Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Club de La Construccion

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 10

CLUB DE LA CONSTRUCCION

El Club de la Construcción, es el nombre dado a una presunta concertación ilícita


de constructoras en el Perú (entre nacionales y extranjeras) para repartirse obras
adjudicadas por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones del Perú (MTC).
Está siendo investigada por la Fiscalía anticorrupción desde el 2017, con el aporte
de aspirantes a colaboradores eficaces.
El caso está actualmente en manos del fiscal Germán Juárez Atoche, del Equipo
Especial del caso Lava Jato. Los delitos investigados son por tráfico de influencias,
lavado de activos y asociación ilícita para delinquir.
EMPRESAS INVOLUCRADAS
Las empresas en cuestión serían más de 25, entre las que se cuentan las peruanas
Obrainsa, Graña y Montero, ICCGSA, JOHESA, Grupo Plaza, Cosapi, Constructora
San Martín, Málaga Hermanos, H & H Casa; y las brasileñas Odebrecht, OAS,
Andrade Gutierrez, Queiroz Galvao, Mota-Engil.
Odebrecht, así como Graña y Montero, no se adjudicaron muchas obras, ya que
apuntaban más a los megaproyectos como el Metro de Lima y el gasoducto del Sur;
el Club de la Construcción prefería las obras menos vistosas.
OAS, que, al igual que Odebrecht, se ha acogido a la colaboración eficaz con la
Fiscalía peruana, ha reconocido haber pagado US$ 25 millones al Club de la
Construcción, para ser incorporado como miembro del mismo.
ESTRUCTURA DEL CLUB
Según la tesis de la fiscalía, el Club de la Construcción era una organización criminal
conformada por tres componentes:
 El primer componente estaría integrado por diversas empresas nacionales y
extranjeras dedicadas al rubro de la construcción.
 El segundo componente era Rodolfo Prialé de la Peña, quien fungía de
representante de las empresas constructoras, quien se encargaba de
transmitir la decisión del 'club' al entonces funcionario del MTC, Carlos García
Alcázar.
 El tercer componente, que según la fiscalía estaba constituido por los
funcionarios y/o servidores del MTC Carlos Paredes Rodríguez, Carlos
García Alcázar, Marco Antonio Garnica Arenas (ex gerente de la Unidad
Gerencial de Provías Nacional) y a los ex miembros del comité de
contratación del MTC. Además, de José Guillermo Paredes Rodríguez,
hermano del ex ministro [quien era el intermediario entre éste y el Club].
PROMOTORES DEL CLUB
Las investigaciones determinaron que los principales promotores y organizadores
del Club de la Construcción fueron el lobista Rodolfo Prialé de la Peña y el ex asesor
del Viceministerio de Transportes Carlos Eugenio García Alcázar. Se ordenó la
prisión preventiva de ambos, aunque solo logró ser capturado García. Los dos se
acogieron a la Ley de Colaboración Eficaz y están actualmente en libertad,
negociando un acuerdo de colaboración eficaz con el Equipo Especial del Caso
Lava Jato.
Otros operadores habrían sido Elard Paul Tejeda Moscoso (gerente de Obrainsa),
Félix Erdulfo Málaga Torres (gerente general de Constructora Málaga Hermanos),
Luis Humberto Prevoo Neira y Guillermo Reynoso Medina, estos dos últimos ex
socios de Prialé.
ANTIGÜEDAD DEL CLUB DE LA CONSTRUCCIÓN
La tesis de la fiscalía es que el Club de la Construcción habría actuado durante el
gobierno de Ollanta Humala, entre agosto de 2011 y junio de 2014, aunque se
presume que ya existía desde mucho antes y solo se reactivó en dicho gobierno.
Raymundo Trindade Serra, ex apoderado de Odebrecht, y testigo del Caso Lava
Jato, al ser interrogado por los fiscales peruanos en febrero de 2019, declaró que el
Club de la construcción existía en el Perú desde la segunda mitad de la década de
1990, y que su formación se debió a un cambio en la legislación durante el gobierno
de Alberto Fujimori. Dicho cambió habría facilitado el direccionamiento de
licitaciones a cambio de sobornos de las constructoras.
