Acupuntura y Terapia Neural
Acupuntura y Terapia Neural
Acupuntura y Terapia Neural
La SINCRONICIDAD como sistema de conocimiento que entiende la mayor parte de los fenómenos
naturales como producto de la CASUALIDAD y no de la CAUSALIDAD, confiere a la Medicina Tradicional
China, una mirada y una lógica que difiere radicalmente de la linealidad positivista y mecanicista que respalda
a la alopatía. La Terapia Neural, nacida en el occidente pero casi de espaldas a la lógica cartesiana, se acerca
sincrónicamente a la mentalidad china que respalda a esa antigua medicina. De no ser por este acercamiento
conceptual entre una medicina nacida hace 5.000 años en el extremo oriente y otra de hace 100 años en
occidente no sería posible intentar una aproximación entre estas lógicas. Dos culturas muy distintas, épocas
muy distantes, pero un objetivo común: contribuir al bienestar de las personas.
En sus orígenes, la medicina china esta comprometida fundamentalmente con la prevención de la enfermedad
y la promoción de la salud. Los médicos en la antigua china recibían su remuneración solo cuando las
personas a su cargo estaban saludables; si estas enfermaban de algo que fuese evitable, se suspendía el pago a
ese medico e incluso tenían sanciones sociales y laborales si las personas morían por enfermedades que se
consideraban prevenibles. Dicho médico viva de la salud y no de la enfermedad que es lo contrario del
modelo capitalista de la salud que predomina hoy en el mundo, donde los ingresos de los médicos se
incrementan entre más enfermos atienda.
La Acupuntura concibe todo con base en e Yin y el Yang, dualidades que se complementan y que conforman
el QI, esencia vital y constituyente básico de todos los seres.
Ese QI es organizado por el TAO, -principio organizador universal, que a la vez indica el camino hacia la
ARMONIA, es decir hacia la salud. Gracias a ese TAO, todo esta conectado con todo: las partes y órganos del
cuerpo, al igual que la mente y las emociones, viven integradas 24 horas al día. Siempre que algo afecte a una
parte, repercutirá en otras y en el todo y viceversa. Esa es la concepción holística del ser y de la vida, que
además nos integra con el medio circundante y con el cosmos en general.
También la Terapia Neural, parte de la integridad del ser que se comporta como un circuito biocibernético de
acción y regulación, mediado principalmente por el SISTEMA NERVIOSO y por un espacio intercelular que
actúa como un gran regulador y al cual confluyen las terminaciones nerviosas y los vasos sanguíneos. Dicho
medio intercelular conforma el llamado SISTEMA BASICO DE PISCHINGER, constituido por líquidos
intercelulares y diversas sustancias transmisoras de información entre las células y el tejido conectivo. Ese
sistema permite que el ser reaccione como un TODO y esta presente en todos los órganos y partes del cuerpo.
Tanto el sistema nervioso como el de Pischinger hacen posible que ante la enfermedad o las agresiones al
orden de dicho todo, ese ser reaccione con mecanismos adaptativos, creando un nuevo orden que posibilite la
supervivencia.
La acupuntura y la terapia neural trabajan con agujas, aunque en este género de instrumentos son muy
distintas las unas de las otras. Las agujas tradicionales de acupuntura son muy delgadas y no huecas,
características totalmente distintas de las utilizadas en la Terapia Neural.
Las agujas de acupuntura deben aplicarse en puntos muy precisos situados generalmente en los canales o
meridianos por los que fluye la energía vital, responsable de todas las funciones físicas y mentales del ser.
Las agujas de la terapia neural permiten la inyección de procaína en los puntos elegidos sobre la piel, a la cual
considera parte clave del sistema nervioso, o sobre los troncos y ganglios del sistema nervioso, con el fin de
contribuir a recuperar el orden energético de la persona. Es un estímulo INESPECIFICO, una forma de
preguntarle a ese ser sobre lo que requiere para recuperar su armonía.
Los puntos de acupuntura tienen uno o varios efectos ESPECIFICOS, tendientes a regular los fluos de energía
por ese sistema de circuitos integrados constituido por la red de canales y colaterales. Al igual que la
Homeopatía, la acupuntura y la terapia neural actúan fortaleciendo la energía vital, que protege de
enfermedades y propende por la recuperación de la salud.
La clave no son las agujas, como muchas veces lo ha dicho el Dr. Julio Cesar Payan, sino la concepción que
guía su aplicación. Se destaca en esta concepción el respeto por la individualidad, es decir por ese orden
energético único de cada persona, que hace imposible tener una receta para todos, pues siendo irrepetible la
esencia y la historia de cada ser, las enfermedades en cada uno tienen también características distintas y el
tratamiento debe ser lo mas individualizado posible…evocando esto el conocido aforismo de que no hay
enfermedades sino enfermos, modificándolo en un sentido de una mayor precisión a partir de reconocer que si
hay enfermedades, pero que por las características individuales de cada ser, ellas toman en cada uno diversas
manifestaciones.
