra parte para determinar de una forma segura si el insecto es portador
del patógeno causante de la “Cinta Roja” se recomienda enviar una muestra
del insecto y además del tejido vegetal que presente síntomas para confirmar
que el agente infeccioso se está alojando tanto en el insecto como en la
planta.

• Realizar estudios referentes al uso de agroquímicos, ya que como se


mencionó anteriormente, su uso puede estar influyendo para la no presencia
de la enfermedad.

36
VIII. RESUMEN

Se realizaron estudios del ciclo de vida de las chicharritas del maíz, Dalbulus maidis y
Peregrinus maidis, en condiciones de laboratorio en la zona de Quevedo,
estableciéndose que el promedio en días de la duración de la etapa de huevo de
D. maidis es de 7,4. Las ninfas I, II, III, IV y V tuvieron una duración de 2,9 - 3,6 - 3,1 -
3,0 y 3,0 días, respectivamente; es decir, la durabilidad total de las ninfas del referido
insecto fue de 15,6 días, fluctuando su estadio entre 13 y 19 días con una temperatura de
24,5°C. El adulto de esta especie, en estas mismas condiciones tuvo una longevidad de
24,5 y 34,3 días macho y hembra, respectivamente. La hembra de este insecto presenta
un promedio de oviposición de 82,1 huevos, encontrados en su mayor parte en la
nervadura central del envés de la hoja de maíz. En cuanto a P. maidis se estableció que
el promedio en días de la duración de la etapa de huevo fue de 8,5 días; el estadio ninfal
I tuvo una duración de 3,7; ninfa II 4,2; ninfa III 2,8; ninfa IV 3,7; ninfa V 4,2 días;
teniendo como totalidad del ciclo 27 días. El adulto macho tuvo una longevidad de 28,3
días y el adulto hembra de 36,2 días.

IX. SUMARIO

Studies of the cycle of life of the cicadas of the corn, Dalbulus maidis and Peregrinus
maidis were carried out, under laboratory conditions in the area of Quevedo, settling
down that the average in days of the duration of the stage of egg of D. maidis is of 7,4.
The nymphs I, II, III, IV and V had a duration of 2,9 - 3,6 - 3,1 - 3,0 and 3,0 days,
respectively; that is to say, the total durability of the nymphs of the referred insect was
of 15,6 days, fluctuating its stadium between 13 and 19 days with a temperature of
24,5°C. The adult of this species, under these same conditions had a longevity of 24,5
and 34,3 days male and female, respectively. The female of this insect presents an
average of oviposición of 82,1 eggs, found in her biggest part in the central nervature of
the lower part of the leaf of corn. It was stablished for P. maidis that the average in days
of the duration of the egg stage was of 8,5 days; the stadium ninfal I had a duration of
3,7; nymph II 4,2; nymph III 2,8; nymph IV 3,7; nymph V 4,2 days; having as entirety

37
of the cycle 27 days. The male adult had a longevity of 28,3 days and the female adult of
36,2 days.

38
X. BIBLIOGRAFÍA

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