MODUS OPERANDI
De acuerdo al testimonio de los aspirantes a colaboradores, este habría sido el
procedimiento de la corrupción: Una vez realizada las licitaciones públicas en la
página de Provías Nacional (entidad del MTC), los representantes legales de las
empresas interesadas se reunían con Rodolfo Edgardo Prialé de la Peña, para
acordar cuál sería la firma ganadora. El acuerdo tomado se informaba a Carlos
Eugenio García Alcázar, funcionario del MTC, quien era el encargado de hacer el
otorgamiento de la Buena Pro a la empresa designada. Asimismo, en dichas
reuniones se determinaba que la compañía ganadora debía realizar un pago
ascendente del 2.92% a 5 % del valor referencial de la obra, que era entregado a
Prialé de la Peña.
Pero tras la aprobación de la ley contra el lavado de activos, se acordó que los
pagos se justifiquen a través de falsos contratos de servicios o suministro de
agregados. Así, cuando una empresa del Club de la Construcción "ganaba" la
licitación, firmaba un contrato con alguna de las empresas de Prialé: Lual
Contratistas Generales, P y P Contratistas Generales, RAL Contratistas y Servicios
Generales, Granja Juan Diego Vascos, Agronegocios Procam y Terrapuerto Wari.
Luego, a través de García Alcázar, Prialé y Prevoo se encargaban de dar las coimas
a los funcionarios del MTC, quienes daban el visto bueno a los acuerdos.
EL posible modus operandi consistía en que el representante de las empresas
habría llevado esta pre-relación –con la empresa ganadora- al MTC, donde un
funcionario público se encargaba de su ejecución. Este funcionario recibiría un pago
por parte de la empresa ganadora. Cabe resaltar que los pagos no salían del dinero
del “Club”, sino del sobrecosto de las obras. Las licitaciones bajo sospecha
comprometen casi 10 mil millones de soles, el cual podría duplicarse si se confirma
que este esquema se repitió entre el 2015 y 2017.
Asimismo, alguna de estas empresas también habría participado en la licitación del
Proyecto Corredor Vial Interoceánico Sur - Tramos dos y tres, donde sus
representantes habrían incurrido en el delito de colusión.
Los delitos involucrados son el de lavado de activos, tráfico de influencias, colusión
y organización criminal.
AUTORIDADES INVOLUCRADAS
I. EX MINISTRO CARLOS PAREDES
Entre las autoridades de alto rango involucradas está el ex ministro de
Transportes y Comunicaciones Carlos Paredes Rodríguez, uno de los
hombres fuertes de Ollanta Humala, que estuvo en dicho despacho entre
2011 y 2014, precisamente en la época en que funcionó el Club. De acuerdo
al testimonio de uno de los colaboradores eficaces, el nexo de Paredes con
los promotores del Club habría sido su hermano José “Pepe” Paredes
Rodríguez, a cuyas manos habrían ido a parar 17 millones de soles de las
coimas.
Según testimonios de un aspirante a colaborador eficaz, el ex ministro
Paredes era muy exigente en apurar los pagos que debía hacer el Club, luego
de que se adjudicaban las obras a las empresas, pero Carlos García le
explicaba que debía esperar pues era necesario que las empresas
justificaran la salida del dinero.
II. SUPUESTO FINANCIAMIENTO A LA CAMPAÑA ELECTORAL DE PPK
En febrero de 2019, la prensa dio a conocer el testimonio de uno de los
aspirantes a colaborador eficaz, según el cual, Pedro Pablo Kuczynski recibió un
aporte de cien mil dólares de parte del Club de la Construcción para financiar su
campaña electoral del 2016 (la misma que lo llevó a la presidencia de la
República, con Martín Vizcarra como primer vicepresidente). En la reunión para
el ilícito pago habrían estado presentes Martín Vizcarra como jefe de campaña,
Kuczynski como presidente del partido y Alfonso Grados Carraro como
secretario de economía. Consultado el presidente Vizcarra sobre dicha
revelación, respondió que se trataba de una patraña, que su participación en la
campaña de 2016 fue solo política, y que no intervino para nada en las finanzas
del partido. Más bien, adujo, que él había sido el primero en denunciar y combatir
al Club de la Construcción, cuando fue ministro de Transportes y
Comunicaciones en el 2016-2017.