Esta particular concepción abarca todo, desde la cosmovisión hasta el como proceder al diagnostico y
tratamiento. Ella ilumina entonces los métodos diagnósticos. La acupuntura aplica los conocidos desde la
antigüedad por la medicina tradicional china, los cuales privilegian lo que se percibe por todos los sentidos, a
través de INTERROGAR sobre las características de los síntomas y la enfermedad, con énfasis en el balance
del yin y del yang, logrado por medio de ubicar como se modifican con el frío y el calor, en la noche y en el
día, con el reposo y el movimiento.
Desde el primer encuentro se agudiza LA OBSERVACION sobre las actitudes, los movimientos, el color y
demás aspectos de la persona.
Se ESCUCHA como habla, su tonalidad, la fuerza de la voz, otros sonidos como la tos, etc., pues todos ellos
tienen una caracterización energética de yin o yang.
Y se perciben OLORES que si tienen fetidez implican una significación yang y si no la tienen son yin.
Se afinan otras percepciones, dando rienda suelta y confianza a la intuición, de forma similar al planteamiento
hecho en El Principito por Antoine de Saint Exupery: sólo se ve bien con el corazón, lo esencial es invisible
para los ojos. En esta búsqueda de lo esencial se hace énfasis en lo mental, emocional y afectivo, partiendo de
que la tristeza, la melancolía y el miedo pertenecen a yin, mientras que la ira y la alegría son características
yang.
Se PALPA el cuerpo en general, pero especial énfasis se hace en los trayectos de los canales y puntos de
acupuntura, pues los puntos o trayectos especialmente dolorosos, son signos de alarma en relación a las
funciones relacionadas con ellos. Además se determina la presencia o no de masas anormales, que implican
acúmulos de flema, o estancamiento de sangre.
En la Terapia Neural se relaciona neuroanatómicamente la enfermedad y sus síntomas con los troncos
nerviosos, los dermatomas y los ganglios. Se tratan puntos o sitios de inflamación crónica e incluso las
cicatrices que se consideran interferentes, se desinterfieren al inyectar en ellas procaína. También se tratan
puntos muy sensibles o dolorosos.
Para algunos terapeutas neurales, la aplicación del dermatrón y sus modernos descendientes, da la
información clave sobre el estado energético de los diversos órganos y sistemas.
Otros le dan un énfasis particular a la odontología neurofocal, que subraya la importancia de cada uno de los
odontones y las lesiones o restauraciones en ellos presentes, con la patología de cada persona.
A partir de la aplicación de esos métodos diagnósticos, tanto el acupunturista como el neural terapeuta llega a
conclusiones, que pueden o no llamarse diagnósticos, pero que rebasan los marcos estrechos de los
diagnósticos y pronósticos de la alopatía y que generalmente brindan una luz de esperanza para muchas
personas cuyos padecimientos se consideraban incurables o que requerían procedimientos terapéuticos como
la cirugía, quimioterapia o radioterapia, que en muchas ocasiones resultan peores que la enfermedad en si,
debido a sus efectos secundarios negativos.
Dado el extenso campo de los conocimientos, es muy difícil que una sola persona pueda dominar
adecuadamente las diversas disciplinas. Por ejemplo que haga una buena acupuntura y en la misma forma
ejerza la terapia neural, la homeopatía u otras. Eso no quita el que ejerciendo principalmente una de ellas, se
conozca algo de las otras y se pueda definir en que momento su aplicación complementaria se requiera,
incluyendo en algunos casos la participación de otra persona que la ejerza idóneamente. Debe siempre
propenderse por la calidad de la vida, antes que por la prolongación de esta en cualquier condición.
En los comienzos de este tercer milenio la medicina debe integrar hasta donde sea posible las diversas
vertientes del conocimiento acumulado por la humanidad en los distintos momentos de su historia y en las
diversas regiones del planeta, procurando una síntesis que le brinde a cada uno la medicina que necesita de
acuerdo también a sus creencias y expectativas.
Para lograr esto, la relación con las personas que consultan debe ser lo mas democrática posible, subrayando
el poder protagónico de cada ser en su proceso vital, que lo hace responsable principal de su propia historia.
Esto implica un profundo respeto por el libre albedrío, que es la capacidad de cada ser para tomar decisiones
sobre el camino que desea recorrer. La obligación ética del medico al respecto es indicar o recomendar lo que
cree que es mejor en cada caso y respetar la autónoma y e derecho a la libre determinación de cada uno. Lo
mas importante en toda medicina es EL AMOR Y LA SOLIDARIDAD, sin los cuales será imposible lograr la
empatía que nos permita acercarnos al otro o la otra con la sincera intención de ayudarlo(a), partiendo de
entender en esa otra persona un ser muy similar a cada uno de nosotros, con fortalezas y debilidades, con
emociones diversas y expectativas generalmente por nosotros desconocidas.