Antisépticos y Desinfectantes
Antisépticos y Desinfectantes
Antisépticos y Desinfectantes
1) CONCEPTOS
Sin embargo, se reúnen otros aspectos de utilidad y practicidad para un desinfectante, que
contribuyen a la construcción de su perfil ideal:
NOTA: Cuando un detergente o antiséptico tiene un amplio espectro de acción (se encuentra
dirigido a bacterias, virus y hongos) se le llama Germicida. Si sólo está dirigido a bacterias, se le
denomina Bactericida o Bacteriostático (Bactericida: Eliminación/destrucción total de bacterias
(ya sean Gram + o Gram-). Bacteriostático: Inhibición del crecimiento o reproducción de las
bacterias, es decir, no las destruye, pero si reduce su población inhibiendo su reproducción y/o
crecimiento). Si sólo está dirigido a virus, se llama Viricida. Si sólo está dirigido a hongos, se
denomina Fungicida. Esporicida: Eliminación de esporas.
3) CLASIFICACIÓN
El ácido acético medicinal es el ácido acético glacial diluido al 33% con agua destilada. Es una
alternativa contra Pseudomonas y hongos. Las soluciones pueden ser irritantes, sobre todo en
vagina y quemaduras. Se utiliza al 1% en vendajes quirúrgicos y apósitos; al 0,25-1% en
irrigaciones vaginales; al 2,5% en otitis externas y al 5% en quemaduras extensas
- ALDEHÍDOS: Poseen propiedades germicidas al combinarse con los grupos amino de las
proteínas dando lugar a azometinas, que resultan tóxicas para los microorganismos. En
concentraciones elevadas, los aldehídos coagulan y precipitan las proteínas. Ejemplos: El
formaldehído se emplea más como desinfectante que como antiséptico, en
concentraciones que oscilan entre el 2 y el 8% para desinfectar material quirúrgico y
guantes, y al 10% en solución salina para conservar muestras biológicas. Sólo en
concentraciones del 20-30% tiene propiedades astringentes y se utiliza en hiperhidrosis,
aplicado sobre las palmas de manos y las plantas de pies.
Permanganato potásico: También se utiliza para desinfectar heridas pero es poco empleado
por ser inactivado con facilidad y poseer una acción más lenta que el anterior.
En las concentraciones indicadas, tanto la solución acuosa de yodo como la tintura de yodo son
poco tóxicas e irritantes en aplicación tópica.
Tintura de yodo: El agente activo es el yodo, altamente eficaz y con espectro muy amplio. Su
acción es muy rápida y una vez aplicado no pierde eficacia en varias horas, por lo que es
probablemente uno de los mejores antisépticos disponibles. La concentración comercial más
habitual de la tintura contiene 2% del yodo metal y 2,5% de yoduro potásico en alcohol al 50%, y se
utiliza en piel sana o en infecciones cutáneas por hongos y bacterias. La misma concentración en
solución acuosa también desinfecta heridas.
También se puede utilizar como agente potabilizador de agua, principalmente para viajes a países
tropicales por su acción frente a amebas y giardias. En estos casos se utilizan cinco gotas de tintura
de yodo a una concentración del 2% por litro de agua, dejándola actuar durante una hora antes de
beberla. Si la presentación es al 4% se recomendará la mitad de la dosis.
- FENOLES: Penetran fácilmente a través de la membrana celular bacteriana. En dosis
elevadas, se combinan con las proteínas, precipitándolas y desnaturalizándolas. En
concentraciones menores inactivan sistemas enzimáticos que son esenciales para el
metabolismo bacteriano.
El fenol ya no se utiliza en la asepsia de la piel por ser muy irritante y presentar problemas de
toxicidad. Se utiliza sólo al 5% en la desinfección de excrementos. El hexaclorofeno es un
bifenol policlorado de gran eficacia frente a bacterias grampositivas, pero escasa o nula frente
a gramnegativas y esporas. Se inactiva en presencia de sangre. Se acumula en la piel, de
manera que el lavado diario origina una especie de depósito del que el yodo se libera
lentamente, favoreciendo una protección bacteriostática de varias horas. Prácticamente ha
desaparecido el producto de los medicamentos comerciales.
Son menos activos que la clorhexidina o los compuestos yodados. El alcohol potencia su
acción, por lo que las tinturas son más eficaces que las soluciones acuosas. Son antagonizados
por jabones, pus y otro material orgánico. Forman una película en la piel, por debajo de la cual
pueden germinar bacterias. No son irritantes para la piel si no se superan las concentraciones
recomendadas, aunque pueden ocasionar reacciones alérgicas.
- METALES PESADOS: La acción antibacteriana del mercurio y otros metales pesados se basa
en su capacidad para reaccionar con los grupos sulfhidrilos de las proteínas para formar
sulfuros, anulando de esta manera la actividad enzimática de aquéllas. Los más empleados
son los derivados del mercurio y las sales de plata.