LINEA DE TIEMPO DEL CASO “CLUB DE LA CONSTRUCCION”
Según el informe de la fiscalía:
1. Colaboradores dan a conocer el “club” (julio 2017)
Se informó que hubo dos testimonios de aspirantes a colaborador eficaz ante
la fiscalía sobre algunas constructoras que se habrían confabulado para
ganar diversas licitaciones ante el Estado Peruano.
2. Prisión preventiva (4 diciembre del 2017)
El juez del Primer Juzgado Investigación Preparatoria Nacional, Richard
Concepción, dictó prisión preventiva para los empresarios José Graña,
Hernando Graña, Fernando Camet (de JJC) y Fernando Castillo (de
ICCGSA); mientras que a Gonzalo Ferraro (de Graña y Montero) se le impuso
arresto domiciliario por su estado de salud. Esto en relación al caso
“Interoceánica”.
3. Congreso investigara al club (enero 2018)
Un miembro de la Comisión “Lava Jato” del Congreso anunció que
investigarán a los implicados del caso “Club de la Construcción”.
4. Allanamiento de locales del club (5 de enero del 2018)
La jueza María Álvarez -del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria
Especializado en Delitos De Corrupción De Funcionarios- dictó una orden de
allanamiento de varios inmuebles relacionados a la investigación, a fin de
buscar información relevante que contribuya para esclarecer los hechos
materia de investigación.
5. Formalización de investigación preparatoria (22 de enero del 2018)
El Equipo Especial de la Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada
en Delitos de Corrupción de Funcionarios -formado para el caso Odebrecht-
formalizó la investigación preparatoria en este caso por los delitos de tráfico
de influencias, lavado de activos y organización criminal. Asimismo, este
equipo pidió 18 de meses prisión preventiva contra varios de los
involucrados.
6. Prisión preventiva (25 de enero del 2018)
La jueza María Álvarez -del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria
Especializado en Delitos De Corrupción De Funcionarios- dictó una orden de
prisión preventiva contra el ex funcionario del Ministerio de Transportes
Carlos García Alcázar –el único detenido en dicha fecha–, Rodolfo Prialé de
la Peña, Paul Tejeda Moscoso (Obrainsa), Félix Málaga (Constructora
Málaga Hermanos) y Luis Prevoo.
7. Odebrecht y el club (26 de enero del 2018)
Se comunicó que un aspirante a colaborador eficaz señaló que Odebrecht
fue parte de este “Club”.
8. Cámara peruana de la consruccion (11 de febrero del 2018)
Se comunicó que 6 directivos de la Cámara Peruana de la Construcción
(Capeco) fueron separados en el marco del proceso del “Club de la
Construcción”.
9. Daño extrapatrimonial (12 de abril del 2018)
El procurador ad hoc José Miguel Ramírez estimó que en este caso hubo un
daño extrapatrimonial que asciende a 64 millones 898 mil 877, 73 soles. El
daño patrimonial será cuantificado en el proceso penal.
10. Investigación preparatoria (julio del 2018)
El proceso penal se encuentra en su etapa de investigación preparatoria en
sede fiscal (con el Exp. N°46-2017), a cargo del Equipo Especial de la
Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción
de Funcionarios y quien vela por la legalidad de esta es la jueza María
Álvarez -del 1er Juzgado de Investigación Preparatoria Especializado en
Delitos De Corrupción De Funcionarios.
11. Se incorpora a 12 empresas presuntas integrantes de "el club" como terceros
civilmente responsables (30 noviembre del 2018)
El Primer Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional declara fundado el
pedido de la Procuraduría Pública Ad-Hoc sobre la incorporación de las
empresas: COSAPI S.A, Constructora Queiroz Galvao S.A. Sucursal del
Perú, Constructora OAS S.A. Sucursal del Perú, Andrade Gutiérrez
Engenharia S.A Sucursal del Perú, Constructora Málaga Hermanos S.A.,
Construcción y Administración S.A. CASA, Hidalgo e Hidalgo S.A. Sucursal
Perú, JOHE S.A., Ingenieros civiles y contratistas generales S.A. ICCGSA,
GyM S.A., Obras de Ingeniera S.A OBRAINSA, MOTA-ENGIL Perú S.A. A la
vez, declaró infundada la inclusión de Grupo Plaza S.A. y San Martín
Contratistas Generales S.A; debido a que no habrían recibido obras durante
el tiempo investigado por la Fiscalía.
