El Arca de Dios Permaneció en La Casa de Obed
El Arca de Dios Permaneció en La Casa de Obed
El Arca de Dios Permaneció en La Casa de Obed
Y para Obed-edom la puerta del sur, y a sus hijos la casa de provisiones del templo (1
Crónicas 26:15).
¿¿Cómo?? ¿Obed-edom entre los levitas? El sólo nombre lo ubica fuera del pueblo de Dios,
significa «siervo de Edom» y Edom, por cierto, pueblo descendiente de Esaú, fue uno de los
acérrimos enemigos de Israel, de esos que parecían pasarse la vida encontrando maneras de
perjudicar a Israel. ¿Cómo entonces se coló entre los siervos de Dios? ¿Qué hizo Obed-
edom?
La Biblia dice que cuidó el Arca de Dios cuando todos se asustaron y la dejaron casi
abandonada. ¿Conoces la historia?
David trasladó equivocadamente el arca de Dios al estilo filisteo, con irreverencia y falta de
respeto, lo cual costó la vida a un hombre llamado Uza por tocar profanando el Arca. Así que
David decidió no llevarla a su casa, escogiendo en su lugar dejarla en casa del arrimado
Obed… total, era medio israelita nada más.
Pero Obed-edom juntamente con su familia cuidaron el Arca con gran dedicación…como si
fueran anfitriones de Dios; y lo eran. Ante tal muestra de devoción, Dios bendijo su casa tan
extraordinariamente que en sólo tres meses se corrió la voz de su prosperidad. Rico en 90
días. Lógicamente, el rey David ni tardo ni perezoso fue por el Arca para llevar la bendición a
su casa… unhmm perdón, la Presencia de Dios a su casa (¿no lo harías tu?).
¿Qué hizo Obed?
¡Maletas! Él, junto con toda su casa dejó sus bienes y se fue tras el Arca de Dios a Jerusalén.
Prefirió la Presencia de Dios a su bendición. Así entró en la lista de sus siervos y alcanzó
renombre en Israel. Mejor siervo cuidando las cosas de Dios en su Presencia que señor en
una tierra sin Dios. Y tú, ¿a qué te dedicas? ¿Qué persigues con tu vida? ¡Ve tras el Arca!
¡Sigue a Dios! No es el lugar ni el trabajo, los bienes ni la bendición, no es nada de lo que
pueda hallarse bajo el cielo; lo que en verdad llenará tu vida es Dios.
Ah, lo olvidaba: Obed-edom siguió siendo gloriosamente bendecido todos los días de su vida;
Dios no será deudor de nadie.
La Palabra de Dios nos dice que donde está su presencia, la vida de las
personas cambia. Como ejemplo, podemos ver que en tres meses que
estuvo el arca del pacto (representaba la presencia de Dios) en la casa
de Obed-edom recibió bendiciones que él nunca esperaba. El tema es el
corazón de las personas receptoras de la presencia de Dios. Veamos
qué más nos dice la Biblia al respecto.
La santa envidia
¡En lo espiritual también puede ocurrir lo mismo! Hay personas que odian
a los que tienen la presencia de Dios y hablan toda clase de mal,
difaman, calumnian etc. Al ver que Obed-edom era bendecido por el arca
de Dios, David toma conciencia de que podía tener esa misma bendición
y traerlo a Jerusalén. Probablemente dijo:” Me estoy perdiendo mis
bendiciones. Yo también quiero ser bendecido. Yo también quiero la
presencia de Dios en mi casa”. En realidad fue positivo porque debía
llevarle a Jerusalén para poder bendecir a toda la congregación. Pero
debió aprender a moverse con la Palabra de Dios debió leer los escritos
de Moisés para poder trasladar el Arca del Pacto. ¡Esto es importante! El
arca habla de un Dios que quiere una relación estrecha con su pueblo.
Este hombre supo que cuando se sirve a Dios con devoción y temor
reverente, Dios nos bendice. De esta manera, Obed-Edom fue un
ejemplo para todo el pueblo de Israel y en especial para el Rey David.
Luego de que este último recibió la noticia de las bendiciones que le
estaban llegando a Obed-Edom y toda su familia, sintió gozo en su
corazón y decidió volver a esforzarse por trasladar el arca hasta
Jerusalén. Es así como, por medio de su ejemplo, Obed-Edom llamó al
rey David al arrepentimiento.
Guía del pueblo de Dios