Los mercuriales son compuestos orgánicos con actividad bacteriostática y fungistática. Pese a la
proliferación en el mercado de otros antisépticos más novedosos, existen todavía preparados
comerciales (merbromina, tiomersal) que se siguen empleando a nivel popular como antisépticos
en la desinfección de la piel y heridas. Antes de aplicar la merbromina, es necesario limpiar bien la
herida para que la materia orgánica o la sangre no inactiven su acción.
En las sales de plata, la poderosa actividad germicida de los iones argénticos se basa en que
reaccionan con grupos SH y otros grupos de las proteínas desnaturalizándolas. El nitrato de plata
es bactericida en una concentración del 0,1% y bacteriostático en concentraciones inferiores. El ion
argéntico precipita con el cloruro de los líquidos tisulares, por lo que penetra escasamente. Los
depósitos de plata se ennegrecen con la luz, tiñendo el tejido orgánico y la ropa.
La sulfadiazina argéntica es una solución de una sulfamida con el ion plata que actúa sobre la
pared celular y membrana citoplasmática. Posee un amplio espectro de acción: es bactericida y
fungicida. Es eficaz frente a una gran variedad de Gram positivos (S. aureus) y Gram negativos (P.
aeruginosa, Enterobacterias), así como Candida spp. Se aplica en crema al 1% en la prevención y
tratamiento de infecciones en quemaduras extensas y graves. La adición de nitrato de cerio a esta
crema potencia su acción antimicrobiana y acelera la formación de la escara. Es el fármaco de
elección para tratar quemaduras e injertos infectados, y para impedir su infección en enfermos con
alto riesgo. No produce las alteraciones electrolíticas que provoca el nitrato de plata, aunque se
use en zonas extensas y de forma prolongada, ni suele causar dolor. A veces puede originar alguna
erupción, picor o quemazón. Se aplica sobre toda la superficie quemada con un grosor de 1-3 mm,
previo lavado de la herida. Por su escasa solubilidad permanece varias horas, de ahí que baste
aplicarlo 1 o 2 veces al día.
DETERGENTES ANIÓNICOS:
Liberan una carga negativa (anión) en solución acuosa, su parte hidrófila se carga negativamente.
Suelen utilizarse por su poder espumoso. Entre los más importantes, se puede mencionar:
- Sulfonato De Alquilbenceno
- Alquil Éter Sulfato
- Alquil Sulfato
- Dodecilsulfato De Sodio.
Éstos son muy eficaces y se usan en los detergentes para la ropa y en productos de limpieza.
Suelen inactivan en contacto con jabón, algodón y materia orgánica. Son poco usados
DETERGENTES CATIÓNICOS:
Debe tenerse la precaución de eliminar cualquier rastro de jabones antes de aplicarlos sobre la piel
(procedentes de lavados previos) ya que podrían inactivarse, así como evitar el contacto con
material poroso, talco o caolín, ya que perderían su eficacia antiséptica.
7) ALCOHOLES Y ALDEHÍDOS
ALCOHOLES: Son sustancias químicas orgánicos que contienen un grupo hidroxilo (-OH) en
sustitución de un átomo de hidrógeno. Es una alternativa para la antisepsia de la piel en los
pacientes sensibles al yodo, con un tiempo de contacto no inferior a los 60 segundos. Puede
utilizarse igualmente para la desinfección de superficies e instrumentos. Poseen las siguientes
características:
Acción rápida
• Evaporación rápida
• No deja residuos
Ambos alcoholes son bactericidas rápidos, mas que bacteriostáticos, contra formas vegetativas de
bacterias. También son tuberculicidas , funguicidas y viricidas , pero no destruyen las esporas
bacterianas.
El alcohol isopropilico es incapaz de actuar frente a los virus hidrófilos (Echo, Cocksackie). Su
actividad destructiva disminuye notablemente cuando se lo diluye por debajo del 50% . La
concentración optima esta en un rango entre 60 y 90%.
No tiene efecto residual pero varios estudios demostraron que es capaz de reducir el 99.7% la
concentración microbiana de la piel de las manos.
ALDEHÍDOS:
- Formaldehído: Aunque es muy eficaz frente a todo tipo de gérmenes, su acción es muy
lenta (a modo de ejemplo: concentraciónes del 8% tardan 18 h en matar esporas). Se
utilizan concentraciones del 2-8% para desinfectar material quirúrgico y guantes. En forma
de vapores y aereosoles se emplea para desinfección de habitaciones, camas, ropa, etc. Se
debe manejar con cuidado ya que los vapores son altamente irritantes por inhalación.
- Glutaraldehído: Este aldehído es más activo que el anterior frente a bacterias, hongos,
micobacterias, esporas y virus. Es menos irritante para la piel y desprende menos vapores,
por lo que resulta menos nocivo por inhalación. Es uno de los desinfectantes más
ampliamente utilizados y efectivos para material quirúrgico. Se aplica en concentración del
2%. La acción bactericida de la solución es óptima a pH 7,5-8,5.