12. Se incluye a dos empresas presuntas integrantes de "el club" como terceros
civilmente responsables (1 de enero del 2019)
La Sala Penal Nacional de Apelaciones Especializada en Delitos de Corrupción
de Funcionarios - Colegiado A revoca la decisión del Primer Juzgado de
Investigación Preparatoria Especializado en Delitos de Corrupción ante la
solicitud de la Procuraduría Pública Ad-Hoc. Se incorporan a las empresas
Grupo Plaza S.A y San Martín Contratistas Generales S.A, en vista de su
participaci{on, a traves de sus representantes legales, en actividades de "El
Club" como organización criminal.
ANTECEDENTES PROCESALES DEL CASO
Según el reporte del IDEHPUCP (Instituto De Democracia Y Derechos Humanos):
 El caso está en el Expediente N° 46-2017 a cargo del Primer Juzgado
Nacional de Investigación Preparatoria del Sistema Especializado en Delitos
de Corrupción de Funcionarios.
 El 5 de enero de 2018, la jueza María Álvarez Camacho -del Primer Juzgado
de Investigación Preparatoria Especializado en Delitos de Corrupción de
Funcionarios- dictó una orden de allanamiento de varios inmuebles
relacionados a la investigación, a fin de buscar información relevante que
contribuya para esclarecer los hechos materia de investigación.
 El 22 de enero de 2018, el Equipo Especial de la Fiscalía Supraprovincial
Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios
formalizó la investigación preparatoria contra Carlos Eugenio García Alcázar,
Rodolfo Edgardo Prialé de la Peña, Elard Paul Alejandro Tejeda Moscoso,
Félix Erdulfo Málaga Torres, Guillermo Reynoso Medina y Luis Humberto
Prevoo Neira por los delitos de tráfico de influencias, lavado de activos y
organización criminal en referencia a los casos de las irregularidades en las
licitaciones efectuadas por Provías Nacional.
 El 25 de enero de 2018, la jueza María Álvarez -del Primer Juzgado de
Investigación Preparatoria antes mencionado- dictó una orden de prisión
preventiva contra el ex funcionario del Ministerio de Transportes y
Comunicaciones, Carlos García Alcázar, Rodolfo Prialé de la Peña, Paul
Tejeda Moscoso (de Obrainsa), Félix Málaga (de Constructora Málaga
Hermanos) y Luis Prevoo.
 Actualmente, el caso se sigue en el Primer Juzgado de Investigación
Preparatoria Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios y se
encuentra en la fase procesal de investigación preparatoria.
ANALISIS DE LOS PRINCIPALES PROBLEMAS JURIDICOS DEL CASO
I. Delito de tráfico de influencias imputado a los investigados en el caso
“Club de la Construcción”
El delito de tráfico de influencias sanciona a aquel que, a cambio de un beneficio,
ofrece interceder o influenciar, directa o indirectamente, ante un funcionario público
en un caso jurisdiccional o administrativo.
En el caso del “Club de la Construcción” se mencionan tres componentes como
elementos claves para el funcionamiento de este grupo. El primer componente
estaría conformado por las empresas COSAPI, Graña y Montero, OBRAINSA,
ICGPSA, JJ Camet, Málaga Constructores, San Martín, Camargo Correa, Queiroz
Galvao, H&H Casa entre otras, que habrían sido representadas por Edgar Paul
Tejeda Moscoso y Félix Ernulfo Málaga Torres, como comisionados de las
empresas del “Club” para entrar en contacto con los otros dos componentes. El
segundo componente, Rodolfo Edgardo Prialé de la Peña, definido como el “lobista”
por la Fiscalía, habría sido el encargado de conectar al primer y tercer componentes.
Finalmente, el tercer componente es el funcionario dentro del Ministerio de
Transportes y Comunicaciones Carlos Eugenio García Alcázar.
