Colinización en América
Colinización en América
Colinización en América
http://melanydelarosa.blogspot.com/2017/09/la-conquista-la-dominacion-colonial-del.html
Dichas prácticas también fueron características de la época feudal, pero en este caso aplicada a la época
colonial, pero las figuras eran las mismas, en donde a través del feudalismo, en donde existía un señor
y un vasallo, el vasallo era quien trabaja la tierra y el señor era quien le proveía protección y quien ejercía
el despotismo, es decir, abusaba de sus funciones a su total gusto, todos estos vasallos se les cobraban
impuestos, es decir, tributos, algunos eran en especies, con parte de la producción, otras en monedas
preciosas, dependiendo de lo que el señor deseara, a esto fue lo que se le denominó despotismo
tributario....y también imperó en la época colonial.
El que tributo a veces podría ser predeterminado como otras veces podría quedar bajo el deseo del
señor feudal, en el caso colonial por la autoridad monárquica.
MITAS:
Se desarrolló principalmente en las zonas coloniales andinas, en donde se les obligaba a los hombres a
realizar trabajos, que eran vistos públicamente como una forma de pagarle al Estado el tributo que ya
hicimos referencia hace líneas atrás, en esta forma de dominación todos aquellos hombres casados que
contaban entre 18 y 50 años de edad, con aptitudes...debían trabajar de manera forzada en minas,
haciendas, construcciones de templos, puentes, caminos, entre otros.
OBRAJES:
Eran las pequeñas industrias textiles en donde los indígenas eran obligados a trabajar.
CONCERTAJES Y HACIENDA:
Eran contratos mediante el cual un indígena se obligaba a realizar trabajos agrícolas de manera vitalicia
y hereditaria, sin recibir salario o recibiéndolo mínimo. El concertaje de indios enmascaraba un sistema
de servidumbre y esclavitud que era el eje fundamental del sistema de hacienda.
Cuando, a comienzos de la época moderna, el proceso expansivo europeo necesitaba afianzarse -en
especial en el ámbito colonial- sobre un nuevo desarrollo económico y, al tiempo, se produjo el
derrumbe demográfico y estructural de la población indígena americana, se hizo imprescindible buscar
alternativas que garantizaran la explotación económica del Nuevo Mundo.
La más obvia e inmediata fue la organización del tráfico de esclavos africanos a América, que adquirió
enormes proporciones, que apenas pueden dar idea de la tragedia que conllevaba y de sus profundas
consecuencias económicas, sociales y culturales en Europa, África y América.
La magnitud de dicho comercio requirió desde muy pronto una organización, pasándose de un sistema
de permisos y licencias a los contratos de abastecimiento y los asientos de negros. Los más destacados
traficantes y asentistas fueron en el siglo XVI portugueses y españoles, holandeses, franceses e
ingleses desde el XVII, predominando estos últimos en el siglo XVIII.
Los destinos preferentes fueron las Antillas, el Caribe, Canadá, Estados Unidos, Brasil y casi todas las
colonias españolas. No obstante, no hay que olvidar que buena parte de los esclavos africanos llegaron
por vías ilícitas, a través del contrabando y que podemos establecer una cierta periodización en la
trata.
Contamos sólo con datos muy parciales que, difícilmente, permiten cuantificar con garantías el
número de esclavos africanos trasladados a América. Hay una coincidencia en los estudios en señalar
el incremento del siglo XVI al XVIII y la disminución en el XIX.
Los totales que los diferentes autores ofrecen para los tres siglos modernos son escalofriantes: entre
11 y 15 millones de personas llegaron como esclavos a América (habría que añadir cuatro o cinco
millones más en el siglo XIX), en unos 55 mil viajes de los barcos negreros. El horror de esas cifras es
aún mayor si tenemos en cuenta que se calcula que por cada persona llegada al Nuevo Mundo
morirían cinco o seis en la captura o en las travesías, con lo que las pérdidas demográficas se elevarían
a unos cien millones.