8) HALÓGENOS:
CLORO
Puede encontrarse bajo las formas de cloro gaseoso, hipocloritos o cloraminas. En cualquier caso,
el mecanismo por el cual desarrolla la acción desinfectante se debe a la liberación de cloro libre
que a su vez, junto al agua y en medio ácido o neutro, origina ácido hipocloroso que es un oxidante
fuerte que se combina con el grupo amino de las proteínas bacterianas para formar cloraminas y
liberar oxígeno (destruye los microorganismos por oxidación). Se trata, por tanto, de potentes
germicidas inespecíficos de acción rápida contra bacterias y virus, aunque su actividad disminuye
al entrar en contacto con materia orgánica y al aumentar el pH (en solución alcalina se forman
iones hipoclorito).
La solución de hipoclorito sódico es muy potente como desinfectante para uso externo (ataca a
virus y bacterias). Se emplea en desinfección de paredes, pisos, sanitarios, recipientes de
alimentos, útiles de aseo, etc. El hipoclorito comercial se vende a concentraciones del 10 al 17%.
Hay que tener en cuenta que el cloro activo que pueda contener el producto en el momento de
uso puede ser bastante variable. El hipoclorito podría utilizarse con la doble función limpieza y
desinfección a concentraciones del 5 al 10%. Las soluciones a pH alcalino (con bicarbonato sódico)
son más estables pero a pH ácido tienen mayor actividad.
Cuando se usa al 1% , su uso queda limitado a laboratorios o sectores donde se manejen cultivos
virales o extensas superficies contaminadas con sangre. Se inactiva frente a materia orgánica por lo
cual no debe mezclarse con detergentes produce vapores tóxicos e irritantes para los operadores.
El hipoclorito de sodio resulta corrosivo para el instrumental medico ya que lo deteriora
rápidamente.
HIPOCLORATO DE CALCIO (También llamado cal clorada)
Es ampliamente utilizado en tratamiento de aguas por su alta eficacia contra bacterias, algas,
moho, hongos y microorganismos peligrosos para la salud humana. Además es un agente
blanqueador. Su apariencia es granulosa, de color beige claro. En solución acuosa desprende un
olor similar al del hipoclorito sódico. El peso molecular del hipoclorito de calcio es de 142.98
g/mol.
Dado su elevado poder de antisepsia, se utiliza como agente desinfectante del agua de las piscinas,
principalmente en concentraciones del 70%.1 Por tal motivo, se le hace llamar comúnmente cloro
para piscinas. Durante el proceso químico de la desinfección se producen compuestos tales como
cloraminas, dicloraminas y tricloraminas en presencia de amoníaco en el agua. Las cloraminas
sirven igualmente como desinfectantes aunque reaccionen de una manera sumamente lenta.
La especie desinfectante es el ácido hipocloroso (HOCl), el cual se disocia en iones hidrogenios
(H+) e hipoclorito (OCl-) y adquiriere sus propiedades oxidantes: Ambas
fracciones de la especie son microbicidas y actúan inhibiendo la actividad enzimática
de las bacterias y virus y produciendo su inactivación
El yodo elemental es uno de los bactericidas de mayor potencia cuando actúa sobre la piel íntegra,
ya que se inactiva fácilmente en contacto con la sangre y el suero. Actúa tanto por su efecto
oxidante como por su combinación irreversible con los residuos de tirosina de las proteínas.
También tiene un efecto fungicida y antiviral.
- Tintura de yodo: Aunque tiene un amplio espectro microbiano y actúa con rapidez, tiene el
inconveniente de que puede irritar la piel y que la sangre o el pus reducen bastante su
eficacia. Por su poder irritante no se aplica sobre mucosas.
Características:
• Acción rápida
• Puede dañar algunos
metales (e.j., plomo,
cobre, zinc, latón)
• Puede causar daños
a la piel y ojos; irrita las
membranas mucosas
- Ozono: Es una sustancia cuya molécula está compuesta por tres átomos de oxígeno,
formada al disociarse los dos átomos que componen el gas de oxígeno. Cada átomo de
oxígeno liberado se une a otra molécula de oxígeno gaseoso (O2), formando moléculas de
ozono (O3). Posee acción bactericida y bacteriostática. Propiedad viricida: oxida las
proteínas de la envoltura de los virus y modifica su estructura, evitando que puedan
anclarse en las células hospedadoras, acción que les impide su reproducción y en
consecuencia mueren. Propiedad fungicida: mediante su acción oxidante que provoca un
daño irreversible en las células de los hongos eliminándolas de todo tipo de ambientes.
Propiedad esporicida: a concentraciones ligeramente superiores a las usadas para el resto
de las bacterias, es capaz de destruir dichas esporas de resistencia.
- Clorato de potasio: es una sal formada por el anión clorato y el catión potasio. Se
encuentra en enjuagues bucales, duchas vaginales y preparados para higiena local; a
comparación con los otros agentes oxidantes, sus propiedades antisépticas son muy
débiles.
- Peróxido de Zinc: es un compuesto inorgánico, que se forma cuando se mezcla zinc con el
oxígeno. Actúa como un desinfectante y al mismo tiempo tiene un efecto secante, ideal
para aplicar en zonas de la piel con irritaciones húmedas. La acción del zinc se debe a la
formación de una fina película que protege a la piel de las irritaciones, excoriaciones y
rascado, al adherirse con facilidad a la superficie cutánea lesionada.