Ahora bien, sobre Carlos Eugenio García Alcázar se menciona que habría usado su
posición como Asesor en el MTC para interceder ante funcionarios públicos de esta
entidad a cargo de los procesos de selección convocados por Provías para que se
otorgue la buena pro de diversas obras, es decir, podía tener acceso e influencia
real sobre personas clave en la selección de postores ganadores. Sobre Rodolfo
Edgardo Prialé de la Peña se dice que este habría intercedido ante Carlos Eugenio
García Alcázar para que este influya en las decisiones de los funcionarios
responsables de las licitaciones en Provías Nacional. Sobre los comisionados de
las empresas Edgar Paul Tejeda Moscoso y Félix Ernulfo Málaga Torres, se
sostiene que también responderían por el delito de tráfico de influencias, ya que
habrían intercedido ante Carlos Eugenio García Alcázar para que este influya8 en
la asignación las obras de Provías a los integrantes del “Club”, según el cuadro de
prelación que estos tenían.
Al momento de determinar cuál sería el caso administrativo, debemos partir de que
estamos ante una situación donde está de por medio la capacidad de decisión de
un funcionario público. Finalmente, al referirnos al caso administrativo, estamos
pensando en todos los procedimientos administrativos que sean conocidos por
funcionarios o servidores de la administración pública –según el Exp. N° 0046-2011
del Segundo Juzgado Unipersonal de Lima. De esta forma, atendiendo a esta
interpretación amplia, diremos que califican como tal las licitaciones de las obras de
construcción que se habrían adjudicado a cada empresa integrante del club.
II. Sobre el delito de lavado de activos imputado a los investigados en el
caso “Club de la Construcción”
De la resolución N° 8, 24 de enero de 2018, emitida por el Primer Juzgado Nacional
de Investigación Preparatoria, se desprende que Carlos Eugenio García Alcázar,
Rodolfo Edgardo Prialé de la Peña, Luis Humberto Prevoo Neira están investigados
como autores del delito de lavado de activos.
Asimismo, se señala que las empresas Granja Juan Diego Vasco SAC., Terrapuerto
Plaza Wari SAC, Agronegocios PROCAM SAC, Triple P Agraria SAC y a Lual
Contratistas estarían asociadas a los investigados y que estás se habrían usado
para lavar el dinero –proveniente del delito de tráfico de influencias- en la modalidad
de actos de transferencia, que implica la traslación de los bienes de una esfera
jurídica a otra.
Para sostener su postura en este sentido la Fiscalía mencionó una serie de
transferencias de bienes entre los investigados o personas jurídicas vinculadas a
estos –por ejemplo, trasferencia de vehículos, departamentos, inmuebles
transferidos por Lual Contratistas a los investigados- además que estás se habrían
dado dentro del marco temporal en el que se investiga a las empresas del “Club”.
Asimismo, conforme avance el proceso penal, para acreditar la presencia del lavado
de activos se deberán tomar en cuenta indicios que ayuden a determinar el
elemento subjetivo del conocimiento de la fuente ilícita de los bienes lavados, estos
pueden ser según el Acuerdo Plenario 3- 2010/CJ-116:
 Incremento inusual del patrimonio del imputado: adquisición de bienes sin
justificación de ingresos que lo respalden, compare de bienes que abona otra
persona, transacciones comerciales inusuales, etc.
 La inexistencia o notable insuficiencia de negocios lícitos que justifiquen el
incremento patrimonial o las trasmisiones dinerarias.
 La constatación de algún vínculo o conexión con actividades delictivas
previas o con personas o grupos relacionadas con las mismas.

III. La colaboración eficaz en el proceso penal del caso “Club de la


Construcción”
En este caso se advierte que se mencionan a dos colaboradores eficaces: los
colaboradores signados con los códigos “3-2015” y “6-2017”. Una primera precisión
que hace el Primer Juzgado Nacional de Investigación Preparatoria es que las
declaraciones vertidas por alguien que está en un proceso por colaboración eficaz
deben estar acompañadas de elementos de corroboración, además que el Código
Procesal Penal señala que las declaraciones deben corroborarse –artículo 473- así
como su reglamento, el Decreto Supremo N° 007-2017-JUS –capítulo II. Si no se
señala la realización de actos de corroboración que confirmen la declaración, esta
no sería suficiente por sí misma para fundamentar una sentencia final en el caso o
una medida limitativa de derechos; no obstante, puede servir como un elemento o
indicio de cargo.
