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Los múltiples nombres del Dios innombrable. Una

"" José González Ríos

El interés por el problema del lenguaje en el pensa- elementos para la comprensión de un tópico medular
miento de Nicolás de Cusa encuentra un primer foco en la filosofía cusana.
en la Escuela de Marburgo a través de las investiga-
ciones que Hermann Cohen realiza sobre la filosofía Su investigación se articula en dos grandes partes. En
del Cusano en el contexto de la filosofía que florece la primera de ellas, bajo el título “Los múltiples nom-
en el último tercio del siglo xix. Con todo, fue uno de bres del dios innombrable”, Cubillos Muñoz, con-
sus más notorios discípulos, Ernst Cassirer, quien, a la forme ella misma lo advierte en la Introducción: “se
luz del proyecto de una filosofía de las formas simbó- ocupa sucesivamente del conocimiento en Nicolás de
licas, se abocó al estudio de la concepción cusana del Cusa, su teodicea de carácter místico y su examen de
lenguaje y abrió, de este modo, un fecundo camino los nombres divinos, para concentrarse finalmente
que sería continuado, amplificado y complejizado en aquellas denominaciones que encarnan de modo
por filósofos de la tradición continental. Cabe des- paradigmático su original teodicea” (p.23). Analiza así,
tacar, entre otros, los aportes realizados por Karl-Otto en el primer capítulo, los presupuestos de la teodicea
Apel, a la luz de una hermenéutica trascendental, y cusánica, tanto desde el punto de vista metafísico, al
las investigaciones de Hans-Georg Gadamer, no solo abordar el estudio de la unidad coincidencial de lo
en el marco de su opus magnum, sino también en infinito –en tanto principio rector del pensamiento
diversos pequeños escritos, como “Nikolaus Cusanus cusano– como desde el punto de vista gnoseológico,
und die Gegenwart” (1964), en el que muestra la cen- al tratar el examen de las diversas fuerzas o potencias
tralidad del lenguaje en el sistema de pensamiento de conocimiento de la mente humana (humana mens).
cusano.Sin embargo, resulta insoslayable advertir el
aporte que constituyó la edición crítica:Nicolai de A partir de ello, en el segundo capítulo evalúa los
Cusa, Opera Omnia iussu et auctoritate Academiae diversos sentidos del concepto de “teología” en la
Litterarum Heidelbergensis ad codicum fidem edita. obra cusana. Repasa así la posición del Cusano res-
Desde entonces, las investigaciones sobre el proble- pecto de la teología afirmativa, la teología negativa y
ma del lenguaje en el Cusano han contado no solo la teología “superlativa” o mística. Luego aborda las
con la especulación teorética de aquellos filósofos, peculiaridades de la teología en Nicolás de Cusa a la
sino también con un invaluable instrumento para el luz del camino de la docta ignorantia; se refiere así a
estudio de las obras cusanas tanto ad intra como en una teología “hiperfática” o de la trascendencia, una
su genealogía y proyección. En este sentido, no pode- teología sermocinal o del presupuesto y una teología
mos dejar de mencionar las contribuciones realiza- matemática.
das por Werner Beierwaltes, Klaus Reinhardt, Hans
Gerhard Senger, João María André, Peter Casarella, Con estos elementos aborda, en el tercer capítulo
SiegfriedDangelmayr, Kurt Flasch, Jan Bernd Elpert, de esta primera parte, el problema del nombre de
Donald Duclow, Burkhard Mojsisch y Oscar Federico Dios. Repone el tratamiento medieval del problema
Bauchwitz, entre otros. a la vez que presenta la teoría cusana de los nom-
bres divinos. En esto, trata la cuestión acerca del
La reciente aparición de la obra Los múltiples nombres nombre propio de Dios conforme a la tradición, la
del Dios innombrable. Una aproximación a la metafísica evaluación cusana de los nombres ofrecidos por la
de Nicolás de Cusa desde la perspectiva de sus nombres tradición, la legitimidad de la nominación de lo divino
divinos (2013), de Catalina María Cubillos Muñoz, no y el fundamento de dicha legitimidad toda vez que
solo viene a integrar la bibliografía existente sobre los nombres resultan explicaciones (explicationes) del
el tema, sino también a ofrecer nuevos y fecundos nombre natural absoluto. Esto le permite abordar
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una consideración sobre los nombre bajo el título No podemos evitar señalar la importancia de este
“Todos los nombres y ninguno”. Estudia allí mismo capítulo para la reflexión contemporánea no solo en
la procedencia de los nombres como imposiciones el ámbito de los estudios cusanos, sino también en
a partir de un movimiento de la razón (ratio). Esto la discusión filosófica más reciente en torno a los
le permite presentar la distinción siempre necesaria conceptos de “poder”, “posibilidad” y “potencia”,
en el examen del problema del conocimiento entre que, en el caso del Cusano, ponen de manifiesto el
ratio e intellectus con el fin de mostrar que, si bien los carácter dinámico del principio o concepto absoluto.