Mientras que 1492 simboliza una época de apertura, expansión y desarrollo para Europa; para África
significa todo lo contrario, el cierre, la decadencia, el inicio de una catástrofe sin precedentes, no sólo
demográfica.
El saqueo violento del Nuevo Mundo los mineros del Cerro Rico en Potos Bolivia durante el
periodo colonial
El signo de la violencia presidió la vida potosina desde el momento en quelos indios de Cantumarca,
que se negaban a fabricar casas para los españoles recién llegados de Porco y La Plata, fueron rendidos
a la fuerza y con efusión de sangre. Las guerras civiles entre conquistadores también afectaron al
poblado y el temor a una incursión masiva de los temibles chiriguanos de los llanos también desveló a
los vecinos en el curso del siglo XVI.
El control por el poderpolítico dentro de la ciudad fue ganado muchas veces por las armas. En 1553,
Vasco Godínez y Egas de Guzmán, apoyados por un grupo de forajidos, asaltaron la casa del
gobernador Pedro de Hinojosa, a quien dieron muerte. Guzmán hizo ahorcar a continuación al
contador Hernando de Alvarado y se apoderó de un millón de pesos de las Cajas Reales. Los conjurados
enviaron emisarios a Lima para que explicaransus acciones y la Audiencia de esa ciudad despachó a su
vez a Alonso de Alvarado con la tropa necesaria como para pacificar a Potosí y dar muerte a los alzados.
El cadáver de Vasco Godínez fue descuartizado.
En la minoría blanca que habitaba Potosí abundaban los aventureros y antiguos soldados que una, vez
concluida la etapa de la conquista y las guerras civiles, habían quedado sin ocupaciónalguna, pero
obsesionados siempre con la posibilidad de hacer rápida fortuna.
Como enjambres de abejas a un panal de ricas mieles, españoles y extranjeros sin oficio acudían a
Potosí desde Lima, Panamá y otras ciudades para reclamar una tajada del botín. «Se sube allí -decía
una Cédula Real enviada al corregidor de Potosí en 1589- la mayor parte de la gente que va de estos
reinos y como allá no hallancomodidad conforme a sus intentos y esperanzas desasosiegan la tierra y
dan ocasión a muchos inconvenientes y daños cometiendo muchos excesos y demasías.
Muchos justifican el saqueo y genocidio que produjeron los españoles en América durante la conquista
alegando que nadie les había ‘enseñado’ que los nativos y/o gente de ‘color’ tenia los mismos derechos
quealguien ‘blanco’
Se apoyan en que los nativos no aceptaron a Dios como su máxima autoridad espiritual y prefirieron
seguir creyendo en sus dioses ‘herejes’ para poder esclavizar y saquear a una cultura que ya de por si
vivía en armonía con la naturaleza y entre ellos mismos.
Pero la real justificación, por más ‘científico’ que fuera el viaje (al querer probar que la tierra era
redonda, fue lainsaciable sed de oro por la cual los Reyes Católicos habían apadrinado el viaje, y junto
a él, los actos de salvajismo que se presentaron contra los naturales, violando uno de sus más grandes
mandamientos: No matarás.
“El descubrimiento de América se debió a la sed de oro que anteriormente había lanzado a los
portugueses hacia las tierras al África, porque la industria europea, enormemente desarrolladosen los
siglos XIV y XV, y el comercio correspondiente reclamaban más medios de cambio que los que podía
abastecer Alemania la gran productora de plata entre 1450 y 1550” (Carta de Federica Engels a C.
Schmidt, 17/10/1890)
Al ser el primer contacto de los españoles con las islas del caribe, fueron las primeras en ser despojadas
del oro que tenían. Los nativos los recibieron con los brazosabiertos, y es así cómo los españoles
pudieron ver que los indígenas mantenían piezas de brillante oro como meros objetos de decoración.
Al notar esto, una insaciable sed, que costaría millones de vidas, empezó a formarse en la mente de
los ‘descubridores’.
( El Saqueo Del Nuevo Mundo, 2012, 10)