De esta forma, el juzgado considera que las declaraciones del colaborador eficaz
“3- 2015” no serían valoradas en esta solicitud de la medida provisional debido a
que no se han acompañado actos de corroboración que sostengan o permitan
mantenerlas para la valoración de graves y fundados elementos de convicción. A
pesar de ello, consideramos que si bien una declaración de alguien inmerso en un
proceso de colaboración eficaz, no puede por sí misma permita sostener una
medida limitativa de derecho, sí podría ser usada para iniciar una investigación
preliminar o acompañar como un elemento de cargo.
Ahora, respecto de lo dicho por el colaborador “6-2017”, el juzgado sí evalúo sus
declaraciones, teniendo en cuenta que el Ministerio Público hizo mención de actos
de corroboración sobre estas declaraciones, a diferencia caso anterior. Asimismo,
precisó que para valorar la declaración se tiene que saber con exactitud lo señalado
por el colaborador. Fue a través de la información proporcionada por este
colaborador que se pudo conocer de la existencia de este “Club”, así como de su
funcionamiento. Al respecto, cabe señalar que, en la medida en que aquí se trata
de una orden judicial de prisión preventiva y no de un proceso de colaboración
eficaz, las declaraciones vertidas por el colaborador podrían ser usadas como
elementos de cargo, conjuntamente con otros indicios, a pesar de no estar
plenamente corroboradas. No sería necesario, aquí, por tanto, exigir un alto nivel de
corroboración que se exige en el proceso de colaboración eficaz, pues ello se hará
eventualmente en este proceso especial.
Finalmente, si bien la defensa no participó en las declaraciones del colaborador, sí
se encuentra facultado –dentro del proceso común- para contradecirlo en lo que
respecta a las imputaciones que se puedan dar sobre su defendido. Asimismo, la
fiscalía puede partir de dichas declaraciones para sostener su imputación, pero no
debería pensar que será la determinante para presentar una acusación o pretender
una condena, sino que será necesario tener más medios de prueba que acrediten
su postura. Ello en la medida en que, conforme avanza el proceso penal, se exigen
mayores estándares probatorios de cargo al Ministerio Público.
ACCIONES JUDICIALES
El caso del ex ministro Carlos Paredes Rodríguez, quedó a cargo de la fiscal de la
Nación Zoraida Ávalos, por tratarse de un ex ministro de Estado.
En febrero de 2019, la Fiscalía de la Nación, a través del área de Enriquecimiento
Ilícito y Altos Funcionarios, a cargo del fiscal supremo Luzgardo Ramiro González
Rodríguez, abrió investigación preliminar al ex ministro Carlos Paredes por
presuntamente haber recibido sobornos del denominado Club de la construcción,
usando como intermediario a su hermano Pepe Paredes.
El 18 de mayo de 2019, el Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte
Suprema de Justicia, a pedido de la fiscal Ávalos, dictó ocho meses de impedimento
de salida del país para Carlos Paredes.
La Fiscalía solicitó la prisión preventiva por 18 meses para José Paredes Rodríguez
(hermano del ex ministro Carlos Paredes), así como para José Fernando Castillo
Dibós (ex presidente de la empresa ICCGSA), Edgard Ricardo Unzueta Zegarra
(gerente comercial de la constructora brasileña Andrade Gutierrez) y Javier Lei
Siucho (representante de la constructora CyM). En la audiencia realizada el 21 de
mayo de 2019, la jueza María de los Ángeles Álvarez Camacho aceptó imponer la
prisión preventiva a José Paredes Rodríguez, al considerar que existían graves
elementos de convicción sobre la comisión de presuntos delitos que se le
imputaban, además de peligro de fuga y de obstaculización procesal. Pero rechazó
el pedido de prisión preventiva sobre Javier Lei Siucho, a quien solo aplicó
comparecencia restringida. En cuanto a Castillo Dibós, la misma fiscalía retiró su
pedido de prisión preventiva y pidió solo comparecencia restringida.

También podría gustarte