nombres son impuestos a partir de un movimiento
de la razón, son expresiones múltiples de un natural Avanza luego, en el cuarto capítulo, en la presen-
deseo intelectual. tación del quizás más especulativo de los nombres
enigmáticos cusanos por la complejidad del juego
Finalmente, cierra esta primera parte de su investiga- lingüístico que abre. Se demora de este modo en el
ción con un cuarto capítulo destinado a lo que da en estudio del tetrálogo De non aliud (1462) mostrando
llamar “la teoría constructiva” de los nombres divinos el esfuerzo de Nicolás de Cusa al concebir por medio
del Cusano. Presenta en él las múltiples denomina- de lo “non aliud” el principio primero como la defini-
ciones de Dios y, a partir de ello, una distinción en los ción lógico-ontológica que define todo y a sí misma.
nombres empleados por el Cusano entre “denomina- Al realizar esto, trata la unitrinidad del principio y su
ciones formalmente impropias”, dentro de las cuales concepción como principio del ser y del conocer. Por
se encuentran los nombres alegórico-metafóricos, medio de la metáfora de la luz, tan cara a la especu-
las formulaciones trinitarias y las denominaciones lación cusana, aborda la anterioridad del principio a
tradicionales no tematizadas, en cuanto nombres través de la relación ente lo non aliud y el principium
divinos, y los “nombres formales idóneos”, entre los A. Finalmente, retoma el tópico dela inmanencia y
cuales se encuentran las formulaciones tradicionales trascendencia del principio por medio del enigma de
tematizadas formalmente como nombres de Dios y lo non aliud.
los nombres originales del Cusano: “maximum”,
“idem”, “possest”, “nonaliud”, “posse ipsum”. El quinto capítulo ofrece el tratamiento del último
nombre enigmático con el cual el Cusano nombra lo
Este último apartado en torno a los nombres origina- divino en un pequeño y precioso diálogo que com-
les propuestos por el Cusano abre a la segunda parte pone unos meses antes de morir: el De apice theoriae
de su texto, en la que son presentados “Los nombres (1464). Por medio del nombre enigmático posse ipsum,
enigmáticos de Nicolás de Cusa”. Así evalúa, en el el Cusano profundiza la noción de “poder” como una
primer capítulo de esta segunda parte, el nombre orientación filosófica definitiva, al entender de Cubi-
“maximum”, que oficia en la primera gran formula- llos Muñoz. Presenta así la definición de la quididad
ción de su sistema de pensamiento, De docta igno- de lo absoluto en términos de poder, concebido como
rantia (1440), no solo como nombre de lo divino, sino el principio sustancial dinámico de todas las cosas.
también como la categoría capital de su metafísica. Concluye la presentación de este último nombre
enigmático a través de la evolución que Nicolás de
En el segundo capítulo, la autora se demora en el Cusa mismo sugiere en el paso del “possest” al “posse
análisis y la interpretación del nombre enigmático ipsum” en la consideración del principio como poder.
“idem”, que el Cusano emplea como “enigma de la
unidad infinita” en uno de los opúsculos que com- Cierra esta segunda parte con un capítulo final, que
pone tras finalizar la redacción de los libros del De lleva paradigmáticamente por título “Continuidades
coniecturis, cuya fecha de redacción sigue siendo aún y evolución en la teoría de los nombres”. Allí la autora
hoy incierta. Aborda así la presentación del Dialogus se enfrenta a uno de los problemas más complejos
de genesi (1447). La autora presenta con profundidad y discutidos en torno al problema del lenguaje en el
y detenimiento el problema que se esconde tras este pensamiento cusano pues se concentra en la pregun-
nuevo nombre enigmático, a saber: la relación entre ta por la posibilidad de una evolución en la teodicea
identidad y diferencia o alteridad. cusana de los nombres enigmáticos. Busca mostrar,
en su examen de una posible evolución en la teoría
En el tercer capítulo trata el neologismo “possest” cusana de los nombres, el “sustrato común a estas
con el cual Nicolás de Cusa nombra lo divino en su cinco formulaciones, analizando su estructura lin-
Trialogus de possest (1460). Atiende en su presenta- güística, gnoseológica y metafísica, y en particular la
ción el problema historiográfico en torno a la relevan- relación entre Dios y el mundo que significan” (p. 23)
cia y novedad de las obras cusanas de este período. como elementos para consolidar su posición.
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En virtud del breve bosquejo que acabamos de ofre- María Cubillos Muñoz por un tan exhaustivo trabajo
cer de Los múltiples nombres del Dios innombrable. Una en torno a uno de los aspectos más interesantes del
aproximación a la metafísica de Nicolás de Cusa desde problema del lenguaje en el pensamiento cusano, i.e.
la perspectiva de sus nombres divinos, no podemos el incesante esfuerzo de Nicolás de Cusa por nombrar
más que celebrar su publicación, felicitar a Catalina lo innombrable, e invitar a su lectura y estudio.