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La Educacion Ambiental en La Modernidad y Pos

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LA EDUCACION AMBIENTAL EN LA MODERNIDAD Y POS-MODERNIDAD

Presentado por: Laura Sofía Pinzón Manrique

La educación ambiental es un instrumento fundamental para alcanzar los grandes


objetivos necesarios para un desarrollo sustentable el cual propone, que la
población adquiera conocimientos acerca de los aspectos naturales, culturales y
sociales y que contribuyen a la solución de los problemas ambientales, a la vez que
vincula al ser humano con su entorno inmediato: barrio, centro educativo, lugar de
trabajo, comunidad, país y en el ámbito mundial.
La educación ambiental motiva a un cambio de actitudes y a una participación
responsable en el manejo que se le da al medio ambiente y crea una interacción
adecuada con el entorno natural.
Además, fomenta el compromiso para contribuir a un cambio social, cultural y
económico, basado en actitudes y habilidades que le permita a cada persona formar
criterios propios y asumir su responsabilidad en cuanto al medio.
Si se habla de un modernismo en la educación ambiental se hace referencia a que
desde hace más de 500 años el modelo de desarrollo occidental con sus
características monoteísta, racionalismo, capitalismo y antropocentrismo. “Donde la
actual globalización estimula la polarización entre países y sectores ricos y pobres,
donde se hace cada vez más visible la ruptura tanto económica como social de los
países” (Martínez, 2009).
El desarrollo socio-económico (apropiación/producción y consumo del ecosistema)
juega un papel importante en el proceso de crisis general, por el abuso de los
ecosistemas y su estilo de vida (mercadocéntrico) (Martínez, 2007). Este modelo es
insustentable, expansivo y dominante, ha logrado conquistas científicas y
tecnológicas muy asombrosas, pero sus mismas dinámica y naturaleza han
contribuido a depredar, destruir y alterar la mayor parte de los ciclos ecosistémicos,
a tal punto que hoy día, fenómenos y procesos como el efecto invernadero, la
destrucción de la capa de ozono, la destrucción de las selvas tropicales, el
agotamiento de las reservas de peces en los océanos y la polución y agotamiento
del agua dulce, entre otras, hacen que la existencia misma de la vida en el planeta
esté en entredicho (Sangronis, 2004).
Es aquí donde plantea él porque enseñar que es ambiente y no solo desde el ámbito
cultural o lo que este represente para la economía de cierta región, municipio o
incluso país, aquí es donde se plantea la mayor pregunta del ensayo.
¿Para qué sirve la Educación Ambiental?
Debido a que los problemas ambientales están relacionados con un sistema de
desarrollo económico y social, situación que cada vez más empeora y se toma cada
vez de una manera menos responsable como si de esto no dependiera la mayoría
del sustento humano.
El sistema de apropiación/producción y consumo actual nos está llevado a una
situación crítica de la cual no será nada fácil salir, enfatiza en la desregulación real
del crecimiento económico-productivo, propio de un sistema que cosifica los
ecosistemas y solo les da un valor económico, mercantil (Martínez, 2007).
El deterioro del ambiente se ve influenciado por un alto índice de analfabetismo, por
lo que por medio de un proceso educativo, la sociedad transmite determinados
valores los cuales van moldeando el comportamiento de los estudiantes (González,
2000).
La educación tiene como función conservar y transmitir las verdades sistemáticas y
morales que son muy importantes para el progreso de la sociedad, porque al final
el objetivo de enseñar no es solo comunicar conocimiento a quienes no lo poseen,
sino que el estudiante se adueñe del conocimiento aprendido por el docente.
Desde aquellas lejanas épocas hasta ahora persiste la condición: la educación es
una cuestión política (Sangronis, 2004). La educación, como producto social e
instrumento de transformación de la sociedad donde se inserta; es un factor socio-
cultural como medio de transmisión del conocimiento.
A medida que los conceptos van avanzando y el mundo académico esta entre la
modernidad y de la posmodernidad, muchas regiones, cuidades y muchos países
han iniciado o están en proceso de comenzar alguna reforma de sus sistemas
educativos.
La mayoría de estas reformas o leyes proponen la introducción curricular de
preocupaciones sociales pero principalmente ambientales.

Todas estas reformas y ayudas pedagógicas han hecho al ser humano un ser
autónomo, el cual ha venido desarrollando sus capacidades y esto contribuye a la
mejora de sus condiciones para la convivencia social.

La educación ha hecho un largo recorrido y con la ayuda de nuevas políticas


educativas combinando el diagnóstico real de la situación educativa en el momento,
para poder cambiar y mejorar la calidad de la educación en base a los problemas y
falencias que se detectan pero siempre centrada en los seres humanos y en sus
relaciones diversas.
Encontramos así, en nuestros días, distintas propuestas o modalidades educativas
que, bajo uno u otro nombre, tienen ese denominador común, giran en torno a la
persona y a sus relaciones con otras personas o grupos: la educación para los
derechos humanos, para la igualdad de género, entre otros (Ausubel, 1983).
Es importante construir sólidamente la educación contemporánea, puesto que es
necesario encontrar un lugar apropiado para la educación ambiental dentro del
proyecto educativo global; para lograrlo se necesita aclarar y consolidar los vínculos
entre la educación ambiental y otros aspectos de la educación.

Por desgracia, a partir de observaciones críticas sobre algunas de las prácticas más
limitadas en la educación ambiental, los proponentes de la educación para futuros
proyectos sostenibles ofrecen una visión estrecha de la educación ambiental,
restringiéndolo a un enfoque naturalista o un proceso reactivo que se centra
fundamentalmente en la resolución de problemas de naturaleza biofísica,
conceptualizando de esta manera a la educación ambiental como una estrategia
fundamental para la implementación del desarrollo sostenible (Bachelard, 1983).

Sin embargo, veremos que la educación ambiental es un componente esencial de


la educación; se trata de la reconstrucción de los sistemas de relaciones entre las
personas, la sociedad y el medio ambiente, en donde la naturaleza ya no es tratada
como un simple objeto de beneficio personal si no que ahora gracias a la educación
ambiental se puede observar la interacción entre sujeto-naturaleza.

Es importante incluir la educación ambiental en un marco educativo, que le permite


tomar su lugar con el fin de trabajar en pro de sus propios objetivos, y que se integre
de buena manera con otras dimensiones de la educación contemporánea sin dejar
de lado a la misma sociedad.

La educación ambiental entonces debe ser entendida como un proceso permanente


de carácter interdisciplinario que busca que cada individuo se forme valores, aclare
conceptos y desarrolle las habilidades y las actitudes necesarias para una
convivencia armónica entre los seres humanos, su cultura y su medio biofísico
circundante, es decir, que las personas puedan utilizarla como una herramienta
social y educativa, vista como un derecho ciudadano a la educación (Bateson,
1991).
BIBLIOGRAFIA:

 Bateson, Gregory (1991), Pasos hacia una Educacion Ambiental, Carlos


Lohlé-Planeta, Buenos Aires.

 Bateson, Gregory (1991), La visión sistémica de la vida, Notas de lecturas,


Universidad Bolivariana, Santiago.

 Ausubel,G (1983), teoría del aprendizaje significativo. S.E

 Sangronis,J (2004) Ecología y posmodernidad. UNERMB

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